Toulouse22: Muchas gracias por tus palabras de ánimo.
Luis: He usado mi experiencia y la de otros dueños de gatos, para las escenas de Puar. Te recuerdo que la araño según se conocieron.
Que malo eres, pobre Yamcha XD
Me alegra que te este gustando.
Chaoz y Lunch trabajan juntos.
Más adelante se sabrá de Goku y Milk.
Capítulo VIII: Segunda parte
Grupo de apoyo, tiros y agua fría
Yamcha / Maron
¿Quien dice hablar?, cuando puedes discutir.
Entre los episodios con su gato y ahora su hogar, el hombre estallo.
- ¿Quién te crees que eres, para hacer lo que te dé la gana en mí casa? – grito.
- Tú compañera de piso – respondió tranquilamente.
Al menos de momento – pensó. Tenía intención de ser mucho más que eso.
- Oh, vamos. Es más cálido, ahora sí parece un hogar – estaba acostumbrada a salirse con la suya –. ¿Qué te apetece hacer al verlo?
Ella esperaba que la respuesta fuera de tipo sexual. A fin de cuentas, le había dado un toque picante a su propiedad.
- ¡Arrancarme los ojos! – gimió con disgusto.
- Entonces no entiendes de moda – dijo con una mueca.
- ¡Ni tú tampoco. Eres modelo, no decoradora! – se largo del cuarto dando un portazo.
Puar se vengó de la mujer haciendo trizas un caro vestido de plumas. La peliazul se tiro de los pelos al verlo.
Yamcha:
- Parecía un disfraz de cisne, normal que lo tomara por un juguete. No sé que tiene en la cabeza.
Yo sí: nada.
Maron:
- Ya se le pasara. En cuanto al gato, ha cometido un crimen atroz contra la alta costura.
Si tú lo dices…
Gure / Tarble
Había sido una mañana intensa en la Facultad. Empezó a cabecear y casi se queda dormido durante Derecho Penitenciario. Su compañera de vivienda provoco que se acostara a altas horas de la noche. Como ella dormía hasta tarde, pretendía que él trasnochará. Se tomo un café durante el recreo para despejarse.
- Que sueño tengo – murmuro para sí mismo –. Quiero irme a casa.
Lo malo era que al llegar tenía que lidiar con una diva del Pop.
El recibimiento en su hogar era siempre el mismo:
- Dime que te parece esta canción – soltó en cuanto el joven cruzo la puerta.
- Dame un momento para ponerme cómodo – pidió el muchacho descalzándose.
- Vale, aquí te espero – acepto.
Fue a la habitación y cambio su ropa de calle por el pijama. Respiro hondo antes de volver con Gure. Se le estaba agotando la paciencia. Ella era egoísta y desconsiderada. Siempre componiendo y dificultándole cumplir con sus requisitos académicos.
Probó a encerrarse en el cuarto para decirle implícitamente que necesitaba estar solo. Entraba sin llamar para pedirle su opinión cada poco, interrumpiendo su concentración.
Empezaba a sentirse frustrado con la situación.
Tarble:
- Estaría bien que fuese más comprensiva.
Concuerdo.
Gure:
- Solo sabe hacer deberes, trabajos de grupo y estudiar.
Mmm…acabas de describir a la mayoría de estudiantes universitarios.
Krilin / Lazuli
Ya le había enseñado varias cosas y ninguna se le dio bien.
Probó con la única tarea del hogar que pensó que sería de su agrado. Adquirir víveres no es muy diferente de trapos, ¿no?
Al parecer se equivoco de lleno. Para su compañera eran mundos paralelos.
La llevo a la tienda alimenticia del barrio después de hacer la lista con todo lo que necesitaban. Ella se sentía tan perdida como un turista en un destino nuevo. Quería llevarse el carrito a casa para no cargar con las bolsas.
- ¿Cómo haces cuando compras ropa? – pregunto con curiosidad.
- Me las lleva mi chofer – al ver su cara siguió –. También lo hacía con mi mochila escolar.
- ¿Incluso bolsas con tus prendas intimas? – se sonrojo.
- ¿Qué diferencia hay? – no entendía por donde iba.
- Bueno…él podría…ver lo que compraste. Sin querer por supuesto – aclaro rápidamente avergonzado.
