Para Kuyou e Ishigami Hitomi no sabían quién era pese a tener el uniforme de la Academia, pero una cosa estaba segura mientras veían a la figura sosteniendo en sus brazos protectoramente a un caído Kay, sus ojos rojos se denotaban furiosos y prometían sangre.
La transformada en su verdadera forma, Akashiya Moka sostenía en sus brazos a Kay mientras el resto de sus amigos se acercaban preocupados hacia ella.
"¿Qué está pasando? Esa forma es diferente de la otra Akashiya Moka… ¿será esta su verdadera forma liberada? ¿Por qué hasta ahora la muestra? Y sin embargo aquella forma me parece haberla oído antes." Eran los pensamientos del Yoko (zorro demoniaco) llamado Kuyou.
"Ojos rojos y energía sobrenatural que da miedo… esta es la verdadera forma de un vampiro según he averiguado… Tch. Parece que Kuyou la tendrá más difícil ahora justo cuando todo parecía estar de mi parte." Eran los pensamientos de Ishigami Hitomi oculta en las sombras de la vista de todos.
"Moka-san… Kay-san… ¿él está bien?… ¿acaso…?" preguntaba un temeroso Tsukune acercándose hasta ellos para comprobar el estado de su amigo y asustándose al descubrir que no estaba respirando
"¡Moka! ¡Kay no está respirando! ¿¡Que hacemos!?" Le preguntaba histérica una Kurumu Kurono como comprobaba que el chico no parecía respirar, Moka solo le miraba dubitativa contemplando que hacer.
"¡Yukari! ¿¡No puedes hacer algo tú!?" Le pregunto Kurumu a la joven niña la cual apretó los dientes, ningún hechizo de magia que conocía podía resucitar a los muertos o traerlos a la vida en perfecto estado como antes, eso si es que Kay aún no seguía vivo por lo que un hechizo incorrecto sería perjudicial para él.
"ahora me acuerdo de donde había leído sobre ustedes… Vampiros, con el poder de Nosferatus y llamados los Inmortales, ellos son súper monstruos con poderes sin igual… He escuchado algunas historias, pero no creía en ellas hasta que no viera uno con mis propios ojos… ¡Sin embargo al verte solo puedo suponer que los vampiros son iguales al resto de idiotas que he derrotado! Ja ja ja…" decía Kuyou con voz fuerte en tono soberbio
Inner Moka solo paso a mirarlo con desprecio para luego poner a Kay en el suelo y agacharse hasta su posición cerca del suelo, los demás no sabrían que haría hasta que ella hablo.
"Kay… perdóname por esto." dijo ella como sin previo aviso paso a morder su cuello con fuerza sorprendiendo a todos los presentes
"¡Moka! ¿¡Pero qué haces!? ¡Solo arriesgaras más a Kay al beber su sangre!" Exclamo una espantada Súcubo Kurumu no creyendo lo que hacía Moka
"¡no! espera…" Dijo Yukari, ella tenía un presentimiento de lo que estaba haciendo la vampiresa
Inner Moka se soltó del cuello de Kay y se levantó "Tsukune, Kurumu, Yukari… cuiden de Kay, no se preocupen, no he bebido de su sangre, yo le inyecte mi propia sangre a él para salvar su vida… cuiden de él, mientras tanto yo me hare cargo del resto…" Decía la chica de cabellos plateados mientras se acercaba con semblante serio y sin los atisbos de arrogancia comunes en ella, tan solo quería aplastar al sujeto frente a ella sin más
"¡Ya entiendo! Si le inyectas la sangre de un vampiro, con los fuertes poderes de curación que poseen por los cuales son llamados seres
'Inmortales'…esto curara a Kay por dentro. "Hablo Yukari algo esperanzada en esto
"Desafortunadamente no lo sé…hay tres problemas al usar este método para revivir o curar a alguien. La primera es que el porcentaje de éxito es bajo." Hablo la chica como antes de que pudiera seguir ella lanzo una fuerte patada sorprendiendo a Kuyou la cual paro a duras penas con sus manos
"Cuídate… deberías hacerlo, ya que si Kay muere… yo me asegurare de arrancar tu corazón del pecho y aplastarlo en mis manos." Sentencio la chica con sus ojos inyectados de sangre
Seguidamente la chica comenzó a lanzar una andanada de golpes con patadas y puños mientras hacía retroceder a Kuyou ganándole terreno, algunos golpes impactaban en Kuyou el cual hacia todo lo posible por cubrirse en todo su cuerpo usando sus brazos y sus llamas también, aunque para la vampiresa no le resentían el fuego que, hacia contacto con sus golpes, la rabia que sentía y su poder confluyendo le hacían superior en ese aspecto a Kuyou… pero aun así…
"yaaaa… Moka-san es tan fuerte como yo pensaba." pronunciaba Yukari, pero alguien no estaba de acuerdo con eso
"No… algo está mal, Moka se está esforzando mucho y aun no derrota a Kuyou, tampoco se siente su usual poder sobrecogedor." Decía Kurumu Kurono recordando las veces pasadas cuando vio luchar a Moka en su verdadera forma
"Es verdad, Moka-san se nota cansada…" le secundo Tsukune dándose cuenta también de algo extraño
Esto se denotaba en la batalla, Inner Moka estaba sudando de más y jadeaba mucho también, como ella continuaba, de una potente patada hecho a volar a Kuyou hacia uno de los edificios destruidos del lugar estrellándolo en este y haciéndole caer encima los restos.
