"¡Viejo! ¡Saluda a mi hija, tu sobrina!"

Una mujer con apariencia de niña de 17 años escupió el té en su boca. Sus gafas de montura roja crujieron cómicamente y su mandíbula cayó al suelo.

Tenía cabello violáceo azulado y ojos azules y vestía un qipao azul y blanco acompañado de calzas azul marino.

A su lado, una niña de 10 años con ojos marrones y cabello castaño recogido en una coleta estaba tan sorprendida como su maestro. (La foto es de ella de 15 años, imagínala más joven jajaja).

"S-Shiki-san... Puede que te haya oído mal, pero ¿te importaría repetir lo que dijiste?" (Shiki o Senti como en Herrscher of Sentience).

"¡Sí! ¡Saluda a mi hija!" Shiki levantó a Stelle frente al rostro de la mujer. "¡Tu sobrina, Stelle!"

La mujer tosió sangre que se escapaba por la comisura de sus labios.

Ella no lo escuchó mal.

"¡Hola tía! ¡Es un placer conocerte!" Stelle saludó a la mujer.

"H-H-Hola..." La mujer tartamudeó robóticamente. Se volvió hacia su discípulo. "S-S-Sushang, ¿te importaría jugar con Stelle? Necesito hablar con Shiki-san..." Preguntó con una sonrisa muy forzada.

"S-sí, Maestro Fénix... ¿Stelle? ¿Quieres jugar en la habitación de al lado?"

La niña luchó en los brazos de Shiki antes de caer al suelo.

"¡Seguro!" En su lugar, arrastró a Sushang y salió corriendo de la habitación riendo.

"*hic* Estoy tan orgullosa de mi hija..." Shiki se secó una lágrima falsa solo para que el Maestro la interrumpiera con una sonrisa que no llegó a sus ojos.

"¿Podrías decirme cuándo la tuviste? ¿Y por qué sólo me lo has dicho ahora?"

"¿Eh? ¿Qué quieres decir, viejo?"

"¿Quién es el padre de la niña? ¿Y por qué no me dijiste que te acostaste con alguien?"

"¿Padre? ¿Qué quieres decir? ¡Y yo no me acosté con nadie!"

"Cierto, no te acostaste con nadie y de alguna manera Stelle es concebida..." Ella puso los ojos en blanco.

"¡ARRRRRGHHHHH! ¡TE DIJE QUE NO ME DORMÍA CON NADIE!"

"¿¡Y CÓMO VAS A EXPLICAR A ESTE NIÑO ENTONCES!? ¡DEFINITIVAMENTE TIENE TU APARIENCIA Y PERSONALIDAD!"

Shiki gritó al ver la 14ta Llave Divina, las Zapatillas de Taixuan, en su mano antes de finalmente admitirlo.

"Yo... la encontré en el rancho y la llevé conmigo para jugarte una mala pasada..."

La mujer suspiró cansada antes de calmarse.

"¿Le dijiste que siguiera el juego?"

Shiki negó con la cabeza.

Fue entonces cuando escucharon golpes en la puerta principal y, sin esperar a que respondieran, Shiki abrió la puerta.

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"Ohooo", comenzó Shiki y hizo crujir sus nudillos. "¿Es esa época del mes otra vez?"

"Bueno, se podría decir que sí." Respondió Jingliu antes de indicarle a Naruto que diera un paso adelante.

"¿Quién es la momia?" Shiki levantó una ceja cuando el Maestro Fénix suspiró.

"No seas tan grosero." Phoenix reprendió antes de volverse hacia tres recién llegados. "Jingliu, Skirk. Ha pasado un tiempo." Los dos asintieron con la cabeza a la mujer frente a ellos.

"¿Y quién es el pequeño, si se me permite preguntar y está...herido?"

