Capítulo 32

De leyenda

A la mañana siguiente Rizzo se despertó pensando en el extraño día que tuvo ayer; quería pensar que tan solo había sido un extraño sueño producto de haber comido algo en mal estado, pero en cuanto cogió el videoeemisor para mirar la hora y vio el número de Nanci en sus contactos le cayó encima como una losa de una tonelada. Definitivamente era real. A principios de verano le hubiera parecido inconcebible, sin embargo ahora parecía perder importancia, como si fuera un detalle menor. Algo en él había cambiado sin que hubiera podido hacer casi nada al respecto.

-Condenado y adorable pokémon…-masculló el chico, acordándose de meloetta.

Se levantó y fue a asearse rápidamente, bajando a desayunar tranquilamente mientras pensaba en un planning para los próximos días; por suerte tan sólo quedaba un par de días antes del sábado, así que podía organizarse como mas gustara. El combate del otro día contra Nanci y su posterior victoria le había dado bastantes ánimos, sobre todo después de saber que la chica había sido cuartofinalista. Parecía algo baladí así a bote pronto, pero tras comprobar por sí mismo cómo se las gastaba realmente no hizo más que animarle, tentándole a dejarlo estar y simplemente relajarse. Pero dado que keldeo luego seguramente se lo echaría en cara, prefirió no arriesgarse al respecto y decidió rápidamente entrenar por las mañanas intensivamente para luego poder tener las tardes tranquilas.

Miró entonces la hora y, al hacerlo, volvió a ver en su agenda el número de Nanci, dejando escapar un respingo. Aún no podía creérselo, pero ahí estaba, mirándole fijamente como si le retara a llamarla aunque sólo fuera un rato. Frunció el ceño, dispuesto a aceptar el desafío, y sin pensárselo mucho más marcó el número y se quedó esperando. La línea dio varios toques antes de que Nanci lo cogiera al otro lado, saludándole rápidamente.

-¡Ah, hola, Rizzo!

-Buenas...

-¿Sucede algo?

-No, nada en especial, simplemente me acordé de que tenía tu número y como aún no podía creérmelo te llamé para cerciorarme, eso es todo.

Ante eso la chica no pudo evitar reírse ligeramente, comentando de seguido.

-Pues es real ¿cómo te quedas?

-De piedra, oye.

Esta vez fueron los dos en reírse, observándose por un momento hasta que ella comentó de improviso.

-Ah, perdona, pero te tengo que dejar, estamos todos muy ocupados por aquí ahora mismo...

-Ah, está bien, hablamos.

-Chao.

Los dos siguientes días pasaron rápidamente debido sobre todo a la expectación por el combate de gimnasio, aunque en cuanto a preparación se refería la cosa iba bastante sobre seguro. Sin contar el combate del otro día con Nanci, en los últimos días él mismo podía percibir una mejoría notable de sus pokémon. Y es que todos y cada uno de ellos habían podido enfrentar y contener a dos pokémon legendarios como cobalion y virizion, cosa nada baladí a su parecer. El propio keldeo también había mejorado tanto en combate como en confidencia, haciéndose rápidamente a la forma de luchar más actual y estando del todo preparado para enfrentar lo que le echaran tras el pertinente entrenamiento.

Finalmente llegó el sábado y con él el tan ansiado combate, ese día estuvo haciendo tiempo viendo videoclips de la MTV en la tele del salón hasta que finalmente un chico joven le pasó el recado en torno a mediodía.

-Dice Lirio que ya puedes pasarte por el gimnasio, te está esperando.

-Ah, bien, voy.

Sin perder más tiempo se dirigió para allá con los ánimos caldeados y dispuesto a ganar. Una vez allí entró directamente al campo, donde Lirio esperaba al otro lado del mismo hablando con el árbitro. Al verle llegar, el líder habló.

-Aquí estás… que sepas que me pareces un tanto osado e impertinente, pero quiero ver de qué pasta estás hecho. Se suele decir que una personalidad orgullosa es sinónimo de fuerza, veamos si eso también se aplica a ti. Bien, vamos allá, en cuanto acabemos el combate hablaremos sobre la leyenda, tengo varias cosas que contarte.

-Muy bien, ya estamos tardando-comentó el chico, sacando una super ball.

Lirio se guardó sus comentarios y a una señal del árbitro la batalla dio comienzo; Rizzo optó por braviary y el líder sacó a un pokémon que no había visto antes, informándose rápidamente.

-Altaria, el pokémon cantor; si establece un vínculo con una persona, la envuelve con sus alas y le canta en susurros. En días soleados, le gusta mezclarse con las nubes y disfrutar de la libertad del cielo mientras trina con su voz de soprano.
-Los aspirantes empiezan primero-indicó el líder.

-Muy bien... ¡adelante, braviary, golpe aéreo!

Nada más empezar el pokémon volador se abalanzó hacia delante con gran rapidez cortando el aire hacia su oponente, el cual esperaba una orden de su entrenador. En cuanto estuvo a punto de alcanzarle, altaria se envolvió entonces en una bola del algodón que amortiguó el golpe, quedando ese ataque en nada.

-¡No te pares, cuchillada!

-¡A un lado, altaria!

Antes de que pudiera alcanzarle con sus garras, el pokémon dragón volador comenzó a revolotear con gran velocidad, haciendo complicado atinar bien y esquivando la mayoría de los golpes. Los pocos que logró asestarle apenas los notó, al tiempo que hacía gala de una velocidad y elegancia dignas de admiración. Aun así, y aprovechando que no se alejaba mucho, Rizzo indicó.

-¡Cara susto!

Desde donde estaba braviary le lanzó una intimidante mirada a altaria que funcionó, puesto que su ritmo bajó repentinamente permitiendo a braviary alcanzarla sin muchos problemas y logrando asestarle un par de cuchilladas. No le hicieron gran daño, pero le obligaron a poner distancia entre los dos, cosa que Lirio aprovechó a su favor.

-¡Llamarada!

Varias llamaradas con forma de estrella fueron directas hacia braviary, pero éste no tuvo mucho problema para esquivarlas todas gracias a que ahora podía adelantarse, haciendo varias cabriolas en el aire que sirvieron para confundirle ligeramente. En cuanto lo tuvo a tiro se abalanzó de nuevo con golpe aéreo, logrando asestarle un par de golpes que altaria soportó bastante bien.

-¡Ahora, altaria!-exclamó en ese momento Lirio, de brazos cruzados.

Al oír esa indicación el pokémon dragón volador comenzó entonces a cantar una corta pero bella melodía que, al escucharla, adormiló a braviary hasta que éste cayó al suelo completamente dormido y dándose un golpe de impresión que ni siquiera le despertó, sumido en un profundo sueño.

-¡No, braviary, despierta!-exclamó Rizzo apurado.

-¡Vamos a prepararnos, danza dragón!

Aprovechando la situación a su favor, altaria comenzó a describir en el aire un baile frenético que aumentó notablemente tanto su ataque como su velocidad. Al ver esto Rizzo se alarmó, enfocándose entonces en tratar de despertar a su pokémon.

-¡Braviary, vamos, tienes que despertarte, venga!

-¡Es nuestro! ¡Pulso dragón!-exclamó Lirio.

-¡Braviary!

Desde donde estaba altaria abrió entonces su pico y lanzó un potente rayo de energía dracónica de color morado que se precipitó sobre un indefenso braviary, el cual no parecía despertar. En cuanto hizo contacto hubo una abrupta explosión que levantó una densa nube de humo y polvo que no dejó ver nada durante unos breves pero intensos segundos.

En cuanto se despejó el humo pudieron ver entonces al susodicho envuelto en llamas y haciendo frente al pulso dragón con un gesto de furia grabado en su rostro; al ver esto Rizzo le alentó sin dudar.

-¡Eso es, adelante, ve con todo con pájaro osado!

Reuniendo fuerzas de su interior, el pokémon volador aumentó la intensidad de las llamas que le rodeaban, echándose hacia delante y logrando por un instante hacer recular al pulso dragón. Por un momento no hubo nada y, al segundo siguiente, braviary echó el resto y logró sobrepasar al pulso dragón, cortándolo en dos como un queso gruyere y abalanzándose sobre altaria, logrando golpearle con gran fuerza y haciéndole un buen daño en el proceso, aunque sin poder evitar salir regolpeado y notándolo en el proceso, cosa que aprovechó Lirio para contraatacar.

