En otro castillo.
- Así que eso paso. - decía una mujer pelimorado mientras unas sirvientas le ponían su vestido.
- si, el héroe del escudo no solo soporto el ataque sorpresa de la princesa mei, si no también derrotó fácilmente al héroe de la lanza. - dijo una chica con una máscara cubriéndole solo los ojos.
La reina de melromarc asentía escuchando toda la información que le daba su espía. - ¿Hay algo más acerca de ese héroe del escudo?
- he escuchado que aquel héroe del escudo es un dios. - dijo la espía dejando sorprendida a la reina.
- ¿Un dios?.. el hechizo de invocación fue así de fuerte para invocar una deidad... No, sería imposible. - se decía mirellia para si misma. - si las cosas siguen así, el héroe del escudo puede volverse nuestro enemigo. Sigue vigilando y mantenme informada.
- cómo ordene majestad. - decía la chica para después desaparecer.
Eso mismo día, hércules se encontraba en el trono del rey junto a los demás héroes recibiendo sus recompensas.
- el héroe de la lanza recibirá cuatro mil monedas de plata. El héroe del arco y la espada reciben tres mil monedas. Y para el héroe del escudo quinientas monedas. - decía el rey. - no obstante... Los daños a la arena y por el ataque a los caballeros se le negara la recompensa.
- (es peor que el rey eurystheus.) - decía Hércules en pensamientos.
Antes que el dios griego diga algo era interrumpido por itsuki y rem.
- eso sería injusto. - dijo itsuki. - cuando el fue quien defendió el pueblo.
- además, que mein fue la primera que hizo trampa al haber lanzado ese hechizo. - dijo rem.
- tks... Bien, el héroe del escudo puede tomar su recompensa. Ahora largo de aquí. - decía el rey.
Hércules y rhaptalia salían del castillo para después dirigirse a tienda del esclavista mientras esté le quitaba la marca a rhaptalia.
- ¿Está seguro de esto, señor hércules? - pregunta la mapache.
- ya no es necesario que tengas está marca, no quiero piensen que estás por obligación. - dijo hércules.
- me sorprende ver qué aquella niña delgada creciera tanto en este tiempo. - comento el esclavista. - aún que no fuera virgen de vendería por veinte monedas de oro.
- soy virgen!! - reclamo rhaptalia.
- entonces que sean treinta.- dijo el enano mirando al dios.
Hércules voltea su gira su cabeza restándole importancia y en eso mira una caja de huevos. - ¿Y esto?
- son huevos de mounstro, por cien monedas de plata puede conseguir un filolial. Si tiene suerte puede conseguir un dragón con un valor de veinte monedas de oro. - explicó el esclavista. - ¿Quieres uno?
Después de comprar un huevo, se dirigía a la tienda de medicinas en dónde el dueño les entrega un libro en agradecimiento por ayudar a su familia en riyute.
- por cierto, la señora de la tienda de magia quiere agradecerte que salvarás a su nieto. - dijo el dueño de medicina.
- está bien, gracias. - decía hércules retirándose de la tienda.
Unos momentos después estarían en la tienda de magia en dónde la maga del lugar mira las aptitudes de ambos.
- las de la señora son luz y oscuridad. Cómo es una raccoon, le recomiendo magia ilusoria. Y del héroe del escudo son protección y sanación aún que... - decía la maga mientras miraba su bola de cristal. - puedo ver qué el héroe del escudo tiene un poder divino.
- eso... Tal vez lo a escuchado pero soy un dios que fue invocado con los otros héroes. - explicó hércules mientras la maga se sorprendía. - lo sé, es extraño pero soy un humano que alcanzó la divinidad. Una larga historia y con algunas cosas que me llevaría tiempo explicar, pero prometo defender la gente de este mundo.
- de acuerdo y tomen esto. No lo vea como un gesto de adoración, es en agradecimiento de que salvarán a mi nieto. - decía la maga mientras le entrega un grimorio a ambos.
Hércules salía de la tienda mirando el contenido del libro. - tampoco puedo leerlo.
- yo podría ayudarle a leer. - dijo rhaptalia.
- de acuerdo, pero descansemos en riyute y mañana subamos de nivel. - dijo hércules.
