¡A muchos de ustedes les encantó ese beso! A mí también me hubiese encantado. Quiero decir, ¿quién no querría un pedazo de esa atracción sexual? Veamos dónde está la(s) cabeza(s) de Edward *jeje*.
Relevo de responsabilidad: Todos los personajes son propiedad de la señora que escribió Crepúsculo. Esta historia, sin embargo, es mía. © 2024 lilbitbookish82
Traducción y edición en español: The Vampire Goddess
Capítulo 3: La charla
EPOV
No hay palabras para lo que acabo de experimentar. Sus hermosos ojos azules me miran y ella responde con su voz dulce y ronca: "Oh, cariño, yo también te extrañé". Agarro sus manos con fuerza en las mías y me inclino para susurrarle al oído: "¿Estás bien?" Pregunto.
Ella mira desde mis labios a mis ojos y niega con la cabeza afirmativamente.
"¿Puedes tomarte unos minutos para hablar, cariño?"
"Yo uh, acabo de llegar hace aproximadamente una hora y media, pero si no te importa, ¿puedes quedarte por aquí alrededor de una hora? Puedo tomarme un descanso en ese momento", responde.
"Oh… um, por supuesto. Iré a sentarme con mis amigos y esperaré allí si te parece bien".
Ella se sonroja y luego me sonríe: "Intentaré ser más rápida si puedo", luego baja mi cabeza
hacia ella y me susurra al oído, sus labios rozando ligeramente mi lóbulo, "gracias por ser mi héroe", luego besó mi mejilla. Ella rebota de regreso a su área y yo floto de regreso a la mesa Sus labios me consumieron, su sabor era algo extraordinario. Cuando ella me agarró del pelo y me acercó más a su cuerpo, no pude evitar gemir. Era como el cielo envuelto en este pequeño y curvo paquete. Quería golpearme la frente por ponerme duro, por no poder controlar la reacción de mi cuerpo, pero maldita sea… esa chica lo tiene todo.
En la mesa, Emmett se ríe y Jasper me mira como si acabara de ver a Dios. "¡Mi hombre! ¡Mi maldito hombre! Pensé que irías allí y serías un caballero o algo, ¡pero fuiste por el maldito oro! Emmet se ríe. Puedo sentir mis mejillas enrojecerse.
"Cállate, Em."
"Edward, estoy asombrado", dice Jasper. "¿Finalmente supiste su nombre?"
"No", murmuro, lo que hace que Em se ríe aún más.
"¿Por qué no?" Jasper pregunta amablemente. "Parecía que ustedes dos habían estado haciendo eso durante años, parecía como tan natural como respirar".
"Um, ella se tomará un descanso en aproximadamente una hora y vamos a hablar", les respondo a ambos. Realmente aprecio que vengan conmigo casi todas las noches, pero también estoy tratando de pensar en una forma sutil de pedirles que se vayan al mismo tiempo.
"Oye hombre, cuando ella venga, saldremos de aquí para que puedas tomarte tu tiempo para hablar con ella; Ya es hora de que al menos sepas su nombre", comenta Jasper.
"¡No me iré! He estado esperando meses para que este saque la cabeza de su trasero y finalmente hable con esta chica! Esto no me lo pierdo por nada del mundo, Jasper". Emmett gruñe. Jasper le golpea la nuca con fuerza y hace una mueca, "bien, joder... pero será mejor que me llames cuando te vayas. Voy a actuar como una adolescente que necesita chismes".
No puedo evitar reírme. Somos amigos desde pequeños y nos contamos bastante
todo.
"Claro, está bien, Em. Te lo diré todo cuando me cuentes todo lo que pasó con Kari Smith en décimo grado", respondo. Sus ojos se abren como platos y niega con la cabeza, lo cual sabía que haría. Empezamos a hablar de cosas sin sentido…al cabo de un rato siento un golpe en mi hombro y volteo y la veo sonriéndome tímidamente. "Oye", le digo.
"Oye, um… estoy a punto de tomar mi descanso. Ya vuelvo, ¿vale?" dice en voz baja. Asiento hacia ella y sonríe mientras se da vuelta para caminar hacia atrás. Miro a los chicos y se ponen de pie y cada uno desea suerte con una palmadita en la espalda antes de salir. Decido esperar donde estoy hasta que ella regrese.
Cuando se acerca, le pregunto si le gustaría que fuéramos a un lugar más privado, ella asiente y agarra mi mano y me pide que la siga. Comenzamos a caminar hacia la parte trasera del bar y bajamos por un área oscura, un pasillo que pasa por los baños hasta una pequeña habitación que, según ella, es la sala de descanso. Aquí atrás hay unas cuantas sillas cómodas y ella dice que nadie debería molestarnos. Ambos tomamos una silla a continuación, nos miramos el uno al otro y respiramos profundamente y nerviosamente al mismo tiempo, lo que nos hizo reír a ambos.
"Um hola. Supongo que debería presentarme", dice. "Soy Bella y te prometo que normalmente no soy así de tímida, pero eh… sí, ay no sé cómo hacer esto y decirte que probablemente eres el hombre más atractivo que he visto en mi vida y me pones muy nerviosa". Ella está muy sonrojada, el sonrojo se ve absolutamente hermoso en ella.
La miro en estado de shock y me siento completamente asombrado por su valentía y honestidad. "Guau... yo… yo", comencé a tartamudear.
"No tienes que decir nada", interrumpe.
