Harry

Al día siguiente, Harry, Ron y Hermione tomaron un desayuno frío de muesli y yogurt, ya que nadie confiaba lo suficiente en la estufa como para arriesgarse a encenderla.Mientras comían, decidieron abordar las renovaciones de arriba hacia abajo.Esta fue la sugerencia de Harry, basada en su limitada experiencia en la renovación de Grimmauld Place.Explicó que esto les permitiría ensuciar tanto los pisos como quisieran, ya que serían los últimos en arreglarlos.

Ron fue demasiado elogioso con la sugerencia bastante simple, y se emocionó tanto que tiró un globo de yogurt a la pared.Harry y Hermione resoplaron al mismo tiempo.Cuando los ojos de Harry instintivamente buscaron los de ella, se encontraron con un marrón cálido.Casi dejó caer la cuchara.Estaba tan sorprendido de encontrarla luciendo tan... tan... como ella misma.Su viejo yo.El que no lo despreciaba.

Había estado evitando mirarla toda la mañana, pero ahora lamentaba su decisión.Probó una sonrisa.¿Estaba tentando su suerte?Ella asintió una vez, su labio se curvó ligeramente, luego se giró hacia Ron, quien tenía una sonrisa tonta tan grande que hizo reír a Harry otra vez.

— ¿De qué se ríen ustedes dos? —preguntó Ron, mirando ansiosamente entre Harry y Hermione.

— Me estoy riendo de ti — dijo Harry, antes de que Hermione pudiera intervenir con algo desdeñoso y tratar de hacer pasar su 'casi sonrisa compartida' como nada.

Ron sonrió más ampliamente mientras se mecía hacia adelante y hacia atrás en su asiento, recordándole a Harry cómo se veía Teddy en su reciente fiesta de cumpleaños, justo antes de que trajeran el pastel.

— Estás muy mareado, Ron — espetó Hermione, aunque la sonrisa que bailaba en sus labios contradecía la aspereza de su tono.

— Estoy feliz de tener finalmente un sólido plan de ataque — dijo Ron con la boca llena de yogurt.

— La sugerencia de Harry no era un plan — dijo mientras tomaba el cuaderno donde había escrito la lista de artículos que necesitaban arreglar el día anterior — Pero aun así fue un buen consejo.Deberíamos hacer los pisos al final.Eso tiene sentido.

La confesión pareció causarle un poco de dolor, y Harry estaba bastante seguro de que lo había dicho para que Ron se callara, pero no le importó.Fue mucho más de lo que recibió de ella ayer.

Pasaron la siguiente media hora revisando la lista de Hermione nuevamente y reorganizándola con el enfoque de 'de arriba a abajo' en mente.Luego dibujaron líneas para delinear qué elementos harían en un día determinado.

— Eso nos da cinco días de margen — exclamó Ron al final — ¡Brillante! Probablemente necesitarás esos cinco días para prepararte para tu boda — señaló Hermione — Y esto supone que nada sale mal, lo cual, dado nuestro historial, es una suposición bastante terrible.

Harry intentó otra sonrisa.Le valió una mueca.Aparentemente había agotado sus reservas de 'tolerancia Harry' para el día.Miró su reloj de pulsera.Eran las 8:30.Suspiró y tomó otro bocado de su yogurt.Tal vez mañana llegarían a las 9:00.

Lo primero en la lista de tareas de Hermione era quitar todos los artículos de las paredes y los estantes: retratos, relojes, libros, fotos y toda la decoración aleatoria.Luego, Ron los clasificaría y pondría lo que quería conservar en la biblioteca de arriba, y lo que quería deshacerse en el sótano, donde él y Luna podrían almacenarlos hasta que la casa estuviera lista para dejar los artículos.

Esta última parte había sido idea de Hermione;una de la que estaba muy orgullosa.Parecía haberse dado cuenta del error que había cometido con la casa el día anterior y estaba decidida a compensarlo.Se lanzó a dar una conferencia sobre casas mágicas y cómo había numerosos relatos de ellas tomando represalias cuando sus dueños se deshacían de muebles u otros accesorios.Incluso proporcionó varios ejemplos con fechas.

Ron les contó una historia sobre cuando su madre había tratado de sacar un sillón hundido de la madriguera.La sala de estar había llorado su pérdida durante un mes completo, volviendo las cortinas y otros muebles negros y sin dejar que nada se moviera al lugar donde había estado el sillón.

Hermione pasó a especular sobre la magia detrás de esto;qué elementos de la magia estaban en juego, cómo se había producido y por qué.Fue entonces cuando Ron perdió interés y comenzó a jugar con el muesli restante en su plato.

Harry la miró con gran atención, como si fuera a haber una prueba sobre el contenido y su puntaje determinaría si podrían volver a ser amigos.Pronto, sin embargo, se dio cuenta de que esencialmente solo estaba hablando con Harry y cortó.

— Bueno.Um, ¿Empezamos?

— ¡Sí! —Ron saltó de su asiento y envió su plato sucio al fregadero con un movimiento de su varita.

Harry siguió su ejemplo, pero cuando se volvió hacia la sala de estar, notó que Hermione estaba incómoda con su cuenco sucio en la mano.Se mordía el labio mientras miraba su varita, que sobresalía torpemente de su bolsillo, como si no perteneciera allí.

Harry movió su varita y envió el plato de ella al fregadero después del suyo, luego hizo un círculo en el aire para iniciar el hechizo de lavado.

— Presume — Hermione murmuró mientras pasaba junto a él caminando por el pasillo con su ceño fruncido.