Al llegar al lugar miran como las personas reconstruían el pueblo mientras que ven también como algunos aldeanos estaban frente al cuerpo de la quimera; la que los héroes derrotaron en la ola y hércules aprovecho para conseguir el escudo de quimera y león de menea. Hércules decidía acercarse para pedir conservarlo para tomar los huesos y la carne de la criatura. Pedían después una habitación para descansar y allí la mapache ayudaba al dios de la fuerza aprender el idioma de ese mundo. A la mañana, rhaptalia despertaba a hércules viendo como el huevo empezaba agrietarse, saliendo una especie de ave el cuál salta hasta ponerse en la cabeza de hércules.
- debe pensar que eres su padre. - dijo rhaptalia en tono burlón.
- creo que es normal al ser lo primero que mira al nacer. - decía hércules rascando su mejilla al ver al pájaro acomodándose en su cabeza.
Después de dos días, ambos se dedicaban a subir de nivel al igual que el filolial mientras también reunían materiales. Ya en el tercer día filo había crecido al tamaño de un filolial común.
- ¿Quien diría que creciera tanto en estos tres días? Verdad filo? - dijo hércules mirando al pájaro.
- ponerle filo solo por qué es un filolial. - dijo rhaptalia.
- bueno, necesita un nombre y no parece molestarle. - comento el dios. - ¿Me permites? - pregunta mientras toma con cuidado una pluma del pájaro y le quita una pluma haciendo que este sobresaltara.
- ¿Que hará señor hércules? - pregunta rhaptalia.
El dios de la fuerza acerca la pequeña pluma haciendo que el escudo la absorba y con eso consigue un escudo de filolial pero también consigue otro habilidad del éxodo.
¡Éxodo desbloqueado!
Sexto escudo: Aves de Estinfalo.
En eso, ven como las personas se reunían y al ver de que se trataba la conmoción miran que se trataban de malty y motoyasu acompañados por una escolta de caballero mientras la peliroja mostraba un pergamino.
- por orden del rey, el héroe de la lanza fue nombrado gobernador de estas tierras. - decía mein. - dicho eso deben pagar peaje para la reconstrucción del lugar, serán cincuenta monedas de plata por entrar y salir.
Al decirlo todos los aldeanos estaban indignados ante el precio tan alto.
- ¿Se atreven a oponerse ante un mandato del rey? - reclamo mein.
- obviamente. - comento hércules desde la distancia. - una noche en este pueblo cuesta una moneda de plata, lo que piden es como estar cien días.
Al decirlo, lo aldeanos le daban la razón al héroe del escudo.
- ¿Osan desafiar al reino? - reclama mein levantando su mano y haciendo que los caballeros apunten con sus lanzas a los aldeanos.
Antes que el dios de la fuerza se le acercaba mein era rodeada por un grupo de personas que usaban capuchas con capaz negras y cubrían sus caras con unas máscara. Uno de ellos le entregaba a la peliroja un pergamino, está la toma y lo leía mientras se ve que su expresión cambia a uno de enojo.
- héroe de escudo! Te desafiamos por el control del pueblo. - dijo mein.
Hércules mira a los aldeanos esperando que acepte sin quedarle opción. - de acuerdo.
- ¿Está seguro señor hércules? - pregunta rhaptalia.
- no quisiera involucrarme pero siendo con ellos no tengo opción, además filo parece estar motivado. - decía el dios mirando al filolial como mira al dragón de motoyasu con desprecio.
- ¿Encerio crees que esa ave podrá vencer mi dragón? - decía motoyasu acercándose mientras se burla de filo.
En eso, filo le daba una patada una patada en los bajos al rubio haciendo que salga volando hasta caer a en un bulto de paja.
- bueno, servirá de apoyo contra las olas. - decía hércules mientras se ponía en línea de salida.
Ambos héroes se ponían al lado mientras escuchaban las reglas siendo el primero en dar tres vueltas alrededor de la villa gana. La carrera daba inicio siendo hércules quien estaba teniendo teniendo ventaja empezando a correr más rápido que el dragon, siendo igual que la historia original hércules logra pasar las trampas que los caballeros de mein le ponían logrando ganar la carrera. Los aldeanos estaban felices al poder seguir con la restauración del pueblo hércules tocando el cuerpo del ave para felicitarla por la victoria que dió también pero en eso sentía algo raro y al verlo bien mira que el cuerpo del filolial estaba gordo.
