Los 4 lords
La enorme sala del templo sith en korriban estaba tenuemente iluminada por el fuego de unas antorchas encendidas en las paredes desnudas de piedra, no había nada más en aquella habitación que una enorme mesa de piedra negra y brillante situada en el centro del lugar, múltiples runas sith estaban grabadas por toda su superficie de manera tan profunda que el tiempo no había podido borrar y el brillo hipnótico de las antorchas les daba una ilusion de heridas negras, no era un lugar de luz y eso los siths lo sabían, lentamente una sombra negra de un hombre se acerco a la mesa y de esa sombra salio una mano que comenzó a repasar con un dedo las marcas reconociendo cada una de las runas grabadas en ella, las voces hipnóticas y susurrantes de los siths pasados comenzaron a hablar en la habitación atraídos por el aura oscura del poderoso ser, que embelesado seguía repasando las marcas con su dedo.
-¡VIKON!-
Una voz atronadora puso en guardia al hombre en las sombras que saco algo de entre sus ropas y en la oscuridad brillo la hoja roja de un sable de luz, por la entrada de la sala llego otro personaje alto igualmente cubierto con una capa y haciendo un sonido siseante activo su espada que brillo en un rojo carmesi intenso.
-Apocalipsis-
Saludo el primer hombre y bajo un poco su sable pero aún en guardia.
-más te vale que esta no sea una trampa Vikon o lo pagaras caro, le apunta con su sable amenazante mientras caminaba hacia el centro reuniéndose en el otro extremo de la mesa.
-guarda eso apocalipsis, te sacaras un ojo con ese juguete- otra voz hablo detrás de apocalipsis, el hombre se giro rápidamente preparándose para enfrentar al nuevo desconocido.
-vorak ¿Qué hace una rata womp como tu aquí?-
Vorak solto una risa macabra mientras entraba y se acercaba a la mesa
-solo por que se nos convoco a una reunión en paz no te mato apocalipsis-
El aludido se rie con mucho sarcasmo
-¿que es lo que quieres vikon? ¿Por que reunir a tres lords oscuros? Aun estamos tratando de evadir a los rebeldes que acabaron con la orden final
Vorak cruzo los brazos mientras miraba fulminante al lord que lo había ofendido, vikon dejo de recorrer los dedos por las runas de la mesa
-estoy consciente de lo que paso con la orden final en exegol, una excelente movida pero al final y como siempre ocurre, un solo sith estaba al mando, pero paciencia hermanos, estamos esperando a un ultimo participante en esta reunión-
Justo al decir esto una voz cavernosa sonó en la entrada.
-ya estoy aquí vikon, puedes comenzar a decirnos lo que sea que tengas que decir-
El ultimo lord sith entra con paso orgulloso y decidido poniéndose entre vorak y apocalipsis, aun coN recelo evidente todos se reúnen en torno a la mesa viendo a vikon que sonreía muy satisfecho.
-gracias Agru por asistir, y a todos ustedes hermanos, se que sus agendas están ocupadas-
Comenzó a hablar con cierta burla en la última parte
- ya todos saben lo que ocurrio con lord sidius y la orden final, es una terrible caída y muerte la que ha sufrido, hemos perdido a un hermano muy poderoso, pero no lo permitiremos mas, hermanos he tenido una visión, un foma en la que nos uniremos para para destruir a los jedis y apoderarnos de la galaxia-
Se oyeron unos aplausos, apocalipsis estaba aplaudiendo lentamente
-es un discurso emotivo hermano, perdona que no te deje terminar, pero como nos vamos a unir si no podemos estar mas de dos siths en un a habitación sin querer matarnos?
Vikon lo miro de mala manera por debajo de su capucha, la pregunta había sido bastante sarcástica pero todos lo miraron esperando su respuesta, ya que tenia razón, un maestro y un aprendiz, era lo que dictaba el código sith-
-gracias por exponer un punto tan interesante apocalipsis pero a eso iba, si tienes la amabilidad de no seguirme interrumpiendo podre revelarles todo mi plan-
Apocalipsis se cruzo de brazos y pensó en 50 formas certeras de matarlo antes de que terminara de hablar.
-les decía, somos pocos y estamos dispersos, tampoco quedamos muchos lords siths con vida, y quedaremos menos si no nos unimos, mi idea-
El carraspeo para darle un poco de misterio a sus palabras
-mi plan hermanos es crear una alianza, no, una hermandad, aquí en korriban, tendremos una academia, en la que entrenemos a todos aquellos que están seducidos por el lado oscuro, crearemos un ejercito entrenado y liderado por nosotros, nadie tendrá mas fuerza en la galaxia y nos temerán.
