Los personajes de Inuyasha pertenecen a la gran Rumiko, yo solo los tomó prestados para poder dar forma a la trama la cual si me pertenece. Todo sin lucro y solo con el afán de entretener. Cualquier parecido a la realidad es mera coincidencia o referencia.


13. "Yo No Soy...".

Finalmente, luego de dos semanas, a las ocho de la noche, Inuyasha estaba en casa. El vuelo de regreso le pareció más largo y cansado que el de ida, quería llegar a dormir, acurrucarse junto a su novia. Abrió la puerta, caminó a la sala y no vio a nadie, las luces estaban encendidas, tal vez, Kagome estaba arriba. Iba a subir las escaleras, cuando escuchó ladridos y la voz de Kagome, estaban afuera. Dejó la maleta en el primer escalón y salió al patio trasero.

Tessaiga y Ryuurin estaban dando vueltas alrededor de la chica, ella tenía las correas de los perros, Inuyasha se preguntaba ¿Los iba pasear o regresaban de un paseo? Se acercó sigilosamente, esperando que los perros no le delataran.

—¡No hagas eso!— se quejó Kagome cuando Ryuurin se paró y le puso las patas en los hombros—. Ryuu ¡Abajo!— el perro se calmó e Inuyasha sintió escalofríos, cuando su novia decía "esa" palabra en "ese" tono, le ponía la piel de gallina—. ¿Qué les pasa? Están muy locos.

—Tal vez te distraen para mí.

—¡Inuyasha!— Kagome se giró rápido y corrió a abrazarlo.

—Me voy a ir más seguido para que me recibas así.

—No seas tonto— estaba tan feliz de tenerlo de vuelta.

—Yo también te extrañé demasiado— la estrechó con fuerza, respiró su aroma y no pudo evitar pensar que estaba de nuevo en su hogar.

Los perros veían atentos a sus dueños, no tardaron en unirse a la bienvenida, le saltaron a Inuyasha por la espalda y ambos querían lamerle la cara.

—Tranquilos, yo también los extrañé— les acarició la cabeza para calmarlos—. ¿Sabes qué fue lo que alegró mi viaje?— le preguntó a Kagome.

—¿Qué usaron bóxer?— dijo divertida.

—Los mensajes de "YokoStar".

—¿Una nueva fan?

—Puede ser, es muy atenta, lástima que no sé dónde vive, compré jarabe de arce, ella lo sugirió.

—¿Me quieres poner celosa?— preguntó enarcando una ceja y cruzando los brazos.

—Utiliza el nombre de Yoko, deber ser gran fan.

—Debe serlo, íbamos a pasear— le mostró las correas, no le iba a admitir tan fácil su "identidad secreta"—. Pero tú los puedes llevar o descansas un rato y yo los llevo, ¿Por qué tienes esa mirada?— dio un paso atrás, Inuyasha la veía como si estuviera por llevar a cabo una travesura contra ella—. ¿Sabes qué? Seguro tienes hambre, te haré algo de comer— se fue directo a la casa, pero jamás llegó a la cocina, su novio la cargó sobre su hombro—. ¡No! ¡Suéltame!

—Dilo— él sabía que ella era "YokoStar", al principio le costó darse cuenta, pero luego no fue tan difícil, no es cómo que ella hubiese sido muy discreta.

—¿Qué digo?

—Ya lo sabes.

—No sé de qué hablas.

—Ya lo sabes, admítelo— comenzó a dar vueltas con ella.

—¡No lo hagas! Me vas a tirar.

—Esto es divertido.

—Yo no quería hacerlo, pero Souta me convenció— lo dijo, ya se estaba mareando.

—¿Él fue quien lo planeó todo?— bajó a la chica—. Se merece un premio.

—¿Te gustó?

—Me encantó y por eso, vienes con nosotros— la tomó de la mano y salieron al patio.

—¿Ir a dónde, con quienes?— su cerebro estaba mareado y se perdió de algo.

—A caminar con Tessa y Ryuu.

—Pero si nos ven te van a sancionar.

—Que lo hagan, no me importa. Además, de esa manera, no soy yo quien diga algo, serán esos reporteros.

—Esa idea me gusta— sonrió emocionada—. Por cierto... ¿Conservaste el kilt?

—¿Y para qué lo iba a querer?

