ENTRE PROMESAS ROTAS
¡Hola! Nuevo capítulo.
- Annie Perez: ¡Hola! :D ¡Oh, parece que has notado algunas conexiones y maquinaciones detrás de escena! ;) ¡La trama se complica y se entrelaza cada vez más! Estoy emocionada por ver cómo se desarrollarán los eventos (como todas nosotras). ¡Gracias por seguir la historia y compartir tus pensamientos! ¡Nos leemos en el próximo capítulo!
- Kayla Lynnet: ¡Hola de nuevo! ¡Qué emocionante leer tu análisis! :3 ¡Me alegra que estés tan metida en la trama y que los giros te mantengan intrigada! Sí, es muy probable que Naraku, Kikyo y Kagura estén conectados, solo una pregunta está en el aire ¿Qué papel juega Kagura en todo esto? ¿por qué lo hace? :O ¡Esperemos que los personajes puedan enfrentar todos estos desafíos y encontrar la felicidad! ¡Gracias por compartir tus pensamientos y espero que sigas disfrutando de la historia! ¡Hasta pronto y cuídate mucho!
- kcar: ¡Hola! Sí, el rescate de Kagome fue un paso importante ¡Y parece que los problemas con Kikyo y Naraku no han terminado! :c Veremos qué pasa con Inuyasha ¿Kag lo perdonará o no? ¡La trama sigue emocionante! ¡Gracias por tu entusiasmo y espero que disfrutes del capítulo! ¡Cuídate mucho!
- Angela Inukag: ¡Hola! ¡Claro, esperemos que las cosas mejoren para Kagome y que encuentre la paz que merece! :3 ¡Gracias por seguir la historia y espero que sigas disfrutando de ella! ¡Nos leemos pronto!
- Shikon de Oz: ¡Hola! ¡Qué alegría saber que disfrutas de la historia! Y sí, estoy emocionada por lo que viene y espero que sigas disfrutando de los siguientes capítulos. :3 ¡Gracias por tu apoyo y nos leemos pronto!
- Lin Lu Lo Li: ¡Hola! ¡Entiendo completamente esos sentimientos encontrados al leer el capítulo! Es un momento muy intenso para Inu y Kagome. Estoy de acuerdo en que Kagome lleva una carga emocional muy pesada, y esperemos que encuentre el valor para compartir lo que le ha pasado y no se lo guarde. :( La situación entre Inuyasha y Kagome es compleja, pero aún hay espacio para la redención y como yo digo a veces es muy fácil perdonar, pero nunca olvidar. ¡Espero que todo se solucione muy pronto! ¡Gracias por tu análisis y por seguir la historia con tanta atención! :D Estoy emocionada por cómo se desarrollarán las cosas y cómo afectará todo en la relación entre Inuyasha y Kagome. ¡Nos leemos en los próximos capítulos!
- Rocio K. Echeverria: ¡Hola de nuevo! :3 ¡Qué emocionante leerte y conocer todas tus teorías y pensamientos sobre la trama! Me alegra que el capítulo te haya traído alegría y que estés tan inmersa en el desarrollo de los personajes y la trama. Por otro lado, tus preguntas y reflexiones son muy intrigantes, tanto que responderlas serán todo un reto jaja. La trama está llena de giros y sorpresas, eso sí, y estoy emocionada por cómo se resolverán las distintas situaciones. Sobre Sesshomaru... bueno, supongo que hablaré de él en la nota final de los Reviews, pero sí, será más un aliado para nuestro Inu, ya ha sufrido bastante el pobre, no puedo ser tan cruel ;) (¿o sí? jaja) Las conexiones entre los personajes y sus acciones definitivamente tendrán un impacto en los próximos capítulos. ¡Gracias por compartir tus emociones y por tu continuo interés en la historia! Estoy ansiosa por seguir compartiendo la trama y muchas gracias por tus bonitas palabras. :3 ¡Nos leemos pronto! Saludos.
- Rosa. Taisho: ¡Hola, hola! ¡Qué bueno saber que disfrutaste del giro en la trama y que estás emocionada por el destino de nuestros InuKag! La relación entre Kikyo y Naraku es, sin duda, un misterio que se irá revelando poco a poco (aunque ya nos hacemos una idea) Igual sucede con Kagura, aún nos falta descubrir el rol que juega en toda esta trama :D ¡Y sí, Kagome está mostrando su fuerza y tomando las riendas de su vida! No será nada fácil para Inuyasha recuperarla eso sí :c ¡Gracias por tus palabras y tu entusiasmo! Estoy ansiosa de compartir más capítulos llenos de intriga y drama :3 ¡Nos leemos en el próximo!