"Realmente lo ha sido, Fu Hua. ¿50 años, creo?" El maestro cuyo nombre era Fu Hua asintió antes de que Jingliu continuara. "Naru, preséntate y cuéntanos por qué te ves así." Hua levantó una ceja ante el nombre cariñoso con el que se dirigió al chico.

El pelirrojo asintió antes de inclinarse respetuosamente ante las dos mujeres frente a él.

"Hola, soy Uzumaki Naruto, el Maestro Jingliu y... el aprendiz del Maestro Skirk."

Fu Hua asintió y le sonrió al niño, pero también se sorprendió de que tanto Jingliu como Skirk aceptaran un aprendiz.

"En cuanto a la razón por la que me veo así es porque usé el chakra de Kurama para matar a Heliobi y me desprendió toda la piel... básicamente ahora soy todo carne sin piel".

Mientras sus maestros tenían una mirada impasible, tanto Hua como Shiki le sudaban.

"¿Estás bien cocido?" Este último le preguntó y Naruto la miró inexpresivamente.

"Me estás haciendo la misma pregunta que Stelle... Hablando de ella, ¿está aquí?"

"Ella está en la otra habitación, jugando con el alumno del veterano".

Naruto suspiró aliviado. A pesar de que sólo la conoce desde hace unos días, ella es básicamente la hija adoptiva de Kafka, lo que significaba que era su... ¿hermana? ¿Hermanastra?

Hua se arrodilló frente al niño.

"Hola Naruto, mi nombre es Fu Hua pero puedes llamarme Hua". Naruto asintió hacia la mujer. "Y esta que está a mi lado es Shiki-san... puedes decir que ella soy yo..."

"¡Pero mucho mejor ya que soy el mejor y más fuerte del mundo!" Shiki interrumpió con una sonrisa, haciendo que Naruto se quedara inexpresivo con ella.

Jingliu vio la expresión de incredulidad en su rostro y le puso una mano en el hombro.

"Es cierto. Shiki y Hua son mucho más fuertes que nosotros dos juntos, Naru".

El pelirrojo giró la cabeza hacia su maestro. "Espera, ¿en serio?"

Ambos maestros asintieron con la cabeza.

"Por favor, no se minimicen". Hua se rió entre dientes de los maestros de la pelirroja.

"Ambos tienen más de 50.000 años y uno se puede imaginar cuánta sabiduría y fuerza han acumulado a lo largo del tiempo". Agregó Skirk de la nada, obteniendo un grito ahogado del chico que se quedó boquiabierto al escuchar su edad.

"¡Eso sólo se aplica a los veteranos ya que soy muchísimo más joven!" Shiki refunfuñó mientras la ceja de Hua se arqueaba ante la mención de ello.

Fue entonces cuando Stelle apareció de la nada y acarició el pecho de Hua, para su sorpresa, trepando hacia Shiki y acariciando el suyo también antes de tocar el suyo como si estuviera comparando algo.

Se volvió hacia las dos ancianas y les dirigió una mirada engreída.

"Imagínate tener el mismo tamaño de senos que un niño..." susurró Stelle, pero Naruto y las mujeres en la habitación lo escucharon claramente con el rostro del primero palideciendo y sus maestros con una pequeña sonrisa en su rostro.

Los ojos de Hua estaban ensombrecidos por su flequillo mientras murmuraba la palabra "injusto" repetidamente y en cuanto a Shiki, ya estaba persiguiendo a Stelle con una zapatilla en la mano.

Sushang estaba asombrado de cómo una niña de su edad logró escapar sin su conocimiento y actualmente estaba tratando de ayudar a Shiki a atrapar a Stelle.

Luego, Jingliu se aclaró la garganta, llamando la atención de Hua.

"Celestial, en realidad, vinimos aquí con una solicitud".

Hua arqueó una ceja.

"Queremos que entrenes a Naruto en las artes marciales Taixuan si es posible".

Naruto dejó caer la mandíbula. ¿¡Un tercer maestro!? ¡Ni siquiera había empezado todavía con Skirk y ya estaba por conseguir un tercero!

