Disclaimer: Vampire Knight lamentablemente no es mío, solo utilizo a los personajes de este anime-manga para satisfacer mi necesidad de YAOI.

Advertencias: a estas alturas ninguna.

Tiempo de actualización: INDEFINIDO.

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CAPÍTULO XVI: NIVEL E

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La expresión de sorpresa fue fácilmente dibujada en las caras de Yuuki y Hanabusa. Por un momento solo se pudo apreciar un fugaz mutismo mientras los demás nobles intentaban conciliar todos los eventos previos. Akatsuki, Souen y Seiren lo notaron con solo ver al prefecto no importaba que Kiryuu estuviera inconsciente emitía un aura completamente terrible, un aura asfixiante y desgarradora, tan letal como si se tratara de un depredador en calma antes de que enterrara las garras sobre su presa. Pese a que conocían al mordaz cazador, de alguna forma lo sabían no era el mismo ser.

─ Tengo que ver a Zero ─. Demando Yuuki. Su tono de voz manifestaba verdadera preocupación por Kiryuu, después de todo entre ellos existía un lazo familiar aunque no compartieran la misma sangre.

─ No puedes ─ sentencio al instante Kaname de forma cortante.

Una mirada de indignación apareció de inmediato en los ojos de la vampira, rápidamente los ojos de la princesa de los Kuran se tornaron rojos. Los presentes advirtieron la tensión entre ambos hermanos. Los consanguíneos se estaban comportando de forma imprevista incluso se notaba que ninguno iba a ceder ni un ápice en lo referido al cazador. La cálida mirada de la vampira rebosaba de absoluta determinación, una que ni el mismo Kaname sería capaz de quebrantar. El mayor de los Kuran intentó calmarse y modular el tono de su voz haciéndola sonar totalmente complaciente. ─ Entiende Yuuki... no es el momento adecuado─. Alego Kuran con la esperanza de hacerla desistir

Yuuki no rehuyó de su mirada, la siguió manteniendo fija ante su hermano

─ En este momento Kiryuu-kun se encuentra inconsciente ─, completo Kaname. ─ No se encuentra herido, si es lo que te preocupa.

─ Yuuki-sama ─irrumpió Seiren de forma cortes─. Usted misma debe sentirlo.

En ese momento la vampira lo noto. De no ser por Seiren debido a su propia impaciencia ni siquiera lo habría notado, es cierto que sus sentimientos nublaban su razón, como no noto antes la sensación de ser consumida. "Imposible" pensó al tiempo que negaba con la cabeza. El estremecimiento era aún más terrible e implacable que el que Rido le había provocado, no se comparaba en nada a su vivencia previa como vampira ni siquiera cuando fue la fiesta y conoció a los vampiros nobles que fingían adoración hacia ella. No era miedo, era desolación, no pudo evitarlo y las lágrimas se deslizaron raudas por su rostro.

Todos vieron a Yuuki romper en un llanto silencioso, solo lágrimas sin sollozos. De inmediato Kaname la rodeo en un abrazo.

─ Yuuki. Por el momento lo mejor es que no lo veas.

Ella negó con la cabeza. ─Zero es Zero. Kaname ─enuncio el nombre del vampiro con voz firme, no como siempre lo llamaba agregando honoríficos. La vampira sabía que aún no alcanzaba el nivel de sensatez del mayor de los Kuran sin embargo no era justo que el castaño la quisiera tener cautiva dentro de una jaula de cristal. Ya no era una niña y aunque lo fuera por dolorosa y cruel que puede ser la realidad daría su mejor esfuerzo por caminar a la par de él. ─ Además no te estoy pidiendo permiso.

De antemano ella sabía que sus palabras fueron desalmadas. Kaname al igual que los presentes se quedaron aturdidos y antes de darse cuenta solo vieron a la princesa de los Kuran abandonar la estancia. Yuuki emprendió su camino guiándose simplemente por la presencia de Zero. Sus pasos cortos y firmes. Sentía un ligero estremecimiento en su cuerpo después de todo este tiempo ella no sabía cómo se suponía que debía actuar frente a Zero, no desde que el cazador juro que la cazaría y entonces su resolución fue huir eternamente. En el fondo siempre lo supo, huir era infantil y cobarde. Escapar no solucionaría nada, aun así una vez que se fue de la academia su vida siguió siendo la de la princesa encerrada en lo alto de una torre.

En cuanto miro la puerta cerrada solo la madera los separaba. Llegaron a su mente sus propias palabras hirientes "La Yuuki vampiro ha devorado a la Yuuki humana". Giro el pomo de la puerta y comenzó a descender por las escaleras que crujían durante su descenso. Cada escalón que pasara la acercaba a Zero, no podía dejar de sentirse ansiosa. Al final de camino vislumbro la cabeza de Kiryuu. El cazador se encontraba completamente encadenado. Noto que lentamente la cabeza de Kiryuu que permanecía con la vista en el suelo empezó a elevarse hasta que los ojos de ambos se encontraron. No era el que Zero estuviese preso. Fue la mirada rota del hombre lo que la desoló, no había ni una pizca del ser arisco y amable que ella conocía.

