Y el nuevo capítulo está sorprendentemente listo antes de lo que esperaba, en serio, no había planeado este capítulo como había hecho con los anteriores, eran más una idea vaga en lugar de escenas que había imaginado con anterioridad, pero quería sacar este capítulo pronto, ahora, ya que ya hice este, creo que podría sacar el siguiente un poco más rápido, o al menos en ese ya tengo una idea de cómo proseguir.

Y ahora mi parte favorita de cualquier historia que haga, los reviews;

Zombie XD; Igual que la vez anterior, responderé tu mensaje del capítulo pasado que comentaste cuando ya estaba publicando este; Sobre la apuesta entre Tsunade y Naruto, no creo que sería uno de los caminos, pero podría si ser un jutsu, en realidad esto me da ideas, ideas que tendré que formular en los próximos capítulos, pero me servirá. Y no, tengo pensado que la relación entre Tsunade y Naruto sea diferente, pero es algo que tengo planeado y que pienso tocar en su momento, por lo que de momento no puedo decir mucho de esa relación. No niego que pueda usar a Shizune para esto, simplemente nunca lo había pensado, por lo mismo no lo había considerado.

Y estás en lo correcto, Shirou se quedó como eso, el personaje que entregó espadas y que sí acaso será mencionado en algún momento por Tenten (Puesto que aquí son hermanos) en charlas sin sentido, hizo aparición por necesidad de un personaje que cumpliera su función y que necesitaba un nombre, pero esto se mantendrá para personajes irrelevantes que no afectan directamente la trama.

Sobre las criaturas de invocación tengo pensado tratarlo en el mismo arco que trataré lo de Tsunade y lo del deseo de Naruto sobre ser Hokage, en general creo que será un arco en el que deberé tratar muchas cosas, sí bien los Akatsuki reaccionarán ante el rinnegan no tendrán su escena pronto, será más cuando lleguemos a su propio arco, en general toda esa cadena de mando será abordada en algún momento, en su respectivo momento. Y no te culpo por no comentar en teléfono, a mí me ocurre lo mismo.

Quizás Naruto le preste más atención al rap de Bee cuando la situación no sea peligrosa, y ya tengo algo planeado sobre las posibles relaciones de Karin y Tayuya con Naruto, aun me falta detallar. Suponiendo que sí fuiste tu quien comentó sobre el dialogo de Neji me parece que fue un error de carga de la página porque al entrar a mi me sale completo, pero gracias por hacérmelo saber, porque ya me he topado que se duplican partes. Si, en general incluso cuando Naruto acepta que el rinnegan es suyo no puede evitar preguntarse que tantas interacciones cambiarían o cambiaron a si no los hubiera tenido, sí, Hana era, después de Ayame, la más normal de la lista. Realmente no tenía mucho más pensado aparte de las que mencioné, no di demasiados nombres para darme margen con el que trabajar a futuro. Temari es un caso raro, porque una parte de mi quiere darle a Naruto una prometida de cada nación, pero también me gusta mucho la relación que tiene con Shikamaru, así que voy a darme un margen para tener tiempo para pensar sí la dejo como prometida o la dejo con Shikamaru.

Invitado (El que no dejó su nombre o que no aparece); Muchas gracias, han pasado pocos días desde la última publicación, así que espero que aún estés por aquí para disfrutar la próxima parte.

CCSakuraforever; Creo que te equivocaste en el nombre de la aldea, es de la nube, no de la roca, y no te preocupes por la invasión que ya llegó en esta parte.


Sí alguien preguntaba dónde, y qué, estaba haciendo Naruto cuando la invasión a Konoha comenzó diría hasta el final de los tiempos que había salido brevemente de la arena para comprar comida, cualquiera que dijera que estaba dormido en uno de los pasillos del lugar como un vagabundo claramente estaba mintiendo, y esto era algo que Naruto sostendría hasta las últimas consecuencias, por suerte para él los clones del Samsara no habían sido tan descuidados, en cuanto la gente comenzó a caer dormida (Tras el combate de Shikamaru en el cual se había rendido, y a inicios del combate entre Sasuke y Gaara tras que este último se encerrara en una esfera de arena que fue perforada por el Uchiha) se posicionaron para proteger a otros. El camino de las bestias había volado hasta las gradas donde estaba intentando despertar a sus compañeros genin. Con el camino Deva y el clon que contenía el elemento fuego yendo al palco de los kages después de que este sufriera un gran estruendo, con el clon del camino Naraka en el exterior, y los últimos dos clones en medio de las gradas, casi derrapando llegó al lugar donde los otros examinados estaban.

— ¡La aldea está bajo ataque! —No podía decir de dónde venía aquel grito, ni siquiera sí lo había escuchado uno de sus clones, en realidad en estos momentos había perdido esa capacidad, el ruido y el caos llenando sus sentidos al mismo tiempo.

— ¡Es un ataque de Suna y Oto! —Otro rugido llegó de algún punto desconocido— Comiencen el contraataque y preparen la evacuación —Solo en estos momentos es que podía reconocer esa voz como la de Shikaku Nara, lo que hasta cierto punto alivió al rubio.

— ¡Los Kages están atrapados con Orochimaru! ¿Dónde está Jiraiya-sama? —Ese gritó vino de parte del palco de los kages, mismos que ahora estaban en el tejado de la arena enfrentándose al mismo hombre pálido con el que el equipo siete había peleado en el bosque de la muerte.

— Naruto —Un llamado lo sacó de su aturdimiento provocado por la sobrecarga de información que estaba recibiendo de sus clones, Kakashi había puesto una mano en su hombro para traerlo de regreso en sí— Lo que estoy por darte será considerado una misión de rango A con posibilidad de volverse de rango S ¿Estás dispuesto a aceptar la misión? —Preguntó mientras lo miraba firmemente a los ojos.

— ¿Qué tengo que hacer? —El rubio necesitaba centrarse, mantener su atención principal en un solo evento y dejar que sus clones actuaran como debían, perderse, y más en un momento como este, no serviría de nada.

— Gaara parece ser parte de la carta de triunfo de Suna, sus hermanos lo alejaron de aquí con eso en mente, Sasuke ya fue tras él, pero te encomiendo ir junto a Shikamaru y Shino, para encontrarlo y neutralizarlo —Explicó rápidamente mientras su mirada iba de un lado al otro, los dos chicos mencionados asintieron ante la orden del jonin— Usa el camino de las bestias para neutralizar las invocaciones enemigas, lleva los clones que necesites, pero deja uno aquí para que pueda notificarte de cualquier cambio y ayude, Pakkun los guiará —Tras esas palabras el pequeño can ninja apareció. Con un asentimiento de cabeza los tres genin salieron corriendo, muy pronto fueron acompañados por el equipo de Kumo.

