RinMakoto. Raiden es un gran jugador que Yoko no dejará ir y ahora no solo él está en su mira, sino que también va por Yu, solo queda ver que pasa.
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Sin más, comencemos…
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Yoko había decidido trata de reclutar a Raiden, aunque este no aceptaba del todo alegando que quería dedicarse de lleno a su vida universitaria, por lo que sabiendo que aún faltaba para convencer de lleno al peli rojizo, por mientras, fue tras alguien más que era bastante llamativa para muchos equipos, considerada una prodigio del hockey.
- ¡Abuela, alguien entró ilegalmente! ¡Llama a la policía! – no obstante, la abuela de la peli azul ya estaba abajo.
- ¿Para qué llamarla?
- ¡Abuela!
- ¿Es amiga de Yu?
- Pos supuesto, ¿Por qué no hablamos adentro?
- ¿Qué? – Yu estaba confundida por eso, pero sin más, su abuela invitó a Yoko adentro, por lo que no le quedó de otra que atenderla. La señora le dio una dona y té a la entrenadora de los Dream Monkeys.
- Vamos Yu, ¿Qué pasa? – la peli azul no decía nada.
- Las dejo solas – la abuela de Yu se fue dejando a ambas con tiempo y espacio para hablar.
- Que genial es tu abuela – exclamó la entrenadora mientras que Yu no decía nada – Kawakami Atsumi, la entrenadora del equipo que abandonaste, Snow White de Kushiro, fue compañera de equipo y es una amiga mía.
- ¿Y eso qué?
- Me enteré de todo gracias a ella – Yu solo frunció el ceño – dime la verdad, ¿dejaste el hockey sobre hielo?
- Sí.
- ¿Te arrepientes?
- No me arrepiento, por eso me fui de Kushiro y vine acá. Dejé el hockey para comenzar mis estudios de Preparatoria.
- Ya veo.
- Jugar hockey es lo único que hice desde la escuela primaria y seguí así hasta la secundaria, por eso es que nunca pude hacer las típicas cosas que hacen las chicas de mi edad, por lo que es mi única oportunidad de hacer muchas cosas fuera de practicar solo hockey – las palabras de Yu fueron recibidas bien por Yoko.
- Te entiendo, aunque también me lamento por eso. Es más, aquí en Nikko poseemos un equipo de hockey sobre hielo llamado Dream Monkeys, pero supongo que ya lo sabías – eso impresionó a Yu – por si estás interesada, entonces llámame.
- ¿Qué? – la peli vino tinto le pasó una tarjeta en donde venía su número de teléfono.
- Por cierto, no eres la única a la que quiero devolver al hockey, solo déjame preguntarte una cosa, ¿conoces a Mochizuki Raiden?
- ¿Mochizuki Raiden? Por supuesto que he escuchado sobre él, un jugador nato del cual, si sentí admiración, aunque luego se retiró de la nada, supongo que, si pudiera decir, él lo hizo…
- Por los mismos motivos – exclamó Yoko terminando la dona y el té – recuerda, estaré esperándote Kiyose Yu.
- … - la peli azul no dijo, sin más, Yoko se fue de la residencia dejando a una Yu bastante pensativa sobre qué hacer, tenía el número de la entrenadora, pero su mente no le daba una elección propia.
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Al día siguiente…
Raiden estaba en la universidad con su viejo amigo Keiji, ambos estaban en la pista de patinaje que poseía el campus, algo que los impresionó.
- Muy bien, luego de la teoría, vamos a poner todo en práctica, por lo que necesito que se coloquen los patines que les queden y luego vamos a ir patinar – los estudiantes asintieron y se colocaron los dichosos patines, casi todos a excepción de Keiji y Raiden parecían tener experiencia en patinaje.
- Esto me trae viejos recuerdos.
- A mí también, aunque siento que es como la primera vez que me metí a patinar, no lo he hecho en mucho tiempo por lo que no sé si estoy oxidado.
- Lo mismo que yo Raiden, nos fuimos casi al mismo tiempo, aunque yo me fui al tiempo que te saliste del equipo.
- Bien, antes que nada, quiero saber quiénes han tenido experiencia en patinaje – ambos chicos levantaron la mano ante la pregunta de su entrenador y maestro – ok, Mochizuki y Katsura, ustedes liderarán la vuelta, los demás quiero que los sigan, sé que patinar es nuevo para muchos, pero como cualquiera cosa que tenemos nosotros, con hacerla una y otra vez hace que el cerebro la memorice y luego la hace algo bastante fácil, ¿entendido?