"El segundo problema, es que tuve que darle una enorme cantidad de sangre y ya que esta es la fuente de poder del vampiro, mi poder inevitablemente se debilita." Respondió Inner Moka a los chicos que la escucharon a cierta distancia sobresaltándolos, entendiendo del porqué de la fatiga de la chica
Fue en eso que en el sitio donde cayó Kuyou explotó por los aires revelando al sujeto, ardiendo en llamas el lugar y rodeándolo por todo su cuerpo, pero aun con una sonrisa cínica en su rostro.
"kukuku… acabo de oír algo interesante… ¿Dónde este ese llamado vampiro 'súper poderoso' ahora? ¿Acaso le diste toda tu sangre a ese insecto? ¡Pobre tonta!" Rugió Kuyou como de sus manos lanzo un ataque de fuego directo contra la chica la cual esquivo a duras penas, pero el impacto de la explosión del ataque la arrastro lejos
Resulto algo ilesa pero diversas quemaduras en su cuerpo y uniforme, se denotaban, así como un notorio cansancio.
La batalla recomenzó cuando Kuyou se lanzó al ataque sin esperar y ambos se trazaron en un combate cerrado de cuerpo a cuerpo donde Kuyou llevaba la delantera, varios sendos golpes impactaron en la chica mientras hacía todo lo que podía en cubrirse y contraatacar, pero Kuyou estaba siendo más rápido, interceptando sus ataques con sus llamas de fuego y contraatacando con sus puños y colas de fuego.
De un zendo golpe a partir de una de las colas en llamas de Kuyou, dio de lleno en la mandíbula de la vampiresa y con una fuerte patada de los pies de fuego de zorro de Kuyou, la mando a volar estrellándola contra los restos de unos edificios en llamas que se desmoronaron por el impacto de la chica.
"¡Moka-san! ¡Moka-san!" Exclamaban ambos Tsukune y Yukari sin poder hacer nada, Yukari estaba demasiado herida y debilitada para ser de utilidad mientras apretaba su varita con fuerza
"¡Kuyou es demasiado fuerte! ¡Moka se puso así de débil para salvarle la vida a Kay! ¡De lo contrario esta pelea sería más pareja, pero si esta así de débil, todo será inútil!" Eran los pensamientos de Kurumu mientras sostenía a Kay en sus brazos con los otros dos chicos a su lado
"débil, débil, débil… lo eres demasiado incluso para ser un monstruo. Es a causa de esa estúpida idea de querer defender a un humano que tú y ese idiota de Namura están como están… a causa de querer jugar a ser amigos de un humano." Decía Kuyou mientras se sonreía para sí mismo y sus colas bailaban en vaivén detrás de el
Inner Moka no lo escucho como salía del resto de escombros muy debilitada y lastimada, su uniforme estaba que casi hecho jirones y tenía multitud de heridas y quemaduras por todo su cuerpo, pero con la determinación brillando aun en sus ojos carmesís para satisfacción de Kuyou.
…
A todo esto, oculto para todos, un inconsciente Kay batallaba por dentro para recuperarse y recuperar la conciencia, para el todo esto no había sido ajeno para él, él se veía a si mismo rodeado de oscuridad sin saber en dónde estaba, pero algo le decía que debía salir de ahí.
