RinMakoto. A pesar de la lesión de Riko, esta tuvo el apoyo de Naomi y de su chico, de ahí es donde nacen los sentimientos jeje.

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Sin más, comencemos…

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En estos momentos en la estación de tren, se encontraba Manaka junto con Raiden, ambos parecían esperar a alguien.

- ¿Ella vendrá el día de hoy?

- Me llamó y me contó que volvería por unos días aquí, ya estoy ansiosa porque Mami vuelva – lo que decía la peli naranja era verdad, su amiga Mami quien se había mudado a otra ciudad, vendría de visita.

Mientras ambos esperaban a que la chica viniera, justo en ese momento escucharon el sonido de un tren acercándose a la estación por lo que ambos chicos se pusieron de pie, Manaka miraba para los lados en los que los pasajeros comenzaron a bajar. Luego de que algunos descendieran, pudo divisar a su amiga.

- ¡Mami!

- ¡Mana! – esta recibió un fuerte abrazo de parte de la peli naranja.

- Tiempo sin verte Mami, realmente te extrañaba – la peli verde solo sonrió por eso correspondiendo al gesto.

- Bienvenida de vuelta Ono-san.

- Mochizuki-san, gracias – ya con la bienvenida, el trio decidió ir hacia el estadio Nikko, mientras tanto, los tres charlaban un poco.

- ¿Viste nuestro juego Mami?

- Sí, realmente la pasaron mal, ¿tan difícil lo sentiste?

- Sí, fue más porque Rikorin no jugó por su lesión.

- ¿Ella se encuentra bien?

- La entrenadora no la puso a jugar para evitar que su lesión se agraviara, pero ella está entrenando ya con normalidad.

- Que bueno, al menos no fue de gravedad.

- Creo que la ausencia de Saginuma fue bastante clara ya que ella organiza ataques, así que sin ella tenían que tener otra opción, pero ganaron al final.

- Sí, vi el resultado.

- Ahora vamos por la final del torneo, iremos a primera – Manaka dijo haciendo el signo de la paz.

- ¿Contra quién jugarán?

- Creo que es contra Snow White o contra Polar Bear, depende quien gane.

- ¿Snow White? ¿Acaso Yu no estaba en ese equipo?

- Sí, además, que se hizo de pareja.

- ¿Yu con pareja? ¿Y quién es? – Manaka señaló de forma burlona hacia Raiden, eso sorprendió de gran manera a la peli verde.

- ¡¿En serio?!

- Sí, pasaron muchas cosas y bueno, con Yu ya tenemos algo ahí, no es del todo oficial, pero creo que comprendes ¿no?

- Entiendo, pero de igual modo, felicidades Mochizuki-san – el peli rojizo asintió dándole las gracias, de ahí fueron al interior del estadio en donde iban hablando un poco más.

- Por cierto, ¿Qué ha sido de ti Ono-san? ¿Has seguido en el hockey?

- Es cierto Mami, ¿dejaste el hockey al irte o seguiste entrenando como lo hacíamos?

- Seguí entrenando, el deporte me gustó mucho y no lo iba a dejar.

- Por cierto, ¿quieres jugar un poco?

- Sabía que me lo preguntarías.

- Querías que te lo preguntara ¿no?

- Yo también supuse que Manaka-san te preguntaría eso – eso causó un poco de risas en ambas féminas.

Manaka y Mami fueron a los vestidores a cambiarse, Raiden se fue a las gradas a ver un poco el entrenamiento del equipo de Dream Monkeys, aunque a lo mejor iba más para ver como Yu entrenaba. Mientras tanto, ambas amigas estaban terminando de cambiarse.

- Cuándo la entrenadora te vea, imagino que es lo que te dirá Mami.

- ¿En serio?

- Sí, dirá algo como "Ya que eres de las mejores en el equipo de Ice Rabbits, veamos cómo es que has mejorado en tu juego" – esto último lo dijo la peli naranja con una pose, eso causó un poco de risa en la peli verde.

- Jajaja, puede que sea cierto, aunque mi equipo sea fuerte, no es como que sea una de las mejores jugadoras, de hecho, rara vez juego de titular, pero, de todos modos, me emociona volver a esta pista, siendo aquí la primera vez que probé el hockey.

- Entonces vamos – las dos fueron a la pista en donde Yoko, al ver a Mami, se sorprendió ya que no esperaba que ella regresara a Nikko.

- Buenos días.

- Vaya Mami, ha pasado un tiempo.

