Capítulo 86: Sin Retorno
Torre de Radio, Cuarto Piso, Dentro de la Cabina de Grabaciones, Ciudad Goldenrod. Región de Johto. 3:11 P.M
-O-Ok… Acepto la propuesta.- Indica Crystal con desdén y decisión, interrumpiendo de golpe a Archer. -¡Y-Yo acepto unirme al Equipo Rocket!-
En cuestión de unas cuantas milésimas de segundo seguido de sus propias declaraciones, Crystal pudo apreciar con tan solo un efímero vistazo cómo el semblante de Mary, pero en especial el de Silver, llegaron a cambiar súbitamente en vivo y a todo color al alternar entre confusión, incertidumbre, y el más profundo de los desasosiegos.
-¡E-Esta tiene qué ser una maldita broma de muy mal gusto!- Exclamó sorpresivamente Mary con visible fervor e irá, armándose aquí del suficiente valor tanto cómo para alzar su voz tras mirar de reojo a Archer con repudio y desprecio, mismo quien optó por observar toda la situación en silencio y con una triunfal sonrisa en sus labios junto con Beheeyem, sino qué además la joven DJ utilizó sus sentimientos para externalizar y combatir el miedo qué anteriormente carcomía gran parte de sus acciones hasta el punto de acelerar su corazón a más de mil por segundo y hacer sonrojar sus mejillas. -¡P-Por favor, recapacita de esta locura, Crys! En esté punto no es cómo sí me pueda oponer y hasta me da igual qué el Equipo Rocket utilice mi programa para dar su mensaje a Giovanni, ¿pero unirte a ellos así por así cómo sí fuese una obligación? E-Esto no es algo qué pueda pasar por alto. Y-Yo… Yo conozco a toda tu familia y a ti desde qué eras una niña pequeña en la guardería de tus abuelos. Tú sueño siempre fue el de convertirte en una profesora cómo tú-...
-¡Te sugiero qué midas con muchísimo más cuidado tus palabras de ahora en adelante, Mary!- Contra argumenta Crystal, interrumpiendo fortuitamente a la afamada Dj con rebeldía y en un tono despectivo, distante, y qué rozaba incluso en el cinismo. -Además, mis decisiones no son de tu incumbencia. A menos claro qué quieras terminar inconsciente y sobre el suelo al igual qué el profesor Oak.-
Pupilas extremadamente dilatadas en conjunción de una garganta reseca y qué acompañaba con un grueso nudo metafórico qué imposibilitaba en gran medida su capacidad para argumentar. Aquí, en esté preciso momento, Mary apretó sus labios con una mezcla entre furia, incredulidad, y tristeza, en respuesta a las anteriores palabras de Crystal, mirando a esta última fijamente a sus ojos azules tras limpiar con amargura las varias lágrimas qué aún recorrían sus pómulos enrojecidos, ocasionando al mismo tiempo qué otro par de lágrimas llegasen a manchar un pequeño sector del escritorio frente a sí misma.
Silver, por su cuenta, decide intercambiar fugaces miradas con su Sneasel, pokémon ahora colocado sobre el suelo y directamente a su izquierda, entre el asiento ocupado por Crystal y el suyo propio en el escritorio, antes de volver a plasmar su atención con cautela sobre la imponente dupla conformada por Archer y Beheeyem.
-¡Maldita sea, Crystal! ¿Por qué demonios eliges precisamente el momento menos oportuno de todos cómo para jugar a ser una héroe? Ughh… Esto solo va de mal en peor.- Comentó Silver muy entre dientes para sí mismo y de mala gana, apretando nuevamente ambos puños debajo del escritorio. -Al principio también me hiciste dudar y me sorprendió de mala manera tu comportamiento tan errático al igual qué cómo Mary hace ahora mismo. Llegado esté momento, y conociéndote cómo te conozco, ya no me caben tantas dudas de tus intenciones. Tu ahora lo estás apostando todo al hacer de ti misma una especie de chivo expiatorio en favor de qué Archer enfoque toda su atención sobre ti. Por eso decidiste intervenir de la forma en la qué lo hiciste, para así retrasar lo más qué pudieses el qué yo diera mi mensaje a mi padre. ¿Pero entonces qué mierda planeas hacer después? Crystal… Esté es un camino sin ningún tipo de retorno y casi qué rozando en el suic-...
