Una gran cantidad de ruido se escuchaba viniendo del centro comunitario cerca de la estación de tren. A pesar de que todavía era temprano, Hachiman con el cuerpo aún adolorido de la última misión iba en camino a ver como Yukinoshita ayuda a preparar chocolates. Con el engaño que con su trabajo sacó una motocicleta a plazos, ahora a todas partes se transportaba en ella Hachiman. Estacionó su moto en un aparcamiento cercano y camino hacia la puerta del centro comunitario cuando sintió una breve punzada en su cabeza, un breve recuerdo apareció y luego volvió a la realidad. Así que tratando de tranquilizarse respiro profundamente y deseaba desesperadamente fumar. Así que se retiró a un lugar apartado desde donde sacó un cigarro y lo acabo, luego otro y otro hasta que notó que le quedaba ninguno. Finalmente se calmó y entro al centro comunitario donde pudo ver los miembros del consejo estudiantil animados por todas partes. A lo lejos vio a Yukino y Yui, pero la voz de Iroha lo llamó.

−Ah, sempai, llegaste muy temprano.

−Hola, querida Kohai, ¿necesitas ayuda en algo?

−Ayúdame a poner esto sempai.

Dicho esto, Isshiki le pasó a un papel gigante de tamaño B2 que parecía hecho a toda prisa. Aparte de la información escrita en ella, habían dibujado algunas ilustraciones similares a grafitis, tales como corazones o chocolates o emoticones, en el papel, pero Hachiman no pudo hacer una cara de desconcierto cuando leyó el contenido escrito en el cartel.

¡Personas sin experiencia son bienvenidas! ¡Sin cuotas! ¡Un ambiente «Casero»!

¡Conocimientos útiles para el futuro!

−Vaya parece que reclutas personas para alguna compañía negra, pero iré a pegarla− comentó Hachiman.

− ¿Que? eso es grosero−indignada habló Iroha, pero se detuvo mientras hizo un gesto de oler el aire.

−Sempai, tienes un olor fuertemente a tabaco −dijo acercándose al cuello de Hachiman ante la mirada de Yui y Yukino que desde lejos miraban la escena.

−Oh, Iroha-san, no es bueno que te acerques tanto a un chico y por otra parte no lo digas tan alto, esto es nuestro secreto −con una sonrisa miro fijamente a Iroha, luego continuó −En fin, voy ayudarte con esto y de paso a las chicas del club, nos vemos.

Hachiman caminó hasta donde Yukino y Yui con una extraña sonrisa, muy rara en él.

−Hola Yukinoshita san y Yui san, he venido ayudarlas.

−Yahallo Hikki, nosotras llegamos antes, estábamos pegando carteles.

−Así es Hikigaya san, de hecho, necesito alguien que sea alto para pegar este cartel.

−Está bien, luego pegamos este cartel que me dio Iroha.

Estuvieron pegando varios carteles, hasta que Yui notó que a Yukino hizo un gesto de desagrado.

−Yukinon, no te gusto como quedó pegado ese cartel −comentó Yui.

−No es eso, es el olor que Hikigaya san emana, huele fuertemente a cigarrillo −respondió Yukino.

−Oh −contestó con aburrimiento Hachiman.

−Solo eso dirás Hikigaya san, usted debe saber que un menor de edad no fuma, no se debe fumar y nuestra escuela lo prohíbe−regañó Yukino.

−Veo ¿y? ¿acaso vas acusarme Yukinoshita san? −en tono de broma le contestó Hachiman.

−Sí, si eres un mal ejemplo para el evento −de forma seria regañó Yukino.

−Veo, pero no te enojes en vano, no he hecho nada malo, solo fume unos cigarros para el frío, así que relájate, si quieres le pediré a Yui san que me rocié con ese ambientador de lavanda que esta allá dentro en el salón, si te preocupa que otros sientas este olor −con una sonrisa y una mirada amable contestó Hachiman mirando a Yukino, que no pudo evitar sorprenderse.

−Está bien, hazlo, pero no vuelvas a fumar en mi presencia −con más calma comentó Yukino.