— ¿Qué hacen aquí? —Cuestionó Shikamaru mientras corría siguiendo al perro ninja, pronto abandonaron el área poblada de la aldea y comenzaron a correr por el bosque.

— Nuestro maestro, Killer Bee, nos dio la misma orden que Kakashi les dio, nada impide que la cumplamos juntos —Explicó Samui mientras su mirada apenas se desviaba del camino frente a ellos para mirar detrás por el rabillo del ojo— Killer Bee-sensei está intentando liberar a los kages antes de que esto escale más allá de lo controlable —Añadió mientras dirigía al equipo de Konoha una mirada.

— ¿Cómo está avanzando el contraataque, Naruto? —Cuestionó Shino mientras movía ligeramente sus anteojos para hacerle saber al otro grupo que había entendido el mensaje.

— Destrucción de edificios más que otra cosa —Murmuró el rubio mientras se rascaba el frente de la cabeza con cinco dedos levantados, sus clones que contenían sus naturalezas de chakra seguían en la aldea, apoyando la confrontación, el clon que contenía el camino de las bestias estaba en una vista aérea montando un águila con el emblema de Konoha, comandando a un pequeño pelotón de águilas que atacaban a las serpientes de invocación, pero el camino Deva y el clon que contenía el poder del fuego venían detrás de ellos, justo detrás del equipo del sonido que venía para atacarlos— Sí esto tenía la intención de destruirnos están muy lejos de lograr su objetivo —Aseguró.

— Ustedes no han peleado casi nada, que el más débil se quede conmigo para acabar con ellos —Señaló Shikamaru mientras miraba al equipo de Kumo, Omoi asintió antes de girarse al tiempo que el maestro de sombras hacía lo propio.

— Sobrevivan —Fue la silenciosa súplica de Naruto mientras levantaba una silenciosa oración al cielo, incluso ahora que estaba concentrado en esta misión, en llegar a tiempo para ayudar a Sasuke y detener a Gaara, no podía callar ni cegarse a lo que sus clones veían.

El camino de las bestias observaba la aldea desde lo alto, no solo para seguir creando águilas con el emblema de Konoha que sirvieran de señal para los habitantes de la aldea para que mantuvieran la esperanza y voluntad, avivar el fuego de los shinobis que peleaban defendiendo la aldea, y servir de amenaza para los enemigos de la aldea, que ellos no eran los únicos que tenían una fuerte potencia en esta batalla. Sino que se mantenía en el aire para poder ver más: Intentar encontrar a Gaara desde las alturas, tranquilizar los nervios del Uzumaki ante el caos de la aldea.

— Esto es raro... —Murmuró el clon con una mueca en el rostro mientras un par de águilas recogían a algunos civiles, y a un par de chunin que estaban encargados de la evacuación, para mantenerlos seguros y llevarlos al área segura, sus ojos seguían posados en la aldea, las serpientes avanzaban en movimientos lentos, los ninjas que atacaban no parecían tan fuertes ni tan numerosos, o al menos eso aparentaban las fuerzas del país del sonido— Ni siquiera parecen estar interesados realmente en esto —Afirmó.

Un ataque a esas serpientes dirigidas por sus águilas cayendo en picada para atrapar a las serpientes, comenzando a presionarlas hasta que estas se deshacían en una nube de humo, sin poder evitarlo se sentó en el lomo de la invocación en la que estaba encima, su dedo dando golpecitos en su sien sin poder entender por qué esto era así, mientras las fuerzas del país de la arena incluso sí eran un número bastante reducido de personas demostraban mucha más motivación que los shinobi del país del sonido, como sí estos solo estuvieran para hacer número.

— Espera, sí están aquí solo para hacer que el ejército sea más numeroso ¿Qué es lo que están tramando? —Cuestionó con un chasquido de lengua. Sí realmente venían con un objetivo secundario y se estaban aprovechando del ejército del desierto, no lograba entender qué es lo que estaban tramando— ¿Acaso hicieron todo esto solo para acabar con el viejo Hokage? ¿Por qué? El anciano ya está un paso más cerca de la muerte... —No era por ser cruel con el anciano que toda su vida había sido lo más cercano que había tenido a un abuelo, pero era evidente su edad avanzada, no podría quedarle ni una decena de años, ni siquiera creía que pudiera durar otros cinco como Hokage.

Honestamente, Naruto esperaba que las serpientes se acabaran pronto, mantener a todas esas invocaciones no era costoso para su chakra, pero era cansado para la mente del Uzumaki, incluso en el mejor de los casos eran siete puntos de vista diferentes, tanto en vista como en audición, pero mientras más invocaciones tuviera al mismo tiempo solo sumaría más y más, pero no podía flaquear ahora, no en estos momentos. Quizás lo único que le ayudaba a mantener sus nervios en estos momentos era que sabía que esto era una emergencia y no podía permitirse perder los nervios.

— Tu eres el hermano Nine ¿Right? —La voz de Killer Bee fue escuchada por el camino que contenía el camino Naraka, era uno de los dos que seguían en el estadio, el que contenía el poder del rayo estaba al otro lado de las gradas neutralizando otros enemigos.

— ¿Eh? —El clon giró a ver al hombre con lentes oscuros quien lo miraba con una extraña seriedad que se transmitían en su mirada, incluso tras los lentes— ¿De qué hablas? Este no es momento de distraerse, conozco la barrera; Formación de las Cuatro llamas violetas, sí la tocamos moriremos, solo tenemos dos opciones para destruirla, lograr herir a uno de los cuatro que la pusieron, o, o una fuerza choque tan potente que lo desestabilice todo... —Murmuró mientras seguía pensando, su mente yendo a toda prisa intentando encontrar una solución, una mano en su hombro fue suficiente para cortar su tren del pensamiento.

— El jinchuriki de Kyubi, yo soy el jinchurki de Hachibi —Naruto no lo sabía, pero la seriedad que tenía el hombre, que dijera todo esto sin intentar rapear, demostraba la inmensa seriedad con la que se estaba tomando todo, por un momento ante el anunció Naruto sintió una piedra caer en su estómago— ¡Deja esto en mis manos, que yo lo haré pedazos! —Naruto no pudo evitar enarcar una ceja ante el intento de rapeo del hombre.

— Para destruir la barrera necesitarías un gran impacto, y sin tocarla, lo más cercano de lo que he oído hablar sería la bijudama, pero eso no solo destruiría la barrera... —Al menos por lo que había escuchado de todos los que habían visto la esfera de la bestia con cola era de lo poco que se le ocurría que pudiera destrozar la barrera, pero también borraría del mapa a todos dentro.