— No lo estaba — dijo Harry mientras la seguía — No quería arriesgarme a romper un plato, especialmente con lo sensible que es la casa en este momento.

— No tienes fe en mis habilidades.Veo como es — Se dio la vuelta y colocó los puños apretados en sus caderas.

— Eso no es todo.Simplemente no tienes práctica y es difícil obtener la fuerza de ese hechizo correctamente.Te conozco...

— Sin embargo, no lo haces… — interrumpió ella — No sabes nada sobre mí, o mis habilidades, o…o… nada de lo que he estado haciendo desde la última vez que hablamos, así que deja de hacer suposiciones.

El pecho de Harry se apretó.No podía discutir con eso.Él la miró mientras Ron ocupaba su lugar habitual entre ellos, mirando a cada uno de sus amigos con cautela.

— O... está bien — dijo Ron, aplaudiendo — Empecemos, um, con los retratos.Uh, ¿sabes cómo bajarlos?Originalmente había dirigido su pregunta a Harry, luego hizo un gran espectáculo al volverse hacia Hermione y agregar — ¿Alguno de ustedes?

Harry dio un paso adelante.

— Conozco un hechizo que usé en Grimmauld Place.Puedo mostrarles a ambos cómo usarlo, pero no debo asumir que aún no lo saben.¿Necesitas que te enseñe el hechizo, Hermione?— preguntó mordazmente.

La mirada que ella le dirigió fue tan amenazadora que imaginó que si la dirigía a los retratos, los asustaría y los haría caer de las paredes, no se requería magia.

Harry demostró el hechizo en un retrato de un jarrón con flores de estornudo que no parecía muy unido a su ubicación en la pared.Mientras explicaba el movimiento de la varita y el encantamiento, Hermione continuó asaltándolo con su mirada asesina, aunque podía decir que estaba tomando nota de sus instrucciones.Incluso la atrapó susurrando el encantamiento en voz baja.

Cuando el hechizo se apoderó, el retrato comenzó a brillar de color rosa, como si hubiera sido cubierto con una gruesa capa de brillo muggle especialmente reflectante.Algunos de los puntos brillantes se habían filtrado en la pared y Harry usó su varita para hacer retroceder el brillo, por lo que solo cubrió el retrato y el marco.

— Necesitas mantener esta parte brillante en el marco — explicó — De lo contrario, quitarás pedazos de la pared.Lo aprendí de la manera difícil —

Luego, Harry guardó su varita en el bolsillo y agarró el marco.Inmediatamente, supo que su agarre estaba mal.Se quitó las manos y agarró diferentes puntos.Eso estuvo más cerca, pero todavía no del todo bien.Movió su mano derecha unos centímetros hacia la izquierda.Eso fue peor.Devolvió su mano derecha, luego movió su mano izquierda ligeramente.

— Ahí vamos — dijo Harry cuando algo detrás del marco hizo clic en su lugar — ¿Escucharon?

— ¿Escuchar que? —preguntó Ron, inclinándose hacia adelante con su oreja casi tocando el marco rosa brillante — ¿Cómo sonó?

— Un clic — respondió Harry — ¿No lo escuchaste? —Miró a Hermione, que fruncía el ceño con los brazos cruzados sobre el pecho.

— No— dijo ella secamente.

— Eh —Harry quitó las manos — Bueno… esta parte es un poco difícil de explicar.Las instrucciones en el libro eran complicadas, así que simplemente… toqué hasta que me di cuenta de que lo estaba agarrando correctamente.Luego está este sonido, o, eh…, tal vez más una sensación de liberación del retrato.Ahí es cuando sabes que lo has hecho bien —Volvió a colocar las manos en su lugar y luego levantó el retrato, revelando un trozo de pared varios tonos más claro que el resto — ¿Ves?

— ¿Realmente importa dónde pones las manos? —preguntó Ron, tomando el retrato de Harry.

— Sí — dijo Harry — De lo contrario, dará demasiada pelea.

— ¿Así que se supone que debemos 'sentirlo'? —preguntó Hermione con cinismo — ¿Qué era este método complicado en el libro?

— Tenía algo que ver con las runas, pero no estaba de humor para aprender runas solo para sacar algunos retratos de la pared.

Cuando Ron bajó las escaleras para depositar el retrato, Hermione dijo con aire de suficiencia:

— Afortunadamente, ya sé runas.

Harry tuvo que morderse la lengua para no preguntar: "¿Todavía?¿Has probado últimamente?No me gustaría que hicieras suposiciones falsas sobre tus habilidades.

— No recuerdo lo que decía el libro al respecto — dijo en cambio — Entonces, estás por tu cuenta.O puedo tratar de explicar…

— Estaré bien — interrumpió, luego se dirigió al retrato de los caballos que Ron había luchado por derribar el día anterior.Harry podía decir que ese retrato sería difícil de quitar.Los caballos se veían muy felices con su lugar actual.Pero no dijo nada.Fue al extremo opuesto de la habitación, donde un reloj polvoriento mostraba la hora equivocada, y lanzó el hechizo de eliminación.

Harry trató de ignorar a Hermione mientras trabajaba.Después de que él quitara el reloj de la pared, ella todavía estaba trabajando en la pintura de los caballos.Harry se volvió hacia Ron, que sostenía un espejo ovalado.

— ¿Quieres este reloj, Ron?

— Nah — dijo Ron a través de un gruñido.Estaba moviendo lentamente sus manos alrededor del marco brillante del espejo, deteniéndose cada pocos segundos para tirar — No lo entiendo.¿Cómo se supone que voy a saber si se siente bien?

