Dejo el capítulo de una vez, ya que ya lo tengo escrito, el tres posiblemente este la próxima semana, si todo sale bien.

Disfrútenlo.

Capítulo 2: Repugnante

"¡Duh! Por eso te estoy preguntando." Contesta Ash, en tono burlón, no puede evitar esbozar una sonrisa cándida. Aun así la conducta coqueta de Dawn vuela por encima de su cabeza dura, incluso cuando la chica se le acerca considerablemente, reduciendo el espacio entre ambos a meros centímetros.

Serena mira a sus compañeros totalmente preocupada, angustiada, de hecho sus finas manos sudaban. Dawn era muy conocida por ser impredecible…y bastante coqueta. No podía saber si le gustaba Ash o no, pero una chica tan linda como ella seguramente no tendría problemas en someter el corazón de cualquier chico que deseara a su voluntad.

"Hmmm." La peli azul voltea a ver a Serena, normalmente le divertía instigar celos, pero Serena NUNCA reaccionaba bien a esas situaciones y considerando que ambas trabajan juntas (y compartían dormitorio) definitivamente no era prudente picarla. Dawn se retira y lanza una sonrisa coqueta. "¡Qué pena! No puedo decirte…al menos ahora." Comenta la joven chica, dándole la espalda.

"¡Anda ya dime!" Exige Ash, pareciendo un niño pequeño.

El porte inalcanzable e irresistible de Dawn desaparece por completo, y se rebaja al nivel de Ash, iniciando una típica discusión fútil entre ambos. "¡Ya te dije que no!"

"¡Que sí! ¡No vas a dejarme con la curiosidad!" replica el azabache rápidamente.

"Si te voy a dejar así ¡SUFRE MUCHO! ¿Verdad Serena?" grita Dawn volteando a ver a la castaña que miraba la escena con una mano en el rostro.

"A mi…no me metan en sus cosas." Suplica Serena, esto pasaba todo el tiempo y le costaba montones acostumbrarse a la dinámica tan rara que tenían estos dos.

Con tal de aliviar el enorme deseo de saber quién había regalado el broche dorado a Dawn, Ash recurre a no escuchar las plegarias de su amiga "¡Serena también quiere saber!" exclama repentinamente, abrazando a la chica del hombro.

Serena baja la cabeza de inmediato y sonríe, su rostro cubierto por un intenso rubor.

"¿No la oíste? ¡Ella NO quiere saber!"

"¡Claro que sí!"

"¡Qué no! Y… si aun así ella quisiera saber, no se lo diría y mucho menos frente a ti." Dawn da un pisotón en el suelo y se da la media vuelta.

"¡Como quieras!" Ash hace exactamente lo mismo que la chica, era una escena tan bizarra.

"Y-ya no peleen…porfis" Serena junta sus manos, como si rezará. "Ehh creo que es mejor que vayamos por las bases de datos que mencionaste Dawn…nos van a decapitar sino las tenemos."

"¡Ahh si eso! No te preocupes Serena, me dijeron que nos las iban a llevar per-so-nal-men-te" Explica Dawn, con ligera arrogancia.

"¿Estás segura?" Pregunta Ash, levantando una ceja.

Dawn se encoje de hombros. "Por supuesto que sí, pero si no quieres creerme, no me creas."

Antes de que comenzará la tercera discusión del día (Y la enésima del mes) entre estos dos, un chico de marrón llega, para fortuna de Serena, a interrumpir aquel pleito de chiquillos.

"Por fin los encontré… ¿Qué hacen parados aquí? Por poco y me hacen recorrer todo el edificio…" Se queja el chico, mirándolos realmente molesto.

Ash se rasca la cabeza. "Ah! Discúlpanos Kenny…. Andábamos conversando."

"¿Conversando o peleando?" pregunta Kenny, negando con la cabeza. Procede a mostrarles a los chicos una tableta digital. "Emm Zoey me dijo que les entregara esto, fue desarrollada por Clemont hace tan sólo un par de días ¿no es asombroso?

