Una Semana Despues, En Un Conjunto Residencial De Musutafu Cercano A La U.A., 5 de Marzo

.

.

.

.

La noche ya habia caído para ese momento, y como se era de esperar la hora de la cena ya habia llegado… era lo normal que las cenas fueran bastante tranquilas, lentas, donde se pudiera disfrutar la comida a las debidas cantidades de cada uno…. Sin embargo… no era el caso para cierto muchachito de pelo verde, quien estaba degustando de un gigantesco festin delante de el. El cual consistía en arroz, sopa de fideos, carne, dumplings, pescado frito, todo lo que pudiera considerarse un buen platillo lo estaba devorando como si no hubiese comido en días o incluso en años, aunque no era nada mas fuera de la realidad, si daba en que pensar la manera tan apresurada y salvaje en la que este devoraba sus alimentos, no parecía ni siquiera darse tiempo a masticar cuando debía, y delante de ella, comiendo de lo mas tranquilo y normal, es que se encontraba su ya aparente madre… su querida y adorada Inko Midoriya… quien al principio parecía costarle algo de trabajo, pero cuando termino por acostumbrarse, solamente lo dejaba ser, dejándole comer a su propio ritmo y gusto, para ella hacer lo mismo por su lado… después de todo… se sentía mucho mas que aliviada de tener a su hijo de regreso con ella después de tanto tiempo… aun recordaba esa etapa… ese tiempo en el que al despertar no veía ni escuchaba la alegre voz de su hijo cerca de ella… pues lo habia llevado a un sitio bastante lejano para entrenar… y aparentemente, eso le habia sido de gran utilidad, pues el verlo ahí delante de ella, convertido en todo un joven adulto, era algo que simplemente llamaba su orgullo como madre

-Haaaaaaaaaaaa… ¡Eso estuvo delicioso! – Sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando Izuku exclamo aquello a un volumen bastante alto - ¡Muchas gracias por la comida! – Junto sus manos y se reverencio, para entonces levantarse y con sus trastes en sus manos irse hacia el lavadero, donde dejo todo, dejo correr el agua del grifo, y empezó a lavar lo suyo… Inko en ningun momento le aparto la mirada de encima… Izuku ciertamente habia cambiado en todo ese tiempo que no estuvo con ella… pero simplemente estaba contenta de tenerlo a su lado otra vez

Luego de haber lavado los trastes, no solo los suyos sino los de su madre, es que Midoriya se fue hasta la sala de su hogar, donde busco entre los muebles hasta dar con varias pesas de diferentes pesos cada una, todas tenían par, y desde luego que se veian un poco nuevas, busco y busco, de entre todas las que habían, hasta dar con dos perfectas de 100 kilogramos cada una, y sin demasiado problema es que termino por levantar estas mismas con sus manos, para entonces irse a sentar sin mas remedio hasta su sofá, donde en un estado bastante tranquilo y relajado, empezó a ejercitar los brazos con las mismas pesas, izquierda y derecha, primero una y luego la otra, aunque a pesar de su ejercicio y de que relativamente se encontraba de lo mas tranquilo del mundo… es que tenia su mente y su atencion en otro lado

-…Si mis cálculos no me fallan… puede que haya pasado bien el examen escrito para la admisión pero… en el examen practico… no estoy seguro si consegui la puntuación necesaria… rayos, perdi la cuenta al gastar todas mis energías con el KameHameHa… y desde ese dia es que no he recibido nada, ni una llamada, ni mucho menos ninguna clase de aviso… aunque me pregunto si se están tardando con todos en dar los resultados, o si es solamente conmigo… - En ese instante es que dejo de levantar las pesas, y paso a dejarlas sobre el suelo, con mucho cuidado pues fue en ese instante cuando algo en el, si bien era cierto que tenia las de perder, no pudo evitar sonreir con la vista pegada hacia arriba… como si buscara mirar hacia el cielo – Sin embargo… de cualquier manera… fui el primer Quirkless en asistir al examen de admisión de una de las escuelas de héroes mas prestigiosas del mundo pasara o no… como diría mi maestro… si te divertiste eso es suficiente… y si… lo hice, y aprendi mucho de ello… gran maestro… espero que este orgulloso de mi…

-Los resultados llegaran hoy o mañana ¿No es verdad, hijo? – Pregunto Inko, quien en ese momento estaba en la cocina, que estaba bastante pegada a la sala y en ese instante es que Midoriya se giro a verle, y le dedico esa sonrisa que previamente se habia presentado a su rostro

-Eso es lo que se supone… al menos eso es lo que creo, de verdad es que no recuerdo muy bien esa parte de todo el asunto – Le respondio Izuku, solamente para entonces recibir una pequeña risa de su madre

-Vaya, aun me parece increíble que aplicaras para la U.A. – Esta dijo, y pronto fue a recibir un pequeño asentir de cabeza de parte de Izuku, que levanto las pesas, y fue a dejarlas a su sitio

-Si, ciertamente fue increíble que asi ocurriera… y mas increíble fue que me lo pasara muy bien… habia mucha gente bastante talentosa en ese lugar… cielos… ese sitio jamas lo voy a olvidar… fue lo mas emocionante que haya hecho en mi vida – Respondio Izuku, sin embargo ese animo y esa energía se le vio ligeramente perturbada cuando levanto su brazo… giro su cabeza, y olisqueo un instante, para entonces espantarse el mismo con lo que olio – Eep!... Ahm… ¡C-Creo que ire a darme una ducha! ¡Llevo todo el dia entrenando y creo que ya es necesario! ¡Permiso! – Y asi, a una velocidad sorprendente es que salio corriendo hacia la ducha, Inko no dijo nada, pues no tuvo tiempo a decir algo, tan solo lo vio irse de aquella manera tan apresurada, y en el proceso es que rio burlonamente por ello

Una vez en la ducha, la ropa que previamente estaba utilizando, la cual constaba únicamente de una camiseta blanca sin mangas, un sueter, y un pantalón para dormir de color gris fueron a dar sobre la cesta de ropa sucia, el agua no tardo nada en caer, y asi el mismo peliverde empezó a ducharse… aun no podía creer todo lo que habia hecho… no solamente por el examen de admisión, sino de toda su vida en general… aun recordaba todo… los lugares que habia visitado, los ejercicios que habia realizado, la gente que habia conocido, desde su gran maestro hasta su ahora gran amigo… bueno, en realidad, uno de sus mas grandes amigos… era cierto que en todo su trayecto hasta el momento habia hecho amistades bastante extravagantes… pero ciertamente se alegraba mucho de haberlos conocido, y de haberles enfrentado, pues hubo un tiempo en el que se enfrento a alguno de ellos, de manera amistosa claro… y otra ocasiones no tan amistosamente… pero no se arrepentia pues todo lo que habia conocido y visto fue suficiente para volverlo el jovencito que era ahora… y eso no le hacia mas que hacerlo sentirse completo nuevamente… aquel gran vacio que habia quedado en el cuando le diagnosticaron Quirkless, se habia rellenado con esa aventura que habia tenido desde corta edad

Mientras tanto, fuera de la ducha donde Inko se encontraba arreglando y acomodando unas cuantas cosas alrededor de la casa es que se llego a detener cuando escucho la puerta ser tocada con una ligera suavidad… era raro, pues a esas horas no estaban esperando visitas de ninguna clase, pronto la puerta fue a ser tocada una vez mas, esta vez con algo de insistencia, y asi es que a un paso lento y tranquilo, fue hasta la misma, y con pantuflas en los pies, abrio

-¿Si? – Pregunto, apenas haber emparejado la puerta unos centímetros para asomarse ligeramente a ver de quien se trataba… ahí entonces es que se encontró con una mujer de cabello oscuro, gafas, y un traje formal de un color grisaseo azul, tanto la falda del mismo color, zapatos negros de tacon alto, y una serena sonrisa en el rostro… y el rostro de esa misma mujer, tenia adornando justo por debajo de su ojo izquierdo, un sensual y lindo lunar

-Buenas noches, espero no importunar… vengo de la U.A. estoy aquí para entregar los resultados del examen de admisión de su hijo Izuku Midoriya – Respondio la misma mujer ahí delante a la puerta, Inko abrió los ojos de par en par, aunque no se esperaba que fueran a entregar los resultados personalmente, no tardo nada en abrir la puerta de par en par, dando espacio a la mujer para entrar

-Oh, si claro claro, adelante – Apenas darle el paso, es que esta se reverencio

-Con su permiso – La mujer de traje se reverencio, y adentro en la morada, dejando sus tacones junto a los demás zapatos, para entonces irse a poner un par de pantuflas para invitados… sin embargo, en ese momento, mientras se arreglaba, es que escucho una puerta no muy lejos de ambas abrise

-¿Eh? ¿Mama? ¿Y ella quien es? – Escucho la mujer una voz claramente joven, perteneciente al chico a quien estaba buscando… sin embargo la misma mujer es que se llevo la sorpresa de su vida cuando levanto el rostro… y lo que empezó siendo una sorpresa, termino por ser un sonrojo absoluto desde el mentón, por las mejillas hasta la frente, literalmente toda su cara estaba enrojecida… pues de la ducha estaba saliendo Midoriya, quien con una toalla secándose su cabello y otra cubriéndolo de la cintura para abajo estaba caminando hacia ellas… su torso estaba descubierto, al igual que sus brazos… y no estaba viendo otra cosa que no fuera el cuerpo de un verdadero físico culturista… aunque bueno, tampoco era ese el caso tal vez, si tenia buenos musculos, desde el abdomen, hasta los pectorales, bíceps, tríceps, las clavículas, la espalda firme y recta, y aun para la edad que tenia, una musculatura como esa era impresionante - …Hey… un momento… ese rostro ya lo he visto antes… ¿No es usted acaso?