Harry puso el reloj en el pasillo y fue a reunirse con él.Después de varios intentos fallidos de hablar con Ron, Harry se hizo cargo y logró encontrar el agarre correcto en el segundo intento.El espejo requirió un poco de fuerza para desmontarlo, pero se separó de la pared limpiamente.

— Ese, me lo quiero quedar — dijo Ron, tomando el espejo de Harry y llevándolo arriba.

Harry llevó el reloj al sótano y cuando regresó, vio a Hermione murmurando en latín por lo bajo mientras el retrato de los caballos brillaba con un verde tenue.

— ¿Necesitas ayuda?

Harry apenas había terminado con su pregunta cuando ella lanzó un rotundo "No" al otro lado de la habitación.

Se encogió de hombros y pasó al siguiente elemento, un grupo de estantes flotantes que parecían estar hechos de enredaderas espinosas que habían crecido en la pared.

— Me gustan esos — dijo Ron detrás de él — Creo que Luna también lo hará.Parecen plantas de verdad, ¿no?

— Eh… sí —Eran horribles, pero después de ver el dormitorio naranja de la infancia de Ron, la forma llamativa en que él y George diseñaron sus tiendas y la decoración llamativa de su apartamento, Harry se acostumbró al estilo excéntrico de Ron.Luego estaba Luna, cuya casa contenía todos los colores de pintura de la tienda.No quería que ninguno de ellos se sintiera excluido, por lo que se le ocurrió una manera de incluirlos a todos pintando las paredes con rayas verticales en cientos de colores diferentes.

De hecho, Harry estaba un poco preocupado por lo que se les ocurriría a Ron y Luna al decorar una casa juntos.Este era el tipo de cosas sobre las que bromeaba con Hermione.Si ella estuviera hablando con él.

Después de trabajar juntos para quitar los estantes de vid feos, Ron y Harry cayeron en una rutina.Ron lanzó la primera parte del hechizo, luego Harry se colocó detrás de él y arrancó los objetos de las paredes.Dos horas más tarde, terminaron con el primer nivel mientras Hermione todavía estaba trabajando en el retrato de los caballos.

Harry se detuvo a observarla durante unos minutos.Había hecho algo para que las runas plateadas brillaran en la superficie del marco y estaba murmurando lo que sonaba como traducciones en voz baja.

Debió haber sentido sus ojos sobre ella porque se giró y lo miró a los ojos.Su expresión no era dura, pero se acercaba a ese territorio.Harry se alejó antes de que pudiera llegar a su destino.Se unió a Ron, que estaba trabajando en la eliminación de fotografías de magos al azar que colgaban en el hueco de la escalera.

— ¿Estas son las personas que eran dueñas de la casa antes que tú? —preguntó Harry mientras entrecerraba los ojos para distinguir el rostro de lo que era un mago delgado con una figura femenina, o una bruja muy peluda con lo que parecía un dragón en miniatura en su hombro.

— Ni idea — dijo Ron mientras agitaba su varita frente a una foto de tres niños — Probablemente debería buscar eso.

Recorrieron rápidamente la fila de fotos, pero se vieron obligados a detenerse cuando llegaron a la del mago/bruja.Harry no pudo encontrar ningún agarre que se sintiera bien, entonces hizo una pausa y se dirigió directamente a la persona en la foto.

— Hola, ehh, señor o señora, ese es un dragón realmente agradable —La persona en la foto acarició la barbilla del pequeño dragón, haciendo que la criatura se acicalara tirando de sus alas hacia atrás y levantando la barbilla en el aire.

—Oh, entonces es un dragón — dijo Harry, un poco sorprendido.Miró a Ron, quien se encogió de hombros y le indicó a Harry que siguiera hablando — Ehh… está bien, entonces, voy a necesitar moverte.No por mucho tiempo.Solo queremos pintar la pared detrás de ti para que se vea nueva, reemplazar esta barandilla podrida y arreglar algunas de las escaleras rotas.Entonces… entonces te llevaremos de regreso.

— No, no lo haremos —articuló Ron.

Harry lo fulminó con la mirada.Ahora no era el momento de preocuparse por la honestidad.Si le dijeran a la foto que iba a parar al sótano, probablemente indefinidamente, nunca la sacarían de la pared.Después de otros diez minutos de persuasión, finalmente pudieron sacar la foto, llevándose solo un poco de la pared.

Ron acababa de ir a colocar la pila de fotos liberadas en el sótano cuando Harry escuchó un chillido desde la sala de estar.Harry corrió a ver a Hermione, tropezando en el último escalón.Todavía no había recuperado el equilibrio cuando entró a trompicones en la habitación.

— ¿Estás bien?

— Bien — dijo ella, manteniendo sus ojos en el brillante retrato frente a ella — Solo un pequeño golpe.

Harry se acercó a ella mientras colocaba un dedo tentativo en una de las runas brillantes.Aparentemente satisfecha con lo que sintió allí, colocó toda su palma sobre la runa, luego repitió el gesto para una runa en el lado opuesto del retrato.

La luz brillante que rodeaba el retrato parpadeó.Harry se acercó aún más, moviéndose por instinto.Algo estaba mal.Podía sentirlo.

Hermione apretó la mandíbula y flexionó los músculos de los brazos.Un miedo frío lo atravesó.

— ¡No! —gritó — ¡Hermione, detente!

— ¡¿Qué?! —gritó por encima del hombro, con una mirada desafiante brillando en sus ojos.

— Algo está mal.

— Estas son las runas correctas.Juntos, significan libertad.Liberarán el cuadro.