−Bueno entonces iré por ese ambientador, pero Hikki yo opino lo mismo no es bueno que fumes−Comentó Yui.

−Bien, no fumaré cuando me encuentre con ustedes −respondió Hachiman mientras Yui le soltaba todo el ambientador.

Después de eso Yui se percató de unas siluetas, al otro lado de la calle, era Miura y su combo de amigos. Luego se saludaron y mientras en lo fastidioso que era Tobe, Miura, que los había seguido a sus espaldas, parecía mucho más tranquila. Miura echaba un vistazo de vez en cuando a la existencia a su lado, y por momentos reajustaba la posición de su bolso y otras veces, jugaba con su pelo. Ella parecía incapaz de calmarse. Después miró a Hachiman e hizo una mirada de desagrado, así que este le respondió con gesto de burla. Luego, llegó el sonido de unos pasos apresurados. Al siguiente instante, Iroha entró en la línea de visión de Hachiman.

-Ah, Hayama-senpai. Gracias por venir hoy.

Dicho esto, Isshiki inmediatamente fue a pararse al lado de Hayama. A pesar de que Miura le dio a Isshiki una mirada aguda, Isshiki evito esa mirada con una sonrisa radiante por su cuenta.

-Hola, Iroha. Ah-, ¿era realmente una buena idea que yo venga aquí? Nunca he aprendido a hacer dulces, así que no creo que sea de mucha utilidad −respondió Hayama, que ahora estaba atrapado entre Miura e Isshiki tenía una sonrisa preocupada en su rostro. Luego, Miura golpeó sus hombros ligeramente.

- ¿Hay necesidad de preocuparse sobre algunas cosas? Quiero decir, es más que suficiente que Hayato simplemente dé sus opiniones...

-Exacto. Pues bien, ¡vamos a dejar que seas nuestro critico!

Hachiman simplemente vio este suceso con diversión. Tanto Miura y Isshiki trataron de evitar que Hayama pensara en abandonar, o tal vez se podría decir que ellas estaban tratando de atraerlo con sus voces tímidas. Hayama, sonrió con su habitual y vigorizante, pero ahora agridulce, sonrisa

-De todos modos, vamos a entrar.

-Cierto, todavía no hemos terminado con los preparativos.

Tanto Yukino como Yui asintieron con la cabeza mutuamente como si confirmaran algo, y Ebina y el resto las siguieron por detrás hacia el interior del centro comunitario. De repente Hayama cruzó miradas con Hachiman, palideciendo por un segundo para luego saludarlo informalmente. Ya terminado el primer trabajo, Hachiman tenía que hacer trabajo físico junto a otros. Había cajas de cartón, tanto grandes como pequeñas, situadas en el medio de la sala. Parece que estas cajas contenían los chocolates, el azúcar, la levadura en polvo y otros materiales. Hachiman debía llevar todo esto al salón de cocina en el segundo piso

-Muy bien, vamos a llevar esto lo más rápido que podamos.

Tobe enrolló las mangas de su camisa y con todas sus fuerzas, levantó la caja. La siguiente persona en tomar otra caja fue el vicepresidente y finalmente Hachiman, pero antes de esto se quitó su chaqueta desabrocho un poco los botones de su camisa en el pecho y se enrolló las mangas. Lo que provocó que los otros dos lo miraran sorprendidos.

− ¿Qué les pasa? ¿Qué miran? −con fastidió mencionó Hachiman.

−Hikitani kun es más musculoso de lo que pensaba, viejo estas en forma− Tobe contestó con simpleza.

−Gracias, creo −Dijo Hachiman alzando tres cajas grandes como si nada a la vez, sorprendiendo a los chicos y caminando hacia el segundo piso.