La mujer que en ese momento estaba regresando en si misma luego de haberse quedado un rato embobada viendo el cuerpo de aquel jovencito, es que agito su cabeza de lado a lado con bastante fuerza, necesitaba concentrarse, y dejar de pensar en cosas indebidas… no era propio de una dama… sin embargo… ante un cuerpo asi, y en alguien tan joven…

-Un gusto conocerte… Nemuri Kayama… aunque posiblemente me conozcas mejor como – Empezo a hablar Nemuri… sin embargo Izuku la interrumpio a la mitad de sus palabras, pues este se apresuro y demasiado a deducir de quien se trataba

- ¡No puede ser! ¡Eres la heroína Rated-R! ¡Midnight! – Grito Midoriya bastante emocionado de ver a una heroe profesional en su casa, sin embargo Inko al saber aquello, es que se sorprendio de sobremanera, al menos lo suficiente para que pudiera esta quedarse viendo a aquella mujer, quien en ese momento, estaba sonriendo con un ligero rubor en las mejillas

-Pero que muchachito tan listo y efusivo eres… pero si, estas en lo correcto encanto… estoy aquí de parte de la U.A., vine a entregarte los resultados de tu examen de admisión – Dijo Nemuri, para entonces esta recibir una gigantesca sonrisa de parte del jovencito aquel, quien le asintió entonces

-Pero por supuesto, adelante, no se quede ahí en la entrada, que nosotros no mordemos – Dijo Midoriya con la mayor tranquilidad del mundo, aunque eso ultimo Kayama no supo si tomarlo como una broma… o un coqueteo, pero en fin, tan solo se adentro en el hogar, siguiendo de cerca a Izuku, quien la invito a sentarse en el sofá de la sala, esta tomo asiento inmediatamente e Izuku termino por sentarse frente a ella, del otro lado de la mesita de centro

-D-Disculpe… ¿Puedo ofrecerle algo de beber? – Pregunto Inko aun de pie, con su sonrisa nerviosa en el rostro, a lo que Nemuri le respondo sonriente

-Si no es molestia agradecería un vaso de agua – Respondio

-Pero claro que no, en un momento se lo traigo – Y asi, con una pequeña reverencia es que se retiro a la cocina… dejando a esos dos, relativamente solos… aunque hubo un silencio de por medio, un silencio en el que Midoriya no paraba de secarse el cabello una y otra y otra vez… Midnight por su parte prestaba atencion a todos y a cada uno de sus rasgos, tanto físicos como faciales, antes de fijarse en su rostro… para ser bastante joven… tenia unas facciones faciales bastante lindas… y atractivas, se veía entre inocente y lindo, pero atrevido y fiero a la vez… y transmitia una aura estoica bastante curiosa, algo que le hizo sonreir ladinamente, enderezando su espalda y afilando la mirada

- Oh, ahora que lo pienso un poco, sino es molestia la pregunta… ¿Por qué es que se tardaron bastante en entregar los resultados del examen de admisión? ¿Acaso los estuvieron dando personalmente de casa en casa a todos los que pasaron? – Pregunto Izuku, pasando a dejar la toalla sobre sus hombros, sujetando los extremos de esta con cada mano

-No en realidad, nos tardamos porque los evaluamos de diferentes maneras, además de que nos tenemos que ocupar de mucho papeleo y otras cosas mas administrativas de las cuales nos tardamos mucho tiempo… sin embargo, debo decir que no se acostumbra entregar los resultados en persona… contigo esa fue una excepción – Dijo Midnight, ganándose asi una mirada de desconcierto de parte del chico peliverde delante de ella

-¿Yo?... ¿Una excepción? ¿De que habla? – Pregunto Izuku, para entonces dejar en su rostro una expresión de curiosidad, cual noto inmediatamente la heroína profesional, para luego dedicarle un par de risitas juguetonas al mismo

-Si jovencito… una gran excepción, si me lo preguntas a mi… después de todo… ha pasado mucho tiempo desde que alguien demostró semejante desempeño en el examen de admisión justo como tu lo hiciste – Dijo Midnight ante la expresión facial en el rostro de Midoriya, para entonces buscar en su traje hasta dar con una pequeña placa metalica que en realidad era un proyector portátil, el cual dejo sobre la mesa de centro, y lo encendio sin mas, para entonces proyectar sobre el techo las imágenes tomadas de las cámaras de vigilancia en el centro de batalla – Solo mira eso… - Le señalo, e Izuku se fijo como le habia dicho… en los videos se veía claramente a Midoriya lanzando su poderoso Super Kamehameha, tanto la primera vez, como el segundo que utilizo para salvar a la chica de pelo castaño, pero además de esos videos, se mostraron las diferentes ocasiones en las que Izuku demostró grandes dotes para el combate cuerpo a cuerpo, un instinto natural de pelea le decían algunos – No solamente en combate cercano, sino en combate lejano también resultaste destacar enormemente

-Si… bueno… eso es lo que yo también llegue a pensar en ese momento… pero… aun asi… fui bastante precipitado, utilice una técnica que no habia perfeccionado aun y eso casi me cuesta la vida… - Respondio Izuku, bajando la cabeza lentamente, se le veía un poco desanimado a ese hecho… pues recordaba que a causa de ello… estuvo a nada de salir bastante herido - …No creo que… la U.A. sea capaz de aceptar a alguien que es precipitado y bastante arriesgado a la hora de pelear…

-…Tal vez tengas la razón jovencito… sin embargo… debo decirte esto… tus acciones impulsan a otros a actuar, dicho eso… debes saber una cosa… en el examen del otro dia, no solamente estaban siendo contados los puntos por villanos – Dijo Midnight, para entonces reir suavemente, pues noto como Midoriya en ese instante levanto la cabeza bastante confundido para verla a ella – Ademas… ¿Cómo rechazaría la escuela de héroes, a alguien que salva a los demás y hace lo que es correcto? … Dime ¿No seria eso solo palabrería? – Pregunto Midnight, para entonces arquear una de sus cejas, algo juguetona al ver como la expresión de Midoriya cada vez estaba mas y mas confusa - ¡Ni hablar! ¡En este trabajo se arriesga la vida y se pone en practica esa palabrería! … Es por eso… que además de los villanos… se cuentan… ¡Los puntos de rescate! – Apenas haber exclamado aquello, es que presiono un botón en el proyector, para entonces mostrarle la tabla completa de los resultados, al menos solamente para mostrar a los aprobados… y hasta arriba de toda esa lista… estaba Izuku – Unos cuantos jueces son quienes otorgan esos puntos… ¡Es la otra habilidad básica que busca la U.A.!

Izuku habia dejado caer la mandibula al ver los resultados… toda su atencion estaba justo encima de su nombre… debajo del suyo estaba el de bakugo… pero mas que prestarle atencion a este… le presto toda su atencion a su propio resultado… su puntuación en Villanos… habia sido 108, y el resultado de Rescate… habia sido de 60… lo que le dio un total de…

-…168 – Dijo Midnight, mientras que Deku permanecia en ese pequeño transe suyo del cual parecía no poder salir – Ese es el puntaje mas alto que ha visto la U.A. desde hace ya muchos, muchos años… aprobaste… Midoriya Shonen… asi que… Bienvenido… a la U.A… Bienvenido, a tu academia de héroes – Su animo estaba concentrado en levantarla sorpresa de Midoriya… pero este simplemente no parecía reaccionar… tenia los ojos abiertos de par en par… e Inko, que hasta el momento se habia quedado callada, se acerco buscando de alguna manera hacer reaccionar a su hijo

-¿I-Izuku?... ¿E-Estas bien? – Le pregunto esta… acercándose a su costado, donde le puso una mano en el hombro… sin embargo este seguía sin reaccionar… y paso asi unos cuantos segundos… hasta que por fin decidio hablar

- …Y-Yo… ¿P-Pase?... ¿E-Esto es enserio?... ¿D-De verdad, yo pase? – Pregunto Midoriya, con su mirada ahora clavada sobre Midnight, quien cerro sus ojos suavemente… y le asintió con gentileza… - Esto… esto no es un sueño ¿O si? ¿Yo de verdad pase el examen de admisión?... ¿De verdad voy a asistir a la U.A.?

