Las horas pasaron lentas para Penélope, la noticia de que Lady Whistledown revelaría su identidad se expandió como pólvora en Mayfair, sin tardar Madame Delacroix llegó a casa de los Bridgerton para saber qué estaba planeando hacer la pelirroja
– no he sido yo, esa publicación no es mía – dijo Penélope cuando ella y Eloise se quedaron a solas en el salón con la modista – no sé qué es lo que pretende quien haya hecho esto, no está utilizando la misma imprenta, solo ha imitado los detalles –
– yo creo que lo mejor es siempre esperar lo peor – dijo Delacroix – si se presenta a ese baile, no sabe a lo que se está exponiendo –
– pero si no me presento no podré desmentirla si es que quiere usurpar mi lugar, tomar el crédito por mi trabajo de años –
– Yo te apoyaré decidas lo que decidas, Pen – dijo la castaña a su amiga
La modista suspiró con resignación – entiendo lo que es trabajar, hacer surgir algo de la nada, cuenta conmigo hasta donde me sea posible – Penélope asintió entendiendo a lo que se refería, no podía pedirle más y tampoco quería – si decide presentarse, hay algo que sí está en mis manos – sonrío – hacerla lucir espectacular –
Baile Ramsbury
El lugar estaba atiborrado de todas las familias de la alta sociedad londinense, Penélope llegó acompañada de Lady Violet, Eloise, Francesca, Edwina y el conde de Kilmartin, fue gracias a este último y a la promesa de que Lord Dankworth también las alcanzaría ahí, que Anthony no se negó a que asistieran al baile, ya que tanto Colin como Benedict no habían logrado terminar con sus pendientes para volver y acompañarlas desde un inicio
– señorita Featherington, ni la revelación prometida para hoy podría opacar lo avasallante que luce… – Penélope solo atinó a sonreírle – todos están muy emocionados por lo que ocurrirá esta noche, pero yo solo he venido por esos bailes que me ha prometido ¿me acompaña a la pista? –
Aunque a Penélope le temblaban las rodillas acompañó a Harry al centro del salón, dispuesta a cumplir con lo que le había prometido – ¿la odiaría él si supiera quién es en verdad, la aceptaría y seguiría pensando que sería una gran esposa? – no sabía en qué momento comenzaría todo, pero no podía ni siquiera pensar en algo qué decir para no lucir aterrada – ¿Usted qué opina de Lady Whistledown? – preguntó incapaz de contenerse
– Bueno, sin duda sabe hacerse notar – bromeó, pero al ver la seriedad con la que la pelirroja parecía esperar una respuesta dijo – si se trata de una mujer, pienso que es valiente y que tiene mucho talento –
Penélope lo miró con duda – ha hecho enojar a muchos –
Se encogió de hombros – nunca he leído que haya dicho algo que no era cierto o que el resto de la sociedad no pensaba –
–Supongo que no – y luego le sonrió, porque su respuesta le dio tranquilidad, porque era verdad, nunca había mentido y quien odiaba a Lady Whistledown lo hacía porque lo sabía
Colin corrió con la intención de llegar al baile lo más pronto posible, no podía creer lo que ocurriría ni haber estado fuera para no detener la locura de Penelope
Cuando el Bridgerton llegó al baile junto a su hermano, Lady Danbury no pudo evitar notar la expresión en el rostro del menor de ellos – ¿todo bien joven Bridgerton? Pareciera que alguien intenta matarlo –
– no está muy equivocada... comienzó a creer que esta mujer me matará un día de estos –
La mujer sonrio sabiendose astuta – Nunca he creído a la señorita Featherington tan malvada –
– Yo no me refería a ella – dijo él con premura al darse cuenta de su desliz – ¿La ha visto? – preguntó resignado al ver que era muy poco útil querer echarse atrás
Lady Danbury apuntó con su bastón al centro de la pista – luciendo tan bella como ninguna en el centro de la pista – dijo a la vez que él miraba en la dirección que ella señaló
– por todos los cielos, luce bellísima – Colin comenzó a caminar en dirección a la pelirroja cuando la musica del salón se detuvo
Penelope inmediatamente buscó a Eloise con la mirada, encontrándola caminado hacia ella – creo que ha llegado el momento – dijo Dankworth a su lado
– disculpe Lord Dankworth – dijo Eloise cuando estuvo cerca de ellos y visualizó a Colin avanzando de prisa en su dirección – mi madre nos ha pedido reunirnos cuando este momento llegara –
Harry asintió – claro, las acompaño –
– no hace falta Dankworth, yo las escoltaré – dijo Colin de prisa – será mejor busque a su hermana, esto parece un caos –
Dankworth miró a su alrededor como todos se aproximaban hacia lo que parecía un improvisado escenario – tiene razón, la veré más tarde señorita Featherington –
Colin miró a Penelope con visible confusión y angustia – no he sido yo – dijo la pelirroja
El castaño no sabía si eso era peor o mejor que lo que había pensado, aún así arrastró a Eloise y Penelope entre el mar de gente buscando llegar a la orilla en la que se encontraba su familia, al menos todos juntos podrían defenderla si es que alguien la exponía
Cuando llegaban junto a los Bridgerton, la señorita Sharma, Lady Danbury y el prometido de Francesca, vieron a Cressida Cowper tomar la palabra frente a la multitud
– muchas suposiciones y rumores se han hecho en relación a la identidad de Lady Whistledown, esa mujer que con sus comentarios astutos y escandalosos ha logrado poner a todos nerviosos – rio falsamente mientras cubría su boca como toda señorita de sociedad había sido educada para hacerlo – pues bien, creo que he tenido suficiente de esta doble vida, hoy aquí frente a todos revelo mi identidad, yo soy Lady Whistledown –
Penelope sintió ganas de arrancarle los cabellos – esa maldita mentirosa – dijo sin poder contenerse, haciendo que Lady Violet la mirara un poco escandalizada y Lady Danbury con gran sospecha
Después de una ola de murmullos y comentarios de sorpresa, el silencio se apoderó del lugar – ¿no cree usted que ella sea Lady Whistledown,señorita Featherington? - preguntó la mujer a la pelirroja
Penélope sintió sus mejillas arder y el temor estremecer cada uno de sus huesos, pero la sonrisa en el rostro de Lady Danbury y la mano de Eloise en la suya, le dieron la seguridad que necesitaba – No, no lo creo... – dijo dudosa, pero toda duda quedó olvidada cuando Cressida la miró con su tipica sonrisa arrogante – ni siquiera la creo capaz de haber escrito ella misma ese discurso tan elocuente –
Lady Danbury rio con ganas mientras golpeaba con su bastón el piso – tampoco lo creo – dijo la mujer – no esperará señorita Cowper – dijo volviéndose a la rubia y caminando hacia ella con facilidad, pues todos le abrían paso, tras de ella iba una Penélope muy decidida – que le creamos sin ninguna prueba de sus palabras –
Colin tomó del brazo a Penelope impidiéndole avanzar y mirándola como si estuviera loca – ¿pero qué crees que haces?– le preguntó por lo bajo
– Defendiendo mi trabajo – dijo ella molesta por haber perdido la oportunidad de avanzar entre la gente siguiendo a Lady Danbury
– déjala – dijo Colín – deja que ella se enfrente a las consecuencias, estará bien –
– claro que no, ella no – y haciendo uso de una fuerza que no sabía poseía se soltó del agarre de Colín, avanzando entre la multitud