Cuando llegó a la cocina preguntó dónde dejar las cajas y las dejó ahí sin mirar a nadie. Yukino y Yui miraron asombradas el estado físico de Hachiman, el cual gracias a la ceñida camisa se podía ver la musculatura del pelinegro, solo ciertos botones intentaban tapar los abdominales de este. Pero no eran las únicas el consejo estudiantil, el grupo de Miura observaban la escena con asombró. Luego como si las miradas no le importaran Hachiman volvió a salir por más cajas, mientras con todas sus fuerzas Tobe y vicepresidente entraban con las cajas que tomaron.

−Hikitani kun trajo esas tres cajas como si nada, yo con esta siento que muero, viejo −le comentaba al vicepresidente que solo asentía dejando las cajas donde Hachiman las dejó, mientras descansaban y retomaban fuerzas, Hachiman volvió a subir con varias cajas con una mirada aburrida y las dejo frente a ellos.

−Viejo, Hikitani kun tiene mucha fuerza −comentó Tobe asombrado.

−Es muy cierto, pero él va ya llevando dos viajes, vamos −comentó el vicepresidente notando que la secretaria tenía la vista fija junto a otras mujeres del salón en Hachiman y eso no le gustó.

−Espera viejo…. −pronunció Tobe mientras era arrastrado por el vicepresidente.

Finalmente llevaron todas las cajas, Tobe junto al vicepresidente, se veían agotados, mientras Hachiman se miraba relajado, acomodándose su ropa. Por otro lado, Yukino y Yui ya habían repartido utensilios de cocina, mesas. Después de eso, los preparativos para el evento de cocina procedieron sucesivamente, y se convirtió gradualmente en un agradable momento. Iroha y Yukino, así como Yui parecían tener algún tipo de discusión. Entonces, en medio de las voces de su discusión, una gran cantidad de ruido se pudo oír viniendo desde fuera de la puerta. La cantidad de voces eran realmente demasiado numerosas. Entonces entró el presidente del consejo estudiantil de la preparatoria Kaihin Sougou, Tamanawa y amigos de él. Hachiman al estar amnésico no sabía quiénes eran y se recostó en una pared con mirada aburrida. De repente Orimoto enfocó su mirada en Hachiman, así que fue a saludar con intensión a Yui y Yukino para luego saludarlo. Yui algo nerviosa respondió, Yukino cruzó los brazos y saludo solo con los ojos. Luego saludo a Hachiman, que la miro con desgano, pero formalmente respondió su saludo. Luego Tamanawa saludo.

−Hola chicos ¿así que también participan?

−Si, se podría decir −comentó Yukino.

− ¿Y Hikigaya san? ¿es cierto que desapareciste no? ¿y ahora estas aquí veo después de mucho tiempo? −comento Tamanawa haciendo que Hachiman lo mirara con la mirada de las mil yardas instintivamente haciendo que este retrocediera un poco.

−Sí, así es exactamente como usted dice, puede recordarme su nombre por favor −la voz de Hachiman sonó más profunda y amenazante, haciendo que los que los rodeaban notaran la atmosfera tensa y peligrosa que se desenvolvía ante ellos.

Extrañamente nadie podía moverse del salón como si algo instintivo fuera, un miedo profundo los invadía, solo Hachiman empezó a caminar con tranquilidad hacia Tamanawa, escuchándose solo las pisadas de sus pasos.

−Me puede por favor, mi querido amigo dar su nombre, es que lamentablemente perdí mis recuerdos, así que no sé su nombre −repitió sombríamente Hachiman.

−Mi mi mi nom nom bre es Ta ta ma na wa wa −contestó Tamanawa tartamudo.

−Tamanawa, veo, entonces bienvenido, disfruta el evento, pero evita comentar cosas irrelevantes da mal ambiente, así que un gusto conocerlo −comentó Hachiman con calma, relajando el ambiente luego, permitiendo a todos moverse.

