Capítulo 69 La Bondadosa Elena Tiene Una Idea

? "Nada, el tigre gordo es simplemente otro apodo para una criatura, similar a la redonda y rechoncha gallina escocesa."

Al observar a Dumbledore, quien no lograba entender la referencia en absoluto, Elena agitó su mano con diversión. No solo Dumbledore, ni siquiera la gente más entendida en ese momento podría comprender esta alusión.

No hace falta decir que cada viajero se siente solitario desde lo más profundo de su alma, y nadie puede atravesar la brecha creada por el tiempo y la cultura. Para hacer la vida menos solitaria, al menos aparentar un poco más de intimidad, la mayoría de los viajeros inevitablemente se esforzarán por orientar el mundo en la dirección con la que están familiarizados.

Por ejemplo, el protagonista de una hermosa industria mágica excepcional en su vida anterior, Su Alteza Real Roland en "Deja a Esa Bruja". Otro ejemplo es Elena Caslana en este momento.

"Tienes razón, tengo algunas ideas sobre cómo manejar adecuadamente esta crisis."

Pausa.

Elena dio un sorbo al té negro y reflexionó cuidadosamente. Colocó la taza blanca de porcelana en la bandeja dorada y se sentó erguida. Sus ojos azules miraban tranquila-mente al anciano frente a ella.

De la frugalidad a la extravagancia es fácil, de la extravagancia a la frugalidad es difícil, esta es una verdad simple.

La mayor dificultad para implementar las "Regulaciones de Hogwarts para Períodos Especiales" radica en el hecho de que los magos "jóvenes señores" y "señoritas" que desde hace mucho tiempo están acostumbrados a un excelente entorno de vida no son suficientes para mantener a todos los estudiantes durante todo el semestre.

"Tienes que pensarlo. Esto es diferente de amenazar al sombrero seleccionador y decir algo tan simple como crees."

La mirada inocente en el rostro de Elena desapareció rápidamente, y una pizca de calma madura que no correspondía a su edad apareció en su tierna cara. Miró los ojos azules a través de las lentes con forma de media luna del anciano y dijo con calma.

"Lo que voy a decir a continuación puede resultar un poco extravagante, pero espero que no me interrumpas a la ligera. Y, no tengo interés en cambiar Hogwarts ni el mundo mágico, así que por favor no me impongas demasiadas expectativas y responsabilidades de forma arbitraria."

Si pudiera elegir, Elena preferiría ser una pequeña bruja de primer año despreocupada, disfrutando de la comida, la bebida y sin preocupaciones, en lugar de ser una salvadora o líder. Eso es lo que quería dejar en claro cuando el anciano Dumbledore tuvo esta loca idea.

"Por supuesto."

Al ver a Elena manifestarse en un estado completamente diferente al anterior, Dumbledore levantó suavemente las cejas y prometió solemnemente. Se sentó erguida y adoptó una actitud seria de escucha.

Dumbledore no era ajeno a la apariencia de la joven.

Ya sea en la impresionante negociación en la torre más alta del castillo de Newmontgarde, o en la deducción asombrosa en el dormitorio de las chicas de Slytherin en el piso de abajo del castillo de Hogwarts, Dumbledore había quedado tan impresionado que a veces colocaba a la joven en el mismo nivel que un mago.

"Desde que me dejaste este asunto para que yo lo maneje, siempre y cuando puedas resolver el problema de manera razonable y perfecta, ¿lo aceptarás sin importar cuáles sean los resultados y requisitos durante este periodo?"

Elena levantó la taza y el platillo en su mano izquierda, exponiendo el dorso de su mano limpia frente a Dumbledore, y preguntó suavemente.

"Bueno... dentro de un cierto rango, siempre y cuando no sea tan bueno como la situación en el Pabellón Gu Ling esta vez. Además, se deben considerar a los demás profesores."

Dumbledore vaciló por un momento y no se comprometió demasiado en su respuesta. Después de todo, sinceramente, no sabía cuántos pensamientos caprichosos aún tenía la bruja de cabello plateado frente a él.

"Puedo ayudar a todo Hogwarts a lograr un período estable de al menos una semana. Y permitir que la mayoría de los estudiantes acepten un estándar reducido de comida, y en cierta medida romper la brecha entre las cuatro casas."