-Archer…Solo te pediré una única condición a cambio, antes de unirme a ustedes sin muchos más peros, ¿ok?- Continuó Crystal exponiendo sin titubear, ignorando aquí activamente la presencia de todos los demás presentes dentro de la cabina, a la vez de observar cabizbaja en la dirección en dónde yacía el actual líder del Equipo Rocket junto a Mary. -Por favor, por lo qué más quieras, te ruego qué des la orden para qué tus reclutas no lastimen o hieran más a los empleados y civiles dentro de este lugar. Igualmente sé que no estoy en posición de pedir o negociar absolutamente nada dadas las circunstancias. Pero, pase lo qué pase después de salir de aquí, por favor te pido qué no tomes represalias contra mis familiares o compañeros de viaje. Sí tú cumplieras con esto, entonces prometo serte de ayuda y hasta podría revelarte varios de los secretos de mi padre sobre sus investigaciones en curso, cómo por ejemplo los hallazgos y teorías qué deseabas conocer sobre la evolución pokémon mediante ondas de radio. ¿Q-Qué me dices?-
Manteniendo en todo momento una triunfal y confiada sonrisa sobre su pálido pero sombrío rostro, Archer opta por desplazarse con la enervante tranquilidad qué tanto lo llegaba a caracterizar, teniendo además el cuidado suficiente de no pisar el cuerpo inerte del profesor Oak a pocos centímetros de dónde se mantenía, hasta volver apoyar su espalda contra el marco de la puerta de metal qué servía para unir la cabina de grabaciones con la antesala contigua al mismo, provocando otra vez qué la atmósfera dentro del lugar se volviese aún más pesada y tétrica qué antes.
-Hmph… Vaya, de verdad qué no paras de sorprenderme con cada nueva palabra qué sale de tu boca, Crystal. A pesar de todo lo sucedido aquí, y sin tener ni la más mínima pizca de certeza sobre sí mantendré mi palabra o no, aún tienes el coraje y osadía necesaria cómo para poner tus propias condiciones sobre la mesa.- Reconoce Archer finalmente al cruzarse de brazos con más calma, entre tanto el volvía a fijar una mirada gélida y penetrante sobre los rostros llenos de interrogantes de Crystal, Silver y Mary. -Aunque lo tengo qué admitir, tu propuesta suena cómo algo de mi particular interés. Y sí bien mi equipo científico ya logró resultados muy prometedores dentro de nuestro laboratorio y con sus propios medios con respecto al tema de evolución pokémon mediante ondas de radio, no puedo decirle qué no a la posibilidad de conocer de primera mano sobre las investigaciones de un científico del calibre de Gregory Elm. Ahora bien, tampoco puedo garantizar en un cien por ciento la completa seguridad de todos los civiles y empleados dentro de la torre. Pero lo qué sí puedo asegurarte es qué, mientras más tiempo me hagas perder aquí, más posibilidades existen de qué tus familiares o amigos aquí presentes corran más peligro del necesario. Por lo tanto, acepto tu generosa propuesta, pero de la misma manera te sugiero qué, por el absoluto bien de todos dentro de esta torre, prosigamos con esto de una buena vez, ¿de acuerdo? Cómo bien dije antes, el tiempo es oro y tengo una apretada agenda qué cumplir.-
Por enésima vez en la tarde Crystal dejó entrever en su rostro una expresión plagada de dudas y qué rozaba en el pánico en estado más puro sin ser esta su intención, cómo sí estuviese contemplando con infinita melancolía todas y cada una de las decisiones tomadas a lo largo de su vida y las cuales la llevaron hasta este preciso momento. Por lo demás, siendo ella muy consciente de qué sus peticiones a Archer sin dudas caerían en oídos sordos, sumado a qué cada fibra de su cuerpo le decía a gritos qué era imposible confiar en la palabra de un psicópata cómo él, esto era lo mínimo qué ella podía hacer, con el único fin de ganar algo más de tiempo mientras encontraba la mejor manera para lidiar con la situación en un futuro demasiado más próximo del qué ella esta estaba dispuesta a admitir.
-La sola presencia de ese estupido Beheeyem complica aún más todo lo qué tengo qué hacer de ahora en adelante.- Destacó rápida y asertivamente Crystal desde su interior, acomodando entonces su propia postura sobre su asiento. -Pero al menos con todo lo sucedido hasta ahora pude comprobar dos de mis teorías. La primera es qué Silver efectivamente sí trabaja con el Equipo Rocket en contra de su propia voluntad. Mientras qué la otra es qué Archer parece no tener conocimiento previo de qué Silver y yo nos conocemos de antes. Ahora solo tengo qué encontrar la manera más efectiva de utilizar todo esto a mi favor.-
La joven futura profesora sabía qué todo esto conllevaba un riesgo mayúsculo, no solamente para sí misma, sino qué también para todos los involucrados, sin embargo no había más salidas o caminos a la vista. Su única opción viable era la de aprovechar aquella oportunidad tan única y seguir la corriente de la situación lo más qué pudiese al aceptar la sorpresiva propuesta de Archer de unirse al Equipo Rocket, inclusive sí esto después la pusiese entre la espada y la pared.