-Asi es chico… esta bien sentirse orgulloso… puedes llorar incluso si asi lo deseas – Respondio Midnight, como si estuviera leyendo sus sentimientos… y si, los ojos de Izuku pronto se pusieron vidriosos… como si estuviera a punto de llorar… sin embargo… lo que en su principio era una expresión triste… paso a ser una sonrisa de oreja a oreja… su cuerpo entero se puso tenso, sus puños se cerraron… y bajo lentamente la cabeza hasta que tuvo la mirada clavada en el suelo… parecía que de verdad iba a romper a llorar… eso a Midnight le preocupo un poco, pues incluso se levanto de su lugar, y se acerco con intenciones de calmarlo un poco – Midori-

No pudo continuar con sus palabras, pues en ese momento tanto Midnight como Inko fueron a ser apartadas del peliverde, quien pego un tremendo salto que lo hizo atravesar el techo, y por consecuencia, salir volando hacia las alturas… aunque esto hizo que sus toallas quedaran en el suelo de la sala de su hogar, y si bien en un principio ambas mujeres se cubrieron el rostro para evitar lastimarse con los escombros, fue que al pasar estos se asomaron por ese mismo agujero, solo para ver la silueta del joven peliverde haciendo sombra con la luz de la luna detrás suyo

-¡LO LOGREEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE! ¡VOY A ASISTIR A LA U.A.! ¡LO LOGREEEEEEEEEEEE! ¡WOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! – El grito del chico podría haber sido escuchado fácilmente desde hace cientos y cientos de metros alrededor de su hogar, pero poco parecía importarle, pues en ese momento estaba mas feliz que preocupado por armar un escandalo, Midnight, al verlo de esa manera, tan genuinamente feliz que literalmente destruyo su propio techo, no pudo mas que sonreir de oreja a oreja… hace mucho que no veía a un muchachito tan efusivo como el… era bueno saber que muchachitos como el aun habia por ahí en el mundo

Aunque esta pronto desvio su mirada hacia el suelo, al encontrar la toalla que previamente este estaba usando… por lo que un sonrojo masivo se apodero de su rostro, pues cayo en cuenta que tal habia sido el impulso con el que salio volando al cielo que se le cayeron sus toallas… esto casi le hizo tener un sangrado nasal, pues a pesar de no poder ver nada por la sombra de la luna a sus espaldas, igual sabia que habia algo ahí, por lo que la dejo caer al suelo y se cubrió la cara rápidamente, apenas pasados unos minutos, y de haber reparado el techo… o bueno, al menos cubrirlo, es que Midoriya regreso, se vistió, y agradeció por las noticias… de verdad que tenia motivos de mas por los cuales estar contento, llego su hora de retirarse, pero antes de agarrar camino a su hogar, es que Midnight se detuvo bajo el lumbral de su puerta

-Oh, claro, antes de irme – Paso de sujetar el bolso que anteriormente traía, a abrirlo, para buscar en el interior de este mismo, Midoriya quien apenas estaba terminando de acomodarse la camiseta con el símbolo de "Kame" en el pecho se le quedo viendo unos momentos, un tanto curioso de que pudiera ser aquello que estaba buscando – Ten, esto es para ti – Dijo, para encontrar lo que tanto parecía estar buscando, lo cual parecía ser una simple nota a primera vista, esta se la extendió a Midoriya y Midoriya la sostuvo en sus manos, pero al extenderla, es que no vio nada mas que números

-¿Y esto que es? – Pregunto, sin entenderlo bien del todo, para entonces levantar el rostro y fijarse en Midnight, quien paso de una tranquila sonrisa… a lamerse los labios con lentitud, antes de afijar su mirada, y darle un guiño al peliverde

-Es mi numero celular… y el de abajo es el de casa… por si llegas a necesitar ayuda en algo o… .sea~ - Dijo esto ultimo entre susurros bastante suaves, para entonces reírse de manera burlona solo para ambos – Bueno, me retiro, buenas noches – Se despidió, y asi empezó a caminar fuera de la residencia, lo bueno que Inko no estaba ahí de lo contrario se hubiera llevado un susto tremendo, aunque Izuku no presto mucha atencion a ese dato, y tan solo lo dejo pasar, para entonces darse la media vuelta, y cerrar su puerta

…Guardo ese numero mismo en su bolsillo, y camino lentamente hasta su habitación, se despidió de su madre con las buenas noches y se encerro… ahí mismo en su cuarto, que en gran parte estaba repleto con las figuras de acción, carteles y posters de un heroe llamado… All Might, decoraban bastante de todo el lugar… pero adicional a eso, en un rinconcito, tenia su propio espacio personal, en el cual parecía haber un pequeño baculo de madera rojizo, un caparazón de tortuga morado con correas para cargar como si fuera una mochila, y por encima de aquello, un estante… un estante en el cual estaba montado una especie de altar, en el cual se podría apreciar una especie de esfera naranja la cual en su interior parecía tener 4 estrellas de color rubi dentro suyo… beso sus dedos índice y medio y fue a plantar el mismo beso sobre esa misma esfera, antes de guardar dicho papel con los números en su escritorio… para luego pasar a recostarse sobre su cama… lo habia logrado… iba a estudiar en la U.A. … ahora ya nada podía interponerse, entre el, y su deseo de convertirse en un gran heroe… sin embargo…

-Un momento… - De cerrar los ojos paso a abrirlos de par en par, para entonces sentarse sobre la misma cama con una expresión de sorpresa – Pero… que yo sepa, las clases de la U.A. no empiezan sino hasta llegado Abril… eso quiere decir que… todavía tengo algo de tiempo para poder entrenar… un mes… no es mucho, pero es mejor que nada, en un mes tengo que entrenar lo suficiente para poder resistir mejor mi Super KameHameHa… y volverme todavía mas fuerte… en el curso de héroes… solamente esta lo mejor de lo mejor, la elite de la elite… tengo que estar a la altura… tengo que ser mas… y por dios que lo voy a conseguir… esto… solo es el comienzo ¡Y tengo que darlo todo de mi!

.

.

.

.

Y asi como lo expreso… lo hizo, pues al dia siguiente, desde muy temprano… Midoriya empezó a entrenar… a su propia manera claro estaba…6 de Marzo Por La Mañana

.

.

.

.

-Disculpe señor… ¿Tiene algun problema si les ayudo un poco por aquí? – Preguntaria el muchachito de pelo verde, que para el momento habia llegado a una costruccion en progreso, y si bien gran parte de todos los hombres presentes, eran hombres promedio, sin alguna particularidad, al menos la mayoría de ellos, el capataz que habia detenido sus deberes en el sitio, se acerco a Midoriya, y se paso a rascar la cabeza

-Chico, no es por nada, pero aquí estamos acostumbrados a hacer bastante esfuerzo físico, y en ocasiones tenemos que usar el físico pues nuestras maquinas suelen fallar ocasionalmente – Le respondio este, sin embargo el animo y los deseos de Midoriya de entrenar seguían siendo tan fuertes como cuando se levanto de la cama ese dia

-¡No se preocupe por eso, le aseguro que puedo rendir suficientemente bien! – Le dijo Izuku al señor, este un tanto sorprendido por su insistencia termino por suspirar ligeramente, para entonces rascarse la cabeza con suavidad

-Bueno, supongo que no puedo convencerte de desistir… pero si de verdad crees que puedes con esto, entonces adelante… podrias empezar por mover el monton de ladrillos que tenemos por ahí – Señalo el capataz con su pulgar a sus espaldas, no muy lejos de el si que se encontraba una gigantesca montaña de ladrillos como el mencionaba… y todos eran grandes, gruesos y muy pesados – Estos llevalos de donde están, hasta el lado norte de la construcción… y apresurate, que tenemos que empezar a levantar los muros primarios hoy mismo… pero te lo advierto… ahí se encuentran mas de 8 toneladas de ladrillos

-¡Si señor! ¡Ahora mismo! – Su entusiasmo seguía estando en las nubes, era literalmente perturbador ver a un muchachito como el tan decidido a trabajar… aunque para Midoriya no era trabajo… sino entrenamiento… asi es entonces que empezó con su primer dia de entrenamiento

Y sin siquiera llevarse la mitad de una hora por delante, es que este termino por hacer que las quijadas de todo el mundo cayera al suelo, aquellos que estaban trabajando dejaron caer sus herramientas al suelo, y tan solo se formaron en línea para ver las acciones y demás de aquel jovencito, quien estaba cargando y llevando los ladrillos a una velocidad que no era ni medio normal para un jovencito de su edad por motivos varios, el principal de ellos era que Midoriya cargaba tantos ladrillos como era posible en una carreta y estos se los llevaría a donde le indicaron a una velocidad sumamente impresionante, pero ni siquiera tardaba, cargaba los ladrillos, los llevaba, los descargaba y regresaba, una y otra y otra vez hasta llevarse asi la mitad de las 8 toneladas en menos de 2 horas, ya para el momento Midoriya se habia convertido en todo un espectáculo para los obreros en el sitio y el capataz quien en un principio no creyo que de verdad seria capaz de llevar acabo esa tarea, ahora tenia los pelos de punta, incluso luego de haber terminado con los ladrillos, le puso a cavar fosas a lo largo del suelo, y la velocidad con la que cavaba era descomunal, incluso cuando su herramienta no pudo mas y termino rompiéndose, uso sus propias manos para cavar, y aun asi no bajaba el ritmo en lo absoluto ¡No era un chico ordinario de ninguna manera!