Los otros escuchaban sin decir ningún comentario, no sabían si decir que era una completa estupidez o una idea brillante
-espera, estas diciendo que juntemos a usuarios de la fuerza oscura en un solo lugar para entrenarlos y ponerlos bajo nuestras ordenes para que peleen las batallas y dominemos la galaxia y que esperas que no se maten entre si el primer día?- vorak se escuchaba incrédulo mientras recargaba sus manos en la mesa viéndolo incrédulo ante sus palabras.
-si, agru,que opinas?-
El aludido miro a vikon
-una idea estupida….pero
…podria ser bueno, hermanos piensenlo, tendríamos capaces maquinas de matar a nuestras ordenes, cada uno de ellos dotados de las mas raras habilidades que el lado oscuro pueda ofrecer, y si nosotros estamos al mando nadie se atreverá a retarnos, ¡podríamos controlarlos y sembraríamos el terror!-
Los demás empezaban a convencerse, entonces apocalipsis se quito la capucha revelando un largo cabello blanco sujeto en una coleta alta, el hombre con una vieja cicatriz cruzándo su ojo se rie un poco.
-¿de donde sacaríamos a estos aprendices? Son usuarios del lado oscuro, no vendrán tan fácil, creeran que es una trampa y se mantendrán alejados de aquí, quiero seguir escuchando tu gran plan vikon para lograr atraerlos y que se convenzan de quedarse y sobre todo que peleen para nosotros-
La risa de vikon se dejo escuchar y el eco sono en toda la cámara dejando a apocalipsis un poco descolocado
-Hermano, ellos ya han sido convocados y he de anunciar que han respondido, tendremos al menos veinte aprendices para empezar, se les prometio un lugar donde volverse fuertes donde convertirse en lores siths, y estoy seguro que llegaran mas en cuanto se expanda el rumor de la academia, los primeros llegaran esta noche y espero hermanos que estén conmigo para recibirlos, estarán ansiosos de ver a sus maestros-
Tras decir esto guardo silencio y los dejo pensando en sus palabras, entre ellos no confiaban, los siths no estaban hechos para estar juntos pero si lograban una hermandad oscura serian una fuerza imparable, uno a uno asintieron mostrando que estaban de acuerdo
-bien, me alegro que al fin hayamos estado de acuerdo en algo para variar, por que les tocare su vena de orgullo, me quiero proponer como el líder supremo de toda la orden-
Todos se quedaron completamente callados al escuchar esto, la incomodidad se hizo mas grande de lo que ya era.
-no-
Vorak fue el primero en negarse de manera seca y con una molestia palpable en su voz.
-¿crees que responderemos ante ti solo por que nos reuniste hoy?, lo siento pero no lo acepto, no me dejare mandar por alguien que claramente nos quiere usar como tapete.
Vorak se movio para la entrada pero apocalipsis lo detuvo sujetándolo del hombro
-sueltame-
siseo vorak furioso
-tranquilizate vorak, si te vas estas perdiendo una oportunidad muy buena además estoy seguro de que algo bueno vendrá de esto, esto sin mencionar que si no te unes vikon irá tras de ti-
Vorak se zafo de apocalipsis y regreso a su lugar
-quiero aprendices, sin intervención tuya, quiero MIS aprendices, y solo para aclarar no te temo vikon-
lo miro soltando un bufido
-todos tendrán a sus aprendices, por cada uno de nosotros, de esto se trata todo y si se empiezan a matar entre ellos pues quedara el mejor de ellos-
Sonrio complacido de si mismo
Empezaron a escuchar las alarmas de los radares que anunciaban que había naves entrando, vikon los reviso levemente y después de hacer esto levanto la vista
-es hora, están llegando, tienen que tomar una decisión ya-
Todos se miraron entre ellos
-Queremos puestos-
Agru salio de la habitación después de decir esto
-Los tendrán-
Vikon sonrio complacido, su plan estaba resultando mejor de lo planeado, los cuatro salieron y los guio hasta las zonas de aterrizaje, todos miraron hacia el cielo, bajando lentamente venían dos naves, el viento que hacían al acercarse y bajar lentamente agito sus capas y revolvía la tierra en remolinos que envolvían a las naves, finalmente ambas aterrizaron, los motores se apagaron y los cuatro lords observaron a los primeros en bajar de las naves.
