《 AU • Rofan 》

La siguiente historia contiene temas que podrian ser sensibles y no aptos para todo publico.

ML Yandere • Soft Incest • Sangre

Se recomienda discreción.

Dulce Hogar

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Se dio cuenta desde la primera vez que la vio. Que la amaria incondicionalmente hasta el ultimo dia.

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Cuando se entero que su padre volveria a casarse, la ira se extendio por su cuerpo de forma inevitable. Una parte de si mismo lo comprendia, pues habia perdido a su madre al nacer.

Por eso, cuando le miraba salir con algunas mujeres nunca habia pensado que elegiria alguna para su vida. Eventualmente todas terminaban siendo desechables.

Claro. Hasta que conocio a Sakura Haruno. Una mujer dulce de cabello rosado.

¿Seria por el parecido con Kushina?. Habia visto montones de retratos en casa cuando era niño. La mujer de aquellos retratos le regresaba la mirada con un gesto dulce. lleno de amor incondicional.

Por eso Naruto lo comprendió cuando llegó a su vida aquel dia. Cuando la dulce sonrisa de aquella mujer encendio una chispa extraña en su interior. Algo que dormia profundamente.

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Aquel dia Sakura estaba muy nerviosa. Unos cuantos meses habian pasado desde que comenzo una relación con aquel hombre rubio.

Minato era un hombre amable, alegre y muy carismático.

Por supuesto, no habia conocido a muchos hombres.

Trabajar y vivir en la Iglesia solía mantenerla ocupada, su vida consistia en curar a las personas. Desde que era niña, habia deseado más que solo estar confinada por aquellos muros sacros. Y cuando se dio la oportunidad, acepto inmediatamente.

Minato habia llegado junto a sus hombres un dia, bañado en sangre, casi inconsciente.

— Kushina... — Murmuro apenas verla.

Sakura le sonrió de forma amable y prosiguió con el tratamiento.

El hombre rubio se habia disculpado dias despues por aquel breve malentendido. Y fue ahi cuando Sakura escucho la historia de aquel hombre.

Una propuesta siguio despues de eso.

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Cuando llegaron a la residencia Namikaze, un chico rubio los esperaba con gesto furioso. Sakura se preguntó si aquel niño adorable era el hijo de quien tanto hablaba Minato.

— Ella es Sakura Haruno. Sera tu madre desde ahora. — Dijo Minato.

Naruto no habia respondió de forma inmediata. Pero habia actuado extrañamente complaciente.

— Tiene un poco de mal caracter, pero espero que puedan adaptarse rapidamente.

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Los primeros años tras aquel encuentro habian sido una montaña rusa de emociones para el pequeño rubio. No habia momento en que no quisiera complacer a su nueva madre. Y por supuesto, Minato estaba encantado con aquello, el caracter de su hijo habia mejorado considerablemente. Siempre y cuando Sakura estuviese presente.

— Sakura!.— Dijo Naruto, sentado en uno de los tantos sofas de aquella amplia sala.

Sakura lo observó mientras comia algunas galletas. — ¿Estas bien?.

Naruto se levantó y se acerco para sentarse a su lado. Recargo su cabeza en el hombro de Sakura y fingió estar abatido. — No he podido dormir por culpa de papá. Desde que llegó he tenido pesadillas.

Sakura acarició su melena rubia. — Lamento que hayas visto a tu padre de esa manera. No era su intención.

— ¿Puedo dormir contigo esta noche?. Tengo miedo.

— Solo hasta que duermas. Me ire después.

Los ojos inocentes del pequeño rubio brillaron.

Si, Sakura no sospecharia de las intenciones que gradualmente iban creciendo en aquel chico rubio.

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[ Minato ]

Cuando conoció a Sakura, supo que aquella mujer podria calmar a la bestia interna que llacia en el cuerpo de Naruto.

Habia estado buscando una manera de controlar a su hijo antes de ser asesinado en campo o morir por su propia mala salud. Pero, cubrir cada muerte comenzaba a volverse pesado con el paso de los años.

Fue cuando Naruto tenia 5 años. Fue el momento cuando comenzó todo. Recordaba la cara sonriente de su pequeño hijo con el rostro ensangrentado, junto a un sirviente siendo deborado por aquella bestia maligna en su interior.

Conforme los años pasaron, entendió la naturaleza sombría de su hijo.

Un berrinche podia convertirse en una masacre.

Por esa razón, una corazonada le dijo que atrapara a la mujer peli rosada cuando la conoció. Y sus sospechas se confirmaron cuando Naruto la vio por primera vez.

Solto un suspiró pesado mientras seguia revisando algunos documentos.

Aquel matrimonio no habia sido mas que un acuerdo mutuo. Si, habia quedado prendado de aquella chica, pero el amor que tenia por su esposa no dejaba entrar a nadie. Sin embargo, necesitaba de la habilidad de Sakura para controlar a su hijo. Y la unica forma para sacar a una novicia de la iglesia, era con el matrimonio.

" — 5 años. Cuando terminen podras irte y vivir como quieras. — Dijo tras haber terminado de hablar con la mujer de cabello rosado. "

No esperaba que viviera más de un par. Puesto que todas las sanadoras que habia conocido no lograban vivir mas que eso.

Un atisbo de culpa llego a su mente. Si, habia traido a Sakura con una mentira.

Cuando establecio aquel contrato matrimonial, le habia dicho que su hijo no tenia buena salud y necesitaba constante cuidado y tratamiento santo. Sabia, que si le decia la verdad sobre su hijo, se negaria rotundamente. Aquella chica peli rosa era ingenua. No estupida.

La tos que broto de su pecho sono ronca y humeda. La sangre broto.

Aquel ser dentro de su hijo terminaria deborandolo justo como a Kushina. Se alimentaba de todos a su alrededor.

Notas:

Minato(37), Naruto(12-19), Sakura(19-26)