Aquí va la segunda parte del día
- ¿Seguro que quieres decírmelo? - la interrumpió la sombra.
- Necesito sacármelo de mi pecho. - tomo aire y volvió a suspirar - Regrese a casa con el uniforme del equipo y mi medalla colgando en mi pecho, cuando llegue no me di cuenta de que mi padre no estaba feliz con lo que veía, le dije con una gran sonrisa que había sacado el segundo lugar en el torneo de futbol y le mostré con orgullo la medalla que llevaba... y me golpeo, porque una niña no debería jugar juegos de niños.
Las personas que estaban escuchando querían acercarse a ella, pero el pelirrojo los detuvo y se quedaron en silencio, apretando los puños de la furia.
- ¿Él... ? - Kuroko no supo que preguntar.
- No, mi madre ya había llegado y mi golpe fue la última gota que colmó el vaso. No recuerdo mucho, todo paso muy rápido y de repente mi padre se estaba yendo de la casa. Mamá había estudiado Leyes, pero con el matrimonio no lo ejerció, pidió el divorcio y como abogada que era hizo un trato con mi padre y terminaron divorciándose. Los vecinos eran tan conservadores como mi padre y le echaron la culpa a ella por no poder darle un heredero y tener una hija defectuosa. Fue mucho después que me entere, que mi madre estuvo embarazada 2 veces y que no pudo mantenerlos, y que la culpaban por eso. También me entere que mi padre prefería el futbol americano y no el futbol soccer. Mamá recibió una oferta de empleo en esta ciudad así que nos mudamos.
- ¿Tus amigos?
- Todo el equipo me apoyo, todos prometieron que se volverían los mejores jugadores de Japón y que nos volveríamos a encontrar en el futuro. Y cuando nos cambiamos, a la primera persona que conocí fue a Kosuke. - fue la primera sonrisa después de lo que paso.
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- La conocí en una multicancha cerca de mi casa - empezó a contar Wakamatsu.
Después de que Kuroko siguió a la pelinegra, el resto del equipo empezó a acosarlo con preguntas y decidió contarles partes de la historia.
- Tuvimos una diferencia de opiniones sobre que deporte era el mejor, al final terminamos aprendiendo el deporte del otro y cada vez que nos veíamos intercalamos para jugar, un día baloncesto, al siguiente seria futbol, practicamos el uno con el otro y pronto hubo otros que se guiaron con nuestro horario y empezaron a jugar con nosotros, y paso el tiempo, ella se había unido a una secundaria con un equipo femenino de futbol y yo al equipo de basquetball, pero seguíamos yendo a la multicancha a practicar. Nuestros compañeros de equipo sabían de nuestras salidas a practicar otro deporte, pero en esos momentos no era importante, aun así, si se acercaba un partido importante, a pesar de ir no jugábamos para evitar lesiones. Hasta que ocurrió el accidente.
- ¿Un accidente?
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- Si. Fue cerca de la multicancha, nos estábamos yendo para mi partido, cuando vi que un niño soltó la pelota y la seguía hasta la calle, y de repente un auto venía a toda velocidad hacia él. Dejé caer mis cosas y me abalancé para sacar al chico del camino, pude tomarlo en brazos y estuvimos cerca de llegar a la acera, pero el auto en ningún momento bajo la velocidad, y me alcanzo por poco.
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- Su pierna izquierda - dijo Riko.
- Solo me demoré despidiéndome de los chicos, cuando sentí que algo caía al suelo, y cuando me di la vuelta, ella ya estaba con el niño en brazos y el auto había chocado contra su pierna, nunca se detuvo. Nos acercamos y ya habían llamado a la ambulancia, el niño estaba bien, pero ella estaba en el suelo sin poder pararse. Nunca he podido olvidar el dolor que mostraba su cara, me sentí culpable porque fue mi idea ir a la cancha, y cometí el error de alejarme de ella.
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- Fue difícil, los doctores me advirtieron que no podía jugar por unos meses y que después debía hacer rehabilitación o no podría volver a jugar nunca más. Kosuke no fue a verme al hospital, y cuando regrese a la Secundaria, mi equipo estaba culpándome por perderme el juego de ese día.
- ¿Ellos no sabían de tu accidente?