—Ahora ya no lo sabrás.

Inuyasha se quedó intrigado, con muchas dudas ¿Kagome podría tener alguna fantasía?, la vio ponerle las correas a los perros, ¡Tenía que conseguirlo!, por ella y para ella lo usaría las veces que fuesen necesarias.


Leía con gran enojo los mensajes de esa tal "YokoStar". ¿Cachorros? ¿Se refería a perros? Inu era de gatos. ¿Qué comiera carne? ¿No veía la serie? Inuyasha nunca comía carne roja, siempre pescado y verduras, era bueno para su entrenamiento, una dieta keto, esa tipa no era una verdadera fan. ¡Y! ¿Cómo se atrevía decirle "viejo" a Inu?, ¿No veía lo joven y vigoroso que estaba?

¿Quién se creía esa? No podía aparecer un día y escribirle a su Inu con tanta confianza y familiaridad. No tenía ningún derecho sobre Inuyasha, él era de ella y de su heroína Kikyou. Cuando se enteró de la relación entre su hermoso y Kikyou sintió celos, pero luego pensó, ¿Quién más aparte de ella podía tener a su bello adonis Inuyasha? Una diosa como Kikyou, era un honor perder contra ella. ¿Había mejor combinación? Ambos salvaban vidas, Inu peleando contra los malos y Kikyou en el hospital.

Su tía decía que no renunciara, que no importase que admirase a Kikyou, ella aun podía ganar, que le diese batalla. Decidió que lo haría, pero primero: Debía poner en su lugar a esa "estrellita", le corregiría todos sus errores y la dejaría como tonta. Luego, terminaría con su nuevo obsequió para su amado y pondría en línea la página web que le creó.


Sesshoumaru y Jaken esperaban el ascensor para subir al helipuerto, tenían que reunirse con la encargada de la sesión de fotos en la isla donde serían las fotos y la única manera de llegar a ese lugar, era en helicóptero. Rin no iba con ellos se quedaría a supervisar las grabaciones, Sesshoumaru iba tranquilo, Michibata ya no era parte del equipo, debió cobrar un favor con un productor y éste, le ofreció un papel a Michibata en otra serie, de esa manera se deshizo del tipo y adelantaron la muerte del personaje. El ascensor llegó y entraron, las puertas se cerraban cuando Sesshoumaru alcanzó a ver al hombre que más detestaba, con rápidos reflejos detuvo las puertas.

—Sesshoumaru-sama, ¿Qué sucede?— vio a su jefe y retrocedió al verlo furioso, dirigió su vista a donde veía él—. Creí que ese tipo ya estaba en otro lado.

—Así es, no tiene nada que hacer aquí, ¿Y Rin?— tenía que encontrarla antes que él.

—Que osado el venir, castigaré al inepto que lo dejó entrar y...

—¡Jaken! ¿Y Rin?— no era momento para los parloteos del hombre.

—La chiquilla estaba con Sango.

En el área de descanso del set, Rin le contaba a Sango sobre el viaje a Canadá, tenía mucho que contarle y aprovechando el rato libre, se pondrían al corriente.

—Entonces, Miroku no quería usar ropa interior.

—Sanguito, todo fue un mal entendido— intervino Miroku.

—No te creo, te conozco muy bien.

—Cuando fuimos de compras, Miroku llevaba el kilt, toma, sus fotos— se había tomado la libertad de imprimirlas.

—Son muy buenas— Sango estaba divertida, Miroku era muy ocurrente, espontaneo y divertido, esas eran algunas de las razones por las que le gustaba—. Pero eso debiste hacerlo en Escocia, no en Canadá.

—Rin me ha dejado la falda, en unas próximas vacaciones vamos para allá.

—Es un trato.

—Pasando a otros asuntos, ustedes chicas, ¿Notaron a la nueva fan de Inuyasha?— tenía sus sospechas, pero primero debía confirmarlas con alguien más.

—¿Yoko?, ¿Qué hay con ella?— preguntó Sango.

—Es la señorita ¿Cierto?

—¿Pues quién más?

—¿Creen que Inuyasha ya se dio cuenta?— en el viaje, Rin estuvo por decirle, pero decidió que mejor era que él se percatase por su cuenta.

—Chicas, ¿Por qué le tienen poca fe?

—No es muy perspicaz— dijo Sango.

