"Yo", dijo con calma.
Hinata pensó que finalmente enloqueció, pero luego de unos segundos él nuevamente abrió la boca.
"Tendría sentido para nosotros mantener algo así en secreto, ya sabes, dos hijos de familias importantes, la dulce heredera Hyuga con el reformado Uchiha", explicó.
Ella pensó que Sasuke lucía un poco tenso, lo vió terminar el resto de su trago y acomodarse en el asiento. "Hasta sería beneficioso para los dos, tú mantienes tu pisoteado orgullo y a mi me ven públicamente con una dama de sociedad más que adecuada… así finalmente mi padre me dejará en paz y mi madre dejará de presentarme estúpidas candidatas para casarme" su tono de voz sonó bajo y bastante irritado.
Supo por los medios que hace tiempo atrás Fugaku Uchiha expulsó de la familia a su hijo menor, dejando como único heredero a Itachi. Al parecer los problemas de conducta de Sasuke y los líos en los cuales se metía fueron un gran problema para los Uchiha y el renombre de la empresa, el patriarca no vio más opción que actuar de manera drástica para cambiar aquello.
Sasuke solía ser una persona que frecuentaba clubes nocturnos todos los días, salía con muchas mujeres, disfrutaba demasiado de las sustancias y las malas compañías.
Luego de aquel suceso, todo se enfrió lentamente. Sasuke volvió de a poco para hacerse cargo de asuntos sin tanta importancia en la empresa, hasta que su padre le asignó un porcentaje de la organización benéfica donde ambos trabajan actualmente. Al parecer, fue un tipo de castigo que él se hiciera cargo de todo aquello, Fugaku debía comprobar si era merecedor de volver a portar el apellido Uchiha en toda su expresión.
Ella intuía que aquel circo fue ideado todo por el patriarca Uchiha, solamente para poner en orden la vida de Sasuke y darle un escarmiento. Ella sabe que en familias como la suya o los Uchiha, clanes tan antiguos e importantes, no dejaban de lado a sus integrantes. Claramente no era de público conocimiento, pero todo fue por el bien del moreno. Y Hinata pensó que lo lograron, al ver a Sasuke tan comprometido con sus deberes, siendo una persona respetable y responsable.
Ella sonrió apenas.
Ahora, entendió más la situación y el por qué del trato propuesto por él. Ambos saldrían beneficiados. Inevitablemente, su pecho se sintió más ligero al saber que no se estaría aprovechando de nadie, sino que ambos sacarían ventajas.
Pensativa, giró su rostro y nuevamente vio su reflejo frente a ella. El gran espejo de la barra le ofrecía una imagen de sí misma, cansada y aburrida. Sosa.
Hizo una mueca contrariada. Se veía patética.
No podía continuar con aquello pero tampoco podía echarse para atrás, no cuando había ido tan lejos con su tonta mentira.
Suspiró derrotada.
" B-bueno…" murmuró, todavía insegura. " S-si tú estás realmente dispuesto, y-yo… podría…" se apartó el pelo de la cara con vergüenza. "Supongo que no estaría mal", finalizó.
El asintió y se giró completamente para mirarla de frente. "No lo hubiese sugerido si no quisiera Hyu-ga" - dioses, ¿por qué murmuraba su apellido de esa forma tan maliciosa y depravada?
Hinata estiró su temblorosa mano hacia él. " B-bien, trato hecho", dijo.
Él levantó la comisura de su boca en un intento de sonrisa y estiró su brazo buscando el de ella.
Se sorprendió al tocarlo, era un toque cálido, ella había esperado que se sintiera frío y estéril, hasta incómodo. Estrecharon sus manos como si estuvieran cerrando un contrato importante.
Ella se quedó mirándolo fijamente, sus ojos recorrieron el rostro completo de Sasuke y se detuvieron unos segundos en su pequeña sonrisa arrogante.
"¿Analizando tu premio Hyuga?"
Se sonrojó furiosamente y pensó que se desmayaría ahí mismo, rápidamente soltó la mano del joven como si le quemara.
"S-solo curiosidad", respondió avergonzada.
" Bueno, pronto la saciarás" dijo él, volviendo a su posición inicial de frente a la barra.
Luego de un breve silencio calmo, Hinata suspiró cansada.
"Ve a dormir Hyuga, yo me encargo por hoy" - dijo el moreno, mientras llamaba nuevamente al cantinero.
"Oh no, las donaciones y los-"
"Vete yo me ocupo, mañana iré a tu casa para cerrar nuestro pequeño trato… pero…" un silencio tenso los envolvió.
La morena se acomodó nerviosa en su asiento.
"¿Estarás dispuesta a besarme y fingir que me amas sin desmayarte en el acto?" habló con un tono tan bajo que Hinata pensó que le vibraba el cuerpo. " Si vamos a hacer esto, debemos hacerlo bien. "Piensa…" él dudó por un segundo pero continuó hablando. "Piénsalo bien, si estás dispuesta a sacrificar la imagen puritana que tienes ante los demás". Sus ojos brillaron peligrosamente. " Todos saben de mi reputación, así que yo no tengo nada que perder, pero tú…"
Oh, claro que sabían de su reputación de mujeriego. Ella también sabía.