- Carli89: ¡Hola! :3 ¡Me alegra mucho saber que la historia te ha atrapado y que has sentido la intensidad de las emociones de los personajes! Gracias por darle una oportunidad a la historia :) Entiendo completamente tus sentimientos hacia Inuyasha y Kikyo, y la relación de los personajes promete más giros y desarrollos intrigantes, sumados con las de Naraku claro (vendrán escenas más interesantes) Y con respecto a Sesshomaru, pues ¿qué puedo decir? Jaja Hablaré de él en la nota final de los reviews ;) ¡Espero que disfrutes de los próximos capítulos y gracias por tus felicitaciones! Siempre es genial recibir feedback tan positivo. Nos leemos en futuras actualizaciones. ¡Saludos!
- Karii Taisho: ¡Hola! :) ¡Tus teorías y especulaciones son siempre tan interesantes! Me encanta cómo te sumerges en la trama y piensas en diferentes escenarios. Esa idea de una tregua para las últimas semanas de embarazo es muy tierna, y sin duda, el hecho de que Inuyasha pueda experimentar más de cerca esos momentos especiales podría abrir nuevas puertas para la reconciliación. :3 Tus sospechas sobre la posible colaboración entre Kikyo, Kagura, y Naraku también son intrigantes (más que nada acertadas, a estas alturas ya es muy difícil de esconder jaja). ¡Veremos cómo se desarrollan las cosas en los próximos capítulos! Gracias por seguir la historia y por compartir tus reflexiones. ¡Espero que sigas disfrutando de la trama y siempre es un gusto leerte! :3 ¡Saludos y nos leemos en futuras actualizaciones!
- Ladyahomehigurashi: ¡Hola! :) ¡Primero que todo, me alegra saber que has tenido días maravillosos y que la historia ha sido parte de esos momentos! Es cierto que la trama de Kagome refleja situaciones difíciles, pero como mencionas, al final sale el sol y la historia nos lleva por distintos caminos. ¡Gracias por compartir un pedacito de ti conmigo! Enserio lo aprecio mucho :3 Y sí, la conversación entre Kagome e Inuyasha es un paso importante, pero como bien señalas, el peligro con Naraku sigue presente. La incertidumbre agrega una capa extra de tensión a la historia y es bueno en cierto modo. :D Espero que la vuelta a casa sea tranquila y que disfrutes de las siguientes actualizaciones. ¡Muchas gracias por compartir tus pensamientos y emociones! Nos leemos pronto. Cuídate.
- Karisho LeMar: ¡Hola! ¡Sí, la presencia de Naraku sigue siendo una amenaza constante, y la historia se vuelve aún más intensa con estos giros! La reconciliación entre Inuyasha y Kagome es un paso importante, pero como bien señalas, hay muchos desafíos por delante. :3 Me alegra saber que el capítulo te emocionó. ¡Gracias por compartir tus sentimientos y por seguir disfrutando de la historia! ¡Espero que las siguientes actualizaciones también te sorprendan y emocionen! ¡Nos leemos pronto!
- Cindy Osorio: ¡Hola! ¡Totalmente comprendo tu reacción! La sospecha sobre la posible colaboración entre Kikyo y Naraku está muy presente en la trama (las sospechas ya no se pueden ocultar más). ¡Esperemos que Inuyasha y Kagome puedan enfrentar estos desafíos juntos! :) ¡Gracias por seguir leyendo y emocionándote con la historia! ¡Nos leemos en las próximas actualizaciones!
- MegoKa: ¡Hola! :3 ¡Qué emocionante saber que estabas pendiente de las actualizaciones y que las revisabas a diario! Muchas gracias por el interés, te invito a seguir la página de Facebook (me encuentras como XideVill), ahí puedes estar al tanto de las futuras actualizaciones ya que siempre publico una alerta :D Y sí, la trama está llena de giros y emociones intensas, ¡y estoy encantada de que estés disfrutando de la historia! La complicidad entre los personajes es un elemento intrigante, ¡y el desarrollo de la trama promete sorpresas! Esperemos que Inuyasha y Kagome encuentren el camino hacia la reconciliación muy pronto. ¡Gracias por tu apoyo y por seguir la historia! ¡Nos leemos en las próximas actualizaciones!
