Naruto, disimuladamente, soltó un suspiro de alivio al ver las puertas de la aldea. La operación de asalto y rescate había durado una semana en total. Fue una sorpresa en sí mismo que lo dejaran participar. Aunque probablemente fue porque la chica era de su clan.

La operación salió bien, mejor que bien. La base apenas estaba protegida y los shinobi del sonido eran pocos y bastante débiles. Lograron capturar algunos para obtener información junto a los científicos que allí había. Todo lo que había en los laboratorios fue etiquetado y almacenado para un estudio posterior por parte del departamento de I&D. Y, por supuesto, lograron salvar a la Uzumaki.

En verdad, era por ella que se alegraba tanto de volver. Karin no se había despegado de él en todo el tiempo que se habían conocido. Algunos de sus shinobis se habían burlado de él por esto mismo.

Había intentado, en múltiples ocasiones, que ella se alejara de él. Fracasó cada vez. Ni siquiera contándole sobre sus esposas y prometidas logró que lo dejara tranquilo. Al parecer ella estaba al tanto de las costumbres de su clan y no le importó.

-Siempre quise una familia grande - fue su respuesta.

No es que no le agradara la pelirroja. Era bastante amigable y dulce, cuando no la cabreaban. Tener un temperamento explosivo era algo común entre las mujeres Uzumaki. Y también debía serlo con las mujeres que solo tenían sangre Uzumaki, *tos* Tsunade *tos*.

En fin, como estaba diciendo, a él le agradaba la ojiroja, pero no le interesaba tener otra esposa, menos cuando la última estaba poniendo toda su casa patas arriba. También estaba el hecho de que Hinata estaba mostrando un lado de sí misma que nunca había visto y lo desconcertaba enormemente.

Después de que todos se registraran en las puertas, dictó algunas órdenes a un par de sus shinobis para que dejaran los pergaminos de prisioneros en T&I y los pergaminos de almacenamiento en I&D.

Quiso ir a su despacho para revisar los informes que habían hecho sus hombres antes de programar una reunión del consejo, pero cierta chica colgando de su brazo hizo que cambiara de planes. Primero la llevaría a su casa. Luego le presentaría a sus esposas. Y finalmente se escabulliría cuando estuviera distraída para poder hacer lo que tenía pensado. También tendría que avisar a la seguridad de la torre hokage para que no la dejara pasar si decidía perseguirlo con su ojo de Kagura.

-Ya estoy en casa - anunció al abrir la puerta.

-Naruto kun - escuchó una voz femenina muy familiar.

La antigua heredera Hyuga había corrido escaleras abajo al oír la voz de su marido.

-No sabes cuánto te he…¿Quién es esa?

-Hinata chan, esta es Karin. Karin, esta es Hinata chan, mi primera esposa.

-Mucho gusto en conocerte. Naruto kun me ha hablado mucho de ti - le dijo con una sonrisa.

-¿Naruto kun? - no pudo evitar pensar la ojiperla.

-¿Hay alguien más en casa o estás sola? - le preguntó el rubio.

Eso la sacó de sus pensamientos.

-Fu está en el jardín de atrás. Anko san está trabajando en T&I y Temari está entrenando con el equipo 10.

-¿Y Asuka?

-Se fue a cazar hace un rato. Probablemente vuelva pronto con alguna presa. ¿Por?.

-Me gustaría mandarla a una misión de exploración. Si te parece bien, por supuesto.

-No tengo ningún problema. Y estoy bastante segura de que ella lo apreciará.

-Genial. Karin, ¿puedes ir a ver a Fu chan mientras hablo con Hinata chan?, estoy seguro de que Fu chan estará encantada de conocerte.

-Esa es una apuesta fácil. Fu siempre está dispuesta a hacer nuevos amigos - afirmó la pelinegra con una sonrisa.

La pelirroja hizo un pequeño puchero ante la idea de dejar el lado del ojiazul, pero asintió y fue a buscar a la otra chica.

-Supongo que ella es la miembro de tu clan - comentó la genin una vez la ojiroja se alejó.

-Así es - suspiró - No te puedes hacer una idea de lo pegajosa que es. Me recuerda bastante a Fu chan. En más de un sentido - volvió a suspirar.

-Déjame adivinar. Ella quiere unirse a la familia - inquirió con una expresión inexpresiva.

-No te equivocas - otro suspiro - Como dije, muy pegajosa.

-Está bien - esa vez fue ella quién suspiró - Ya veremos cómo resulta todo esto. ¿Tienes algo que hacer ahora?

-En realidad sí. Tengo varias cosas que hacer en la oficina y tengo que convocar una reunión para informar al consejo sobre los nuevos acontecimientos.

-Solo, por favor, que no te enreden con otro matrimonio concertado - le pidió con exasperación.

-Haré lo que pueda - le prometió con una sonrisa tensa.

La usuaria de byakugan volvió a suspirar.

El jinchuriki le dió una mirada de que compartía el sentimiento. Luego le dió un beso en los labios y se despidió. Debía crear distancia antes de que la Uzumaki le diera por perseguirlo. La veía muy capaz de ello.

Pocos minutos después, se encontraba "a salvo" en su oficina. Dejó escapar un suspiro mientras se dejaba caer en su silla. Sacó los informes de un pergamino de almacenamiento que tenía en su persona y les echó un vistazo. Había leído la mayoría en su viaje de vuelta, pero quería leerlos todos y hacer un repaso antes de reunir al consejo.

