Finalmente, el avión se estrella en Oxford, Inglaterra. Calígula, el Maestro vampiro, y Vlad Tepes, el Príncipe de Valaquia y Transilvania, se reúnen en el lugar del accidente.

Vlad: (curioso) ¿Por qué me invocaste? Estaba en Londres.

Calígula el maestro Vampiro: (serio) Una misteriosa princesa egipcia está caminando entre este mundo mortal.

Vlad: (desinteresado) ¿Y por qué debería interesarme?

Calígula el maestro Vampiro: (firme) Debería, porque este es tu mundo y tú eres mi campeón. Y ella ya eligió a su campeón.

Vlad: (intrigado) ¿Quién es?

Calígula el maestro Vampiro: (revelador) Un tal Nick Morton, soldado del ejército de Estados Unidos.

Vlad: (confundido) ¿Y qué tiene que ver todo esto conmigo?

Calígula comienza a contar la historia de Imhotep, Anck-su-namun, y su hija Ahmanet.

Vlad: ¿Así que esta princesa egipcia liberada ha elegido a un soldado estadounidense como su campeón?

Calígula el maestro Vampiro: Exacto, y ese soldado, Nick Morton, posee algo que ella necesita para llevar a cabo sus planes. Algo antiguo y poderoso.

Vlad: (frunciendo el ceño) ¿Y por qué debería involucrarme en esto?

Calígula el maestro Vampiro: Porque, Vlad, tú eres un príncipe, un guerrero formidable. Ella está desatando un mal que podría amenazar no solo a los mortales, sino también a nuestro reino nocturno.

Vlad: ¿Y qué gano yo en todo esto?

Calígula el maestro Vampiro: La oportunidad de gobernar este mundo, de sumergirlo en la oscuridad y ser el amo de la noche eterna. Además, si Ahmanet triunfa, todo lo que amas y valoras será destruido.

Vlad: (sonriendo con malicia) Entonces, seré tu campeón, pero quiero mi recompensa asegurada.

Calígula: Por supuesto, mi leal Vlad. Tu recompensa será todo lo que desees una vez que hayas detenido a Ahmanet.

Se escucha el aullido de un lobo. Se revela que es Lawrence Talbot (Benicio del Toro),) más conocido como el Hombre Lobo. Huele el miedo en la voz de Vlad y comienza a seguir el rastro del accidente.

Lawrence Talbot: (aullando) ¿Qué mal se desata en estas tierras?

Este rastro lo lleva a la Abadía de Waverley, donde observa el sarcófago de Ahmanet.

Ahmanet: (susurrando desde el sarcófago) Lawrence, ¿no puedes sentir el poder que se avecina?

Lawrence, sintiendo el peligro, comienza a correr en busca de ayuda.

En la distancia, Calígula y Vlad observan la llegada de Lawrence.

Calígula el maestro Vampiro: Parece que no todos temen a Ahmanet. Este hombre lobo podría ser útil en nuestra causa.

Vlad: (sonriendo) Dejemos que se una a la danza de la oscuridad. Su furia podría ser un arma valiosa.

Lawrence, agitado, llega al lugar donde se encuentran Calígula y Vlad.

Lawrence Talbot: ¿Quiénes son ustedes y qué conexión tienen con esta maldición que se cierne sobre nosotros?

Vlad: Mi nombre Vlad Tepes, Príncipe de Valaquia y Transilvania. Este es Calígula, el Maestro vampiro.

Calígula el maestro Vampiro: La maldición que enfrentas, es solo el comienzo. Ahmanet ha despertado, y el caos se avecina. ¿Te unirás a nosotros en esta danza de oscuridad?

Lawrence Talbot: ¿Por qué debería confiar en ustedes?

Vlad: Porque, mi estimado hombre lobo, compartimos un enemigo común. La princesa egipcia ha elegido a su campeón, y necesitamos unir nuestras fuerzas para enfrentar la tormenta que se avecina.

Esa misma noche un hombre llamado Daniel (Jesse Eisenberg) y su esposa Amelia (Anne Hathaway) se encuentran en una carretera solitaria, iluminada solo por los faros de su coche. Están en dirección a Oxford, donde Amelia es maestra de intercambio en la universidad.

Daniel: (mientras conducen) Amelia, no puedo esperar a llegar a Oxford. Será una experiencia increíble para ambos.

Amelia: (sonríe) Sí, estoy emocionada por esta oportunidad. Oxford es un lugar único.

De repente, un aullido escalofriante rompe el silencio de la noche.

Daniel: ¿Escuchaste eso?

Amelia: (nerviosa) Sí, solo debe ser un lobo. No te preocupes.

De repente, Lawrence Talbot, en su forma de hombre lobo, salta a la carretera delante de ellos.

Daniel: ¡Dios mío, cuidado!

Amelia: ¡Detente, detente!

Lawrence ataca el automóvil, causando caos y pánico.

Daniel: (gritando) ¡¿Qué demonios es eso?!

Amelia: ¡Es un hombre lobo!