- ¡Sí! – los demás siguieron a ambos chicos los cuales patinaban como si nada, algo que llamaba la atención de los demás estudiantes ya que ellos lo hacían ver tan fácil y eso que a muchos les costaba tan siquiera ponerse de pie sobre el hielo; mientras eso pasaba, el entrenador Saginuma solo los veía.
- A pesar de que crean que no lo sé, conozco bien a muchos de los mejores jugadores juveniles de hockey y por lo que veo, no han perdido la condición física, aunque con más entrenamiento podrían retomar un nivel más alto, en especial Mochizuki que es posiblemente el mejor jugador juvenil de hockey sobre hielo.
Mientras Raiden estaba en sus clases, las demás chicas también tenían lo suyo, es más, gracias a los entrenamientos de Raiden y a todo el empeño que habían puesto, ya eran casi parte del equipo.
- Aun no me lo creo, mañana seremos oficialmente parte de los Dream Monkeys – exclamó con alegría Manaka mientras comían, estaba junto con Kaoruko, Riko y Naomi.
- Y nos darán nuestros uniformes.
- Así es, la verdad es que ya me imagino hacerlo.
- Me hubiera gustado portar el dorsal número 18 – dijo Naomi recordando que cuando les preguntaron qué número podrían llevar, ese se decidió por el 18, sin embargo, Yoko le informó que ya había sido tomado.
- ¿Por qué ese número?
- Un jugador que admiro lo lleva y realmente me hacía ilusión llevarlo.
- Pero espera, elegiste otro número que fue el 88, eso es genial – exclamó Manaka.
- Por cierto, Mana, ¿Qué número escogiste?
- Es una sorpresa.
- Vamos Mana, ya dinos – mientras Kaoruko y Manaka estaban en eso, Riko notó algo y fue alguien que pasaba de largo, pero a ella le llamó la atención.
- ¿Qué no es… Kiyose Yu?
- ¿Quién Riko-chan?
- Esa chica se parece mucho a Kiyose Yu, una jugadora de Snow White.
- ¿Y es buena?
- Tú dirás, es una JMV sub-16.
- ¡Es impresionante!
- Pero si estamos en Nikko, no entiendo que esté haciendo alguien como ella aquí.
- Tal vez se haya transferido aquí, mira que ustedes tienen en su casa a un jugador que fue casi profesional como Mochizuki-kun – habló el peli rosa mientras que recordaba algo – al final iremos allá ¿verdad?
- Por supuesto – cuando la escuela acabó ese día, Naomi, Riko, Kaoruko y las hermanas Mizusawa fueron a la tienda de hockey para ver el equipamiento que llevarían. De hecho, para ya el día siguiente llegaron listos los uniformes para ellas.
- Muy bien, vamos a repartir los uniformes – exclamó Yoko abriendo las cajas con las vestimentas de las chicas, comenzaron justo con la portera – Número 15, Yanagida Kaoruko.
- Gracias – la peli rosa tomó su equipamiento.
- ¿Por qué el 15? Será porque…
- Fresas.
- Es que ella realmente ama las fresas.
- Número 24, Saginuma Riko – ahora fue el turno de la rubia la cual recibió su uniforme.
- Genial.
- Número 88, Takagi Naomi.
- Gracias – la peli negra miraba con alegría su uniforme – el de Rikorin y el mío son nuestros números de la escuela primaria.
- Es un lindo gesto de amistad de ambas.
- Número 10, Mizusawa Ayaka.
- ¿Por qué ese número?
- Porque es el número de su cumpleaños.
- Eres un poco quisquillosa.
- Ahora el último, Número 1, Mizusawa Manaka.
- Que buen número – exclamaron las demás, aunque parecía que Ayaka no estaba tan sorprendida sabiendo las cosas que pensaba su hermana mayor. Unos minutos después, las cinco chicas ya estaban vestidas con sus uniformes, con casco y todo, aparte de que Kaoruko llevaba más protección por ser la portera.
- ¡Se ven muy bien! Ahora vayan a dar una vuelta con los trajes – mientras las chicas hacían eso, tanto So como Yoko las miraban.
- Por cierto, ¿Qué ocurrió con Kiyose Yu? ¿Te rendiste?
- No, ella vendrá, ya lo verás – sonrió la entrenadora – le di una oportunidad, aparte de que dejé algo para que ella venga sí o sí.
