31 de Octubre de 1990

Estaba esperando a Moody en la sala de entrenamiento que siempre ocupábamos para entrenar los últimos meses, era uno de los días más felices para los magos, era el día de la muerte de los Potter pero también el día de la caída de Voldemort.

-Alista tus cosas muchacha, hoy iremos a Azkaban- Gruñó Moody mientras entraba a la sala

-No me llamo muchacha, soy Tonks..-Siempre tenía que estar muy atenta a los movimientos, no escuchaba mucho lo que decía- Espere... ¿Qué? ¿Ahora?- Pregunté al darme cuenta del significado de sus palabras.

-Ahora... Tonks- Dijo mientras cojeaba hacia la salida, lo seguí ,ya que no tenía nada que empacar, iba a ser un viaje de un día.

-¿ Para qué iremos a Azkaban?- Aunque Moody no tenia una pierna, caminaba demasiado rápido- ¿Se ha fugado alguien de ahí?- Este se detuvo, aunque no se volteaba a verme, sabía que el me veía con su Ojo Mágico.

-El ministerio trata de saber que aprendices de Auror son los más prometedores- Dijo mientras seguía avanzando hasta el atrio- Azkaban es uno de los peores lugares que puedas ir, así que quien no lo soporte el ministerio lo sabrá y serán los primeros en marcharse- Terminó de decir extendiendo su brazo para que lo agarrara, íbamos a aparecernos.

El clásico chasquido de la aparición habíamos llegado una isla, la marea era lo suficientemente alta para hacer que una persona se ahogara si se llegase a caer, un frio algo conocido hizo que la piel se me erizara, eran los dementores que se deslizaban hacia donde estábamos, Moody había alzado su varita y había lanzado su Patronus que era un ave bastante brillante.

-Expecto Patronum- de la punta de la varita salió un conejo plateado- ¿Para qué hemos venido?- Dije mientras Moody seguía caminando delante de las celdas donde se encontraban los condenados.

-La prueba conste en, entrevistar a un condenado de alta seguridad- Dijo mientras subía unas escaleras- Estaremos en lo más alto- las escaleras parecían eternas, pero habíamos llegado al ultimo piso- A ti te tocó entrevistar a Bellatrix Lestrange- Dijo Moody mientras se detenía enfrente de una celda custodiada por dos dementores los cuales se alejaron cuando los Patronus estaban cerca de ellos.

-Vaya, vaya... Reconocería esa cara en cualquier lugar en donde estuviera- Dijo una voz aguda y chillona- La hija sucia de Andromeda- Una figura de las sombras se acercaba hasta que pude observarla mejor, era un a mujer con ropa sucia y desgastada, con sus ojos cafés desorbitados, cabello negro enmarañado y su cuerpo demasiado delgado para una persona normal.

-Aun estas lucida, eso me sorprende un poco, pero eso no es lo que importa vengo a preguntarte respecto a los casos de los Longbottom..- Su mano huesuda me tomo por la muñeca cual me sorprendió e hizo que Moody alzara su varita hacia donde estaba Bellatrix, pero lo detuve...qieria saber que es lo que ella quería de mi.

- Te pareces mucho a la traidora de tu madre, pero también te pareces al sangre sucia de tu padre... No importa, disfruta mientras puedas, porque cuando salga... Te mataré y a tu padre sangre sucia también y voy a ver como tu madre se derrumba- Cuando terminó de hablar soltó una risa histérica soltando mi muñeca para después calmarse - Ya les dije a tus superiores que no diré nada, no entiendo que es lo que buscan, no soy como el traidor de Karkarov.

-Eso no es lo que me importa, lo que a mi me interesa es saber quien más estuvo ahí, claro aparte de tu esposo y Barty Crouch Jr- Dije mientras leía la información que Moody me había dado, el cual decía todo lo que había pasado en el primer juicio.