─ Zero ─pronuncio tiernamente el nombre sin obtener reacción alguna del cazador. Sin pensarlo mucho se acercó a Kiryuu ─. Te quitaré estos grilletes.

Antes de ser capaz de acercarse al cazador noto como la mirada antes perdida se tornó roja. No fue capaz de moverse más, sus piernas se congelaron y sus rodillas terminaron por ceder. Ella quedo hincada sobre el piso con el peor presentimiento de toda su vida "¿Dónde está Zero?", lo que estaba frente a ella solo era un cascarón, uno que mostraba los instintos más primitivos de un vampiro.

─ Yuuki ─irrumpió la voz preocupada de Kuran─. No hay nada que puedas hacer inevitablemente ahora Kiryuu es un nivel e.

─ Aun así debo ayudarlo.

─ Lo sentiste ─irrumpió el vampiro─ para él solo somos su presa.

─ Mi sangre debe servir.

─ Eso no te garantiza nada ─aseveró su voz intuyendo los pensamientos de su hermana─ incluso aunque él bebió mi sangre nada cambio.

─ Kaname... ¿debe haber alguna manera de ayudarlo?

─ No estoy muy seguro de si se pueda hacer algo en su condición actual. Tenía la corazonada de que sí él te veía regresaría. Pero...me equivoque –admitió con pesar.

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Yagari le dio una larga calada al cigarro. El humo entraba por su boca e impregnaba su garganta para después exhalarlo por la nariz, la estancia estaba llena del olor a cigarro más específicamente humo con fragancia a menta. Mantenía los pies sobre el escritorio no le importaba si sus botas maltrataban el mueble, muy en el fondo sonreía al pensar en que cuando Cross regresará a su oficina le daría un ataque de histeria al ver las marcas sobre el escritorio.

Miraba con recelo los papeles que estaban amontonados a sus pies "¿a quién carajos se le ocurría darle esta clase de trabajo?". Él era un hombre de acción y ahora se sentía como todo un maldito burócrata, claro sin el exorbitante salario. Todos los instrumentos se mantenían ordenados de forma pulcra, así era Cross Kaien siempre manteniendo la fachada pese a que vestía ropas de anciano. En el escritorio había un portarretrato resaltaba el rostro de fastidio de su aprendiz. Cross mantenía una sonrisa boba de oreja a oreja al igual que su supuesta hija adoptiva. Tal vez desde el principio fue un error dejar a Zero bajo la tutela de Cross, pero en ese momento fue lo que dictamino la Asociación. Intento con todos sus recursos que lo enviaran en busca de su pupilo sin embargo dieron la orden de encontrar y exterminar a Kiryuu.

─ Tonterías ─bufó molesto ante las creencias de los cazadores.

Recapitulaba los eventos durante el supuesto altercado por parte de Kiryuu habían desaparecido misteriosamente algunos de los cazadores que en ese momento se encontraban en el edificio.

"No se encontraron cuerpos", ese pensamiento le taladraba en la cabeza una y otra vez. Kiryuu no era un vampiro sangre pura. La única conclusión lógica era que Shirabuki Sara había mordido a los cazadores, con dicha teoría todo encajaba a la perfección. Desde el principio oscilo de la supuesta caridad ofrecida por Shirabuki. Aun así también faltaban las vampiras que acompañaban a la sangre pura. Todo sonaba a traición.

Yumeno, quien aunque fingía preocupación por sus compañeros desaparecidos. La situación le quedaba como un guante de seda. La reorganización de la junta de emergencia quedo en favor de la cazadora, quien de momento fungía como vice-presidenta de la asociación. Sumándole el hecho de que Shirabuki parecía llevarse de maravilla con dicha. Hasta nuevo aviso él quedo atrapado en el lugar de director de la academia Cross.

Indiscutiblemente él rebatió a la asamblea de cazadores que él no podía permanecer de manera inactiva, sus quejas fueron ignoradas, todos los argumentos válidos fueron desechados. No era un imbécil al que le pudieras ver fácilmente la cara. Por lo general él trabajaba en solitario, el debías ser capaz de buscar por sí mismo a Cross o a Zero. Pero no, si él hiciera eso tal acción quedaría fácilmente marcada de insubordinación. Lo mejor sería mantener las apariencias y esperar por una oportunidad. O lo que ocurriera primero, porque la paciencia no era una de sus grandes virtudes.

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Simplemente se encontraba cansado. Mientras más se negaba a escucharla sin duda alguna ella elevaba la voz. Sin embargo eso representaba que abandonaba todo.