-¡Llamarada!

-¡De frente, despéjala!

Otra llamarada con forma de estrella se abalanzó sobre él, pero braviary azotó sus alas hacia delante con gran fuerza aun a pesar de las heridas, provocando una serie de corrientes de aire que frenaron y disolvieron a la llamarada como si nada. Rizzo no lo dudó en ningún instante y siguió presionando.

-¡Fuerza bruta!

El cuerpo del pokémon volador se hinchó de repente envuelto en un aura rojiza y le asestó otro golpe contundente a altaria que, por un momento, cabeceó. Al ver esto, Lirio indicó.

-¡No lo dudes, altaria, hazlo!

Nada más decir eso, el pokémon dragón volador comenzó a cantar de nuevo, pero ésta vez con un tono más sombrío y lúgubre, al tiempo que un aura oscura envolvía a ambos pokémon durante unos breves segundos hasta finalmente desaparecer como si nunca hubiera existido. El ceño de Rizzo se frunció, no muy seguro de qué había sido eso, pero él optó por seguir atacando hasta ganar.

-¡No te pares, garra brutal!

-¡Que no te toque, altaria!

Ante esa orden el pokémon dragón volador comenzó a volar a toda velocidad por todo el campo, aumentando entre medias aún más su velocidad con danza dragón y poniendo distancia entre los dos en todo momento. Braviary hizo todo lo posible por alcanzarle y asestarle golpes con sus garras, pero sus intentos por alcanzarle fueron casi imposibles debido a la velocidad que llevaba. Trató de frenarle un poco con cara susto, pero era tan veloz y estaba tan enfocado en esquivar y huir cada vez que ni siquiera vio sus muecas, librándose así de que frenara su marcha. Para entonces Rizzo ya estaba lo suficientemente mosqueado al respecto, espetándole en ese momento.

-¡Deje de huir y ataque de una vez!

Ante eso Lirio no dijo nada, tan solo le miró de cabo a rabo con gesto imperturbable y los brazos cruzados, intimidando una vez más al muchacho con su sola presencia. En ese momento altaria redujo su velocidad y braviary aprovechó para adelantarse, pero antes de que le llegara a alcanzar ambos pokémon se detuvieron en seco, al tiempo que la misma aura oscura de antes hacía acto de aparición y les envolvía durante unos breves segundos. Tanto altaria como braviary dejaron escapar un gesto adolorido en sus rostros y, al segundo siguiente, cayeron al suelo a plomo y sin volverse a levantar, para la sorpresa y consternación de Rizzo.

-¡No, braviary!

-¡Braviary y altaria están fuera de combate, tablas!-anunció en ese momento el árbitro, levantando ambos banderines hacia arriba.

El chico recogió a su pokémon aún sin comprender muy bien lo que había pasado, por lo que Lirio reveló en ese momento.

-Canto mortal pone fuera de combate a todos los que lo escuchen en tres turnos. Deberías conocer más a los pokémon y no sólo a los que entrenas. Eres fuerte, sin duda, pero te falta conocimiento.

Rizzo frunció el ceño, algo molesto por ese comentario, añadiendo en ese momento.

-Si conozco a algún pokémon o no me es indiferente, para eso está la pokédex.

-Ya veo... ¿y qué haces si por lo que sea no puedes usarla?

-Ir con todo hasta ganar.

Ante esa respuesta Lirio no dijo nada más y sacó a un druddigon mientras que Rizzo optó por magnezone, siendo éste el primero en atacar.

-¡Onda trueno!

-¡Esquívalo!

Una descarga paralizante atravesó el aire directa hacia él, pero druddigon se hizo a un lado rápidamente en el último segundo y el intento por paralizarle se quedó en nada, contraatacando rápidamente.

-¡Dragoaliento!

-¡Foco resplandor!

Ésta vez ambos atacaron al mismo tiempo, encontrándose en medio del campo y haciendo fuerza el uno contra el otro hasta finalmente estallar, formando una abrupta nube de humo blanco que envolvió esa parte del campo.

-¡Ahora, magnezone, chispa!

Acto seguido el pokémon acero eléctrico comenzó a brillar y se echó a la carrera, atravesando la nube de humo y embistiendo a druddigon, el cual recibió el golpe cubriéndose con sus brazos y frenándolo en gran medida ya que apenas lo sintió. Fue entonces cuando Lirio contraatacó.

-¡Cola dragón!

Acto seguido el pokémon dragón blandió su cola hacia delante y golpeó con ella a magnezone, lanzándole hacia atrás con fuerza; pero para sorpresa de Rizzo, éste regresó directamente a su ball y otra boto de su cinto al azar, saliendo de ella samurott.

-¡Ah! ¿Pero qué…?-masculló el chico, desubicado.

-¡Cuchillada!

Aprovechando el súbito cambio druddigon se lanzó acto seguido contra un samurott desprevenido, logrando asestarle un primer golpe contundente, pero el pokémon agua reaccionó acto seguido haciendo mano de sus vieiras, las cuales se movieron deprisa y pudieron devolverle el golpe a druddigon, el cual estuvo haciendo fuerza contra su oponente en un intento por alcanzarle de nuevo.

-¡No cedas, intenta golpearle!

-¡Muévete, druddigon!

Samurott trató de girar un poco las vieiras para descentrar a druddigon, pero éste se hizo a un lado y, con la punta de su cola, logró asestarle un golpe de refilón, siendo entonces suficiente. Samurott se vio arrastrado de vuelta a su ball, saltando ésta vez la super ball de magnezone, y regresando de nuevo al combate.

-¡Diablos, esto es de locos!-masculló Rizzo, agobiado.

Lirio esbozó una leve sonrisita antes de ordenar.

-¡Tajo umbrío!

-¡Defiéndete con bomba sónica!

Aprovechando el giro que realizaba para lanzar las bombas sónicas, el pokémon acero eléctrico giró sobre si mismo muy rápidamente, permitiéndole esquivar con facilidad las estocadas umbrías y contraatacando rápidamente.

-¡Chispazo!

Una fuerte descarga eléctrica salió disparada hacia todas direcciones, envolviendo a druddigon sin hacerle gran cosa, pero dejándole súbitamente paralizado, lo que aprovechó Rizzo a su favor rápidamente.

-¡Ahora, foco resplandor!

Aprovechando que se encontraba bajo los efectos de la parálisis magnezone atacó con fuerza, dando en el blanco y notando esta vez el golpe en sus carnes; sin embargo druddigon no se amedrentó y, lanzando un grave rugido, se abalanzó contra su oponente como un miura y le embistió con todo su cuerpo, lanzándole hacia atrás.

-¡No te pares, bomba imán!-urgió el chico.

Magnezone siguió atacando para alejarle al tiempo que druddigon también se defendía sin parar, recibiendo la mayoría de los proyectiles metálicos mientras trataba de golpearle. Por su parte Lirio permaneció de brazos cruzados, observando atentamente a druddigon, y una vez que magnezone dejó de atacar exclamó.

-¡Ahora, desquite!

Druddigon se envolvió en un aura anaranjada y justo después la soltó con enorme fuerza, al tiempo que una onda expansiva se extendía hacia todos los lados; el impacto contra magnezone fue tremendo, la fuerza lo zarandeó hacia los lados hasta que finalmente cayó al suelo, completamente KO.

-¡Magnezone está fuera de combate, druddigon es el ganador!-indicó el árbitro.

Rizzo lo recogió mientras que Lirio comentaba.

-Eres fuerte, sí, pero no todo es fuerza. Es la clave del combate y tú pareces olvidarlo.

-Muy bien, pero para mí eso es muy arbitrario… ¡vamos a por él, samurott!-exclamó él, sacando al susodicho.

El pokémon de agua saltó al campo y miró fijamente al tipo dragón, lanzándose a la carrera con gran rapidez y golpeando repetidamente a druddigon con todas sus extremidades, haciéndole un daño considerable en el proceso.

-Ya veo, represalia… bien pensado ¡desquite!

-¡Acua jet!

Antes de que druddigon pudiera liberar la energía acumulada, samurott se envolvió en agua y se lanzó como un obús sobre él; el golpe fue de impresión, y como druddigon todavía no había terminado de reunir toda la energía, le estalló en las narices, dejándolo aún más tocado.

