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Encuentro Inesperado

Kakashi y Tsunade tenían una cara de fastidio a consecuencia del Naruto escandaloso que estaba delante.

— Por favor, Kakashi-sensei permita que vuelva a las misiones.

— Ya te dije que no irás a ninguna misión hasta que tu prótesis sane. La transferencia fue hace poco, necesitamos ver cómo actúa y si hay interferencias con tu chakra. Deja de quejarte de una vez, niño. — Regañó Tsunade con una vena en la frente.

—Abuela, ¡ya estoy bien! ¿Que no confía en su trabajo?

— No seas tan maleducado, Naruto. Lady Tsunade tiene razón. Las células de Hashirama deben adaptarse y convivir con las tuyas. Mientras tanto, no hay ninguna misión para ti. Deja de molestar y vete a estudiar, que si todo sale bien, este año tendremos nuevamente los exámenes Chunnin, y si no me equivoco, la parte escrita se te da muy mal.

Abatido, Naruto sólo pudo dejar un soplido para iniciar nuevamente con su monólogo.

— Por cierto, Naruto, te lo diré yo antes que nadie. — El peliplata posó su mirada directamente en Naruto. — El consejo aprobó que Sasuke estuviera en confinamiento en la aldea, antes de que se decida realmente si vuelve a libertad.

Aunque el último sobreviviente del clan Uchiha se había mostrado cooperativo desde su arresto, aún había quienes se encontraban reacios ante su liberación. El mismo Kakashi le expuso estas circunstancias al azabache el día anterior cuando le visitó para darle avances sobre la limpieza del nombre de Itachi, así que nada estaba decidido.

— Le expliqué que se mantuviera con un perfil bajo ya que de él depende mi puesto como Hokage, así que también te lo pido a ti. No hagas ninguna idiotez.

Naruto lo miró con semblante resplandeciente.

— ¡Kakashi- sensei! Es usted el mejor Hokage de la aldea, después de mi papá, claro… Y de la abuela Tsunade. — Agregó cuando sintió la temperatura de la oficina subir debido al carácter de esta última.

— Bien, le iré a contar las buenas noticias a Sakura, se pondrá muy felíz. — A Kakashi no le dio tiempo de agregar nada porque después de hacer su anuncio, Naruto salió corriendo de la oficina.

Después de un momento, Tsunade retomó la conversación.

— Volviendo a lo importante, Shizune llevó el pergamino a descifrar, sin embargo, el equipo no ha encontrado nada.

— Supongo que tardará unos días. Lo único que queda es seguir patrullando. — Kakashi soltó un suspiro y cambió de tema. — ¿Cómo va la investigación médica de la que me informó?

Tsunade se acercó a la ventana que se encontraba al costado del nuevo cabecera de la aldea y miró a la proximidad.

— Mi equipo se está encargando de ello. Falta únicamente el análisis de 6 pacientes debido a la interrupción causada por el reporte del pergamino, pero se acordó que los restantes estarían asistiendo al hospital para un proceso más rápido…. Entre esos pacientes está él, así que te avisaré si encontramos algo en su rinnegan.

Ambos entendían la importancia de prever efectos indeseables a consecuencia de la amenaza que hasta hace poco parecía regir el universo. La prioridad ahora era la paz.

— No sé en qué momento elegí aceptar el puesto. — Por fin aceptó un Kakashi abatido y avergonzado

Tsunade se rió por lo bajo.

— Y espera a que los viejos del consejo te pongan la contra cada que respires.

Temari y Shikamaru caminaban por las calles principales de la aldea. La rubia había llegado a la aldea hace dos días y desde entonces Shikamaru había fungido como su guía. No era de esperarse ya que éste último había comenzado a trabajar en el edificio Hokage recientemente y Temari era la hermana del Kazekage. La guerra había unificado las relaciones con las demás naciones, pero aún debían conservarse.

— Gaara quiere que la Arena sea la nueva sede para los exámenes Chunnin , pero nada está decidido aún. Mi hermano cree que sería buena idea retomarlos ahora que la guerra terminó.