-Deberías decirlo con más respeto, mestiza- Siseo Bellatrix- Ah los Longbottom, aun recuerdo la sinfonía de sus gritos, era hermoso pero a la vez triste... eran sangre pura y si no fuera por el lazo tan fuerte que tenían con Dumbledore, el señor oscuro los deseaba como unos de sus seguidores, pero fueron débiles y se unieron al inepto que tiene Hogwarts como director- Dijo Bellatrix.

-Sinfonía- Murmure para mí misma, pensando en Neville que se había con unos padres agonizantes- Es tu forma de decir que disfrutabas su agonía- Estaba enojada con Bellatrix quería que ella sufriera como lo hicieron los Longbottom.

-Solo dices lo que es obvio, pero deseaba algo mas de ellos que su simple sufrimiento- Dijo Bellatrix, no se había dado cuenta de que había dicho algo que podría afectar sus planes a futuro- Creí que habías llegado a ser Auror por tu inteligencia pero no eres más inteligente que la mayoría del ministerio que celebra por algo que no ha pasado... Será más divertido matarte- Volvió a reírse, no sabía que me pasaba pero el odio que tenía hacia ella hizo que quisiera que ella saliera para que tuviera una razón para matarla.

-Recuerda bien mis palabras... Si de alguna manera sales de este lugar, me convertiré en tu pesadilla, desearás tanto no haber amenazado a mi padre y de haber torturado a los Longbottom, pero tranquila tendré misericordia y te mataré así no podrás poner a mi familia de nuevo en tu maldita boca ¿Entendiste?- Dije mientras me acercaba más a la celda, al recuperar la razón me alejé de ella- No me dijo nada- me acerqué a Moody.

-Lo estaré esperando... mestiza- Soltó mi muñeca.

-Debemos irnos entonces-Dijo Moody pero una voz gritó.

-¡El Señor Oscuro se levantará de nuevo! ¡Él volverá para liberarnos! ¡Él nos recompensará más que cualquier otro servidor suyo! ¡Solo nosotros tratamos de encontrarlo! ¡Recuerda mestiza, todos los que amas morirán en mis manos!- Lo que decía no era del todo falso, él pronto intentará encontrar un cuerpo el cual habitar.

-Moody... Me está pasando algo extraño- No era normal sentir tanta furia, algo aterrador pasaba en Azkaban aparte de los dementores.

-Son los dementores- Dijo antes de que le explicara lo que había sentido- Incluso si no te succionan la alegría, cuando hay demasiados hacen que las personas se vuelvan más hostiles, algunos de los aprendices se desmayan o aun peor, los encerrados los hacen enojar a tal punto que algunos los atacan- Era razonable los dementores hacían salir lo peor de las personas, al igual que los condenados en Azkaban.

Estaba concentrada en mis pensamiento que no me había dado cuenta de que habíamos pasado enfrente de la celda y el prisionero que estaba ahí agarro mi brazo haciendo que me detuviera.

-Pequeña Dora- Dijo mientras me apretaba más el brazo, no reconocía la voz hasta que la figura que me agarraba dio unos pasos mas haciendo que la poca luz que entraba por las rejas que formaba la ventana, un hombre alto con los ojos grises y hundidos en sus cuencas, su cabello estaba despeinado y se veía muy desgastado.

-¿Sirius?- Pregunté sin creer lo que estaba viendo.

-Pequeña Dora... has crecido... no he recibido muchas cartas de ti desde Hogwarts- Dijo con tristeza.

-Tu...luces terrible, pensé que recibías mis chocolates- Dije mientras me acercaba a la celda.

-Los recibí, pero no podía racionarlos para toda la vida, hace unos meses se me acabo el ultimo... ¿Sabes cómo está Harry?- Dijo mientras volteaba hacia todos lados.

- Lo sé pero no puedo decirte, Moody es mi maestro y su ojo lo ve todo, en todos los ángulos, así que espera mi carta, te compraré mas chocolates... y Sin importar que pase, saldrás pronto , de eso me encargo yo... Fue un gusto verte de nuevo- dije mientras me soltaba de su agarre, necesitaba ir a Honeydukes...

Se que no había puesto muchas escenas en donde aparecía Sirius pero hice lo que pude.

Atte. Nana Banana