Bien, un nuevo capítulo.
Pero antes de eso, quiero hablar sobre Sesshomaru :3 veo que generó gran interés en varias de ustedes su simple mención. Y aquí vengo yo a recordarles un poquito de información previa (ahora que lo pienso no puedo creer que vayamos en el capítulo 21 :O) Sesshomaru ya tuvo una aparición (mención) en las casi últimas líneas del capítulo 7, puedes releerlo si lo desean :) pero sí, creo que aún falta desarrollar la historia de los dos hermanos ¿qué les pasó? ¿por qué se distanciaron? ¿cuál es su historia? Pronto lo sabremos, las dejaré con la intriga jaja
¡Espero que disfruten de este nuevo capítulo! Que ya les digo, traerá más intriga (ya me conocen, no puedo vivir sin drama) ¡Cuídense mucho y saludos!
Atte. XideVill
Disclaimer: Los personajes de esta historia son de Rumiko Takahashi.
CAPÍTULO 21.
KAGOME
Cómo quisiera que nuestras peleas volvieran a ser por una simple cena fallida. O por una tonta discusión sobre si hoy pedíamos pizza o sushi.
Sin embargo, la realidad ahora es mucho más difícil que antes. Miré el lugar vacío junto a mí. Inuyasha y yo no volveríamos a ser los mismos de antes por más que deseara que eso pasara, nos habíamos hecho mucho daño el uno al otro y ahora…
Ahora no quedaba nada de lo que alguna vez fuimos. Mis ojos se empañaron de lágrimas mientras acariciaba mi vientre. Me dolía no poder ofrecerle a mi bebé una vida perfecta, una familia completa, algo totalmente diferente a lo que yo tuve.
Siempre estaría agradecida con mamá por todo lo que hizo por Sota y por mí, pero… no iba a negar que solía sentirme triste cuando veía a padres compartiendo un almuerzo con sus hijas, y es que siempre soñé con tener algo así.
Creí que lo estaba consiguiendo, sin embargo, se me esfumó de las manos.
INUYASHA
"... cabe mencionar, que muy al contrario de lo que se esperaba después de la ausencia notoria de ambos candidatos en la gran Ceremonia de Nominación, el evento se llevó a cabo, siendo Naraku Kumo el elegido y por tanto el actual director de la prestigiosa clínica ZenithCare de Tokio. Hasta el momento no ha salido a dar declaraciones, pero asumimos que se encuentran festejando su gran victoria. Informa YuiKobayashi para TV Tokio…"
–Lamento mucho todo el dolor que causó el jov… Naraku –habló Kaede, apareciendo en la sala– Anoche no pude evitar escuchar la discusión entre usted y mi niña Kagome.
Solté un suspiro pesado, recordando el momento, mientras cubría mi rostro con las manos lleno de frustración.
El idiota de Kumo, se había salido con las suyas, había ganado, aunque dudaba mucho que estuviera festejando con una orden de captura en su contra. Al parecer los medios aún no estaban al tanto de todo.
–No tienes porqué disculparte –le dije, invitándola a sentarse junto a mí–, de todas formas, no fue culpa suya.
Era cierto, Kaede hizo lo que pudo, y debido a su avanzada edad, Kagome no fue capaz de dejarla sola en aquella casa. No me opuse a que viniera con nosotros, pero de alguna forma, la duda siempre estaba.
–Pero puede haber hecho más por mi niña, si tan solo hubiera actuado antes ella no…
Mis ojos viajaron a los suyos de inmediato.
–Ella no ¿qué? –increpé empezando a sentir mi ansiedad crecer de sobre manera– Kaede dime ¿Pasó algo más que yo deba saber?
–Señor Inuyasha, yo…
–¿Por qué sigues aquí?
Ambos volteamos a ver a Kagome.
–Kag…
–Creo que anoche fui muy clara Inuyasha –soltó firme mientras me veía a los ojos– Te dije que no quería volver a verte.
No dije nada, no quería provocarle ningún disgusto. Mis ojos viajaron por sí solos a su vientre, contuve una sonrisa, aunque no supe si lo conseguí. Mi tacto aún recordaba aquel extraño hormigueo cuando lo acaricié.