— Konoha tampoco parece haber decidido nada todavía, sin embargo Kakashi está de acuerdo con la propuesta de Gaara. Los exámenes serían buena idea para forjar nuevos ninjas ahora que hubo tantas bajas. — Shikamaru miró al cielo cuando una nube pasaba. — Las cosas parecen avanzar no obstante hay demasiado por organizar, y queramos o no, las aldeas siguen en construcción. Qué fastidio.

— Lo dices cómo si estos cambios no fueran para bien. — Exclamó Temari.

— No es eso, es sólo que a veces siento que aún me falta mucho para tener la claridad que mi padre tenía en estos casos de incertidumbre.

— Obviamente, él era un ninja experimentado y tú sólo eres Shi-ka-ma-ru — . Retó ella con una sonrisa.

— Qué fastidiosa —. Se quejó con una sonrisa débil. — Aunque… hay algo que me molesta del reporte que le entregaste a Kakashi. Sé que el equipo de Kanguro encontró dos cuerpos entre la frontera del país del Viento y del Fuego, pero justamente el equipo ANBU ayer encontró dos más en la frontera sur de la aldea. Sea quién sea el autor, sabe lo que hace —.

Temari asintió mientras seguían caminando hacia la entrada de la aldea..

— No sería raro si alguien intentara crear una revuelta entre las naciones ahora que las circunstancias son inciertas. Dile a Kakashi que Gaara le informará cualquier avance en la investigación y que también nos haga saber cuando descifren el pergamino que encontraron. — Al llegar a las puertas, Temari se despidió. — Cuídate Shikamaru. Te veo después.

Shikamaru asintió en forma de despedida.

Naruto ya había visitado la prisión, el viejo departamento de Sasuke, la tienda de té y a todos los posibles lugares que éste solía visitar cuando eran gennin y no podía encontrarle. Odiaba que su amigo tuviera la habilidad para siempre esconderse de él. Era injusto que ahora que podía pasearse por las calles sin un vigilante pegado a su retarguardia, no haya ido a saludarle; habían pasado meses desde que su compañero de equipo había sido arrestado que quería enormemente verle, pero el descendiente Uchiha era como el humo que de repente se esparcía.

Fue entonces cuando le vio sentado en la planada del río.

—¡TEMEEE! — dijo saludando con una sonrisa mientras levantaba los brazos.

Sasuke volteó y después de un leve vistazo, volvió a posar la mirada con indiferencia al caudal del río.

—¿Qué no me escuchaste, Teme? — Regañó su amigo mientras llegaba corriendo a sentarse a su lado. — La prisión no pudo quitarte esa actitud tan apestosa que te cargas, ¿verdad? — dijo Naruto para molestarlo.

Sasuke resopló.

— Kakashi-sensei ya me contó que estarás libre en la aldea en lo que arregla todo. El azabache asintió.

— Al parecer quiere que coopere con investigaciones del Rinnegan.

— ¿Qué planeas hacer mientras tanto? ¿Ya tienes dónde quedarte? Puedo hacerte un lugar en mi departamento — El rubio al parecer ya había planeado tener un compañero de piso.

— ¿Y vivir contigo y mil tazones de ramen por doquier? No. Gracias. — Naruto le miró con los ojos entrecerrados. — Volveré a mi viejo departamento.

— Oye Teme, ¿porque no vamos a comer más tarde para festejar?

— No puedo.

— Sasukeeeee. Vamoooos. Es la primera vez desde la guerra que el equipo siete vuelve a estar completo.

Sasuke se levantó y después de sacudirse las hojas, comenzó a subir la cuesta. Naruto imitó sus acciones

— No puedo. Kakashi quiere que pase al hospital. Así que ya me voy. Quiero darme un baño y limpiar el departamento antes de hacer lo que quiere.

"Olvidé que es muy aburrido" balbuceó Naruto.

— Logré escucharte Usurantonkachi. — Dijo Sasuke con paso sereno.

— Pues qué bueno, porque eres muy aburrido.

— Y tu muy ruidoso.

