Madara observó con desaprobación, no por primera vez, al último Uchiha vivo en Konoha. Estaba en clase de taijutsu y venció a su combatiente, para la gran adulación de múltiples fans.

Era desalentador ver lo bajo que había caído su clan. No solo el chico tenía un nivel muy inferior a lo que se esperaría de un Uchiha de su edad, sino que también sacó el peor carácter que podría tener.

Los Uchiha siempre fueron un clan guerrero orgulloso, habilidoso y con gusto por la batalla. Muchos los consideraron arrogantes, pero solo es arrogancia si no tienes la fuerza para respaldarlo.

El chico era descaradamente arrogante. Se jactaba de ser un Uchiha de élite y no tenía el poder para respaldar dicho reclamo. Era mediocre en el mejor de los casos, y francamente incompetente en el peor. Sentía vergüenza ajena al verlo.

No le gustó la primera vez que lo vio. Demasiado orgulloso de sí mismo, débil para sus estándares y completamente mimado. Cuando falló estrepitosamente la prueba del equipo 7, solo confirmó lo que ya había notado.

Decidió darle tiempo para ver si mejoraba su actitud. Su fracaso sería un golpe a su ego y orgullo. Con un poco de suerte y tiempo, tal vez mostrase alguna promesa o al menos una mejora de actitud. No podría haber estado más equivocado. En todo caso, su actitud empeoró. Vio su fracaso como culpa de Naruto y arremetió contra él.

Casi se le cae la cara de vergüenza cuando su invocador les contó sobre el incidente entre ellos. Puede que los Uchiha fuéramos orgullosos hasta el extremo, pero nunca echamos la culpa de nuestros errores a otro. Por lo general negamos el error, pero nunca culpamos a otro.

Antes de la misión en Nami, hacía una visita ocasional a Sasuke para ver si había alguna mejora. No la hubo. Después de volver de la misión, decidió observarlo un tiempo más continuo por si sus visitas fueron en sus peores momentos. No lo fueron.

Llevaba una semana observando al chico, y cada vez estaba más asqueado. Se sentía insultado de que ese mocoso portara el apellido Uchiha y usara su insignia. No era digno en ningún maldito sentido.

Sus sentimientos negativos hacia el mundo solo habían aumentado después de ese día. La esperanza de un futuro mejor se estaba desvaneciendo nuevamente. Su lado más pesimista estaba saliendo a flote. Era como ahogarse en el odio. No era un sentimiento nuevo. Ya lo había experimentado dos veces mientras estaba vivo. No por eso tendría que gustarle.

Dejó de ver a esa burla de Uchiha y se fue. Realmente no quería seguir observando esa patética vista. Era asqueroso ver cómo lo aclamaban y alababan por una actuación mediocre y cómo él se regodeaba en la atención aunque por fuera se mostrara desinteresado. La pequeña banshee de cabello rosado solo empeoraba las cosas. ¡Qué criatura tan patética y molesta!

Se movió por la aldea bajo un henge. En los raros casos en que un shinobi se fija demasiado en él usaba su sharingan para que dejara el asunto y creyera que lo que vio fue fruto de su imaginación. Era una aldea ninja después de todo, y los buenos shinobis podían notar incluso los mejores henges si se les daba el tiempo suficiente.

Tuvo que contener un bufido molesto al escuchar cierta conversación. Se había enterado hacía un par de días del nuevo estatus de su invocador como heredero del clan Senju. Era algo gracioso y deprimente que la gente creyera que Naruto era descendiente de Hashirama solo porque era un usuario de mokuton. Entendía el razonamiento, pero sabía que estaban equivocados.

Francamente, se estaba planteando muy seriamente tomar una página del libro de jugadas de su antiguo amigo. El clan Uchiha iba a terminar de una forma muy vergonzosa si ese chico Sasuke era el único que quedaba. Su obsesión por la venganza sería su perdición a una edad temprana y con él se extinguiría el clan.