Lo que daría por hacerlo otra vez.
–¿No me escuchaste? –insistió ya más molesta.
–Kagome…
–Mi niña, ¿por qué no desayunas algo? –intervino Kaede, rompiendo el incómodo momento.
–Lo haré, una vez que este sujeto se vaya de mi casa.
–¿Piensas salir? —Me fue inevitable no preguntar al verla bien arreglada.
–Ese no es asunto tuyo.
–¡Claro que lo es! –exclamé.
No podía dejar que saliera para exponerse de esa manera. No ahora que el maldito enfermo de Naraku estaba suelto, ¿y quién sabe? tal vez estaba rondando la casa en estos momentos.
Pero claro, eso ella no lo sabía.
–No puedes hacer nada para impedirlo Inuyasha, creo que eso lo sabes muy bien.
–Pero ¿a dónde irás mi niña? –cuestionó Kaede– No creo que sea buena idea salir ahora.
–¿Y qué hago? ¿Me quedo aquí sin hacer nada?, ya salí de un encierro Kaede, no pienso convertir mi casa en otro.
–Pero…
–Además, allá arriba no tengo nada que me quede. Necesito ropa nueva y también necesito ropa para el bebé…
Poco a poco se le apagó la voz y vi la forma en la que esquivó mi mirada.
–Si ese es tu plan, entonces déjame acompañarte –propuse.
–De ninguna manera –sentenció.
–Kagome entiende, no puedes salir tú sola y menos en tu estado.
–Escucha al padre de tu bebé mi niña, él solo quiere cuidarte.
–Él no es su padre –hizo trizas mi corazón con aquella frase– Y dudo mucho que quiera cuidarme, él solo puede causar dolor Kaede, no te creas esta actuación tan patética.
–Mi niña, por favor no digas eso.
–Está bien –Le dije a Kaede antes de volver a mirar a Kagome– Si no quieres que yo te acompañe, entonces déjame llamar a alguien.
En sus ojos cruzó la duda. No estaba seguro de estar haciendo lo correcto, pero de alguna forma necesitaba dejar a Kagome con alguien de confianza.
KAGOME
Me quedé helada al ver a mi amiga de pie frente a mí.
–¡Kagome!
Se lanzó a abrazarme y por la fuerza retrocedí un par de pasos.
–¡Sango, ten cuidado! –escuché el regaño que le hizo Inuyasha.
–¿Sango? ¿Qué haces aquí?
Me soltó y me miró con una sonrisa.
–¿Qué? No es obvio, vine a visitarte a ti y a mi sobrino –Llevó una mano a mi vientre con ternura– ¡Santísimo! Está muy grande.
Sonreí.
–Ya no falta mucho… –musité solo para que ella pudiera oírme.
Sus ojos castaños viajaron de mi vientre a mis ojos, después a los de Inuyasha y nuevamente a los míos.
–Ya entiendo. Las cosas no van bien.
–No sé a qué te refieres –solté y ella me sonrió.
–Bien, respetaré tu decisión. Pero si algo no me parece te lo diré.
–¿Nos vamos? –insistí caminando hacia la salida.
Sango me siguió de cerca, pero antes de cruzar la puerta me detuve.
–Para cuando regresemos, quiero que la casa esté libre de ti Inuyasha –advertí sin voltear a verlo.
No obtuve respuesta alguna y aquello solo me enfureció aún más.
–Bien, supongo que tu silencio es una confirmación.
El silencio en el que nos sumergimos Sango y yo, mientras comíamos unos helados en el centro comercial, solo me hizo sentir aún más incómoda.
–¿Quieres que hablemos?
La miré por unos segundos antes de soltar un suspiro.
–¿La verdad?
Me sonrió.
–Si Kag, la verdad.
–Sí, sí quiero hablar –solté mientras empezaba a parpadear con rapidez para no derramar una lágrima traicionera.
–Dime ¿qué pasó?
–Le dije muchas cosas hirientes, le dije que mi bebé no merecía tener un padre como él y odio arrepentirme de lo que digo, pero esta vez en verdad lo siento.
–Kag… –Ocupó el lugar junto a mí para estar más cerca– Sé que si lo dijiste no fue por mero gusto, yo sé que algo pasó para que le dijeras todo eso a Inuyasha. Tú no actúas así solo porque sí.
