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- ¿Puedes dejar el teléfono dos minutos y hablar conmigo? - la voz de su marido la regreso a la realidad. Estaba concentrada en su teléfono porque Royce no le contestaba y habían quedado en llevar a Edward juntos al departamento. Sus suegros ya estaban alla esperandolos junto a Rosalie.
Estaban ya en el estacionamiento del hospital. Bella estaba muy molesta debido a la situación, seguir siendo responsable de alguna manera de su marido la irritaba. Solo había ido a firmar documentos del alta y ahora estaba atrapada con Edward.
- ¿De qué quieres hablar? - pregunto tensamente. Levanto la mirada hacia la puerta rogando a Dios que algun enfermero apareciera para ayudarlos a meter a Edward al auto, no quería seguir esperando. - Si es sobre la enfermera que te cont...
- No, no discutire sobre eso. Soy consciente que necesitare ayuda. - confeso decaído.
- Si. Ya oíste al médico. - volvió su atención al teléfono.
- Necesito que aclaremos que sucedera entre nosotros. - susurro levantando la mano para tapar su teléfono.
- Nosotros no existe.
Edward respiro hondo antes de hablar.
- Quiero que luchemos por nuestro matrimonio.
- Matrimonio que destruiste.
- Soy consciente de eso, tengo claro todo el daño que hice pero tambien hubieron momentos buenos en nuestro matrimonio.
- No puedo creer que creas que puedes hablarme de buenos momentos... - se burlo molesta. - No voy a tener esta conversación en este momento. Además tus padres y...
- Les pedí que nos dejaran solos todo el día. Se iran a dormir a un hotel. No los veremos hasta mañana.
- ¿Planeaste todo para que solo yo te llevara a tu departamento?
- Bella si estas aquí ahora es porque tenías planeado al menos dejarme instalado en nuestro departamento. Puedes negar que te importo pero tus acciones hablan por ti.
- Me iré en este momento y...
- O puedes quedarte e intentar solucionar esto.
- ¿Cómo podríamos solucionar esto? Estas siendo ilógico. Lo que hiciste no tiene arreglo.
Edward la miro profundamente.
- ¿Puedes escucharme solo dos minutos? Luego puedes irte, yo le dije a Royce que me deje hablar contigo y vendrá si se lo pido.
Bella levanto las cejas sorprendida por sus palabras. Royce no era su persona favorita.
- Bien. Dos minutos.
Edward se rebusco el pantalon para poder sacar una fotografía que tenía guardada.
- Cuando estuve en ese almacen muchos recuerdos pasaron por mi mente. - le entregó la fotografía. - ¿Recuerdas ese día?
Bella levantó las cejas bastante confundida. La fotografía era suya, de sus tiempos en la universidad. Era extraño que Edward la tuviera pero no imposible.
- Si. Papá faltó a la presentación del consejo estudiantil. Fue elegida como miembro junior. Estuve muy molesta pero aun así le envie esta foto. ¿Por qué la tienes tú?
- Charlie me la mostró hace muchos años, cuando me habló de ti y le pedí que me la diera. - le confesó respirando hondo. - Ese día fui yo la razón por la que no llego a tu presentación.
- ¿Tú? ¿Ya trabajaban juntos? - pregunto sin entender porque estaban teniendo esa conversación.
- No. - negó. - De hecho ni estaba en la escuela de policia.
- No entiendo nada, Edward.
- Tuve una sobredosis ese día. - le confesó con la voz mas cansada que le había escuchado alguna vez. - Él me encontró.
- ¿Te drogabas? ¿Qué demonios? Jamas me contaste eso...
- En realidad no lo hacía. Estaba pasando un mal momento, mi mundo estaba de cabeza y Royce estaba en malos pasos. Había consumido con él pero jamás a solas y ese día... simplemente quería desaparecer. Se me pasó la mano y combine cosas que no debía combinar.
- Papá jamás me habló de esto. Yo estuve molesta con él por semanas...
- Fue por mí. Bueno no solo por mí. Charlie hizo muchas cosas de las que estoy agradecido, tantas que yo no puedo... - lloró suavemente. - Yo no puedo lastimarlo. Y yo... te amo y esto es díficil. Mierda. - se quejó con un nudo en la garganta. - No tienes idea de lo mucho que me duele todo, Bella. Todo. Estoy agotado, solo quiero que todo pare.
- Mi papá te ama como un hijo. - Edward cerró los ojos adolorido por sus palabras. - Lo que hiciste con sus hijas no lo va a perdonar...
Edward abrió los ojos y la miró largamente.
- Prefiero que me odie. - le sonrió de lado para luego alejar la mirada.