—Rin, te fuiste de viaje y no me dijiste.

Todos voltearon, estaban sorprendidos, no esperaban que Michibata volviese. Rin quería esconderse, huir, sentía la mirada del personal sobre ella, estaban ante los ojos de muchos, no intentaría propasarse de nuevo ¿Verdad?

—No tenía porque avisarle a usted— habló con firmeza.

—Cuando me llamaron para otra serie, no lo podía creer, me tenía que ir sin despedirme de ti, pero en cuanto me dijeron que ya estabas de regreso no dudé en venir.

—Ya no sé de qué otra manera decirle que no estoy interesada.

—Solo dile que estás casada— interrumpió Sesshoumaru.

—¿Casada?— Michibata se extrañó, vio la mano de Rin, no veía anillo alguno.

—Sesshou…— ¿Qué planeaba hacer? Esperaba que no alguna tontería, eso no sería propio de él.

—No me gusta que sepan de mi vida privada, pero ya cruzaste la línea— Sesshoumaru encaró a Michibata.

—¿Tu esposo es tu jefe? No me lo creo— eso era de las excusas más usadas y de lo más cliché.

—Deja de molestarla y abandona este set, no tienes permiso de estar aquí.

—Ya escuchó a Sesshoumaru-sama, mueva esos pies lejos de aquí— Jaken se paró entre los dos hombres, la tensión se podía sentir.

—Nos vemos, Rin— Michibata le lanzó un beso antes de irse.

Los que vieron la escena se quedaron boquiabiertos, no se esperaban tal revelación. Inuyasha había dejado su escena para acercarse a Sesshoumaru, él no era de los busca pleitos, pero Michibata tal vez si, si eso pasaba debía intervenir, no porque a su hermano le fuesen a dar una paliza, intervendría para que su hermano no matase a su oponente, una cosa era meterse con él y otra, meterse con Rin.

—¿Tu hermano y Rin son esposos?— Shippou había dejado la mesa de comida, y se acercó a Inuyasha.

—Eso dijo ¿No?— la vida de Sesshoumaru era todo un misterio.

—Siempre me pareció que su relación era rara.

—¿No es muy joven para él?— cuestionó Ayame quien se unía al grupo.

—No digan eso frente a Sesshoumaru— les tapó la boca—. No es tan viejo, solo tiene canas prematuras.

Sesshoumaru se llevó a Rin a su oficina, debía sacarla de la mirada de todos y sobre todo, hablar a solas con ella. Las cosas entre ambos no podían seguir como hasta ahora, llevaban tres años así, no permitiría otro más.

—¿Por qué mentiste? Nosotros no estamos casados— habló Rin.

—Solo porque no has aceptado y lo solucionaré.

—¿Eso qué quiere decir?— preguntó nerviosa.

—Que no voy a seguir esperando más, en cuanto podamos, nos casaremos.

—Sesshoumaru…

—Ni lo pienses— le interrumpió—. Ya te di tiempo para que examinaras tu corazón a tu propio ritmo, te di tiempo para que vieses que esto no es un capricho— Rin bajó la mirada, él tenía razón, solo le dio largas a todo, la razón: tenía miedo—. Lo voy a preguntar de nuevo y espero un "Sí". ¿Quieres ser mi esposa?

¿Cómo fue que su trabajo a medio tiempo y su visita no planeada la llevaron a aquella situación? Cuando se convirtió en ayudante de la asistente de la señorita Kagewaki, no imaginó que el prometido de la señorita terminase su relación por ella, una chiquilla que iba en su segundo año de universidad, eso no estaba bien, su intención jamás fue ocasionar aquello, ella solo fue amable con Sesshoumaru-sama. ¿Qué iban a pensar todos?

Rin— acababa de hacer una declaración, cosa que no hacía, ni con su ex lo hizo, y la chica se quedaba muda.

No está bien.

¿Por qué no?

Soy más joven y…

¿Me dices "No", por "viejo"?— eso lo decepcionaba, nunca pensó que ella le rechazaría por sus canas, ahora se sentía tonto.

¡No!— ella no le creía viejo, era cierto que se veía más maduro por esas canas a los costados, era algo que la volvía loca—Mira, un día vas a querer a alguien más madura, menos hiperactiva, ya con sus metas claras y establecida, todo lo contrario a lo que soy.