Dawn junta las palmas, encantada, Ash y Serena miran igual de fascinados. "¡Vaya y yo que creía que no había presupuesto para otra cosa aquí que no fueran salas bonitas!" Exclama Ash a punto de tomar la Tablet, sólo para que Dawn tratará de arrebatársela.

Para desgracia de ambos, Serena se interpone a la fuerza y de un caderazo los empuja a ambos. No iba a dejar que ellos se salieran con la suya esta vez, ya iba siendo hora de poner un poco de orden. "Yo me haré cargo de ella ¿Les parece?"

Dawn y Ash la miran sorprendidos y tan sólo asienten con la cabeza.

"Vaya chica evitaste una crisis" comenta Kenny, bastante divertido. "Conociéndolos se iban a dar un agarrón aquí mismo. Mejor así, me facilitas el trabajo de explicar cómo funciona esa cosa." El chico carraspea y procede a dar la explicación. "Esta cosa…digo artefacto tiene un programa, llamado…err… "Betia- no….emm ¿Cómo era?... ¡Ah sí!, el programa se llama "Bestiary", y… básicamente ehh…tiene la información recopilada de...umm cada una de los monstruos con los que la AIP se ha encontrado…ehh en todo el mundo y…ah sí y cuando encuentren más información de una criatura…pueden tomarse el tiempo de actualizarla y eso… y…. es… todo de lo que me acuerdo."

"Gracias compadre, ojalá y te promuevan pronto para que no nos hagas sufrir con esas explicaciones." Comenta Ash, sonriéndole a Kenny.

"Jódete tarado, hago lo que puedo." Comenta Kenny bastante molesto, retirándose del lugar, no sin antes despedirse rápidamente de las chicas.

"¿No pudiste decirle otra cosa?" Pregunta Serena, negando con la cabeza.

"¿Qué dije? No es mi culpa que se lo tome todo a mal." Explica Ash.

"Bueno…ya no importa, ¿les parece que revisemos esta cosa?" Sugiere Serena, pero no alcanza siquiera a tocar la pantalla cuando esta se enciende automáticamente. Se muestra una transmisión en vivo, justo de la avenida donde se encontraba el Museo de Geología, el mismo que había sido robado por la noche por la misteriosa monstruosidad.

"¿Y eso?" pregunta Dawn, mirando la pantalla atentamente, sólo para ser silenciada por Ash.

"¡Deja oír!" exclama Ash, en voz bajita.

Miette aparece en la pantalla, tan profesional como era posible para una reportera de su altura. "Nos encontramos aquí frente al Museo de Geología de Ciudad Veilstone, donde, un robo masivo acaba de ser cometido, ciertamente el de anoche fue nada en comparación. Se pueden apreciar dos figuras humanoides en la famosa cúpula del museo." Comenta la chica, mostrando seriedad, pero sus labios formaban una casi imperceptible sonrisa, parecía disfrutar de lo que estaba ocurriendo. Era evidente que este tipo de cosas daban muchísimo rating.

La voz tranquila de Miette es interrumpida por un vozarrón fuerte y lleno de arrogancia. Una voz que Ash, Dawn y Serena reconocerían de inmediato.

"¡Ni porque estuve aquí anoche fueron para mejorar la seguridad de este mugroso lugar! ¡Patético!" exclama la monstruosidad, sonriente y negando con la cabeza. "Parece que es deber de mí, la poderosa Brachyura, el enseñarles una lección que no van a olvidar jamás." Brachyura, como se llamaba la criatura se dirige hacia la bestia que la acompañaba. "¿Verdad que sí, Myria?"

La segunda monstruosidad, Myria, era posiblemente más escalofriante que Brachyura, la mitad superior de su cuerpo era el de una delicada chica, de piel pálida con largo cabello blanco como la nieve. Sus ojos eran totalmente negros, sin iris. De su cabeza brotaban un par de largas antenas que llegaban a los costados de su cuerpo, el cual tenía dos pares de brazos. Pero la mitad inferior…la "chica" ni siquiera tenía piernas, sino un largo torso como el de un gusano, segmentado y de color blanco con negro, del cual salían centenares de patitas blancas pequeñas.