El mayor problema que tenía era que no estaba seguro de si su plan funcionaría. Sí, Hashirama había dotado de mokuton a Naruto, pero no estaba claro si realmente alteró su genética de forma que fuera un Senju y pudiera transmitir dichos genes. De nada servía que le otorgase el sharingan a alguien si no podía transmitir su dojutsu a la siguiente generación.

-¿Lo has oído? - oyó que una mujer le preguntaba a otra.

-No, ¿qué pasa? - cuestionó la otra mujer curiosa.

-Al parecer el heredero Senju y la heredera Hyuga salieron en una cita anoche.

-No me digas. Menuda noticia. Mi sobrina estará tan triste. Se había interesado en el chico.

-Sí, la mía también. Fue ella quién me lo contó. Los vio anoche junto al resto de sus amigas. El joven heredero es tan tímido. Al ver a las chicas, cargó a su cita al estilo nupcial y se fue a los tejados.

-Oh, pobrecito. Tantos años solo está claro que lo afectó. Si ya decía yo que su actitud bromista era una máscara para ocultar su dolor y soledad.

Madara tuvo que volver a contener un bufido. Él había escuchado la opinión de la gente con respecto al jinchuriki cuando fue invocado y no era positiva. Era una de las cosas que más despreciaba de la humanidad, su hipocresía. Cuando era un don nadie, la mayoría lo odiaba o le era indiferente. Ahora que era un heredero de clan y el supuesto descendiente del shodaime hokage, todos lo quieren. Hipócritas.

Salió del pueblo y se adentró en el bosque. Necesitaba un momento para pensar y meditar su siguiente paso. ¿Dónde estaba Zetsu de todos modos?, ¿no se suponía que era la representación de su voluntad? Entonces, debería estar aquí. ¿Fue su muerte la causa de que no pudiera llamarlo o era algo más? Algo no encajaba.

Suspiró. Tantos problemas y preocupaciones en su cabeza. Si al menos tuviera a alguien con quien compartirlos. Hashirama había sido su amigo en su juventud, pero las cosas se agriaron. Tobirama y él nunca se llevaron bien. No conocía mucho a Mito, por lo que tampoco era una opción. Naruto era un buen chico e intentaría entender su punto de vista, pero al final no podría. Además de que estaba el plan del tsukuyomi infinito.

Suspiró. Otra vez. Envidiaba a su antiguo rival por tener a su hermano pequeño con él. Ojalá tuviera a Izuna a su lado. Su presencia lo calmaría y apreciaría su consejo. Amaba a su hermano y odiaba el destino que sufrió. Lo que más le había dolido era escuchar cómo la gente de su clan creía que le había arrancado los ojos a Izuna para obtener el eterno mangekyou sharingan.

Él era su hermano pequeño. El único hermano que le quedó. La persona que más amaba en la vida. Su muerte fue la experiencia más dolorosa que vivió. Él nunca podría haberle arrebatado los ojos. Fue Izuna quien se los sacó y se los dio. Su último regalo a su amado hermano mayor. Unos ojos cuya luz no se extinguiría por más que los usase.

Puede que en su pasado hubiera sido cruel y sádico. Nunca negaría que lo fue. Amaba y aún ama la batalla. La sangre, el dolor, es lo que diferencia a los vivos de los muertos. Pero incluso él tiene una moral y es capaz de sentir amor.

-Izuna, ojalá estuvieras aquí a mi lado - susurró al aire.

Una ráfaga de viento lo alcanzó y con él el sonido de una carcajada feliz. Frunció el ceño. Sentía que la persona que se reía se estaba riendo de su sufrimiento. Aunque sabía que era ilógico, no pudo evitar que la ira lo llenara.

Fue al origen del sonido para ver a su invocador, o un clon del mismo, hablando animadamente con Mito sobre su cita de la noche anterior.

Los celos y la envidia lo inundaron. Todos estaban felices menos él. ¿Por qué tuvo que ser Hashirama el bendecido con tener sus seres queridos a su lado?, ¿por qué no él?

Ver a la mujer Uzumaki solo hacía que le hirviera más la sangre. Ella ni siquiera fue invocada con ellos. Vino después. ¿Por qué Hashirama pudo recuperar a su esposa y él no podía recuperar a su hermano?

