¡Hola a todos! Esta vez no me tardé tanto en traducir este capítulo, como siempre una disculpa por las faltas de ortografía. El próximo también intentaré subirlo pronto
Disclaimer: Harry Potter NO es mío, es propiedad de J. K. Rowling. TAMPOCO este fic es mío, yo sólo lo traduzco, es propiedad del usuario megamatt09, a quien pueden encontrar en esta misma página, yo sólo traduzco del inglés para que pueden leerlo más personas.
Renacimiento
Harry se dejó caer al suelo, con el traslador en la mano. Cayó al suelo, justo a tiempo para ver una explosión de luz dirigirse hacia él. En un instante, Harry se encontró sentado en el suelo. Él tuvo un infierno de golpe, el hechizo había arrojado una ráfaga de viento hacia él, pero tenía que hacer que se viera real. Una figura con túnica se le acercó y le disparó cuerdas desde su varita. Éstas se envolvieron alrededor de Harry y lo ataron a una lápida. Harry torció la cabeza ligeramente y pudo leer las palabras, "Tom Riddle" casi desvanecidas escritas en la lápida.
"De prisa, Colagusano," susurró una voz desde la distancia y la figura con túnica se inclinó otra vez, para comprobar si Harry estaba bien sujeto antes de acercarse.
"Todo está listo, mi señor," dijo Colagusano.
"Entonces hazlo, no podemos permitirnos el lujo de esperar ni un segundo," dijo la voz en un silbido, Colagusano se apresuró a obedecer y recogió algo de la tierra.
"¡Hueso del padre, otorgado sin saberlo, renovarás a tu hijo!" cantó Colagusano, mientras colocaba el hueso en el caldero, al dejarlo caer se escuchó un chapoteo.
Harry se puso de pie, la varita falsa estaba tirada lejos y la real era fácilmente accesible para que pudiera liberarse. Observó a Colagusano sacar una daga de su túnica y levantarla. Harry lo observó con sorpresa, nunca habría pensado que Colagusano tendría el valor de hacer eso, pero justo ante sus ojos, el traidor había cortado su propia mano. Un grito que helaba la sangre se hizo eco por todo el cementerio cuando Colagusano cometió el hecho.
"¡Carne... del vasallo... voluntariamente ofrecida... revivirás a tu señor!", dijo Colagusano con voz dolorida mientras tomaba lo que antes era una mano humana funcional y la dejaba caer en el caldero. Colagusano se volvió, moviéndose hacia él.
"Bien, Pettigrew, corta tu propia mano, él lo haría por ti si se invirtieran las posiciones", dijo Harry para que sólo Colagusano pudiera oírlo, pero él avanzó, con la daga en la mano, cortó la manga de Harry y con su temblorosa mano única, sacó un vial, levitándolo en el aire.
"Sa... sangre del enemigo... tomada por la fuerza... resucitarás al que odias.", dijo Colagusano mientras apuñalado a Harry en el brazo, la sangre goteó en el vial.
"Ayúdate, Colagusano, claro que sí, toma mi sangre", susurró Harry y Colagusano se congeló, sin saber qué hacer, pero la sangre tenía que ser añadido ahora para que el ritual funcionara. La sangre burbujeaba cuando Colagusano se volvió hacia el caldero. El siervo avanzó, antes de desplomarse al suelo y apenas logró volcar la sangre robada en el caldero.
Un humo verde se levantó del caldero, antes de volverse en múltiples colores. Un par de minutos más tarde, cuando Harry esperaba que algo hubiera salido mal, una fría voz llenó el cementerio.
"Mi túnica, Colagusano," siseó Voldemort, misericordiosamente el humo era lo suficientemente grueso para ocultar el cuerpo de Voldemort, Colagusano se acercó sosteniendo su brazo, cómo si el que fuera capaz de caminar por sí mismo fuera un milagro. Colagusano se tambaleó hacia delante, le colocó la túnica a su amo y le entregó su varita. Voldemort miró su varita mientras se volvía hacia Harry, quien estaba atado a la lápida. "Harry, nos encontramos una vez más."
Harry se negó a decir nada, él sólo esperaba el momento adecuado, cuando Voldemort estuviera distraído.
"Estás sobre los restos de mi difunto padre, Harry, un muggle sucio y común, ni una onza de magia, pero sin él, yo no estaría de pie hoy, por lo que, de hecho, tuvo un buen uso su muerte," comentó Voldemort, antes de agarrar bien el brazo de Colagusano y tocar la calavera negra con el dedo. Colagusano chilló de dolor, antes de caer al suelo y llorar en voz alta. "Ahora, todos ellos lo sentirán, muchos vendrán arrastrándose hasta acá, pero otros intentarán ignorarlo. Ellos pagarán el precio más alto de Harry, al igual que tú lo harás en cuestión de un momento."
Voldemort alejó su atención de Harry. Harry comenzó a deslizar su varita para tomarla, el momento ya casi llegaba. Si Voldemort estaba ocupado dirigiéndose a sus seguidores, entonces sería la oportunidad perfecta. Después de un par de minutos, varios estallidos resonaron por todo el cementerio al mismo tiempo que varias docenas de figuras con túnicas negras aparecían, con sus rostros tapados con máscaras blancas como hueso. Todos fijaron sus miradas sobre Voldemort, que estaba con una expresión sin ningún humor.