- Edward, esta conversación realmente me esta confundiendo.
El cobrizo le señaló la fotografía.
- ¿Recuerdas la fecha exacta? Esta en la parte de atras.
Bella confundida la giro y vio la fecha.
- Fue el mismo día de tu cumpleaños. ¿Qué significa esto, Edward?
- Te amo, Bella. Eso significa. Siempre has sido mi prioridad, en más de un sentido. Y cuando estuve en ese almacen lo tuve mas claro. Yo te quiero para siempre, quiero que seas mía y yo tuyo. Bueno yo sé que siempre seré tuyo así me dejes. Hay cosas que he hecho y no podré dejar de hacer pero te juro que ninguna será con otra intención que no sea protegerte.
- Edward no ent...
- Bella eres mi mujer. Quiero llevarte lejos de toda esta mierda que sabemos que estallara. Yo estoy dispuesto a perderlo todo menos a ti. Sé que suena a una locura y que no entiendes lo que digo y en realidad espero que nunca me logres entender pero realmente quiero alejarte de todo esto. Prefiero que me odies a que salgas lastimada.
- Me mareas. ¿Te estas escuchando? Quien me lastimo fuiste tú.
- Lo sé. No borrare lo que paso y tampoco puedo impedir lo que vendra, sabes tan bien como yo lo que pasara cuando el hijo de Tanya nazca. Me declarara la guerra. Querra forzarme y te va a lastimar en el proceso.
- No te forzara a nada. Estas obligado a responder por tu hijo.
- Pagaré toda mi vida por su existencia.
- Él no tiene la culpa. No te expreses de esa manera.
Edward cerró los ojos agotado y suspiro.
- Nunca hemos hablado de como quedo embarazada.
Bella sintió que todo su cuerpo se tensaba hasta el punto del dolor. No quería ni imaginar la escena en su cabeza.
- No quiero saber donde ni cuando te la cogias a mis espaldas.
- Bella no he estado dentro de otra mujer desde que inicie una relación contigo. Nunca he tenido necesidad. Lo de Tanya es la cosa mas bizarra y asquerosa que me paso en la vida.
- Me estas mintiendo en la cara. ¡Ese hijo es tuyo! ¡Tú mismo me lo dijiste! ¿Cómo vas a... ? ¡De que demonios hablas!
- No dije que fuera mío. Te dije que era posible que lo fuera.
- Habla claramente. No me sigas mareando.
Edward señaló la puerta del hospital.
- Ya viene un enfermero a ayudarnos. En casa te explicare todo.
- No, me lo dices ahora y no me importa que ese hombre nos escuche.
- Bella... - le pidió viendo al hombre acercarse.
- Habla. Ahora. - le ordeno apretando su brazo.
- Es díficil de explicar. Fue todo un enredo.
- Resumelo.
El enfermo llego y pregunto amablemente por el auto. Bella le pidio que la siguiera mientras acribillaba a su marido con la mirada. No sabía que demonios le diría pero era obvio que no era lo único que le estaba ocultando.
Cuando el herido estuvo cómodo en su asiento Bella no tardo en volver a taladrarlo con una mirada molesta.
- Habla. - insistió.
- Primero que nada quiero que me prometas que no hablaras de esto con Tanya.
- ¡Qué conveniente! Seguramente dira que todo es mentira.
- Si, lo hará pero tambien tomara represalías y ya te dije que mi única meta es protegerte.
- Es tu palabra contra la suya.
- Es cierto. - suspiro. - Ya depende de ti creerme o no.
- Empieza.
- Tú y yo habíamos discutido sobre tener un bebé. Fue una discusión sin mucho sentido como las que antes teníamos pero esta vez ella escucho. Tanya... hacia mucho tiempo ha querido que yo me acueste con ella o bueno en realidad quería ser mi amante. Me oo ha propuesto muchas veces e incluso ha tratado de extorsionarme para lograrlo pero llevo años rechanzadola.
- Si te acostabas con ella antes.
- Antes de conocerte y saber quien eras si. Viviamos practicamente juntos y no negare que Tanya me gustaba físicamente. Cuando llegaste a Forks eso acabo y no solo porque ya no vivía en tu casa sino porque nunca tuvimos algo mas que sexo así que era extraño que alguno llame al otro, lo que tuvimos no funcionaba así. Tú si me gustaste en todos los sentidos desde que te conocí.
- Bueno sigue. - lo forzo a volver de tema.
- Era el aniversario de Charlie y Renne, ese día nos quedamos a dormir en su casa. Estaba molesto porque tus palabras me dolieron. Tome demás...
- No me vas a salir con la excusa de que estabas ebrio...