— Calm, calm, Yo me encargar y este edificio derrumbar, yeah —El rubio Uzumaki no pudo evitar soltar una risilla, no es que el rap fuera bueno, en realidad era bastante malo, pero de algún modo escuchar al hombre rapear la ayudaba a calmar los nervios— Tu encárgate de First mientras yo dejo esto list —Naruto solo estaba entendiendo a medias lo que el hombre decía, pero entendía el mensaje, y eso le bastaba.

— El original y los clones se encargarán de eso, yo estaré en esto —Aseguró Naruto, sin darse cuenta qué había imitado el tono cantarín de Bee, haciendo su propio rap horrible— ¡Si logramos derrumbar el tejado donde están podremos sacarlos de allí! —Anuncio a los Anbu que estaban rondando el escenario, estos asintieron.

— ¡Alto! —La voz del Sandaime Hokage quien no solo se había desecho de su túnica de Hokage, sino que ahora vestía una completa armadura de batalla, Naruto tenía que aplaudirle al anciano por poder lograrlo cuando era tan viejo como lo era— Shinobis de la hoja protejan a los ciudadanos y confronten a los enemigos que asedian la aldea —Incluso sí Naruto no podía decir que el ataque fuera un asedio como tal, pero no sería quien le dijera eso al viejo en estos momentos— Su único deber es abrir una brecha en la barrera o en el suelo para que el raikage salga de aquí, esto es algo que debí haber acabado hace demasiado tiempo —Proclamó con una voz de mando que Naruto nunca antes había escuchado y supo, supo con total certeza, que no podía desobedecer, no ahora.

— ¡Ni se les ocurra hacer eso! —Rugió Ei mientras lanzaba su capa al suelo— Bee, tu misión es sacar de aquí a todos los ciudadanos de Kumo que puedas y ponerlos a salvo, sé que enviaste al equipo de genin para detener al jinchuriki del Ichibi, déjame esto a mí, Orochimaru es un mal que lleva en este mundo demasiado tiempo —Proclamó el raikage mientras su armadura del rayo lo recubría al completo, caminando hasta posarse al lado de Hiruzen como iguales.

— Me quedaré aquí, viejo —Naruto se negó a moverse igual que lo hacían los cazadores Anbu que estaban allí— Alguien tendrá que contar como le rompieron la cara a ese hombre serpiente, y no pienso perderme ni un momento —Anunció con una sonrisa confiada, sabía que los otros clones estarían haciendo su trabajo incluso sí él se quedaba a ver esto, una forma de traerle paz a su alma de que su abuelo saldría de esto vivo.

El camino Deva y el clon de fuego corrían siguiendo al grupo que perseguía a Gaara y Sasuke cuando se encontraron con la "primer división" del equipo, Omoi y Shikamaru, ambos tumbados en el suelo descansando, y a sus pies había al menos una decena de ninjas del sonido muertos, el Nara hizo un simple movimiento de cabeza en reconocimiento, mientras que Omoi estaba recostado contra un árbol.

— Gastó demasiado chakra para acabar con ellos mientras yo los detenía —Explicó mientras hacía señas con la cabeza en la dirección en la que habían partido, incluso cuando sospechaba que no era necesario— Me quedaré aquí para cuidarlo, lo último que necesitamos es perder miembros en esta misión —Proclamó mientras sonreía, ambos clones asintieron antes de seguir ese camino.

Sasuke chasqueó la lengua mientras seguía al equipo de la arena, un parte de él, la parte racional de él, misma que parecía tan pequeña como un ratón y que parecía estar moribunda, le advertía que objetivamente no tenía ningún motivo para seguir a Gaara, claramente estaban siendo invadidos, el pelirrojo había huido (Lo que bien podría considerarse victoria por abandono), que sería mejor regresar a la aldea y defenderla, o cuando menos sería más sensato, incluso había podido perforar el huevo (Por alguna razón era el único nombre que se le ocurría para la defensa esférica en la que Gaara se había encerrado a sí mismo durante su combate) con su chidori, incluso estaba ignorando que solo podía hacer dos correctamente en un día y que con el chakra que le quedaba no debería hacer esto. En general sí pensaba esto seriamente debería marcharse, considerando la sensación monstruosa que había sentido cuando vio lo que sea que se estuviera gestando dentro de ese huevo de arena debería dejarle esto a un jonin o algo semejante.

Pero no podía, la parte insensata de él (Algunos la llamarían la parte loca, y no en un buen sentido) tenía el dominio (Sí había notado que la marca de maldición que Orochimaru le había colocado palpitaba, lo mismo que ocurría cuando tenía sus conversaciones dentro de su cabeza con las sombras de Itachi y Naruto lo había decidido ignorar). Y esa parte de él le decía que no podía enfrentarse a Naruto como había planeado sí no ganaba a Gaara justamente, que este torneo era el mejor momento para enfrentarse al rubio (Por algún motivo tampoco se le había ocurrido que podía pedirle un combate al rubio cuando esto acabara, o que el examen podría retomarse cuando la invasión pasara), que tenía que enfrentar a un enemigo tan monstruoso como este para ver su progreso (El mismo impulso que lo había incitado a pelear contra Orochimaru), que sí no podía hacerle frente a esto no podría hacerle frente a Itachi, por lo que aquí estaba, saltando de rama en rama intentando alcanzar a sus enemigos, la marca de maldición palpitando en expectación, excitada por la batalla que vendría.

La emoción que sentía y que lo motivaba (Que de pensar en frío notaría no era tanto suya como creía) era tan fuerte que estuvo a punto de activar una trama de explosivos que habían dejado los del desierto a su paso, con una sonrisa confiada saltó evitando los hilos de hierro que activarían las trampas, sharingan activo para estar seguro de que no se perdía ni una de las trampas, y solo cuando estuvo del otro lado de la maraña de hilos y trampas lanzó un shuriken para que activara la primera de las explosiones, lo que a su vez activo una secuencia en cadena para que todas explotaran, corriendo detrás de su oponente mientras escuchaba las explosiones de fondo acercarse, sintiendo una fuerte emoción recorrer su cuerpo, sí podía confrontar a este monstruo y vencerlo estaría un paso más cerca de probarse a sí mismo, de demostrar que Naruto en el mejor de los casos era su igual y no un superior, que su victoria ante Itachi estaba un paso más cerca, sus motivaciones cegándolo de los peligros a los que estaba por enfrentarse, lo que provocó que no pudiera contener su sonrisa cuando por fin se encontró con el equipo de la arena.

