Capitulo 46

Jin suspiro con irritación por séptima vez ese día, como odiaba ir a misiones acompañada, aunque no sabía si esto se clasificaba como una ya que tenía que ir a la aldea de la arena para reunirse con el Kazekage y reafirmar el tratado de paz con Konoha que se firmaba cada año desde el término de la guerra. Ella había sido mandada como representante de su esposo ya que el no había podido venir debido a que estaría muy ocupado con los preparativos para el siguiente examen Chūnin que esta vez se llevaría a cabo en Konoha. Como "protección" su esposo había enviado con ella a cuatro Anbu para que la acompañaran, aunque no es como si en realidad necesitara protección alguna ya que en definitiva podía protegerse ella sola, si es que durante la tercera guerra ninja no lo dejo en claro. Prefería ir sola a misiones ya que asi podía utilizar su velocidad y llegar más rápido a los lugares, en cambio cuando iba acompañada tenía que ir a paso de tortuga al menos en su opinión, a pesar de que en realidad iban corriendo.

Pero no era suficiente velocidad para no estresarla, al menos su capa la mantenía muy fresca en medio de ese desierto infernal. Sin duda si que fue una gran idea haber creado su capa mágica, ya que tenía muchos usos aparte de verse genial con ella.

Ya llevaba tres días corriendo en el maldito desierto para el gran fastidio de Jin, si hubiera ido ella sola, hubiera llegado a la aldea de la arena en cuestión de horas y haber regresado a su casa más rápido, pero no, aquí estaba aún corriendo a la mitad del maldito desierto sin aun haber llegado a Suna, de solo imaginar tener otro tres días de viaje al regresa a Konoha la irritaba a un más.

Cuando regrese a casa, Minato la tendrá que recomenzar por esta tortura, ya que una de las razones por la que no acepto el puesto de Hokage es precisamente tener que ir a misiones diplomáticas y aburridas, ella prefería mil veces a ir a patear traseros en solitario que ir de hacer de diplomática entre las aldeas.

El lado positivo de esto, es que esta sería la última misión que iría como representante de su esposo en alguna de las aldeas ninjas, ya había ido a Kumo donde tuvo que tratar con el temperamental Raikage algo que no quería volver a ser en el corto plazo ya que siempre que trataba con el sentía la bilis subirle por la garganta. Otro lugar a donde fue es Iwagakure, ciertamente la aldea de la roca no la querían ahí, no después de lo que sucedido durante la tercera guerra ninja. Su plan había sido un éxito, ya que Jin tomo la culpa de la total masacre de los ninjas de Iwagakure en lugar de lo hiciera Han. Por lo todos saben que la causante de todas esas muertes fueron hechas por ella en su estado normal, y no por Han quien solo se descontrolo luego de ver la muerte de sus compañeros ninja, debido a esto Jin se ganó totalmente el odio de Iwagakure. La única razón por la cual no la atacaron fue el hecho de que prácticamente era la embajadora enviada de Konoha, además del hecho de ser la esposa del Hokage y si la atacaban no habría duda de que irían a guerra.

A Jin en lo personal no le importaba que mas personas la odiaran, ella ya estaba acostumbrada a eso, asi que le daba igual. La razón por la cual tomo la culpa de Han, es debido a Jin quería que Han tuviera una mejor vida de lo que un Jinchuriki pudiera tener.

-parece que por fin llegamos Jin-Sama.-dijo uno de los Anbu cuando vieron por fin la entrada de la aldea de la arena.

-ya era hora.-dijo Jin algo irritada.

….

El equipo 7 junto con el señor Tazuna iba caminando tranquilamente rumbo al país de las olas, ya llevaban algunos días de camino. Debido a como Tazuna era un civil y no tenía ni un entrenamiento ninja, tuvieron que ir más lento de lo previsto. Por suerte no han tenido muchos problemas en el caminos, más que un grupo de bandidos sin experiencia que querían asaltarlos, pero fueron detenido sin ningún problema por los tres Genin.

Luego de un corto viaje en barco el cual tuvieron que abordar si querían llegar al país de las olas, continuaron su camino a pie. Todo seguía sin haber algún problema o al menos lo era hasta que estuvieron a tan solo unos pocos kilómetros de distancia de la aldea, es cuando los problemas llegaron.

Todo cambio cuando pasaron por unos simples charcos de agua, lo cual hubiera sido algo normal y sin importancia, pero el problema es que no había llovido en días al menos eso se podía deducir a través de tan solo ver el entorno seco del ambiente, asi que era muy raro que hubiera dos charcos en medio del camino. Pero su duda se respondió cuando dos ninjas surgieron de los charcos, lo cual dejo congelados a los tres Genin y a Tazuna, solo fue gracias a la rápida intervención de Irei que ninguno de ellos resulto herido.

Pero su alivio cuando termino con ellos duro muy poco, cuando casi de inmediato un tercer ninja los ataco.