Los acólitos oscuros
El salón principal del templo bullia en actividad, las previsiones de vikon habían fallado, no solo habían llegado 20 aprendices nuevos, por la estancia se paseaban más de 50, había quienes habían decidido asaltar la cocina, mientras que otros se dedicaban a observar a su alrededor, y unos pocos, los más desconfiados estaban recargados en las paredes vigilando atentos desde las sombras, los que destacaban en su mayoría eran mandalorianos, sus cascos y armaduras de beskar relucian y todos se mantenían muy juntos, los otros nuevos aprendices los observaban con recelo y envidia su unión y se mantenían un poco apartados de ellos, esto a los mandalorianos no les importaba, se tenían entre ellos y parecían un buen activo para los planes de vikon, la única mandaloriana que se mantenía apartada de su grupo era una mujer que había decidido asaltar la cocina en cuanto había llegado, tres más la habían seguido y dos más, un hombre y una mujer jóvenes solo se habían sentado en la mesa a beber cerveza, conversando entre si, parecían estar llevándose bien, mientras tanto desde una esquina en sombras los más desconfiados vigilaban todo y caminaban por los alrededores del salón y cerca de los 4 enormes tronos de piedra que estaban cerca de la entrada principal, entre ellos una hermana de la noche, la única que había acudido al llamado por orden de la madre talzin, su rostro de piel blanca y ojos ámbar se veía levemente por el resplandor de las luces del lugar, ella no quería estar allí pero no podía hacer nada, tenía que cumplir sus órdenes y entrenar para volverse una buena asesina y agente del lado oscuro, a su lado había un nativo de korriban que miraba con resentimiento a todos los aprendices que estaban repartidos, no se veían muy bien sus rasgos pero si se veía su piel roja solo que quedaba casi opacado ya que estaba envuelto en su capa y lo único que resaltaba de el eran sus ojos ámbar que brillaban levemente en la oscuridad, el aún miraba con mucha desconfianza a todos cuando de un momento a otro todo el salón se empezó a oscurecer, esto atrajo la atención de los presentes y el ruido comenzó a desaparecer, se oyeron pasos lentos y acompañado y todos voltearon a la misma direccion, entrando lentamente 4 figuras altas y envueltas en capas negras se acercaron a los tronos y cada uno se paró delante de ellos, los que estaban cerca de los tronos se alejaron lentamente sin vigilar sus movimientos, esos 4 seres imponían respeto y su fuerza se sentía por todo el lugar, una vez que todo quedo en silencio y todos miraban a los 4 individuos
-bienvenidos acólitos es un placer para mí y mis hermanos tener a tantos interesados reunidos aquí, mi nombre es lord vikon y soy supremo líder de está orden, mis hermanos, apocalipsis, vorak y argu conforman el consejo oscuro al que ustedes se dirigirán mientras estén aquí, serán también sus maestros, a los cuales se les asignará una vez que veamos sus habilidades, a mi cargo quedarán todos aquellos que tengan poder intenso, o sean buenos estrategas, quiero dejar algo en claro, este lugar no es para los débiles ni traidores, cualquiera que sienta que no pertenece aquí puede irse, no necesitamos de ellos en esta orden y si se atreven a traicionar a sus maestros o al sus hermanos se castigará con muerte, quedan advertidos –
Todos se movieron inquietos, pero nadie hablo, temian hasta pensar ya que parecía que aquellos Lords podrían leerles los pensamientos, otro de ellos dio un paso al frente
- acólitos soy lord apocalipsis, gran almirante de está orden, admiró su valentía al venir y prometo que no será sencillo pero serán siths dignos, los aprendices que estén bajo mi mando serán entrenados en la lucha y el uso de la fuerza, y con suerte y si siguen vivos ascenderán hasta convertirse en lords oscuros-
Dio un paso hacia atrás y el salón seguía en silencio, todos tenían la atención puesta al frente y nadie perdía un detalle de la palabras, otro de los individuos, su voz cavernosa resonó en la sala y llamo la atención de todos los mandalorianos
Soy lord vorak, gran ejecutor de la orden, para los aprendices que tenga bajo mi mando les hago la advertencia, si no cumplen con. Mis mandatos serán expulsados y perseguidos, los que queden se convertirán en pilotos y estrategas de combate aéreo, aprenderán a dirigir nuestra flota y serán los que protejan desde el aire cada batalla que haya-
Camino de regreso a su anterior lugar, el último dio unos pasos al frente, recorrio rápidamente la sala y se detuvo en algunos acólitos para después proseguir
Soy lord Argu, gran inquisidor, seré breve, quiero a los más sanguinarios, sigilosos e inteligentes, que puedan ser excelentes asesinos y que no cuestionen ordenes, a los que queden bajo mi mando se les envíara a misiones de alto riesgo, espero a los mejores y que no me fallen-
El lord oscuro se regresa a su lugar y de nuevo el líder supremo se adelanta