-¡Cola dragón!

-¡Detenlo con concha filo!

Druddigon latigó su cola hacia delante, pero sus vieiras puestas en forma de cruz sirvieron para detenerle en seco, librándose del posterior efecto. Acto seguido le asestó una rápida estocada hacia delante que sirvió para descentrarle, teniéndole entonces a tiro.

-¡Hidropulso!

Samurott formó la burbuja con gran rapidez y se la lanzó al pokémon dragón, el cual se vio envuelto en ésta y expuesto a una serie de convulsiones acuáticas que la zarandearon abruptamente; si bien no le hicieron gran cosa, en cuanto la burbuja estalló druddigon cayó de rodillas al suelo, con los ojos envueltos en un brillo rojizo que evidenciaba su estado.

-¡Vamos druddigon, arriba, no te dejes dominar, dragoaliento!

Luchando contra la confusión que le atenazaba logró lanzar un chorro azulado de su boca que fue directo hacia samurott, el cual lo vio venir rápidamente.

-¡Desvíalo!

Usando entonces sus vieiras, en cuanto lo tuvo a tiro lo recibió de lleno con ella y dio una rápida estocada hacia un lado, logrando desviarlo rápidamente y quedando ese ataque en nada. Druddigon trató de contraatacar, pero la confusión le dejó dando vueltas en círculos y el pokémon agua aprovechó entonces para rematar la jugada con un rápido tajo de concha filo hacia delante, dejándole clavado en el sitio. Tras unos breves pero interminables segundos el pokémon dragón dejó escapar un respingo y su propio peso le venció, cayendo KO.

-¡Druddigon está fuera de combate, samurott es el ganador!-anunció el árbitro, levantando el banderín a su favor.

-¡Estupendo, samurott, vuelve!-exclamó el chico, recogiendo entonces a su pokémon.

Por su parte el líder de gimnasio le imitó, murmurando de seguido.

-No ha estado mal, has contrarrestado bien la defensa de druddigon… pero aún no hemos acabado.

Tras esas palabras sacó entonces un flygon, llamando la atención del chico e informándose rápidamente.

-Flygon, el pokémon místico; levanta tormentas de arena con el batir de sus alas y se refugia en su interior. Debido a esto se le conoce como el alma del desierto.

Rizzo optó entonces por lucario y ambos pokémon se retaron con la mirada esperando a la primera orden por parte de sus entrenadores.

-¡Ataque rápido!

Lucario atacó primero y se lanzó contra su oponente al tiempo que flygon hacía lo mismo con las fauces abiertas para asestarle una dentellada, pero lucario lo vio venir y, antes de que le mordiese, realizó un esbelto salto hacia arriba para luego embestirle con fuerza por la espalda.

-¡Garra dragón!

-¡Garra metal!

Ambas garras se encontraron y chascaron entre sí, saltando chispas mientras se intercambiaban golpes constantemente; en un momento dado resumieron el ataque y ambos pokémon estuvieron haciendo fuerza insistentemente hasta que finalmente el propio flygon dejó de atacar, alejándose de él.

-¡Esfera aural!

Lucario formó la azulada esfera entre sus garras y la lanzó en dirección al dragón, pero éste realizó una veloz filigrana en el aire y pudo esquivarla sin mucho problema.

-¡Cola dragón!

-¡Detenlo con palmeo!

Flygon se lanzó con su cola brillando y apuntando hacia abajo para pillarle desprevenido, pero antes de que ésta le tocase, lucario reunió fuerzas sobre una sola garra y luego la posó sobre la cola, teniendo entonces un punto de apoyo y haciendo fuerza hacia abajo para ganar impulso. Acto seguido saltó, logrando entonces librarse de ser cambiado y golpearle entre medias. Lirio pareció ligeramente impresionado al ver esto, pero aun así no se dejó amedrentar, contraatacando de seguido.

-¡Avalancha!

Con un rápido movimiento de sus patas delanteras hundiéndolas en el suelo para luego sacarlas hacia arriba, comenzaron a llover piedras enormes que se precipitaron sobre su oponente.

-¡Cuidado, lucario, ataque óseo!

Rápidamente el pokémon lucha acero blandió un hueso brillante e hizo frente a casi todas las piedras, rompiéndolas una a una; las más grandes las esquivó haciéndose a un lado o saltando, aunque no pudo evitar que alguna le golpeara de refilón. En ese momento, la voz de Lirio retumbó por todo el campo.

-¡Hiperrayo!

Sin previo aviso y completamente al descubierto, flygon soltó un potentísimo rayo de color blanco con destellos rojizos que fue directamente hacia un indefenso lucario, el cual reaccionó todo lo rápido que pudo formando entre sus patas una rápida esfera aural y soltándola a tiempo antes de que el hiperrayo le alcanzara. Por un instante logró mantener a raya el hiperrayo para luego comenzar a hacer fuerza hacia delante obligándole a retroceder unos pocos metros hasta que finalmente la esfera estalló y el hiperrayo con él, quedando ese intento de golpear fuerte en nada. Flygon lanzó un rugido amenazante, haciendo que lucario se pusiera en guardia rápidamente antes de que Lirio volviera al ataque.

-¡Tierra viva!

El pokémon dragón clavó sus garras en el suelo a gran profundidad y éste comenzó a temblar, agrietándose y a moverse bajo los pies de su oponente, el cual no se esperaba para nada ese movimiento y notando las fuertes sacudidas en sus carnes.

-¡Salta, lucario!

Antes de que le afectara aún más, el aludido flexionó sus patas y realizó un vistoso salto, librándose de los movimientos tectónicos del campo, pero flygon no se detuvo en ningún momento y Lirio tampoco.

-¡Avalancha!

Una vez más volvieron a llover rocas y ésta vez lucario apenas tuvo tiempo, viéndose azotado constantemente; muchas de ellas le golpearon, devolviéndole al suelo, y el resto se echaron sobre él.

-¡Rómpelas con ataque óseo!

Dado que no le daba tiempo a levantarse, tumbado en el suelo hizo mano de su alargado hueso brillante y lo blandió hacia delante, golpeando una roca particularmente grande que estaba a punto de alcanzarle; el golpe fue contundente, desintegrando la roca y algunas más que estaban cerca de esa, pero todas las demás alcanzaron al pokémon, el cual se quedó postrado en el suelo, un tanto magullado debido a los constantes golpes.

Antes de que Lirio siguiera presionando, Rizzo no lo dudó y recogió a lucario rápidamente. Al ver esto el líder comentó al respecto.

-Bueno, ya veo que hay algo de sentido común en esa cabecita…

Guardándose sus comentarios para él mismo Rizzo sacó a keldeo, sorprendiendo gratamente a Lirio en cuanto lo vio.

-El singular keldeo… esto se pone interesante.

-¡Pues a ver si le interesa esto! ¡Acua cola!

Keldeo latigó su cola hacia delante y una fuerte onda de agua arremetió contra flygon, pero con un solo movimiento de su cola de dragón, disipó por completo el acua cola hasta quedarse en nada, contraatacando acto seguido.

-¡Garra dragón!

-¡Intercéptalo con espada santa!

Flygon se movió primero con sus garras envueltas en un brillo violáceo, pero keldeo blandió su brillante y alargado cuerno a tiempo y le detuvo en seco, arremetiendo inmediatamente después con un mandoble hacia abajo, llegando a golpearle de refilón e impidiendo que le atacara directamente.

-¡Avalancha!

-¡Ventílatelas todas con espada santa!

Sin dejar de moverse en ningún instante, se dio la vuelta y se lanzó contra los objetivos impulsándose con varios chorros de agua salidos de sus cuatro pezuñas; a cada roca le bastó un solo espadazo para acabar echa granito y no quedó ni una entera, llenando de gravilla el campo. Tras esa demostración de fuerza y habilidad, el pokémon agua lucha aterrizó de nuevo junto a su entrenador, recogiendo su espada y mirando fijamente a flygon con gesto retador. Lirio tuvo unas palabras para él visiblemente impresionado.

-Asombroso, no por nada es singular… ¡Cola dragón!

-¡Cúbrete con rayo burbuja!

Keldeo formó entonces un grueso aro con las burbujas, rodeándole por completo y usándolas entonces como escudo.