Luego Iroha empezó a mediar con cosas triviales, y todo comenzó a volver a la calma. Además, que permitió esta acción que Tamanawa e incluso Orimoto se alejaran de Hachiman. Después apareció a saludar Shiromeguri, que se le presentó a Hachiman como la ex presidenta del consejo estudiantil, junto a otros estudiantes que estuvieron en el consejo anterior, en ese ir y devenir que hablaban con Iroha y Hachiman era expectante, pudo escuchar que Yukinoshita Haruno venia en camino, provocando que Yukino frunza en ceño junto un gesto desconcertante de Yui. En poco tiempo, el sonido de los tacones se oyó. La puerta que no estaba cerrada herméticamente se movió un poco. Los dedos suaves y delgados aparecieron de las grietas de la puerta y con un poco de fuerza, la puerta se abrió con un crujido. Luego, con un ruido sordo, llegó el sonido de sus pisadas hecho con sus tacones. Poco a poco, paso a paso, ella entró en la habitación, justo en frente de Hachiman.

-Yahallo! Perdón, ¿llegue tarde?

-Y aquí está nuestra cocinera especial de hoy, Haru-san senpai.

-Hola a todos, soy Haru-san senpai.

Isshiki terminó su presentación con dulzura y para eso, Haruno-san le respondió en forma de broma. Yukinoshita Haruno ignoró el abrigo rojo carmesí revoloteando en el viento, y levantó las manos en señal de saludo.

-Ah, Haru-san, ha pasado un largo tiempo.

Meguri, ¿no te acababa de encontrar recientemente?

Al ver a Meguri-senpai acercândose hacia ella lentamente, le dio una palmadita en la frente ligeramente y preguntó con un tono sorprendido.

-Los bocadillos de Haru-san son realmente deliciosos, tengo muchas ganas de probarlos.

-Bueno, ya que preguntaste por ellos, voy a hacerlos. Como una amable senpai, no puedo rechazar la solicitud de un kouhai.

Una vez que las dos acabaron de intercambiar saludos, comenzaron a conversar. Tomando esta oportunidad, Yui le hizo una seña a Irohai en silencio y hablo en voz baja.

-Oye, ¿por qué llamaste a Haruno san aquí?

- ¿Porque, ella parece ser una veterana en esto?

Iroha ladeó la cabeza ante la pregunta de Yui y respondió como si fuera la cosa más obvia del mundo.

-Soy más que suficiente para el trabajo...

Yukinoshita abrazó su codo, y aparto la mirada lejos de Haruno-san, que estaba frente a ella. Hachiman por su parte escucho todo en silencio, recordando la investigación de la familia Yukinoshita, donde averiguó que existe una rivalidad entre las dos hermanas, específicamente de Yukino hacia Haruno. Por otro lado, Yukinoshita Haruno, es una persona con la que había un significado detrás de todas sus acciones sin sentido o al menos eso explicaba el informe que leyó Hachiman. Esa persona es como su nombre lo indica. Ella expondrá todo a la luz del día. Mientras que, al mismo tiempo, esconderá en la oscuridad, cualquier cosa sobre ella. Una mujer que en cierto sentido intrigaba a Hachiman, una mujer de cuidado, por ello por ahora Hachiman es un espectador. Al menos que Haruno desee hablar con él de esa noche en específico. Finalmente Iroha dio por iniciado el evento, Yukino explico con tranquilidad los pasos para crear chocolate. Imitándola todos en el salón. Miura comenzó a imitar a Yukinoshita también. Tal vez fue porque no estaba demasiada acostumbrada a usar un cuchillo de trinchar, ella se puso a aplastar el chocolate con nerviosismo. Cuando los chocolates estaban casi todos picados en trozos finos, Miura levantó la vista hacia su trabajo. Su expresión sugeria que estaba algo satisfecha. Sin embargo, Miura parecía sentir que ella era muy hábil con esto.

-Hmm... ¿No es súper fácil

Miura puso una sonrisa orgullosa mientras decía, ¿Qué tal?» con una voz presumida. Sin embargo, dos voces volaron a su lado casi de inmediato.

-Que ingenua, Yumiko

-Eres tan ingenua.

Yuigahama lo dijo con tanta fuerza y sin dudarlo. Yukinoshita habló con una sonrisa burlona en su rostro. Miura sacudió la cabeza, probablemente porque todavía estaba atrapada en la impresión de que hacer la tarea real era mucho más fácil que las instrucciones dadas.