Gaara tenia una expresión frialdad pura en su rostro, mientras se encontraba caminando por las calles de la aldea es ignoraba las miradas de odio y desprecio que los aldeanos le mandaban. Estaba seguro que si el no hubiera sido adoptado por su madre y hubiera tenido a alguien que se preocupara por el y sobre todo lo amara, a estas alturas seria un ser lleno de odio y sediento de sangre pero a la vez estaría vacío por dentro. Solo fue gracias a que una joven Azami que le tendió una mano de ayuda, lo saco del pozo lleno de oscuridad en el que había estado y sobre todo nunca se rindió con él a pesar de sus intentos de asesinato y su gran desprecio hacia ella durante el primer año que la conoció. Fue que ahora tenia un verdadero hogar y una madre amorosa, la cual ama y ha jurado proteger y cuidarla siempre, ya que ella era su mayor tesoro y no dejaría que nadie se la quitara.

No como le habían quitado a su madre biológica a la cual nunca conoció, al menos no que el pueda recordarlo, es por eso que desprecia a su padre o mejor dicho a su donante ya que para Gaara ese hombre no era nada con el.

-"que es esta sensación".-Gaara se detuvo cuando sintió una presencia parecida a la suya.

Volteando a su alrededor en media de la calle, busco ese presencia, fue entonces cuando vio una figura femenina envuelta en una extraña capa negra algo raída que se desvanecía en rojo, y con un largo cabello ondulado de color rojo. La misteriosa mujer que parecía ser de Konoha era escoltada por al menos cuatro ninjas de su aldea, a un lado de ella iba Rasa con su típica cara sin expresión la cual Gaara ya conocía bien ya que siempre era receptor de esa cara cuando tenia la desgracia de tener que verlo en su oficina.

Solo dejo de verlos cuando sintió a Shukaku no solo despertar sino también rugir dentro de él y por unos segundos pudo jurar que alcanzo a ver un gigantesco zorro de nueve colas.

El pelirrojo no se dio cuenta que la mujer también se había detenido por unos segundos antes de seguir caminando.

..

-Zabuza Momochi mejor conocido como el demonio oculto en la niebla, uno de los siete espadachines.-dijo Irei seria pero con expresión tranquila cuando el ninja asesino apareció encima de su gigante espada que se había incrustado en el árbol.

-asi es, supongo que tú debes ser Irei Yamanaka mejor conocida como la torturadora mental o Lunática.-dijo Zabuza algo curioso por la rubia.

-oh, no sabia que fuera tan famosa fuera de mi aldea.-dijo Irei ligeramente sorprendida.

-no lo eres tanto como el famoso rayo amarillo, el colmillo blanco, el ninja copia, el Uchiha blanco o la muerte roja. Pero sin duda eres lo suficiente interesante como para saber de ti en el bajo mundo debido a tus extrañas y únicas técnicas mentales que utilizas para obtener lo que quieres de tus enemigos.-explico Zabuza serio. Sabía que debía tener cuidado con la rubia, si todos los rumores sobre ella eran ciertos.

Incluso los ninjas más temibles y sanguinarios que había conocido temían caer en las manos de la torturadora mental, decían que estaba totalmente loca y le gustaba experimentar con la mente de los demás, ya decía que cada ninja que era caía en sus manos, nunca volvían hacer los mismos, uno de ellos se volvió completamente loco pero loco en verdad mientras que otro incluso era prácticamente una cascara vacía cuando termino con el. Si era cierto o no, Zabuza no quería descubrirlo por sí mismo.

-lo haces parecer como si fuera un monstruo…pero quien sabe, tal vez lo sea o tal vez no. Todo depende de la perspectiva de cada persona, en lo personal lo veo como un aprendizaje. Hay a veces que se tienen que sacrificar algo por el bien del conocimiento y la evolución….y para ser honesta.-explico Irei seria para al último soltar una risa que hizo estremecer a todos e incluso le puso la piel de gallina a Zabuza.- la mente de cada escoria que cae en mis manos no es muy difícil de sacrificar, después de todo ¿Quién extrañaría a basuras como esa?.-

Tal vez estuviera sonando como una completa chiflada, pero a Irei le daba igual ya que creía cierto todo o que acaba de decir. Ella no creía que fuera una persona buena o mala, solo simplemente era una persona que se dejaba guiar por el conocimiento y su curiosidad pero teniendo sus propias líneas que no traspasaría, puede que le guste experimentar pero nunca cruzaría una horrible línea como lo había hecho Orochimaru u otros locos que no les importaba nada.

Con los únicos que había experimentado de alguna manera, era solo en verdad con basura humana, prácticamente con aquellos que no tenían alma o corazón, los que no se arrepentía ni un poco de sus actos y que solo existían para hacer daño a los demás. Por lo que jamás le pondría una mano encima, a personas inocentes sobre todo a niños como lo había hecho la escoria de Orochimaru, el cual sin duda experimentaría con el, como el lo ha hecho con los demás.

De solo imaginarlo se le forma una gran sonrisa en su interior.

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..

continuará