-¿Qué es esto?-soltó Lirio, con gesto extrañado.

Flygon, aun así, se acercó a él para embestirle con su cola, teniéndolo a tiro rápidamente.

-¡Ahora, keldeo!

Antes de que le llegara a alcanzar, y sin sin romper la barrera de burbujas que le envolvía, se echó sobre él para recibirle directamente y flygon atacó al escudo de burbujas; fue entonces cuando todas estallaron a la vez con la fuerza suficiente como para frenar a flygon, cuya marcha se vio ralentizada considerablemente.

-¡Viento hielo!-ordenó Rizzo, con tonito triunfal.

Al ser mucho más rápido que él, keldeo soltó de su boca un viento helado que golpeó de lleno a flygon hasta llegar a congelarlo de golpe; el pokémon dragón tierra cayó al suelo envuelto en un gran cubito de hielo, pero aun así Lirio no se amilanó ni un ápice, exclamando de seguido.

-¡No te rindas, flygon, demuestra que eres el alma del desierto!

Al oír la voz de su entrenador, el pokémon dragón tierra reunió en su congelado cuerpo gran energía calórica que hizo brillar por dentro al cubito de hielo, al tiempo que éste comenzaba a descongelarse desde el interior. Antes de lo esperado incluso, flygon sacudió su cuerpo en cuanto el hielo perdió grosor y, de golpe y porrazo, se liberó, al tiempo que una intensa onda ígnea se precipitaba sobre un sorprendido keldeo.

-¡Atención!-exclamó Rizzo.

Sin perder el temple en ningún momento, el pokémon singular sacudió su cola soltando otra onda de agua que enfrentó directamente a la onda ígnea, deteniéndola en seco y provocando una densa nube de humo blanco en el proceso. Keldeo permaneció en guardia, pero en un momento dado otro hiperrayo hizo acto de presencia atravesando el humo y dirigiéndose directamente hacia él.

-¡Hacia delante, espada santa!

Con la punta de su espada brillando con fuerza hizo frente al hiperrayo con algo de dificultad, logrando mantenerlo a raya sin cejar en ningún instante, pero dejándole prácticamente clavado en el sitio sin apenas margen de maniobra. Keldeo miró a su alrededor buscando una salida y viendo entonces a Rizzo, el cual tan solo asintió con la cabeza y esbozando una confidente sonrisita. El pokémon singular asintió de vuelta, comprendiéndolo y pasando a la ofensiva.

En cuanto se sintió listo movió a un lado su espada y el hiperrayo se abalanzó sobre él, pero en el último momento keldeo saltó y de sus pezuñas comenzó a salir más agua, impulsándose hacia delante y teniendo a tiro a flygon, que seguía atacando desde donde estaba. Tanto el alma del desierto como Lirio le miraron anonadados, mientras que keldeo volvía a hacer mano de su espada y se precipitaba sobre él, obligando al líder de gimnasio a mascullar.

-¡A un lado, flygon!

Sin embargo keldeo fue mucho más rápido, alcanzándole desde el aire y asestándole una fuerte estocada que le lanzó hacia atrás con gran fuerza. El pokémon dragón tierra cayó al suelo frente a Lirio y no se volvió a levantar, completamente KO.

-¡Flygon está fuera de combate, keldeo es el ganador!-indicó el árbitro rápidamente.

Lirio recogió a su pokémon con la sorpresa dibujada en la cara, murmurando en ese momento.

-Eso ha sido digno de un pokémon singular, sin duda alguna, y has demostrado tener mucha más pericia de la esperada. Pero ahora voy a desplegar todo mi potencial.

Y, tras esas palabras, sacó a un fiero e intimidante haxorus que le retó con la mirada. Keldeo, al ver a su nuevo rival, no pudo contener la emoción y se abalanzó sobre él con otra espada santa.

-¡Ah, espera keldeo!-exclamó Rizzo en ese momento.

Haxorus recibió a keldeo y comenzó a defenderse de sus estocadas tanto con sus garras como con las cuchillas de su cabeza, intercambiándose golpes por doquier y logrando bloquear todos y cada uno de ellos, demostrando que estaban a la par en cuanto a fuerza se refería. Un último golpe dejó las cosas claras al respecto, aunque los dos mantuvieron el pulso por unos breves segundos, siendo roto entonces por haxorus al alejar a keldeo de una patada con su pata izquierda, obligándole a retroceder. Fue en ese momento cuando Rizzo exclamó.

-¡Mantén la distancia, viento hielo!

Desde donde estaba, el pokémon singular lanzó un viento helado por su boca que fue directo hacia el pokémon dragón, el cual tan solo se mantuvo muy quieto, recibiendo el golpe y aguantándolo como un jabato. Acto seguido, su cuerpo se envolvió en un aura rojiza al tiempo que danzaba frenéticamente, alarmando a Rizzo, el cual exclamó.

-¡De frente, onda certera!

La esfera rojiza rasgó el aire en dirección hacia haxorus, pero éste se movió deprisa y con un rápido golpe de su cola la devolvió al remitente, obligando a keldeo a apartarse para que no le golpeara. En ese momento el pokémon dragón se movió de improviso a gran velocidad, recortando rápidamente las distancias mientras preparaba sus garras para asestarle una cuchillada.

-¡Espada santa!

Una vez más, las garras y la espada chocaron entre sí, comenzando a hacer fuerza el uno contra el otro, pero entonces la cola de haxorus se sacudió envuelta en un brillo azulado y le asestó un breve golpe en su costado derecho con ella. Al punto keldeo se vio arrastrado de vuelta a su ball, saliendo en su lugar glaceon a luchar, y cogiéndole totalmente desprevenido.

-¡Atrás, canto helado!-masculló Rizzo, apurado.

El pokémon hielo se adelantó y atacó primero lanzando los cantos rodados helados hacia haxorus.

-¡Líbrate de ellos con cuchillada!-exclamó Lirio en ese momento por primera vez desde que comenzó el combate, cosa que asustó al chico brevemente.

Las garras del enorme pokémon dragón centellearon y de un solo golpe se deshizo todos los proyectiles, aprovechando entonces para adelantarse una vez más.

-¡Danza dragón!

Una vez más la danza resultante aumentó un poco más tanto su velocidad como su ataque, poniendo un poco más nervioso al chico, el cual optó por atacar aprovechando la cercanía.

-¡Colmillo hielo!

Glaceon saltó sobre él con sus colmillos envueltos en un aura helada, pero antes de que se le echara encima Lirio ordenó.

-¡Golpe roca!

-¡Barrera!

Haxorus hizo brillar su puño derecho en un aura rojiza y lo bajó de golpe, pero glaceon, rápido de reflejos, agachó la cabeza y formó la barrera, la cual paró de golpe el puño del pokémon dragón.

-¡Cola dragón!

Acto seguido, la cola de haxorus se movió rápidamente y le asestó un fuerte golpe que le lanzó por los aires hacia atrás, antes de volver a su ball y botar la de samurott, saliendo al combate.

-¡Diablos, concha filo!

-¡Buena baza!

Samurott atacó primero, logrando asestarle un par de estocadas, pero haxorus respondió inmediatamente después con un golpe directo y potenciado que le hizo ver las estrellas y cabeceando ligeramente en el proceso, aprovechándolo Rizzo a su favor rápidamente.

-¡Desquite!

-¡Cuchillada!

Ésta vez haxorus fue mucho más rápido y, usando las cuchillas de su cuello, describió un corte limpísimo en el aire, parando en seco a samurott y dañándole en el proceso.

-¡Cola dragón!

-¡Concha filo!

Ambos pokémon se echaron a la vez el uno sobre el otro y el golpe fue de impresión; tanto haxorus como samurott se vieron arrastrados hacia atrás, algo dañados, pero a diferencia del pokémon dragón, el de agua se vio forzado a regresar a su ball, saliendo en su lugar de nuevo glaceon.

-¡Danza dragón!

De nuevo el pokémon incrementó su ataque y velocidad, haciéndose un poco más fuerte.

-Esto es malo… si sigue así no tendré donde atenerme…-pensó Rizzo en ese momento, frunciendo el ceño visiblemente preocupado.

-¿Te has quedado bloqueado? ¡Golpe roca!-exclamó Lirio.

-¡Canto helado!