- ¿Eh? ¿Qué tan difícil está ahí?

Al escuchar eso, Yuigahama hinchó el pecho con orgullo.

-Las partes difíciles comienzan ahora! Calentar algo sumergiéndolo en agua caliente no solo se trata de ponerlo en el agua caliente. Tienes que hacerlo como Gwa Gwa algo así. Eso provocó que Hachiman soltara un breve gesto burlón que Miura vio.

−Hikio, si te parece tan sencillo, ven hazlo −mencionó retadoramente Miura.

− ¿es acaso un reto Miura san? Pero lo lamento debo ayudar en el evento como asistente, sino con gusto haría chocolates −mencionó Hachiman con aburrimiento recostándose en la pared, Miura se veía molesta e iba a replicar, pero Yukino intervino para continuar con el evento mientras hacia un gesto de advertencia a Hachiman que solo alzo los hombros en forma de disculpa. Todo el evento continuaba con naturalidad, hasta que Hachiman pudo ver que, por descuido de Miura, el chocolate derretido que se calentó a baño maría, iba a regarse en la estufa y por lo tanto provocar un peligro inflamable, rápidamente llegó a lado de Miura, sacando el chocolate y poniéndolo a un lado de la estufa, Miura se sorprendió, este la vio con aburrimiento.

−Ten cuidado Miura san, casi provocas un incendió −monótonamente le regañó Hachiman.

Miura sorprendido por la rapidez de Hachiman, solo asintió, pero vio una marca roja en la mano de Hachiman.

−Espera… tu mano ¿te quemaste? −mencionó preocupada Miura, tomando la mano de Hachiman viendo la quemadura.

−Ven necesitamos tratar esa herida −ordenó arrastrando a Hachiman afuera del salón mientras este la seguía curioso por su comportamiento. Ante la mirada sorprendida de Yui, Yukino e Iroha.

En un salón siguiente Miura trató la herida de Hachiman, regañándolo mientras lo hacía. Hachiman en silencio simplemente asentía.

−Oye, es normal ¿Qué hagas esto delante de todos? ¿sabes que soy un paria, ¿no?

−Me ayudaste, por eso te ayudo. Los demás pueden verme ayudarte −comentó Miura con una mirada seria.

−Gracias, ¿así que somos buenos conocidos? −comentó Hachiman, haciendo que Miura hiciera una mueca de desagrado.

−Si lo colocas de esa manera, podría ser, pero entiende no soy tu amiga.

Mientras eso pasaba, Akihiko iba en camino al evento de Hachiman ya que habían quedado en que ese día lo invitaría una comida y unos tragos. Lo que no contaba el rubio, es que la médica amante o novia de Hachiman, solo el mismo Hachiman sabía lo que eran, se cruzara con él en el camino y a pesar que intentó despistarla, lo obligó a prácticamente llevarla con Hachiman. Al parecer el pelinegro no ha contestado sus mensajes ni llamadas el día de hoy a Horikita. Akihiko le iba a rogar después a Hachiman que lo perdone. Cuando llegaron al centro comunitario y subieron al segundo piso, vieron a Hachiman ir en camino a un salón con una chica rubia. Inmediatamente Horikita se adelantó ante la mirada sorprendida de Hachiman.

− Hachi, ¿cómo estás? Me encontré a Akihiko en el camino y me llevó hasta aquí −con una sonrisa saludo Horikita tomando a Hachiman de la mano.

−Sí, eh… bienvenida doctora Horikita, venga conmigo la llevaré al salón del evento −comentó Hachiman dándole una breve mirada seria a Akihiko quien solo sonrió incomodo, la respuesta de Horikita fue agarrar a Hachiman del brazo y sonreír.

−Entonces vamos− mencionó cobardemente Akihiko.

Detrás de ellos iba Miura que no entendía que sucedía. Al entrar al salón todos enfocaron la mirada en el hombre y la mujer hermosa que entraban junto a Hachiman, ante esto Hiratsuka se fue a presentar en frente de los desconocidos para conocerlos.