Una vez estuvo satisfecho, mandó el aviso para que se reunieran. Al parecer la mayoría ya estaba al tanto de su vuelta y estaban esperando la convocatoria, por lo que en poco tiempo estaban reunidos.

El godaime informó al consejo de lo acontecido en la misión, incluidos los prisioneros y los materiales reunidos. Todos coincidieron en que los prisioneros podrían tardar un poco en hablar y que los miembros de I&D iban a estar ocupados por un tiempo.

-Parece que la misión fue un éxito completo - comentó Homura con satisfacción.

-Fue - afirmó Naruto con un asentimiento.

-¿Hay algo más de lo que debamos hablar?

-Una cosa - respondió el ojiazul, ganándose la atención de todos - Como podréis imaginar, Karin y yo hemos estado hablando y conociéndonos mejor en el viaje de vuelta.

-Por lo que he oído, ella no se despegaba de tu lado - comentó divertido Asuma.

-Sí - suspiró - El caso es que he descubierto varias cosas de su vida en Kusa que no me han gustado nada. Y tengo la intención de hacerles pagar por lo que le hicieron a los miembros de mi clan.

-¿Estás pensando en declararles la guerra? - preguntó sorprendido Shikaku.

-Depende de lo que consideres una guerra - dijo con una sonrisa maliciosa que hizo que a más de uno le recorriera un escalofrío.

-¿Qué estás tramando, cachorro? - cuestionó sin poder evitarlo Tsume.

-Oh. Solo poniendo en práctica mi conocimiento en bromas en el campo político y económico - soltó una risita oscura.

Eso inevitablemente hizo que sonara las alarmas de todas las personas de la habitación.

-¿Exactamente qué estás pensando? - interrogó Danzo sin mostrar su interés.

-Gracias a las lecciones que me dió Hiashi san antes de mi nombramiento, descubrí el funcionamiento económico interno de la aldea, el cual se puede extrapolar al resto de aldeas. Básicamente, la aldea mantiene su economía gracias a tres fuentes: la subvención del daimio, parte del dinero de los impuestos que pagan los civiles que viven en la aldea, y las misiones. El estado anterior de Suna mostró claramente lo que pasa cuando la subvención del daimio es escasa y tampoco obtienen muchas misiones. Lo que pretendo hacer es arruinar la imagen de Kusa. Unos rumores por aquí. Unos rumores por allá. Un par de misiones importantes que salgan mal. Una vez la aldea sea considerada inadecuada, las personas mandarán sus misiones a otras más confiables. En ese momento el daimio se presentará a dos posibles decisiones: apoyar a la aldea hasta que se recupere, o liquidarla. Si lo hacemos bien, optará por la segunda y esa aldea será historia.

Nadie en la habitación dijo una sola palabra. Su plan era sólido. Era escalofriante, pero era cierto. Habría que pulir los detalles, pero el plan parecía viable.

-¿Has pensado cómo empezar a difundir los rumores? - preguntó el Shimura.

-Hablaré con Jiraiya sensei para ver si su red espía puede ir corriendo el rumor. Si al final resulta demasiado arriesgado, mandaré clones bajo henge al trabajo. También tengo pensado mandar a Asuka, el experimento aviar de Orochimaru, a recopilar información sobre la aldea. No estaría de más que algunos de los rumores fueran reales.

La gente asintió de forma mecánica. Todos podían coincidir en una cosa. Naruto Uzumaki en verdad era el bromista del infierno y sus venganzas no eran bonitas.


Hola, espero que os haya gustado el capítulo. Lamento el pequeño retraso. Estuve barajando varias ideas para este capítulo y todas, menos esta obviamente, no me terminaban de gustar por una razón u otra o eran muy cortas. En fin, en lo que respecta al capítulo en sí, ¿soy la única que realmente ve a Naruto usando su conocimiento como antiguo bromista más lo nuevo que ha aprendido para vengarse de Kusa?

Comentarios a las reseñas:

AEVRS: gracias, me alegra que te haya gustado. Creo que el consejo no tendrá que hacer nada con lo motivada que está Karin. Tengo la intención de que su cumpleaños sea dentro de poco.

darkness of enigma: ¡Sí! Jajaja. Lo siento, pero eso es de una película que no he visto, por lo que no. Jejeje, sí, Kusa va a creo que tenga tiempo para eso con lo que la viene, jijiji.

Alex Hatake: gracias a ti por los ánios.

GamerBlood: Jajaja, me hizo gracia tu primer comentario. Bueno, siempre pensé que Konoha, para ser una aldea militar, no enseñaban prácticamente nada útil para el campo en la academia. Lo de torturar a los shinobi, un hokage debe mantener a sus hombres a raya, ¿qué mejor forma que con Gai? A mí no se me ocurre ninguna. Sí, en lo de las alianzas tengo que estar de acuerdo. ¿Qué te hace creer que iré contra Kumo? Solo voy contra Kusa. Gracias, me alegra que te guste. Pues sí, jejeje. Yo no me meto en la votación.

Votaciones:

1º. Chica de Konoha:

Yakumo Kurama: 12

Yugao Uzuki: 13

Hana Inuzuka: 6

Kurenai Yuhi: 4

Tenten: 1

Shizune: 1

Shiho: 0

Tsubuki: 0

2º. Shizuka:

Sí: 9

No: 4