Myria, sonríe con vileza. "¡Muy cierto!, estos humanos idiotas deben aprender a guardar mejor sus tesoros y no dejarlos a la vista de todos para que sean robados."

"¡Ay que asco…es la más horripilante que he visto hasta ahora!" exclama Dawn en voz alta, siendo silenciada de nuevo por sus compañeros, que estaban igual de asqueados.

Brachyura sonríe de forma tan macabra. "Bien dicho, ya que ahora todo lo valioso que pueda tener este lugar está en nuestras garras, les exigimos diez millones de Pokedolares o volamos este lugar, con todo lo que tenga adentro…tienen una hora." Comenta, muy divertida con la situación.

"¡Tenemos que irnos ya!" exclama Ash, apartándose repentinamente. "Iré por Pikachu y las veo en el Museo en 10 minutos o menos."

"Pero, no sabemos si es nuestra misión o no" Comenta Serena. "Quizá se la asignaron ya a alguien más"

"¡No podemos quedarnos aquí esperando! ¡Ya lo sabremos cuando lleguemos allá!" Grita Ash, alejándose a toda velocidad.

Dawn suspira. "Tiene razón, igual podríamos ser de ayuda ¿Qué perdemos?" comenta Dawn, Serena asiente con la cabeza; ya que ambas chicas tenían a sus Pokémon a la mano, salen corriendo del lugar en dirección al museo.

Varios minutos más tarde, en el museo de Geología…

Ash no tarda nada en llegar al lugar, llegó corriendo, la energía en él a tope; la policía ya acordonaba la zona, para evitar que mirones llegaran a poner sus vidas en riesgo. Después de mostrar su credencial que lo certificaba como miembro de la AIP, le dejaron avanzar a la parte interna del círculo formado con cinta amarilla.

El chico intenta buscar a sus compañeras con la mirada, creyendo que ellas ya estaban ahí, pero las chicas tardan todavía unos minutos más en llegar al sitio, un taxi las deja algunos metros cerca, tanto como puede acercarse, considerando las circunstancias.

"¿Por qué tardaron tanto?" Pregunta Ash con muchísima molestia.

"No sabes lo difícil que fue conseguir un taxi en estos momentos…" explica Dawn igual de fastidiada, Serena no dice nada y sólo mira a la cúpula donde se encontraban aquellos monstruos.

"Ooooh, parece que el la parejita perfecta y su mal tercio de la AIP ha llegado al fin a salvarnos." Comenta repentinamente Miette al grupo.

Serena se sonroja y se acerca a ella. "¡No somos pareja!" le comenta, jalándola junto a ella para que nadie más oyera lo que discutían.

"Jejeje, si lo sé, tu eres el mal tercio…!" ríe Miette, cubriendo sus labios con la palma de su mano.

Miette recibe ojos de pistola por parte de Serena. "¡No es tiempo para esto! ¿Cuál es la situación?"

La reportera tranquilamente explica todo, como si no fuera un asunto grave. "Nada que no sepas ya, esas damas van a volar el museo en 45 minutos si no les dan diez millones de pokedolares. Todo intento de negociación ha resultado inútil."

Dawn se acerca y comenta amargamente de la situación. "Como si se pudiera negociar con monstruos…Serena, ¿Qué es lo que te dice la Tablet de esas dos?"

Serena asiente con la cabeza y verifica la información que pudiera tener la base datos.

"Myria, información: Escurridiza, voraz, puede trepar superficies verticales con facilidad. El aguijón de su cola es venenoso. No le gusta el fuego"

"Brachyura, información: Muy fuerte y rápida para su tamaño, NOTA: Extremadamente peligrosa, NO se recomienda el combate directo."