"Amo", dijo uno de los mortífagos.
"Pero, ¿cómo?" preguntó otro.
"He vuelto, a su tiempo, usted sabrá por qué, pero tengo que decir que es agradable tenerlos a todos una vez más aquí, de pie, por debajo de la marca obscura", dijo Voldemort mientras sus seguidores se inclinaban hacia adelante, casi en el suelo y Voldemort paró, dejándoles un momento para que comprendieran lo que estaba pasando. "Sin embargo, algo me dice que esta reunión no es tan feliz como debería ser. Huelo culpabilidad, huelo pesar, huelo el engaño de muchos de ustedes. Y, sobre todo, su estupidez. Todos y cada uno de ustedes evitaron Azkaban acusándome, ¿En verdad creyeron que me había ido? ¿Ni siquiera agotaron las vías para asegurar que yo no estaba en ninguna parte, siguieron todas las pistas posibles? Sin embargo, durante trece largos años, estuve atrapado, prácticamente sin poder, en la forma más débil. Me vi obligado a huir y por un tiempo, me sentí vulnerable".
Voldemort miró a sus seguidores.
"Sin embargo, todavía estaba vivo, a pesar de todo, a pesar de que la mayoría de mis seguidores me dejaron por mi cuenta, los que no lo hicieron, continuaron luchando, pero eran pocos y distantes entre sí," dijo Voldemort suavemente. "Todos los que hicieron un esfuerzo se condenaron a Azkaban o murieron. Así que, si bien su esfuerzo fue infructuoso, por lo menos trataron de mantenerse al día peleando. Sin mí, el esfuerzo fracasó y todos y cada uno de ustedes de pie ante mi continuaron con sus vidas mediocres, nunca volvieron a probar el tipo de poder que yo puedo ofrecerles. Por supuesto, muchos de ustedes conservaron posiciones prominentes en el Ministerio, pero el Ministerio no es nada más que un pedazo de papel que un mago por encima del común podría atravesar. Si Dumbledore tuviera el nervio y no hubiera temido ensuciar su reputación, él podría haberlos gobernado con mano de hierro, pero donde él falló, yo, Lord Voldemort, voy a tener éxito".
"Mi Señor, perdónenos, no teníamos ni idea...", declaró un Mortífago, pero Voldemort no tenía tiempo para la pequeña mendicidad del perdón.
"Crucio," dijo Voldemort perezosamente y el Mortífago gritó de dolor. Después de sólo unos pocos segundos de tortura ya estaba en el suelo, respirando con dificultad. "Avery, tonto, de pie, permítanme hacer una cosa perfectamente clara, no perdono cobardes pusilánimes traicioneros. Su falta de acción ha detenido nuestros planes por años. Sin embargo, yo estoy dispuesto a darles una última oportunidad para demostrar que valen la pena, pero permítanme recordarles a todos una última cosa. No piensen que no pueden ser reemplazados. En el mundo, incluso en este mismo país, hay un sinnúmero de jóvenes, brujas y magos ambiciosos, que pueden sustituir fácilmente a todos y cada uno de ustedes. ¿Está claro? "
"Sí, mi Señor", corearon los mortífagos al unísono, vacilantes bajo la fría mirada de Voldemort, quien asintió.
"Bueno, todos ustedes tienen mucho que hacer antes de volver a tener sus mismos puestos en mis filas, las deudas deben ser pagadas, puede que éstas no sanen, pero el tiempo puede aliviar las heridas, aunque lo dudo mucho*," dijo Voldemort con frialdad . "Colagusano ya ha pagado una parte de su deuda, ¿No es verdad Colagusano?"
"Sí...mi Señor", dijo Colagusano, haciendo una mueca mientras agarraba con una mano su muñón sangriento.
"El parcial sacrificio voluntario de Colagusano me permitió regresar al poder, aunque él fue el más cobarde y traidor, sin embargo, Lord Voldemort premia a sus ayudantes," dijo Voldemort mientras agitaba su varita y una sustancia plateada salió disparada de la misma, dando vueltas, antes de que se formara una mano de plata donde antes estaba la mano de Colagusano.
"Es hermosa, mi señor," dijo Colagusano felizmente mientras examinaba su nueva mano y parecía absolutamente extático. "Gracias, es mucho más de lo que merezco, es maravillosa."
"En eso estamos de acuerdo, Colagusano," dijo Voldemort cuando se volvió para dirigirse a sus seguidores uno por uno. Mientras lo hacía, Harry había comenzado a liberarse. Tendría que cortar las cuerdas en silencio, lo que llevaría un poco de tiempo, pero al ritmo en que Voldemort estaba divagando, tenía mucho tiempo. De hecho, hasta cierto punto, Harry estaba preocupado de que Voldemort se tardara más de los treinta minutos que él y Ginny habían acordado. Aunque sería divertido ver la cara de Voldemort cuando Harry desapareciera justo en frente a sus narices, Harry quería lanzarle unas buenas maldiciones a Voldemort y tal vez atrapar a Colagusano también.