Antes todo era más sencillo. Al inicio siempre fueron Ichiru y él, pese a tener la misma apariencia sin duda alguna fueron dos seres completamente diferentes a contraste de su hermano él nunca se cuestionó las enseñanzas de sus padres, ni mucho menos dudaba acerca de la férrea voluntad de su maestro Yagari con respecto a los vampiros. Desde joven siempre supo que en cuanto creciera se convertiría en un cazador. Su yo joven e ingenuo aun no era lo suficiente mayor para opinar en cuanto a los vampiros; después de todo como si fuera un mantra grabado de forma perpetua en su mente lo sabía "los vampiros son peligrosos". Con el simple hecho de escuchar la palabra vampiro era tan simple como pensar en que eran la encarnación corpórea del mal.

La vida del cazador era su destino, el legado de su familia. Claro que nunca tuvo oportunidad de cuestionar esas palabras y el evento que ocurrió cuando la maestra de su escuela quien era una vampira terminó por convertirse de forma irremediable en un nivel e, solo afirmo que lo dicho por sus padres y su maestro era irrefutable. En el altercado se lamentó sintiéndose responsable por la pérdida de uno de los ojos de Yagari, aunque no fuera su culpa. Conoció por primera vez el miedo a los bebedores de sangre. Recordaba que la vampira era una mujer muy hermosa, sin duda una apariencia angelical que en el momento menos esperado saltaría como un lobo sobre su presa. A partir de esa situación aprendió a diferenciar a los vampiros de los humanos.

Distancia. ¿Cómo fue tan ciego para no notarlo? En algún punto pese a que él y su hermano empezaron en el mismo lugar comenzaron a caminar por diferentes caminos. Ichiru era enfermizo, por su parte él tenía la fortaleza de ambos. Irremediablemente sus padres desecharon la idea de que el menor de los gemelos se convertiría en cazador. No lo noto o posiblemente no quiso notar cambios que sus padres hicieron en la forma en que trataban a cada uno de sus hijos, la mirada de pena que recibía Ichiru y su creciente favoritismo hacia su persona. Entonces ocurrió la tragedia y nació la convicción. Hiou Shizuka fue el inicio de un destino maldito e incierto. La vampira mato a sus padres, no conforme con eso lo mordió. Solo su fuerza de voluntad y terquedad le permitía "vivir odiando a los vampiros y odiándose a sí mismo". Algunas veces deseaba creer que solo era un sueño ese día, no solo eso quiso negar que su hermano acompaño a Shizuka. La conmoción fue tan grande que naturalmente no quería aceptarlo, aun cuando todos daban por hecho que sus padres y su hermano murieron en el incidente él siempre lo supo: Ichiru vivía.

El menor de los Kiryuu solo permaneció de pie y en silencio mirando a sus padres, no supo con exactitud cuánto tiempo pasó. Después los cazadores que llegaron al lugar lo interrogaron, debido a la conmoción no hablo solo se continuó de pie y en silencio hasta que Cross llego, no era la primera vez que veía al hombre. Antes de darse cuenta ya vivía bajo el mismo techo que el cazador e hija.

Cuatro años. Antes de caer y continuar cayendo. Beber la sangre de Yuuki solo fue el inicio. Ya no podía mantener a raya al vampiro que habitaba en él, incluso el odioso Kuran le dio a beber su sangre.

Consumir la sangre de Ichiru era su mayor pecado, ese fue el hecho que termino por matar su humanidad.

De golpe todo se tornó en mutismo. Absolutamente todo quedo oscuro.

─ ¿Sigues vivo? ─Interrogo la molesta voz de mujer dentro de la oscuridad─. Cada vez que te caes siempre te pones de pie y continúas con tu vida.

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─ Zero no debe estar encadenado.

─ Solo es una medida temporal. Yuuki, Zero no puede simplemente estar libre...

En el rostro de la joven aún quedaban rastros de lágrimas. Yuuki siendo como era incluso se culpó del estado actual del cazador. La verdad era distinta, Kaname era el verdadero culpable de que Zero estuviera en ese limbo. Él fue quien lanzo a Kiryuu del cielo al infierno.

Una vez que quedó huérfano y aun con el escaso poder de un infante detecto un movimiento que pasó desapercibido por los mayores, que él se enterara de los gemelos malditos fue una mera coincidencia. Cierto dia el corrió al ver a Yuuki debido a las constantes llamadas de Cross, lo supo con solo ver a los dos niños de cabellos plateados. Eran descendientes de los cazadores, un linaje un intermedio entre humanos y vampiros pero carentes de sed. Se suponían no debían existir sin embargo ambos hermanos nacieron. Zero fue la pieza que él necesito para forjar un ser que protegiera a su hermana. En ese momento ni siquiera se cuestionó sus métodos, no hasta que vio a Yua en Zero se arrepintió de sus acciones. Los cazadores y las armas fueron el legado que dejo la vampira para un fin.

Él siempre se preocupó por los humanos, incluso nunca les guardo rencor cuando lo exiliaron y despojaron de sus tierras. Era normal que ellos reaccionaran así... Él era un monstro que se alimentaba de sangre.