Posteriormente a su interacción anterior, Archer es ahora quien toma la iniciativa de la situación tras fijar sus ojos exclusivamente sobre los de Mary, luego de ver cómo Crystal se mantuvo al margen y en completo silencio, lo qué ocasionó qué la joven DJ volviese a tragar saliva con nerviosismo, pero no sin qué antes ella removiera sus anteojos ahora empañados de enfrente de su rostro para así limpiar las lágrimas qué aún se mantenían decorando sus mejillas.
-Dime, ¿entonces todo sigue calibrado para qué Silver pueda dar su mensaje?-
Dándole un rápido vistazo tanto a la consola de sonido incrustada sobre el escritorio frente a ella, cómo también a uno qué otro programa dentro de la computadora portátil en conjunto con los varios micrófonos puestos aquí, Mary procede a asentir sin muchos más ánimos, tras limpiar y colocar nuevamente sus anteojos sobre su rostro.
-T-Todo sigue en perfectas condiciones y tal y cómo antes.- Replicó Mary al mezclar insipidamente rebeldía y resignación en su voz, generando al finalizar un sonoro suspiro qué no hizo más qué atraer la mirada de Beheeyem sobre su persona. -Solo denme la orden y yo haré el resto.-
Archer volvió a sonreír con prepotencia al separar brevemente su espalda del marco de la puerta, utilizando ahora su cabeza al moverla con ligereza para señalizar el alargado micrófono de color negro aún colocado enfrente de Silver. -Llegó el momento, muchacho. No más interrupciones, ni excusas. Ya sabes lo qué tienes qué hacer.-
Tan pronto cómo el actual líder del Equipo Rocket terminó con sus aseveraciones, Silver automáticamente comenzó a experimentar cómo dentro de su estómago se iba generando un enorme vacío en respuesta al palpitante miedo qué representaba el desconocimiento de lo qué sucedería a continuación.
-Ok… Sí Crystal está dispuesta a arriesgarlo todo de esta manera, entonces no hay excusas para que yo me quedé atrás y me resigne cuando aún me queda un último recurso a disposición.- Reconoce Silver nuevamente entre dientes, frunciendo el ceño antes de volver a acercar el micrófono puesto enfrente de sí en dirección a su rostro. -Ughhh… ¿Pero quién demonios lo diría? La estúpida ironía de esta situación me provoca náuseas. Ahora el destino de todo Johto y Kanto recae y dependen únicamente de ti, papá.-
Luego de su breve monólogo interno, Silver no puede evitar observar de reojo al profesor Oak, aún inconsciente sobre el suelo a poco más de medio metro de su posición, para luego cruzar breves miradas con Archer, Sneasel, Crystal y Mary. -De acuerdo… Estoy listo. Hagamos esto de una buena vez.-
Residencia de la Familia Tsubasa, Pueblo New Bark. Región de Johto. 3:10 P.M
-Oye Naoko, ¿aún no logras sintonizar correctamente con el programa de Oak y Mary?- La actual matriarca y líder del afamado clan Masamune de Ecruteak utilizó un tono de voz autoritario y algo condescendiente para referirse a la mayor de sus hijas, dejando atrás la sala contigua en dónde anteriormente se mantenía, pasando a través de una puerta de vidrio corrediza, para entonces salir al patio trasero y encontrarse de frente con esta última. -Recuerda qué estamos aquí contra el tiempo, querida. Se supone qué la entrevista a tu hermana y Gold daría inicio a las tres de la tarde y de preferencia quisiera que-...
-Creeme qué eso es lo qué he estado intentado hacer todo esté tiempo, madre.- Replicó a regañadientes la joven quien respondía al nombre de Naoko, misma quien expulsa un amargo alarido en clara señal de molestia, peinando luego un mechon rebelde de su ondulada cabellera de color rosa pastel sobre su rostro, no sin antes negar con su cabeza al observar cómo su madre se posicionaba frente a la compacta mesa circular de metal en dónde ella se mantenia tranquilamente sentada. -A decir verdad, y por más qué lo intentó volver a sintonizar de todas las maneras posibles, no entiendo qué es lo qué le sucede a esta cosa. Con decir qué cómo último recurso hasta probe cambiando sus baterías por las del control remoto del televisor de sala por sí acaso, pero lastimosamente el resultado se mantuvo igual.-
Posterior a darle otra rápida inspección visual por todo alrededor, la chica kimono decide levantar con ambas manos la radio portátil en forma de cajilla para mostrarla de mala gana ante su confusa progenitora.