Voldemort continuó a hablando, a cada Mortífago por un breve período de tiempo, Harry ya había aflojado las cuerdas lo suficiente para poder liberarse. En ese momento, Voldemort se volvió hacia Harry.
"Pero todos ustedes palidecen en comparación al invitado de honor, Harry Potter", concluyó Voldemort cuando se enfrentó a Harry. "Ahora mismo voy a demostrarles lo estúpidos que fueron por pensar en que este simple niño podría haberme derrotado. Colagusano, desátalo y dale su varita."
"No hay necesidad, Riddle, ya lo he hecho yo," dijo Harry mientras las cuerdas se caían y él se puso de pie, varita en mano, mientras esperaba que Voldemort hiciera un movimiento. Los mortífagos estaban enmudecidos del shock, Potter se había liberado y Voldemort dio un paso atrás. Tomaba mucho para sorprender al Señor Obscuro, pero esto lo había conseguido.
"Colagusano, ¿por qué no comprobaste que no tuviera una varita extra?" exigió Voldemort y Colagusano se encogió ante la cólera de su amo.
"No lo sabía", dijo Colagusano mientras retrocedía, para alejarse de la ira de Voldemort.
"Eso es obvio", dijo Voldemort con frialdad cuando se volvió hacia Harry. "Harry, ahora es el momento para que te encuentres con tu final."
"¿Por qué no, quiero decir, casi me mataste una vez hoy," preguntó Harry y Voldemort fue atrapado con la guardia baja. "Quiero decir, ese largo discurso sin fin que diste, casi me aburrí hasta la muerte. Zumbabas y seguías y seguías, de cómo eres tan poderoso y cómo todos los demás son escoria que merecen estar a tus pies, eso ya es viejo. Consigue algo de material nuevo, Voldemort".
"No trate pelear psicológicamente conmigo, Potter," dijo Voldemort suavemente, sus ojos en hendidura estaban fijos en Harry, calmado, sin el menor atisbo de emoción. "Es un juego que no vas a ganar."
"Ya veremos Riddle, ya veremos", dijo Harry mientras veía una expresión de ira cubrir la cara de Voldemort. Como muchos libros sobre duelos habían dicho, el setenta por ciento del duelo era psicológico y el treinta por ciento mágico. Tenía que entrar en la cabeza de Voldemort, así cometería cometer errores y tal vez eso lo llevaría a su caída.
"Muy bien, entonces, ¿sabes cómo batirte en duelo, Harry Potter?" preguntó Voldemort.
"Sí, puede que haya aprendido algunas cosas, pero dudo que tú sepas hacerlo, teniendo en cuenta que fuiste vencido por un niño de un año de edad," dijo Harry y Voldemort se detuvo, con los ojos crispados, mientras miraba a Harry. "Bueno, estoy seguro de que fue un golpe de suerte, pero sólo para estar seguro, yo no te aconsejaría jamás quitarle su dulce a un bebé, es posible que te avergüences de nuevo."
"Sólo inclínate, Potter," dijo Voldemort con voz forzada y Harry hizo una reverencia burlona, antes de ponerse directamente enfrente de Voldemort. Voldemort se inclinó poco, antes de que él levantara su varita. "¡Crucio!"
Harry evitó la maldición simplemente quitándose del camino, después movió su varita hacia Voldemort.
"¡SCOURGIFY!" gritó Harry. Voldemort rió ante el hecho de que Potter utilizara en él un encanto para limpiar, pero el hecho de que fue dirigido hacia sus ojos provoco en Voldemort una mínima molestia. No le hacía daño, sólo era incómodo. Cuando Voldemort se recuperó, Harry ya estaba listo para el siguiente ataque "¡WINGARADIUM LEVIOSA!"
Harry apuntó su varita hacia una lápida y la alzó del suelo, justo encima de Voldemort. Antes de que él la dejara caer, justo encima de la cabeza de Voldemort. Voldemort rompió la lápida en pedazos y envió sus fragmentos, junto con polvo, en todas las direcciones. Cuando el polvo se disipó, Harry no estaba a su vista.
"Sal y pelea de frente como un hombre, Potter," dijo Voldemort con frialdad.
"No, eso sería estúpido," dijo Harry desde detrás de un árbol. Voldemort atacó el árbol, lanzándolo del camino y una conjurada nube amarilla de ácido voló hacia Voldemort. Voldemort señaló con su varita el ácido y éste se solidificó, antes de caer al suelo. "¡Effrego!"
Voldemort bloqueó la maldición rompe-huesos y una maldición que dejaba en coma fue desviada al suelo. Harry esquivó un chorro de luz negra una vez que Voldemort lanzó cuando lo vio.
"¡Attero!" gritó Harry y un gran pico de acero salió de su varita y Voldemort chilló en agonía, ya que el pico atravesó su pierna, Voldemort cayó al suelo, mientras la sangre goteaba, pero Harry sintió un tirón de su traslador, sin embargo, todavía permanecía en el cementerio.
