CASADOS
CAPITULO 1
NOCHE DE BODAS
Por fin había ocurrido, el tan esperado evento, la gran boda de Ranma Saotome y Akane Tendo.
La ceremonia fue privada, sólo asistió la familia, y con todos los intentos anteriores fallidos todos estaban ansiosos por que esta vez nadie los interrumpiera, inclusive estaban temerosos que los mismos prometidos se dejaran plantados mutuamente en el altar, pero fuera de toda lógica, el evento sucedió como lo planeado para tranquilidad de la familia.
Aquella noche, Akane se encontraba en el baño, se estaba poniendo un camisón de dormir que le había regalado su suegra, la verdad era un camisón muy revelador que la hacía lucir muy sexy, internamente había decidido dejar atrás sus pijamas de niña buena y darse la oportunidad de sentirse mujer, después de todo hoy era su noche de bodas, Ranma la estaba esperando en la habitación, y ella aunque seguía nerviosa esperaba que realmente pudieran dar el siguiente paso en su relación, después de haberse salteado todos los demás, nunca fueron novios, nunca se tomaron de las manos, nunca se dieron un beso hasta el día de hoy, bueno si al beso apurado en la mejilla que le dio Ranma después que el sacerdote los declarara marido y mujer se le puede llamar un beso, no era lo que esperaba pero al menos esta vez había estado consiente.
Frente al espejo aun recordaba cómo es que llegaron a casarlos.
Comienzo de flash back:
El Sr. Tendo reunió a todos, la familia Tendo y la familia Saotome en el comedor quería hablar muy serio con todos.
-Familia... ha sucedido algo terrible-
-que pasa papá... tienes una cara de preocupación- dijo Akane
- Nos quitan el dojo!-
-QUEEEEE!- todos al unísono respondieron
- Lo que escucharon, desde hace mucho ya que no podemos impartir clases y no hay descendiente directo... y no, no Akane ustedes son mujeres y aunque me duela, estos legados pasan directamente al hijo varón o a la siguiente cabeza de familia, mientras no cambien las leyes no podemos hacer nada... excepto...-
- excepto qué papá?- dijo Nabiki desesperada
- excepto que una de ustedes se case en un plazo máximo de una semana, sólo así el dojo se heredará a la siguiente generación y podremos mantenerlo, sino pasará a manos de la siguiente familia sucesora... unos primos lejanos que ya cuentan con un dojo... no creo que puedan dedicarle a este dojo lo que se merece... entonces... quien de ustedes va a casarse?-
Todos voltearon la cabeza de golpe a donde se encontraban los prometidos. Ellos sólo atinaron a abrir desmesuradamente los ojos. Definitivamente de esta no se escapaban, y así fue, en menos de una semana planearon una boda privada en las afueras de Nerima, era tan delicado el tema de perder el dojo que ni siquiera Nabiki vendió información a las demas prometidas ni demas asechadores.
Fin de flask back
Se había ruborizado, de saber lo que le esperaba esta noche. Desde que empezaron los preparativos de la boda empezó a tener cierta curiosidad en el ámbito sexual, había leído muchos libros informativos que explicaban de que se trataba todo el asunto, como debía cuidarse para no salir embarazada, hasta leyó uno sobre posturas y cómo conseguir orgasmos, pero todos esos eran del tipo educativo ella quería saber sobre el amor. Una mañana, sin nadie más a quien acudir, le explicó sus dudas a Nabiki, despues de todo era su hermana mayor, y aunque lo dudaba, tenía más experiencia con ella sobre chicos, y no se equivocó, su hermana Nabiki no es una persona que espera una sorpresa ella vive las experiencias directamente y pudo aconsejarle sobre el tema. Le regalo toda una colección de novelas románticas eróticas para que estudiara, al menos a Akane no le quedó ninguna duda de cómo podría seducir a Ranma, aunque le de mucha vergüenza, pero estaba decidida a que su matrimonio empiece con buen pie.
Con mucha determinación, tomó el pomo de la puerta que conectaba con el dormitorio y lo giró, las luces estaban apagadas, pero aun en la penumbra podía distinguir la silueta de su adorado tormento que se encontraba recostado en la cama, decidida se acercó a el lentamente, quería parecer sensual sin saber si lo estaba logrando. Llegó al pie de esta se subió y empezó a gatear hacia él, ya estando muy cerca cuando se dio cuenta que su ahora esposo se encontraba profundamente dormido.
-Ra…Ranma… estas… estas dormido?...uuuuyyyyy baka!-
Con toda la cólera encima se regreso al baño a ponerse una bata encima, luego se recostó en el sofá que se encontraba a un lado de la habitación, no quería que Ranma se diera cuenta cuales habían sido sus intenciones para esa noche.
Del otro lado de la habitación se encontraba Ranma recostado en la cama, ojos muy abiertos y asustados, había fingido estar dormido, pero el haber visto a su marimacho con ese atuendo lo había superado, no tenía ninguna experiencia en el tema y no se había preparado mentalmente para algo así, no sabía cómo actuar, tampoco sabía si su marimacho lo iba a moler a golpes si tan sólo intentara tocarla, así que prefirió usar una de las técnicas que le enseño su padre… fingir estar dormido para no afrontar los hecho que se vienen. Ya pensaría después como debía actuar con su ahora esposa.