- Solo se enteraron de que estaba en la multicancha, y sacaron conclusiones de que me había lesionado jugando baloncesto, cuando quise hablarles del accidente, ellas ya no me hablaban y pensaron que las había traicionado, ninguna quiso escuchar la verdadera razón. Poco a poco me fueron alejando, ya no me incluían en los trabajos, poco a poco pude ver cómo me estaban echando del equipo, así que decidí renunciar para evitar más problemas, y poder enfocarme en mejorar. Pero cuando le dije a mi madre sobre mi renuncia, vi que estaba aliviada, a pesar de todo el apoyo que me dio, seguía siendo una mujer conservadora que prefería que su hija hiciera cosas más dedicadas a niñas que a chicos. Me sentía sola y empecé a espaciar más mis ejercicios hasta que los deje por completo.
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- Cuando me di cuenta de mi error ya era demasiado tarde. Un compañero de clases me dijo lo que había pasado con el equipo, había ido a ver su entrenamiento varias veces, pero muchas de sus integrantes la pasaban coqueteando conmigo que, entrenando, por eso no había ido últimamente y no me había enterado de sus reacciones.
- ¿Por eso te enojas conmigo cuando no entreno? - pregunto Aomine.
- Por lo menos tú tienes el talento para contrarrestarlo, ellas solo dejaban todo el trabajo en Aisha y hacían lo mínimo para el equipo. - decía enojado - Pero por idiota perdí su confianza, y a pesar de que intenté conversar con ella, había cerrado su corazón a todos, así que hice un trato con el diablo.
- ¿Qué quieres decir? - pregunto Hyuga.
- Midori.
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- ¿Tienes miedo de que Wakamatsu-san vuelva a alejarse? ¿Por eso no aceptas tus propios sentimientos? ¿Ni los de él?
- Sé que es irracional, solo se alejó en un mal momento por la culpa, pero no puedo evitar pensar que volverá a dejarme cuando más lo necesite.
- ¿Qué paso despues?
- Apareció Midori. Fue un torbellino desde el primer momento, alguien le había contado que yo podía cantar, así que llego a mi casa con diferentes cd´s de karaokes, se instaló en mi dormitorio y empezó a ponerlos, obligándome a cantar. Solo quería que se fuera rápidamente, así que le seguí la corriente y cante. Cada canción que coloco la cante, en un momento estaba llorando, había colocado canciones que despertaban mis emociones, que me hacían volver a sentir la ira, la soledad, la angustia, aligero mi corazón sin darme cuenta y termine llorando abrazada a ella. Fue así que me uní a la banda.
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- Poco a poco la vi más viva, cada día volvía a ser la chica alegre que había conocido, pero ella nunca volvió a jugar en un equipo, y no volvió a tocar un balón de futbol hasta hoy.
- Parecía que nunca había dejado de jugar - le dice su capitán Imayoshi.
- Ella es la mejor jugadora de futbol que he conocido, una gracia como la de Aomine, una conciencia en la cancha como la de Akashi Seijuro, la habilidad de aprender y copiar las jugadas como la de Kise Ryota, toda relacionada al futbol soccer, estoy incluso seguro de que la vi entrar a la Zona en uno de sus partidos más difíciles. Es muy posible que incluso pueda enfrentarse a jugadores profesionales y ganar.
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La conversación entre los 2 habia tranquilizado a la joven, y mientras se levantaban de las escaleras, se acercaban el resto del equipo.
- Hola Kuroko - saludo un pelirrojo.
- Kuroko-chi - saluda entusiasmado un rubio.
- Akashi-kun, Kise-kun - les saluda de vuelta la sombra.
- Así que Uds. también vinieron - los saluda Aomine cuando se acercan.
- Estábamos cerca así que decidimos pasar. - responde Akashi - espero que estén listos para mañana.
- Ya veras Akashi, esta vez voy a ganar. - le responde el peliazul.
- Aaaahhhh, estoy celoso - dice Kise dramáticamente. - Ya tenía un compromiso para mañana y me tocara todo el día.
- ¿Teníamos un partido mañana? - pregunta Wakamatsu, ni siquiera lo sabía.
- Estabas tan concentrado planeando tu cita - le responde Imayoshi - que ni siquieras prestaste atención.
- Hay un evento mañana - relata Yoshinori Susa - habrá algunas demostraciones y juegos de basquetball al azar con diferentes equipos.
- Es por eso que estaba un poco emocionada con el entrenamiento - siguio Riko.
- ¿Nosotros también participaremos? - pregunto Kuroko.
- Claro que si... - y Seirin se dio cuenta que no le habian dicho a la pareja sobre el evento.