Ya literalmente Izuku se volvió la sensación en la construcción, tanto era su gran trabajo y el como estaba acaparando casi todo el trabajo mismo que la mayoría se sento por ahí a merendar mientras el hacia todo, de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo, y mientras eso ocurria, un auto de elegancia única empezaba a llegar al sitio de los hechos, un auto reluciente de todas partes, desde las piernas, los cristales hasta las ruedas, un par de sirvientes bajaron del mismo auto, y abrieron paso para la persona en su interior… una jovencita de cabello oscuro azabache y ojos oscuros, vistiendo de un vestido de dos piezas que parecía ser de solo una, chaleco y falda de tela oscura en su totalidad, la falda era larga lo suficiente para cubrirle las piernas, aunque esto solo se limitaba a cubrir parte de sus muslos, y junto a ello, en su mano derecha cargaba de un bolso de un aspecto bastante refinado, y quizás costoso, junto a una blusa de tela blanca traslucida cubriendo sus brazos y pecho, junto a un adorable moño algo curioso sobre su cuello y un par de tacones altos del mismo color que su vestido

Viendose a si misma a su alrededor es que se fijo en su entorno, antes de dar unos cuantos pasos lentos para entrar en el terreno de construcción en conjunto a sus sirvientes

-¿Entonces es aquí donde se empezó el edificio de mi familia?... No esta nada mal, es un buen sitio, estratégicamente tranquilo… amplio… y a una buena altura que se tendrá una buena vista en lo mas alto del edificio – Dijo esta para si misma, buscando en su bolso hasta dar con una especie de abanico, el cual utilizo para soplarse un poco de aire al rostro

-Efectivamente señorita Yaoyorozu… este es el lugar… aunque, esta un poco callado, generalmente a esta hora es que hay bastante ruido por el trabajo – Respondio una de sus damas de compañía, fijándose lentamente alrededor del sitio… hasta fijarse en como los obreros estaban sentados en hilera en un desnivel bastante alto, y todos como tal, estaban comiendo, bebiendo y observando - ¿Ah? Y esto que significa, aun no es hora del almuerzo

- Tranquila, no es para tanto, después de todo es normal que el cansancio le de a una persona promedio… Hmmmmmmm… - Dijo muchachita pelinegra, para entonces buscar con la mirada al capataz, el cual apenas lo diviso, le llamo - ¡Oiga, señor!

-¿Eh?... ¡EEEEEH! ¡S-Señorita Momo! – Apenas Exclamo aquello, es que salio corriendo a todo lo que sus piernas daban, para entonces frenar en seco a escasos centímetros delante suyo, apenas estar ahí es que se reverencio bastante apenado por no haberla notado antes - ¡Q-Que alegría tenerla con nosotros el dia de hoy! ¡Que podemos hacer por usted! ¡Mande y lo tendrá inmediatamente!

-Tranquilo señor, por favor… no tiene porque preocuparse, el motivo de mi visita es que madre me ha pedido venir a inspeccionar el progreso de nuestro próximo nuevo edificio claro esta, y por lo visto va bastante bien, quizás este terminado para el próximo año o antes… aunque, me llama la atencion que sus obreros estén… comiendo a horas lejanas al almuerzo – Dijo esta, mirando de reojo hacia los mismos, los cuales parecían además de estar merendando… ¿Estaban apostando acaso? ¿Y porque estaban viendo hasta lo mas alto del edificio

-Eh, bueno, vera señorita lo que pasa es que hoy llego un muchachito bastante curioso a la construcción, y me pidió permiso para poder ayudarnos en la obra, de hecho el fue quien se ha encargado hasta ahora de levantar varios de los muros que esta viendo, y además de eso también ha cavado muchas de las fosas que antes no habíamos podido cavar dado la falla del equipo – Si bien la chica le habia prestado a cada una de las palabras que le habia soltado el capataz, no paraba de dudar en el hecho de que un muchachito asi como asi llegara de la nada y pidiera entrar a la obra… en parte le provocaba algo de inseguridad y molestia pues no le parecía correcto que permitiera que un jovencito se adentrara en un sitio tan peligroso como lo era una construcción… pero al mismo tiempo… le daba curiosidad… saber de quien se trataba, pero aunque lo buscara no parecía dar con el

-…Si eso es asi entonces digame… ¿Dónde esta? – Pregunto Momo, cruzándose de brazos por debajo del pecho, lo que ocasiono al capataz mismo ponerse nervioso pues su expresión facial paso de estar tranquila a claramente molesta, por lo que este trago grueso y se disculpo

-¡Permitame un momento, lo llamare y le pediré que venga a presentarse! … Este… ¿D-Donde se habrá metido? – Apenas se dio la media vuelta para encarar la construcción, es que ahí lo vio, en la parte mas alta del todo, ensamblando y soldando varias partes de la estructura superior, y lo hacia con una gran naturalidad, y sin necesidad de un equipo de protección, que si le llegaba a pasar algo, en presencia de la señorita Momo, entonces seria su fin, corrió a otro lado, y apenas regreso dejo ver como en sus manos estaba cargando con un megáfono, el cual encendio algo apresurado y lo apunto hacia el - ¡OYE, MUCHACHO! ¡BAJA AQUÍ INMEDIATAMENTE! ¡HAY ALGUIEN AQUÍ QUE QUIERE CONOCERTE!

-¿Eh? – Durante su trabajo, es que Midoriya paso de mirar su objetivo a ver hacia abajo, aun para la distancia que representaba aquello, es que este no tardo en escuchar el llamado del contrario, por lo que se levanto en su sitio y le saludo con la mano… aunque en realidad buscaba llamar su atencion - ¿¡QUE DIJO!?

-¡DIJE QUE BAJES AQUÍ INMEDIATAMENTE! ¡AHORA MISMO, NO HAGAS ESPERAR A LA SEÑORITA YAOYOROZU! – Le respondio este en represaría, para luego reir de manera nerviosa hacia Momo y su sequito – Jeeejejeje… no se preocupe ya baja inmediatamente

-Uuuuh… ¿Conque una persona importante no? Bien… entonces no la hagamos esperar – Dejo todo lo que en ese momento estaba cargando consigo mismo en un sitio que fuera estable, para entonces medir adecuadamente la distancia entre el y el suelo… ciertamente era bastante la distancia, pero eso no le hizo echarse para atrás… literalmente, pues termino por lanzarse desde donde estaba, haciendo caer la quijada de todos en ese instante

-¿¡EEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEH!? – El pánico se dio en el lugar de un instante al otro, pero por mas que buscaran alguna forma de detenerlo, o alguna forma de amortiguar su caída simplemente no encontraban absolutamente nada que fuera a servirles de esa forma, incluso varios de los trabajadores… ya algo resignados, fueron corriendo a cubrir a Momo y a su grupo para evitar que el chico los manchara una vez tocara el suelo… sin embargo eso jamas ocurrio

Pues a cortos centímetros de tocar el suelo, es que Midoriya se enderezo, y con una pesada ráfaga de viendo desprendiéndose de su cuerpo, es que termino por frenar su caída en el momento indicado, esto levanto algo de la tierra bajo sus pies, y obviamente ocasiono a todos el cubrirse el rostro… se quedo ahí flotando unos cuantos instantes, antes de tocar el suelo firmemente y de una, empezar a caminar de lo mas tranquilo hacia Momo, el capataz y su grupo de gente detrás suyo, con una sonrisa de oreja a oreja dibujada sobre sus labios, mientras que los obreros le seguían con la mirada de plato y las quijadas en el suelo, los obreros que corrieron a cubrir a Momo se apartaron inmediatamente por miedo… ¿A que? No se sabia, pero tenían miedo… y es entonces ahí, cuando Momo lo vio de frente, un muchachito de quizás 15 años, de 176cm de estatura, de complexión atlética, fuerte, un par de ojos esmeralda brillantes, pecas y un cabello crespo y ligeramente alborotado, un poco sucio por haber estado trabajando tan arduamente desde hace unas horas, sin embargo fuera de verse agotado, o cansado, estaba con todas las energías del mundo, recto, firme, sonriente y con claramente todas las energías del mundo corriendo por sus venas

-¡HOLA, SOY IZUKU! – Se presento, de una manera tan efusiva, tan natural, carente de modales quizás, pero sin embargo irradiaba una gigantesca cantidad de entusiasmo que podría llamarse contagioso, sin embargo, la dama de honor de Momo y sus acompañantes no parecían estar muy de acuerdo con esa manera de presentarse, y sin haberle dado tiempo a Momo a decir algo, es que estas se apresuraron a hablar

-¡Oigame, esa no es manera de dirigirse a una dama de clase como la señorita Yaoyorozu! ¿Pues quien te ha educado, muchacho? – Pregunto su dama de honor, bastante molesta ante ese hecho… sin embargo la respuesta de Midoriya… fue... simplemente otra cosa

-Eh… Ammmm… bueno, en ese caso… lo siento mucho, espero pueda perdonarme, Señorita Yaoyorozu – Dijo este, para entonces dar unos cuantos pasos mas al frente y reverenciarse… justo delante a la dama de honor… literalmente además de su manera de haberse presentado, se atrevio a confundir a Momo con su dama de honor, ahí delante de ella – Espero pueda perdonarme – Y la dama en cuestio no tenia palabra alguna que pudiera responder a esa situación

Pero no fue algo que pudiera considerarse necesario… pues entonces una pequeña risa algo adorable se hizo escuchar justo a un lado suyo, al enderezarse Midoriya es que se giro a verle… Momo estaba riéndose mientras que cubria sus labios con la punta de sus dedos de la mano derecha… sus acompañantes y mas su dama de honor ya que parecía ser que no acostumbraban verla reir de esa forma, y Izuku simplemente no entendia de que era de lo que se estaba riendo

-¿Eh? ¿Qué pasa? ¿He dicho algo gracioso? – Pregunto el peliverde al no entender de que era aquello de lo cual se estaba riendo