"Harry, hay un problema, algo que está causando que tu traslador no funcione", susurró Ginny con ansiedad, tras abrir la conexión de su comunicador. "Me colé a Hogsmeade, usando la Capa, estoy fuera de las protecciones de Hogwarts, así que debería ser capaz de traerte ahora que las barreras anti-traslador no son un problema. No lo sé, pero..."
"Sigue tratando Ginny," dijo Harry en voz baja, pero la pregunta del millón de galeones era cómo demonios había conseguido Colagusano atravesar las barreras Anti-traslador. A menos que fuera un farol bien construido para desalentar a cualquiera de usar un traslador para colarse allí, o quizá fueron derribados. Después de todo, por todo lo que Harry sabía, el traslador podría haber dirigido al ganador a otro lugar que no fuera una batalla en un cementerio con Voldemort. Muchas explicaciones posibles se movían alrededor en la cabeza de Harry, pero en este momento, necesitaba centrarse en Voldemort y encontrar una manera de salir de allí, especialmente si Ginny no podía conseguir que el traslador funcionara. "Si puedo, voy a ir de vuelta a la Copa de los Tres Magos, pero eso... podría ser un pequeño problema."
Al ver a los Mortífagos, de pie, al menos seis de ellos bloqueando la forma más fácil de llegar a la copa, esperaba que Ginny pudiera conseguir que su traslador funcionara y vio a Voldemort quitar el pico de su pierna, se volvió a Harry con una leve cojera, con sus ojos llenos de ira y con un movimiento de su muñeca, el Señor Obscuro arrojó a su joven oponente lejos de él. Por suerte, Harry se las arregló para mover su cuerpo en una posición en que se hiciera un menor daño al caer a la tierra, pero aun así la caída no fue agradable en lo absoluto.
Voldemort se inclinó hacia adelante, se sentía más cansado de lo que había estado en toda su vida. Varios de sus mortífagos fueron hacia delante, intentando ganarse el favor de su amo, ayudándolo.
"Vuelvan a su lugar, yo estoy bien," dijo Voldemort con frialdad, sus mortífagos retrocedieron, mientras observaba a su enemigo aterrizar a sus pies, eliminando de sí el potente hechizo de destierro. Voldemort mantuvo su varita lista, cuando se enfrentó a Harry con la amenaza en sus ojos. "Crucio."
Harry se mordió la lengua, sintió en todo su cuerpo un dolor más allá de toda imaginación. Se sentía como si cuchillos calientes envueltos en alambre de púas lo apuñalaran a través de cada pulgada de su cuerpo, Voldemort miró a Harry con triunfo retorcido. Harry trató de concentrarse lo suficiente a través del dolor. Sintió otro intento de Ginny de recuperarlo y por un breve instante, pensó que iba a funcionar. Por desgracia, se dejó caer al suelo, con los efectos posteriores de la maldición llenando su cuerpo de dolor.
"Potter, esto es lo que te pasa por atreverte a enfrentarte a mí", dijo Voldemort suavemente. "No quieres más de esto Potter. Admítelo, admite que te equivocaste al pensar que podrías hacerle frente a Lord Voldemort. Admítelo y yo te concederé una muerte rápida sin dolor."
Todo el cuerpo de Harry dolía, pero al menos él todavía estaba en su juicio. Voldemort se puso sobre él y esperó a que Harry respondiera, pero él no le daría a Voldemort la satisfacción de responder. De hecho, Harry miró, buscó con la mirada al cáliz y a Colagusano. Si él lo planeaba bien y ponía a unos mortífagos contra otros para causar una distracción, podría lograr salir simplemente. Tendría que hacerlo exactamente.
"Tal vez otra dosis de dolor refresque tu mente de la locura," dijo Voldemort con frialdad mientras miraba a Harry, quien una vez más se negó a responder. "¡Crucio!"
Una vez más el dolor llenó cada pulgada del cuerpo de Harry. La maldición se mantuvo en él durante treinta segundos, pero se sentía como si fuera mucho más tiempo. Voldemort miró a Harry con frialdad, mientras se dejaba caer al suelo, listo para hacer su movimiento.
"Admítelo Harry, estabas equivocado al pensar que podrías igualarte a Lord Voldemort, no eres más que un niño tonto", se burló Voldemort cuando Harry trató de ponerse de pie mientras su adversario levantaba su varita y la apuntaba hacia adelante. "Admítelo, Harry. Admite que soy tu superior. ¡Imperio!"
Harry sintió que su mente se vaciaba de todo pensamiento. Lo había roto antes, pero la voluntad de Voldemort era mucho más fuerte que la demostración de Crouch Júnior en clase. Voldemort se volvió hacia Harry, con una expresión triunfal en el rostro.
"Admítelo Harry, admite que soy tu superior," ordenó Voldemort cuando Harry sintió una voz luminosa en la cabeza, pero por instinto, las mismas técnicas que se emplea cuando aprendía Oclumancia lo pateó. Casi había bloqueado la voz en su cabeza.
"No, Riddle," respondió Harry con voz desafiante y Voldemort ni siquiera se inmutó, sino que trató de forzar más su voluntad sobre Harry.