Al parecer esa posibilidad nunca paso por su cabeza viendo la cara que se le quedo.
Krilin:
- Debí morderme la lengua.
En realidad solo hiciste una observación.
Lazuli:
- Hacer la compra es un rollo, prefiero ir de shopping. Sobre lo otro…era feliz en mi ignorancia.
Personalmente ambas me parecen un aburrimiento.
Ten / Lunch
- ¿A dónde vas? – la ropa de la rubia era informal.
- Al club de tiro – vio que quería preguntar y se le adelanto –. Me relaja.
- ¿Puedo acompañarte? – quería ver que tal se le daba.
- Sí, claro – le agrado que no la juzgase.
Quitando que donde él practicaba antiguamente, no estaba rodeado por la naturaleza, ambos lugares se parecían mucho. Acepto los cascos que le paso, se los puso y entro siguiéndola. Se apoyo en la pared y echo un vistazo alrededor en lo que la mujer preparaba todo. No quería meterle prisa ni estorbarle.
- Listo – informo al acabar.
- Hacía mucho que no tiraba – comento.
- ¿Por qué lo dejaste? – al ver su sonrisa ladina desistió –. Olvídalo.
- El brazo – uno de los dos tenía que ceder.
Al menos un poco.
- ¿Eh? – se había perdido.
- Me lesione en el brazo – aclaro el hombre –. Eso dificulta usar un rifle.
- Cierto – reconoció.
Si el brazo dañado era el dominante…sería una verdadera putada. Más aun teniendo en cuenta su edad. Además explicaría el cambio de profesión.
Para estar desentrenado, la mayoría de las balas dieron en el blanco. Ella acertó todas en la zona de mayor puntuación.
Lunch:
- Ha perdido práctica, pero eso tiene fácil arreglo.
Ten:
- Es letal. Me pregunto que más cosas tenemos en común.
Mientras no tengáis armas a mano mientras os interroguéis, todo bien.
Bulma / Vegeta
Al volver del trabajo, a la peliazul le gustaba llenar la tina y relajarse un rato. Lo malo es que su recién adquirida paz, no duro mucho. Al acabar y salir se topo con Vegeta. Era la primera vez que estaba en casa tan temprano.
- ¿Qué es ese olor afrutado en mi baño? – le pregunto extrañado.
- Mi champú y gel, me gusta que tengan extractos de fruta – era evidente que estaba molesto, pero le daba igual.
- Usa los míos, no me gusta como huelen – en realidad no le molestaba el olor, era agradable, pero si la invasión femenina de su casa.
- Siempre abro la ventana cuando acabo y no lo notaste hasta ahora, además me niego a usar productos masculinos – le parecía una solución al problema razonable.
- ¿Qué tienen de malo? – no estaba seguro de si era curiosidad, o si simplemente quería picarla.
- No hablas en serio. La diferencia se nota, alguien con un buen olfato sabe cuando algo es de chico o de chica. Yo desde luego lo sé – argumento.
Vegeta:
- Su lado pijo acaba de salir a la luz.
Hay productos unisex, pero otros no. Es cuestión de preferencias.
Bulma:
- Creo que esta, ha sido una de las discusiones más absurdas que he tenido.
No entiendo que haya peleas por cuestiones tan ridículas.
Maron / Yamcha
Aprovechando que hacia sol tendió. Al acabar, se puso un bikini y se acomodo en la tumbona. En un determinado momento oyó al minino. Lo vio a una distancia prudencial de ella. Iba a limitarse a ignorarlo, cuando noto que a su lado había una manguera. Sus ojos alternaron entre ambos.
Sonrió. Una idea diabólica paso por su cabeza.
Giro la rosca, cogió la cabeza de la manguera, apunto y apretó el gatillo. El maullido furioso del gato más el haberlo empapado hizo que riera como una niña. Se lo tenía bien merecido.
- Lastima no haber usado jabón – dijo cuando consiguió calmarse –. Le habría venido muy bien.
Recogió la ropa en cuanto se seco.
La llamaron justo al entrar por la puerta. Dejo el cesto para contestar al teléfono. Vio acercarse al animal, pero lo ignoro y se concentro en la conversación.
Puar espero a que le mirara y entonces orino en su colada.
- ¡No! – exclamo al borde del llanto.