-Te puedo jurar qué ella funcionaba a la perfección hace unos cuantos minutos atrás. Inclusive pude escuchar por unos cuantos instantes las voces de Oak y de Mary cuando el programa dio inicio. Pero luego hubo una repentina y extraña pausa cuando ellos intentaron presentarse, seguido de estática cómo sí se hubiese perdido por completo la señal de la transmisión o algo por el estilo.-
En respuesta, la veterana líder del clan Masamune arquea por inercia una de sus cejas, antes de negar lentamente con falsa consternación frente a su hija. -Vaya… Pues terrible momento qué elegiste ayer cómo para averiar tu propio Pokegear al olvidarlo dentro de tu ropa sucia y meterlo después a la lavadora.- Bromeó con ironía la madre con su hija, cruzándose luego de brazos. -Pero bueno… Ahora solo espero qué no hayas estropeado también la radio de tu tía.-
Naoko titubeo en el acto frente al último comentario generado por su madre, volviendo a colocar encima de la mesa la radio portátil con extremo cuidado. -¡N-No creo haberla estropeado!- Aseveró con ímpetu la chica kimono a manera de desafío, también arqueando sus cejas al hacer pucheros con su rostro. -¿Y podríamos por favor olvidar lo qué sucedió con mi Pokegear? Ya suficiente tuve con las burlas qué recibí de Miki, Kuni y Sayo. Además, esto no viene al caso ahora, madre.-
Seguidamente de esto, una gélida y hasta refrescante brisa resoplo, provocando de inmediato qué la matriarca de las chicas kimono, mejor conocida en todos los alrededores de Ecruteak cómo Asuka Masamune, dibujara una cálida sonrisa ante su hija al sentarse a su derecha frente a la mesa. -De acuerdo, Naoko. ¿Entonces qué sugieres qué hagamos ahora? Tu mejor qué nadie sabes qué mi Pokegear es de los modelos más antiguos, por lo qué esté no tiene integrada la función para escuchar a la radio.-
Por segunda vez consecutiva, Naoko se mantuvo dubitativa ante su progenitora, prefiriendo mirar de reojo gran parte del verde pasto qué rodeaba el patio trasero de la residencia. No obstante, antes de qué ella pudiera siquiera brindar otro comentario al respecto, la puerta de enfrente de la residencia se pudo escuchar cómo se abrió de golpe, emitiendo después un ligero crujido metálico al cerrarse.
-¡L-Lamento muchisimo la demora!- Se excusó de inmediato Sakura Tsubasa en voz alta, inicialmente dejando dos pequeñas bolsas con víveres en una de las repisas de la cocina, para luego dirigirse al salir de lleno al patio de atrás y encontrarse allí con su hermana y sobrina. -En verdad no esperé demorar tanto cómo lo hice en busca de unos cuantos refrigerios para ustedes dos. Pero, por algún extraño motivo, la tienda en dónde usualmente compro los víveres estaba muchísimo más repleta de lo habitual.-
-No te preocupes mucho por eso, Sakura. Esas son cosas qué pasan.- Antepuso Asuka en réplica para con su hermana menor recién arribada con una tranquila pero alegre sonrisa. -Aunque, en todo caso, esto sería culpa nuestra por venir de imprevisto para sorprenderte de la forma en la qué lo hicimos.-
Sakura se limitó a responder a lo dicho por su hermana mayor también con una sonrisa gentil. -Para nada, por favor no pienses de esa manera. Yo amo las sorpresas y siempre estoy encantada de recibir visitas. En especial sí se trata de mi familia, ahora qué finalmente pudimos hacer las paces luego de tantos años alejadas la una de la otra.- Afirmó entonces la ahora ex chica kimono, aprovechando la oportunidad para acercarse aún más a la mesa de metal en dónde se mantenían sentadas Asuka y Naoko. -Pero dejando todo esto un poco de lado por el momento, ¿qué tal van con el programa de Oak y Mary? ¿Ya lograron sintonizar para escuchar las entrevistas a Zuki o a mi Gold?-
Acto seguido, Naoko y Asuka intercambiaron nerviosas miradas de reojo, sumado de un corto pero incómodo silencio qué no fue interrumpido sino hasta cuando la mayor de las chicas kimono de la actual generación decidió intervenir unos cuantos segundos después.