- Estaba ebrio pero quería verte. Solucionar todo. Estabas en nuestra habitación pero ya estabas dormida. Me acoste junto a ti y...
- Dormiste conmigo. Recuerdo que desperte contigo encima sofocandome.
- Y te fuiste. - suspiro.
- Si. Te conocía, ibas a querer solucionar todo con sexo y tenía que huir.
Edward alejo la mirada a la ventana.
- Tanya se metió en la cama y me hizo una mamada debajo de las sábanas. Desperte desorientado y creí que eras tú. Cuando me vine... Tanya salió de las sabanas y puso mi semen en su...
- ¡¿Qué demonios estas diciendo?! - preguntó asqueada.
- Fue una escena horrible y asquerosa.
- No puedo creerte. Lo que dices es...
- ...Lo que paso. - termino por ella. - Siempre quise explicartelo pero tú no me lo has permitido. Suena bizarro y loco además que como dijiste antes es mi palabra contra la de ella.
- ¿Es siquiera posible que ella pueda quedar embarazada asi...?
- Tambien tengo dudas pero solo lo sabre cuando nazca su hijo.
Bella cerro los ojos tratando de asimilar la idea. Era imposible.
- No entiendo. ¿Qué ganaba ella en esto?
- Quiere que este con ella. Su plan era quedar embarazada para que yo este con ella. Pero no lo haré. Ni me manipulara a través de su hijo. No caeré.
- Tanya será una pésima madre y cuando sepa que no podrá retenerte...
- Si. Ella reacciona y no piensa antes. Va a destruir muchas vidas si cumple con su amenaza. Por eso te suplico que te vayas conmigo. Huyamos de aquí. Adelantemonos. No le demos opción a actuar. Te lo suplico, Bella. Te amo y quiero protegerte de ella, de todo.
La castaña se quedó en silencio meditando sus palabras.
- Bella. Por favor, quizas sea nuestra última oportunidad. Ese bebé nacerá pronto y Tanya empezará a atacarme pero yo no voy a ceder. No dejaré que siga destruyendo mi vida pero estaré siendo egoísta porque sé que habrán consecuencias. Ya he sacrificado demasiado tiempo a tu lado y estar a punto de morir me hizo verlo. - le tomo la mano. - Bella, mirame. Soy yo. Tu marido de hace seis años. Te he amado y respetado. Tenemos recuerdos hermosos. Por todo eso, ¿podrías creerme y huir conmigo? Yo si estoy dispuesto a dejarlo todo por ti. Siempre ha sido así. Te lo suplico, hazlo por mí.
- Edward... la respuesta a nada es huir.
- Creeme que he querido pensar en muchas otras opciones pero esta es la única que se me ocurre.
- Ir a otra ciudad huyendo de tu paternidad...
- Bella, es mucho más que eso. Muchisimo mas. Necesito que me creas y confies.
La castaña aún impresionada se quedo en silencio unos minutos. Tratando de entender la situación. Su hermanastra se embarazo al proposito de su marido, engañandolo y lleva años queriendo quedarse con él. Años... y ella jamas noto algo extraño. Años donde ella vivió creyendo que entre ambos jamas existio nada y años donde Edward demostro tener habilidades para mentir y engañar con tal de lograr beneficio propio. No podía olvidar que fue un inquilino de la casa de sus padres sin que lo supieran o que fue un drogadicto antes y jamas le conto, bueno no dijo que fuera uno pero si que perdió el control y su papá lo encubrió...
- ¿Por qué mi papá nunca me contó sobre tu sobredosis? ¿Por qué no me dijo que me estaba metiendo con un drogadicto?
- No lo era, yo consumí de forma incorrecta ese día por eso tuve la sobredosis. No sabía hacerlo.
- ¿Sabes? Creo que estas mintiendo. Mi papá jamás me hubiera ocultado algo así.
- Te conté eso porque quería que vieras que le debo la vida a tu papá. Realmente lo quiero y no quiero lastimarlo pero estoy dispuesto a hacerlo por protegerte.
- Vas a traicionar al hombre que salvo la vida. Te robaras a su hija porque por lo que entiendo no tienes planes de tener contacto con mi familia.
- Es verdad. Dejaríamos una carta y no volveríamos a verlos. Yo sé que nos entenderan.
Bella empezo a negar.
- No dejaré a mi familia por ti. Es mi papá y Renne es como mi madre. Tu historia es muy bizarra. No puedo creerte y menos dejarlos.
- Bella por favor, recuerda todo los momentos hermosos y... - empezó a suplicar desesperado.
- Recuerdo todas las mentiras e historias que desconocía. Siempre hay mas y mas...