"Pero, ¿no son ustedes dos sus amos?" -Preguntó Hua.

"Sí, pero no le vendría mal tener otro maestro, ¿verdad?"

Las tres mujeres miraron a Naruto.

"¿Qué tan lejos está en tu entrenamiento?" Hua le preguntó a Jingliu con los brazos cruzados.

"Seis meses y le permitiré pulir sus conceptos básicos mientras entrena su mente y su cuerpo".

Hua asintió.

Ella entendió muy bien lo importante que eran los conceptos básicos en todo.

"También está entrenando en las artes Shinobi de su mundo natal basándose en los recuerdos de sus padres fusionados con él".

El Celestial tarareó. La información sobre el niño despertó su interés. Sabía que tanto Jingliu como Skirk venían de mundos diferentes, por lo tanto, al Fénix no le sorprendió escuchar que Naruto era igual, no, eran las artes Shinobi las que la intrigaban.

"Y... ¿por qué, si puedo preguntarlo, lo estás entrenando tan duro a una edad tan temprana?" Preguntó Hua, curiosa por las razones de sus compañeros maestros.

Skirk miró a Jingliu, quien asintió levemente.

"Es un Otsutsuki, descendiente de uno, para ser exactos." Respondió Skirk, obteniendo una mirada de sorpresa de la mujer. "Y además, de alguna manera, tengo el presentimiento de que Naruto estará involucrado en muchas cosas..."

Hua asintió lentamente. "Otsutsuki... He oído hablar de mitos y leyendas sobre ellos en la era anterior..." reflexionó Hua sombríamente. "Se decía que viajaron por universos, dimensiones y mundos para representar la Voluntad de Otsutsuki y existieron antes de la creación del universo mismo".

"Estás muy bien informado, Celestial. Aquí pensé que la gente de este mundo no habría sabido de ellos." Jingliu asintió, impresionado con el Fénix.

"Era una historia transmitida de generación en generación en el dojo de mi padre... y por lo que descubrí después de unirme a Fire Moth, el Otsutsuki era la existencia más antigua, incluso anterior al Mar de Quanta y al Árbol Imaginario y existía. fuera de ellos... pero ese era un rumor no confirmado y el Dr. Mobius decidió no seguir adelante ya que ya no había Otsutsuki vivo..."

"Y espero que no le cuentes esto al médico". Hua sacudió la cabeza con una sonrisa.

"No te preocupes, será un secreto entre nosotros tres." Hua se arregló los anteojos. "En cuanto a su solicitud, acepto entrenarlo".

Hua se volvió hacia Naruto, quien inclinó la cabeza confundido hacia un lado.

"Dado que mis alumnos no podían usar la energía Honkai como yo, ideé un método para que pudieran usar Taixuan Eminence utilizando su chi, pero ninguno logró hacerlo". Se arrodilló frente al niño y puso su mano sobre su pecho. "Me pregunto si serías capaz de hacerlo con tu chakra... y si pudieras, ¿será tan fuerte como el mío?"

"Umm..." interrumpió Naruto. "¿Cómo vamos a organizar mi horario? Quiero decir, todavía necesito estudiar, ¿verdad maestro?" Naruto se volvió hacia Jingliu.

"Clon de sombra." Dijo Jingliu, recordándole al niño su habilidad.

Hua se arregló las gafas, intrigada por este clon de sombra antes de que Naruto hiciera un clon de él como le preguntó Jingliu.

"Todo lo que su clon aprenda se le transferirá, pero viene acompañado de fatiga".

"Interesante..." reflexionó Hua mientras tocaba y acariciaba la mejilla del clon, haciéndolo ronronear. Como la piel de su rostro ya se estaba curando, el tacto no lo lastimó.

Hua sonrió con cariño antes de acariciar más al clon y él se inclinó hacia la mujer pidiendo más.