-Uhhh… P-Pues, a decir verdad, me temo qué no hemos podido sintonizar muy bien con el programa por alguna extraña razón.- Confesó Naoko, negando ahora con su cabeza desde su posición y señalando con su mano derecha la radio portátil colocada a pocos centímetros de sí misma. -Al comienzo todo fue bien. Logre sintonizar sin problemas el programa, y hasta escuche el inicio del mismo cuando Oak y Mary dieron sus respectivos saludos. Pero entonces ocurrió una extraña pausa y ahora lo único qué se escucha por la radio es el sonido de la estática.-
En un muy veloz dos por tres, Sakura frunció en principio su ceño, tomando entonces la radio portátil entre sus manos y verificando en primera fila, luego de apretar y ajustar varios de los botones incrustados en hilera en su parte superior, sobre cómo efectivamente el único sonido qué se podía escuchar por parte de aquel artefacto electrónico era el de la estática.
-Hmph… Pues esto sí qué es bastante peculiar.- Reconoce Sakura con clara sorpresa en su rostro, dándole una última revisión a la radio portátil por todo su alrededor antes de apagarla y volver a colocarla en medio de la mesa. -Sí bien hace unos cuantos años atrás tuvimos uno qué otro problema con respecto a la calidad y recepción de la señal para los servicios de radio y Pokegear, todo esto luego se llegó a solucionar poco antes de qué se anunciara la construcción del laboratorio del profesor Elm en la parte más al oeste del pueblo.-
Una vez culminada su explicación, Sakura decide sacar rápidamente desde el bolsillo izquierdo de su falda su propio Pokegear, encendiendo sin titubeos casi a todo volumen la funcionalidad de radio. Sin embargo, habiendo hecho esto, el tan característico sonido de la estática no tardó en inundar nuevamente en escasas milésimas de segundo todo el patio trasero de la residencia al hacerse presente y resonar con el delicado silbar del viento cómo sí se tratase de una extraña pero armoniosa sinfonía.
-Supongo qué esto oficialmente puede descartar qué la radio portátil esté averiada.- Indicó Asuka a modo de teoría, cruzándose automáticamente de brazos con desdén en favor de intercambiar miradas con su hermana e hija. -Ya qué dudo mucho qué tanto la radio, cómo también tu Pokegear, se hayan averiado exactamente al mismo tiempo. A mi parecer, creo qué todo esto debe tratarse de algún tipo de desperfecto por parte del mismo programa de Oak y Mary. Quizás inclusive puede ser qué algo o alguien esté interfiriendo involuntariamente con la transmisión de la señ-...
-¿H-Hola…? ¿M-Me escuchan…? ¡Esté es un mensaje dirigido única y exclusivamente a Giovanni D'Antonio, ex líder de gimnasio de ciudad Viridian en la región de Kanto, y legítimo líder y fundador del Equipo Rocket!-
En poco menos de lo qué tarda un suspiro, el semblante del trío de oriundas de Ecruteak cambio de repente y de la peor manera imaginable, no solo cuando el sonido de la estática producido por el Pokegear de Sakura súbitamente fue reemplazado por el críptico mensaje de quien aparentaba ser un angustiado adolecente con voz ronca, sino qué además esto resultó en el automático intercambio de dramáticas miradas aún más llenas de extrañeza, miedo y confusión entre las presentes.
-¿A-Acaso esto se trata de algún tipo de chiste?- Cuestiono Sakura con palpable temor en la entonación de cada una de sus palabras, pero no sin antes sentir cómo un nudo metafórico se iba formando dentro de su estómago. -E-Esto no puede ser real, ¿o sí? O sea… ¿U-Un mensaje para-...?-
-Ciudadanos de las regiones de Johto y Kanto, el Equipo Rocket actualmente tomó el control operativo de la Torre de Radio de Ciudad Goldenrod, además de qué todos y cada uno de los empleados y civiles dentro de esté lugar ahora son nuestros rehenes. Giovanni, sí estás escuchando esté mensaje, por favor te suplicamos qué vuelvas al lugar qué siempre te ha correspondido. El Equipo Rocket aún está muy activo y de ti depende regresar para… para mantener a salvo el único legado vivo de Silvia. Cambio y fuera… -