"¿Dónde estoy? ¿Qué es este lugar? No puedo quedarme aquí, todos… ¿Moka habrá podido vencer a Kuyou? ¿Qué está sucediendo…" Él pudo de pronto oír y sentir voces a través de él, era como si viniera de todas direcciones, eran las voces de sus amigos en algún lugar
De pronto varias imágenes comenzaron a conflagrar delante de él, y podía verlo y casi que escucharlos, eran sus amigos luchando contra aquel monstruo en llamas llamado Kuyou
"¡Que es esto? ¡Puedo verlos! ¿Acaso será el sexto sentido o mis sentidos están más afinados estando inconsciente?" Pensaba Kay como pudo ver a la verdadera forma de Moka hablarles sobre darle la sangre a Kay y como esto la debilitaba mientras peleaba con Kuyou y las cosas no iban bien para ella
Pudo ver cómo ella era vapuleada y el efecto de debilitamiento de la chica hacían mella en ella, y todo fue por salvarlo a él.
"Nunca me espere algo así de parte de ella… hasta hace poco no nos llevábamos bien y cada uno desconfiaba del otro, pero… algo ha cambiado desde hace poco, desde que peleamos con esa mujer araña o incluso desde antes cuando derrotamos por fin a Hei…" Así pensaba el peli castaño, como recordaba aquellos combates donde la chica peli plateada exudaba una personalidad distinta a la arrogancia y soberbia que le había mostrado siempre, aunque fuese por poco
Vio como la chica era estampada contra unos edificios en ruinas demoliéndolo y cayéndole los restos encima, mientras Kuyou se acercaba victorioso hacia ella, mientras exudaba su tono cínico y soberbio común.
"tch… sea que no nos hallamos llevado bien desde el principio, ¡No puedo dejarla morir así! los otros no pueden hacer nada, están demasiado débiles y caerían pronto… solo yo podría… pero sin mis poderes al máximo, ¿Cómo podre hacer algo yo? ¡Debe haber un modo maldita sea! ¿No podemos acabar así! ¡No puedo morir yo aquí!" Fueron los pensamientos del chico peli castaño con fuerza tratando de despertar sus poderes incluso en su estado inconsciente
Fue cuando una luz roja se hizo presente sustituyendo a las imágenes frente a él y llamando su atención, el acerco una mano hasta esa luz y sintió un poder distinto pero aun fuerte que vibraba mientras calentaba su mano, la luz emitía un aura que lo rodeaba y sentía que le daba fuerzas donde no las había, también sintió dentro de él que una especie de oscuridad se hacía presente, una oscuridad que se le hacía remotamente familiar, como si ya la conociera… en otras circunstancias él lo hubiera pensado dos veces antes de tomar una decisión pero en estas circunstancias no había tiempo… decidiendo ignorar eso, hizo rodearse de aquella aura y luz que lo envolvieron mientras hacía estallar su poder desde la inconciencia.
Demoliendo las sombras y oscuridad que lo cubrían y proyectándose hacia el infinito… directo hacia el exterior…
…
"¡Mejor muere en mis llamas y arrepiéntete de tu estupidez! ¡Muere! ¡Flama brumosa rodante!" Gritaba Kuyou como ya estaba a punto de rostizar a Inner Moka como una explosión de energía detrás de él lo detuvo
Todos voltearon a verla, tanto los chicos del Club solo quedaron sorprendidos por lo que veían ya que sabían de quien era esa energía, simplemente él se había levantado y apartado de ellos sin decir nada cuando un fuerte estallido de energía lo cubrió sobresaltándolos, Kuyou solo se fijó en quien era la persona que había hecho eso, sorprendiéndose también por quien lo había hecho.
"¿¡Kay Namura!?" Exclamo un Kuyou exaltado viendo a la figura en medio de la energía del aura roja carmesí que le rodeaba, sus ojos estaban en blanco, pero las heridas de todo su cuerpo comenzaban a desaparecer.
