Tayuya se tumbó en lo que se podría considerar la cama de la celda, no es que realmente fuera una cama. Una tabla de metal clavada a la pared en sentido horizontal no era una cama. Tampoco era cómoda, pero era lo que había.
Sabía que estaba jodida. Era una antigua subordinada de Orochimaru en una aldea que lo odiaba a muerte. En circunstancias normales le sacarían la información de una forma u otra y luego la ejecutarían. Por primera vez en toda su vida, agradeció que su situación no fuera normal.
Tenía un secreto. Uno que guardó muy celosamente toda su vida. Su madre, mientras estaba viva, le había recalcado una y otra vez el valor de ocultar su herencia paterna. Podría metarla en muchos problemas si los demás lo sabían. Era por eso que se lo ocultó a su antiguo maestro, más aún con su fascinación por las líneas de sangre. Bastante malo era que supiera sobre su herencia materna, razón por la cual se la llevó en primer lugar. En ese momento, tal vez fuera su salvación.
La puerta se abrió con un chirrido. Debatió ociosamente en su cabeza si el chirrido era porque la puerta estaba mal engrasada u otra forma de intimidación.
La figura que entró no era en absoluto intimidante. Todo lo contrario. Era un chico un poco más joven que ella de pelo rubio, ojos azules y tres marcas de bigotes en cada mejilla.
Parpadeó un poco sorprendida. Lo reconoció de las imágenes que tenía el sannin serpiente sobre figuras importantes y/o peligrosas de Konoha. Era el jinchuriki del kyubi, Naruto Uzumaki. Fue sorprendente verlo.
-Oye mocoso, pedí hablar con el hokage, no con un genin verde - habló con descaro, aunque realmente tenía curiosidad de por qué estaba ahí.
El adolescente levantó una ceja ante su tono, pero no dijo nada al respecto.
-Oh, y yo que pensé que Orochi teme le diría al menos a su guardia de élite sobre mí. Me siento un poco insultado - dijo sarcásticamente invocador de sapos.
-¿Eh? - preguntó algo confundida la pelirrosa.
-Soy Naruto Uzumaki, el godaime hokage - se presentó secamente.
La ojimarrón parpadeó un poco. No estaba segura de si su suerte era buena o mala en este caso.
Encogiéndose de hombros, fue directa al grano. Nunca le gustó dar vueltas al asunto.
-Lo que sea - comentó como si nada, haciendo que el rubio volviera a levantar una ceja por su actitud - No te llamé para charla basura. Lo hice para apelar a la condición de refugiada.
-Oh, ¿y bajo qué, exactamente, quieres apelar a la condición de refugiada? - cuestionó bastante burlón.
Daba igual qué información tuviera para dar, eso no sería suficiente para que aceptara como refugiada a una antigua subordinada del bastardo serpiente.
-Mi padre era un Uzumaki, lo que me convierte en medio Uzumaki. Quiero apelar a la antigua alianza para lograr la condición de refugiada.
Eso hizo que se congelara. No podía ser verdad.
-Estás mintiendo - le dijo con veneno.
Se negaba completamente a creer que alguien de su clan serviría a ese monstruo voluntariamente.
-No lo hago. Puedes hacerme una prueba de sangre si lo deseas - se defendió.
-Orochimaru no te hubiera dejado salir si fueras Uzumaki. Lo más probable es que estuvieras en uno de sus laboratorio - argumentó el rubio.
-Eso sería cierto, si él supiera que era Uzumaki. Nunca se lo dije, genio. No quería ser uno de sus experimentos, muchas gracias - se cruzó de brazos.
Eso envió la mente del ojiazul en un frenesí. Por un lado, no quería creerle debido a las implicaciones. Por el otro, aún anhelaba una familia. Sí, tenía a sus esposas, pero no era lo mismo.
-Cuéntamelo todo, y no me refiero a la información de Orochimaru. Quiero saber todo lo que pasó antes de que trabajaras para él - le ordenó.
Ella podía entender perfectamente el por qué de esa petición y por tanto no replicó al respecto.
-Mi madre y yo éramos originarias de un pequeño clan en el País del Agua. No de Kirigakure, sino de una de sus islas periféricas. A mi madre siempre le emocionó viajar. Fue durante uno de sus viajes que conoció a mi padre. Ella no sabía que era un Uzumaki al principio. Aunque irónicamente fue su cabello rojizo lo que la llamó la atención. Ella tenía el cabello de un rosa oscuro. Mi cabello es una mezcla de ambos, o al menos eso me dijo - no pudo evitar que se le escapase un tono melancólico en esa parte, pero rápidamente se recuperó - En fin, se conocieron y se gustaron. Obviamente tuvieron sexo y yo fui el fruto de uno de sus encuentros. Su plan era viajar un poco más antes de volver con el clan de mi madre y formar una familia. Ese plan se vio truncado cuando un grupo de bandidos dirigidos por algunos shinobis renegados atacaron el pueblo donde se estaban quedando. Mi padre fue herido de muerte y no había sanadores en el lugar por lo que murió. Mi madre volvió con su clan y poco después supo que estaba embarazada. Ella me crió sola y siempre me recalcó que nunca debía contar que mi padre era un Uzumaki o mucha gente iría tras de mí. Callé y aquí estoy.
-Eso no responde cómo terminaste con Orochimaru - comentó el jinchuriki.
