Hace 8 años
Edward la veía con lujuría desde la sala de su casa donde veía un partido de futbol con Charlie. Podía sentir su mirada quemando su piel mientras leía en el patio acostada sobre una manta, si, se acostaba a tomar el sol cerca a la puerta de vidrio que daba a la sala. Ella estaba jugando con fuego y Edward también lo sabía, este último se dejaba excitar cuando ella decidía limpiar su auto o tomaba duchas justo cuando él llegaba del trabajo junto a su padre. Sin embargo, trataba de fingir inocencia. Llevaban algunos meses con esa tensión que aumentaba con el tiempo en vez de disminuir, ninguno daba un paso para algo mas ya que no era correcto. Edward era el protegido de su padre y acostarse con su hija sería una traición. Bella no quería esos dramas en su familia pero si que vivía sofocada por esas miradas. Era una lastima...
Obviamente no podía ignorarlo por completo, eran una especie de amigos. Él era muy agradable y los temas de conversación fluían con mucha facilidad entre ellos. Pero ahí debía acabar todo. Debían ser solo buenos amigos.
Le dio una mirada disimulada a su público objetivo pero no lo encontró.
Con un suspiro frustrado siguió ojeando su libro sin leerlo realmente. Terminó por dejarlo unos minutos despues y se recosto concentrandose en recibir el sol en su piel.
Su tranquilidad se rompió cuando escucho las ruedas y el motor del auto de Tanya chillar rompiendo la armonía del lugar. Su auto se alejo de la casa tan acelerado que Charlie salió alterado tambien partió siguiendola.
- ¿Qué le pasa? - le pregunto a su madre cuando la vio salir de la casa.
- Salió corriendo sin decirnos nada. No sé que paso. - le contó preocupada y suspiro. - Yo pense que estas situaciones acabarían una vez ella acabara la adolescencia.
Bella no dio su opinión. No quería herir a su madre pero la verdad dudaba mucho que Tanya llegara a madurar teniendo tantos privilegios y engreimientos. Estos eran dados por ambos padres.
Poco interesada en los problemas de su hermana subió las escaleras rumbo a su habitación. Necesitaba una ducha.
- ¿Espiando? - le pregunto a Edward divertida porque lo encontro deambulando por su habitación. Llevaba un libro en la mano que termino tirando por la impresión.
- ¡No! Claro que no. Yo... - nervioso recogio el libro para ponerlo en su lugar.
- Hey si quieres leer... - miro la tapa del libro que estuvo sosteniendo. - ...Orgullo y Prejuicio, yo puedo prestartelo sin problemas. Nunca imagine que te gustaba Jane Austen.
El cobrizo se rascó la nuca.
- Yo... en realidad quería ver que clase de libros te gustan. Ya sabes...
Bella levantó una ceja ya que no entendía porqué quería saber algo así.
- Bueno ultimamente estoy leyendo clásicos. Es lo que hay aquí. En la secundaria solía leer estos libros una y otra vez. Sin embargo, tengo gustos variados.
Edward asintió nervioso.
Bella presintió que le mentía. Observo su habitación y la noto algo diferente, quizas él estuvo rebuscando ya que había un poco de desorden. Una maniatica por el orden y limpieza notaria facilmente cuando sus hojas y libros estaban desalineados.
- ¿Quieres ir a cine? - preguntó Edward distrayendola por completo. - Acaba de estrenar una pelicula... esta creo que es basada en un libro clásico. - carraspeó.
Bella lo observó unos segundos interminables.
- No creo que sea buena idea.
- ¿Qué...? - Edward nervioso como estaba saltó. - ¿Buena idea? Entiendo... ¿por James, verdad?
- ¿James? - preguntó ella un poco chillona.
- Sé que salen.
- Estas equivocado. Hemos tonteado un par de veces pero no estamos en una relación.
- No es lo que dice... James. - carraspeó incomodo.
- No he visto a James hace semanas...
- Uhm... - Edward la miró significativamente. - Entonces con una salida inocente no dañaremos a nadie.
- No creo que sea una salida inocente. - señalo levantando una ceja.
Edward levantó ambas cejas sorprendido.
- Es una invitación inocente. - le aseguró levantando las manos. - Cine y quizas... luego ir a cenar.
- ¿Y después... ?
El cobrizo sonrio fingiendo inocencia.
- Te traere a casa. No espero más.
- Si no eres sincero con tus intenciones, entonces no me invites a salir.
- ¿Siempre eres tan directa? - sonrió divertido.
- Solo si estoy interesada.
Edward sonrió en grande.
- Bien. En ese caso. - el hombre se paro derecho. - Me gustas. Quiero salir contigo. No inocentemente.
Bella oculto su sonrisa.
- No es buena idea. - repitió. - Sigues siendo Masen. El protegido de mi padre... esto sería muy traicionero de tu parte.