- ¡Todo lo he hecho por protegerte! ¡Por favor! ¡Vamonos! Realmente creo que es nuestra última oportunidad. Bella te amo y te juro podemos ser una familia feliz lejos de aquí. Cumplir nuestros sueños y metas. Quiero que tengas a mis hijos y que los veamos crecer. Quiero todo el estres que será cambiar pañales y luego pagar universidades. Lo quiero todo contigo. Esos sueños eran tuyos pero ahora son mios y estoy desesperado por cumplirlos contigo. Te lo suplico, Bella. Huyamos.
La castaña se quedó en silencio una vez mas alterando al cobrizo que reacciono según su poca capacidad motora para besarla. La devoro forzandola a reaccionar. Fue un beso duro y lleno de necesidad. Edward no le dio tregua y le recordo quien siempre tuvo el control en la relación. Él la quiso y la tomo, él escogio que hermanastra le gustaba mas y tambien en que momento empezar una relación. Siempre todo fue en base a sus deseos.
- ¡No! - lo empujo con fuerza. - ¡Basta! No me haras esto. No me vas a engañar.
- Bella no...
- Siempre es lo mismo contigo. Estoy cansada y no voy a ceder. No creo en nada de lo que dijiste. Estaría loca si lo hiciera. Tú no me amas. Quien ama no miente ni engaña. Lo único que quiero de ti es el maldito divorcio. Seguiré mi vida y conseguiré un hombre que me ame sin mentiras ni engaños. Un hombre de verdad, no un cobarde como tú que solo quiere huir y no enfrentar sus problemas. Eres un adulto y quieres actuar como un niño asustado porque no quiere ser padre. Eres un desastre Edward, realmente compadezco a ese bebé, serás un padre terrible y agradezco no haberme embarazado de ti. Hubiera sido un error.
El cobrizo frente a ella nunca se había visto tan herido. Por un segundo se vio así misma queriendo buscar las palabras adecuadas para suavizar la diarrea verbal que había dicho. Sin embargo, no lo hizo. Casi podía escuchar el corazón de su marido latir menos acelerado que hace unos minutos pero eso era su imaginación.
- Edward...
- Te daré el divorcio. Es verdad. Mereces alguien mejor que yo.
Bella se quedó sin palabras y quiso prender el auto pero el toque frío de la mano de su marido la detuvo.
- No. Llamaré a Royce.
La castaña estaba tan sorprendida por el desenlace de la situación que asintio mientras veía la mano de su marido dejar de tocarla. La conversación de él y Royce no pudo entenderla, parecían hablar en clave pero en ese momento no tenía cabeza para pensar solo no podía dejar de ver a su marido que en ese momento parecía haber tomado una pose nueva para ella.
Trato de hablar un par de veces con él mientras esperaban a Royce. Sin embargo, cualquier palabra parecía peligrosa. Se sentía extraña muy extraña al ver al hombre tenso junto a ella. Cuando Royce estacionó junto a ellos Bella empezó a hiperventilar. ¿En serio se iría con él? ¿Le diría a sus suegros que todo acabo? ¿El tramite de divorcio iniciaría de una vez?
- Edward... - lo llamo mientras Royce acomodaba su auto. - Tu madre me dijo que quería quedarse unos días en el departamento y no supe decirle que no. Yo... no sé como...
- Yo le explicaré todo. - contesto monocorde.
- ¿Todo? - pregunto sin aire. - ¿Hablaras del be... ?
- Si. Ya jugué mi última carta y perdí. - contesto sin mirarla. - Ahora toca afrontar la derrota. Espero que algún día me perdones y encuentres al hombre que si te merece.
Royce abrió la puerta en ese momento. Bella se sorprendió debido a lo tensa que estaba. El esposo de su cuñada la saludo con una sonrisa tensa. Ahí fue cuando Bella fue consciente que en este enredo ella era la que menos sabía y por alguna razón sospechaba que terminaría perdiendo. Cuando se quedo sola en el estacionamiento aceptó que jamás se sintió mas sola que en ese momento.
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Llego! Ya esta aquí! Su capítulo solicitado!
Tuve un bloqueo creativo tremendo y la verdad incluso creo que debo culpar a que ahora voy a terapia. Estoy feliz de hacerlo y lo recomiendo solo espero que mis fics no sigan viendose afectados.
Gracias por sus mensajes los leo todos y agradezco cada uno. Han sido mi motivación para forzarme a escribir. Este capitulo lo borre 3 veces.
Bueno quiero sus comentarios. Ya detono la bomba ahora toca que caíga el edificio! ¿Cuales son sus pronosticos de daños?