"Admítelo Harry, que usted era un tonto, un niño entrometida que se interpusiera en mi camino y debe ser castigado," ordenó Voldemort, un poco más de fuerza y Harry estuvo a punto de cumplirse, pero se las arregló para reunir lo suficiente para luchar contra la maldición.
"Que te den*, Riddle," dijo Harry, y una vez más a Voldemort rodó sus ojos y puso aún más concentración. Harry nunca había sentido nada más fuerte en su vida, era obvio que Voldemort quería que Harry lo admitiera.
"Harry, no hay necesidad de ser grosero, todo lo que tienes que hacer es admitir que soy tu superior, que el hecho de que me vencieras antes sólo fue pura suerte, sólo admítelo Harry, admite que no eres más que un mocoso que tuvo suerte, pero tu suerte ya se agotó ", dijo Voldemort con voz de mando. "Admítelo Harry, dilo, no soy digno, Lord Voldemort es el mago más grande que jamás haya existido."
"¡NUNCA!" gritó Harry con fuerza mientras él se quitaba la maldición y su contragolpe tocaba a Voldemort. Voldemort cayó al suelo de rodillas, un zumbido llenó sus oídos, el sonido de la reacción le hacía sentir a Voldemort como su cráneo se dividía. Voldemort luchó en agonía, pero poco a poco, se desvaneció dolorosamente, mientras Harry se ponía de pie en un salto. Él estaba debilitado levemente por las secuelas de las maldiciones imperdonables, pero corrió rápidamente con sus ojos puestos sobre la Copa de los Tres Magos.
"¡Deténganlo!" gritó Voldemort enojado, mientras la sangre goteaba de sus oídos mientras él sólo logró recuperar su porte después de que Harry se quitara la maldición Imperius. Harry se desvió a la izquierda, evitando una maldición asesina. Un mortífago desafortunado se había interpuesto en su camino y fue arrojado al suelo. Había caos entre las fuerzas de Voldemort, era obvio que estaban fuera de práctica, ya que no habían trabajado juntos desde hacía doce años.
Harry se movió hacia Colagusano. Colagusano temblorosamente levantó su varita, pero parecía un ciervo deslumbrado.
"¡Expelliarmus!" gritó Harry y la varita de Colagusano salió de su mano. Él bloqueó un ataque desde atrás mientras Colagusano corría hacia su varita. Harry esquivó un chorro de luz negra. "¡Deje estupefacto!"
Colagusano se dejó caer al suelo, aturdido.
"Protego", dijo Harry, cuando una luz amarilla repugnante fue directa hacia él. El hechizo rebotó del escudo, desvaneciéndose en el aire. Rápidamente, Harry agarró a Colagusano y salió corriendo a la derecha hacia la Copa de los Tres Magos, mientras mantenía el encanto escudo para esquivra los hechizos. Era un desafío mantener el escudo sobre sí mismo y Colagusano; pero necesitaba que la rata saliera viva de allí, era importante para limpiar el nombre de Sirius. La concentración de Harry cayó por un breve segundo, pero no por mucho tiempo. "¡Protego!"
El escudo fue renovado y Harry estaba a pulgadas de distancia de recuperar la Copa de los Tres Magos-traslador. Él sintió un pequeño tirón, pero era evidente que el mal funcionamiento de su traslador continuaba. Simplemente tenía que ser uno de esos fallos de funcionamiento imprevistos que sucedían en el peor momento posible y en el más inconveniente. Una vez que se escapó, Harry se comprometió a averiguar lo que había salido mal. Más adelante tendría tiempo para eso, pero en este momento, él casi tomaba la Copa del Torneo de los Tres Magos.
Llamas negras y verdes estallaron desde el suelo justo en frente de la copa. El calor era intenso y bloqueó el camino de Harry a su boleto de salida del cementerio. Dio un paso atrás para protegerse del calor intenso, su cuerpo todavía estaba dolorido de la breve exposición a la maldición Cruciatus. Voldemort lo acechaba, con una expresión sin humor grabada en su rostro.
"¿De verdad crees que permitiría que te fueras, Potter?" preguntó Voldemort con frialdad y Harry miró a Voldemort, mientras un loco plan comenzaba a formarse en su cabeza. Tal vez el plan para recuperar el traslador no funcionó muy bien, pero había otra vía que Harry sentía había pasado por alto. Por mucho que odiaba juguetear con el destino, lo cierto es que era tal vez la única manera de salir. Él dejó caer a Colagusano, listo para levantarlo en un segundo de una patada, si era necesario*. Era hacerlo o morir.
"Bueno, la maldición Imperius falló, la maldición Cruciatus falló, tal vez tendrías que intentar con la Maldición Asesina, Riddle," sugirió Harry mientras Voldemort se ponía de pie, en silencio, mientras se preguntaba qué era lo que Potter estaba tratando de lograr. "O tal vez te acuerdas de lo que pasó la última vez, no creo que funcionaría en mí, no creo que seas lo suficientemente poderoso como para vencerme con una maldición asesina. Atrévete a demostrar que estoy equivocado, Voldemort. Vamos, dos palabras, es todo lo que necesita, va a ser fácil, a menos que tengas miedo de pasar por una segunda experiencia fuera de tu cuerpo."