-Mas o menos, podríamos decir que si je… Y no tienes porque disculparte… después de todo, no has hecho nada malo… por cierto… yo soy, Yaoyorozu… estas saludando a Karime, mi dama de compañía – Respondio esta, con una pequeña sonrisa en su rostro, pasando ahora a observar como Midoriya pasaba la mirada de lado a lado, entre Karime y Momo, era fácil diferenciarlas, pues Karime tenia un pelo verde bastante llamativo y brillante, y era un poco mas pequeña a el en estatura… quizás por 10 centimetros o un poco mas, y si bien su vestido era bastante decente y formal, se le notaba una pequeña aura protectora sobre Yaoyorozu… aunque Midoriya no parece importarle mucho aquello

-Oh, ya veo, entonces ¡Lo siento mucho, Señorita Yaoyorozu! – Dijo Izuku, girándose en ese instante para encarar a la pelinegra, a quien esta vez se reverencio adecuadamente pidiendo su perdón

-Tranquilo… Dime una cosa ¿Qué estas haciendo aquí en la obra? ¿Acaso estas en momentos de necesidad? – Pregunto esta, solamente para que Izuku al escuchar eso cambiara la sonrisa de su rostro para cambiarla por una expresión un tanto extrañada

-¿Momentos de necesidad?... Aaaaaaaaah, ya entiendo, pero, no no no, en lo mas minimo, mas bien yo solamente estoy aquí para entrenar – Explico este, ganándose el desconcierto del capataz y de Momo

-¿Entrenar? ¿Consideras el trabajo una especie de entrenamiento? – Pregunto Karime, ingenua ante esa declaración, sin embargo Midoriya se apresuro a responderle

- ¡Pero por supuesto que si! ¡Mi gran maestro me enseño que no hay trabajo ni muy difícil ni muy simple! ¡Todo sirve perfectamente como un entrenamiento! – Exclamo, ganándose asi las miradas de sorpresa de cada uno de los presentes, que se lo tomara con tanta normalidad era sorprendente… sin embargo, la próxima en hablar fue Momo

-Bueno… entrenamiento o trabajo, has hecho un buen esfuerzo en este lugar… Dime ¿Es cierto que tu hiciste todo eso? – Pregunto, para llevar su dedo índice a señalar los numerosos muros que hasta hace poco habían sido puestos, las agujeros cavados, y todo aquello que de cierta manera se veía bastante fresco, incluso ya habia una zona pavimentada y aplanada, y hace un rato no estaba asi

-Oh eso, pues si, vengo haciendo todas estas cosas desde hace ya un par de horas, pero le aseguro que no es nada, estoy acostumbrado al esfuerzo físico después de todo – Le respondio con la mayor simpleza del mundo, solo para recibir una segunda pregunta

-¿Y ya has almorzado algo? – Pregunto Momo, ahora girándose por completo para ver de frente al peli verde

-Pues… - Estuvo por responder, sin embargo su estomago termino por hacerlo primero para entonces dejar que un escandaloso, quizás molesto… pero para Momo era un tierno gruñido estomacal, pues luego de ese gruñido, es que Midoriya paso a sonrojarse bastante - …Ammm… Lo siento… por eso

-Y si me queda entendido todo… no has recibido ayuda de ninguna clase con esto – Dijo, pasando a mirar de reojo a los obreros, quienes al notar la mirada de esta, se asustaron y empezaron a dispersarse en el sitio… su mirada paso entonces a fijarse en Midoriya, a quien le dedico una pequeña sonrisa ladina - … ¿Cómo decias que te llamabas? – Le pregunto

- Midoriya Izuku… aunque puedes llamarme Izuku si lo prefieres asi – Le respondio este, pasando la mano por detrás de su cabeza para rascarse suavemente

-Entonces Midoriya… ¿Te gustaría venir a almorzar conmigo? – Le pregunto Momo, causando asi la sorpresa de sus acompañantes, y el capataz, solamente para entonces recibir una gigantesca sonrisa animada de parte de Izuku

-¿Hablas enserio? ¡ME ENCANTARIA! – Apenas le respondio, Karime se interpuso entre Midoriya y Izuku, para entonces dedicarle unas cuantas palabras a su contraria

-Señorita Yaoyorozu ¿De verdad piensa llevar a este chico a almozar?... ¿De verdad lo dejara entrar en el auto de esa manera?... Esta todo… sucio y posiblemente apeste – Le dijo esta, sin embargo Midoriya paso a asomarse por un costado suyo

-Oye, que me estes dando la espalda no significa que no pueda oírte – Dijo Midoriya, ocasionando una segunda risa de parte de Momo, quien no hizo nada mas que suspirar suavemente

-No es punto de discusión Karime… el vendrá con nosotras y no se discute mas – Respondio Momo, solamente ocasionando un pequeño suspiro de resignación de parte de su dama de honor, para entonces fijarse en Midoriya y dedicarle una suave sonrisa – Midoriya kun… Ven, por aquí – Le llamo esta, caminando lentamente hacia el auto, y no muy lejos de ella, es que Izuku empezó a caminar detrás suya, sin embargo, es que Izuku podía concordar con las acompañantes de Momo, y fue ahí entonces cuando este paso de verlas a ellas, a verla a ella de espaldas

-Ammm… no quisiera, sonar grosero, pero a mi parecer sus compañeras tienen razón, no estoy muy presentable en estos momentos y la verdad no creo que sea adecuado que compartamos un espacio tan reducido como lo es el interior del auto… pero… si me permites darte una sugerencia, conozco un centro comercial no muy lejos de aquí, es bastante grande y variado, con una sección dedicada únicamente a la comida, si la idea le gusta, podríamos ir ahí a merendar, he escuchado que venden alimentos muy ricos, y la verdad es que me causa curiosidad, no he llegado a visitar el sitio con anterioridad… osea… se donde queda, pero no he tenido la oportunidad de entrar – Dijo Midoriya, queriendo calmar un poco el ambiente a su alrededor, sin embargo Karime se apresuro a hablar

-¿Qué pasa contigo? Una dama como la señorita Yaoyorozu no debería mezclarse, mucho menos adentrarse en sitios tan comunes como lo es un… centro comercial promedio – Dijo esta con grandes aires de superioridad, que Midoriya simplemente no correspondia… y si bien lo considero… Momo le respondio

-Me parece una buena idea… no acostumbro ir a sitios como esos con regularidad… seria divertido ir a uno, y tomando en cuenta que hoy es mi idea libre… lo veo muy accesible y bastante apropiado dado el estado de mi invitado… asi que… Midoriya… por favor, guía el camino – Se giro Momo y le dedico asi al peli verde una enorme sonrisa de oreja a oreja que no denotaba nada mas que sincera alegría ante la idea, es asi entonces cuando Izuku le regreso la sonrisa a su propia manera, para entonces alcanzarla y señalarle por un lado de la acera

-Es por aquí – Empezo a caminar este por el sitio donde señalo con anterioridad, sin embargo Karime se apresuro a ir al auto junto a las demás, y abrieron las puertas del mismo vehiculo en el cual habían llegado

-Señorita Yaoyorozu, adelante, lo seguiremos en el auto – Dijo la peliverde, sin embargo ante este ofrecimiento es que Momo negó con la cabeza, para entonces empezar a caminar siguiendo a Midoriya de cerca

-Ustedes pueden seguirnos en el auto si asi lo desean, después de todo, no seria muy cortes de mi parte dejar caminar solo por la calle a la persona a la que acabo de invitar a almorzar… eso no seria propio de una dama… ¿O si? – Pregunto Momo, deteniendo su paso por unos momentos para entonces fijarse a sus espaldas en aquella su dama de compañía, quien rápidamente negro con su cabeza, y le dio la razón, para entonces estas cerrar las puertas del vehiculo, e irse caminando junto a ambos… aunque ellas iban detrás de Momo… casi pudiéndose decir que iban sobre ella, sin embargo Deku que en ese momento llego a notarlo, es que empezó a aligerar su paso, pronto dejando a Momo alcanzarlo y haciendo retroceder a la guardia de honor que la estaba opacando… Momo no estaba del todo convencida del porque lo hizo sin embargo, solo le agradeció con una pequeña sonrisa en el rostro – Y dime Midoriya ¿A que te dedicas?

-Soy estudiante, estoy por terminar la secundaria y pronto voy a ingresar a la preparatoria, recientemente es que aprobé mi examen de admisión para la U.A. de hecho, asistiré al curso de heroes – Comento este, pasando a rascarse la mejilla con uno de sus dedos, para continuar con su paso, sin embargo ante esta sorpresa, es que Momo abrió los ojos un tanto y su sonrisa se volvió aun mas grande

-¿Lo dices enserio? ¡Yo también estoy por entrar a la U.A. y al mismo curso! – Declaro, haciendo que Izuku parara de rascarse la mejilla para entonces fijarse en ella

-¿¡Enserio!? ¡Eso quiere decir que entonces seremos compañeros! – De un instante al otro el brillo de emoción se apodero de las esmeraldas de Midoriya, ocasionando a este verse un poco mas lindo de lo que generalmente acostumbraba ser… aunque esto Momo lo noto, y le hizo agitar suavemente el rostro, pues no era correcto pensar asi… aunque si admitia que el chico peliverde tenia cierto encanto, después de todo seguía siendo una mujer - ¡Dime! ¿En que consiste tu Quirk?