"¿¡Que!? ¡Las quemaduras de su cuerpo están comenzando a sanarse… las que se suponen que deberían ser mortales están curadas! ¡Esto es una locura! ¡Tú deberías estar muerto! ¿¡Qué clase de monstruo eres tú!?" Exclama un iracundo Kuyou ante los nuevos hechos que se le presentaban ahora
"Kay…" Pensaba Inner Moka, lo que había hecho le había salvado, pero también le preocupaba lo que pudiera suceder por haberle dado de su sangre al chico, ella sabía los riesgos de ello
"Kay-san." Decían ambos Tsukune y Yukari entre sorprendidos y aliviados por la suerte de su amigo en salvarse
"increíble, esta debe ser la fuerza de un vampiro. Gracias a la sangre de Moka se puede sentir el poder de un vampiro dentro de él." Eran los pensamientos de una aliviada Kurumu Kurono
Kay solo cerro los ojos unos momentos sintiendo la energía envolverlo y curar de las heridas de todo su cuerpo tanto por dentro como por fuera, como el solo trono su cuello de lado a lado haciendo crujir con fuerza los huesos de su cuerpo como seguía con sus mano y brazos y espalda… para luego abrir sus ojos inyectados en sangre y levantar su dedo índice apuntando hacia Kuyou mientras un aura similar a figuras de murciélagos negros le rodeaban y sus cabellos se parecían volver de color plateado como su piel era casi pálida ahora.
"¡Tu…!" Dijo Kay con una voz de muerte, señalando a su enemigo delante de el
Kuyou solo se quedó quieto sin hacer nada, la energía del chico podría decirse estaba cerca de su nivel, pero no por eso iba a retractarse o a huir, si el chico quería pelea el con gusto se la daría…
"Ya veo ¿quieres enfrentarme no es así? ¿Desquitarse? ¿¡Pues qué esperas y no vienes!? ¿Te aseguro que no será fácil como piensas solo porque te recuperaste!" Exclamo un iracundo Kuyou como sus flamas de colas se extendieron cubriendo todo su cuerpo y extendiendo toda su energía casi que al limite
Kay solo camino hasta el mientras se volvía hacia los chicos asustados detrás de él.
"Tsukune, Kurumu, Yukari… ayuden a Moka cuando establezca batalla con él. Y no se entrometan en esto, él es mío…" Dijo Kay con voz casi que gutural mientras se acercaba hasta su enemigo
Una parte de él no sabía lo que le pasaba, quizás era la energía del vampiro que corría por sus venas dándole una fuerza que necesitaba justo ahora para hacerle frente a un enemigo de este nivel, pero incluso el sabría que esto no sería eterno y debía de acabar rápido con esto ahora que aún tenía las fuerzas para hacerlo… solo podía más que sonreír señalando lo que parecían ser colmillos sobresaliendo de sus labios, el sentimiento de batalla y de sangre propia de vampiros corrían dentro de él, y ahora podía entender porque es que ellos la disfrutaban tanto, sobre todo Moka en su verdadera forma al querer combatir sola.
Sin esperar más él se lanzó hacia Kuyou dispuesto a saber hasta dónde llegaría, Kuyou por toda contestación lanzo un puñetazo izquierdo directo contra él, que Kay paro en seco con su mano derecha.
"¿Es todo lo que tienes?" Hablo Kay en tono arrogante propio de los vampiros debido a la sangre de ellos que corrían dentro de el
Kuyou solo se enojó más como soltó su mano con fuerza y emprendió una batalla cuerpo a cuerpo con él, Kuyou tenía la ventaja al cubrir sus extremidades con flamas tratando de golpear y quemar a su oponente, pero para Kay eso era insuficiente para lastimarlo como seguía contraatacando con fuerza e impactando algunos golpes en Kuyou el cual resentía en su cuerpo.
Ambos probaban ser luchadores expertos en artes marciales, pero increíblemente era Kay quien se estaba imponiendo como en una combinación rápida de patadas y puños hacían ganarle terreno al Yoko, el cual enojado por esto se apartó de él.
"¿Qué pasa Kuyou? ¿Dónde está el tono arrogante que tenías hace unos momentos cuando nos pisoteabas? ¿Ahora que las cosas se cambiaron de lado para ti, te estas acobardando?" Decía Kay como provocaba a Kuyou con sus manos instándolo a atacar hacia el
"Oigan ¿Qué pasa con Kay-san? Esta cambiado, antes no era así…creo." Decía Aono Tsukune consternado viendo la batalla
"Debe ser por la sangre de Moka-san, la sangre de vampiros la cual está impresa por la sed de sangre y de luchas desde su nacimiento, deben de hacerle comportar así." Decía Yukari Sendo creyendo que era la razón
Kurumu sostenía del hombro a una debilitada Inner Moka la cual solo veía la escena con evidente preocupación "Aparte de darle mi sangre a Kay para curarlo, este es el tercer problema… aun no puedo estar muy segura, que tipo de transformación sufriría el cuerpo de Kay debido a mi sangre dentro de él." Eran los pensamientos de la vampiresa
"¡Flama brumosa rodante!" Exclamo Kuyou haciendo rodar las colas de llamas detrás de él y dirigiendo su ataque de fuego directo hacia el chico frente a el
El fuego salió disparado con gran energía e ímpetu directo hacia el chico el cual solo se cubrió con sus brazos del ataque de fuego el cual lo golpeo de lleno.