La miré con ojos cristalinos.
–Me llamó cualquiera… –musité con todo el dolor que esas palabras me provocaron– Y…
–¿Qué más?
–Lo llamó bastardo…
–¿Qué hizo qué? Ese maldito… Le voy a arrancar la lengua, pero ¿Cómo se atreve? No Kag, no merece que te preocupes por él y sus sentimientos, no después de lo que hizo.
–Lo sé. Pero de alguna forma siento una punzada en el corazón cada vez que lo enfrento. No sé Sango, no sé por cuánto tiempo más podré seguir así.
–¿Qué piensas hacer?
Sequé rápidamente una lágrima escurridiza.
–Una vez que nazca el bebé venderé la casa y me iré a Yufuin. Necesito estar lejos de aquí, lejos de él y sus falsas promesas. Lejos de todo lo que construimos para empezar de nuevo.
–Pero conoces a Inuyasha, él no te dejará ir así sin más. Kag –Me miró fijamente– Es su hijo y él querrá estar con él.
–Para él fue un bastardo.
–Lo sé, pero ¿no crees que tu bebé merece tener un padre?
–¿Qué hay de malo si no lo tiene? –cuestioné retándola con la mirada.
–Tú más que nadie sabe cómo es. Has vivido anhelando el cariño de un padre ¿y ahora estás dispuesta a quitárselo a tu hijo también?
–Pero…
–No quiero que pienses que trato de defenderlo, eso jamás y menos después de lo que te dijo, pero este bebé –acarició mi vientre– No tiene la culpa de las idioteces que hace su padre.
Sonreí con tristeza.
–Si él quiere conocerlo una vez que nazca, no se lo prohíbas. Solo así estarás tranquila, no le deberás nada a nadie y no vivirás cargando una pesada cruz sobre tus hombros.
De alguna forma, hablar con Sango, era como si estuviera hablando con mamá. Sentía esa calidez en cada una de sus palabras y solo podía sentir alivio después de escucharla.
–Bien, te haré caso esta vez.
Mi amiga sonrió.
–¿Y cuando no lo has hecho?
Reí.
–Tienes razón. Te haré caso como siempre –corregí.
La primera tienda a la que fuimos fue a la de maternidad. Necesitaba ropa nueva con urgencia y es que se había convertido en una necesidad.
Sango me ayudó a elegir un par de conjuntos antes de pasar a la sección de niños. Sus ojos se iluminaron cuando vieron unos zapatitos en forma de animalitos.
–¿No te parecen las cosas más lindas del mundo? –preguntó mostrándomelos.
Sonreí mientras los tomaba en mis manos.
–Quien te viera creerá que serán para ti.
Su sonrisa se esfumó de inmediato.
–Ni lo digas –respondió de inmediato– Miroku y yo planeamos tener hijos dentro de muchos años más. No antes.
–¿Estás segura? –cuestioné jugando con su paciencia– Porque mi bebé querrá tener un primito con quien jugar.
–Pues para eso existen los perros. Cómprale uno y asunto solucionado.
Reí.
–Claro que no. Ellos no son juguetes para niños.
–Entonces te conformarás con nada.
Fruncí el ceño y ella hizo lo mismo. Nos mantuvimos en ese juego de miradas hasta que sentí que alguien me tocaba el hombro.
–Disculpe señora.
–Sí, dígame –le dije a la joven mujer que trabaja en el lugar.
–No quiero ser indiscreta, pero hay un hombre que no ha dejado de seguirlas.
–¿Un hombre? –me sentí confundida y algo ansiosa.
–¿Qué pasa? –intervino Sango.
–Sí, está justo por allá…
Apuntó la mujer y ambas miramos a esa dirección. Mis latidos se aceleraron al no ver a nadie ahí.
–¿Está segura señorita? –pregunté empezando a tensarme– Sango –La llamé para que me acompañara.
–Sí…
Sango me tomó del brazo con ímpetu.
–Sí, estaba justo ahí…
Grité y pegué un salto cuando sentí unas manos sobre mi hombro.
–Tranquila, soy yo.
–¿Inuyasha? –soltó Sango– ¡No vuelvas a hacer eso! ¿Acaso te has vuelto loco?
–Yo solo…
–Señora ¿Se encuentra bien?
–Kagome –dijo mi amiga.