Edward palideció unos segundos antes de carraspear.
- Pedire su autorización para salir contigo.
- ¿Estas bromeando? No es el siglo...
- No, pero lo haré. Es lo que Charlie necesitara para aceptar lo nuestro.
- ¿Lo nuestro? Hace un minuto estabamos hablando de mis libros favoritos. Vas muy rapido, Masen.
- No tengo que ir lento si sé lo que quiero. ¿Cuando quieres hablar con tus padres?
Bella rio poniendo los ojos en blanco.
Actualidad
- ¿Estas hablando en serio? - gruñó molesta al encontrar a su hermana en la puerta de su departamento. - ¿Cómo demonios sabes donde vivo?
- Te sorprendería lo fácil que es seguirte cuando sales del trabajo, eres tan aburrida que vas directamente a casa.
- ¿Qué mierda quieres?
- Siempre tan directa, hermanita.
- No tengo paciencia. Dime que quieres y lárgate.
- Necesito que hables con Edward.
Bella levantó una ceja incrédula. Luego partió a reír sin poder creerlo.
- Eres increíble. - la critico. - Ve a solucionar tus problemas con él. Yo no tengo nada que ver.
- Tienes que ver porque es por tu culpa que Edward no quiere saber nada de Anthony.
- Las decisiones de Edward no...
- Él me dijo que no quiere una relación con su hijo porque te va a lastimar. Va a renunciar por completo a él.
Bella suspiró. Sabía que Edward estaba decidido a ello.
- Tanya, yo no...
- ¡Tú lo dejaste! ¡No tiene sentido que se aleje de Anthony!
- Es su decisión.
- No es lo que realmente quiere. ¡Conoces a Edward! ¡Él no es así! ¡Debes hacerlo ver su realidad! ¡Va a dejar a su hijo por ti! ¡Es una locura!
- Tranquilizate. - le gruñó Bella. - Mis vecinos no tienen que enterarse.
- Bella, estoy dispuesta a hacer miles de escandalos aquí y en tu oficina. No me interesa nada más que ver a mi hijo creciendo con su padre.
- ¿Es esa tu mayor preocupación? ¿No tiene nada que ver con tu supuesto amor por Edward? Creía que el sentimiento era reciproco...
Tanya enrojeció colérica.
- Edward es el padre de mi hijo, tiene que estar junto a él. Tiene que cuidarlo y amarlo. Es su sangre, no puede abandonarlo.
- Tengo entendido que pagara su manutención.
- ¡Tú has estado hablando de esto con él! Eres una maldita perra, como puedes pedirle que se aleje de su hijo.
- Detente, yo no le pedí nada. Él me dijo que lo haría, no es mi problema si lo hace o no.
- ¿Cómo puedes estar tan tranquila? ¡Le estas robando a Anthony la oportunidad de tener a su padre!
Bella respiró hondo buscando tranquilizarse. Esta embarazada, ten paciencia. Se repetía por dentro.
- Tanya, debes irte y...
- ¡Es injusto! ¡Mi bebé se quedara sin padre por tu culpa!
- Tanya...
- ¡Eres una maldita! ¡Deberías exigirle que sea un hombre y... !
- ¡¿Y qué, Tanya?! ¡¿Qué se case contigo?! ¡¿Qué le dé una familia a su hijo?! ¡¿Eso quieres oír, no es así?!
- ¡Es lo correcto! ¡Charlie nos crió así!
- ¡Mi padre nos crió para ser mujeres decentes! ¡Fallo contigo!
Tanya se acerco con toda la intención de golpearla pero Bella reaccionó y pronto la incapacito con una llave simple que Charlie le enseño años antes.
Su hermana grito desesperada.
- Maldita sea, Tanya. - gruño. - ¡Cállate y calmate!
- ¡Eres una maldita perra! ¡Mi bebé saldrá lastimado por tu culpa!
Bella ejercía toda su fuerza en controlar sus brazos y nerviosa la obligo a caminar hasta la puerta del departamento para echarla.
- ¡Le dire a Edward que quisiste matar a su hijo!
- Dios mío...
- ¡Te va a odiar por ello!¡Le contare y... !
- ¡¿Y qué Tanya?! ¡¿Me va a dejar?! No seas ridicula, no me interesa como reaccione.
- Sabes que él ama a su hijo y tú eres la única que lo separa de él. ¡Edward sera infeliz sin él!
- Vete, Tanya. - gruño empujandola afuera y cerro la puerta en su cara.
- ¡Tú harás infeliz a mi hijo y tambien a Edward si no haces algo! - Tanya le grito a trabes de la puerta antes de irse.
O
o
O
¿Qué les parecio? ¿Qué caradura Tanya, no? ¡Los leo!