Voldemort se quedó allí, mientras miraba Potter. En su día había luchado contra un montón de magos insolentes y sabía cuando alguien lo estaba provocando para hacer algo que no estaba en sus mejores intereses. Había oído las burlas de Potter, pero se negó a morder el anzuelo que Potter le estaba dando.
"Buen intento, Potter, pero ¿Realmente crees que soy tan tonto como para caer en eso?" exigió Voldemort en voz baja, mientras miraba a Harry con odio puro. Harry se negó a parpadear, y se negó a dar marcha atrás. "Hay muchos otros métodos, dolorosos, que puedo emplear para acabar contigo, sólo un tonto utilizaría la maldición asesina después de lo ocurrido la vez anterior que lo intenté."
"Bravo, Voldemort, tal vez no eres tan estúpido como yo pensaba," dijo Harry con una sonrisa, a pesar de que estaba preocupado, las llamas seguían rodeando la Copa de los Tres Magos. El tirón que se sentía en el traslador era un poco más fuerte, pero algo aún estaba bloqueando la capacidad de Ginny para recuperarlo.
"Cuida tu lengua, Potter," dijo Voldemort antes de que él levantara su varita para señalarlo, pero Harry estaba listo.
"¡INCENDIO!" gritó Harry en voz alta, las llamas que produjo de la nada eran casi tan potentes como la magia obscura que había usado Voldemort, requirieron que Voldemort se defendiera. Las llamas negras todavía parpadeaban alrededor de la taza, mientras Voldemort esquivaba los ataques. "¡Letargus!"
La maldición que dejaba en coma fue directo a Voldemort a la velocidad de la luz, pero él la evitó. Los Mortífagos retrocedieron, ninguno de ellos deseaba estar en el fuego cruzado. Dos hechizos silenciosos pero letales fueron directo hacia Harry.
"Wingardium Leviosa", dijo Harry y una lápida levitó en frente de ellos. Los hechizos chocaron con la lápida y la volaron en pedazos. Voldemort dirigió su varita hacia Harry segundos después de que el polvo se disipara, tenía una mirada asesina en sus ojos, pero Harry estaba de puntillas, listo para defenderse de su enemigo al momento que le enviara un ataque. "Protego."
El hechizo escudo bloqueó la mayor parte de la maldición. Lo poco que no bloqueó sólo sirvió para empujar el escudo de Harry. Recuperándose, Harry mantuvo el escudo y un contundente ataque mágico explotó el escudo. Harry mantuvo el equilibrio con su pura fuerza.
Voldemort continuó atacando a su oponente, quien esquivó cada ataque que le lanzaba, mientras usaba un encanto escudo. Un mago promedio no podría haber utilizado un escudo para bloquear la mayor parte de la magia obscura avanzada que Voldemort estaba empleando. A la mayoría se le hubiera roto el escudo en pedazos en el primer ataque, sin embargo, este simple niño lo había mantenido contra él. El deseo de eliminar esta amenaza a su poder se elevaba, pero también Voldemort sentía muchos signos de fatiga atacándolo. Él nunca se había cansado antes y, de hecho, este ritual lo debería haber vuelto a un cuerpo que tendría un mayor nivel de resistencia que nunca. Sin embargo, algo parecía estar drenando su energía. Se preguntó si Colagusano había estropeado el ritual de alguna manera. Sin embargo, él se preocuparía de ello una vez que Potter estuviera muerto, tenía que seguir con ello, el chico no iba a ser capaz de mantenerlo a raya durante mucho tiempo.
Harry se sorprendió gratamente ante lo bien que era capaz de mantener la lucha contra Voldemort. Cuando pensaba que no podía bloquear un hechizo por más tiempo, se las arreglaba para mantener el ritmo. Sin embargo, estos repentinos estallidos inexplicables de adrenalina que le daban a Harry más energía de lo que nunca había tenido antes, eran seguidos por el dolor que aparentemente se extendía a través de cada parte de su cuerpo. Tenía que encontrar una salida, pero parecía que el escape iba a tomar de un poco de planificación cuidadosa para lograrlo. Harry se inclinó hacia adelante, ligeramente, incapaz de sostener el escudo durante más tiempo. La última explosión de energía desapareció y su cuerpo sintió los efectos de la lucha contra una magia tan avanzada. Voldemort se puso de pie, mientras apuntaba su varita y envió una luz roja carmesí iluminada en naranja.
"¡Repello!" gritó Harry, con la esperanza de poder tener una ráfaga final de energía para repeler hacia atrás el ataque mortal de Voldemort. Ambos hechizos conectaron entre sí en el aire, Harry podía sentir su varita vibrar en su mano. La energía era tal que si de alguna manera podía llegar a Voldemort, podría detenerlo para siempre. Varias figuras fantasmales se arremolinaron de entre los hechizos entrelazados, pero algo bloqueó su capacidad de escapar, Harry agitó su varita hacia adelante y las luces interconectadas vibraron.