Shizuka fue quien convirtió a Zero, sin embargo fue él quien desato esa maldición sobre el último de los Kiryuu.

La creación de humanos en vampiros fue el inicio incuestionable de una guerra. Los ancestros se regodearon del poder con el que nacieron, simplemente los humanos solo eran considerados sirvientes. Al ver la poca fuerza y vida de los humanos los antiguos vampiros comenzaron rápidamente a convertir a todo ser humano en vampiro. El nivel e fue el resultado. Seres sin voluntad propia. Seres que solo obedecían a su amo. Amargamente dichos seres infortunados terminarían siendo simples esclavos. Una vez mordido no había vuelta atrás, los afortunados morían después de un doloroso proceso de transformación. Los vampiros encontraron conveniente que los nivel e no pensaran y únicamente se dedicarán a seguir órdenes.

Al ver como cada día la población humana descendía intentaron dialogar con su especie, lamentablemente simplemente se mofaron tanto de Yua como de él. No había tiempo para dudas y terminaron siendo radicales. Él brindaría su sangre y cuerpo para que la humanidad forjara armas por su parte Yua exterminaría a los vampiros. Entonces no lo notó, fue tan estúpido al no percatarse de la última mirada llena de amor y ternura que le dedicó Yua era el adiós. No se permitió quebrarse aunque la desolación y tristeza anidara en su corazón. Tenía que pelear en contra de su propia especie. El ciclo de odio entre humanos y vampiros solo pareció menguar cuando exclusivamente los cazadores y unos pocos humanos sabían de la existencia de los vampiros, cuando se sintió cansado decidió dormir con la esperanza de no volver a abrir los ojos... El pasado era solo eso nada de lo que hiciera lo cambiaria. Por eso al menos quiso cambiar el futuro de Yuuki. Egoísta. Eso era lo que era, manipuló todo lo que pudo sin importarle los caminos de los seres que destruyó.

Solo al ver el entusiasmo de los hombres que después de mucho tiempo de habían vivido con miedo hacia los vampiros serio esperanza. Ese era su único consuelo, al haber perdido a su primer rayo de luz: Lo sabía. No había persona, vampiro o incluso a armas que pese a tener parte del ser de la vampira nunca serían ella.

Si no fuera por sus actos interesados Zero sería humano.

Dejo de divagar entre sus memorias lejanas. Se puso de pie y dejo a Yuuki arropada con un cobertor.

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Después del descenso del matrimonio de los Hanadagi, Shoto Isaya era considerado el más antiguo de los sangre pura. Dormir para los vampiros era como un escape momentáneo de su destino, una instancia en donde se reponían para continuar vagando en la eternidad. Para su esposa y para él no hubo nada más grato que ser padres. Ver a sus hijos nacer, crecer y seguir el ciclo de la vida sin quedar en un bucle infinito fue su mayor felicidad. Precisamente por ello y después de la muerte de su último descendiente humano con vida decidió tomar un descanso.

No obstante fue una sorpresa que al despertar sus amigos Haruka y Juuri perecieran, Kaien se encargó de darle la trágica noticia. Desde siempre la delicada paz que existió entre vampiros y humanos era difícil de mantener, pero era gracias a los Kuran y a su habilidad para utilizar las armas de los cazadores que de cierta manera se mantenían los vampiros bajo control. Fue triste y lamentable el saber que Kuran Rido inicio un camino anhelando el poder, desde el principio el vampiro heterocromático no le inspiraba la misma tranquilidad que sus hermanos quienes buscaban la coexistencia entre ambas especies. Sin Rido, lentamente un nuevo juego por la monarquía de los vampiros estaba en proceso, no se tenía que ser un genio para saber qué fue lo que verdaderamente ocurrió con Hanadagi, cuando un sangre pura requería más poder no existía nada más vigorizante y fortalecedor que beber de otro vampiro sangre pura. Kaien le había comentado los hechos recientes que se habían estado suscitando incluido el hecho del nuevo metal madre, nunca imagino que Sakura ofreciera de buena fe su corazón, no cuando ella era un ser que consideraba a los humanos mero alimento. Por su parte Sara siempre tuvo una mirada llena de ambición. Mientras que Toma, Ouri y los pocos vampiros sangre puras que aún continuaban vivos estaban en el limbo: ─ Deseando morir pero sin atreverse a ello─. Y por último solo quedaban los vampiros más jóvenes los hijos de sus amigos Kaname y Yuuki. Kaname parecía haber heredado la determinación de los Kuran, incluso al grado de ser drástico al momento de eliminar al consejo. Y la más joven de los Kuran, de la cual podía rememorar de memoria todas las anécdotas que Kaien le había relatado, solo sentía compasión por ella, debió haber permanecido como humana.

Podría permanecer inamovible, sin contribuir en nada no obstante, no se sentía capaz de permanecer inerte. No cuando los hijos de sus preciados amigos estaban en el ojo del huracán.