Pero es demasiado tarde, el hombre lobo está demasiado cerca. El miedo se apodera de ellos mientras el aullido del hombre lobo resuena en la noche.

Justo cuando Lawrence está a punto de atacar a Daniel y Amelia, Vlad aparece de la oscuridad.

Vlad: (serio) Lawrence, no lastimamos a los inocentes.

Vlad se vuelve hacia Daniel y Amelia.

Vlad: (tranquilizador) Váyanse, están a salvo ahora.

Daniel y Amelia, todavía temblando de miedo, asienten y arrancan el coche, desapareciendo en la noche.

Jenny escucha todo y sale a llamarle a Henry Jekyll.

Vlad y Lawrence se quedan solos en la carretera, bajo la luz de la luna llena.

Vlad: (frustrado) Lawrence, no puedes seguir haciendo esto. No puedes atacar a los inocentes.

Lawrence Talbot: (defensivo) No entiendes, Vlad. No puedo controlarlo.

Vlad: (serio) Debes aprender a controlarlo, Lawrence. No podemos permitirnos más incidentes como este.

Lawrence Talbot: (enojado) ¡No es tan fácil, Vlad! No todos tenemos tu autocontrol.

Vlad: (tranquilo) Pero todos tenemos la responsabilidad de proteger a los que no pueden protegerse a sí mismos.

Lawrence se vuelve hacia Vlad, sus ojos brillan con una intensidad feroz bajo la luz de la luna.

Lawrence Talbot: (con determinación) No soy un héroe, Vlad. Soy un depredador de la noche.

Vlad: (con determinación) Puede que seas un depredador, Lawrence, pero eso no significa que no puedas ser más. No tienes que ser el monstruo que la noche quiere que seas.

Vlad y Lawrence llegan a una granja aislada, oculta en la oscuridad de la noche. Las vacas pastan tranquilamente, ajenas a la presencia de los dos depredadores nocturnos.

Vlad: (susurrando) Recuerda, Lawrence, solo lo necesario.

Lawrence Talbot: (asintiendo) Lo sé, Vlad. Solo lo necesario.

Se acercan a las vacas, sus ojos brillan con una intensidad sobrenatural bajo la luz de la luna. Se alimentan, acabando con la mayoría de ellas.

De repente, un granjero (Malcolm McDowell) sale de la oscuridad, blandiendo una linterna. Al ver a Vlad y Lawrence cerca de sus vacas, comienza a gritarles.

Granjero: (gritando) ¡Aléjense de mis vacas!

El granjero se acerca y descubre con horror que sus vacas han sido asesinadas. Su rostro se vuelve pálido bajo la luz de la luna.

Jenny, conmocionada por los eventos, toma la decisión de informar a las autoridades sobre el crimen.

Jenny Halsey: (atónita) ¡Dios mío! Necesito ir a la policía de Oxford, ¡de inmediato!

Los servicios forenses llegan para recoger los cadáveres.

Amelia: ¡Oficial, deben creerme! ¡Vi a un hombre lobo atacando a mi esposo y a otro hombre!

Daniel: ¡Sí, lo que ella dice es verdad! ¡Fue horrible!

La pareja, temblorosa y con el terror aún reflejado en sus rostros, relata a la policía de Oxford la experiencia aterradora que vivieron en la carretera. Mientras tanto, un granjero también informa sobre la matanza de sus vacas.

Granjero: ¡Sí, agente! ¡Es increíble! Encontré a mis pobres vacas destrozadas y esparcidas por todo el campo. ¡Algo salvaje anduvo por aquí!

El granjero, con gestos de preocupación y miedo, señala hacia los restos de sus animales mientras los agentes intentan conectar las piezas de este misterioso rompecabezas.

Jenny escucha todo y sale a llamarle a Henry Jekyll.

Jenny Halsey: (mientras habla por teléfono) Sí, Henry, es increíble. Parece que algo muy extraño está sucediendo aquí en Oxford. Primero, el ataque a esta pareja y ahora informes sobre un posible hombre lobo y animales destrozados en una granja cercana. Necesitamos ayuda urgente.

Dr. Henry Jekyll: (por teléfono) Entendido, Jenny. Enviaré a mi equipo lo más pronto posible. Llegarán mañana y nos encargaremos de investigar estos sucesos. Mantente a salvo.

Jenny, con preocupación en su voz, agradece la pronta respuesta de Henry Jekyll y espera que la llegada del equipo aclare los oscuros eventos que están teniendo lugar en Oxford.

Jenny Halsey: (expresando preocupación) Henry, encontré el Haram, pero el avión en el que iba se estrelló. No sé cómo estoy viva.

Dr. Henry Jekyll: (sorprendido) ¿Cómo es posible?

Jenny Halsey: (resignada) El soldado que me robo en Fallujah Nick Morton, él me salvó.

Dr. Henry Jekyll: (intrigado) Nick Morton... lo investigaré. Mantente a salvo, Jenny. Informaré al equipo sobre la situación en Oxford y les pediré que se preparen para lo desconocido.

