Notas: Próximo capítulo Longbourn.

PPP

A pesar que, el tobillo del Sr. Gardiner estaba aún muy hinchado y le dolía cuando apoyaba el pie, el consejo del doctor que permaneciera en reposo al menos tres días más y las vehementes protestas de su esposa, se levantó de la cama y decidió salir esa misma tarde hacia Longbourn.

Sabía que Elizabeth estaba dispuesta a viajar en la diligencia a Longbourn, e incluso se había enterado que el Sr. Darcy amablemente se había ofrecido a prestarle uno de sus carruajes con sirvientes, e incluso a acompañarla.

Pero no quería abusar más de la generosidad del Sr. Darcy, sumado a que sabía que sus hijos – que habían quedado al cuidado de su hermana y Jane - sus sobrinas y su hermana en ese momento lo estaban necesitando.

Otro aspecto que le preocupaba, era que su esposa estaba convencida que el Sr. Darcy tenía mucho interés en Elizabeth. Él también sospechaba que era así, pero como no había tenido ocasión de verlos juntos, no podía afirmarlo.

Su esposa no creía que Elizabeth sintiera lo mismo por el Sr. Darcy, ya que muy pocas semanas atrás se había comprometido con su hermano… pero veía con mucha preocupación que varias veces los había visto juntos caminando por el jardín. Además, las veces que estaban en compañía solían conversar muy animadamente.

A primeras horas de la tarde, dos fornidos lacayos estaban terminando de cargar el carruaje para emprender el largo viaje.

En ese momento, Georgiana se acercó a Elizabeth, que estaba absorta en sus pensamientos, y la abrazó fuertemente. Permanecieron de esa forma por varios instantes en silencio. Las dos jóvenes habían prometido que iban a mantener una fluida correspondencia.

Posteriormente, Darcy se acercó a Elizabeth, le apretó suavemente la mano, y le dijo en voz baja, "Por favor, Srta. Bennet, mande mis más sinceras condolencias a toda su familia." La miró a los ojos con ternura y en voz aún más baja agregó, "Se que no es el momento oportuno para decirle esto, pero después de la cosecha voy a ir a Londres, y su usted está de acuerdo, me gustaría visitarla en Longbourn."

Elizabeth lo miró muy sorprendida, y se sonrojó. Su corazón latía muy fuerte en su pecho; no podía negar que la idea que fuera a visitarla a Longbourn la alegraba muchísimo. Pero no era correcto que la fuera a visitar cuando estaba comprometida con otro hombre. Cerró los ojos y trató de pensar en el Coronel Weston, pero a su mente solo acudieron imágenes del Sr. Darcy. Si era honesta consigo mismo, prefería al Sr. Darcy y no a su prometido. ¿Cómo podía haber pasado eso? ¡No era Lydia, ni Kitty, que les gustaba un caballero diferente todos los meses! Además, el Sr. Darcy no sabía lo que había pasado con Lydia. Estaba convencida que cuando le contara, no iba a querer saber más nada de ella.

El Sr. Darcy pensó que la falta de respuesta significaba que lo estaba rechazando. Le dijo con tristeza, "Por favor, perdóneme por importunarla en este momento..."

Por impulso, Elizabeth le tocó el brazo y le respondió, "Sr. Darcy, en estas últimas semanas han pasado varias cosas que en cuanto las sepa es muy probable que no quiera tener ningún tipo de asociación con mi familia. Mi hermana menor..."

Darcy la interrumpió, "Ya sé que se ha casado con Wickham. Leí el anuncio en el periódico."

Elizabeth lo miro aún más sorprendida, y antes que pudiera decir algo más, su tío - con ayuda de un lacayo - se acercó a ellos. Le agradeció nuevamente al Sr. Darcy todo lo que había hecho por ellos.

Dado que Elizabeth y Darcy no tuvieron ocasión de continuar la conversación, Darcy interpretó que el único motivo por el cual Elizabeth no había dado inmediatamente su consentimiento para que la visitara era por lo que había pasado con su hermana. Por su parte, Elizabeth estaba demasiado sorprendida que, aun sabiendo el escándalo de Lydia, el Sr. Darcy quisiera continuar la amistad. Aunque sabía que era probable que, con el tiempo y la distancia, el Sr. Darcy cambiara de idea. Además, era imperativo que ella lograra aclarar su mente y sentimientos. La situación no era justa para el Sr. Darcy ni para el Coronel Weston.