Furiosa lanzo sus zapatillas con la intención de darle. Era demasiado escurridizo como para atraparle y zurrarle con la mano. Ni siquiera le rozaron.
- Que estrés – farfullo Yamcha al oír el jaleo.
Maron:
- ¡Quiero castrarlo!
La culpa es tuya por liársela.
Yamcha:
- Estoy deseando irme con Bulma.
Normal.
Tarble / Gure
Salía de la universidad con deberes y temario para aburrir. El problema era que su compañera de piso le dificultaba enfocarse. Ella siempre estaba componiendo, cantando o hablando de música. Era algo monotemática.
Agradecía las pocas veces que se quedaba sin ideas y le dejaba solo en casa. Que paz se respiraba en el ambiente.
Lo llevo a rastras hasta un karaoke. Comentarle que sus compañeros le habían invitado, había sido un error garrafal.
- Necesitas desconectar un rato – alego –. No haces otra cosa más que estudiar.
- Porque de lo contrario suspenderé – protesto.
- Exagerado – no le creía –. De todas formas para algo están los exámenes de recuperación.
- Prefiero hacer lo posible por aprobar a la primera; y no jugármela en el último control – explico molesto.
La joven pronto le ignoro al encontrarse con los demás.
Pasaron la noche por separado. Ella haciendo dúos con el resto de chicas y él quejándose con los otros chicos, que estaban allí por sus parejas.
Gure:
- Estoy segura de que saca sobresalientes con todo lo que estudia.
No necesariamente, pero vale.
Tarble:
- A este paso suspenderé: Derecho y Economía, Derecho Penal y Derecho Procesal Penal.
Ojala te equivoques.
Lazuli / Krilin
La limpieza del hogar fue toda una odisea. La heredera nunca dejaba de sorprenderlo con sus ocurrencias.
Empezaron por quitar el polvo con trapos, luego barrieron, pasaron el aspirador, limpiaron las ventanas y finalmente fregaron el suelo.
Siempre le hacía una demostración y pasaba a retocar su parte. No valía para trabajar de asistenta. Dejo los cristales peor de lo que estaban y era incapaz de escurrir bien la fregona.
- ¿Por qué hay un producto para cada cosa? – preguntó al ver tantas botellas –. ¿No pueden inventar algo que sirva para higienizar todo?
- Porque dependiendo del tipo de superficie, se usa uno u otro – explico calmadamente.
- Vamos igual que con la ropa y los programas de la lavadora – ejemplifico.
- Exacto – le gusto su observación.
- ¡Que asco! – exclamo.
El pobre hombre intentaba aguantarse la risa.
- ¿Por qué no tiro el agua con jabón a calderazos por el suelo y ya? – sugirió.
De no conocerla mejor, habría pensado que bromeaba.
- Tardaría más en secarse – señalo lo evidente.
Krilin:
- Me divierto mucho con ella.
Ya lo vemos.
Lazuli:
- Deberían inventar un robot que haga las tareas del hogar.
Mala idea no es. Sería un éxito de ventas.
Lunch / Ten
Tras estar tirando juntos, fueron a comer con los miembros del club. A todos parecía agradarles el acompañante de la rubia. Al final de la velada y con unos tragos de más, Ten se disculpo por su actitud a lo detective privado anterior.
- Está bien, pero vuelve a espiarme y verás – meneo su mano de forma amenazante.
- No, gracias - rio –. Lo último que quiero es comprobar por las malas, que tan buena eres en combate cuerpo a cuerpo.
- Muy buena – aseguro.
- Si se te da tan bien como disparar, estaría en serios apuros – reconoció con un escalofrío.
- Pues ya sabes – dijo con una sonrisa.
Brindaron amistosamente antes de despedirse del resto y volver a casa dando un paseo.
Como aun era de día y así no tiene gracia ver películas de terror, revisaron la colección del muchacho en busca de más películas de acción. Por suerte, en unos días la aplicación añadiría nuevos filmes.
- Oye, ¿te apetece venir conmigo al gimnasio? – ante la cara de sorpresa del hombre añadió –. Es más ameno ejercitarse con otra persona.
- Vale, pero te aviso que estoy en pésima forma – comento.
Ten:
- Solucionado.
Lunch:
- Ha sido un buen día.
Bien esta, lo que bien acaba.