— Aparentemente no lo distrajeron tanto como creía —Aceptó Temari mientras dejaba que Kankuro cargara solo con el peso de Gaara, mismo que parecía estar al borde del desmayo o en un sufrimiento muy superior al que Sasuke le había provocado— Kankuro, llévate a Gaara, tiene que recuperar todas sus fuerzas antes de continuar con el plan —Ordenó antes de girarse para ver a Sasuke, su abanico completamente abierto y en posición de pelea.

— Claramente no me distrajeron lo suficiente —Proclamó mientras se ponía en posición de pelea. Sabía que incluso sí quería seguir persiguiendo a Gaara lo mejor sería evitar el combate para estar preparado y en el mejor estado posible, pero quería pelear, necesitaba pelear.

— Este tipo... —Temari no pudo evitar sentir un escalofrío recorriendo su columna, un sentimiento que desgraciadamente conocía demasiado bien— Es igual de raro que Gaara, pero a diferencia de él, este tipo es raro en todo, cada parte de su ser emite esas vibras —Quizás era su juicio como hermana mayor hablando, pero Gaara siempre le había parecido un chico normal, solitario, pero normal, que no notabas lo raro que era hasta que lo veías pelear sediento de sangre, pero el Uchiha tenía un algo que simplemente la ponía nerviosa.

Poco sabía ella que esa sensación venía con el reconocimiento de alguien que no estaba mentalmente equilibrado, porque sí fuera solo por las semejanzas que tenía con su hermano habría notado las mismas vibras venir de parte del Uzumaki.

— ¡No te distraigas! ¡Estilo de fuego, jutsu bola de fuego! —Bramó el Uchiha antes de lanzar una bola de fuego en dirección de Temari.

— ¡No te creas tanto! —Un movimiento de su abanico y el viento superior al jutsu contra el que se enfrentaba, absorbiendo el fuego antes de convertirlo en una gran bola de fuego que se regresaba a su punto de origen.

— Te lo dije, no te distraigas —La voz de Sasuke emergió al lado de la chica del desierto quien se giró justo a tiempo para recibir un puñetazo en la cara, pero el usuario del sharingan no se detuvo ahí, le siguió un puñetazo en el estómago, continuó con un barrido a las piernas tumbándola contra la rama en la que ambos se encontraban, Sasuke agarró el abanico que se había separado de su dueña cuando la desestabilizó para golpearla con este lanzándola al suelo— Eso fue rápido... —Murmuró mientras dejaba caer el abanico, con suerte sería el remate de su dueña.

Fue un combate rápido, sí, había jugado con inteligencia y había usado la bola de fuego inicial, así como el incremento que esta tendría al ser golpeada por el viento de Temari, para saltar a una rama más alta y de ahí saltar al lado de Temari, para no darle tiempo de reacción a la chica del desierto para golpearla, había visto lo fuerte que era, que era un oponente formidable (Era más capaz que cualquier genin de Konoha al menos en su parecer, y por lo mismo era una posible prometida más valiosa) en cualquier otra situación se sentiría feliz y orgulloso, era una demostración de que había hecho avances, pero estaba tan obcecado en confrontar a Gaara y a Naruto que esa victoria se sentía casi vacía. Con esa negativa línea de pensamientos siguió su carrera.

No había pasado demasiado tiempo desde que Kankuro y Gaara se habían marchado por lo que sí se apresuraba no debería tardar en encontrarlos, con un poco de suerte ese sería el momento donde pudiera tener el combate que quería. Más atrás en el bosque el equipo conformado por los genin de Kumo y de Konoha que perseguían tanto a Sasuke como a Gaara, miraban al frente con miradas preocupadas en sus rostros.

— ¿Explosiones? ¿Fue él el que las uso en la segunda etapa? —Cuestionó Karui mientras dirigía su mirada a su prometido, mismo que hizo una mueca antes de negar con la cabeza.

— Ese era yo, clones explosivos... —Fue la aclaración dada por el Uzumaki antes de mirar al frente una vez más— Podrían ser trampas de explosivos, o kunais explosivos, pero eso no basta para acabar con Sasuke, es como una mala hierba, puedes golpearlo tanto como quieras, pero volverá para molestar —Quizás estaba siendo un poco grosero, después de todo era su compañero de equipo, pero hablaba desde su perspectiva, había creído que tras su "victoria" en las aguas termales (En retrospectiva no sabía si podía llamar victoria a eso) Sasuke sería menos insoportable y creído, se equivocó, sí acaso lo había sentido más intenso en enfrentarse a él de cualquier forma. Tan concentrado estaba en sus pensamientos que no se dio cuenta de que eso había provocado una risilla en ambas chicas, mismas que no podían evitar recordar aquella noche con ese comentario.

— ¿Cuándo fue que Shino-san desapareció? —Cuestionó Samui con una ceja enarcada notando que el chico ya no se encontraba en formación, lo que era raro porque podía asegurar que había estado aquí cuando escucharon las explosiones.

— Dijo que ya que le puso a Sasuke uno de sus escarabajos podía rastrearlo, y que sí apuraba el paso podría llegar antes y disminuir las fuerzas de los objetivos de Suna —Proclamó Pakkun logrando que los tres shinobis se quedaran repentinamente callados antes de detenerse para ver al perro ninja— ¿Qué? No quería detener su conversación de chicos hormonados —El silencio que siguió a esa declaración, mismo que delataba que ninguno de los tres había vuelto a moverse— No me miren así, puedo oler las hormonas que liberan, montón de jóvenes cachondos... —Se quejó mientras daba unas palmadas con su pata a su nariz, como sí intentase borrar el olor.

— ¿¡Por qué no nos lo dijiste antes?! —Gruñó Karui mientras, al igual que el resto de ellos, decidía ignorar la parte de que eran idiotas cachondos (Las palabras de la pelirroja, no las de nadie más)— ¿¡Cuánto nos hemos desviado?! —Cuestionó mientras miraba a todos lados, como sí pudiera encontrar un brillante letrero que señalara la dirección en la que estaba su objetivo.

— Estaban teniendo su charla de adolescentes cachondos y no nos desviamos, los sigo guiando al mismo ritmo, pero sí avanzan en esta dirección un tanto más rápido podrán encontrarlos sin mi ayuda —Explicó mientras les dedicaba una mirada de juicio que no resultaba muy agradable para ninguno de los tres, como sí a sus ojos estuviera pasando algo muy diferente a lo que estaba ocurriendo.