Glaceon atacó primero pero no eso no detuvo a haxorus, el cual se deshizo de cada proyectil helado de un ligero golpe con sus garras y se abalanzó sobre glaceon para asestarle un golpe directo.

-¡Espera!-exclamó el chico.

El pokémon hielo no se movió de su sitio y estuvo expectante, esperando una orden de su entrenador; haxorus estaba a un palmo de tocarle.

-¡Ahora, ataque arena!

Antes de que bajara el brazo, glaceon le tiró un puñado de arena a los ojos, cegándole de golpe y deteniéndole en seco; aun así haxorus golpeó el suelo justo enfrente de él con enorme fuerza, formando un vistoso cráter.

-¡Colmillo hielo!

En cuanto vio su oportunidad el pokémon hielo se lanzó sobre él con los colmillos helados y le asestó un duro mordisco en su brazo derecho, el cual comenzó a congelarse en el proceso; glaceon no le soltó en ningún momento, incidiendo en el mordisco y congelándolo un poco más rápido.

-¡Quítatelo de encima!-exclamó el líder, molesto.

Haxorus, aún con los ojos llenos de arena, giró sobre si mismo varias veces hasta que finalmente el pokémon hielo se vio obligado a soltarle, pero cayó de pie y sin ningún rasguño.

-¡Canto helado!

-¡Danza dragón!

Glaceon atacó primero, logrando golpearle unas cuantas veces, pero el pokémon dragón aguantó el tipo y aumentó su ataque y velocidad una vez más, volviéndose casi tan rápido como magnezone y algo más fuerte que keldeo. Rizzo comenzó a sudar, sintiendo la presión.

-¡Cola dragón!

-¡Ve con todo, ventisca!

Haxorus se lanzó como un miura sobre él con su cola latigando, al tiempo que una potente nevada incidió sobre él, frenándole.

-¡Aléjate, haxorus!-masculló Lirio, preocupado.

-¡No le dejes ir, rodéalo y ventisca!

Aprovechando que se había detenido, glaceon le vadeó rápidamente y, en cuanto lo tuvo a tiro, soltó otra potente ventisca que le dio de lleno, dejándole bastante tocado y ralentizándole un poco más debido al frío.

-¡Cola dragón!

-¡Colmillo hielo!

Antes de que la cola le golpeara, glaceon dio un gran salto y en la caída incidió sus colmillos en ésta, congelándosela entera; haxorus dio un traspiés hacia atrás, débil.

-¡Líbrate del hielo!

-¡Ataque rápido!

Haxorus golpeó el suelo con su cola para romper el hielo, dando resultado, pero para entonces glaceon estaba a punto de embestirle; el golpe no fue muy fuerte pero le obligó a echarse hacia atrás, visiblemente cansado.

-¡No te pares, inversión!-bramó Lirio.

-¡Mordisco!-le imitó Rizzo, al límite.

Haxorus fue primero, extendiendo su puño hacia delante, pero glaceon le bloqueó rápidamente con una barrera, para luego mordisquearle el puño, haciéndole un poco más de daño. Haxorus intentó deshacerse de él con cola dragón, pero glaceon le vio venir y saltó, teniéndolo entonces a tiro desde el aire.

-¡Ahora, última baza!

El pokémon hielo reunió entonces un buen montón de energía en forma de estrella brillante y la lanzó sobre haxorus, el cual no pudo hacer nada por bloquearla o evitarla, recibiendo de lleno el ataque. La explosión fue de impresión, formando una nube de polvo que se elevó sobre el campo durante unos breves pero intensos segundos. Glaceon cayó de pie al suelo cansado pero entero, dejando escapar varios jadeos.

En cuanto el polvo se posó se vio a Haxorus de pie pero muy malamente, apoyándose débilmente en su cola en un intento desesperado por mantenerse en pie.

-¡No, haxorus! ¡Arriba, puedes hacerlo, demuestra tu espíritu de dragón!-masculló Lirio en ese momento.

Sin embargo el espíritu de dragón se desinfló enseguida, cayendo al suelo agotado.

-¡Haxorus está fuera de combate, glaceon es el ganador! ¡La victoria es para el aspirante Rizzo de ciudad Engobe!-dictaminó el árbitro, levantando la banderilla a su favor.

-¡Sí, sí, sí! ¡Lo conseguimos, glaceon!-exclamó el chico, exultante.

Éste se lanzó a sus brazos y se dejó mimar por su entrenador, revolviéndose en su regazo; Lirio recogió a su derrotado pokémon y observó al ganador junto con su pokémon, asintiendo brevemente con la cabeza antes de ausentarse momentáneamente. Reapareció al poco rato con una bandejita y dirigiéndose a él.

-Rizzo, como reconocimiento de tu victoria te hago entrega de la medalla leyenda.

-Sí, es nuestra-masculló el chico, aceptándola y poniéndola con el resto en su medallero, quedando sólo un hueco libre en él.

-Me resulta francamente curioso… posees tanto fuerza como fortaleza, pero es como si la fortaleza tuviera un papel más significativo que la propia fuerza. No es algo raro per se, pero no suelo verlo muy a menudo en otros aspirantes con los que suelo enfrentarme, sobre todo ahora que no soy el último líder a batir-explicó Lirio.

-¿Usted también? Tan sólo llevo el combate según las circunstancias, nada más...

-Entiendo… bueno, es la hora de comer, vente conmigo y, tras eso, hablaremos sobre la leyenda-le ofreció el líder en ese momento.

Rizzo aceptó la oferta sin pensárselo mucho y el líder le llevó a su casa, en el mismo lugar donde se reencontró con Iris hace ya un par de días atrás. Allí conoció a la abuela de la chica y comió con ellos. Una vez que terminaron, Lirio y el chico se apartaron al despacho del líder y allí estuvieron hablando.

-Muy bien… entonces dices que necesitas información acerca de un tercer pokémon dragón…

-Sí, la profesora Encina cree que puede haber una conexión entre la leyenda de reshiram y zekrom y la de pueblo Ladrillo, pero no estamos seguros de qué puede ser…

Lirio se quedó pensativo por un instante y luego habló.

-La leyenda de reshiram y zekrom es clara y concisa, o al menos eso es lo que creíamos de un tiempo hasta esta parte. Encina no es la única que ha pensado en esa posibilidad, porque yo también. Y respondiendo a tu pregunta, sí, existe un tercer pokémon dragón.

Rizzo se quedó un tanto sorprendido por la seguridad y contundencia con la que decía esas palabras. Por su parte, Lirio continuó.

-Según la leyenda reshiram y zekrom salieron de un solo pokémon dragón que habitaba desde hace miles de años atrás en este mismo cantón, un pokémon dragón único y perfecto. Ese mismo pokémon dragón se hizo amigo de los que serían los hermanos gemelos que fundarían la actual Teselia. Y así fue, mediando en un mar de conflictos y problemas que inundaba la región entera, amenazándola, los dos hermanos gemelos héroes pusieron fin a las disputas con la ayuda del perfecto pokémon dragón y fundaron Teselia tal y como la conocemos hoy en día. Fueron reconocidos como héroes y en el cantón reinó la paz durante todo el periodo de Primaveras y Otoños, hasta que finalmente sucedió; los dos hermanos crecieron y maduraron, así como sendas y opuestas ideas en sus corazones. El hermano mayor decidió perseguir los ideales de los Zhou orientales, y el hermano menor se atuvo a la verdad y la realidad de la convulsa situación del periodo de los Reinos Combatientes. Ante esta tesitura, el pokémon dragón perfecto no supo cuál de los dos llevaba la razón absoluta, por lo que se dividió en dos. En ese momento, reshiram y zekrom nacieron.

-Y algo más… supongo-obvió el chico, viendo por donde iban los tiros.

-Supones bien-afirmó Lirio, antes de levantarse.

Se dirigió entonces a una cómoda cercana y de ésta sacó varios documentos y objetos antiguos, retomando su explicación rápidamente.

-No estaba del todo seguro de la existencia de tal pokémon hasta que finalmente, en mis investigaciones y ayudado por una compañera mía que es conservadora adjunta del museo de ciudad Esmalte, descubrimos una serie de pistas en los terrenos cercanos al emplazamiento original del pueblo de los hermanos gemelos. Como bien sabrás pueblo Vidriera, que alberga la liga pokémon, no está situado en la localización original en la que antiguamente se emplazaba, la cual se ubica al oeste, a pocos kilómetros de la actual. Entre ellas, encontré este extracto de lo que parece la entrada de unas antiguas memorias...

