Esta historia ya está terminada, así que habrá actualizaciones constantes para poder tener todos los capítulos de este fic por aquí.
Gracias por leer y nos veremos después.
Aomine sin querer me salió muy occ, sorry uwu
Aomine Daiki se sentía abochornado y avergonzado. Pero su mirada tosca y salvaje te decía otra cosa.
Luego de su graduación de Teiko -y separación de la GoM y su mejor amigo Kuroko Tetsuya- estaba decidido a no volver a pisar una cancha de baloncesto sin tener un rival a quien vencer.
Nunca iba a admitirlo, menos a la molesta Satsuki pero se sentía solo.
Luego del desastroso tercer año e incluso antes de este se sentía solo.
Sin Sakurai Ryou -su querido senpai y crush secreto- el baloncesto perdía sentido para él.
Entonces le llego su carta de aceptación a Too y todo cambio.
Nunca espero ver en su primer día de clases a su querido senpai. Mucho menos que este le reconociera y mucho menos que este le obligara a entrar al equipo de baloncesto.
Pero internamente estaba agradecido con Ryou por eso. O debería estarlo pero ahora, luego de tres meses no sabía si de verdad estarlo con el castaño.
Su actual novio solo se dedicaba a avergonzarlo. Luego de una cita y un beso robado de su parte a Sakurai fue inevitable no robarle un beso.
El primero para el moreno pero ¿podía decir lo mismo con Sakurai?
Después se lo preguntaría.
Por lo mientras, quería asesinar a su atento y atractivo senpai con la mirada.
»Aomine-san es lindo«
»Aomine-san se esfuerza por lo que quiere«
»Aomine-san no es un tonto, es más inteligente de lo que cualquiera pueda ser«
»Yo estoy muy enamorado de Aomine-san«
» ¡Desde que lo conozco, Aomine-san es tan genial!«
Y el sonrojo en las mejillas del moreno exploto. Por más que trataba de cubrir su rosto con las toallas que estaba usando para quitarse el sudor nadie pudo evitar ver lo avergonzado que estaba por las palabras del castaño mayor.
-Estúpido Ryou, cállate- se quejó el moreno abochornado mientras era abrazado por su novio siendo víctima de burlas y comentarios del resto de los titulares de Too.
-Pero es la verdad Aomine-san- comento el castaño sonriendo ante la vergüenza del moreno -Daiki-san, en sus tiempos de Teiko ha sido lindo, y no me importa lo que digan los demás- aseguro el castaño besando el cuello del moreno.
Aomine chasqueo la lengua dejándose hacer por el castaño mientras asesinaba con la mirada a todos los que se le quedaban viendo a él con SU senpai.
Si supieran que él y Ryou ya no eran vírgenes.