Naruto le dio un codazo a su amigo, y éste se lo devolvió con él único brazo que tenía.

Ambos caminaron siguiendo la calle paralela al río.

Una joven con coleta y marcas rojas en las mejillas lideraba un escuadrón por el bosque de Konoha. Las personas que le seguían también iban montados en perros.

— Muy bien, Kiba y yo rastrearemos el área este; ustedes tres la oeste. Nos reuniremos aquí en 10mnts. — El nuevo grupo formado salió en la dirección contraria ante la orden.

— Oye, Hana, ¿hasta cuándo podré dirigir yo un escuadrón sin tu ayuda? —. Dijo el chico con colmillos, el cual era menor que ella. — Estoy cansado de que siempre pierda genialidad cuando estoy contigo. En este momento Sai se encarga por sí solo de un escuadrón ANBU.

— Sinceramente estás comenzando a desesperarme, ni siquiera Akamaru hace tanto ruido. Deberías aprender de tu perro. Además… — El perro de la joven se detuvo y ésta descendió al suelo. Akamaru y Kiba hicieron lo mismo. — Si no querías venir a patrullar, pudiste ir a alguna misión con tu equipo.

La chica comenzó a caminar por el bosque en búsqueda de anomalías y reforzando las pequeñas trampas de la zona, mientras los perros de ambos seguían más adelante y olfateaban las hojas del suelo.

— Sabes bien que por ahora la prioridad es la aldea. — Dijo Kiba mientras retiraba las ramas que se interponían en su camino. — Así que no hay misiones fuera; a lo que me refiero es que no entiendo cómo tú y mamá no dejan que yo dirija mi propio escuadrón. Akamaru quiere un ascenso y yo también. Soy mejor que la mitad del clan Inuzuka. Quiero brillar cómo Naruto durante la guerra.

La hermana del chico perro se hincó en donde los caninos comenzaron a desterrar algo.

— Parece que él único que brillarán ahora son los lentes que ha encontrado Akamaru.— Los dos hermanos Inuzuka escudriñaron entonces más adelante, hasta toparse con algo inerte.

Kiba, en,contraste hasta hace unos momentos, llevó su mano hasta el auricular que portaba y con semblante serio transmitió:

— Sai, avísale a Kakashi-sensei que hemos encontrado otro cuerpo en la zona este del bosque.

El ceño de Sakura estaba arrugado mientras su mirada se posaba en el reporte que tenía en sus manos. Sabía que tenía que buscar anomalías en los niveles de Chakra, pero con este ya solo quedaban dos pacientes y aun no encontraban nada. Esto en parte era bueno, pero le molestaba que todo el trabajo que tanto el equipo médico como ella habían realizado en los últimos días, no hayan sido fructíferos.

Shizune, quien estaba sentada del otro lado de la mesa de trabajo, se estiraba.

— Maguire, ¿de quiénes son los expedientes médicos que restan? — . Un medic-nin se acercó con dos carpetas y se las tendió.

— Yoshida Maru y Uchiha Sasuke.

— ¿Sasuke?— no pudo evitar repetir.

La mente de Sakura se quedó en blanco. ¿Había escuchado bien? ¿Sasuke era uno de los pacientes que debían analizar y por eso habían ido a la prisión dos días antes?

Shizune se encontró con la mirada confundida de Sakura.

— Sí, analizaremos su Rinnegan. En realidad él es una de las personas que Lady Tsunade particularmente quería examinar, y al parecer él aceptó.

— Oh… No lo sabía. — La ojiverde, volvió a hundirse en el reporte que tenía delante.

Su mente empezó rápidamente a divagar. Sasuke estaba en el hospital y sería la primera vez que le vería desde que lo encontró en esa celda. No podía negarlo, su corazón ansiaba verle; la imagen de él en ese lugar le había perseguido todas las noches desde entonces. "¿Estará bien?" era lo que se preguntaba.

— Ya está todo listo en la habitación para comenzar con el control médico, los pacientes han llegado. — Anunció Maguire.

— Perfecto, enseguida vamos. ¿Sakura, estás lista?