Vegeta / Bulma
Olvido el bento en casa. Se acerco a su empresa para dejárselo. Allí conoció a su secretaria Arale. Hablo animadamente con esta, ya que Vegeta estaba ocupado con un cliente. Tan sumergidas estaban en la conversación, que no oyeron la puerta de la sala abrirse.
- ¿Señorita Briefs? – oyó decir a una voz familiar.
- ¿Señor Majin? – pregunto desconcertada –. ¡Que sorpresa tan agradable!
- ¡Lo mismo digo! – tomo su mano y la beso con delicadeza.
Vegeta se quedo extrañado ante un gesto tan atípico en su País. Rápidamente recordó que el hombre era extranjero, quizá eso era natural en su cultura.
Charlaron amigablemente por un rato, hasta que Bulma recordó el propósito de su visita.
- Te olvidaste el almuerzo – dijo tendiéndoselo.
- Gracias – acepto cortante.
Teniendo en cuenta su encontronazo por la comida, le preocupaba encontrarse con una desagradable sorpresa, a modo de venganza.
A solas abrió la tartera con cautela y miro su contenido con incredulidad. Las salchichas estaban cortadas en rodajitas pequeñas, ideales para un niño. No pudo evitar reírse. Había sido un gesto muy infantil por parte de la peliazul.
Bulma:
- Me habría encantado ver su cara.
Vegeta:
- Esperaba algo peor la verdad.
Yo pensé que lo aliñaría todo con saliva.
Yamcha / Maron
Los primeros días ella se limito a coquetear sutilmente, pero poco a poco fue subiendo el nivel. Empezó a pasearse por la casa en lencería sexy. Su siguiente movimiento fue cambiarse de ropa delante de él; y finalmente sonidos sexuales cada vez que comía algún postre como fresas con yogur descremado.
- ¡Mmm…oh...que ricas están! – gimió.
La mujer no paraba de provocarlo. Las erecciones inoportunas y las pajas, se habían vuelto algo habitual gracias a la modelo.
Era fin de semana y por tanto no entrenaba. Estaba acabando de ducharse, cuando noto que no estaba solo. Se quedo helado, solo podía ser una persona: Maron.
- ¿Qué haces? – no esperaba un movimiento tan atrevido con cámaras delante.
- Oí la ducha. Al imaginarte desnudo y mojado…me he puesto cachonda – para reafirmar sus palabras se pego a él.
Esto era malo, los estaban grabando. Si Bulma veía que hacia algo con esta chica tendría problemas. Tenía que actuar con rapidez y quitársela de encima. En su desesperación noto el regulador de temperatura. Esto le dio una idea, lo agarro y giro rápidamente hacia el agua fría.
El grito de la joven le reventó los tímpanos, pero gracias a su maniobra pudo escapar. Al menos de momento.
Yamcha:
- Menos mal que he estado rápido.
Bastaba con dejarle las cosas claras, pero…tú mismo.
Maron:
- ¡Esta me la paga!
Estoy intrigado.
Gure / Tarble
No lo entendía. Estaba fuera toda la mañana, volvía a la hora de comer. Era llegar a casa y ahí estaba ella componiendo. Necesitaba estudiar. A Gure eso parecía darle igual. Cuando discutieron el tema, argumento que bastante hacia con no tocar fuera del horario permitido para no molestar a los vecinos. Eso le pareció el colmo.
- También vivo aquí, ¿por qué no tocas en mi ausencia? – propuso.
- ¿Por qué no estudias en la biblioteca? – replico molesta.
- ¿Me estás echando de mi propia casa? – tenía que salir de allí, o le diría lo que estaba pensando.
Eso solo empeoraría las cosas y ya estaban bastante mal como para empeorarlas.
Tarble:
- Ten tenía razón sobre ella.
Al parecer sí.
Gure:
- Estoy harta de que se metan con mi nivel de dedicación.
El moreno tiro la toalla y llamo a su hermano.
- Vegeta, ¿puedo estudiar en tu casa? – cruzo los dedos para que la respuesta fuera positiva.
- ¿Por qué? – pregunto extrañado.
- Porque entre la música y ella cantando no puedo concentrarme – explico –. Pregúntale a Bulma si le da más.
- Lo haré – no pensaba hacerlo, a fin de cuentas era su casa.