-Creacion – Dijo… sin embargo Midoriya no parecía haberlo entendido… pues una gotita de sudor cayo de su frente hasta la circunferencia de su rostro, lo que causo a Momo reírse internamente por ello, pero no le ocasiono problema y tan solo le explico – Mi Quirk me da la capacidad de crear objetos sin vida de cualquier material de cualquier parte de mi cuerpo a través de la manipulación molecular de mis células grasosas, siempre y cuando tenga una compresión de como se hace algo, puedo hacerlo

-Ooooooh… ¡ESO SUENA INCREIBLE! – Expreso con aires de emoción el peliverde, apretando sus puños con gran fuerza mientras que al caminar toda su atencion estaba pegada sobre la pelinegra junto a el

-Si, aunque tiene sus contras, pues para crear objetos mas grandes, es que necesito mas tiempo… y un poco mas de espacio, y exposición de mi piel – Declaro Momo, pasando a frotarse el cuello con ligereza, sin embargo parecía ser que Izuku se habia quedado en la parte principal de aquello

-Hmmmmm ya veo… vaaaaya, un don como ese debe darte la capacidad de hacer lo que sea, increíble, simplemente es algo increíble – Dijo Midoriya, Momo por su parte arqueo una ceja, no estaba acostumbrada a que se emocionaran demasiado en saber como era su Quirk o como lo desempeñaba… pero por alguna razón, que un chico como el exclamara a los cuatro vientos que le parecía increíble, como si fuera el mejor Quirk del mundo le hacia sonreir con auto suficiencia

-Pues si… es bastante útil… ¿Y tu? ¿Cuál es tu Quirk? – Pregunto ahora Momo, ganándose una mirada de desconcierto de Midoriya, quien en ese momento se distrajo y termino por chocar de frente con una farola, llamando las risas de burla de las acompañantes de Momo, quien al notarlo volteo a verlas haciendo que guardaran silencio

-Ayayayayayay… dolor… dolor… ya paso al dolor – Apenas apartarse de la farola es que froto la zona donde se habia golpeado, no habia marca y tampoco moretón ni mucho menos, solo fue el impacto lo que

-¿Te encuentras bien? – Pregunto Momo, quien pronto recibió un pequeño asentir de Midoriya

-Si, no te preocupes, solamente fue la sorpresa del golpe, pero no me hice daño – Respondio, sin embargo cayo en cuenta de la pregunta que previamente le habían hecho, para entonces enderezarse y agitar el rostro de lado a lado – Y sobre tu pregunta… mi Quirk… es el Ki

-…¿Ki? – Pregunto ahora Momo, con una de sus cejas arqueadas, al igual que sus acompañantes, para entonces recibir un rápido asentir de cabeza del peli verde

- Asi es, Ki, veras el Ki es una energía vital que yace en el interior, y puede ser dominada por cualquiera de mejor o peor manera y mientras mas energía se concentra, mas tiempo requiere para materializarlo… es como… pues es casi lo mismo que tu, solo que yo no puedo crear objetos inanimados… sino mas bien… yo puedo crear esto – Estiro su brazo derecho al frente y cambio su expresión facial alegre a una mas concentrada y serena… ejercio algo de presión sobre su brazo y mano, hasta que en la palma de esta misma, fue a crear una esfera de energía azulezca muy similar a la que solia utilizar al ejercer el Kamehameha, tal era su brillo y la energía que desprendia que termino captando toda la atencion de Momo en ese instante – Me costo mucho trabajo y mucho entrenamiento poder controlar adecuadamente mi Ki… pero cuando lo consegui, este fue el resultado ¿Qué opinas?

-…Nunca en mi vida… habia sentido una energía como esta… es sorprendente – Expreso Momo, pasando de ver la esfera de energía a ver a Deku al rostro, quien le sonrio ligeramente para hacer desaparecer esa esfera, regresando la energía a su cuerpo

- ¿Verdad que si? He conseguido hacer cosas fabulosas con esto, incluso pude perfeccionar una técnica que me enseño mi gran maestro que se llama Kamehameha, y lo converti en un Super Kamehameha, recuerdame que algun dia te lo enseñe… no puedo hacerlo ahora dado que es una técnica bastante poderosa… y no me sentiría comodo haciendo destrozos asi nada mas, eso no es correcto – Declaro Midoriya, pasando a rascarse la cabeza con la diestra, soltando una que otra risilla divertida que fue acompañada por una risa de parte de Yaoyorozu

- Pues claro que no… eso no seria correcto… tal vez otro dia – Dijo esta, correspondiendo a su ofrecimiento, sin embargo en ese instante el peliverde paso de verla a ella a ver al frente, al otro lado de la calle, la pelinegra lo noto, y le hizo arquear una de sus cejas nuevamente - ¿Midoriya? ¿Qué ocurre?

-¡Ya llegamos al centro comercial! – Exclamo Midoriya, para señalarle entonces hacia donde estaba viendo, Momo al girarse abrió los ojos de par en par, pues ciertamente como el chico lo habia expresado, el sitio por fuera era bastante grande, y se veía a una buena cantidad de gente entrando y saliendo del lugar, desde estudiantes hasta personas como jóvenes adultos, y adultos mayores - ¡Este es el lugar!

-…Es mas… grande de lo que pensé que seria – Expreso Momo, con los ojos abiertos de par en par, y el brillo sobre estos de un estilo bastante especial

-¡Y estoy seguro que por dentro lo es todavía mas! ¡Ven, vamos! – Grito y Midoriya empezó a correr hacia el sitio, aunque al hacerlo es que cruzo la calle de manera un tanto descuidada, algo que ciertamente soprendio y preocupo por partes iguales a Momo, quien corrió detrás de el

-¡Espera, Midoriya no cruces la calle asi! – Dijo, y se fue detrás de el, aunque sus acompañantes al ver esto estuvieron en la misma posición, solamente que hacia ella, sin embargo antes de que ellas pudieran seguirles, la luz de paso paso a rojo y el trafico se dio, impidiendo que pudieran seguirles

-¡Señorita Yaoyorozu, espérenos! ¡Aaaarggh condenado trafico! – Expreso Karime, esperando ahí en su sitio a que el trafico parase, mientras que Midoriya y Yaoyorozu en cosa de nada, se habían perdido de vista

.

.

.

.

En El Interior Del Centro Comercial

.

.

.

.

Momo apenas haber llegado paseo la mirada de lado a lado, creyendo haber perdido de vista a Midoriya, sin embargo encontró a este no muy lejos de donde se encontraba, asi que entonces apenas lo alcanzo se dispuso a hablar con el sobre esa manera de haberse echado a correr… sin embargo su atencion paso de estar sobre el, a estar sobre el entorno delante a ella… sus ojos pasaron de estar molestos a abrirse con claras señales de sorpresa… bien habia dicho que no solia visitar mucho los centros comerciales… y esta visita al primero, si que le habia dejado una enorme sorpresa, pues como bien le habia comentado el peliverde, el lugar estaba repleto de locales de diferentes temáticas y cosas en el lugar, desde ropa, hasta videojuegos, centros de arcades, dulcerías, heladerías, zapateria, de todo un poco en el lugar, y su expresión de sorpresa iba en conjunto a la sonrisa de oreja a oreja de Midoriya, quien tenia los puños cerrados a la altura del pecho

- Esto es increíble… ¡Jamas habia venido a este sitio y vaya que es impresionante! ¡Mira toda la variedad que hay aquí! – Exclamo Midoriya, con aires de emoción desbordando por todos lados

- Si, es impresionante… pero, hey, recuerda, veníamos aquí a almorzar… no… no creo que sea… adecuado ponernos a explorar p-por ahí – Dijo Momo, intentando mantener la calma, pues ciertamente estaba igual o quizás mas emocionada que Izuku en ese instante, pues el no tener mucha experiencia con lugares asi le hacia saltar por dentro como niña en dulcería

- ¿Eh? ¿Pero porque no? Dijiste antes que hoy tenias el dia libre ¿No? – Pregunto Midoriya, a lo que Momo le respondio

- Pues si, es cierto pero – Intento objetar, sin embargo Midoriya se le adelanto

- Entonces no hay ningun problema si nos damos una vueltecita por aquí, después de todo, no estamos muy cerca a la hora de la comida que digamos, asi que podemos hacer algo de tiempo hasta cumplir el horario… Vamooooos, será divertido – Concluyo, si bien la lógica del peliverde era cierta, Momo aun estaba pensándolo bastante… sin embargo esa cara en el peliverde… esa sonrisa y esas esmeraldas viéndola fijamente le hicieron caer rendida ante su insistencia, por lo que suspiro resignada, antes de sonreir ladinamente y asentir - ¡Que bien, entonces vamos! – Y entonces se apresuro a irse por un costado, y Momo que lo noto se fue detrás de el

-¡Pero no te vayas corriendo asi nada mas! – Le grito, y se fue detrás de el… empezando asi su dia de descanso en compañía de un muchacho, quien a primera estancia, era muy diferente a lo que conocía… pero no se veía como alguien malo, ni mucho menos se le veía deshonesto, todo lo contrario… se veía como buena gente, y si bien tenia un humor algo explosivamente energico… era agradable