Sus orejas y nueve colas aparecieron, sorprendiendo un poco a Hua pero aún así continuó con sus caricias.

Skirk, que no sabía que Naruto podía ronronear ya que ella solo lo entrenaba con sus colas, comenzó a acariciar las mejillas del original que estaba con la guardia baja.

Comenzó a ronronear con orejas y colas apareciendo.

Jingliu se unió para hacer lo mismo con el original y en poco tiempo, Shikii, Stelle y Sushang se unieron a ellos después de ver a las tres mujeres mayores acariciando a Naruto, que ahora tenía colas y largas orejas de conejo.

Finalmente, el día terminó con las mujeres y niñas siendo curadas por sus colas esponjosas.

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"Araa~" Una mujer con cabello largo, rizado y verde, vestida con una bata de laboratorio y anteojos, tarareaba en su laboratorio leyendo el informe de su asistente. "¿Es correcta esta lectura, Klein?" Preguntó, recibiendo un asentimiento de una niña pequeña con cabello verde ondulado que llevaba una bata de laboratorio holgada con reflejos verdes.

"¿Monte Taixuan? Entonces, el lugar de Hua." Una sonrisa inquietante apareció en su rostro. "Espérame, rata-san."

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Unos días más tarde, se pudo ver a Naruto entrenando con Sushang en el área de entrenamiento en el Monte Taixuan con Hua y Shiki como árbitros mientras Stelle simplemente comía los bocadillos que este último le dio ya que no estaba interesada en entrenar.

Se pudo ver que a pesar de tener la misma edad, Sushang dominaba fácilmente a Naruto en las artes de las espadas, pero ninguno de los dos pudo asestar un golpe ya que el último era demasiado rápido para que el primero lo atrapara.

"¡Dejen el juego del gato y el ratón y golpéense ya!" Shiki gritó ya que lo estaban arrastrando demasiado.

Hua le hizo sudar una gota a su hija. Sí, hija, incluso si Shiki lo negara.

El juego del gato y el ratón, como lo llamó Shiki, continuó durante otros 30 minutos hasta que Sushang se agotó y Naruto logró darle un golpe en la cabeza con un fuerte ruido.

"¡Eso duele!" dijo la niña mientras rápidamente se acariciaba la cabeza.

"¡Finalmente!" Naruto aplaudió con los puños en alto.

"¡Sólo me ganaste porque tienes más resistencia!" Sushang hizo un puchero.

Los dos estudiantes de Hua y Shiki discutieron antes de escuchar a Hua aplaudir mientras Shiki perseguía a Stelle, quien no compartía sus bocadillos.

"¡Maestro Fénix/Hua-sensei!"

"Buen trabajo, ustedes dos." Hua elogió y los dos estudiantes se sonrojaron. "Naruto, lograste derrotar a Sushang debido a tu resistencia y cansaste a tu enemigo. Esa fue una forma de ganar contra alguien más fuerte que tú y lo hiciste muy bien". El niño asintió con la cabeza hacia el maestro antes de que este se volviera hacia la niña. "Sushang, no entiendo por qué fuiste fácil contra Naruto, ¿te importaría decirme por qué?"

"Uhm... simplemente no quiero asustar a mi compañero discípulo como los demás porque me excedí..."

Naruto frunció el ceño. Sabía que algo era extraño, pero no esperaba que ella fuera amable con él.

"Oye, ¿por qué iba a tener miedo de ti si fueras con todo contra mí? Quiero decir, ¿no es así como funciona el entrenamiento? Tenía que esquivar la espada de la Maestra Jingliu que deja cicatrices en la tierra cada vez que entrenaba con ella".

"¿En realidad?" Sushang miró a su compañera discípula. "¿No dejarás de ser discípulo del Maestro Fénix incluso si hago todo lo posible en nuestro entrenamiento?"

"No lo haré... pero... tengo curiosidad por saber qué tan fuerte eres cuando no te reprimes..."