Ash se truena los puños. "Bueno, acabemos con la más débil primero y luego nos encargamos de la más peligrosa." Sugiere, emocionado por la idea de pelear.

"En ningún momento dice que sea débil…pero en fin." Comenta Dawn, liberando a su compañero Piplup de la pokébola, quien ya estaba listo para la batalla.

Serena hace lo mismo, sólo que de su Pokébola sale su inicial Braixen, la Pokémon voltea y le da una mirada de confianza a su entrenadora.

Brachyura al oír los sonidos de las Pokébolas liberando a la criatura que adentro tenían, de inmediato toma atención a los miembros de la AIP que estaban parados frente a ella, los mismos tarados de anoche.

"Que insulto, pido unos cuantos millones de dólares y me mandan a un trío de payasos. Debería volar el museo ahora tan sólo por esta ofensa." Comenta, con total desagrado.

Ash las escucha y trata de recuperar un poco de su honor perdido aquella noche. "Vinimos por ti, Brachyura y te vamos a patear el-"

Serena carraspea la garganta "Ash." Dawn suelta una pequeña risita.

"Bueno, entiendes la idea." Dice el azabache.

Myria cruza su primer par de brazos y coloca el segundo par en su cintura. "¿Estos son los perdedores que ni siquiera pudieron alcanzarla ayer, Señorita Brachyura?"

Brachyura asiente y apunta su tenaza hacia el trio de chicos. "Los hubieras visto mi estimada, corriendo como imbéciles detrás de mí, incapaces de asestar un solo golpe, no sé qué les hace pensar que esta vez será diferente. Bueno…pensándolo bien, la situación si es distinta, tenemos como media hora para jugar con ellos." La vil bestia sonríe, y le sonríe a su aterradora compañera, saltando de la cúpula y asestando un golpe con una tenaza a un vehículo de policía ahí estacionado, comprimiéndolo al instante como si fuera de papel.

Los espectadores miran aterrados como aquel automóvil fue reducido a nada de un solo golpe. Varios policías huyen, quedándose sólo los oficiales más valientes, el equipo de la AIP y Miette, quien estaba perturbadoramente tranquila; sin embargo la reportera si retrocede varios pasos.

La escurridiza Myria se desliza hacia abajo, haciendo uso de todos sus apéndices, un espectáculo realmente horroroso era ver a ese centenar de patas moverse de esa forma. Pronto llega junto a su compañera. "Mi Señorita, ¿Le parece que devore a esas dos chicas feitas?"

"¿Nos dijo feitas? ¿ELLA NOS DIJO FEAS?" piensa Dawn, moviendo la cabeza de lado a lado.

"Suena perfecto, diviértete, que yo disfrutaré mucho el reventarle la espina este baboso y a su rata asquerosa." Sonríe Brachyura, mirando a Ash con una sonrisa arrogante, desafiándolo, incluso con la mano le indica que se lance contra ella.

Dawn voltea a ver a su compañero. "¡Ash, no te precipites!... Necesitamos un plan…."

Ash ya había ordenado a su Pikachu atacar a Brachyura, utilizando el ataque de Electro Bola. La chica de la tenaza rápidamente lo esquiva, sin mayor dificultad, moviéndose por la calle con gracia y agilidad.

"¡Detente Ash, déjanos ayudarte!" exclama Serena, en la cabeza sólo tenía lo peligrosa que era Brachyura, ya que las acciones de la bestia no dejaban nada de duda al respecto de su poder.

"¿Por qué no mejor se preocupan por ustedes mismas? Aunque no se angustien tanto, consumiré sus cuerpos y podrán formar parte de algo hermoso, serán parte de mí." Pregunta Myria, alzándose sobre las chicas, con una mueca retorcida, relamiéndose los labios como quien está frente a un banquete.

"¡¿Qué hablas gusano!? Eres asquerosa. ¡Piplup, rayo burbuja!" ordena la peli azul, sintiendo nauseas de tan sólo pensar en lo que su oponente les haría de ganar.