Se congeló al darse cuenta de la respuesta. El pelicastaño le había pedido a su invocador que la trajera de vuelta. Él podía hacer lo mismo y pedirle que trajera a Izuna.


Hola, espero que os haya gustado el capítulo. Me he dado cuenta después de que busqué lo que creía Madara que era Zetsu que no estaba reflejando muy bien al antiguo patriarca Uchiha. El Madara de mi historia se parece más al Madara de su juventud que al adulto. Eso no quiere decir que lo vaya a cambiar. Para que su personaje encaje mejor con la historia, tendrá una actitud mixta entre joven y adulto con una predominancia de su yo joven.

Comentarios a las reseñas:

deniswanheda: eso no tendría mucho sentido. Hinata tiene como afinidad fuego y rayos en el canon. Sé que en muchos fanfics ponen que tiene el elemento agua como afinidad principal, pero yo voy a ir con el canon en ese sentido.

urielhernanmolina: a riesgo de hacer spoiler, seamos realistas. Es bastante obvio que Naruto obtendrá el sharingan.

oujiswan: me alegra saber que obtuve el efecto deseado. *emoticono de sonrisa con ojos cerrados y ligero sonrojo*

Guest: lo siento, pero Naruto sí terminará con Hinata. Naruto no está realmente enamorado, le gusta y se está dando una oportunidad.

Guest (me parece que este es otro ya que el anterior comentó en el capítulo 23 y este empieza a comentar en el capítulo 3): no realmente. Tanto Hashirama como Naruto son reencarnaciones de Ashura, pero cada uno es su propia persona y Naruto es la reencarnación de Ashura, no Hashirama. Pasa lo mismo con Madara, Sasuke e Indra, pero sí es divertido la opinión de Madara de Sasuke cuando ambos son reencarnaciones de Indra. Lo siento, pero soy fan de Naruhina y lo hay en todas mis historias, no por nada mi nombre de usuario es Fanfics Naruto-Hinata. El enamoramiento de Hinata vino de su adoración del heroe después de que la salvara de los matones, luego se convirtió en admiración por su fuerza de voluntad y finalmente en un enamoramiento en toda regla.

Nini: lo siento, pero Naruto sí terminará con Hinata. Soy fan de Naruhina y lo hay en todas mis historias, no por nada mi nombre de usuario es Fanfics Naruto-Hinata. Sí, son diferentes, pero también tiene bastante cosas en común y se complementan. No sé quién es el príncipe Suko y realmente no veo a Sasuke redimiéndose. Descuida, la historia de Sasuke no va a ser igual que el canon. Lo que voy a decir a continuación es un poco spoiler, por lo que si no quieres saber, no leas. Orochimaru no va a tener ningún interés en Sasuke. Él quiere el sharingan y Sasuke no lo ha despertado. Además de que le gustan recipientes fuertes y no ve a Sasuke como uno.

Sayu: lo siento, pero Sasuke sí tomará un camino oscuro. Uno diferente al canon, pero un camino oscuro al fin y al cabo.

C.A.O.S.5J: un placer. Me gusta contestar a todos los comentarios que los lectores hacen. Gracias, me alegra que te haya gustado la cita. Y gracias por el apoyo.

jigsaw99: salvo por lo de Mizuki le engañe dos años antes, todo lo demás ocurre u ocurrirá en mi historia "Izanagi". Una graduación temprana ocurre en algunas historias que tengo pensado publicar más adelante.

: exactamente.

Guest (creo que este es otro diferente a los anteriores): gracias, me alegra que te esté gustando. Que yo sepa mi historia no está en YouTube, y no te preocupes que tengo la intención de terminar esta historia, pero llevará tiempo. No es tanto el tiempo como la longitud en la que me siento cómoda escribiendo. Siempre me aseguro de que cada capítulo tenga un mínimo de 1300 palabras. Sin embargo, si la idea que tengo para el capítulo hace que escriba más, lo dejo y el capítulo es más largo. Este capítulo por ejemplo tiene 1411 palabras. Lamento si se te hace poco.