— No lo harán — dijo él, cada vez más incómodo con cada segundo que pasaba ella sujetando el marco de esa manera.¿Cómo no podía sentir lo mal que estaba? — Puedo decir que algo anda mal.

— ¿Ahora me soltarás? Puede que tengas más práctica, pero aún soy mejor en Runas.

— No me importa quién es mejor en runas, puedo sentir que algo es…

Tiró con fuerza y por un segundo no pasó nada.Ella frunció el ceño y tiró de nuevo y esta vez, hubo un fuerte descanso.Harry miró a su alrededor frenéticamente en busca de la fuente del sonido, justo cuando Hermione se dio la vuelta y quitó el marco, llevándose consigo la pared, las capas de yeso y madera detrás de la pared, y varias filas de ladrillos del exterior de la casa.

El retrato de los caballos había sido reemplazado por una nueva imagen de la franja de hierba entre esta casa y la siguiente.Harry miró boquiabierto el agujero en la pared y luego entró en acción.

Hermione gimió cuando él sacó su varita.Estaba cerrando los ojos con fuerza y mordiéndose el labio mientras se tambaleaba sobre sus pies.El peso del retrato con todos los ladrillos era demasiado para ella.

— ¡Wingardium Leviosa! — gritó, pero el hechizo rebotó en la brillante luz verde que rodeaba el retrato y golpeó a Harry de lleno en el pecho.Salió volando y agarró la parte superior del retrato en su camino hacia arriba, con la esperanza de aliviar algo de la carga de Hermione.Pero nunca logró agarrar bien el marco y dejó caer su varita en el proceso.

Al momento siguiente, estaba clavado al techo, incapaz de ayudar cuando el retrato se resbaló de sus dedos y chocó con su pie.

Ella gritó.

El retrato aterrizó sobre su pie y los ladrillos cayeron del resto de la pared, formando una pila ordenada cuando el resto de su cuerpo golpeó el suelo.Entonces el retrato cayó hacia adelante y ella soltó otro grito, este mucho más débil.

— ¡Hermione!

Intentó patear lejos de la pared.Luego trató de invocar su varita, pero nada funcionó.Estaba demasiado frenético para concentrar su magia.Estaba herida y no se movía, y él necesitabaagarrarla.

— ¡Hermione!

— ¡Caray!¡¿Qué diablos?!

— ¡Ron! —gritó Harry.

Ron se quedó congelado durante varios segundos.Fue una reacción justa, dada la vista por la que había entrado: un agujero limpio en el costado de su casa, Harry flotando en el aire y Hermione acostada debajo de una pila de ladrillos, pero podría asimilar la escena más tarde.Harry necesitaba que semoviera.

— ¡Ron! —Harry repitió — ¡Déjame caer!

El segundo grito de Harry rompió el trance de Ron.

— Finite Incantatem — dijo con un movimiento de su varita antes de cruzar la habitación hacia Hermione.

Harry golpeó el suelo con un gruñido, pero apenas registró el dolor antes de ir a ayudar a Ron, que estaba tratando de quitarle el retrato a Hermione.Ambos tiraron juntos durante unos segundos, pero fue inútil.

— Maldita sea — juró Ron.

— ¿Cómo diablos sostuvo esto? —preguntó Harry.

— ¿Ella sostuvo esto? —preguntó Ron a través de un gruñido.

— Debe haber usado una ráfaga de magia sin darme cuenta.Oye, da un paso atrás.Esto no está funcionando.

Harry se apresuró a buscar su varita e invirtió el hechizo de eliminación que todavía estaba causando que el marco brillara, tropezando varias veces con los escalones.Una vez que la luz brillante se fue, lanzó un encantamiento peso pluma sobre el retrato y lo arrojó a un lado.Golpeó el suelo con fuerza, probablemente abollando la madera.

Hermione estaba despierta.Eso fue lo primero que notó Harry.El alivio se filtró a través de él, haciéndolo sentir como si estuviera flotando de nuevo.Estaba apoyada en los codos y jadeaba con los dientes apretados, pero estaba bien.

Él y Ron comenzaron a sacar ladrillos de la pila que cubría su pie.

— ¿Qué tipo de hechizos curativos conoces? —preguntó Harry cuando el ladrillo que acababa de arrojar sobre su hombro se estrelló contra el piso de madera.

— Uhh.Ninguno.Creo que deberíamos llevarla a San Mungo.En realidad, espera, está este ungüento que hicieron Luna y George, ya que siempre se lastimaba después de experimentar consigo mismo.Lo arregla todo.Bueno, casi todo.Huesos rotos, moretones, cortes, cosas simples como esas.Eso debería ser suficiente para esto, ¿verdad?

— Creo que sí — respondió Harry sin confianza.Sabía algunos hechizos de diagnóstico de sus días de quidditch, pero siempre había tenido problemas para leerlos correctamente — Ve y tómalo — le dijo a Ron — No podría lastimar.

Una vez que el último ladrillo estuvo fuera del pie de Hermione, Ron se levantó y se fue con un estallido.Harry frunció el ceño ante la zapatilla que cubría su pie aplastado, tratando de pensar en una manera de quitársela de forma segura mientras ella evitaba su mirada con resolución.Eso estuvo bien para él.Él tampoco quería mirarla.

Apuntó su varita a su zapato y comenzó a decir, "Evan…"cuando ella lo interrumpió.

— ¡No lo desaparezcas!Me tomó una eternidad encontrar estos de mi tamaño, y simplemente los rompí.