Sus pensamientos fueron irrumpidos cuando sintió a uno de los vampiros acercarse.

─ Isaya-sama ─el vampiro se inclinó de forma respetuosa─ ha habido movimientos en la asociación.

─ Cuéntame lo que ocurrió ─pidió.

─ Hubo un altercado en el recinto de los cazadores, se supone que el principal sospechoso del ataque es Kiryuu Zero.

─ Altercado.

─ Un cazador atacando su propia organización. Se dice que Kiryuu cayó al nivel e. En su locura mato a todos los que estaban en el recinto. Shirabuki-sama afortunadamente fue rescatada siendo la única superviviente.

─ ¿Sabes algo del presidente?

─ El director de la asociación está desaparecido. En su lugar como vice-presidente temporal quedo una mujer llamada Yumeno.

Isaya medito las palabras del vampiro.

─ ¿Atraparon a Kiryuu? ─Interrogó Isaya.

─ Se desconoce la ubicación del mencionado.

─ Gracias por la información, puedes retirarte. Es imprescindible que si llegas a saber otra cosa me lo comuniques de manera inmediata.

─ Entiendo. Me retiro, mi señor.

Shoto entrelazo sus manos. Definitivamente el que un cazador atacara la asociación no estaba entre sus cálculos. Por lo poco que pudo apreciar de Kiryuu, fue definitivamente un aura sedienta.

─ No solo era eso ─negó con la cabeza─. Cuando estuvieron en presencia del metal madre...

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Cross abrió los ojos mientras examinaba el lugar donde se encontraba. Observo el lugar con recelo, un gruñido de dolor escapo de sus labios. Al moverse se sorprendió de estar sobre una cama. Intento levantarse, aun podía sentir el dolor en su costado derecho por acto reflejo con sus manos presiono la herida en un intento para incorporarse.

─ Por fin despertaste, Kaien.

El hombre no tuvo la necesidad de alzar la mirada, de inmediato reconoció a la dueña de la voz.

─ Shirabuki-san.

─ Para ser uno de los cazadores más fuertes, me sorprendió lo fácil que fuiste de persuadir para realizar cada uno de mis caprichos. Deberías cuestionar la ayuda brindada por buenos samaritanos. Vampiro sin colmillos.

─ Me gusta creer que los vampiros y humanos pueden coexistir.

─ Al final de cuentas te segaron las palabras de Juuri. Es patético ver a uno de los mejores cazadores reducirse a solo eso. Tu mirada era antes tan fiera ahora solo tienes los ojos de un manso cachorro, domado por palabras ingenuas.

─ ¿qué es lo que pretendes?

─ Renovar todo, separar a los humanos de los vampiros. Nosotros no somos humanos y aunque los humanos se conviertan en vampiros nunca serán vampiros. Los ideales de nuestro ancestro estaban equivocados, aun así el ancestro de los Kuran teniendo el poder para cambiarlo todo decidió inclinarse a su fascinación por la mortalidad.

─ Alguien se interpondrá en tu camino ─aseguró Cross.

─ No cuando están en la lista negra de la asociación. Si a quien se refiere es a Kiryuu-kun él está siendo buscado para darle muerte. En cuando a Yagari, no hay mucho que él pueda hacer si está cuidando tu puesto de director en la academia.

Los ojos de Cross se abrieron de la impresión.

─ ¿qué hiciste?

─ Yo ─fingió inocencia en su voz─. No sé si eres ciego o simplemente un gran tonto. Deberías saberlo los cazadores nunca estuvieron feliz con la presencia de Kiryuu. ¿Cómo esperabas que hicieran los cazadores al tener a un vampiro entre sus filas?

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Kaname se dirigió hacia donde se encontraba Kiryuu, solo podía hacer algo con el estado actual del nivel e... Antes de descender y bajar por las escaleras dejo un títere de sombras resguardando el acceso al lugar, el majestuoso lobo lo miro de forma fija mientras esperaba las órdenes de su maestro: ─ Nadie debe entrar a este lugar ─ordeno. Al cerrar la puerta comenzó a bajar por las escaleras.

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─ Kiryuu ─musito el apellido del cazador. Los ojos del cazador se abrieron de forma furiosa mientras examinaba a su presa. No había ni una sola pizca del color amatista característico en los ojos del prefecto sus pupilas eran rojas─. Ni cayendo al nivel e te vuelves más tranquilo.

Solo un sangre pura conocía los poderes de uno. Kaname se acercó aún más a Kiryuu coloco ambas manos alrededor de la cabeza contraria para poder inmovilizarlo.