- hicieron trampa, no sabíamos que el cuerpo del filolial era tan gordo. - reclamo mein mirando al dios.
- ustedes fueron los unicos que jugaron sucio con agujeros y cosas raras. - dijo hércules.
- no se de que hablas. - decía la peliroja fingiendo inocencia.
- el héroe del escudo tiene razón. - decía una de las figuras enmascaradas apareciendo frente a la peliroja. - hay rastros de magia.
- ¿No es obvio? Ese criminal hizo algo. - dijo mein tratando de excusarse.
- no, el solo puede usar magia de sanación y protección. La raccoon luz y oscuridad. - dijo la enmascarada. - está claro que el héroe de la lanza cometió una infracción.
Hércules miraba a las personas preguntándose quienes eran mientras que mein sin más por hacer decide irse del lugar junto a motoyasu.
- héroe del escudo, muchas gracias no se cómo podríamos agradecerle por esto. - decía el gobernador del pueblo.
en eso, hércules siente como filo le toca su hombro llamando su atención y hacía que gire su cabeza viendo un carreta. Mientras que alistaban y arreglaban el carro, el gobernante se acerca al dios de la fuerza mientras sacaba una placa delgada siendo el permiso para comerciante, hércules toma la placa mientras le agradecía al hombre. El grupo salía del pueblo estando sobre la carreta hasta que hicieron una parada debido a que rhaptalia se sentía mareada.
- lo siento, por mi culpa tuvimos que parar. - dijo rhaptalia.
- solo es cosa que te acostumbres, descansa ahora mañana seguiremos. - decía el semidios mientras se sentaba enfrente de una fogata.
- si. - dijo la mapache
Hércules mira la placa del comerciante recordando lo que le dijo el gobernante. - será de ayuda, aún que no se algo sobre comercio.
- ¿Deberíamos buscar un compañero? - pregunta rhaptalia.
- sería fácil sin que la mala reputación afectará. - decía el dios suspirando un poco.
Al día siguiente.
Hércules estaría durmiendo mientras que dentro de su sueño se podía ver como el semidios estaba sin su capa pero su escudo, levanta su mirada viendo alguien estaba enfrente a el, dando la espalda. Aquella persona era un peliverde y su atuendo era ropa deportiva pero al girar su atuendo cambia a la de un aventurero, este tenía la capa verde viendo que su aspecto era de un adolescente como los otros héroes pero lo que le sorprende era ver que tambien tenia el escudo. Hércules no entendía lo que pasaba mientras el chico empezaba murmurar unas palabras que no podía entender.
- señor hércules... Señor hércules!
El dios de la fuerza se despierta mirando a rhaptalia. - lo siento me quedé dormido.
En eso, miran como había una niña de pelo rubio acostada aún lado de ella lo que los sorprendía.
Unas horas después.
El grupo se encontraba en la tienda de armas mirando al dueño del lugar presentando a una niña rubia junto a ellos. El herrero se preguntaba quien era ella mientras le ofrecía una parte de su emparedado, gran error debido a que filo se transforma comiendo todo el emparedado.
- lo siento, te compraré el almuerzo. - decía hércules disculpándose mientras toma de la cabeza a filo haciendo que ella también se disculpé.
El herrero salía de su asombro mientras le explicaban que filo era una del tipo reina filolial. - no viniste aquí a presumir esa reina, ¿Verdad?
- quisiera ropa, cada vez que se transforma rompe la ropa que le doy y a este paso me quedaré sin dinero. - explicó hércules.
- ropa especial, no tengo. Eso es trabajo de una modista, su tienda está calle abajo. - dijo erhard.
El trío le agradecía mientras ambas chicas salían del lugar dejando a hércules con el dueño de la armería.
- ¿Puedo preguntar algo?.. habido otra persona invocada con ropa extraña como los otros héroes? - pregunta el dios.
- no, además de ti con ese conjunto de gladiador. - decía el herrero cruzando los brazos. ¿Por qué?
- por nada, solo curiosidad. - decía hércules retirándose del local mientras se preguntaba que era ese sueño.