Gran parte del tiempo, al menos hasta que llegara la hora del almuerzo, se fue mayormente en una exploración profunda a lo largo y ancho de todo el centro comercial, yendo desde la primera hasta la segunda planta del mismo, dado que la tercera planta de dicho sitio estaba ocupada únicamente para la zona de alimentos… sin embargo en el camino de ambos jóvenes hubieron muchas distracciones… y entre dichas es que se encontraron con una librería y si bien Yaoyorozu en un inicio no creyo que Midoriya fuera mucho del tipo de leer, se sorprendio al ver a este adentrarse en dicha librería y explorar como si hubiese encontrado el mas grande tesoro del mundo, Momo no tardo en seguirlo, pues ella también tenia un gusto por la lectura, especialmente por las enciclopedias ilustradas mas se demostró un tanto curiosa ante el gusto literario de Midoriya, el cual no parecía estar claro pues Izuku iba desde las secciones de lectura renacentistas, hasta cosas un poco mas simples como lecturas referidas hacia las artes marciales, desde su descubrimiento, su uso y evolución hasta la fecha… sin embargo, lo encontró bastante entretenido leyendo de entre tanto que habia, un libro llamado "Bajo Un Cielo Escarlata" sin embargo no tardo nada en reconocer dicho libro y acercarse a Midoriya para buscar leerlo, este al notarlo, es que lo puso entre ambos y asi pudieron leerlo juntos en conjunto

En si el libro estaba orientado en los tiempos de la segunda guerra mundial y trataba de la historia de un jovencito italiano que no quiere saber nada de la guerra ni de los nazis, sus obsesiones tan solo eran la música y las chicas, pero que por causa de una compleja serie de eventos desafortunados para su protagonista lo llevan a servir en el ejercito alemán, y mas peor para el son las cosas cuando es reclutado como el chofer de un importante y peligroso líder alemán del momento, si que era una historia bastante larga… pero emocionante, suficientemente emocionante para que en ese instante Midoriya y Yaoyorozu concordaran en una sola cosa

-…Que historia tan triste – Dijeron para si mismo al unisono, sin embargo dada su cercanía es que estos se voltearon a ver uno al otro con ojos de sorpresa - ¿Triste?... Bueno si pero – Seguian hablando, al mismo tiempo evitando que se les fuera capaz de controlarse – Es triste porque sus padres le obligaron a unirse a los alemanes, y es el amor y el valor de una chica lo que lo mantiene peleando en… ¿Entonces tu también ya lo has leído? … Pues si, de hecho este, esta entre mis libros favoritos… ¡Deja de hacer eso! – A nada de volver a hablar, es que Midoriya fue a ser callado por la mano de Momo que fue a taparle los labios con los dedos y la palma en si

- …Como decía, ya lo habia leído con anterioridad… me gusto mucho el libro… tiene una cierta profundidad… única pero especial al mismo tiempo – Apenas retiro la mano es que dejo a Izuku con una cara un tanto sorprendida, vaya que se habia quedado con una buena sopresa

- Cierto… aunque me parecio un poco triste que su hogar quedara destrozado por los constantes bombardeos, aunque bueno, dado para la época que era y todo eso, mucha gente perdió mas que solo sus hogares… es algo triste de leer y un poco mas sabiendo que esta basado en hechos reales – Comento, para entonces llevarse una pequeña expresión atónita de Yaoyorozu, quien se sorprendio al ver lo bien que se tenia memorizado el libro

-Oh si… se perdieron hogares, trabajos… y vidas ahí… - Menciono, para entonces Midoriya dejar el mismo libro donde lo habia encontrado, para entonces ambos salir de la librería, aun tenia bastante que ver, y para empezar, estuvo bastante bien aquella tienda

Pasaron los minutos y los locales, y pronto es que estos dos alcanzaron a ver diferentes cosillas y curiosidades en el edificio, sin embargo durante su caminata a las escaleras eléctricas para subir a la tercera planta que era donde la zona de comida se encontraba, noto algo que capto su completa atencion y ese algo era a Yaoyorozu justo por delante a una tienda de regalos… parecía ser que algo llamo la atencion de la pelinegra, y al haberse asomado junto a ella a inspeccionar, es que se encontró con una grata sorpresa para el, pues en el sitio es que vio en un aparador un gigantesco peluche de oso, aunque dicho peluche era bastante curiosillo pues su barriga era de tono blanco nieve y el resto de su cuerpo era castaño, con un par de ojitos verdes, orejitas rosadas por dentro y castañas por fuera, con pequeñas garritas de tela blanca, tanto sobre sus zarpas como sus patitas 5 en cada una y vaya que era algo grande… bastante grande en realidad como del mismo tamaño de su torso entero

Midoriya no entendia del todo bien porque es que eso se debía… pero apenas girar su rostro y fijarse en Momo fue que lo entendio… y arqueo una ceja, a su manera de ver es que ese peluche habia cautivado el corazón de la muchacha pelinegra… algo que iba a recordar muy bien para después… pero por ahora, apenas ella empezó a caminar nuevamente este la siguió, ya una vez estando en la tercera planta es que la cosa se puso bastante interesante pues bien lo dijo Midoriya y es que el sitio en su tercera planta estaba bastante variado, desde lo tradicional del país, hasta cosas del extranjero platillos numerosos y bastante buenos que simplemente daban ganas de probar de todo un poco, pero luego de estar debatiendo adecuadamente consigo mismos, ambos jóvenes se fueron por probar algo tradicional y es que de entre tantos locales del tipo, entraron al mas espacioso, y tomaron asiento en donde encontraron una mesa desocupada, donde ya tenían un par de cartas del menú del lugar para poder revisar bien que era lo que iban a almorzar, y justo segundos después es que llegaría una adorable mesera con su delantal del local puesto, con una pequeña gorrita con el espacio libre para dar paso a su cola de caballo, bastante linda de perfil y sonriente

-Bienvenidos sean al Campo Okinawa ¿Cómo podemos servirles hoy? – Pregunto, para entonces Momo en ese momento bajar la carta lentamente hasta la mesa

-Yo quisiera ordenar sino fuera problema un poco de Soba con Tempura, y de beber pediría un te verde, por favor – Pidio, y a su mismo tiempo es que aquella mesera termino por anotar su orden en una pequeña libretilla que venia cargando consigo misma

-De acuerdo… listo, y para el caballero ¿Qué será? – Pregunto, volteando la mirada, Midoriya estaba dudando bastante en que responder… ciertamente tenia algo de vergüenza el pedir lo que normalmente pediría a la hora del almuerzo… si bien una parte de su ser le pedia a gritos un buen alimento, habia otra parte de el que le gritaba que se comportara en presencia de una dama como bien Momo lo era… además en ese momento era que recordaba las enseñanzas de su madre sobre los modales que tenia que tener presente, por lo que este trago ligeramente grueso, se enderezo en su lugar, y bajo su carta

- Quisiera pedir un tazon de sopa ramen… y para beber sino es molestia una soda fría – Respondio, sin embargo, apenas haber dicho eso, y siendo que la mesera estaba a punto de anotar, Momo se apresuro a decirle

-¿Eh?... ¿Solo eso? ¿Un tazon de ramen?... Midoriya, para el trabajo que has hecho estoy segura que tienes mas gran para solamente un tazon de ramen… señorita – Llamo esta a la mesera, quien se detuvo antes de escribir, para entonces fijarse en la pelinegra quien sonreía con tremenda confianza en su rostro – Espere un momento… Midoriya, no tienes de que preocuparte… yo voy a ser la que va a pagar, asi que puedes pedir lo que quieras – Declaro, sin embargo inmediatamente Midoriya abrió los ojos de par en par, y la boca casi se le fue al suelo por ello

-¿¡Eh!? ¿E-Estas segura de eso? - Las miradas de la mesera y de Momo fueron sobre Izuku, quien se vio pronto poniéndose nervioso y quizás algo sonrojado al notarlo- …N-No es por nada, pero suelo tener un apetito demasiado… como pudiera decirlo sin sonar grosero… mmmm… Agresivo… si eso, agresivo, por lo que suelo comer en grandes cantidades – Declaro el peliverde, quien se gano una pequeña risa divertida de Yaoyorozu para ese momento

- Pues eso en parte no es un problema… ¿Recuerdas lo que dije sobre mi Quirk? – Le pregunto y Midoriya paso a asentirle suavemente - Pues veras, dado mi Quirk es que yo también necesito ingerir grandes cantidades de alimento, asi que creeme cuando te digo que se lo que es tener mucha hambre… no te preocupes, voy enserio, además te lo ganaste luego de tanto trabajo que has hecho en la obra – Dijo esta, dedicándole una enorme sonrisa de oreja a oreja al peliverde

- …Ehm… B-Bueno… si tu, de verdad lo estas diciendo, no te llevare la contra

.

.

.

.
20 Minutos después

.

.

.

.