— ¿Tienes una mejor idea? —preguntó, y luego agregó con sarcasmo — ¿Tal vez una runa que no conozco?

Ella puso su boca en una línea dura.

— Solo quítamelos.

Harry le aflojó el zapato cuando ella hizo una mueca.Una vez que comenzó a quitárselo, ella gritó.El sonido lo atravesó como una maldición oscura.Sin dudarlo un momento, levantó su varita y desvaneció su zapato.Ella no protestó esta vez.Parecía demasiado distraída por el dolor.

A continuación, desvaneció su calcetín y tuvo que esforzarse mucho para no reaccionar ante la vista de su pie hinchado.Se veía o lo que sucedería si se le pidiera a Teddy que hiciera un dibujo de un pie usando todos los colores incorrectos.Reunió su ira a su alrededor como un escudo, usándolo para protegerse contra la preocupación que estaba haciendo que sus manos temblaran y sus pensamientos se revolvieran.Necesitaba concentrarse.

Lo lavó lo mejor que pudo, manejándola con el toque más ligero que pudo reunir.Pero ella todavía gritó varias veces.Las lágrimas picaban en sus ojos y estaba parpadeando tan rápido para contenerlas, que no podía ver el hechizo de diagnóstico que acababa de lanzar correctamente.

— Es sólo... ehh... sólo huesos rotos.Y... y magulladuras... — Se le quebró la voz.Respiró hondo y volvió a buscar su ira — Estará bien.El ungüento de George debería funcionar y, si no funciona, te llevaremos a San Mungo.

Hermione se quedó en silencio.Estaba mirando el agujero en la pared, como si fuera a repararse solo si marcaba la intensidad de su mirada en la configuración correcta.

Ron regresó con una pasta azul cielo y Harry aplicó una capa gruesa sobre su piel magullada, luego envolvió su pie en un vendaje.Hermione gimió y contuvo el aliento varias veces mientras él trabajaba, pero a juzgar por el hechizo de diagnóstico, si lo estaba leyendo correctamente, el dolor general de la lesión ya estaba disminuyendo.

Harry se puso de pie y le ofreció su mano, la cual ella ignoró.Resopló y miró a Ron, quien estaba distraído con la tarea de tratar de colocar los ladrillos en su lugar.Harry volvió a mirar a Hermione y vio que ella todavía estaba de espaldas a él y probablemente no había notado su mano.

— Vamos.Te ayudaré a sentarte en el sofá.

Ella colocó su mano en la de él y dejó que él la levantara.Una vez que estuvo en el sofá, se abrazó y finalmente lo miró a los ojos.

— Gracias.Por... por ayudarme y... y sanarme.

La forma en que lo dijo, como si hubiera alguna posibilidad de que él hubiera hecho lo contrario, hizo que algo en él se rompiera.Encontró su ira de nuevo y esta vez, en lugar de atraerla a su alrededor, se la arrojó a Hermione.

— ¡¿Qué diablos fue eso?!¡Te dije que era peligroso!Pero tenías que ser terca al respecto, ¿no?

— No lo hice a propósito — respondió en voz baja y temblorosa.

— ¡¿Por qué no me dejaste ayudarte, como lo hizo Ron?!Ya estaríamos listos.Pero no.No se puede confiar en mí.¡Soy el villano, de alguna manera, aunque no hice nada!¡Túlo rompiste!¡Túdijiste que habíamos terminado!¡Pero de alguna manera sigue siendo mi culpa!

Ella simplemente se sentó allí, mirando resueltamente a la destrucción que había creado.Permaneció en silencio.Porque aparentemente ya ni siquiera valía la pena discutir con él.

— ¡¿Incluso me estás escuchando?!¿O necesitas escucharlo de Ron para que realmente se asiente? —Harry miró a Ron, que se había dado por vencido con los ladrillos y miraba a Harry con cautela — Díselo tú — dijo Harry —Dile que la magia es peligrosa.Dile que si no nos escucha se va a volver a hacer daño.Dile que deje de actuar como una tonta.No se ve bien en ella.Dile a ella…

— Lo tengo —Ron estaba ahora frente a Harry.Tomó a Harry por los hombros y lo empujó hacia el pasillo — Hablaré con ella — dijo Ron en voz baja — ¿Por qué no… vas y te refrescas?

Harry se volvió hacia Hermione.Estaba temblando y sosteniéndose con tanta fuerza que sus nudillos estaban blancos.Su labio también estaba sangrando.Probablemente de donde lo había mordido mientras sostenía el retrato.Mientras la observaba, vio que varias lágrimas rodaban por su rostro.

Mierda.

Acababa de pasar por algo traumático.Probablemente estaba avergonzada.Definitivamente estaba adolorida, y aquí estaba él, gritándole.Era un idiota.Peor que un troll.Empujó a Ron y subió las escaleras, pasándose los dedos por el cabello con tanta violencia que estaba seguro de que se estaba arrancando un buen mechón.

Harry todavía estaba furioso mientras paseaba por el pasillo fuera de su habitación.Seguía viéndola con dolor, seguía viendo el dolor nadando en sus ojos, la angustia grabada en sus rasgos normalmente suaves.Apretó los puños, pero sabía que no debía golpear nada.Ahora no era el momento de trastornar la casa.Así que los mantuvo apretados a su lado, agarrándolos con tanta fuerza que sus músculos comenzaron a doler.

Eventualmente, se calmó lo suficiente como para reanudar su tarea anterior de sacar cosas de las paredes.Ron se acercó en un momento y dijo que iban a pedir el almuerzo.Harry le dijo que no tenía hambre.