Sasuke era uno de los hombres más codiciados entre las féminas y él, no lo desaprovechó jamás. El joven tenía una fama hecha y derecha ante los medios.
" Cuando nuestra relación salga a la luz no creo que salgas intacta, Hi na ta"
Sí que sabía. Probablemente los Hyuga se escandalizarían tanto por un noviazgo entre ambos, pero supuso que si lo hacían durar unas semanas no sería un daño para nadie.
También, ella podía sentir el peligro que él representaba, pero ya no podía dar marcha atrás y por una vez en su vida quiso ser egoísta, hacer algo sólo por ella, algo que la hiciera sentir bien.
" No me retractaré", dijo firme.
" Bien, ve"
Se levantó de su taburete y dio un paso más cerca de él "¿S-seguro?"
" Mira Hyuga, aquella fue mi manera cortés de decir que te vayas porque no pienso arriesgarme y verte pedir donaciones borracha. Así que sí, ve"- le dió la espalda.
" Correcto, entonces…" agarró su cartera y se arregló el vestido que sin notarlo se había subido unos pocos centímetros en sus muslos. Su cabeza se revolvió desesperadamente en busca de alguna respuesta, ¿qué diablos se decía cuando debes despedirte de tu compañero quién también es tu novio falso? " Y-yo… ehm gracias. Puedes pasar por la tarde, aquí está mi dirección", le dejó un papel en la barra con algo escrito. Sasuke la observó de reojo y asintió.
Lo último que vió Hinata al comenzar su camino a la salida, fue una pequeña sonrisa de costado en el rostro del moreno.
Ah, estaba realmente en problemas. Diablos.
Al otro día, Hinata estaba con la nariz enterrada en su libro favorito, una novela de amor fogoso y drama que la tenía con los pelos de punta.
Cincuenta sombras de Grey la había atrapado.
Para ser sincera, se sentía una completa depravada leyendo aquello pero era su pequeño placer culposo. Ya eran las seis de la tarde y todavía sentía los efectos de la borrachera nocturna anterior, tenía el pelo un poco revuelto, alzado en un moño y vestía un simple vestido corto y de color crema. Se encontraba descalza en su silla colgante en medio de la sala, su departamento era bonito y lleno de luz.
Ella lo amaba. Sentía mucha paz en su pequeño lugar.
La peluda alfombra rozó sus pies cuando se sobresaltó al escuchar el timbre, se paró, apoyó su libro en la mesita y comenzó a caminar hacia la puerta. Al ver por la mirilla se topó con la cara aburrida de Sasuke, parecía tranquilo. Ella se paralizó por un instante, pero respiró y sacó las trabas para abrir la puerta, al instante los ojos del Uchiha la encontraron y se quedaron quietos uno frente al otro.
" ¿Me dejarás pasar Hyuga o me teletransporto dentro?" su tono de burla la hizo entrecerrar los ojos. Se hizo a un lado y él se adentró como si fuese su propia casa. Lo vió observar el lugar con interés, no era grande pero lo suficientemente amplio para ella. Lo notó recorrer el espacio por completo y su mirada se detuvo en el libro sobre la mesita. Sus mejillas se encendieron con bochorno y corrió a recogerlo, escuchó la risa ahogada de Sasuke.
Ay no, sólo eso le faltaba. Que el Uchiha la tuviera como una degenerada.
"A-aAh yo-… bueno olvidé que vendría" - susurró muerta de vergüenza, Sasuke la miró divertido.
Antes de seguir caminando, se sacó los zapatos quedando en calcetines blancos. Hinata agradeció internamente aquel detalle, luego sería difícil quitar el polvo de su peluda alfombra.
" ¿Ya no me tuteas Hyuga? Anoche parecías hacerlo sin problemas" - caminó adentrándose aún más.
" Oh, bueno.. ehm" él rodó sus ojos al escucharla titubear y se dirigió hacia el pequeño juego de sofás en la sala, miró con interés la hamaca colgante.
" Bueno ¿tenemos planes para el viernes verdad?"
Hinata asintió mientras buscaba algo en el cajón de la mesita donde estaba su libro, revolvió un poco y luego sacó un pequeño anotador lila.
" D-deberíamos anotar algunas co-cosas y revisarlas", él la escaneó de arriba abajo con una mirada de incredulidad.
" ¿Vas a jodidamente anotar un plan para que luego lo memoricemos?"
"Si". Él la miró todavía más confundido. " Y-yo pensé en una historia y ya la tengo memorizada así que esto es p-para ti", le extendió el cuaderno con la mano temblorosa.
" ¿Me estás dando tarea Hyuga?" él levantó una ceja pero tomó el cuaderno de sus manos, la rozó accidentalmente y ambos se miraron. " Ya tengo bastante contigo y tus contratos excesivamente detallados en la empresa", se quejó abriendo el anotador.
"Necesitamos aclarar nuestra historia… no podemos simplemente decir cosas distintas"
" No es difícil aclarar eso" respondió poniendo los ojos en blanco. Resopló, mientras miraba el cuaderno.