La aludida no sabía si Shizune estaba haciendo una pregunta de rutina, o si lo decía porque en unos instantes se toparía con Sasuke, pero de cualquier manera asintió en silencio mientras se levantaba. No importaban sus sentimientos en estos momentos; era una profesional después de todo, y aunque estaba nerviosa y no sabía siquiera cómo actuaría, tenía claro que en este momento ella era parte de una investigación médica importante.

Ambas salieron de la oficina para entrar a otra habitación. Pudo ver que Maguire terminaba de acomodar los instrumentos necesarios en la bandeja que se encontraba en la mesa al costado de un banco. En él se encontraba sentada un hombre pelinegro quien al verles entrar levantó la vista.

Los ojos de ambos se encontraron. Sakura sintió que el aliento se le escapó por un milisegundo y no pudo más que apartar la vista y seguir a Shizune quien ya estaba poniéndose los guantes e iniciaba a acomodarse.

— Hola, Sasuke, teníamos mucho sin verte. Supongo que Lady Tsunade y Hokage-sama ya te explicaron que analizaremos, entre otras cosas, el Rinnegan para encontrar algún vestigio de daño, o inconsistencia en tu Chakra. — anunció Shizune, a consecuencia, el azabache asintió. — Bien, lo primero es hacerte una valoración general, así que comenzaremos.

Shizune comenzó con un cuestionario básico.

— Después de que adquiriste el Rinnegan, ¿ notaste algún cambio en tu manejo de Chakra? ¿Tuviste problemas de enfoque o visión borrosa durante las batallas en la guerra? — Sasuke negó.

Al mismo tiempo que su Sempai hacía las preguntas, Sakura se ocupaba de registrar las respuestas en su historial médico el cuál sólo tenía registro hasta los 13 años, cuando dejó la aldea. Mientras escribía, Sakura levantó la vista y le observó discretamente. Sasuke se veía un poco más pálido, tal vez a consecuencia de los días lejos de los rayos del sol; pero sus rasgos seguían siendo igual, en especial sus ojos, los cuales se toparon con los de ella nuevamente cuando Sakura hacía su escrutinio.

La pelirrosa apartó rápidamente la vista un poco sonrojada por haber sido descubierta y se centró nuevamente en la hoja que escribía. Después de unos momentos y de un chequeo profesional hecho por Shizune, Tsunade irrumpió en la habitación.

— Bien, ¿cuáles son los avances? — preguntó.

— Nada nuevo, estamos analizando ahora a Sasuke. — señaló ésta.

Tsunade posó su mirada en él

— Lamento que no pudieras negarte al trato con Kakashi. Al menos ahora podrás estar en libertad condicional en lo que deciden qué hacer contigo.

— ¿Te han liberado? — Los pensamientos de Sakura habían sido expresados en palabras y se sonrojó al darse cuenta de que todos le habían escuchado.

— Kakashi me pidió que colaborara con ustedes como condición. — Habló por primera vez el pelinegro.

— Ya veo… — Respondió tímidamente Sakura.

Tsunade observaba a su alumna, sabía que había sido mala idea haber puesto a Sakura en la investigación sabiendo que Sasuke estaría relacionado, pero la necesitaba ya que sus habilidades en el ámbito médico eran muy avanzadas. Era su discípula después de todo.

— Bien, necesito que estés viniendo cada tres días a chequeos. Ya puedes irte.

Sasuke se levantó del banco y se encaminó a la puerta de la habitación.

— ¡Sakura! Lamentó que tengas que laborar también en tus días de descanso, te lo repondré la siguiente semana. — Alcanzó a escuchar mientras dejaba la habitación atrás.

Hasta aquí el segundo capítulo. En realidad lo quería subir el jueves cómo había anunciado, pero quería festejar que ya es Octubre :b. Ojalá comience el frío porque ya no soporto estar en este clima.

No sé si leyeron Sakura Hidden, pero en ésa novela, uno de los medic-nin que aparece es Maguire, así que quise usarlo con un papel menor aquí.

Cualquier comentario, o retroalimentación es super bien venida. Gracias por leer!