Una fuerte explosión llenó el cementerio. El impacto hizo que varios mortífagos volaron hacia atrás y Harry se sintió mareado. Él fue capaz de mirar hacia arriba a tiempo para ver la cabeza de Voldemort caer bruscamente y un fuerte crujido resonó en todo el cementerio. Harry se dejó caer al suelo, sin aliento, pero que no estaba cerca de la condición en que Voldemort estaba. Él estaba inmóvil en el suelo, los ojos en blanco en la parte posterior de su cabeza, su cabeza estaba inclinada crudamente hacia su izquierda. Harry levantó la vista y los mortífagos tenían similares miradas, totalmente conmocionadas. Mientras estaban distraídos por su sorpresa, Harry hechó un vistazo a la Copa, ya no estaba protegida por las llamas negras. Era el momento de hacer su movimiento. Agarró al aturdido Colagusano más o menos por la manga y luego tomó la varita de Voldemort, junto con la suya, antes de correr hacia la Copa de los Tres Magos.
"¡Atúrdanlo!" gritó Lucius Malfoy, cuando encontró su voz, si el Señor Obscuro sobrevivía una vez más, no quería ser el responsable de la fuga de Potter. Varios ataques volaron directo hacia Harry, el cual escogía los lugares sabiamente. Él bloqueó algunos mientras que repelía muchos otros que le lanzaban desde atrás.
Harry se lanzó hacia la copa, con Colagusano todavía en su mano, junto con las varitas de él y de Voldemort, mientras se las arregló para desviar un hechizo aturdidor.
"Ginny, tengo la copa," murmuró Harry a su traslador, apenas era capaz de reunir la energía suficiente para emplear la función de comunicación y mantenerlo abierto el tiempo suficiente para escuchar la respuesta de Ginny.
"Bien, Harry, estoy volviendo de Hogsmeade ahora mismo, te veré en un minuto", dijo Ginny débilmente, con voz temblorosa y preocupada, Harry agarró a la copa, mientras sostenía a Colagusano con fuerza y fueron transportados a los terrenos de Hogwarts.
o-o-o-o
La cabeza de Harry latía de dolor cuando se cayó al suelo. Colagusano cayó justo al lado de él y dejó caer la Copa de los Tres Magos al suelo, justo a su lado. Harry se desplomó al suelo. No quería más que meterse en la cama durante unas horas o durante la próxima semana o dos. Rápidamente, se metió la varita de Voldemort en un bolsillo, cuando vio a Dumbledore dirigirse con prisa a él, con Fudge siguiéndolo, con una mirada perpleja en su rostro.
"Harry, ¿qué pasó?" Preguntó Dumbledore mientras miraba a Harry.
"Colagusano... Copa Tres Magos en un traslador... regresó", Dijo Harry con voz áspera, mientras ponía en su rostro una expresión traumatizada, pero la verdad que estaba mucho mejor de lo que esperaba. Tenía a Colagusano y había tomado la varita de Voldemort, lo que le dirá mucho acerca de lo que el Señor Obscuro tuvo que hacer para llegar al poder.
"¿Está de vuelta a Harry?" preguntó Dumbledore con voz temerosa. "¿Lord Voldemort, ha regresado?"
Antes de que Harry pudiera siquiera formular una respuesta, Fudge se acercó y se quedó en shock, cuando vio la figura en la tierra.
"¡Barbas de Merlín, Peter Pettigrew!" gritó Fudge con horror cuando vio al mago en el suelo, mientras el pánico se apoderaba de su cabeza. Tal vez, Harry y los otros dos habían dicho la verdad de que Pettigrew todavía estaba vivo y que Black era inocente. Era absurdo, pero con Crouch Júnior vivo, Fudge no estaba seguro de qué creer. En ese momento, Ludo Bagman se acercó y Fudge rápidamente encontró su voz. "Ludo, ponte en contacto con los Aurores, quiero que esto se resuelva."
"Ppor supuesto ministro", dijo Bagman inmediatamente, sorprendido por la expresión asertiva de Fudge y en ese momento, tres figuras se precipitaron a través de la multitud, mientras se movían hacia Harry, Bagman se fue corriendo hacia la otra dirección, con ligereza, ya que parecía que Harry había ganado el Torneo de los Tres Magos y podía pagar sus deudas con los duendes.
"¡Harry!" gritó Ginny, mientras corría hacia él y lo ayudaba a levantarse de un salto, con Neville y Luna de pie atrás, con miradas de preocupación en su rostro. Ginny le dio a Harry un abrazo y Harry se lo regresó, Dumbledore lo miró con una expresión de aprovación antes de volverse a Fudge. "Me alegro de que hayas logrado salir de allí."
"Yo también", dijo Harry mientras Ginny se aferraba a él, casi como si tuviera miedo de que se derrumbaría.
"Te ves horrible Harry, ¿necesitas ir a la enfermería?" preguntó Luna.