"ahahaha… jajajaja… ¿Qué sucede chico engreído? ¿¡Donde estaba tu confianza de hace rato!? Jajajaj" Reía Kuyou sádicamente cuando algo lo sobresalto
En medio de las llamas que rodeaban al chico, el solo sonreía mientras sus ojos brillaban como dos luces rojas en medio de la oscuridad, como si las llamas no le hicieran absolutamente nada… de pronto todo el fuego que le rodeaba comenzó inesperadamente para sorpresa de todos a congelarse y a volverse hielo, para pronto desaparecer como escarchas como la figura dentro de esta se quitaba los restos de él.
"uff… hacía mucho calor adentro, así que tuve que enfriar el lugar." Respondió el chico peli castaño con sarcasmo
"p-pero ¿Qué eres tú? ¿También puedes hacer ataques de hielo?" Exclamo un Kuyou sorprendido y extrañado por esto
"Hay muchas cosas de mí que no sabes Kuyou, y no lo sabrás nunca." Rugió Kay como una vez más se lanzó directo contra el zorro el cual se preparó para el ataque
Esta vez fue el chico quien lanzo un puñetazo de su brazo derecho el cual Kuyou paro en seco con su mano izquierda también, el zorro sonrió ante esto, pero Kay también lo hizo confundiéndolo y es que de su mano derecha comenzó a congelarse y salir una descarga fría de hielo que empezaba a congelarle el brazo izquierdo a Kuyou el cual se soltó adolorido por esto, momento aprovechado por Kay para atacar.
Sus puños parecían recubrirse de una capa de hielo y escarcha como estos comenzaron a impactar en todo el cuerpo a Kuyou haciéndole escupir sangre. Kay no le dejaba oportunidad a Kuyou de defenderse como seguía su implacable ataque, había sido buena idea cubrir sus manos de hielo para así poder encajar mejor los golpes al cuerpo del Zorro sin lastimarse por el fuego que le rodeaba.
"…ugh… maldito…" Exclamaba Kuyou como se cubría con más llamas, pero Kay a su vez empleaba ataques de corrientes heladas que mantenían a raya las llamas
Pareciera que aun momentáneamente usando los poderes de un vampiro, el chico pudiera emplear sus propias técnicas aun cuando el tipo de poder y aura fuesen diferentes, quizás una parte de su Cosmos aun oculta sobresalía de la superficie como si empleara el Youki que le rodeaba para poder usar las técnicas que conocía sin temor a ser herido o atacado por el poder de la barrera que rodeaba este lugar, y Kay debía de decirlo… realmente disfrutaba el poder desahogarse por fin usando al menos una parte de su poder por fin.
Quizás por el mismo ímpetu y gusto que tiene ahora peleando, por el poder de la sangre de vampiro provocaba dentro de él, estos pensamientos solo provocaban que el chico sonriera a gusto ante esto.
Kuyou no quería creer esto, este chico se estaba imponiendo sobre él y se estaba riendo en su cara, y él no iba a permitir eso, apretando sus dientes con furia hizo estallar la mayoría de su Youki cubriéndose en un enorme torrente de llamas.
"¡Tú maldito! ¡Te atreves a burlarte de mí!" Exclamaba el zorro embravecido al ver a un Kay aun sonriente lo cual hizo que Kuyou se enloquecería haciendo que su fuego se descontrolara comenzando a quemar todo a sus alrededores desde edificios en ruinas, hasta árboles, estatuas, templos viejos, todo lo que encontrara a su paso, algunos estudiantes desmayados empezaron a correr cargando a sus compañeros heridos e inconscientes lejos de la furia del líder de la comisión quienes algunos de sus miembros hacían lo mismo por temor a quemarse por su líder
Kay solo bufo haciéndose el 'sorprendido' pero estaba lejos de eso, quizás la arrogancia propia de los vampiros que la llevaban en su sangre como ahora que estaba dentro del chico, comenzaba a hacer efectos como él se comportaba como uno.