Amelia recibe una llamada. Se revela que es el doctor Víctor Frankenstein, el verdadero esposo de Amelia. Su apellido de casada es Frankenstein.

Daniel: (curioso) ¿Con quién hablas?

Amelia: (mintiendo) Es solo un colega de la universidad.

Mientras tanto, Daniel va al baño y descubre con horror que Lawrence lo mordió.

Daniel: (sospechoso) Está bien, pero algo no me cuadra.

Daniel se retira momentáneamente, y en el baño descubre la mordida de Lawrence en su brazo.

Daniel: (asustado) ¿Qué carajos es esto?

Esa misma noche, el caos se desata en Oxford cuando Daniel se convierte en hombre lobo y comienza a aterrorizar a la población.

Policía: (por megáfono) ¡Toque de queda! ¡Todos deben permanecer en sus hogares!

Amelia: (preocupada) Esto no puede estar sucediendo... ¿Qué le sucedió a Daniel?

Daniel: (aullando en la distancia, fuera de control) ¡Auuuuuuuuuuuu!

En las calles, las luces de las farolas parpadean, creando sombras inquietantes. La ciudad, sumida en el miedo, se encuentra bajo el toque de queda impuesto por la policía para contener al hombre lobo suelto.

Amelia recibe otra llamada.

Amelia: (tomando el teléfono) ¿Hola?

Voz en el teléfono: Amelia, soy yo.

Amelia: (nerviosa) ¿Quién eres?

Víctor Frankenstein: No juegues a la ignorancia, Amelia. ¿Dónde estás?

Amelia: (tratando de ocultar su ansiedad) Estoy en casa, como siempre.

Víctor Frankenstein: (con tono severo) No mientas. Sé que algo está pasando. ¿Dónde está Daniel?

Amelia: (vacilando) Está... ocupado en el baño. ¿Por qué preguntas?

Víctor Frankenstein: (serio) Amelia, no te hagas la tonta. Sé que algo anda mal. Daniel no es el mismo desde que volvieron de ese lugar.

Amelia: (tragando saliva) No sé de qué estás hablando.

Víctor Frankenstein: (frío) Deja de mentir, Amelia. Soy tu esposo, y sé cuando ocultas algo. ¿Qué ocurrió en esa expedición?

Afuera, el aullido del hombre lobo se mezcla con las sirenas de la ciudad sumida en el caos.

Calígula: (observando la escena) Parece que la situación se complica.

Vlad: (frunciendo el ceño) ¿Ese es otro de tus... "chicos"?

Calígula: (sonriendo) Lawrence Talbot, también conocido como el hombre lobo. Parece que se encontró con nuestro amigo desconocido.

Vlad: (frunciendo el ceño) Hemos comido vacas pero todo se está volviendo cada vez más complicado, ese no parece ser Lawrence.

Calígula: (riéndose) Bueno, parece que estas dos bestias van a desatar un gran caos en esta ciudad.

Vlad: (molesto) No tengo tiempo para tus bromas. Necesitamos controlar a esos monstruos antes de que atraigan demasiada atención.

Calígula: (serio) Tienes razón, mi campeón. Vamos a poner orden en tu "jauría".

En la calle, Jenny corre desesperadamente mientras Daniel, transformado en hombre lobo, la persigue. En ese momento, Lawrence aparece para enfrentarse a Daniel.

Jenny Halsey: (gritando) ¡Ayuda! ¡Por favor, ayuda!

Lawrence: (gruñendo) ¡Quédate quieta!

Se desata una feroz pelea entre Lawrence, también en forma de hombre lobo, y Daniel. Los aullidos y gruñidos llenan la noche, y los transeúntes aterrados huyen del caos que se desata en las calles de Oxford.

De repente, un montón de camionetas negras Mercedes-Benz Clase G y un camión Mercedes-Benz Unimog llegan al lugar. De ellos descienden varios soldados liderados por un hombre llamado Malik.

Malik: (reconociendo a Jenny) Jenny, déjanos hacer esto.

Los soldados se dispersan por la ciudad y comienzan a buscar a Vlad y Calígula. Lawrence y Daniel son inyectados con dardos tranquilizantes y subidos a un camión.

Amelia llega al lugar, claramente preocupada.

Amelia: (preocupada) Soy la esposa de Victor Frankenstein. ¿A dónde los llevarán?

Malik y Jenny responden al unísono.

Malik y Jenny (al unísono) A Londres.

Los soldados capturan a Vlad usando luces de sol falsas y lo llevan al camión. Malik se dirige a Jenny. Amelia sube a una de las camionetas.

Malik: (serio) Si ves algo sospechoso, llama a Henry.

Jenny Halsey: (resignada) Llamaré a Henry Jekyll. Pero quiero respuestas, ¿entendido?

Malik: (asintiendo) Entendido. Pero por ahora, mantente al margen y dejanos que hagamos nuestro trabajo.

A los lejos Vail observa todo.

Vail: (murmurando para sí) Mi señora, pronto le llevaré a su elegido.