"Sí, eso podría ser bueno Luna", dijo Harry con dolor, antes de dirigirse hacia Dumbledore y Fudge, quienes hablaban entre sí, el Ministro no despegaba un ojo de Pettigrew. Varios Aurores entraron por las puertas de Hogwarts, así que con una distracción para desviar la atención lejos de él, Harry murmuró. "Les diré todo más tarde."
"Vamos a dejar que los adultos resuelvan esto, mientras tanto hay que entrar", sugirió Neville y Harry asintió con la cabeza, mientras se apoyaba en Ginny, todo el peso de estar bajo la maldición Cruciatus finalmente estaba castigando su cuerpo. Ginny le tendió una mano reconfortante, mientras acompañaba a Harry a la enfermería, Luna y Neville los seguían de cerca.
"Pettigrew, debe de haber fingido su muerte," murmuró Fudge para sí mismo, mientras se preguntaba lo tonto que había sido al no ver lo que había sucedido. Pettigrew había incriminado a Black, había sido el farol perfecto y el mundo entero, incluyendo el Ministro, había caído en ello. Sin embargo, Snape le había dicho que Harry y los otros dos habían sido puestos bajo el encanto Confundus, pero quizás, Fudge se preguntaba, si él había sido víctima del mismo encanto. Quizás Snape lo puso bajo el hechizo, bajo las órdenes de Dumbledore por supuesto, y Fudge había sido cegado de la verdad. Ahora era obvio, Dumbledore siempre había hecho todo lo posible para mantener a Harry con esos parientes muggles y si Fudge hubiera descubierto valientemente la verdad, Black habría sido absuelto. Si Black hubiera sido absuelto, Potter habría vivido con su padrino, pero eso no habría sido un buen presagio para los planes de Dumbledore, fueran lo que fueran. Fudge veía todo claramente. "Todo este lío de Pettigrew, tengo que volver al Ministerio para solucionar el problema."
"Cornelio, estás centrado demasiado en Pettigrew para ver el panorama más grande…" empezó Dumbledore.
"Basta, Dumbledore, si se comprueban mis sospechas, Sirius Black estará absuelto mañana a esta hora, ahora tengo que volver al Ministerio, a ver que Pettigrew esté asegurado hasta su juicio," dijo Fudge obstinadamente, él no iba a ser engañado por Dumbledore de nuevo. Fudge no se podía negar su gloriosa cruzada para descubrir la verdad y corregir la injusticia. Black sería absuelto, Harry Potter estaría en una casa mágica adecuada, donde pertenecía, y Dumbledore estaría expuesto al mundo como lo que realmente era. Este era el mejor día de su vida. Dumbledore se puso de pie, Fudge estaba supervisando a los Aurores que escoltaban a Pettigrew al Ministerio.
Dumbledore miró a Fudge irse, estaba preocupado por las consecuencias que sucederían una vez que Sirius fuera absuelto.
"Director, es como lo habíamos pensado", dijo Snape en voz baja mientras miraba su marca obscura, que por un par de momentos había desaparecido y ahora estaba empezando a aparecer. No había sacado el tema con Dumbledore, porque Dumbledore sólo diría que era "muy interesante" y no ofrecería una explicación de qué pensaba que había sucedido. "El Señor Obscuro ha vuelto."
Dumbledore asintió con un gesto rígido, mientras Snape esperaba su respuesta.
"Debemos prepararnos para reunir a los antiguos aliados y tratar de orientar a Harry hacia su destino", dijo Dumbledore en voz baja.
o-o-o-o
Los mortífagos estaban en el cementerio. No sólo no habían podido detener a Potter, sino que el muchacho se había ido con la varita del Señor Obscuro. Tomar la varita de otro mago era el mayor insulto imaginable. Su amo estaba tendido en el suelo y un par de mortífagos dieron un paso adelante, pero de repente los dedos de su amo temblaron. Más señales de vida, y Voldemort estaba de pie. Se puso de pie, rígido, los Mortífagos esperaron la palabra de su amo. El tiempo se detuvo mientras Voldemort permaneció en silencio y sus seguidores contenían su aliento.
"Déjenme", dijo Voldemort con frialdad, y los mortífagos se desapareceron rápidamente. El Señor Obscuro permaneció allí, si no hubiera sido por sus Horrocruxes, habría perecido en esa reacción de magia violenta. Miró a su alrededor durante varios minutos para buscar su varita y luego se detuvo cuando se dio cuenta de que no estaba.
Potter pagaría.
Aclaraciones:
Primer * Bueno la frase original es "bite me" es una jerga estadounidense que tiene su equivalente al español por cada país (Cómeme la polla, vete a tomar por culo, a la mierda, que te den, ¿y a mí qué?) Preferí utilizar el "que te den" porque es menos vulgar, además era el más neutral de todos, por que unos son muy españoles o mexicanos.
Segundo * "Él dejó caer a Colagusano, listo para levantarlo en un segundo de una patada, si era necesario" Esta oración la traduje como pude, pero realmente no la entendí muy bien. Si hay alguien que quiera cooperar, la frase original es "He let Wormtail drop, ready to pick him up the second it kicked it, if it had kicked in."
Gracias a Soul of Demon por comentar :)
Por favor comenten, nos vemos.