En ese momento le entregó un trozo antiquísimo de papel hecho con algodón, enfundado en unas finas láminas de plástico transparente para preservarlo. Rizzo lo leyó en parte, ya que algunos caracteres eran muy antiguos y no supo leerlos.

Se sucedió una luz muy intensa, y para sorpresa general, el grandioso dragón perfecto había desaparecido, apareciendo en su lugar dos dragones, uno blanco de ojos azules y uno negro de ojos rojos. (…) cada uno se puso del lado de uno de los dos hermanos gemelos, y éstos, dispuestos a todo por lo que creían cierto e ideal, comenzaron a batallar. (…) Pero hubo algo del que nadie reparó, ni siquiera los propios hermanos, excepto éste humilde escriba; tras la parte posterior de la muralla sur, pude ver una extraña figura agazapada tras una arboleda, observando con desazón la batalla. (…) Apenas pude vislumbrar del todo dicha figura, pero pude ver su cara antes de que éste desapareciera en dirección a los acantilados del sur; tan sólo pude ver un deformado y castigado rostro que, incluso ahora, soy incapaz de olvidar.

Tras leer el extracto, Rizzo abrió mucho los ojos, sorprendido y comentando al respecto.

-Una cara deformada… es la misma cara del testimonio de una amiga de la anciana.

-El detalle, que puede parecer menor, nos dice muchas cosas, eso desde luego. Estuve haciendo investigaciones sobre el terreno, tratando de sacar algo en claro que pudiera dar explicación a éste único avistamiento. Mi compañera empezó a realizar excavaciones justo donde sabíamos que se localizaba la parte sur de la muralla del palacio de Teselia. Y entonces encontramos esto.

Ésta vez le pasó una fotografía actual para que la viera, en ella aparecía una especie de broche acabado en punta, de color blanco, negro y gris, con un pequeño remache dorado en la parte posterior; a simple vista parecía una especie de piedra u objeto de orfebrería, pero visto de lejos parecía una muestra activa de algún tipo de material orgánico que no supo identificar. Al ver su gesto, Lirio se apresuró a comentar.

-Parece calcáreo pero no lo es. Mi compañera lo estuvo estudiando en profundidad y llegó a la conclusión de que se trata de un semi fósil, ya que halló restos de ADN en él, pero no pudieron realizar ninguna prueba de reanimación puesto que fue imposible, al no tratarse técnicamente de un fósil en sí y apenas tener material genético con el que trabajar, como si faltara algo en la secuencia. Ni siquiera pudo obtener un indicio de a quien pudiera pertenecer dicho ADN.

-Pero nos da una idea de a quien pudiera pertenecer ¿no? tiene los colores de reshiram y zekrom-intuyó el chico en ese momento, sintiéndose bastante espabilado.

-Muy bien observado, Rizzo. Debido a eso lo tuvimos en análisis durante un buen tiempo, luego se guardó en un lugar seguro. Las excavaciones se siguieron dando, esperando encontrar algo más esclarecedor. Y para nuestra sorpresa, encontramos algunos cuantos objetos de la época antigua y lo que parecía la huella de un pokémon nunca antes registrada.

Entre dichos objetos se encontraban pequeñas ánforas con escenas grabadas de reshiram y zekrom y los dos hermanos gemelos, así como algunas piezas más de orfebrería y un molde en pequeño de la huella en cuestión; ésta era ancha, bajita y con unas pequeñas garras que sobresalían bastante.

-Su huella…

-Así es, aun así nos faltaban pruebas para demostrar que la huella correspondía al mismo pokémon dragón que buscábamos. Fue entonces cuando pudimos descubrir algo revelador.

Lirio quiso continuar, pero en ese momento se oyó un estruendo apagado que resonó por toda la ciudad, haciendo temblequear los cristales de las ventanas.

-¿¡Qué demonios ha sido eso?!-masculló el líder, levantándose extrañado.

-Sonaba como un trueno…-murmuró el chico, igual de chocado que él.

Lirio se acercó a la ventana y separó las láminas de la persiana, mirando al cielo.

-No puede ser, ni siquiera está nublado…

Rizzo parpadeó y miró la hora, viendo que eran las cinco menos cuarto y quedándose a cuadros; y es que sin darse cuenta apenas, se habían tirado hablando durante gran parte de la tarde. Como el alcalde se mostraba preocupado salieron a la calle para averiguar que había sido eso, y se quedaron muchísimo más alucinados en cuanto vieron que había un enorme barco de vela volando por el cielo con todo el velamen desplegado.

-¿¡Pero qué demonios…?!

-¡Es la fragata del equipo Plasma!-exclamó entonces Rizzo, reconociéndola al instante.

Ahora tenía varios paneles desplegados a ambos lados de babor y estribor que parecían cumplir la función de alas, si no fuera por el palo mayor, el bauprés, la mesana y la forma del casco parecería de todo menos una fragata. Venía desde el sur y se posicionaba justo encima de la ciudad, en la parte moderna de ésta. En cuanto alcanzó cierto lugar hizo estacionario y, de la parte inferior de la proa, comenzaron a moverse dos placas con forma de garras, dejando a la vista un compartimento que se estaba abriendo. De éste surgió entonces un cañón que apuntó en dirección a la parte antigua de la ciudad.

-¿¡Que es eso?!-musitó Lirio.

Apenas hubo margen para contestar, en menos de cinco segundos se oyó una detonación y el cañón disparó; algo hizo explosión delante de ellos y un halo de frío intenso recorrió la calle entera, congelando todo en una fina capa de hielo y obligándoles a cubrirse los rostros. En cuanto Rizzo y Lirio levantaron la vista, vieron un enorme trozo de hielo clavado en medio de la calle, muy parecido a una gran y gruesa estalagmita. Un halo de frío glacial lo rodeaba y todo a su alrededor se comenzaba a congelar de forma lenta pero imparable.

-¿¡Qué es todo esto?!-soltó Lirio, alucinado.

-¡Es hielo!

El cañón no se quedó ahí y siguió disparando de forma ininterrumpida, formando muchas más estalagmitas de hielo a lo largo y ancho de toda la ciudad, la cual comenzó a congelarse; una vez que el cañón terminó se recogió y la fragata se retiró, dejando a ciudad Caolín congelándose por momentos.

-Es un ataque… en toda regla… pero ¿por qué?-musitó el acalde, sintiéndose impotente por momentos.

-¿Todavía te lo preguntas?-se oyó entonces una voz que venía desde el otro lado de la calle.

Rizzo y Lirio fijaron la vista al frente para encontrarse entonces con una persona non grata, al menos para Rizzo, el cual masculló al verle.

-¡Menek!

-Sí, soy yo. No puedo comprender por qué el líder se pregunta que por qué hacemos todo esto; la razón es bien simple-murmuró el sabio del equipo Plasma negro, acompañado por dos soldados.

-¡Pues no, no lo comprendo! ¡Y como alcalde de la ciudad no puedo consentirlo!-gritó Lirio, enfadado ésta vez de verdad.

-Qué iluso… tiene algo en su poder que necesitamos, se lo pediré de buenas sólo una vez…

Por su parte y a modo de respuesta Lirio sacó a su haxorus, que se encaró con ellos.

-Cubridme…-indicó entonces Menek a los soldados que iban con él.

A su señal éstos lanzaron una bomba de humo, cubriendo a su superior rápidamente y retirándose sorpresivamente.

-¡No huyáis!-musitó Lirio, echando a correr tras ellos calle abajo.

Rizzo fue tras él y no le volvió a ver hasta que llegó acción más cercana entre la zona antigua y la moderna, donde el líder y alcalde se encontraba rodeado por una numerosa tropa de soldados del equipo Plasma negro; él sólo con su haxorus se enfrentaba a todos ellos.

-¡Lirio!

-¡Rizzo! ¡Necesito que vayas al gimnasio, que no entre nadie! ¡Ya!-masculló éste, muy ocupado.