"¿Hm?" Hinata se sentó en el sillón frente a él cruzada de brazos. "¿cómo lo harías tú?"
"Inventando a medida que pregunten" respondió con aburrimiento.
"Y…¿si nos preguntan cómo nos conocimos?"
"Uno responde y el otro le sigue la corriente. No es difícil, además, seamos sinceros, probablemente responda yo las estúpidas preguntas" él notó las cejas levantadas de la chica. " Me refiero a que estarás tan nerviosa que yo tendré que mentir y salvar nuestro lindo noviazgo Hyuga". Él le lanzó una sonrisa maliciosa y ella sintió su piel erizada.
" P-Pero qué pasa si nos preguntan por s-separado" dijo testaruda.
"Probablemente tu respuesta lógica sería que nos conocimos en los eventos de caridad" Hinata se sonrojó al saber que eso fue lo que escribió en el cuaderno, apretó aún más los brazos en su pecho.
Abrió el libro y comenzó a leer las primeras frases.
Pasando la página levantó la cabeza para mirarla y se rió. " ¿Reglas?" - preguntó. " ¿Qué es esto?… Regla número uno: nada de comentar nuestra vida sexual. Regla número dos: no provocar a Naruto" él la miró entre ofendido y lastimado. "Vamos Hyuga, ¿cómo pretendes que aguante todo el fin de semana?" dijo dramáticamente.
Hinata no podía ignorar la picardía en sus ojos. "D-debemos convivir e-en paz" respondió cerrando la conversación.
Él ignoró su respuesta. " Ves, habría respondido que en las reuniones de caridad también"
Ella apretó nuevamente sus brazos inquieta. Se mordió el labio. " Pero si lo descubren-"
"No lo harán Hinata" la interrumpió con diversión y maldad brillando en su rostro.
Ah dios ¿debía decir su nombre de esa forma? Un escalofrío recorrió su cuerpo entero, eso no era bueno.
" Solo debemos decir la verdad sobre nosotros añadiendo tintes románticos."
"Bueno entonces… yo…"- de repente se sintió agotada, dejaría pasar un poco de tiempo para comenzar a cerrar detalles de su mentira. Se sintió nuevamente una tonta por estar envuelta en semejante estupidez. Ella titubeó y comenzó a jugar con sus dedos inquieta.
"¿Qué es Hyuga?"
"Bueno… yo pensé q-que" dioses, era agotante su nerviosismo. " Creo que debería de-decirle a Naruto sobre nosotros… ya sabes, para que no sea un completo desastre"
Él arrugó la frente y sus ojos parecían retraídos. "Si tú lo crees"
Estaba por pedirle nuevamente que tomara la bendita carpeta con información y se la llevara pero el sonido del timbre la hizo saltar en su lugar sorprendiéndola. Hinata se paró y camino a la puerta dejando a Sasuke en el living.
Miró por la puerta extrañada, no esperaba visitas.
Se quedó tiesa al ver el rostro de Naruto detrás, esperando que ella le abriera.
Se dió vuelta histérica para mirar a Sasuke y pedirle que se ocultara pero al girarse sus pies rozaron la puerta generando un sonido que rápidamente fue captado por el Uzumaki.
" Oye ¿Hinata?" murmuró el rubio. " ¿Estás ahí?"
Ay no, dioses. Miró con pánico a Sasuke, quien a su vez parecía concentrado observando el maldito cuaderno. ¡Oh, ahora sí se veía dispuesto a leerlo, maldito Uchiha!
Nuevamente sonaron unos toques tranquilos en la puerta y Hinata ya no tuvo opción, llevó la mano hacia las trabas y comenzó a rotar la cerradura para abrir. El rostro de Naruto la recibió con una sonrisa y ella apenas iba a preguntarle qué precisaba cuando el rubio pasó de largo directamente al interior del departamento.
El Uzumaki parecía a punto de preguntar algo pero sus ojos se clavaron en las zapatillas de hombre pulcramente acomodadas en la entrada detrás de ella. Frunció el ceño y se giró chocando con la imagen de un Sasuke Uchiha descalzo y vistiendo ropa informal, el moreno tenía el libro en la mano y los miraba estoicamente.
Una arruga apareció en la frente de Naruto.
Qué inoportuno, pensó Hinata.
Completamente ansiosa, respiró hondo. Bueno, si quería informar a Naruto de su supuesto noviazgo, este era el momento.
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Holii, como están? Aquí subo el segundo capítulo. Dos cosas para agregar. No, no haré cambios en cuanto a la idea o la trama del fic, solamente quiero corregir los capítulos con errores de palabras o que tal vez no se entendía la redacción del todo. Y segundo, alguien tiene idea de cómo borrar un comentario? Recibí un review asqueroso que involucra la difusión de pornografia ilegal, he visto que la mayoría de fics actualizados recientemente tienen aquel comentario desagradable, tal vez es un bot. Así que, si saben cómo denunciar un review o eliminarlo agradezco me informen como.
Muchas gracias por leer y espero sus opiniones sobre el capítulo!!! Abrazos xoxo