Cuando Harry se quedó sin artículos para llevar arriba, tentativamente se aventuró a bajar al nivel inferior.Podía oír las voces de Ron y Hermione en la cocina, pero se alejó de allí y volvió a la sala de estar.

Ron no había progresado en llenar el agujero.Después de unos momentos de probarse a sí mismo, Harry supo por qué.Pudo colocar la primera capa de ladrillos muy bien, pero tan pronto como se dio la vuelta para agarrar más ladrillos, los que acababa de colocar se habían apilado en una pila ordenada y la capa de mortero había desaparecido.

Harry volvió a intentarlo unas cuantas veces más, probando diferentes variaciones en las que nunca apartaba la mirada de los ladrillos, pero no permanecían en su lugar por más de unos pocos minutos.

— Bien — suspiró — ¿Qué es lo que quieres, entonces?¿Un agujero gigante en el costado de la habitación?¿Una ventana nueva?

Si una pared en blanco podía asentir, juró que había hecho precisamente eso.

— ¿Sí?¿Quieres una ventana?

Harry dio un paso atrás y evaluó el agujero en la pared bajo una nueva luz.No era un mal lugar para una ventana.Había otro al otro lado de la habitación.Y ahora que lo estaba mirando, era extraño que no hubiera otro.La ubicación del agujero estaba un poco mal, pero tal vez la casa lo ayudaría a resolver eso, ahora que sabía lo que quería.

Sin embargo, reubicaría el agujero más tarde.Estaba hecho polvo.Harry levantó su varita, pero antes de lanzar un hechizo dijo:

— Si quieres la ventana, ayúdame a fortalecer el hechizo de barrera que estoy a punto de lanzar.

Levantó la barrera y un momento después, brilló con un dorado brillante cuando la casa le agregó su magia.

— Está bien — se dijo a sí mismo — Ventana es.

— Eres bueno en eso.

Harry se sobresaltó.Se dio la vuelta para encontrar a Hermione en la puerta, apoyada en un par de muletas.

— Hablando con la casa, quiero decir — agregó — Descubrir lo que quiere.

— Sí.Ehh.. supongo.Ciertamente mejor que tú.Trató de sonreír, para que ella supiera que estaba bromeando, pero resultó más como una mueca.Hizo un gesto hacia el sofá — Ehh… ¿quieres… sentarte?

Dio un paso hacia ella, listo para ayudar, pero ella cojeó hacia adelante por su cuenta.

— Lo tengo.

— ¿Cómo está el pie? —preguntó mientras ella se bajaba a una posición sentada.

Ella descartó la pregunta.

— Bien.Espero que esté curado por la mañana.Ese ungüento es... bueno... mágico.Ella se sonrojó, luego se concentró en sus jeans — Quiero decir… bueno, ya sabes a lo que me refiero.Necesito llevarme algo de eso a casa.

— Sí —Tomó asiento junto a ella, con cuidado de dejar suficiente espacio entre ellos — Lamento haber perdido los estribos.No era del todo justo culparte, ya que la casa claramente quería ese agujero.Pero tú… me asustaste.Por eso grité.No me gusta verte lastimada.

— Lo sé — susurró ella, todavía mirándose las piernas — Te preocupas mucho por las personas, y las casas, incluso.Eres una buena persona, Harry.

— No.O, tal vez, pero no lo dije en serio en el sentido de 'apesta ver a la gente con dolor'.No puedo soportar vertecondolor, específicamente.

— Vaya.Yo… um… gracias. Yo tampoco.

Ella lo miró a los ojos.Su labio ya no sangraba.Se preguntó si ella habría usado el ungüento.Harry tuvo que resistir el impulso de estirar la mano y pasar los dedos por él.Sus mejillas se sonrojaron de nuevo y pudo ver que empezaba a alejarse, así que se apresuró a hacer su siguiente pregunta.

— Ya no practicas magia los domingos, ¿verdad?

— ¿Es tan obvio? —Su rubor se profundizó.

— No quise decir…no estaba tratando de… yo solo… — Joder.Odiaba lo difícil que todo se había vuelto con ellos.Hablar con ella solía ser lo más fácil.Tomó aire y volvió a intentarlo — Me preguntaba… ¿no lo sentiste?¿Qué tan mal estuvo el hechizo?Tus instintos cuando se trata de magia solían ser muy buenos.Incluso si ya no practicas, no veo cómo esa parte podría haber cambiado.

Sus ojos recorrieron su rostro, como si estuviera tratando de determinar qué respuesta sería la mejor para compartir con él.En silencio deseó que ella le dijera la verdad.Luego, cuando ella no respondió después de varios momentos, él simplemente deseó que dijeraalgo.Cualquier cosa.

— Solo... me detuve — dijo finalmente — No podía… no quería… — Hizo una pausa para respirar — Es difícil de explicar, pero después de algunas semanas sin magia, comencé a sentirme mal,muy enferma.Entonces la magia... simplemente comenzó a filtrarse fuera de mí.Era como un niño otra vez, que había perdido el control.

— ¿Qué hiciste?

— Lo leí.

Harry sonrió.Debería haberlo adivinado.

Volvió a mirar su regazo, donde sus dedos jugueteaban con una de las costuras de sus jeans.

— Hay una poción que mitiga esos efectos.Aparentemente no soy la primera bruja en decidir que ya no quiere practicar magia.Así que comencé a tomarlo.Funcionó, pero antes de venir aquí, sabía que tendría que hacer magia, así que detuve la poción y… todo se ha sentido mal desde entonces.