─ Zero ─. La mirada violenta que vio en los ojos de Zero era solo eso, la mirada de una bestia desbocada. Esté era el único camino que se le ocurrió para sacarlo del abismo. Cuando te alimentas de la sangre de alguien no solo consumes sangre para saciar tu sed también absorbes una parte de su esencia. Kaname noto que aparentemente el vampiro estaba por ponerse a la defensa el nivel e comenzó a moverse de manera intranquila. Dócilmente Kuran dejo que Kiryuu le mordiera, tenía suerte de que Zero no le estuviera arrancando un trozo del cuello debido a la brutal mordida que le propino, una vez que sintió que el vampiro se había alimentado lo suficiente lo apartó de su cuello, de inmediato noto que Kiryuu se tornó reacio.

─ ¿has escuchado acerca del intercambio equivalente? ─Cuestiono Kuran sabiendo que posiblemente no obtendría una respuesta a su pregunta─ mantente quieto ─dictamino Kuran.

Era algo completamente arriesgado, pero sobre todo para que esto funcionara ambos debían confiar en el otro, este pequeño detalle solo dificultaba más las cosas, Yuuki podría haberlo hecho no obstante ella aún era joven. Su hermana aún era como un bebé y podía terminar perdida en todo este proceso. ─ Sé que eres testarudo. Pero esta es la única opción ─susurro mientras se acercó al cuello del contrario para poder alimentarse.

Lentamente la conciencia de Kaname Kuran comenzó a rondar en la mente de Zero. Lo único de lo que estaba seguro es que todo estaba acabado si perdía su individualidad propia.

Lo más loable es que al principio viera la infancia de Zero, no se equivocó noto al niño de no más de cuatro años, un rostro sumamente infantil y sin nada de la seriedad del actual rostro de Kiryuu. El infante se encontraba en su habitación vistiendo un pijama azul.

─ Ichiru ─llamo una mujer de cabellos castaños─ papá y yo saldremos, se un niño bueno con Yagari-sensei ─pidió la mujer mientras acariciaba las hebras plateadas del infante.

El menor asintió ante el pedido de la mujer. Kaname observo con interés a la madre de los gemelos, no paso mucho antes de que a la escena se uniera un hombre de cabellos plateados y ojos amatistas. Claro que el semblante sereno del hombre era tan opuesto al de su primogénito.

─ No tardaremos, estaremos en casa para el desayuno ─prometió el mayor.

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El recuerdo cambio. Reconoció a Yagari Touga (el cazador aun no tenía un parche en el ojo derecho).

─ No pierdas de vista el objetivo ─pidió Touga. Noto como el niño sostenía el arma con ambas manos mientras el aprendiz intentaba evitar que sus manos tiemblen debido a su inexperiencia.

─ Es difícil ─ musito el niño. A Kuran hasta cierto punto le sorprendió que Zero fuera inseguro, no cuando ese hombre tenía un tino tan acertado a la hora de disparar con Bloody Rose.

─ Ichiru quejarte no mejorará tu puntería. Debes evitar que tus manos tiriten ─ordeno Yagari.

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El vampiro comenzó a cavilar. Cuando el primer recuerdo apareció no estaban ambos gemelos. No había ni un mínimo rastro de Zero en estos recuerdos.

─ Zero ─pronuncio con voz tenue el nombre. Las reflexiones del vampiro se vieron interrumpidas en cuanto sintió que era observado, Kuran se volvió sobre su eje para encontrarse con la silueta de un hombre.

─ Kuran Kaname-sama ─pronuncio el nombre con cierto tinte de odio dicha voz.

Pese a que la silueta y en apariencia podía ser prácticamente Zero, lo descarto. Kiryuu nunca le añadiría el honorifico "sama" el simple pensamiento le dibujo una sonrisa en el rostro.

─ Kiryuu-san *1. ─Dijo a modo de saludo Kaname.

─ No fue suficiente que asesinaras a Shizuka-sama. Ahora también quieres deshacerte de mi hermano.

─ El destino de Shizuka fue inevitable. ─Sentenció.

─ Se supone que es la parte en la que te creo ─mascullo molesto─, que todo fue culpa de Kuran Rido. No mientas. Tu solo manipulaste a todos para tu propio beneficio.

─ No solo era Shizuka... los vampiros deben dejar de existir.

─ ¿Incluso tú? ─sentencio Ichiru.

─ Así es. ─Concluyó Kuran sin titubear─. Es cierto que todos los vampiros deben desaparecer, pero...

─ DEJA DE MANIPULAR A ZERO ─grito Ichiru─. Solo quieres que él se encargue de tú trabajo sucio, aunque alegues que es su deber como cazador de vampiros. Ese idiota no es consciente de sí mismo.

─ Es como si él solo fuera llevado por la corriente sin quejarse ─concretó Kuran.

El semblante de Ichiru cambio a uno de furia. Termino elevando el filo de su arma en contra de Kuran. El vampiro no objeto nada tampoco se defendió simplemente miró al joven en silencio.

─¿Qué sabes tú de Zero?

─ No mucho. Sin embargo deseo ayudarlo.