"Oh, sí, de hecho debo decir algo", digo honestamente. "Primero que nada, gracias." Puedo sentirme sonrojar como loco pero luego continúo como si nada: "En segundo lugar, soy Edward. Estoy muy feliz de conocerte oficialmente. Como quizás te diste cuenta, eh…yo
vengo aquí todas las noches que trabajas porque um… te encuentro increíblemente hermosa y como el idiota que soy no me atreví a saludarte ni decirte nada. Normalmente no soy una persona muy atrevida y supongo que por eso no me he acercado a ti antes. Me dio mucho gusto que pidieras ayuda, simplemente no podía soportar esa expresión en tu cara.
Estaba aterrorizado por lo que te pudiera pasar así que decidí dar un paso al frente y hacer algo".
"Bueno, Edward, es un placer conocerte oficialmente y realmente no me importó él algo que hiciste para ayudarme. Paul ha sido una espina clavada en mi costado desde la universidad y no sabe aceptar un no por respuesta. Espero que lo que vio le sea suficiente y no se vuelva a aparecer por aquí. Voy a ser honesta y decir que ese beso fue probablemente la experiencia más intensa de mi vida".
"Sí, realmente lo fue", suspiro. "Voy a adelantarme aquí y decir que realmente me gustaría experimentarlo de nuevo.
"¡Oh, gracias a Dios!" ella se ríe. Incluso sus risas son sexys.
"¿Edward?" ella dice en un tono sensual. "Uh, ¿puedo besarte otra vez antes de continuar nuestra conversación? Si no lo hago, este fuego que siento me va a quemar". Meneo la cabeza en afirmación a su pregunta. Yo también quería volver a besarla.
Ella se acerca a mí y me agarra el pelo antes de colocar sus dulces labios en los míos. Este beso no es tan intenso como el anterior, pero no es menos maravilloso. Ella frena el beso y me agradece.
"No gracias a ti", sonrío.
"Entonces, Bella… ¿te interesaría salir conmigo alguna vez? Realmente me gustaría conocerte más".
"Me gustaría mucho", responde. "Pero no me gusta mucho estar en lugares ruidosos... sí, irónico lo sé…eh, ya que trabajo en un bar".
"Para ser honesto, yo tampoco… pero una vez que te vi, no pude evitar regresar. Soy un cocinero decente, así que si quieres, puedes venir a mi casa y puedo prepararte la cena si quieres".
"¡Me encantaría!" ella dice emocionada.
"¿Estás disponible el sábado? Sé que no estás aquí los sábados, pero no estoy seguro de qué haces los fines de semana".
"Bueno, en realidad no vivo aquí en Memphis, pero no me importa conducir hasta allí para cenar. no hay nada urgente de la que no pueda escapar". Ella mira su teléfono y dice en voz baja: "Mierda".
"¿Estás bien?", le pregunto.
Ella suspira, "sí… pero tengo que volver a salir. Realmente desearía poder quedarme y hablar contigo pero tengo que volver al trabajo".
"Está bien, hermosa. Déjame ver tu teléfono y pondré mi número allí. Me aseguraré de hablar o enviar mensajes de texto. Hasta pronto. Ahora que finalmente he podido hablar contigo, no dejaré pasar esta oportunidad". Ella se ríe y me entrega su teléfono. Ingreso mi número y llamo a mi propio teléfono, así tengo su número también. Le estaré enviando mensajes de texto. Ambos nos levantamos y tomo sus manos mientras la miro. Su rostro coincide con el mío porque al mismo tiempo se pone de puntillas; me agacho para
besarla una vez más.
Este beso se parece un poco más al anterior; lenguas y labios masajeando, gemidos y nuestras manos agarrándose unos a otros. Nos separamos lentamente y decimos "wow" al mismo tiempo, terminando con una leve risita. La abrazo y dejo que me acompañe de vuelta al bar.
"Que tengas una buena noche, Edward", dice sonriente.
"Tú también, hermosa", respondo mientras me doy la vuelta y camino hacia mi auto.
Cuando llego a casa, tengo que darme una ducha. Estoy muy alterado y debo aliviar esta presión. Enciendo la ducha y en lo que espero a que el agua caliente me quite la ropa, la tiro en el cesto y luego me meto en la ducha. Dejo que el agua me caiga en la espalda durante unos minutos, luego me doy la vuelta y agarro el jabón en gel. Me sirvo una
cantidad decente y procedo a agarrar mi polla. Estoy muy caliente y sé que no tomará mucho tiempo.
Cierro mis dedos en mi punta y presiono mi pulgar debajo de la sensible cabeza. Gimo mientras pienso en la pequeña mano de Bella haciendo esto mientras chupo sus hermosas tetas. En este punto, me estoy pajeando con tanta fuerza que estoy temblando. Tengo que apoyar la mano en la pared para mantenerme erguido. Arriba, abajo, giro, repite. Mi respiración se intensifica. Finalmente siento que mis testículos se aprietan y me muevo aún más fuerte hasta que me tenso y me corro en cuatro largos chorros, gimiendo el nombre de Bella en voz alta.
Me avergüenza pensar en ella cuando solo la acabo de conocer, pero no puedo controlarlo. Llevaba mucho tiempo esperando este momento. Lavo los restos de mi sesión de amor propio por el desagüe, me ducho y luego salgo unos minutos después. Me seco, me cepillo los dientes y luego me meto en la cama. Agarro mi teléfono y le envío un mensaje de texto: "buenas noches, hermosa", luego me quedo dormido profundamente.
El sábado no puede llegar lo suficientemente rápido.
Edward se dejó llevar, ¿no? Estaba un poco emocionado. El punto de vista de Bella estará en el siguiente capítulo. Lo subiré tan pronto como pueda. ¿Qué les pareció? Déjenmelo saber, los leo. Nos vemos en el próximo capítulo.