— ¡Deja de hablar como si estuviéramos desnudos follando contra un tronco! —Exigió el Uzumaki mientras se cubría los ojos, lo que le permitió perderse la vista del perro que incluso sin abrir la boca transmitía un mensaje muy claro "Sí ustedes lo dicen"

Pero la persecución de este mixto equipo para encontrar a Sasuke, y sumarse a la confrontación que este tendría contra Gaara, quien sin lugar a dudas parecía estar detrás de Orochimaru en cuanto a amenazas a la aldea en estos momentos no era lo más importante y preocupante, no, ese premio se lo llevaba batalla que ocurría justo en estos momentos en el coliseo de batalla de Konoha, pero no en la arena, sino en el tejado del palco de los Kages, pero regresemos a cuando el hombre que dirige a la aldea de Konoha despidió a sus shinobi para que se encargaran de la protección de la aldea.

Hiruzen admitiría que no estaba tan sorprendido como podría estarlo de que el sol saliera cada mañana, no sabía que Orochimaru se haría pasar como el Kazekage, y una parte de él se preguntaba sí es que el kazekage estaba muerto o simplemente se había quedado en su nación para poder evitar las culpas, aunque Hiruzen se decantaba por la primera opción, no solo porque Orochimaru nunca había sido bueno para compartir, sino que sí como Killer Bee había afirmado, Gaara era el jinchuriki del Ichibi, no había forma de negar la participación de Suna en este asunto.

— Honestamente, cuándo planee esto no te imaginaba dentro de mi pequeño teatro, Raikage —Aceptó el sannin serpiente con una de sus siniestras sonrisas dirigida a ambos hombres— Pero supongo que es tan buen momento de matar a dos kages al mismo tiempo —Sus palabras fueron acompañadas de una expulsión de chakra tan fuerte que volvía el aire pesado y las tejas se resquebrajaran.

Hiruzen casi sentía el impulso de aplaudirle al raikage, por la fama del hombre habría esperado que se lanzara en una patada voladora contra Orochimaru envuelto en su armadura de rayos mientras gritaba, esto había renovado parcialmente su fe en el hombre, lo que demostraba que incluso un hombre que ante todo era músculo en lugar de cerebro podía ser precavido, sacó un par de shuriken para su primer ataque cuando ocurrió.

— ¡Ah! —En forma de un rugido de batalla Ei había actuado tal cuál Hiruzen lo había imaginado, patada voladora mientras estaba totalmente envuelto en su jutsu secreto sin dejar de soltar un grito salvaje.

— Predecible —Orochimaru externó el pensamiento que también tenía el Hokage, sí esa era la mentalidad del líder de la aldea de la nube Hiruzen debía preguntarse ¿Cómo es que seguía siendo tan segura? Sus pensamientos no duraron más de una fracción de segundo, una muy pequeña fracción de segundo, y no duraron por la pierna de Ei atravesando el rostro de Orochimaru.

— ¿Qué decías? —Cuestionó con tono arrogante antes de que se diera cuenta de que ocurría, Orochimaru, o lo que había sido Orochimaru, se convertía en lodo antes de envolver al hombre musculoso, el proceso fue tan rápido como el golpe del raikage antes de que este intentara fundirse con el suelo.

— Predecible, eso dije —El sannin serpiente emergió solo unos pocos metros detrás, su expresión cansada como si fuera repetirle algo a un niño hasta el hartazgo— Haznos un favor a todos y quédate fuera de esto, es un asunto entre maestro y alumno ¿Entiendes? —Cuestionó mientras le dirigía una desagradable mirada al hombre que estaba luchando por escapar del lodazal que intentaba hundirlo.

— ¡Tú mismo lo dijiste! —Hiruzen decidió seguir con su plan lanzando sus shuriken antes de multiplicarlas con los clones de sombra shuriken.

— Truco viejo —Bufó Orochimaru antes de juntar sus manos— Jutsu de invocación, resurgimiento del mundo impuro —Anunció su jutsu logrando que los ojos del viejo mono se abrieran con sorpresa ante el reconocimiento, y para su espanto un ataúd brotó rápidamente del suelo, seguido de un segundo, juntos bloquearon las shuriken— ¿Estás preparado, Tercer Lord Hokage? —Las palabras salieron casi como un insulto.

Por desgracia Hiruzen ya sospechaba qué es lo que se escondía dentro de esos ataúdes, un temor que no hizo más que confirmarse cuando las tapaderas se separaron y cayeron al suelo revelando los cadáveres que escondían, incluso cuando ya no estaban tan muertos como antes, con pasos lentos y temblorosos salieron los dos, el primer Hokage y el segundo Hokage; Hashirama Senju y Tobirama Senju, respectivamente, la expresión en el rostro de Naruto que estaba al otro lado de la barrera como mero espectador se abrieron con horror al reconocer los rostros de los dos hombres.

— Hiruzen ¿Eres tú? —Nadie más que Hiruzen fue el que reconoció la voz del primer Hokage, actualmente era de las pocas personas en la aldea que habían vivido lo suficiente para conocerlo.

— Alguien utilizó mi Edo tensei, hmp —Tobirama reconoció al instante el jutsu que los había traído de entre los muertos— ¿Debo suponer que el que estemos aquí significa que pelearemos, Hiruzen? —Cuestionó mientras miraba con la seriedad habitual que tuvo en vida a quien fue su alumno.

— Eso me temo, Tobirama-sensei —Hiruzen no podía evitar sentir que era golpeado por una enorme ola de nostalgia, pero eso no impidió que se pusiera en posición de batalla para el encuentro que sabía sería muy difícil, suponiendo, claro, que no lo matase al instante— Fueron invocados por alguien que está invadiendo la aldea, y yo, como tercer Hokage, no puedo hacer otra cosa que detenerlos —Aseguró mientras una sonrisa de satisfacción adornaba sus labios.

— Si, si, ya estuvo bueno de reencuentros conmovedores —Se quejó Orochimaru mientras clavaba un kunai en el hombro de cada uno de los reanimados, mismos kunai que comenzaron a ser engullidos por los cuerpos, los ojos antes claros de los reanimados parecieron llenarse de bruma.

Orochimaru sabía que no pelearían en su máxima potencia, especialmente contra Hiruzen, y que usar ese sello en el kunai para deshacerse de su consciencia también los haría ser menos eficaces, pero seguía confiando en que la potencia de fuego sería suficiente para acabar con el par de kages, y la única razón por la que no había hecho ni el intento de invocar a Minato era porque Naruto estaba viendo, una buena demostración de poder era buena para atraer a un alumno, pero tenía la sospecha de que descubrir que este mentor profanó la tumba de tu padre y lo controlaba como un títere no sería muy bien recibido, no al menos hasta que estuviera seguro de sí el chico lo odiaba, así que tendría que jugar con cuidado en ese territorio por el momento.