- Lo sé.

- ¿Y te va bien?

- Sí.

- Ya eres de las mejores en el famoso Ice Rabbits, quiero ver cómo es que has mejorado en tu estilo de juego – esas palabras de la entrenadora causaron risa en ambas féminas, Yoko solo las miraba confundidas – ¿de qué se ríen?

- Creo que ya sabían que ibas a decir eso.

- ¿Qué? No entiendo – pasado el momento gracioso, el equipo entero de Dream Monkeys se reunió – chicas, quiero que conozcan a la antigua compañera de Manaka, Ono Mami, quien vino a jugar con el equipo hoy.

- ¡Mami!

- Bienvenida Ma – Ayaka y Kaoruko estaban felices por el regreso de su amiga.

- Mami ahora juega en Tokio, pero como dije, practicará con nosotras.

- Encantada de verlas – esto lo dijo con un tono algo tímido.

- ¡Muéstranos como estás jugando, campeona!

- No soy campeona Manaka – la mencionada río.

El entrenamiento inició, a Mami le mandaron un disco con la cual hizo maravillas, incluso cuando Kaoruko estaba de portera quien no miró el disco pasar a su lado llegando al fondo de la red, es más, ni Yoko ni So se lo creían.

- Ha mejorado mucho desde la última vez.

- Y vaya que sí – las demás compañeras felicitaron a la peli verde, esta asintió por eso y fue al lado de la peli azul del equipo.

- Kiyose Yu ¿no es así?

- Sí.

- Manaka me ha hablado de ti, realmente eres una gran persona para ella.

- Vaya, me siento halagada.

- Además, me enteré que sales con Mochizuki-san, felicidades – eso sonrojó a Yu.

- B-Bueno, aun no tenemos el status en sí de pareja, pero es como si lo fuéramos – eso hizo sonreír a Mami.

- Pues lo digo de vuelta, felicidades – esta asintió y solo miraron a la peli naranja que seguía entrenando.

Una vez que acabó esto, Yoko se reunión con Mami para charlar un poco, esto afuera de la pista y tomando bebidas.

- Dime Mami, ¿en qué posición juegas?

- Delantera izquierda.

- Vaya, es la misma posición en la que Manaka juega, además, hiciste un muy buen disparo, ni Kaoruko pudo reaccionar.

- Gracias.

- Apuesto que eso será un buen estímulo para las chicas.

- ¿Cree eso?

- Sí, pero dime una cosa Mami, ¿has aprendido algo hoy? – eso dejó pensando un poco a la peli verde, pero antes de que respondiera, fue llamada por Manaka.

Despidiéndose de la entrenadora, esta se fue con el grupo de chicas acompañadas de Raiden quien fue invitado por Yu, ya no era un secreto que tanto él como la peli azul mantenían una relación amorosa.

Con la salida, el grupo fue hacia varios sitios, desde cafeterías hasta parques, terminando justo en un templo en donde pidieron algunos deseos, además de que las charlas que tenian eran muy buenas.

- Por cierto, ¿Cuándo será Yu?

- ¿De qué hablas Manaka?

- La boda entre ustedes – Raiden se quedó en silencio, Yu se sonrojó, pero esta solo movió un poco la cabeza.

- N-No seas tonta, apenas tenemos 15, aun no tenemos edad para hacer eso – las risas sonaron en todo el sitio.

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De vuelta con Yoko y su asistente, estos estaban en su oficina arreglando algunos papeles como era de costumbre, sin embargo, un dato llegó a ellos por una revista.

- So, ¿acaso hoy no juegan Snow White contra Polar Bear? – la mujer le dijo al peli negro.

- Es cierto, me pregunto cuál de ellos se llevaría el triunfo.

- Si habláramos por talento, diría que Snow White, aunque Yu abandonó el equipo, estos trajeron a Maya Walker.

- Es cierto, pero dime Yoko, ¿Cuál equipo quieres que gane?

- ¿Qué?

- ¿Qué equipo quieres enfrentar? ¿Snow White o Polar Bear? – esa pregunta confundió a la entrenadora.

- Sería bueno que Yu se enfrentara a sus viejas compañeras, pero… no lo sé.

Lo que Yoko no se daría cuenta hasta después, fue que justo el encuentro que ella había dicho, fue ganado fácilmente por el equipo de Snow White quien pasó por encima de su rival y con eso accedía al enfrentamiento por el ascenso a la división A.