— ¿Qué?Entonces tú…?

— Antes de que entres en pánico, es solo temporal.En unos días, debería estar bien de nuevo.Pero... bueno... si dices que el hechizo que estaba lanzando se sintió mal, te creo.Pero no podía decirlo porque toda mi magia se siente mal.

Sabía que ella estaba fuera de contacto con la magia, pero este era un nivel completamente nuevo.Había tomado una poción para evitar los recordatorios de sus habilidades innatas.Una poción que había alterado sus malditos instintos.

— ¿Por qué? —preguntó, dándose cuenta tarde de que había expresado la pregunta en voz alta.

Ella no respondió.

— ¿Por qué? —preguntó de nuevo — ¿Por qué ir a tales extremos para vivir sin magia?

— No podría hacer los domingos — dijo, sin dejar de mirarse las piernas — No después… ni una vez… No quería que me lo recordaran… — Nunca terminó la oración, pero las palabras que había dicho ya habían sido lo suficientemente profundas.

— ¿Fue tan malo? —preguntó — ¿Pensar en mi?Me sorprende que no hayas ido a uno de esos trucos para borrar la memoria.O tal vez lo intentaste.Tal vez dijeron que había demasiados recuerdos para… Harry se interrumpió cuando vio una lágrima oscurecer una mancha en sus jeans.Mierda.Él acababa de recordarle a sus padres.¿Por qué estaba actuando como un imbécil hoy?Ella pareció sacarlo de él — Lo siento.

— Está bien —Se limpió rápidamente los ojos, luego agarró sus muletas y las colocó frente a ella — No vine aquí para pelear contigo.Solo vine a decir que tenías razón, antes.Debería haber acudido a ti y a Ron en busca de ayuda.Lo haré la próxima vez.

Ella le dedicó una sonrisa forzada, luego se balanceó hacia adelante y se puso de pie. O en un pie.Mientras Harry la observaba cruzar la habitación, sintió como pequeñas arañas reptando por toda su piel.Se movió, luego se puso de pie.

— Esperar.

Se detuvo y con cuidado se volvió hacia él.Una de sus cejas se arqueó en cuestión.

Harry no tenía idea de lo que estaba a punto de decir.Simplemente se sintió obligado a ponerse de pie y deciralgo .Tal vez fue porque esta era la primera conversación que habían tenido desde su regreso que no había terminado en gritos.Tal vez fue porque se sentía como si hubieran pasado a través de una barrera importante hoy.O tal vez simplemente no podía soportar verla alejarse.

Fuera lo que fuera, le hizo soltar:

— Te visité.Después de que nos separamos.Yo... yo fui a Oxford.

— ¿Qué? —Se inclinó hacia adelante, luego perdió el equilibrio y casi se cae.Harry estuvo allí en un instante, tomándola por los codos.

— Fui a verte.Fue como… dos semanas después de que me fui.Quería… no sé.Cambiar de opinión.Rogar por otra oportunidad.

— ¿Y que? —Estaba tan cerca que podía sentir su aliento en la barbilla.Él retrocedió un paso, pero aún mantuvo un firme agarre en sus codos — Entonces yo... yo te vi.Era jueves, noche de concursos, así que revisé el pub.Y tú, tú estabas allí.Con todos.Te observé durante unos minutos y tú… te veías bien.Feliz.Más libre de lo que te había visto desde... desde siempre.

Su pecho se apretó ante el recuerdo.De verla reír.Ver sus ojos brillar, incluso desde el otro lado del pub.Al ver lo malditamente hermosa que se veía.Notando que ella no había estado llorando o perdiendo el sueño o bebiendo demasiado, como él lo había hecho.Reconociendo que se veía mejor de lo que la había visto en meses, y dándose cuenta de lo que había cambiado en su vida para explicar la diferencia.

Se aclaró la garganta antes de continuar.

— Yo… pensé que estabas mejor.No quería agobiarte.No más de lo que ya lo había hecho.Así que... me fui.Supuse que eras más feliz sin mí.

— No recuerdo esa noche — Hermione negó con la cabeza.

Harry se encogió de hombros, sin saber qué más decir.

— Esa… esa no fue tu decisión.Que era más feliz sin ti.Sobre todo sin hablar conmigo.Probablemente estaba mareado por el exceso de vino.

— Tal vez fue una decisión equivocada en ese momento, pero no me hablaste durante dos años, así que diría que es una forma de acuerdo, de tu parte.

— Deberías habérmelo dicho — replicó ella.

— ¿Cuándo? —preguntó — Nunca escribiste.Nunca llamaste.Nunca…

— ¿Escribiste?¿Llamaste?Debo haberlos perdido — replicó ella, pero no había calor detrás de sus palabras.Ella no parecía enojada en absoluto.Parecía confundida.No, peor que eso.Parecía devastada, como si le hubieran robado la piedra angular de todas sus creencias y la hubieran dejado sola, sin idea de qué pensar o adónde ir después.

Harry le pasó los pulgares por el codo, lo que la llevó a soltar los brazos de su agarre.Se tambaleó un poco hacia atrás, pero se sujetó con las muletas.Joder, nada de esta conversación había ido como él quería.

Quería que supiera que la quería de vuelta.Que había tratado de luchar por ella, y finalmente decidió ponerla primero.Porque la amaba más que a nadie y haría cualquier cosa por ella, incluso sacrificar su propia felicidad.Pero cada vez que trató de poner palabras al sentimiento, terminaron peleando.

— Oye — dijo Ron, apareciendo en la puerta — ¿Están bien ustedes dos?