— ¡Largo de aquí! —El raikage había aumentado la potencia de su armadura de rayo para destruir el jutsu de tierra que lo había atrapado, corriendo para golpear al sannin serpiente, solo para ser golpeado por el primer Hokage con suficiente fuerza como para lanzarlo a la barrera, Ei apenas tuvo tiempo de girar para evitar golpear la pared— Santa mierda... —Gruñó cuando vio al par de antiguos Hokages volver de entre los muertos.

— En serio eres molesto... —Orochimaru se quejó en voz alta mientras llevaba su mano a su frente en un gesto teatral, podía reconocer la fuerza y el peligro del raikage, sería un completo idiota sí no lo fuera— ¿Por qué mejor no te sientas en una esquina y no molestas? —El hombre moreno estaba demostrando que lo que tenía de músculo le faltaba de cerebro.

— ¡Ei! —El Hokage llamó al raikage para que evitara lo que siguió, un torrente de fuego salió contra los cuatro, por suerte el Raikage no necesitó mucha advertencia para evitar verse envuelto en el fuego cruzado, el problema era que el segundo Hokage también tenía unos grandes reflejos.

Extrayendo la humedad del aire logró cubrirlos a los tres justo a tiempo para evitar que el fuego arrasase con ellos, el choque del fuego con el agua levantó una gran cortina de vapor ardiente y caliente que distorsionaba el aire allí donde estaba, una simple mirada hacia arriba habrían notado que Ei ahora estaba lanzándose en picada para golpear con todas sus fuerzas a Orochimaru, siguiendo la idea de eliminar al manejador en lugar de al ejército, una postura que Hiruzen aprobaría sí no supiera que clase de jutsu manejaba a los reanimados, pero en lugar de poder golpear a Orochimaru desde arriba fue detenido por un árbol que surgió de la nada, no sin que algunas piezas de la madera salieran volando, pero este había durado lo suficiente para bloquear el golpe.

— Estilo de agua, gran ola violenta —Tras esas palabras el agua se arremolinó alrededor de ellos, obligando a Ei a saltar para posicionarse al lado de Hiruzen, mismo que ya se encontraba haciendo posiciones de manos a toda velocidad.

— Estilo de tierra; ¡Pared de lodo! —Bramó mientras del suelo a sus pies comenzaba a brotar ingentes cantidades de lodo que se elevaron rápidamente varios metros de alto antes de endurecerse formando una sólida pared de roca, aunque no sirvió del todo para evitar el agua, ya que encerrados en una prisión como se encontraban chocó contra las paredes y casi con la misma violencia regresó para con ellos.

— Me quejaría de que esta cosa no sirve para romper las aguas, pero sí fuera como yo imaginaba estaríamos encerrados —Se quejó Ei mientras saltaba, al igual que Sarutobi, para intentar posicionarse en la parte superior de la pared, no solo para evitar las olas, sino para evitar los disparos de agua a presión que no solo perforaron la roca, sino que también la cortaron de un lado al otro.

Claramente la pared de lodo no podría soportar tanto impacto por lo que esta terminó derrumbándose, mientras que Hiruzen caía hacía delante, a lo que casi podría ser descrito como un inmenso charco de agua en el tejado, Ei caía para atrás, pero el Raikage no se quedaría de brazos cruzados mientras caía, no cuando era particularmente conocido por su excepcional velocidad, siendo el único hombre que lo había superado el Cuarto Hokage, por lo que saltando entre los escombros del muro comenzó a elevarse lo poco que pudiera, para cuando estuviera lo más alto que pudiera, que no era mucho más allá de la propia altura de la pared de roca, para impulsarse con sus piernas contra el escombro que caía para lanzarse devuelta contra Orochimaru, en momentos como este es que se lamentaba de tener un repertorio tan pequeño de jutsus de largo alcance, de lo contrario podría confrontar esto un poco mejor.

Al mismo tiempo que Ei saltaba para posicionarse en lo alto cuando Hiruzen cayó a las aguas fue tragado por estas, sorprendentemente profundas para la altura real del charco en el que había caído, sin lugar a dudas gracias a la capacidad del segundo Hokage no solo con los jutsus de agua sino con los sellos espacio tiempo, con el hombre de melena blanca sujetando al anciano en un intento de hundirlo, un intento que no fue particularmente fructuoso porque Hiruzen golpeó a Tobirama en los costados con sus codos antes de dar una patada en la cara, misma patada que fue bloqueada, seguida de una en el pecho que uso para impulsarse y salir justo a tiempo para tomar aire, saltando para posarse sobre lo que quedaba de la pared de tierra, en el momento perfecto para ver al Raikage no solo deteniendo la patada del hombre, mismo que se estaba limitando a patadas seguramente para evitar exponer su torso, y por ende su corazón, a los ataques del peligroso par de enemigos resucitados, con una mano, su otra mano extendida para agarrar la rodilla de Ei, torciéndolos a alta velocidad antes de lanzarlo contra lo que quedaba del muro de roca destrozando lo poco que quedaba de este y obligando a Hiruzen a caminar sobre las aguas que habían estado detrás de su muralla, del lado contrario Tobirama surgía del agua al lado de su hermano.

— Esto ya ha durado demasiado —Se quejaron Orochimaru y Sarutobi al mismo tiempo, pero mientras el primero hizo una seña a sus marionetas reanimadas, el segundo se preparaba para hacer su jutsu de invocación.

— Estilo de madera: Nacimiento de un mundo de árboles —Ante esas palabras Hiruzen no pudo evitar abrir los ojos con horror, un horror muy superior al que sentía Ei.

— Estilo secreto de agua: Levantamiento de los océanos —Anunció solo un segundo después que su hermano mayor, logrando que el horror en el rostro de Hiruzen se volviera pánico, una expresión que no se veía para nada bien en el rostro del anciano que había dirigido la aldea de Konoha por tanto tiempo.

— Ei mantente en lo alto y por lo que más quieras, no toques el suelo —Fue la advertencia de Hiruzen antes de agarrar al raikage por el borde de los pantalones, una vista un tanto rara tanto para los Anbu, Naruto, y Killer Bee, para lanzarlo por los aires, aunque al mismo tiempo había usado el cuerpo de Ei como la base para hacer su jutsu de invocación, un gran mono, Enma, mismo que solo dio un rápido vistazo al entorno antes de que fuera agarrado por su invocador para, junto a este, elevarse por los aires justo a tiempo.