"Interesante, aunque creí que podrías llegar a más que esto… la verdad es que, si estuviéramos afuera de esta barrera, yo trapearía el piso contigo muy fácilmente. Pero supongo que deberé de conformarme con estar a tu nivel para ser una pelea más pareja ¿no crees?" Dijo Kay sarcásticamente "¿Pareja? ¿Crees que nuestros niveles están parejos? ¡Realmente eres un verdadero estúpido Namura! ¿No sientes que nuestros poderes están lejos de eso? ¿Quizás seas un vampiro o no, pero no por eso significa que estés a mi altura! ¡El que trapeara el piso seré yo contigo! ¡Algo que quise hacer desde que te conocí!" Exclamo Kuyou iracundo, desde que recordaba y vio a aquel chico en medio de la multitud mirándole fijamente con una mirada que no denotaba miedo hacia el sino indiferencia, no pudo más que asumirla como un reto si es que algún día se encontraran frente a frente y ese día era hoy, irónicamente
"Debo de decir, que en parte puedo decirte lo mismo Kuyou… desde aquel día en la clase de natación, al ver tu mirada que me veía fijamente por unos segundos, tenía la idea de no querer volver a encontrarme contigo, no por miedo sino porque no estaba en condiciones entonces de meterme en problemas, pero ahora puedo decir que pareciera que el destino es cruel y no hubo modo de evitar esto… pero por otra parte, voy a disfrutar esto, cada golpe que te dé será por mis amigos y por mí, que tu tanto maltrataste y trataste como si fuéramos basura, a ver cómo te agrada el mismo trato que te daré igual como tu hiciste, ¡Solo que multiplicado por mil!" Exclamo Kay sonriente mientras hacía crujir sus puños
Kuyou solo sonrió en parte a lo dicho por el chico, debía de admitir que, en una parte de él, sí resultaba irónico esto, desde aquel día que vio aquel chico y con todo lo que sucedió pareciera que cosas como el 'destino' hubiesen jugado en favor de algo como esto, aunque claro él nunca fue creyente de esas cosas.
"Entonces… déjame mostrarte lo que nunca podrás superar." Dijo Kuyou como sus llamas seguían incendiando todo y su poder seguía creciendo en forma de fuego
Kay sentía esto, el poder de Kuyou era superior al de él, no importa cuánto poder tomo de Moka, seguía siendo insuficiente para derribar a alguien del nivel de Kuyou, a menos que…
Todo en los alrededores se parecía incendiar como las llamas arrasaban todo de los alrededores, los chicos del Club se habían cubierto detrás de Yukari cuando esta aun con pocas fuerzas hace uso de su varita mágica para mantener a rayas las llamas lejos de ellos, pero aún seguían atentos al combate algo indistinguible por el fuego a sus alrededores. Ishigami Hitomi se había guarecido lejos encima de unas columnas de un antiguo templo japonés, algo alejada de las llamas, pero con buena visualización en parte desde su posición de arriba.
El calor que hacía dentro era sofocante cuando menos, para Kay esto era nada, en peores lugares y estados le ha tocado estar y este no era la excepción. Solo su poder y su corriente gélida lo mantenían de no sofocarse por el poco oxigeno que había dentro de las llamas que parecían alcanzar y quemarlo todo… el solo seguía parado ahí, preparándose para el obvio ataque de Kuyou si es que no pretendía amedrentarlo con todo este despliegue de fuerza.
"¡Prepárate! ¡Flama brumosa rodante!" Exclamo el Yoko extendiendo sus colas y haciéndolas girar mientras parecían adquirir más tamaño y velocidad, el aire parecía extinguirse a sus alrededores como Kay hacia todo para aguantar
"¡Muere!" Exclamo el zorro lanzando su ataque de fuego hacia el chico que también ataco
"¡Rayo de Aurora!" Dijo Kay juntando ambas manos y entrelazando sus dedos y lanzando una poderosa descarga de hielo de sus manos directo hacia el ataque enemigo que pudo pararlo en seco, aunque a duras penas
Ambos se mantuvieron en sus lugares mientras soportaban el ataque del otro, quedando suspendidos en un punto muerto. Pero Kay sabía que esto no duraría para siempre.