El chico obedeció y empezó a correr calle arriba, en dirección a la plaza mayor; sacó a todos sus pokémon consigo y corrieron por las calles, que se empezaban a congelar poco a poco por los enormes bloques de hielo plantados en múltiples lugares. Varios soldados le salieron al paso para pararle, pero luchas rápidas con ataques potentes distinguieron a los adultos de los muchachos. Llegó a la plaza mayor enseguida y tomó la calle que llevaba directamente hasta el gimnasio, un último soldado le entretuvo más de lo esperado, pero con una fuerte espada santa de keldeo se le quitaron las ganas de incordiar. Llegó a la entrada del gimnasio al mismo tiempo que el propio Menek salía de éste, dirigiéndose directamente a él con gesto molesto.

-Vaya, aquí estás. Eres un irritante incordio ¿lo sabias? Por algo me fijé en ti como posible traba...

-¿Qué hacías ahí dentro?

-No te interesa… ¡ahora te quitaré yo mismo de en medio para que no estropees más nuestros planes!-exclamó Menek, sacando a su cryogonal.

Él mandó a keldeo y el sabio empezó primero.

-¡Rayo confuso!

-¡Esquívalo y rayo burbuja!

Keldeo pudo evadir sin problemas el rayo confuso y luego atacó con una ristra de burbujas que incidieron sobre el pokémon de hielo, reduciendo su velocidad en el proceso.

-¡Rayo hielo!

-¡Espada santa!

Cryogonal atacó con un rápido rayo hielo, pero keldeo alzó su cuerno brillante y paró el ataque como un pararrayos, disolviendo el efecto y dejando estupefacto al sabio.

-¡Onda certera!

-¡Giro rápido!

Acto seguido soltó la onda rojiza y le golpeó en su centro de rotación, infligiéndole gran daño y dejando de girar; el pokémon cayó al suelo, completamente KO, y en su lugar Menek sacó a un weavile.

-¡Garra metal!

-¡Braviary, cúbrele!

El pokémon volador obedeció y paró con sus garras a weavile, el cual se centró en él rápidamente.

-¡Canto helado!

-¡Arriba, braviary! ¡Magnezone, bomba imán!

Braviary alzó el vuelo antes de que le golpearan los proyectiles helados y magnezone los frenó a tiempo con sus proyectiles metálicos.

-¡Tajo umbrío!

-¡Concha filo, samurott!

Desde el aire, weavile se lanzó con sus garras brillando en un aura rojiza, pero samurott alzó sus vieiras y le pudo parar a tiempo.

-¡Pantalla luz!

-¡Rómpesela con palmeo, lucario!

Weavile formó una pantalla brillante con la que se protegió, pero lucario se acercó a él en zigzag y con un solo golpe se la rajó, rompiéndose justo después.

-¡Maldita sea! ¡Pulso umbrío, vamos!-masculló Menek, acorralado.

-¡Páralo con ventisca, glaceon!

Una serie de ondas oscuras se dirigieron hacia todos los pokémon de Rizzo, pero glaceon se interpuso a tiempo y una fuerte ventisca frenó al ataque hasta disolverlo por completo; en ese justo momento keldeo saltó por encima de él, preparando su cuerno.

-¡Eso es, acaba con espada santa!-exclamó Rizzo, esbozando una gran sonrisa.

La estocada fue de impresión y weavile acabó tirado en el suelo, completamente KO. Menek lo recogió con la estupefacción grabada en su rostro, mascullando de seguido.

-Maldita sea… eres un verdadero peligro...

-¡Déjate de monsergas y dime que hacías ahí dentro! ¿¡Has cogido algo?! ¡Sea lo que sea, dámelo!-gritó el chico, harto de él.

-Aunque lo tuviera yo no te lo daría, y siendo así… piensa ¿Quién puede tenerlo?-inquirió el sabio, antes de largarse tras una cortina de humo.

Braviary aleteó sus alas para despegar el humo, pero aun así ya se había ido; en ese momento llegó Lirio corriendo sobre la capa de hielo que comenzaba a cubrir el suelo y exclamó.

-¡Rizzo! ¿Todo bien, nadie ha entrado?

-Me encantaría decirte que no, Lirio, pero Menek fue más rápido…-murmuró el chico, contrariado.

El líder dibujó una mueca de furia en su rostro y entró en el gimnasio; Rizzo esperó fuera y, tras unos cortos minutos, salió Lirio echó una furia.

-¡Maldita sea! ¡Se la ha llevado!

-¿El qué?

-¡La punta ADN! ¡La misma punta que creemos que está vinculada con kyurem!-musitó el hombre, al borde de un ataque de nervios.

-¿¡Kyurem?!

-¡Escucha Rizzo, descubrí yo mismo hace poco el origen del tercer pokémon! ¡En realidad es bien sencillo y es normal que pasara! ¡Considerando que tanto reshiram como zekrom surgieron del mismo pokémon dragón, kyurem es el resultado del resto de ambas partes!-explicó Lirio lo que no pudo explicar, todo azorado.

-¿Los restos?-resumió entonces Rizzo, extrañado.

-¡Eso es, la carcasa, la armadura vacía! ¡Reshiram es el pokémon de la verdad y la realidad mientras que zekrom es el pokémon de los ideales y los sueños! ¡Considerando esos hechos filosóficos y empíricos, kyurem es el vacío, la ausencia de todo, la nada!

-El instinto…-susurró el chico, comprendiéndolo.

-Eso es… ¿comprendes ahora lo que eso significa, Rizzo? No sé como habrá conseguido realizar todo esto el equipo Plasma, pero tengo un horrible presentimiento.

El entrenador miró a Lirio, no muy seguro de que estuviera pensando en lo mismo que él; pero en ese momento hubo una ligera corriente de aire que le revolvió el pelo y justo a su lado aparecieron tres personas que a Rizzo le sonaban de algo.

-Vaya, vaya… me parece que por fin han atado cabos…

-Era de esperar, Lirio, el maestro de dragones, no posee el título por nada.

-Ya era hora… se ha tomado su tiempo, la verdad…

-¡Los ninjas!-exclamó Rizzo al verlos.

-El Trío Sombrío… han acusado injustamente a Zeo, Maíz y Millo…-masculló Lirio, con los ojos abiertos de par en par.

-Exacto, fue fácil colocar pistas falsas para incriminarles y convencer a las personas necesarias para que testificaran en su contra-asintió el primer ninja, sonriendo mordazmente.

-Fueron unas cabezas de turco perfectas…

-Casi tanto como nuestros objetivos…-añadió el último de ellos, mostrando una especie de paquete cilíndrico.

Lirio dio un respingo y masculló.

-La punta… ahí está la punta.

Y, tras esas palabras, los ninjas dieron un rapidísimo salto, huyendo hacia el este por los tejados.

-¡Que no huyan, se llevan la punta!-exclamó el líder.

Rizzo no lo dudó y echó a correr, persiguiéndoles por toda la ciudad, que cada vez se iba congelando cada vez más, con gruesas capas de hielo; debía que tener cuidado para no resbalar y romperse la crisma. En un punto concreto en el que apenas se fijó ni donde estaban, los tres se separaron y siguió al que poseía la punta.

-¡Alto!-gritó él, pero el ninja le ignoró.

Bajó unas cortas escaleras de un solo salto y vio que el ninja saltaba desde el tejado de un edificio cercano a una de las estalagmitas de hielo, viendo entonces una oportunidad.

-Ah… ¡lucario, esfera aural!

El pokémon saltó y en el aire formó la esfera y la soltó enseguida, describiendo una elipse antes de impactar contra el hielo; una explosión arrancó un buen pedazo, pero gracias a un bisharp haciendo protección, se libró del golpe.

-Dita sea-soltó el chico, contrariado.

-¿¡Cómo pretendes alcanzar tu meta?!-le dijo el ninja, antes de volver a la carrera.

Rizzo le ignoró y siguió persiguiéndole hasta la salida este de la ciudad, donde regresó al suelo; se dio la vuelta y se dirigió a él.

-¿Cuál es tu meta? ¿Qué es lo que te mueve a hacer las cosas?

-¿¡Y a mí que coño me dices!? ¡Métete en tus asuntos!