- ¿Y qué hay de Mochizuki Raiden?
- Con él si no te puedo asegurar, pero estoy casi a un 80% de que él se unirá – aunque su asistente no comprendía todo lo que la peli vino tinto pensaba, solo confiaba en que haría algo para que Yu se uniera al ataque como fuera.
Una hora después, Raiden estaba volviendo de la universidad en su moto cuando pasaba por el estadio Nikko, aunque luego de eso, decidió estacionar su vehículo para ver algo del entrenamiento de las chicas, no obstante, sintió una presencia detrás de él y al ver, se sorprendió.
- No me lo creo – susurró la figura mirándolo – ¿eres Mochizuki Raiden?
- Sí, pero si mal no recuerdo, tu eres Kiyose Yu ¿no?
- Así es, es raro ver a alguien que resultó ser de los mejores jugadores promesa del hockey esté aquí, ¿Qué haces?
- Vengo a ver unas amigas que están entrenando, ¿y tú Kiyose-san?
- Estoy aquí para devolver esto – esta sacó un bolígrafo con la marca del equipo Dream Monkeys.
- Ya veo, entonces te acompaño – la peli azul asintió, no tenía nada que perder así que fue con el peli rojizo, era extraño ver a dos de los mejores jugadores a nivel nacional ir así como si nada, salvo que no tenían mucho de que hablar, aunque un tema que era más que obvio que podrían dar era el deporte que habían practicado.
- Esa Yoko que me manda a actuar con Kiyose Yu, espero que ella no me encuentre extraño por… - So había sido enviada por la entrenadora para encontrarse con Yu y traerla para hacerla entrar al equipo, pero no se esperó ver a Raiden con ella.
- Pues la verdad solo vengo a dejar el bolígrafo.
- Ya veo, como te dije, vengo a ver unas amigas que recién se metieron a este equipo, pero espero que les vaya bien ya que me comentaron que hoy entrarían de forma oficial a Dream Monkeys – para Yu eso era algo que le llamaba la atención, pero de igual forma solo estaba esperando a llegar a la pista de patinaje en donde Raiden estaba seguro de que Yoko estaría.
- Parece que no tengo que hacer mucho para llevarla allá – unos minutos después, ambos chicos llegaron a la pista en donde Yoko notó como sus objetivos estaban ahí.
- Tal parece que no ocupé traerlos uno por uno, ya con los dos aquí ya tengo todo lo que quería – pensó Yoko sonriendo por lo bajo, sin más, la peli azul fue hacia donde estaba.
- Te olvidaste de esto en mi casa.
- Gracias, no te hubieras molestado en traerlo, pero te lo agradezco de todos modos – decía con falsa sorpresa la entrenadora del equipo, Manaka se acercó a ellos.
- Mochizuki-kun, viniste a vernos.
- Salí temprano de la Universidad, por lo que vine a verlas ya que ahora que pasé frente al estadio, aparte de que me encontré con Kiyose-san.
- ¡Es cierto! – la peli naranja se dirigió ahora a la peli azul – un gusto, soy Mizusawa Manaka, ¿has venido a unirte al equipo? Siempre aceptamos nuevas jugadoras.
- No vine a unirme, ya terminé a lo que venía.
- Vamos, ¿Por qué no haces una prueba?
- ¿Qué tipo de prueba?
- Haz cinco disparos al arco, si una de nuestras chicas ataja uno de los disparos te unes al equipo ¿te parece?
- ¿Qué estás diciendo? ¿Qué clase de prueba es esa?
- ¿Te unirás al equipo? ¡Genial!
- No estoy decidiendo si sí o no, ya tengo mi posición.
- ¿Acaso no tienes confianza en ti? Adelante, si eres tan buena no tienes nada que perder – ante la presión, Yu aceptó el trato.
- Ok, lo haré, pero no me contendré ¿bien?
- Sí, aunque también quiero hacer lo mismo con Mochizuki Raiden, te pongo la misma prueba, si una de mis chicas logra atajar un disparo tuyo, te unes al equipo como preparador físico ¿entendido?
- No entiendo porque me dice que haga eso, no obstante, mi respuesta sigue firme, pero vamos a hacer esto entonces, no tengo problema con mostrar mis verdaderas habilidades en el hockey – el peli rojizo sonrió por lo bajo, Yu no entendía esa actitud del chico, pero ya había decidido competir, ahora, se vendría la prueba para Yu y Raiden.
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Continuará…