"Impresionante debo de decir, lograste parar mi ataque, ¡Pero no creas que eso te durara para siempre!" Exclamo Kuyou como su Youki supera al del chico peli plateado el cual, hacia fuerzas, pero sabía que su poder era solo limitado y temporal, además que aún no sabía cómo emplearlo bien a pesar que sus instintos le parecieran decir como
Pero Kay no iba a dejarse vencer, no por él. Tenía muchas cosas por las que vivir, sus ojos de color carmesí se cerraron y se enfocaron, quizás si pudiera…
El ataque de Kuyou comenzó a ganarle terreno al de Kay que pronto estaba cerca de quedar quemado, pero él no se movía de su posición, pareciera meditar en algo. El ataque de fuego pareciera por fin alcanzar a Kay que le impacta de lleno, siendo rodeado y consumido por las llamas.
"ajajajaja… ¡Arde en el infierno! ¿Acaso no ibas a darme lo que merecía? Jajaja…" Reía Kuyou sádicamente viendo aquella escena y la silueta que estaba en medio del fuego, pero de pronto algo sucedió que hizo callar al Zorro
Las llamas que rodeaban y parecieran consumir al chico de pronto se congelaron y hielo y escarcha comenzó a cubrirla y no era todo, la figura comenzó a romperse dejando entrever al mismo chico Namura mientras una especie de aura blanca le rodeaba aunque algo débil comparada con la energía rojiza del Youki que le rodeaba también, todo el fuego a sus alrededores comenzaron a congelarse de improviso, todo el fuego comenzó a apagarse como sendas copas de nieves caían desde los cielos ocasionado por el poder del chico… era el efecto del poder del Puño del Hielo. El aura blanca era el poder de su Cosmos que le cubría, pero no era tan fuerte como el Youki, aun cuando fuera riesgoso por la barrera, igual gracias a la energía Youki que tiene gracias a la sangre de Moka, la cual ejercía un poder mayor podía hacer uso de las dos energías y conseguir una fuerza y poder más grandes para doblegar a Kuyou que no estaba acostumbrado a esto.
El chico comenzó a acumular toda la energía del rayo de aurora en sus puños, mientras Kuyou apretando los dientes intentaba usar todo su poder para rostizar al chico frente a él, aun si tuviera que incendiar o arrasar con todo a los alrededores.
Kay simplemente seguía avanzando con sus dos manos entrelazadas lanzando su ataque de rayo aurora como el fuego de Kuyou seguía tratando de ganar terreno y quemarlo, pero el poder congelante era tan fuerte que le impedía llegar a siquiera tocar al chico. Todo el fuego que había consumido casi todo el lugar hasta las cenizas, comenzaba a extinguirse por la baja temperatura que estaba cubriendo el lugar, que incluso lograba afectar a Kuyou haciendo que su cuerpo comenzara a tiritar de frio.
Kuyou estaba molesto, la baja temperatura le estaba comenzando a afectar y pareciera que aun con todo su poder no pudiera detener al chico que seguía hacia delante y apagaba todas sus llamas. Kay estando ya cerca del zorro no espero más, todo el aire frío había congelado el ambiente que le era benéfico a Kuyou y le estaba debilitando también con su poder en pugna. El poder en bruto de Kuyou podría ser parecido a una inundación cuando estaba a su máximo, pero el de Kay era similar a un océano, o incluso más que eso, si estuviera en sus óptimas condiciones seria comparable al del Universo mismo.
Kay incrementando la fuerza de sus dos energías lanza todo el poder que tuviera hacia Kuyou el cual gana en fuerza y lo golpea directamente en los brazos congelándoselos, lo cual Kuyou se tambalea y aprieta los dientes en dolor por la congelación, pero eso no era todo. Kay acercándose y aprovechándose del momento, se acercó velozmente a Kuyou con una velocidad similar al sonido y golpea a Kuyou justo debajo de la mandíbula con su mano derecha protegida con una capa de hielo en un gancho ascendente que manda a Kuyou a volar hacia arriba.
El puñetazo libera un tornado de aire frio que envuelve al Zorro de fuego y congela la mayor parte de su cuerpo, incluidas sus colas de fuego. Esta era una de las mayores técnicas del Puño de Hielo, llamado "torbellino o tornado de hielo" (Nombre de la técnica traducida de Saint Seiya.) La cual tiene efectos devastadores para el enemigo.
El ataque fue tan fuerte que arrastro a Kuyou varios metros por los cielos mientras lo congelaba y hacia apagar las llamas que le rodeaban. Pudo haberlo dejado ahí al saber del poder de dicha técnica, pero Kay no lo iba a dejar terminar ahí. Todos los chicos del Club vieron lo que Kay hizo y se preguntaban qué clase de Detective Espiritual era Kay o que técnicas usan estos, ya que definitivamente y en el caso de Inner Moka, eso que hizo no era propio de vampiros, ni conocía a nadie que usaran técnicas de frio o ataques congelantes fuera de las Yuki-Onnas o los hijos de estas. Y dudaba que Kay fuese uno.