─ No soy tan crédulo como para aceptar la bondad de los desconocidos sobre todo tu supuesta amabilidad. Shizuka-sama investigó al culpable de acomodar a su amante en la lista de la asociación. Rido estuvo imposibilitado, el desapareció precisamente el mismo día en el que el matrimonio Kuran cometió su supuesto suicidio. Por lo tanto y debido a esas circunstancias el más joven de los Kuran fue puesto bajo la tutela de Asato Ichijou quién dirigía al consejo de vampiros. Tú fuiste el responsable de tal orden con ayuda del presidente de la asociación. Incluso El viejo Asato no sé dio cuenta de que tenía a un lobo disfrazado de oveja. Pese a que tú eras en aquel entonces un niño, Ichijou no debió subestimarte. Manipulaste a Ichijou y este a su vez movilizó al presidente de la asociación.

─ En efecto todo lo que dices es cierto. Yo no pude matar a Rido, solo pude dañar su cuerpo de tal forma que lo obligo a dormir durante diez años.

─ ¿Tan importante era proteger a tu hermana?

El mutismo de Kuran solo afirmaba lo que él ya sabía. No obstante Ichiru ya sabía la decisión de Shizuka incluso antes de que ella falleciera. Ese día lo supo «– Algún día me marchitare.» Incluso aunque las posibilidades en el enfrentamiento entre ambos sangre pura era de cincuenta a cincuenta.

─ Shizuka-sama sabía que Yuuki Cross en realidad era la hija menor de los Kuran. Por eso mismo era más factible que tu hermana le brindará su sangre. Aun así ella no contó con que Zero no le permitiría beber de tu hermana, después de todo pesé a que Shizuka lo convirtió en vampiro nunca pudo doblegarlo.

Tú solo tuviste que esperar pacientemente para aprovechar una oportunidad. Shizuka-sama fue herida con Bloody Rose y esa fue tu oportunidad bebiste su sangre y estrujaste su corazón.

─ Cuando conocí a Shizuka por primera vez lo supe: aborrecía ser un vampiro. Shizuka carecía de la determinación para hacer algo por su cuenta siendo una sangre pura salir de su prisión no supondrían ninguna dificultad.

─ ¿Qué piensas hacer con Zero?

─ Él ya está en el abismo, si continua así no habrá nada que pueda hacer. Él ya no puede volver a ser humano.

─ Eso no depende de ti ─susurró Ichiru─ Zero es Zero. No importa si es humano o vampiro. Él es mi hermano estará bien.

De nuevo la misma frase. "Zero es Zero".

─ Es como tú lo dices. Kiryuu Ichiru.

Los últimos fragmentos del alma de Ichiru estaban ahí.

─ Nunca he sido un buen hermano ─confeso─, incluso ahora mi simple existencia le causa sufrimiento a Zero. Por eso mismo hare algo por él.

Ichiru emprendió su sendero no eran necesarias las palabras. El menor de los gemelos caminaba ignorando todos los recuerdos falsos carentes de la presencia del mayor de los Kiryuu.

─ Zero no está en estos recuerdos.

─ Así que te diste cuenta ─contesto impávido─. La mente siempre ha sido uno de los grandes misterios del mundo. Estos son recuerdos no son verdaderos, es la imaginación de Zero en un mundo donde no existe él. En donde no existió la maldición de los gemelos ya que nunca nació. Si no fuera por ti... Shizuka nunca habría salido del lugar en donde se encontraba.

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El sol iluminaba los campos de trigo, las espigas resplandecían iluminadas por los rayos del sol. Que tranquilizante era estar en calma, sin nada más que hacer, sin pasar cada segundo del día desgastando su mente con pensamientos. El sol brillaba en lo alto el cielo estaba tan azul. Cómo era posible que nunca se hubiera permitido apreciar su entorno. Deseaba mantenerse así por siempre. Simplemente estaba recostado sobre el sembradío sin hacer nada. Cerró sus ojos dejándose caer en la calma. Hasta que escucho el sonido de pasos acercándose, estos pasos no pertenecían a Yua.

─ Me ha costado encontrarte ─aseguró Kuran. Por su parte Kiryuu ignoró su presencia y continuó acostado.

Kaname sé dió cuenta de la nula respuesta del cazador. ─Kiryuu-kun, sé que es reconfortante estar sin hacer nada pero este no es el momento para descansar.

El otro no sé inmutó simplemente estaba ignorando al castaño.

─ Zero ─. Al escuchar su nombre sintió algo aun así era lo mejor permanecer quieto. Kaname suspiro definitivamente el cazador lo estaba ignorando de manera olímpica.

─ Esto es serio Zero, caíste al nivel e.

─ Pero eso es lo que todos querían. Y ahora ¿qué?... tampoco puedo caer al nivel e en paz. ─Farfullo molesto. ─ Pero si caí al nivel e, no sé supone que ya estoy muerto.