He conocido mujeres de mi edad y no son como tú dices.

Acabas de terminar tu compromiso y solo soy un capricho.

Si eso piensas, hagamos la prueba, vivamos juntos— sentenció decidido.

Alguien va salir lastimado.

Yo jamás te lastimaría.


Kouga, Miroku, Sango e Inuyasha llegaron muy temprano a la isla donde tendrían la sesión de fotos para ropa de playa, los organizadores les llevaron a sus carpas donde podrían alistarse. Inuyasha creía que las fotos serían grupales, sin embargo, su sorpresa fue que todas su fotos, se las tomaban con Kikyou, porque si, también habían invitado a la chica. El día era soleado, el aire fresco, en lugar de tomarse esas fotos, Inuyasha preferiría tomar una moto acuática, pero debía estar mostrando su mejor sonrisa falsa.

—¡Magnifico!, ¡Hermoso!, ¡La cámara los ama!— decía el tipo que les tomaba las fotos—. Ahora, Inuyasha cárgala en tu espalda— obediente, el chico se agachó un poco para que su colega se subiese.

—Kagura— gruñó Sesshoumaru, estaba observando todo junto a la encargada de llevar acabo la sesión—. Creí teníamos un trato— se suponía que Inuyasha y Kikyou harían tomas juntos, pero no tan juntos.

—Si no saco esas fotos, mi cabeza va a rodar.

—Inuyasha, quítate la playera para que se vea mejor el short— el muchacho quería matar a ese hombre—. ¡No seas penoso!— Inuyasha vio a Sesshoumaru, no tenía otra opción, se quitó la playera—. ¡Perfecto! Kikyou abrázalo.

—No me veas así, pudo ser peor— ella creía que Sesshoumaru disfrutaría ver sufrir a su hermanito.

—¿Cómo?

—Tema: "Amor de Verano".

—Pues eso es lo que parece.

—No, esto es: "Arena, sol y mar, un verano mágico".

—Pon a alguien más con ellos.

—¿Por qué tanto alboroto?, ¿Acaso esa mujer y tu hermanito no son pareja?, ¿Estás celoso?

—Debe ser broma lo que dices— habló con tono cortante.

—En el siguiente conjunto— ese hombre seguía dando miedo, increíble que en un momento de su vida estuvo por ser su esposa—. Por cierto, ¿Siguen juntos?

—¿Por qué viene si no es así?

—No juntos como jefe-empleada— Sesshoumaru no dijo nada, solo vio la carpa de comida, en dónde Rin se servía un poco de agua.

—Kagura, cariño— le llamó el fotógrafo—. Deberías traerlo de nuevo para la ropa de montaña, también a Kikyou, son gotas de agua. Además, Kikyou ya tiene experiencia en viajes a las montañas.

—Deja de molestar, llama a Miroku y Sango, los incluiremos en las siguientes tomas.

—¡Perfecto! "Cita doble".

—No me mates— dijo de inmediato la mujer, podía sentir la fría mirada de Sesshoumaru.

—Pudiste poner a Kouga.

—Sí no se vende la revista y la ropa, no me contratan de nuevo.

—Inuyasha, tómala de la mano y caminen casual, cuando les de mi señal, actúen como normales lo hacen, como una pareja normal.

—¿Lamento mucho que piensen eso?— Kikyou podía sentir la tensión en Inuyasha, cuando hicieron el crossover fue tan diferente.

—Olvídalo, hay que terminar con esas fotos— ella no tenía la culpa de su enojo.

—Inu-chan está molesto, siento pena por él— dijo Rin a Sesshoumaru, si Kagome estuviese en el lugar de Kikyou, todo fluiría con más naturalidad.

—Tiene que ser profesional.

—Eres muy duro con él.

—Hola Rin— saludo Kagura.

—Hola, señorita Kagewaki ¿Cómo ha estado?— no la había visto.

—Ocupada, pero bien, no estés nerviosa— se acercó a la chica y le tomó de las manos—. Me salvaste de hacer algo que no me haría feliz, si no fuese por ti, ahora mismo estaría encerrada en una oficina llevando cosas legales junto a él, de esta manera puedo seguir en este mundo de la moda que amo.

—Me da gusto que le vaya bien, pero no diga eso, pareciera que Sesshoumaru es malo.