Hasta el final de los tiempos Naruto diría que esta había sido la primer gran demostración del inmenso poder que alguien podía alcanzar en este mundo: De la tierra brotaron árboles, no uno, ni dos, fue como sí simultáneamente todos los árboles de un bosque o una selva hubieran decidido materializarse, creciendo a una velocidad impresionante, casi apareciendo por arte de magia ante el ojo humano inexperto, con ramas filosas como lanzas y pesados troncos que amenazaban con aplastarlos. Pero esto no fue lo único que ocurrió, el suelo tembló violentamente, como si fuera golpeado por una inmensa fuerza (Algo bastante probable sí se toma en cuenta el bosque que se materializó de golpe sobre él) pero este pareció volverse líquido antes de que todo el suelo se convirtiera en agua formando un espejo de lo que estaba arriba de este, y algo en lo profundo de todos les advirtió que no era algo que quisieras tocar sí no estabas del mismo lado que Tobirama.

Tanto el raikage como el tercer Hokage corrieron con suerte, al menos no murieron ante estos dos jutsus que habían acabado con otros tantos por separados por sí mismos, pero no habían salido impunes, incluso cuando no había sido atravesado por las ramas había quedado atrapado por fuertes troncos, prácticamente crucificado de cabeza, sus ojos no pudieron evitar ver su reflejo en el agua debajo de ellos, sus ojos se oscurecieron profundamente, intentó retorcerse, pero esto no sirvió de nada debido a las fuertes ramas que lo mantenían oprimido, lo que sin saber le salvaría la vida. Hiruzen, por otro lado, había logrado encerrarse en una caja de bastones que, tras una nube de humo, se convirtió en un solo bastón en el que apareció un ojo abierto.

— Justo a tiempo Sarutobi —Pese a estar en su forma de bastón se podía notar el suspiro de alivio que Enma había dado al ver que habían podido protegerse de aquel ataque.

— Enma, hagas lo que hagas no mires abajo, e intenta no tocar el suelo —Pidió Hiruzen entre jadeos, sus ojos posados tanto en el par de reanimados como en Orochimaru— Este jutsu...

— Es la mezcla perfecta de la habilidad del segundo Hokage para extraer el agua del aire, manipular el espacio, y el genjutsu —Orochimaru comenzó a explicar mientras caminaba lentamente por los troncos, al igual que sus marionetas reanimadas, observando el nuevo escenario— Además de crear un lugar perfecto para infinidad de jutsus de agua, cualquiera que caiga en el agua será arrastrado a las profundidades, se dice que nadie que haya entrado fue recuperado —Explicó con uno de sus extraños tonos de admiración que Hiruzen había escuchado tan pocas veces en toda su vida— Y cualquiera que mire su reflejo querrá lanzarse a las aguas, un jutsu impresionante ¿No lo cree, Sensei? —Se mofó el hombre con una sonrisa.

— ¿Por qué estás aquí, Orochimaru? Nunca te creí de los que guardaban rencores —Hiruzen devolvió la pregunta mientras intentaba recuperar el aliento, caminaba lentamente para atrás intentando mantener la distancia.

— ¿Hm? Me esperaba esa pregunta al inicio de este combate —Admitió el hombre serpiente mientras enarcaba una ceja, una sonrisa maliciosa en su rostro— Pero te responderé, no sería justo con mi antiguo sensei dejarlo morir con la duda —Afirmó mientras esa sonrisa siniestra no hacía más que crecer— Al principio solo estaba interesado en la posibilidad de hacerme con el último Uchiha de la aldea, con la posibilidad de destruir la aldea, pero hubo algo que me hizo cambiar de opinión, no me malentiendas, nada hubiera evitado este resultado, pero me hizo replantearme muchas cosas —Pese a que para este punto gracias al bosque creado no podían ser apenas vistos por el exterior, tampoco escuchados, la mirada de Orochimaru se desvió a donde estaban los observadores.

— Naruto —La resolución no era nada que no se esperará, cuando vio el rinnegan por primera vez hacía más de una década supo que Orochimaru sería de las mayores amenazas que el rubio enfrentaría en la vida.

— Si, aunque no estoy interesado de hacerme con él del mismo modo que pienso hacerme con Sasuke —Orochimaru no pudo evitar soltar una siniestra risilla ante la confesión— Tengo planes para ambos, sí, pero te puedo asegurar que Naruto estará seguro cuando venga a mi —La siniestra admisión de que Sasuke no correría con la misma suerte sí caía en las garras del sannin serpiente envió un escalofrío por la columna de Sarutobi— Los prepararé a ambos, pero con fines diferentes, Sasuke ocupará su lugar en su momento dado, pero Naruto tendrá un camino a largo plazo, alguien que seguirá mis pazos, incluso podría ayudarme a investigar la genética Uzumaki más de lo que ya lo he hecho —Hiruzen no podía terminar de entender la diferencia entre los destinos que tendría cada uno de los jóvenes sí Orochimaru se hacía con ellos, pero sabía que tenía que evitarlo a toda costa.

— No sé por qué crees que ellos te seguirían, aún más después de esto —Sarutobi no quería admitir que eso en realidad solo se aplicaba a Naruto. Sasuke era alguien que veía más el poder que el compañerismo, igual que Orochimaru lo había hecho, pero los problemas mentales del Uchiha lo volvían una pieza más manipulable que otros en manos expertas, pero Naruto por otro lado era más como Anko, una bomba de relojería que en lugar de volverse enemiga de la aldea decidió que sería mezquino y desagradable con los que lo molestaran, pero que defendería la nación sin duda alguna, y esa comparación con Anko, acompañada de la sonrisa siniestra de Orochimaru le trajo otra resolución— La marca de maldición, se la pusiste a ambos... —El gemido ahogado salió apenas audible de su boca.

Una parte de él dudaba que la marca de maldición hubiera pasado desapercibida para todos, pero todos los malestares físicos de Sasuke, cansancio y falta de chakra ocasional podrían acuñarse al psicótico entrenamiento del Uchiha, por lo que a menos que alguien se fijara bien podría pasar desapercibido, y Naruto por otro lado gracias a su mezcla de inmenso chakra y salud prácticamente perfecta sería apenas notable que tenía la marca, e incluso el aumento de poder que está podía darle bien podía ser señalado como el zorro de las nueve colas, sin poder evitarlo giró la cabeza en dirección a donde sabía que Naruto seguía viendo la pelea.