Sushang miró a Hua, quien suspiró pero asintió con la cabeza a la niña.

Volvió a un lado y volvió a ser árbitro.

"Uh... ¿qué estás-" Naruto vio a Sushang haciendo una señal con la mano que conocía como medio carnero antes de que se formaran espadas etéreas en el aire, llenando el área de entrenamiento antes de apuñalar el suelo. Sushang saltó a la empuñadura de una de las espadas y le sonrió a Naruto, quien la miró boquiabierto.

"Ahora bien, Naru, este es mi Sword Array, desafilé las hojas pero aún dolerán, así que asegúrate de esquivarlas todas ~"

"¿E-Eh?"

Una espada etérea flotó y se disparó hacia Naruto, quien rápidamente bajó la cabeza para esquivarla. Luego, sus ojos vieron que ya había otra espada en el lugar de la anterior.

"Uh..." El niño miró a su compañero discípulo que todavía le sonreía. "Sea amable conmigo, ¿por favor?"

"...No~"

Naruto miró a Hua, quien solo le sonreía.

Más espadas se dispararon hacia él y esa mañana, el grito de Naruto resonó por todo el Monte Taixuan.

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El Uzumaki gimió mientras Sushang cuidaba sus moretones. Si bien logró esquivarlos al principio, las espadas seguían acercándose a él implacablemente. Sólo hacía falta uno para detenerlo y todas las espadas lo golpearían.

"Espero que no hagamos eso muy a menudo..." El niño hizo una mueca cuando Sushang aplicó la medicina.

"Oh no, no te preocupes. Volveremos a luchar con espadas, pero esta vez no me contendré como hoy". Sushang le sonrió.

Naruto puso los ojos en blanco antes de buscar a su amigo.

"Hua-sensei, ¿sabes dónde está Stelle?" Preguntó el niño, sin darse cuenta de que Sushang hacía pucheros a su lado mientras cuidaba sus heridas.

"Shiki-san la llevó al rancho para alimentar a los Fénix". Hua les sonrió a los dos mientras tomaba un sorbo de su té. Estaba planeando un horario de entrenamiento para Naruto después de que Jingliu y Skirk le dieran su propio horario. "Shiki-san los habría traído a los dos, pero al ver la condición de Naruto, decidió no hacerlo".

"Veo-"

THUD!*

"¡Viejo! ¡Esto es malo!" Shiki irrumpió en la casa con Stelle bajo el brazo.

Hua se puso de pie inmediatamente. "¿Qué pasó?"

"¡El Hyperion se acerca!"

Los ojos del Celestial se abrieron antes de volverse hacia Naruto con una mirada sombría.

"Naruto, escucha atentamente. Pase lo que pase, no salgas sin que yo te lo diga, ¿entiendes?" Dijo Hua gravemente.

La pelirroja asintió antes de que Shiki pusiera a Stelle al lado de Naruto.

"Sushang, estarás a cargo aquí hasta que regresemos".

"Sí, Maestro Fénix."

Luego, Hua se volvió hacia Shiki y se saludaron con la cabeza antes de salir de la casa y dirigirse a las llanuras donde aterrizaría el barco. Había pasado algún tiempo desde que vinieron de visita y, por lo general, no serían buenas noticias, especialmente porque la llegada de Naruto ocurrió hace unos días.

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"Ha pasado un tiempo, Hua~" dijo una mujer con un par de ojos de color rosa verdoso claro antes de girarse hacia Shiki, quien parecía incómoda. "Herrscher, ¿has decidido ser mi rata de laboratorio~?"

"¡No! ¡Definitivamente no!" Shiki se cruzó de brazos antes de esconderse detrás de Hua.

La Celestial sonrió levemente antes de adoptar una mirada seria.

"Dr. Mobius, ha pasado un tiempo".

"Ara~ seguro que lo es~"

Continuará