El Pokémon de Dawn ataca de inmediato a Myria, quien se cubre de las burbujas con sus brazos; el ataque la impacta varias veces, pero sólo la hace retroceder un poco.

"¡Braixen lanzalla- "Serena es bruscamente interrumpida, Myria no pensaba ser atacada por el Pokémon de Serena y con su poderosa cola golpea a la chica y a su amiga Pokémon, estrellándolas contra un árbol.

"¡Serena!" Dawn grita el nombre de su compañera, y luego de auxilio, ya que la aterradora criatura la sujeta con sus cuatro brazos, levantándola del suelo.

"¡Empezaré contigo! Seguro masticar esa suave carne tuya con mis fauces será toda una experiencia, oh sí…arrancaré tu piel, poco a poco, absorberé tu escencia taaan lentamente que te parecerá increíblemente tortuoso ¡Me rogarás que te devore de un bocado!" Comenta Myria, ruborizándose, claramente extasiada con la idea de darle un amargo fin a Dawn.

"¡Estás…..enferma…!" comenta Dawn, luchando por respirar, ya que tan pronto habló, Myria comenzó a asfixiarla.

"Heh, odio que mi comida hable tonterías." Exclama la bestia de mil patas, quien recibe varios picotazos de un molesto piplup, que ciertamente no iba a dejar que lastimara a su entrenadora. "¡Ay! ¡Molesto gusano, quítate de encima! "

Uno de esos picotazos da en el rostro de Myria, quien al tratar de cubrirse, suelta a Dawn haciéndola caer un par de par de metros. La chica, alcanza a poner las manos antes de estamparse de cara, pero el choque de su mano izquierda con el pavimento le genera un dolor horrible. Como puede, la chica se reincorpora, sosteniendo su extremidad lesionada, al caer, el broche que Zoey le había regalado cae al suelo, pero Dawn no le toma atención a ese detalle.

"¡REMOLINO!" exclama, alejándose hacia donde se encontraba Serena, quien no lograba ponerse de pie, después de ser arrojada varios metros en el aire.

Myria recibe el remolino, y no tenía como defenderse de ese ataque, ya que la fuerza de tal movimiento era imposible de bloquear, al menos para ella, y entonces es arrastrada varios metros por la corriente.

Miette mira la escena, impávida, mientras su equipo del canal graba cada detalle de la pelea. "Esto tiene muy mala pinta."

La peli azul, a pesar del dolor logra llegar a lado de Serena y se ve en la necesidad de gritarle varias veces. "¡Responde! ¿Estás bien?" grita Dawn a su casi inconsciente compañera.

Serena responde, bastante adolorida. "Creo que sí… ¿Qué paso?"

"En breve, la loca esa nos quiere comer, tenemos que acabarla y rápido." Explica Dawn, sobando su mano. "Pero Ash está muy ocupado…siendo un juguete."

La batalla entre Ash y Brachyura no había cambiado mucho de cómo había iniciado, la chica de la tenaza simplemente danzaba por el campo de batalla, evitando con absoluta facilidad los torpes ataques de Ash.

"Es cierto, a este ritmo nos harán picadillo a los tres…. ¿Tienes alguna idea?"

"¡CORRE!" Exclama Dawn, ya que Myria se acerca a las chicas tan rápido como puede, tratando de darles con su aguijón venenoso.

"¡No huyan de mí! ¡Entre más corran, menos sabrosa sabrá su carne! " Exclama la enloquecida bestia, persiguiendo a sus presas. Las chicas gritan, necesitaban más tiempo y ayuda para lidiar con la situación, pero claramente nada estaba a su favor.

Ash alcanza a oír los gritos de auxilio de las chicas. Brachyura ya sostenía a Pikachu, malherido, con la mano, y lo arroja contra el muro del museo.

"Bueno, basta de juegos, muere ratita infeliz." Comenta con crueldad la diabólica bestia, a punto de tomar a Pikachu con su tenaza, para darle un terrible fin."