-¿Cómo esa serpiente obtiene a la mayoría de sus secuaces más interesantes? Hay 3 respuestas: prometiendo poder, rescatandolos o secuestrándolos. Soy una mezcla de lo segundo y lo tercero.
-Explica.
-¿Sabes de las purgas de sangre de Kiri? - le preguntó, a lo cual Naruto asintió - El clan de mi madre, y también mío supongo, tenía un kekkei genkai. ¿Los Doki que dirijo con mi flauta? Son criaturas que creé con mi línea de sangre. Esencialmente en eso constituye nuestro linaje. Crear criaturas que más tarde podemos controlar mediante el uso de un instrumento. Inicialmente nos salvamos de la purga debido a que no formábamos parte de la aldea de la niebla. Sin embargo, fue solo cuestión de tiempo. Nos atacaron. La mayoría de adultos se quedaron atrás para hacer frente al enemigo. Un pequeño grupo de mujeres y los niños fuimos evacuados a toda prisa. En algún punto me separé de mi madre. Sinceramente, ni siquiera estoy segura de si ella formaba parte de las mujeres que escaparon o de las que se quedaron a luchar. En medio de nuestra huída, apareció otro grupo de shinobis de Kiri. No querían supervivientes. Orochimaru y sus hombres llegaron poco después. Mataron a los pocos shinobis que quedaban y nos llevaron a los que aún estábamos vivos.
-Supongo que de esos supervivientes unos fueron para experimentos y otros a sus fuerzas shinobi - comentó el godaime.
-No te equivocas - confirmó la ojimarrón.
Suspiró. ¿Por qué nada en su vida podía ser fácil?
-Realizaremos una prueba de sangre para confirmar que eres, de hecho, Uzumaki. Si las pruebas dan positivas, se te concederá el estatus de refugiada a cambio de la información que tienes sobre Orochimaru. Debido a tu asociación anterior, estarás bajo vigilancia constante durante un período de tiempo no determinado. Si para el final del período no muestras signos de lealtad a tu antiguo pueblo, se te permitirá realizar una prueba para poder unirte a nuestras fuerzas shinobis. Te será asignado un departamento para que vivas y un estipendio para los primeros tres meses de estancia. Se espera que para el final de esos tres meses hayas encontrado un trabajo para que puedas sostener tu economía por tu cuenta. Si para entonces no tienes un trabajo, ve a la oficina de asuntos civiles y presenta tus papeles de refugiada. Están obligados a ayudarte a encontrar un trabajo debido a tu estatus. Si tienes algún problema al respecto, ven a mi oficina - con eso dicho, se retiró de la celda.
Avisó a uno de los trabajadores de T&I para que le hicieran una prueba de sangre para confirmar si era una Uzumaki. Una vez supo que todo estaba arreglado, salió del edificio.
Normalmente volvería a su oficina para no dejar todo el papeleo a sus clones. Si estaba particularmente cansado, volvería a casa y esperaría que alguna de sus esposas estuviera allí o que una volviera para pasar tiempo con ella o ellas.
Con el posible descubrimiento que había hecho, necesitaba estar solo para pensar en los últimos acontecimientos, por lo que subió al monumento hokage. De pequeño ese había sido su lugar cuando quería estar solo. Habían pasado bastantes meses desde que fue allí. En ese momento, sobre la cabeza de su padre, se permitió relajarse y mirar la aldea que ahora lideraba.
Hola, espero que os haya gustado el capítulo. Dado que en el canon Tayuya no tenía una historia de fondo y nunca quedó claro qué eran esos Doki, me he tomado la libertad de inventarme su historia. Espero que os haya gustado. También quiero mencionar que la relación entre Naruto y Tayuya va a ser lenta. No esperen que esos dos anden juntos por un tiempo.
Comentarios a las reseñas:
loki125: sí, Yakumo va la primera actualmente.
carlos29: gracias, me alegra que te esté gustando. Bueno, cada historia que escribo tiene un contexto diferente. Salvo por x puntos, no pueden coincidir sin que salga completamente de contexto.
darkness of enigma: gracias, me alegra que te haya gustado. Me alegra saber que lo de Sakura quedó bien. Jeje, gracias, siempre se puede contar con Gai para castigar a Kakashi de la peor manera. Chakra es de meditación, y aunque tiene bastantes similitudes con la red de chacra de Naruto, son cosas diferentes. Bueno, ya has leído cómo se descubre que es Uzumaki. En cuanto a Karin, ella será descubierta en una de las bases, pero ellas realmente no se conocen, al menos en mi historia. Oh, descuida, termine o no Shizuka en el harem, Jiraiya recibirá una paliza por todo el asunto. No lo sé, tengo planeado algo para Hinata y Temari, pero no sé si le daré algo a Naruto o al resto. Shizune tenía una relación de hermanos con Naruto debido a su conexión con Tsunade, la cual no hay en esta historia. Lo siento, pero no. Salvo la votación para decidir la chica de Konoha y si Shizuka está en el harem, no hay más chicas en juego. Saludos igualmente.
dvdm1206: gracias, me alegra que te esté gustando la historia. Espero que también te haya gustado este capítulo.
: creo que Kakashi habría sufrido un colapso mental severo si también le hubiera obligado a vestirse de spadex verde.
Votaciones:
1º. Chica de Konoha:
Yakumo Kurama: 7
Yugao Uzuki: 5
Hana Inuzuka: 3
Kurenai Yuhi: 1
Tenten: 0
Shizune: 0
Shiho: 0
Tsubuki: 0
2º. Shizuka:
Sí: 4
No: 3