–Estoy bien. Solo fue un susto.
–Lo siento Kag, no planeaba asustarte.
–Pues para no planearlo lo conseguiste –riñó mi amiga mientras me alcanzaba una botella de agua– ¿Kag…?
–Estoy bien –volví a decir bebiendo un sorbo.
–¿Entonces se conocen? –dijo la mujer.
–Sí, ella es mi esposa.
–Ya veo –sonrió– Entonces tendrán un bebé.
–Así es…
–No –interviene tajante, llevándome la sorpresa de la mujer– Ni es mi esposo y ni bebé es suyo.
–Kag…
–¡Creo que fui muy clara Inuyasha!
–Señora, ¿quiere que llame a los de seguridad para que lo saquen de aquí?
Estaba a punto de decir que sí, pero vi la mirada inquisidora de Sango a mi costado.
–No, déjelo. Él sabrá qué hacer.
–Como usted diga.
Solté un suspiro pesado antes de caminar hacia otra dirección. Mis ganas de evitarlo se habían ido al tacho después de esto. Aunque de alguna forma me alegra mucho que fuera él, el hombre que nos estaba siguiendo y no…
Traté de pensar en otra cosa, eso era imposible, Naraku estaba encerrado y ya no podría seguir haciéndome daño. No había forma.
Pero entonces ¿por qué seguía tan intranquila?
INUYASHA
¿Podía hacer más?
No lo creo.
Sólo podía observarla desde lejos mientras ella sonreía y le mostraba a Sango un nuevo descubrimiento. Me dolía el no poder acercarme a Kagome y buscar juntos una prenda para nuestro hijo.
Por lo visto eso parecía, un niño, aunque todo lo que escogía era de color blanco mi mente lo relacionó de esa forma.
Hasta que en una de esas tantas ocasiones la vi detenerse a contemplar, con mucho cariño, un conjunto para niña. Se trataba de un pequeño vestido, era muy tierno y pequeño. Entonces ya no pude seguir al margen.
Me acerqué a ella y la escuché suspirar antes de devolverlo a su lugar.
–¿Puedo hacerte una pregunta?
No respondió, entonces tomé su silencio como un sí.
–¿Sabes si será niño o niña?
–Aún no y aunque lo supiera Inuyasha tampoco te lo diría.
La sujeté del brazo antes de que se fuera.
–Kagome por favor, me duele cada vez que dices algo así.
–¿Te duele? –Soltó encarándome– Y dime Inuyasha ¿qué es lo que te duele? ¿Esto?
Presionó con su otra mano mi pecho.
–Kag…
–Aquí no tienes nada Inuyasha, así que no me vengas con eso de que te duele porque es una tontería. Y mejor suéltame ahora mismo si no quieres que arme un escándalo para que te echen de aquí.
Lo dudé por unos segundos, y es que no quería hacerlo. Quería seguir sintiendo el dulce aroma de su perfume y la calidez de su cuerpo en la palma de mi mano.
Pero lo tuve que hacer cuando mi celular empezó a sonar. La vi mirarme por unos segundos hasta que una sonrisa triste se formó en sus labios.
–Responde, no vaya a ser importante –soltó con ironía antes de darse la media vuelta y alejarse.
Maldije sacando de mi bolsillo aquel aparato.
–Ahora no Kikyo, no estoy de humor para hablar de trabajo –solté hastiado y al borde de un ataque.
–No, Inu, por favor no cortes. Es algo importante.
Solté aire por mi boca tratando de controlarme.
–Bien, dime ¿de qué se trata?
Hubo silencio del otro lado por unos segundos.
–Tenemos que hablar y no puedo decírtelo por teléfono.
Kagome apareció a mi vista y solo unos metros nos separaban. Quería cortar esta llamada e ir hasta donde ella estaba y tratar de obtener algo más que simple rechazo por su parte.
–Me temo que tendrá que ser por acá Kikyo. Ahora estoy muy ocupado.
Nuevamente silencio, mi paciencia se estaba agotando.
–Kikyo, si no es nada entonces…
–Estoy embarazada.
Justo en ese momento los hermosos ojos de Kagome se cruzaron con los míos.
¿Qué acababa de escuchar?
Esto no podía ser más que una estúpida broma. Sí, eso era. Solo una vil y sucia broma que la vida me jugaba.
Continuará...