−Buenas tardes, soy la docente que esta encargó del evento, me gustaría saber si no les incomoda ¿cómo supieron del evento? − saludó Hiratsuka analizando las personas frente a ella.

−Buenas tardes, mi nombre es Akihiko abogado de la empresa R Y R, soy amigo y mentor en su trabajo de medio tiempo de Hikigaya, la señorita que esta junto a nosotros es Horikita médica y amiga de nosotros.

−Un gusto soy Shizuka Hiratsuka, pasen, sean bienvenidos −comentó Hiratsuka percatándose que la mujer nueva seguía abrazada del brazo de Hachiman, recordando inmediatamente donde la había visto la mujer.

−Vamos, Horikita san esperemos junto a los demás −mencionó en un tono dulce Hachiman llevando la mujer del brazo ante la mirada sorprendida de todos, en especial Yukino y Yui.

−Yo también voy no te olvides−dijo desde atrás Akihiko.

Cuando estuvieron frente a las personas invitadas, Akihiko Y Horikita saludaron formalmente y luego hablaron entre ellos, estuvieron así varios minutos hasta que Haruno interrumpió la conversación.

− ¿Cómo les parece el evento hasta ahora?

Esa pregunta provocó una conversación larga entre ellos, una en la cual Hachiman quería saber que buscaba esa mujer, hablando a sus personas cercanas despreocupadamente. La mirada de reojo de Haruno le daba escalofrío, pero la mirada molesta de Horikita lo inquietaba más, por no contar las miradas enojadas que le daban Yui, Yukino e Iroha. Estaba cada vez más con la sensación de acorralamiento, pero justamente la intromisión de Tobe lo salvo, ya que con su actitud despreocupada entro en el grupo donde estaba Hachiman, para pedirle que le ayude a subir unos materiales que faltaban y Hachiman aceptó con gusto y salió con rapidez de ahí junto Tobe.

−Hikitani kun, estabas horriblemente acorralado ahí, sino te sacaba de ahí iba haber un derramamiento de sangre, que miedo −comentó Tobe ya lejos del salón.

−Espera ¿acaso te diste cuenta? −asombrado cuestionó Hachiman.

−En realidad al principio no, pero Hayato me advirtió del ambiente pesado y me pidió que te ayude a salir de ahí, aunque si es verdad que toca subir unas cosas −comentó Tobe.

−Vaya no pensé que recibiría ayuda, así que gracias, pero igual esta fea la situación de allá dentro y en realidad no quiero entrar de nuevo así que, me quedaré por aquí hasta que este por finalizar el evento, oye Tobe si te preguntan estoy ordenando en el almacenamiento −dijo Hachiman más relajado.

−No hay problema, así que ya es hora de regresar, suerte −Tobe con una sonrisa despreocupada salió junto unos materiales mientras Hachiman se sentó en una de las cajas de almacenamiento. Mientras esto sucedía en el salón del evento, varias miradas posaron los ojos en Tobe cuando entró solo sin Hachiman. Esto no pasa desapercibido con Haruno y Horikita, que hace varios minutos habían terminado su conversación junto un incómodo Akihiko. El evento siguió con normalidad, pero Haruno se acercó dónde estaba Yukino y Yui.

− ¿Cómo van con los chocolates? −preguntó con una sonrisa Haruno.

−Creo que va bien – se aventuró a responder Yui.

−Veo, ¿y esos chocolates a quién se lo entregaran? −preguntó Haruno

−Que Hikki haya traído a su amiga, no afecta que le entreguemos chocolates −respondió Yui mientras Yukino se sorprendió.

−Oh, yo nunca dije que era a Hikigaya, pero si cierto es su amiga no hay problema… aunque sería lamentable que fuera su amante −comentó con mordacidad Haruno.

−Si es así, tampoco afecta ya que Hikigaya san es simplemente un compañero del club – contestó molesta Yukino.

−Ya veo, si esos son sus sentimientos, suerte −comentó Haruno y luego salió de salón con el pretexto de ir al baño.