—Sigues siendo demasiado linda para él, ya vuelvo, Dupain está perdiendo el control— su fotógrafo estaba marcando un corazón en la arena.

—Ella tiene razón.

—Sí, si no borra ese corazón, yo misma iré a quitarlo— ella era team InuKag.

—No me refería a eso.

—¿Entonces?

—En que eres demasiado tierna— le sonrió y la muchacha se sonrojó—. ¿Rin?— pudo notar que su respiración comenzaba a ser pausada.

—Hace mucho calor, voy a la carpa de allá a descansar— aquellos camastros se veían cómodos.

—¿Ella está bien?— preguntó Kagura—. Tenemos un médico, no se vaya a desmayar por el calor.

—Ya vuelvo, no empeores las cosas.

Cuando llegaron a la casa que ocupaba el elenco de "Tokio: ACC", Inuyasha ni siguiera se fue a duchar para quitarse la arena, cogió sus cosas y fue a su coche, después de ese día, no quería saber de más sesiones de fotos, con suerte, podría tomar un baño en su tina, con Kagome, eso era tan tentador. Abrió la puerta del conductor, lanzó su mochila al asiento del acompañante, estaba por entrar cuando el sonido de unos tacones llamarón su atención.

—Inuyasha, ¿Tienes un momento?— Kikyou le había ido a alcanzar.

—¿Es importante? Ya me iba.

—Será rápido, lo prometo— le tomó de la mano—. Por favor.

—Dime— le quitó la mano.

—¿Podemos ir adentro?

—Te sigo.


Dos días después de la sesión en la playa. Kagome estaba sentada en la cama, Inuyasha dormía junto a ella, llegó tan cansado que cuando su cabeza tocó la almohada se durmió. Ella por su lado, cambiaba de canales, no encontraba nada bueno que ver y no tenía sueño. Pasó por un canal de entretenimiento y le dejó al ver la foto de Inuyasha.

El programa lo conducía un hombre y dos mujeres, en la pantalla apareció el texto: "Fotos obtenidas en exclusiva". La primera foto era un acercamiento del cuello de Inuyasha, tenía la marca que ella le hizo.

—Nuestra fuente dice que no era maquillaje— dijo una de las mujeres—. ¿Serán marcas de pasión?

—Mei, yo creo que lo son— secundó la otra conductora.

—¡Pasemos a las siguientes! Un adelanto de la sesión de fotos ¡Chéquenlas!— el conductor hizo un ademan y aparecieron las fotos.

Kagome no pudo evitar sentir celos, ¿Por qué debieron usar tan poca ropa?, ¿Por qué Inuyasha le ponía crema a Kikyou? Apretó con fuerza en control remoto, no podía dejar que esas cosas le afectasen, se repetía que era solo modelaje, no era como los presentadores decían: "Si esto no es amor, no sabemos que será", "La pareja del momento", "Esperemos más cameos entre las series y verlos juntos", "Vacaciones en pareja", "Predestinados".

—¡No se vayan! No es todo lo que les tenemos.

—Es verdad, nuestro equipo tiene un video que les dejará con la boca abierta.

—¡¿Listos?!, ¡Corran video!

Inuyasha estaba por subir a su coche y Kikyou le alcanzaba, le tomaba de la mano y poco después, volvían a la casa, Kagome ya no lo soportó, apagó la televisión.

—¿Inu?, ¿Estas dormido?— le movió y no se despertó, ella cerró los ojos y respiró profundo, ¡No quería sentir celos!

...

Inuyasha no quería levantarse, quería estar más tiempo acostado junto a su novia, ella olía tan bien. Pero su estómago no dejaba de gruñir, se fue a dormir sin cenar y su cuerpo ya le reclamaba. Se estiró y vio la hora en su reloj de pulsera.

—Kag, despierta, hora de levantarse.

—Otro ratito— no podía abrir los ojos, seguía con sueño.

—Son casi las once, vamos a desayunar.

—Es fin de semana.

Inuyasha tomó su celular, debía ver si tenía algún mensaje de Sesshoumaru, ninguno de él, pero si tenía varías alertas para un video, él no había subido nada.

—¿Pero qué?— el video era de él dormido.

"Hola, Yo No Soy Kikyou... Y ese chico lindo que ven dormido, es Mi Novio, no de ella".