- Esperen - aparecio la banda - ¿Que quieres decir que van a participar? Se supone que mañana es nuestra final, y necesitamos a Tetsuya para la presentación.
- Hey chicos - empezo a decir Ryota, pero tanto Seirin como la banda se estaba volviendo loca por encontrar una solución al problema. - ¿Qué Kagami no les dijo? - termino gritando para que lo escucharan.
- Decirle qué - llego Taiga con las manos llenas de comida, junto con un chico gigante de pelo morado y otro de pelo negro.
- Heeeyyy - saluda Murasakibara.
- Hola buenas tardes a todos. - saludo más formal Himuro. Ambos miembros de Yosen High
- Sobre mañana - empezo a decir Kise, pero Aida Riko ya estaba en pie de guerra contra su propio As.
- He estado tratando de decirle desde que me entere en la revista - exclama el As - pero siempre se terminan distrayendo con algo.
- ¿Revista? - preguntaron a coro.
- Recuerdan la revista que compre por error - los 2 asintieron - Kise salía en ella, por eso la confusión, al parecer va a ser jurado en la final del concurso de mañana.
Todos se sorprendieron.
- Cuando Kagami se enteró del evento - dice Daiki - me llamo para conseguir el número de Kise.
- Siii - grita emocionado Kise - Kagami-chi me explico el problema que tenían y si sería posible cambiar su turno para más tarde, termine preguntando a los organizadores cuando apareció Akashi-chi.
- Nuestra banda también clasifico en la final - siguió el pelirrojo más bajo - pero hubo problemas personales en algunos miembros y no podían quedarse hasta la noche, me pidieron si podía hablar con los organizadores y cambiar su turno para más temprano.
- Al final - siguio el rubio dramatico - concedieron intercambiar los turnos de las 2 bandas, ellos consiguieron su turno, y ustedes cantaran en el ultimo turno.
- Y todo arreglado - termino Kagami.
Silencio total entre todos.
- Siiiii, gracias, gracias, gracias - por primera vez vieron a los gemelos Tanaka actuar de manera similar, tirándose hacia el jugador y abrazándolo mientras le agradecían.
Kosuke vio al resto de la banda suspirar de alivio, a pesar de todo, la paso muy bien en esta cita, solo esperaba que hubiera una segunda en el futuro.
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Al final, terminaron despidiéndose de todos y regresando a casa.
Kosuke la acompaño hasta la puerta de su casa, con el peluche de puma en sus brazos, a pesar de todo, se divirtió bastante con esta cita.
- Gracias por todo - se despidió del joven, pero antes de entrar, se armó de valor y termino dándole un beso en la mejilla.
Detrás de la puerta, escucho a Kosuke gritar de felicidad.
Si, a pesar de todo, fue un gran día.
Notas de autor
Sabía que este capítulo seria largo.
Pero nunca me imaginé que sería tan largo, que tuve que cortarlo en 2.
Como habrán adivinado, Aisha Moraru está basada un poco en mí, y a la vez un poco en mi primer personaje Oc. Que fue creado cuando vi por primera vez los supercampeones, así que le tengo bastante cariño, aunque cuando apareció el príncipe de cristal, evoluciono por otro camino, ya que era la hermana mayor de Steve Kyuga (en ese momento ese era el apellido en la serie que veía, fue después que el apellido cambio a Hyuga), padecía del corazón y Steve empezó a jugar por ella. Y era un genio que aprendió medicina bastante joven, para ayudar a las personas.
Cuando apareció Andy, mi mente fue más allá, como un genio, creo sus propios jugos medicinales (me reí cuando vi por primera vez el jugo de Sadayaru, y me imagine a los dos intercambiando recetas), creo un equipo completamente femenino que llame Mistery Team (no tenía mucha imaginación en ese momento) y entraba a ligas de chicos con máscaras para evitar ser reconocidos (se supone que fue una regla que le dieron los organizadores), como conocía la medicina podía ver cuando los jugadores se lastimaban, y también podía hacer suyos las jugadas de otros jugadores, adaptándolas a su propio cuerpo, y aprendiendo tan fácilmente diferentes deportes.
Creo que eso fue lo que me hizo encariñarme tanto con Kuroko no basket, ver las habilidades de mi primera creación, divididas entre distintos personajes. Así que le doy gracias a Tatiana Kyuga, mi primera hija y la que siempre uso en los animes de deportes.
Salidos y gracias por leer mis desvaríos.