-Claramente aún no lo sabes, pero algo te anima a seguir; tienes una meta. Nosotros tenemos objetivos, que difieren ligeramente de las metas. Por ejemplo, los objetivos han de alcanzarse cueste lo que cueste. Para alcanzar una meta, puedes seguir adelante, intentarlo de nuevo si fracasas; pero eso no es factible con los objetivos. Y es por eso que nosotros hemos de conseguirlo. Ésa es la ligera diferencia-explicó el ninja, mostrándole el cilindro que contenía la punta ADN.

-¡Déjate de monólogos innecesarios! ¡Devuélveme la punta ya o iré a por ella!

Por su parte, el ninja sacó a su bisharp y él optó por keldeo.

-¡Tijera x!

-¡Acua cola!

Una onda de gua empujó hacia atrás a bisharp, el cual se quedó con las ganas de golpear a keldeo.

-¡Cabezahierro!

-¡Viento hielo!

El pokémon acero-siniestro cargó con su cresta brillando, pero keldeo soltó un viento helado que le frenó y no pudo llegar hasta él.

-¡Guillotina!

Acto seguido, alargó las cuchillas de sus brazos de una forma desmesurada y se lanzó para golpear a keldeo con gran fuerza.

-¡Espada santa!

Con su cuerno brillando hizo frente a la peligrosa guillotina y de una sola estocada le dejó tirado en el suelo, KO. El ninja lo recogió y en su lugar sacó a un absol. Rizzo optó por lucario.

-¡Psico-corte!

-¡Esquívalo!

Lucario saltó hacia atrás y arqueó la espalda, evitando así la onda psíquica.

-¡Golpe aéreo!

-¡Palmeo!

Absol se lanzó rasgando el aire, pero lucario describió una línea recta en el aire con la palma de su pata; el resultado fue a absol dejando de atacar y cayendo al suelo, muy magullado.

-¡Golpe bajo!

-¡Intercéptalo con ataque óseo!

El pokémon siniestro se acercó a él para golpearle dos veces, pero las dos veces fueron detenidas por el hueso de lucario, el cual sólo tuvo que blandirlo una vez.

-¡Tijera x!

-¡Esfera aural!

Absol puso sus patas en forma de x y rasgó el aire con ellas, dando como resultado una fuerte corriente de aire en forma de x que se dirigió directa hacia lucario; la esfera aural disolvió la x cortante y golpeó con contundencia al pokémon, el cual se dejó caer exhausto. El ninja lo recogió y habló.

-En realidad no tienes meta, te veo perdido e inseguro… luchas bien pero te falta algo, no sé por qué Menek se pone tan nervioso contigo.

-Igual le molo…-murmuró el chico, divertido.

El ninja esbozó una ligera sonrisa divertida, pero aun así siguió a lo suyo.

-Te lo advierto, deja de inmiscuirte en nuestros asuntos o te verás seriamente perjudicado.

-Oh, qué miedo…

Y, tras eso, el ninja desapareció llevándose la punta consigo.

-Mierda-masculló el chico, por lo bajo.

Regresó a la ciudad y se encontró con Lirio ayudando a la evacuación de la ciudad sacando a la gente que se había quedado atrapada dentro de sus casas, ya que el hielo se había ido expandiendo cada minuto que pasaba y casi toda la ciudad había quedado cubierta. Enseguida la prensa se hizo eco de la noticia, aparte de la emisora local, la cual había grabado escenas de la irrupción de la fragata Plasma, de los soldados por las calles e incluso varias pero fugaces escenas de los ninjas del Trío Sombrío corriendo por los tejados. Mientras ayudaba en las tareas de rescate con su magnezone para tratar de romper el hielo, el cual era durísimo y casi irrompible, dos personas hicieron acto de presencia envueltos en una acalorada discusión.

-¿¡Qué te dije, eh, qué te dije?! ¡Que nada había acabado, jamás había acabado! ¿¡Estás contento ahora?!

-¡Contentísimo mira! ¡Con toda la ciudad congelada, el equipo Plasma de regreso oficial y tres inocentes en la cárcel estoy que reviento de alegría!

-¡Por fin te das cuenta, menos mal!

-Anda, agentes, hola-saludó el chico al verlos.

Handsome y Cheerful le miraron por un momento y el primero habló.

-¿Tú no eras el chaval que descubrió el cadáver de Kirkou?

-El mismo…

-¿Tu otra vez por aquí? Vaya, me recuerdas a cierta persona…-murmuró Cheerful.

-No te pongas a divagar ahora, tenemos un caso que se complica por momentos-le reprendió su compañero.

-Ya lo sé… no te vayas aún, chico, tenemos que hacerte unas cuantas preguntas.

Rizzo accedió a responder a sus preguntas, entre ellas la confirmación de haber visto al Trío Sombrío; el consejo de Teselia no tuvo más remedio que reconocer el regreso del equipo Plasma y poniendo sobre aviso a todo el cantón, elevando la alerta a naranja. Y, por supuesto, se dio la orden de liberar cuanto antes a Zeo, Maíz y Millo de la cárcel.

En cuanto la evacuación terminó y todos estuvieron fuera de sus casas congeladas los vecinos tuvieron que movilizarse por entero y así ciudad Caolín se quedó congelada y abandonada, cual ciudad fantasma. Rizzo regresó a pueblo Ladrillo para pasar allí la noche, junto con otros tantos vecinos que buscaban algún lugar en el que quedarse mientras se resolvía el asunto; antes de irse, Lirio le pidió encarecidamente que tratara de recuperar la punta ADN como fuera, a lo que se comprometió sin poder siquiera negarse. A esas alturas, y por mucho que le jodiera, la cosa había escalado a mayores muy de golpe y por mucho que quisiera mantenerse alejado de todo ese asunto, el asunto le había alcanzado a él y no podía seguir ignorándolo por mucho más tiempo. Era tiempo de actuar. Y lo haría encantado.


-Entonces ¿puedo contar con vosotros con este asunto? Sois mi último recurso, todo lo demás ha fallado y ni siquiera me escuchan aun a pesar de mi nueva posición...

-No se preocupe, campeona, ayudaremos encantados.

-Sí, después de todo me deben una bien gorda esos canallas, me quisieron suplantar hace dos años atrás y no se lo pienso pasar.

-Gracias, muchas gracias, con vosotros a mi lado ésta vez podremos...

-¡Campeona, campeona!

-¿Qué sucede, Lotto?

-¡Ha ocurrido algo en ciudad Caolín, ha sido el equipo Plasma, no se lo va a creer!

Antes de que alguien pudiera decir algo más, la tele más cercana se encendió mientras pasaban imágenes del estado actual de la misma.

-¡Oh, es terrible!

-¡¿Cómo se atreven esas sabandijas?! ¡Me vengaré!

-¡Qué emocionante giro de la trama, es realmente inspirador aun a pesar de la gravedad, he de anotar esto!

Pero para entonces ella no oía nada. Su corazón ardía de rabia y sus puños se apretaban con fuerza, presa de una furia que hacía tiempo que no sentía. Era de hora de moverse. Esta vez sí.


¡Y aún más Pokémon! The plot thickens! XDD vale, tenía ganas de llegar a este punto, hablemos un poco de este capítulo.

El combate de gimnasio está bastante íntegro a cuando lo escribí en su día, salvo por el primer asalto con altaria y algunos detalles y añadidos extras durante la revisión, está todo casi sin tocar. Ésta vez glaceon se ha lucido de lo lindo, estoy seguro que los fans del pokémon estarán contentos. Por otro lado tenemos el asalto del equipo Plasma a ciudad Caolín, un momento bastante épico en los juegos y que he aprovechado muy bien, además de ampliar detalles extras en la leyenda de reshiram y zekrom pero con el añadido de kyurem. Tranquilos que, aunque parezca que no ata para nada a lo visto en pueblo Ladrillo, al final todo tendrá sentido. La parte final es nueva ya que en el original no sucedía, pero he aprovechado para ir mostrando poco a poco los posteriores efectos del ataque. En su momento llegué a pensar en partir en dos el capítulo por si por un casual salía demasiado largo, pero al final preferí dejarlo así ya que después de todo, todo sucede en el mismo momento del día y hubiera quedado raro separarlo sin más.

Y nada más de momento, la cosa se escribe sola, así que seguiré y le daré caña para llegar cuanto antes al desarrollo del conflicto, que con ése sí que tengo ganas de ponerme. Comentad, dejad reviews y todo eso. ¡Nos leemos!