De vuelta con el grupo de jóvenes, estos estaban en la posada de la familia Mizusawa y podían ver cómo es que Mami ya había vuelto a hacer costura, así como lo hacían cuando iban en secundaria.

- ¿Cómo es que te has vuelto mejor en esto Mami?

- ¿Por qué lo dices?

- Porque a pesar de seguir jugando hockey como nosotras, has mejorado mucho más en el bordado, al igual que yo has estado lo mismo – decía Manaka con una pequeña sonrisa.

- ¿No te nombraron, presidenta? – Mami miró hacia Ayaka.

- Así es, y ya tenemos 10 miembros para que el club continúe – la peli azul hizo un signo de paz.

- Eso si es increíble.

- Yo a veces bordo por la nostalgia que me causa – Kaoruko decía.

- Es un buen cambio.

- Mi hermana está tan metida en el hockey que dudo que se acuerde del bordado – Ayaka miraba a la peli naranja.

- ¡Claro que me acuerdo!

- Apuesto que ni siquiera te acuerdas de enhebrar una aguja.

- ¡Claro que sí! – las demás reían un poco por eso, además de que se la pasaban bien, y eso fue hasta que cayó la noche.

Estos se reunieron en la habitación de la peli naranja, a pesar de que Raiden no estaba seguro de estar ahí ya que según él no se vería bien siendo el único chico con varias féminas, pero estando Yu y las demás, no debía tener pena por lo que terminó accediendo.

Ahí se pusieron a jugar un poco, así como que este poseía penitencia y así fue como Manaka acabó perdiendo.

- ¡¿Por qué pierdo en esto?!

- Muy bien, entonces creo que Manaka-san merece castigo ¿no?

- Jaja, ni modo, creo que tendrás que saber qué hacer.

- ¿Cuántas veces me tocará ser "extremadamente pobre"? – susurró esta.

- Muy bien, deja de quejarte y ya sabes que tienes que hacer, hermana.

- Bien, bien, ¿Qué desean?

- Papas fritas.

- Chocolate.

- ¡Caramelos!

- ¡Una Pepsi!

- Una Coca-Cola para mí.

- Té en botella.

- ¡¿Qué les pasa?! Yo sola no puedo traer todo eso.

- Yo iré contigo.

- ¡Gracias Mami!

- Iré también, no quiero que vayan ustedes solas.

- ¡Mochizuki-kun, eres un caballero! – con eso, el trio salió de ahí en busca de las cosas que pidieron las demás.

La noche era calmada, además de que parecía que a la peli naranja le traía algunos temas sobre el hockey y eso era algo respondido por la peli verde.

- Saben… estaba pensando en dejar el hockey – eso agarró desprevenido a ambos.

- ¿Cómo?

- ¿Por qué Mami?

- Con el nivel que poseo, casi no juego los partidos y eso que ha pasado un año… no he llegado al nivel de mis compañeras – la chica se calmó un poco – siento que no estoy hecha para seguir jugando hockey.

- Bueno, en sí es que hay muchas jugadoras de nivel en tu equipo – Raiden dijo.

- Y eso es genial Mami, además, el disparo que hiciste hoy en la práctica fue genial – la chica le dedicó una sonrisa – jugar hockey contigo realmente es divertido.

- Mana, gracias. Realmente no cambias.

- Y que lo digas, desde que la conocí sigue estando igual.

- ¿Es un halago o ambos me están insultando sin decírmelo? – tanto Mami como Raiden rieron un poco por eso.

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Al día siguiente, ya era hora de la despedida y todos estaban en la estación de tren para darle el adiós a la peli verde.

- Nos vemos la próxima vez.

- ¡Sí!

- La próxima vez iremos a visitarte, Mami.

- ¿En serio? Antes tendré que conocer Tokio para guiarlas por ahí – el tren estaba por irse – ¡amo jugar hockey!

- ¡Lo sabemos! – el equipo río por eso y ahí fue donde el transporte arrancó con ella despidiéndose, Manaka siguió el tren hasta que se iba perdiendo en el horizonte.

Ya no era una despedida triste como lo fue la primera vez, ahora era una bastante linda en donde los sentimientos de todos estarían conectados al disco, así como era su lema.

Y no solo eso, sino que habría una noticia importante.

- Yoko, ¿ya viste nuestro rival en la final?

- Así es – la entrenadora río por lo bajo – parece que tendremos viejas conocidas, vamos a ver cómo nos va contra Snow White.

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Continuará…