A ella no pareció molestarle.
Krilin / Lazuli
Para relajarse del entrenamiento para convertirla en una buena ama de casa, la mujer decidió que era hora de una bien merecida fiesta de pijamas con sesión de belleza incluida. Mascarilla, hacerse las uñas…ese tipo de cosas.
- Solía hacer esto con mis amigas – confeso –. Comíamos dulces, veíamos películas y nos trenzábamos el pelo unas a otras.
- Puedo hacerlo, si quieres claro – al ver que no sabía a qué se refería se explico –. Hacerte trenzas.
- Eres un chico, ¿cómo…? – su afirmación la descoloco.
- Maron – reconoció avergonzado –. Cuando se quedaba a dormir en mi casa, me pedía que le hiciera trenzas para que no se le enredara el pelo al dormir.
Lástima que estaban en un programa de televisión y la violencia física era motivo de expulsión. Quería romperle su operada nariz a esa tonta descerebrada.
- Está bien – dijo –. Veamos qué tal se te da.
- Tranquila, te dejare preciosa – aseguro.
Cogió un par de gomas, separo los mechones y se puso manos a la obra.
- ¡Vaya! – exclamo sorprendida.
- ¿No te gustan? – pregunto disgustado.
- Al contrario, me encantan – le sonrió con aprecio –. Muchas gracias.
Le dio un beso en la mejilla, provocando que el muchacho se sonrojara.
Krilin / Lazuli:
- Lo necesitábamos.
Estoy de acuerdo.
Ten / Lunch
Que ella misma le buscara para pedirle un favor, le pareció un claro indicio de que las hostilidades entre ellos habían cesado definitivamente. Lo cual era un verdadero alivio.
Suspiro resignada al plantarse frente a él. La situación la incomodaba sobre manera.
- Nos falta un miembro en mi equipo de paintball - tras una pausa añadió –. ¿Te apetece jugar?
- Claro – acepto rápidamente –. Sera divertido.
Quería masacrar al otro grupo hasta que suplicasen piedad. Siempre estaban metiéndose con ella por su pasado. Panda de idiotas.
Dominaron en el juego sin lugar a dudas. La experiencia militar de Ten era una ventaja añadida sobre sus rivales. Supo dirigirlos en todo momento.
Se coordinaron de forma increíble, cercando a sus enemigos. Estos solo podían llorar de frustración cada vez que les robaban la bandera.
El calvo iba al frente de la unidad mientras que la rubia, les cubría las espaldas a todos en la retaguardia. Aun así, se las arreglo para freír a tiros a todos los que la habían molestado. La venganza fue muy dulce y colorida.
Ten:
- Les hemos dado una paliza.
Lunch:
- Han mordido el polvo.
Lo hemos visto. Se os da bien el trabajo en equipo.
Vegeta / Bulma / Tarble
Mientras estaba en el piso de su hermano, aprovecho para desahogarse.
- Si no fuese por su música, sería como vivir con un fantasma – se quejo.
El otro muchacho le aconsejo e intento animarlo.
Miro a ambos hermanos con una mirada triste.
- ¿Qué te ocurre? – Tarble se dio cuenta de que algo no andaba bien.
- Lo siento, es solo que…me dais envidia – reconoció incomoda.
Su "pareja" la miro con burla.
- ¿Tan mal te llevas con tu hermana? – pregunto ácidamente.
- ¡Vegeta! – le reprendió el joven.
- Tights se emancipo a los dieciséis años, yo tenía seis – explico.
- No estáis unidas – dedujo el universitario.
- Entre la diferencia de edad, la distancia y que casi no tiene trato con la familia… - se mordió el labio intentando no llorar –. Es casi una extraña.
Mierda – pensó el mayor.
Aquel era un tema sensible para ella y él había hablado de más sin conocer los hechos.
- Eso es duro – el menor le froto la espalda a modo de consuelo.
Bulma:
- Tarble ha sido muy amable. "Gruñon" no sé si está apagado o fuera de cobertura. Nunca lo he visto tan…humano.
Vegeta:
- He sido un bocazas.
Tú lo has dicho.
20/02/2023
Lo de las trenzas se me ocurrió porque en la playa, cuando mi marido se aburre me las hace. Le quedan mejor que a mí T_T