¡Debía seguir dormido! Se levantó y fue al baño, se lavó la cara y reprodujo el video de nuevo, era él, Kagome hablaba y lo reclamaba. ¿Por qué no se dio cuenta de lo que ella hizo?, ¿Tan dormido estaba? Leyó los mensajes que se mostraban, no le sorprendió ver textos contra Kagome: "Arrastrada", "Perra", "Lagartona", "Roba novios", eran los más decentes. Lo que no se esperaba eran los que venían de los hombres: "Lindas piernas", "Tan sensual voz", "Suertudo, préstamela para un fin, "Te la robo, en esas piernas puedo dormir largo tiempo", "Espero que sus pechos sean tan lindos como sus piernas".

¡Estaban locos, toda Kagome era suya!

—Inuyasha ¿Qué haces?— le vio con un ojo abierto.

—Celosa, te amo— se inclinó a besarla—. Pero a la próxima no dejes ver tus piernas— ella se había puesto sobre él y en los primeros segundos del video, mientras acomodaba la cámara, dejó ver parte de sus piernas.

—¿De qué hablas?— Inuyasha le puso el video—. ¡¿Lo hice?!— el sueño se le quitó—. Lo hice, no puedo creerlo.

—¿Quieres verlo otra vez?

—¡No!— se tapó con la sabana, ¿Cómo pudo ser tan impulsiva?

—Mi parte favorita es cuando dices que soy tu novio— reprodujo esa parte.

—Te voy a meter en problemas.

—Tal vez no— se recostó junto a la chica y la destapó—. Me da curiosidad saber por qué lo subiste.

—No te voy a decir, ¿Por qué dices que no te meteré en problemas?

—Levántate y te digo.

...

Kikyou llegaba al set de su serie, ya los reporteros la esperaban, bajó de su coche y pasó entre ellos con el porte lleno de seguridad que la caracterizaba.

—Señorita Kikyou, ¿Entonces jamás tuvo una relación romántica con Inuyasha?— preguntó el primero que se le acercó.

—En el video de ayer fui muy clara.

—¿Por qué no lo aclaró antes?

—Debía platicarlo primero con Inuyasha, decirle lo que pensaba hacer, su viaje al extranjero atrasó las cosas.

—¿Está interesada en Inuyasha?

—¿Cuándo di a entender eso?— mientras contestaba no dejaba de caminar.

—¿Tiene ya una pareja?

—Soy feliz estando soltera.

—Pero en las fotos de ustedes juntos…

—Si van a hablar de las fotos de playa, es solo actuación, modelaje, si es sobre las fotos que él ha subido, no soy yo, mi interés no es la montaña. Ahora, si me disculpan, tengo que ir a mis grabaciones— entró al edificio y su manager ya le esperaba.

—¿En verdad no tienes interés en Inuyasha?

—Onigumo, ¿Por qué tanto interés?

—Responde.

—Nunca intentaría algo con un chico que tiene novia.

—Pudiste decirme que subirías un video.

—¿Para qué me detuvieras?

—Claro que no, para estar al tanto de todo y despejarte la entrada.

—Gracias, pero puedo controlarlos, me voy a preparar, si surge alguna otra cosa, me avisas.

Siendo sincera, no le desagradó la idea de ser pareja de Inuyasha, se veía que era un chico bueno, por eso le siguió el juego a los productores, pero en la sesión de fotos Inuyasha platicaba con su amigo sobre su novia real, su cara de felicidad le hizo ver que en verdad la amaba, no solo fue eso, durante la sesión, el chico pudo verla con ternura, pero no le transmitía nada, cuando le tomó de la mano, fue tan seco. Supo que no debía hacerse ilusiones. Por ello, se terminó de convencer de hacer aquel video.

En las últimas semanas ha circulado la noticia de que soy la misteriosa novia de Taisho Inuyasha, nos han creado una historia de amor muy bonita, pero no es cierta, no lo digo porque así no se dieron las cosas, lo digo porque entre él y yo, solo hay una relación profesional. En otras palabras, no somos pareja, no somos novios. Se preguntaran ¿Por qué es ella quien lo aclara? Fácil, los jefes se lo prohibieron, a mí no. Les pido de favor que no creen noticias falsas y no sigan creando falsos rumores.


01/06/2018

Sé que ha sido una larga espera, pero finalmente terminé. Deseo que les gustase.