Una montaña de platos vacios estaban adornando el espacio a las espaldas de Midoriya, cualquier cosa que hubiera en el menú la pidió, y repitió por segunda vez… y aun asi no parecía tener llenadera, la gente alrededor que estaba pasando por fuera del local, o que ya siquiera estuviera dentro del mismo, estaba viendo con unos ojos muy especiales a Deku, y la mente de todo el mundo, en ese momento solamente se pudo decir "¡ESE CHICO NO ES HUMANO!" pues no estaba comiendo, literalmente estaba tragando todo lo que tenia en sus platos en ese instante… Momo por su lado era otra historia, pues si bien estaba sorprendida, no era algo que le molestara… recordaba mas de una vez haber llegado a comer en exceso por necesidades de su Quirk… sin embargo Midoriya estaba a otro nivel de su alimentación… aunque bueno… como tal no era algo desagradable para ella pero si que no le daba espacio a opinar al respecto

Pasada la comida es que ambos salieron del lugar… hubo un lapso de tiempo en el que Momo se quedo bastante pensativa con lo que habia ocurrido… Midoriya resulto ser muy diferente a lo que pensó… al menos a la primera vista claro, su altura, su físico, casi pudiera decirse que daba aires de ser uno de los tantos muchachos que buscaban acercarse a ella de maneras… quizás maliciosas… y Midoriya simplemente no era de ese grupo, sino de un grupo completamente distinto… a pesar de la altura que tenia, no se jactaba de ello, a pesar de su físico, no lo presumia, y incluso pudo notar como antes de comer semejante cantidad de alimento el estaba evitando hacerlo… ¿Seria que estaba intentando no darle una mala impresión?... ¿No quería hacer gastar tanto? ¿O simplemente era otra cosa diferente?... Era todo bastante curioso, y confuso al mismo tiempo… sin embargo estaba segura de una cosa, y es que Midoriya era buena gente, autentico, natural y bastante animado, y vaya fue a ser su suerte pues resultaba que posiblemente iban a ser compañeros en la escuela… y si era el caso, en el mismo salón

-¡Señorita Yaoyorozu! – Exclamo Karime, quien estaba llegando corriendo seguida del resto de sus acompañantes, Momo ante su grito es que termino reaccionando para fijarse en ella enteramente, sus vestidos estaban algo alborotados asi como su cabello, apenas alcanzaron de frente a la pelinegra es que todas se detuvieron y se quedaron jadeantes en su sitio - ¡Que alegría! ¡Al fin la encontramos… llevamos minutos buscándola!

-¿Buscandome?... Oh… ahora que me doy cuenta… se me olvido que venían con nosotros… lo siento, entre el paseo que tuve y la comida no me di cuenta de su ausencia chicas – Se disculpo, sin embargo, Karime termino por enderezarse en su sitio, para entonces encarar a su querida Yaoyorozu

-¿Y el chico? ¿Dónde esta ese tal Midoriya? – Pregunto la peliverde, para entonces mirar a su alrededor a espaldas de la pelinegra, pues parecía ser que no daba con el pecoso por ningun lado

-¿Midoriya? El esta justo… aquí… ¿Dónde se metio? – Pregunto, arqueando una ceja suya al no encontrar al antes mencionado por ningun lado, y que ella recordaba, el continuaba siguiéndola… ¿Se habrá ido? ¿O es que se distrajo en algun lado y se quedo ahí sin que se diera cuenta?

-Tsk… ese muchachito… seguramente ya que consiguió comer gratis, no tuvo ni la decencia de agradecer como era debido, y se fue a hurtadillas sin que lo notara… pero que descaro el suyo – Dijo Karime con gran molestia… como si hubiera deducido algo inexistente en Midoriya, sin embargo antes de que Momo pudiera decir algo, el mismo peliverde de pecas hablo… y se encontraba justo a espaldas de esta

- De hecho… sigo aquí, y ya te dije que el que me estes dando la espalda no evita que pueda escucharte – Dijo en un tono de voz algo alto, sin embargo no fue ni agresivo ni mucho menos sino mas bien fue un tono de voz bastante suave y algo amigable, aunque ante la sorpresa es que todas terminaron brincando y se apartaron del camino, para que Yaoyorozu en ese momento al chico con sus brazos justo detrás de si mismo – Lo siento, no era mi intención desaparecerme de esa manera… y lo siento todavía mas pues debo retirarme, hace poco he recibido un mensaje de mi madre, y parece necesitarme

-Oh, entiendo… entonces eso quiere decir que ya nos veremos después – Respondio Momo, un tanto… ¿Desanimada acaso? No llevaba gran parte de su dia libre utilizado… sin embargo podía estar segura en decir que se lo habia pasado bien en compañía del peliverde, aunque hubiera sido tan solo por un corto rato, casi incluso que se habia quedado algo cabizbaja por ello

-Si… asi es… sin embargo… no podía irme aun, no sin antes… darte esto – Asi entonces es que Midoriya extendió sus brazos al frente, las acompañantes de Momo se quedaron sin palabras en su sitio, y esta apenas levantar la cabeza tras escuchar eso es que se quedo igual que ellas… pues entre sus manos, el jovencito peliverde traía el mismo peluche que hace ya un rato, aquel con garritas de tela blanca, ojos verdes y barriga blanca… el cual llevo hasta Yaoyorozu, y esta lo recibió entre sus manos con gran delicadeza - …Vi como lo mirabas a través del aparador de aquella tienda… y se me ocurrio que esta seria una buena forma de agradecerte por la comida… y por haber sido tan linda conmigo – Apenas esta lo sujeto entre sus dedos, es que le solto, Momo estaba tan concentrada en admirar el rostro de aquel pequeño peluche que ni siquiera noto la enorme sonrisa de oreja a oreja de Midoriya – Bueno, será mejor que empiece a retirarme, fue un placerte conocido Yaoyorozu, ya nos estaremos viendo luego, cuídate mucho – Dijo y despidió el peliverde, con un pequeño ademan de mano para entonces darse la media vuelta y empezar a caminar fuera de ahí

En ese rato… Momo sintió un pequeño algo estrujándole el pecho y el estomago, algo que le hizo pensar bastante, es incluso en ese momento, que con una reaccion tardia, paso a levantar la mirada solo para ver como Midoriya estaba a nada de salir por las puertas frontales de aquel centro comercial, ante esto, es que aparto el peluche para entrar este a las manos de Karime, quien lo recibió un tanto sorprendida pues casi resulto que esta la empujo para luego salir corriendo tan rápido como pudiera, casi que se le habia el cuidado que debía tener al estar en tacones altos, y mientras corria, era que buscaba algo en su bolso, y hasta que lo encontró, lo saco y se trataba de una pequeña libretita, en la cual escribió unas cuantas cosas, y justo al abrir las puertas del centro y salir, es que se encontró con Midoriya a nada de irse de ahí

-¡ESPERA MIDORIYA! – Grito, causando que algunas de las personas de alrededor se fijara sobre ella, y Midoriya quien estaba confuso y algo sorprendido, se diera la vuelta para encararla

-¿Eh? ¿Yaoyorozu? ¿Qué pasa? – Pregunto este, al ver a la chica pelinegra un tanto jadeante, y quizás algo acelerada… si que se llevo una pequeña carrerilla en ese corto tramo sin embargo la respuesta se le dio cuando esta se enderezo en su sitio ya un poco mas recuperada, para entonces extender hacia el pecoso aquel papelito

-Tomalo – Le dijo, y Midoriya, sin oponerse es que tomo dicho papel entre sus manos, para entonces examinarlo… en estos es que venia el correo y el numero de la propia Yaoyorozu, y al momento de este notarlo, es que levanto la mirada para verla, y asi esta al notarlo, sonreírle una vez mas – No creo que… bueno… digo… fue un rato muy… agradable el que pasamos y sino es… molestia me gustaría que lo llegaramos a repetir alguna vez… claro sin la escuela de por medio y esas cosas – Declaro, riendo en ese instante un tanto nerviosa… ante esto Midoriya cambio su cara de sorpresa a una gigantesca sonrisa

-…Me encantaría – Respondio, para entonces tomar dicho papel con sus dedos, y buscando en sus bolsillos del pantalón es que dio con su cartera, la cual abrió y utilizo para guardar dicho papel, para entonces buscar un poco de papel que no utilizara, y apenas lo encontró, en este escribió su propio correo y numero, para extenderlo hacia Momo, lo cual ella veía ilógico dado que ella le dio el suyo primero y de cualquier manera, ella sacaría dichos cuando el le hablara, sin embargo, lo que este dijo le dio la razón asi mismo – Por si acaso

Asi de simple, es que esta termino por corresponderle la sonrisa, y es que tomo el papel y lo guardo en su bolso… una vez el intercambio se dio, ambos se dieron uno al otro una pequeña risa bastante amistosa, antes de que Midoriya guardara la cartera en su lugar, y se diera la vuelta

-¡Nos vemos luego Yaoyorozu! – Dijo este, ya empezando a correr unos cuantos momentos hacia un costado del edificio

-…Ammmm…Oye… P-Puedes decirme – Intento decirle, sin embargo, en un abrir y cerrar de ojos un aura blanquecina cubrió el cuerpo entero del peliverde desde los pies hasta la cabeza, y es ahí cuando este termino por salir volando hacia el cielo con una velocidad impropia de incluso un aeronave de hélices… o quizás alguna de turbina… bastante gente alrededor se quedo viendo aquello, claro que si bien en una sociedad repleta de super héroes ver a estos volar no era algo muuuuy sorprendente… pero tampoco era algo de todos los días… además con la fuerza y velocidad que este salio a volar fue literalmente superior a la de cualquier heroe tipo vuelo, tanto asi que incluso levanto bastante polvo… y luego de haberse descubierto el rostro por lo mismo, es que Momo sonrio de manera plena… viéndolo ahí irse por los cielos dejando una estela de energía a su paso, que lentamente con el rato desaparecia - …Momo… Jeje… bueno, ya luego se lo mencionare… de verdad fue un placer conocerte, Midoriya

Y con estas palabras, es que se dio la media vuelta, para entonces ver como sus acompañantes estaban saliendo del centro comercial, y apenas ver a Karime, fue que tomo entre sus manos su peluche, para entonces abrazarlo contra su cuerpo, y empezar a retirarse hacia el auto, que estaba estacionado no muy lejos de la entrada del centro comercial… si… hoy para ella fue un dia muy diferente a lo que acostumbraba hacer… pero habia sacado algo muy bueno de ello…

.

.

.

.

Habia conocido a un chico bastante único y especial

.

.

.

.

Continuara…