— Bien — dijeron al mismo tiempo, finalmente apartando sus ojos el uno del otro.

— Vale... acabo de pensar en algo, sobre la casa.¿Sabes la dirección?¿Número seis de la calle Hazel?Es perfecto para mí y para Luna.

— ¿Por qué? —preguntó Harry.

— Bueno, primero, el número seis es un número realmente significativo para nosotros.

Ron miraba a Harry como si esto fuera obvio, pero Harry no tenía idea de lo que estaba hablando.

— ¿Lo es?¿Por qué?

— La conocí durante seis años antes de invitarla a salir.

— Ah.¿Y lo de Hazel?

— La varita de su madre estaba hecha de madera de avellano.Y ese fue la primera de Luna, antes de que lo perdiera y Ollivander le hiciera otra.

— ¿Ron? —dijo Hermione.

— ¿Sí?

— Por favor cállate.

— Vaya.Sí.Bueno —Miró a Harry inquisitivamente, pero Harry solo se encogió de hombros.

Todos se quedaron allí en un silencio incómodo durante varios momentos.Eventualmente, Ron preguntó:

— ¿Ustedes dos quieren que vaya?

— No — dijo Harry. No quería volver a estar a solas con Hermione.Le había estado confiando, casi sonriendo, luego él se había ido y había dicho eso de visitar Oxford y ahora ella parecía al borde de las lágrimas.Y la peor parte era que podía joder todo al respecto.Cualquier oferta de consuelo solo empeoraría las cosas.

— Está bien — dijo Ron — Entonces, estaba pensando, no en direcciones ni nada de eso — agregó con una mirada cautelosa a Hermione — Pensé que podríamos mover la renovación de la cocina más arriba en la lista.De esa manera podemos cocinar allí en lugar de pedir siempre.

— ¿Por 'nosotros' asumo que te refieres a mí y a Harry? —interrumpió Hermione.

— Bueno, no… puedo hacer sándwiches.Algunas sopas.

— Es una mala idea — la reprendió —Necesitamos construir hasta la cocina, Ronald.Seguiremos con el plan y comenzaremos por la entrada —Con eso, se alejó cojeando enfadada con sus muletas.

Una vez que llegó a las escaleras, Ron se volvió hacia Harry y le dijo:

— Me gusta más cuando no estás cerca.

— Sí — suspiró Harry — Solía pensar eso sobre ti.

Eso le valió una dura mirada de Ron.

— No… no cuando ustedes dos estaban juntos.Luego.Después de mudarnos a Oxford.Harry gimió y presionó sus dedos en sus ojos — ¿Por qué todo lo que sale de mi boca hoy es absolutamente incorrecto?

Ron palmeó su hombro.

— He Estado allí.Vamos a la taberna.Probablemente sea una suposición segura que Hermione no quiere ir.Puedes decirme qué cosa horrible le dijiste a Hermione para ponerla de tan mal humor.

— Le conté sobre ese viaje que hice a Oxford unas semanas después de nuestra ruptura.

— Vaya.¿Y ella... no se lo tomó bien?

— Ni idea — murmuró, finalmente dejando caer sus manos de su rostro — Solía saber todo sobre ella.Casi podía leer sus pensamientos como un Legilimante.Y ahora... no tengo ni puta idea de lo que está pensando.Solíamos ser capaces de hablar durante horas sobre cualquier cosa y ahora me tropiezo con cada pocas palabras.Es como si estuviera hablando con... con...

— ¿Cho en cuarto año? —Ron proporcionó.

Ahora fue el turno de Harry de fulminarlo con la mirada.

— ¿Invitaste a salir a Fleur últimamente?

— Gilipollas.

— No soy el único, con Luna fuera de la ciudad por un mes — replicó con una sonrisa irónica.

— Vete a la mierda —Ron trató de golpear a Harry en el costado, pero Harry lo bloqueó y le dio un codazo en las costillas.Ron lo abofeteó, tirando los anteojos de Harry torcidos, y Harry tomó represalias pisando fuerte el pie de Ron.

— ¡Oye!

Hicieron eso por unos momentos, eventualmente separándose con una sonrisa en sus rostros.

— Eres un idiota — dijo Ron, todavía jadeando.

— Créeme.Lo sé.

— De todos modos.Nunca supe lo que estaba pasando por la cabeza de Hermione, si eso ayuda.Realmente no sé qué está pasando por la cabeza de Luna, pero afortunadamente, ella simplemente me lo dice.

— Eso no ayuda en absoluto.

— ¿Obtengo puntos por intentarlo?"

— No.

— Oh, bueno — suspiró Ron mientras estiraba los brazos sobre su cabeza.Vamos a buscar esa bebida.Claramente lo necesitas.

— Bien.Puedo contarte todo sobre la nueva ventana que vamos a instalar.

— Está bien — dijo Ron, confundido — Y podemos celebrar el final de la renovación el primer día.

— Maldito infierno — juró Harry, deteniéndose en el lugar — Eso fue solo el primer día".

— Sí.Pero el día dos será mejor.

— Tal vez — respondió Harry, sin confianza en absoluto.

Notas:

N/A: Harry está realmente en sintonía con esta casa.Hmm... Me pregunto de qué se trata.Continué gracias a mis betas, Lancashire Witch y SlaveofPassion.¡Y gracias a todos por apoyar esta historia!A continuación, ¡Más flashbacks!

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Lo siento chicos pero se me complicó el fin de semana y pues hasta ahorita tuve algo de tiempo para venir y actualizar.

Que desfruten este capítulo 3. Nos vemos.