Mientras Kuyou caía al suelo desde el aire, Kay alisto su puño derecho cargándolo de una energía luminosa y lista para descargarla sobre el pobre diablo.
"¡Kuyou! ¡Te dije que te regresaría cada uno de tus golpes hacia mí y mis amigos! ¡Solo que en tu caso te los regresare por mil!" Dijo Kay como de su puño lo libero directo hacia Kuyou y unas grandes ases de luces salieron de su puño como si fueran balas o relámpagos de luz
"¡Plasma relámpago!" Dijo Kay como su ataque algo más débil por su corto poder, pero igual de efectivo, se dirigió hacia Kuyou el cual solo sus ojos pudieron ver el reflejo de las luces y un escalofrió recorrió su espalda al verlas
No tuvo tiempo de más como estas impactaron en el Yoko golpeándolo y atacando su cuerpo desde distintas direcciones en forma de Zig Zas, mientras Kuyou solo podía gritar y escupir sangre. Los haces de luz le desmembraron su brazo derecho que estaba congelado, sus colas también fueron cortadas por los haces de luz, varias impactaron en su cuerpo rompiendo huesos entre costillas, pecho, piernas, y brazos. Un haz de luz penetro en su ojo izquierdo y le salió por el otro lado, otro corto la mitad de su oreja derecha. Algunos le arrancaron el pelo rubio de forma brutal de su cabeza desde el cuero cabelludo. Su nariz se rompió, algunos dientes salieron volando.
Kay solo pensó que era suficiente castigo, como ceso el ataque y dejo caer al malherido zorro al suelo el cual crujió con su caída junto con sus huesos. Aún estaba vivo, pero estaba muy mal de gravedad, igual no era menos de lo que se merecía, pensó el ahora chico peli plateado.
Kay solo jadeo, había sido brutal lo que hizo, pero en parte la violencia y gusto de la sangre vampírica que corría dentro de él hayan sido las causantes de que se comportara así, por suerte podía sentir aquel poder que le estaba curando, poco a poco desaparecer de él, justo como su Cosmos debido a que no quería que la barrera lo destruyese al usarlo.
El chico se volvió hacia sus amigos los cuales se le iban acercando lentamente, heridos y cansados por todo lo acontecido, Kay solo les sonrió quitando toda duda de que si el pudiera reconocerlos o la sangre de vampiro aun le cegaba.
"Kay-san… yo… gracias…" Hablo Tsukune conmovido por todo lo que habían hecho solo para salvarlo a el
"No tienes que dar las gracias Tsukune… ¿para qué están los amigos?" Respondió Kay como continuo
"Ayuden a Gin Morioka, él debe de seguir con vida aun adentro, yo mientras creo que tomare una siesta." Dijo el chico sonriendo como no pudo aguantar más el cansancio y cayo de rodillas
Increíblemente el color de sus ojos regresaba a la normalidad, a sus azules profundos, justo como el color de sus cabellos a su cabello castaño casi rojizo y los colmillos que sobresalían de sus labios desaparecían, y el color de su piel pálida regresaba a su normalidad. El efecto de la sangre vampírica había terminado y el chico se sintió desfallecer como cayó al suelo inconsciente.
"Él está bien, ya debió de gastar todo el poder sobrenatural de mi sangre… no solo sus heridas fueron curadas, sino que debería de despertar ya en su forma natural sin complicaciones." Dijo Inner Moka aliviando al grupo preocupado por el chico inconsciente
"Bueno, hagamos lo dijo Kay y vayamos por Gin y salgamos de aquí, este lugar me da frio, ¡AAACCHUUU!" Estornudo Yukari haciendo reír al grupo
Sin saberlo siquiera, alguien estaba observando al grupo desde lo alto de un árbol casi quemado, era la exmaestra de arte, Ishigami Hitomi.
"Heh… Kay Namura, Akashiya Moka, resultaron ser más fuertes de lo esperado. No me queda de otra que aceptar esta como otra derrota, pero…" Dijo Ishigami como sonrió de lado a lado al ver al grupo
"Club de periodismo, jugaremos de nuevo otra vez, algún día." Dijo la perversa maestra como salto del árbol, perdiéndose en la oscuridad de la noche.
FIN DEL CAPITULO