El cazador medito sus propias palabras mientras abría sus ojos de golpe la luz lo golpeo en las pupilas por lo que iba a cubrir sus ojos con la palma de su mano, pero se dio cuenta de algo aquella luz que irradiaba la estrella solar no lastimo su vista.

─ Ya te diste cuenta ─musito Kuran─ esta no es la realidad estamos en tu mente.

Los ojos de Zero reflejaron su incredulidad ante las palabras de Kuran.

─ ¿De todos los lugares porque precisamente un sembradío de trigo? Nunca creí que fueras de los que siente inclinación hacia la agricultura.

Las palabras de Kuran comenzaron a molestarlo, pero siempre era así en cada conversación que ambos mantenían nunca habían logrado ser cordiales con el otro, Zero siempre noto el tono de sarcasmo que envolvía la afilada lengua del castaño. Y aunque sabía que no debía caer en provocaciones terminaban enfrascados en alguna charla infantil.

─ ¿Y a que debo tu presencia en mi mente?

Kuran medito sus palabras, siempre considero que tenía un pequeño entretenimiento perverso al molestar a Kiryuu. Y definitivamente lo que estaba por decirle no le caería en gracia al otro.

Kiryuu noto como el semblante del contrario cambiaba a otro más serio. Pero el rostro de Kuran le advertía que lo que le diría no era nada bueno.

─ Estamos...casados.

─ ¡¿Eh?! ─fue lo único que pudo articular el cazador.

─ Estamos casados ─. Repitió con mayor firmeza el sangre pura.

Zero miro el semblante de Kaname. Sin duda debía haberse golpeado muy duro la cabeza como para que su mente iniciara juegos mentales, sobre todo porque Kaname Kuran, su mayor enemigo nunca le diría una broma de ese tipo. Definitivamente el Kaname que creo su subconsciente estaba dañado.

─ Es en serio ─añadió Kuran─, fue la única forma en la que podía sacarte del nivel e.

Y si, era la única forma que Kaname kuran vio factible, al principio simplemente pensó en hacer un simple enlace amo-sirviente como el que Shizuka intento establecer con Kiryuu, desafortunadamente debido a que el dichoso vinculo de sangre fue defectuoso.

─ ¿Qué clase de broma? ─farfullo molesto el cazador.

─ No es ninguna broma, cariño.

El entrecejo de Zero se frunció al escuchar el apelativo cariñoso. Por lo que opto por hacer lo que su juicio le decía, ignorar a Kuran sin más se dejó caer nuevamente y cerró los ojos, seguro esto era producto de un buen golpe.

─ Zero.

─ Tú no eres real ─susurró.

─ Zero.

─ Es más no debería hablar contigo.

─ Yuuki está viva ─menciono Kuran─. Lo que te dijo Sara no fue verdad.

Zero se levantó. Kaname había captado la completa atención del cazador.

─ Aun así, tú nunca me ayudarías si no esperaras nada a cambio ─respondió Zero─. Cuando Rido se acercaba a la academia solo me diste tu sangre para que matara a tu tío. Nada bueno puede provenir de los sangre puras. Ellos solo traen oscuridad y destruyen todo lo que tocan.

─ Es verdad que estamos malditos, pero Yuuki, Juuri, Haruka y Yua no eran así.

─ Yua murió sin concretar su objetivo, su legado no termino con los vampiros. Los padres de Yuuki, murieron por que nunca tuvieron el valor de enfrentarse a su hermano. Y Yuuki solo está encerrada en una jaula de cristal.

─ ¿Cómo lo sabes? ─ musito confundido él no había mencionado a Yua, ni el fallecimiento del matrimonio Kuran.

─ Vi los recuerdos de Yuuki, de la noche en que la convirtieron en humana.

Kaname se quedó mudo ante la declaración de Zero, Kiryuu quien no era un vampiro de nacimiento vio los recuerdos que la sangre almacenaba.

─ Kaname como el pueblo de Yua. Se suponía que debías haber acabado con todos los sangre pura, Kuran. No estar encerrado en tu mausoleo esperando el fin.

─ Tú.

─ Yua me lo conto todo.

.─.─.─.─.─.─.─.

Caminó sin sendero.

Eligió levantarse en vez de mantenerse inmóvil.

Contempló el firmamento y exhaló el viento.

Por primera vez en verdad se sintió vivo.

.─.─.─.─.─.─.─.

Aclaraciones:

1. Hay que diferenciar entre los gemelos. Por lo tanto para Kaname Kiryuu-kun es Zero y por ello a Ichiru le dijo Kiryuu-san.

Nota finales:

Nota 1. Lo se meses sin actualizar, sinceramente estuve sin ideas, después debido a ciertas circunstancias me vi sin tiempo para escribir y por último, Inspiración-san se perdió. Para esta capitulo pensé en I WILL NOT BOW de BREAKING BENJAMIN.

Nota 2. Tuve que buscar a Inspiración-san hasta por debajo de las rocas. Pensé que nunca iba a salir este capítulo.

Nota 3. Gracias por leer ?