Ash traga saliva, sintiendo un vacío por dentro. Por su arrogancia, sus amigas estaban en serio peligro, y por su debilidad, el amigo de toda su vida estaba por ser brutalmente aniquilado…por esa misma razón el seguramente perderá su vida de no hacer algo. Sin pensar, como actúa siempre, corre como nunca y se derrapa, poniendo su cuerpo entre Pikachu y la tenaza de Brachyura, quien sólo sonríe de forma más sádica. "Qué conmovedor."

El azabache lanza una pokébola de su bolsillo, casi de forma instintiva, no sabía que Pokémon estaba adentro, pero tenía que ganar tiempo. La pokébola toma por sorpresa a Brachyura, golpeándola en el rostro, antes de revelar que era la Pokébola de Talonflame, quien al ser liberado, extiende sus alas y lanza un chirrido de gozo.

"¡Ayuda a las chicas! ¡Rápido!"

Talonflame duda un segundo, pero obedece a su entrenador, a pesar de que hacerlo podría significar que jamás le volvería a ver con vida. El ave vuela en círculos, encima de Myria, quien se divertía atormentado a sus próximas víctimas. De hecho se había tomado la molestia de recoger el broche de Dawn.

"¡JAJAJAJA oh querida!" ríe Myria, realmente divertida. "¡Esto no te queda! ¡SE VE HORRIBLE EN TI!" exclama, con una sonrisa retorcida en el rostro, habiendo acorralado a las chicas. "Pero no me mires así ¡Ven, sólo trato de….devolvértelo!"

Pronto la risa encantada de Myria se convierte en gritos horrorosos, como el de un alma en pena, y su risa retorcida, degenera en una expresión de incredulidad y luego en una de dolor para acabar como una mueca agónica al sentir un intenso calor en su alargado cuerpo, sintiendo su exoesqueleto encenderse como leña.

Serena, a pesar de lo desagradable de la situación, no pierde tiempo y ordena a Braixen el atacar a Myria por el frente, encerrándola en una llameante prisión.

"¡DETENGANSÉ! ¡CLEMENCIAAAAA ¡POR FAVORRR QUEMAAAAAAAAAH! !" Grita la chica monstruosa, retorciéndose, mientras se chamuscaba en vida. "Señorita Brachyura…ayúdeme….."

Dawn y Serena se ven en la necesidad de cubrirse los oídos, esos alaridos eran espantosos. Ash quien esperaba ya la paliza de Brachyura, se queda impactado al ver que su aterradora oponente se había quedado parada viendo, con horror absoluto, como su amiga moría frente a sus ojos.

La policía observaba la monstruosa fogata atónita, Miette se da la vuelta y cubre su boca con ambas manos, empezando a tener un ataque nervioso ahí mismo; gimoteando incontrolablemente rompiendo totalmente con la compostura que como reportera, debía mostrar siempre.

Brachyura, respira muy agitada. "Myria….perdóname" Comenta, la muerta de su compañera, revolviéndole las entrañas. Una sola lágrima sale de su ojo. Por más que se hubiera apresurado, no habría podido ayudarla. El cuerpo de Myria, si bien hermoso a sus ojos, era increíblemente débil ante el fuego, que la consumió en poco tiempo, dejando solo una larga carcasa carbonizada.

Ash dirige la vista hacia Brachyura, dispuesto a atacarla con todo. Brachyura, lo mira con desdén. "Pagarán caro lo que le han hecho a Myria." Sentencia con absoluta seriedad, escapando de la zona a toda velocidad, quizá para no sufrir ese mismo destino, quizá para no mostrar debilidad. El chico suspira, abraza a u Pikachu con fuerza y camina hacia sus compañeras.

Miette, incapaz de resistir, sale corriendo del sitio, severamente afectada por lo ocurrido. ¿Cómo iba poder seguir con vida después de haber presenciado espectáculo tan horrible?

Serena y Dawn no pueden detener a la reportera, y menos cuando Ash está parado frente a ellas, había muchas cosas de que hablar.