Elena frotó sus dedos contra el borde suave de la taza, levantó la mirada, miró al sorprendido Dumbledore, y continuó ligeramente.

"Sin embargo, tengo tres condiciones. Primero, las tareas de enseñanza de la escuela para la primera semana del curso se suspenden temporalmente, y yo me encargaré de que tanto tú como los profesores tengan suficiente tiempo para formular el 'Reglamento de Ajuste Especial de Hogwarts'. Segundo, espero poder participar indirectamente en la formulación del 'Reglamento' a través tuyo y tener un pequeño poder para adquirir materiales."

"Tercero, necesito pedirte prestada a alguien. Elena hizo una pausa, sonriendo ligeramente, "el profesor Rubeus Hagrid".

"No suena demasiado complicado. Si puede lograr el efecto que has mencionado. La clave es, querida señorita Caslana, ¿qué planeas hacer? Sabes que hay casi mil personas en el séptimo grado."

"Es simple."

Una mirada extraña apareció en el rostro de Elena. Sus ojos cayeron y observó el té negro caliente que se mantenía en sus manos. Los ojos azules de Chan Ruoxing mostraron una emoción compleja, y apretó la taza de té con su mano derecha.

"Professor Dumbledore, ¿has oído hablar del entrenamiento militar?"

El entrenamiento militar, abreviado como la instrucción militar, es el poder más misterioso de un terrible país muggle.

Si hay algo más, los estudiantes desde la escuela primaria hasta la universidad pueden ser corregidos en un corto período de tiempo, y aunque consume mucha energía y tiempo, puede promover rápidamente la conciencia de equipo entre las personas y templar la fuerza de voluntad, entonces solo el entrenamiento militar de la vida anterior.

En opinión de Elena, la Escuela de Magia y Hechicería de Hogwarts y todo el mundo mágico son demasiado informales, extravagantes y poseen hábitos de vida derrochadores; nobles que carecen del concepto del tiempo, y los pequeños magos como George y Fred tienen demasiada energía que no pueden liberar, y el tiempo solo puede pasar a través de diversas travesuras.

Obviamente, solo un grupo de estudiantes de secundaria menores de 19 años, en el momento en que es más fácil formar una amistad con los compañeros de clase, son artificialmente divididos en cuatro colegios, y constantemente se les inculcan las características de personalidad que deben cumplir, lo cual es una práctica demasiado absoluta y arbitraria.

La competencia sí brinda a las personas un mayor deseo de aprender y competir.

Sin embargo, si cada clase se divide en dos clases por Jing Wei, obviamente es la misma edad en el mismo salón de clases, pero porque el color de la bufanda es diferente, resulta bastante curioso.

No ser un estudiante en el Colegio Gryffindor no significa no ser valiente, al igual que no todos los estudiantes de Ravenclaw son superiores en inteligencia.

Con el fin de salvar las almas de los pequeños magos de generación en generación, la angelical Elena decidió tomar la iniciativa de ayudarlos a romper la brecha entre las academias, consumir su vigorosa energía y atención, y dejar a todos con esta experiencia inolvidable y maravillosa de entrenamiento militar en su carrera de aprendizaje.

"... En fin, así es más o menos."

Elena respiró profundamente y se humedeció los labios resecos.

Después de pasar casi media hora, finalmente le contó a Dumbledore sobre la forma general y los detalles.

"Es una sugerencia muy esclarecedora. Creo que puedo intentarlo. Sin embargo, el nombre puede necesitar ser cambiado. Los detalles específicos también necesitan ser discutidos con los profesores."

Dumbledore aplaudió con admiración, y la chica siempre le traía muchas sorpresas.

"Son solo algunas pequeñas astucias triviales", dijo Elena humildemente mientras movía su mano. Aunque no es demasiado completo para recordar, la postura básica, la forma de caminar y las cosas "divertidas" de las colchas de tofu apiladas aún son un recuerdo fresco para ella.

Como todos sabemos, el entrenamiento militar también es una parte importante de su carrera de estudio. Ella hará todo lo posible para que los pequeños magos de Hogwarts sientan al máximo el entrenamiento militar escolar original.

En ese momento, hubo un golpeteo rítmico en la puerta, y al mismo tiempo una voz de bruja ligeramente aguda llegó.

"Profesor Dumbledore, hay una pequeña situación en la sala común de Ravenclaw. Quizás deba saberlo."

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