— Por desgracia no, Naruto logró evitar mi regalo —Proclamó con una sonrisa curvada mientras seguía caminando hacía su mentor, del mismo modo que este seguía retrocediendo— Pero eso no es un problema, ahora que sé lo que Naruto puede ofrecer decidí que sería un desperdicio darle la marca de maldición, tengo muchos modos de atraer a un futuro aprendiz —Proclamó con tranquilidad, sí alguno de los seguidores que lo acompañaban se sintió ofendido por la opinión de su maestro sobre la marca de maldición ninguno reaccionó.

— No logró entender entonces para que quieres a Sasuke —Por muy poco que le gustara lo que Orochimaru tenía planeado para su nieto adoptivo no lograba comprender la razón de hacerse con el Uchiha sí ya había cambiado su objetivo.

— Podría decirte que mi aprendiz necesitará sus propios seguidores y que Sasuke-kun sería un gran inicio, pero estaría mintiendo —El sannin se encogió de hombros como sí la idea fuera particularmente divertida para él— Te podría dar una larga explicación, podría dejarte en la inopia en tus últimos momentos, pero quiero que comprendas la decadencia de tu estado y puedas ver los grandes logros que he desarrollado —Proclamó con una sonrisa arrogante mientras llevaba su mano a su rostro, agarrándolo como si fuera una máscara antes de tirar de ella para removerla.

Para sorpresa de Hiruzen el rostro de su exalumno realmente se removió, ahí, en lugar del rostro de Orochimaru se encontraba el rostro de una mujer de facciones pequeñas y mejillas marcadas, lo único que le hacía creer que podía ser su alumno eran los ojos dorados de serpiente con los que miraba su rostro horrorizado.

— ¿Cómo es posible? ¿Quién eres? ¿Qué eres? —Las preguntas brotaron como agua de una presa, la sonrisa que se extendió por el rostro de la mujer antes de volverse una risa demente.

— Te lo dije anciano, comprenderías la decadencia de tu estado cuando lo vieras —Logró decir entre risas antes de controlarse para pararse erguida, sus ojos seguían emitiendo un brillo demente y siniestro— Siempre he querido investigar los jutsus, hay infinidad de cosas que descubrir, ninjutsus, taijutsu, genjutsu, y más, pero hay tiempo limitado en la vida, y esas investigaciones se ven tarde o temprano obstruidas por la vejez —Se quejó con gestos teatrales— Pero yo no me detendría por algo como eso, no, jamás, logré desarrollar un jutsu que permite la supervivencia del espíritu por sobre el cuerpo, cambiando de un cuerpo a otro conservando el espíritu de uno mientras aplasta el espíritu ajeno —Explicó mientras esa monstruosa sonrisa suya volvía a asomarse en su rostro— Un jutsu con el que he alcanzado la inmortalidad —Presumió con una sonrisa mientras miraba al cielo y su rostro volvía a cambiar hasta tener la apariencia que Hiruzen ya conocía.

— ¡Tú ya no eres humano! ¡Eres un monstruo! —Bramó el anciano en una mezcla de terror y furia. Ya le parecía extraño que Orochimaru no se viera tan acabado como Jiraiya, después de todo ninguno de sus alumnos estaba en la flor de la juventud, no era ser grosero tanto como un hecho, después de todo habían pasado décadas, pero asumió que al igual que Tsunade era una hábil mezcla de genjutsu y un jutsu que le permitiera preservar su escasa juventud, o aparentarla, no esto, no un acto tan monstruoso e inhumano como el que su alumno describía.

— Palabras sin sentido de un vejestorio que no tarda en morir —Desestimó Orochimaru, ya con su rostro original en su lugar mientras miraba a su maestro con expresión despectiva— Pero ya hemos postergado esto demasiado, tu tiempo en este mundo está por acabarse.

— Como tu antiguo mentor es mi deber detenerte, puede que yo muera hoy, pero debo asegurarme de que me acompañes al sepulcro —Proclamó mientras lanzaba a Enma por los aires— Jutsu clones de sombra —Con esas palabras dos clones aparecieron, los tres comenzando a hacer posiciones de manos mientras sus ojos se llenaban de una férrea determinación— ¡Te mostraré un jutsu que nunca antes has visto! —Bramó antes de juntar sus manos.

Detrás de él, invisible para todos menos para él, algo comenzó a formarse, pronto, demasiado pronto, se formó una figura espectral, un demacrado ser cadavérico, cuyo género no podía distinguirse, de piel morada, con cuernos, cabellos blanco y crespo como paja, usando una túnica blanca, en su boca se ocupaba un cuchillo y en una de sus manos un collar de cuentas rojas, entre los brazos de este comenzó a formarse lentamente una figura humanoide de chakra azul, solo Hiruzen podía verla, o al menos eso creyó. En el exterior de la barrera Naruto, o el clon que contenía al camino Naraka, cayó para atrás mientras observaba al ser que se formaba, podía verlo incluso a través de la madera y la roca.

— Oh ¿En serio? Por favor muéstramelo —Pidió expectante Orochimaru con una ceja enarcada por el interés.

— ¡Absoluta oscuridad! —Proclamó el segundo Hokage mientras la oscuridad se extendía cegando a Sarutobi quien ahora solo podía ver a sus clones, pero de ahí en más todo parecía totalmente cubierto por oscuridad.

— Llegó el momento de usarlo —Pensó Hiruzen mientras su expresión se volvía una llena de pesar— Solo necesito un poco de tiempo y retener por un instante a Hashirama y Tobirama sensei... —Una lágrima comenzó a caer por el rostro del anciano mientras por su mente pasaban imágenes de cada una de sus personas queridas, cada equipo que había visto formarse, de cada miembro de la aldea que había tenido el placer de conocer— Naruto, sé que cometí muchos errores, y lamento que muchos hayan sido cuando tenía que cuidar de ti, pero espero que algún día puedas perdonarme, por favor, cuida de Konohamaru —Pensó antes de abrir los ojos una vez más— Solo unos segundos más y estará listo, el jutsu de sellado de la parca


Admitiré que este capítulo, incluso cuando salió apenas unos días después del anterior, la verdad es que no tenía mucho planeado para esto, en realidad ni este, ni el siguiente, estaban plenamente pensados y planeados antes de escribirse, en realidad tengo algo pensado para el capítulo que le sigue al final de la invasión, y quizás al que le sigue a ese de inmediato. Por cierto, he notado que a algunos no siempre les sale el capítulo completo, y sí bien puede ser problema al cargar la página (Me ha pasado varias veces) agradezco que me lo hagan saber sí les pasa, porque no siempre sé sí solo es un problema de carga o un problema a la hora de subir el archivo y prefiero corregirlo sí puedo hacerlo.