-por el momento todos tienen el rango de acólitos, para poder ascender y conseguir ser asignados a un maestro deben superar una prueba-
Saca una holopad y proyecta un mapa con puntos marcados
-este es un mapa que muestra lugares en los cuales hay simpatizantes de la República y la resistencia, queremos que los ataquen, vayan solos o en grupo no nos importa pero todos tienen que colaborar y traer algo de dónde ataquen, solo así se les considerará para tener un maestro, los que no cumplan serán expulsados, aquí no existen segundas oportunidades-
Todos miraban el mapa tratando de buscar un lugar a dónde ir, había muchos puntos, suficientes para todos
-Tienen dos días para cumplir su cometido, de no regresar a tiempo quedarán fuera, acólitos tienen su misión, nosotros estaremos aquí, partan está misma noche, que la fuerza este con ustedes- los Lords se fueron por dónde habían venido y la atmósfera se relajo de nuevo, los mandalorianos inmediatamente se reunieron para discutir qué lugar atacarían, un zaabrak se acercó a ellos e inmediatamente fue integrado, algunos se apuraron a salir presurosos entre ellos el pura sangre nativo de korriban-, era obvio que preferían hacerlo solos, la hermana de la noche después de echar un último vistazo decidió ir sola, se echo su bolsa de viaje a la espalda y salió del templo, la mayoría no querría ir con ella y lo entendía, su poder era algo que la mayoría no entendía, con este pensamiento en la cabeza se dirigió a su nave pensando seriamente a dónde debía de ir, pero casi al llegar a ella alguien la detuvo del brazo
-¡Hey tu!-
La hermana se giro molesta para encontrarse cara a cara con la mandaloriana que había asaltado la cocina, era un poco más alta que ella y su piel blanca resaltaba entre sus ropas negras, sus movimientos eran acompañados por su fluido cabello lacio negro teñido de rojo en las puntas, aunque llevaba un lado de la cabeza afeitada había encontrado la manera de arreglarlo y darle un aspecto fiero, al igual que todos sus ojos eran color ambar y la mueca de orgullo demostraba su carácter
-que quieres? ¿No ves que estoy a punto de irme?-
La otra no se amedrentó por las rudas palabras de la hermana, le extendió la mano
-soy vidde bacor-
La otra la miro con recelo, no se creía tanta confianza
-ravaa-
Dijo al fin pero no le estrecho la mano, la otra entendió la indirecta y bajo la mano, se le quedó viendo fijamente, sin perder su aura oegullosa
-veo que te quieres ir sola a la misión pero no estaría mal tener una compañera que te cuide la espalda ¿O si?-
Sonrio tratando de lucir confiada, ravaa la miro como si estuviera loca, solo un pequeño movimiento de su muñeca y vidde bacor estaría llorando en el mundo de los muertos, acaricio un poco más ese pensamiento antes de soltar un bufido de resignación, ciertamente ir en pareja sería más beneficioso para la misión, volteo a ver rápidamente a los demás acólitos, algunos ya estaban despegando en sus naves haciendo que las ropas de todos ondearan mientras que otros ajustaban alianzas o revisaban el estado de sus armas, miro de regreso a la chica y asintió sería, la otra sonrió enormemente, estaba claro que ella deseaba esa alianza más que ravaa
-¿En qué nave nos iremos?-
pregunto vidde mientras miraba entre la suya y la de ravaa
-podemos ir en la mía si vamos los tres juntos- un hombre de aspecto militar y regio salió de entre la multitud, ravaa lo reconoció, era el que estaba bebiendo cerveza tranquilamente en la cocina antes de que los Lords aparecieran, el hombre frente a ellas, alto y corpulento se veía intimidante, su tono de piel un poco morena revelaba que había vivido en un planeta soleado, su cabello negro aunque un poco crecido mostraba claramente un estilo militar, vestía lo que parecía un uniforme de la academia imperial de pilotos, se veía rudo y confiado
Y ¿Tu eres….?-
Pregunto ravaa con suspicacia mientras lo inspecciónaba de pies a cabeza
-soy octavius autuumm, piloto del imperio pero también un sith-
Lo dijo orgulloso y sereno, a ravaa le agrado, era el tipo de personas que llevaría a una misión
-mi nave es más rápida, cabemos más y tenemos un compañero extra, el ya se encuentra en la nave revisando que todos los sistemas estén en orden…-
Iba a decir algo más pero una voz masculina y burlona grito entre la multitud
-¡¿Esa chatarra?! ¡Tendras suerte si despega Octavius!-
El aludido puso cara de pocos amigos y levanto un puño amenazante
-¡Cállate fluver está nave vale más que esa estúpida cubeta que tienes por cabeza!-
Ravaa volteo a ver de dónde provenía la voz pero solo vio al grupo de mandalorianos, decidió ignorarlo por completo y regreso su vista a vidde y a Octavius, este había bajado su puño u se había calmado
-entonces ¿Tenemos trato?-
Ravaa se lo pensó un poco, finalmente asintió y lo miro directamente
-tenemos un trato pero si alguno de ustedes trata de matarme no tendré piedad-
Los miro de manera peligrosa pero Octavius solo se limito a sonreír mientras que con una mano agarró la capucha de ravaa y rapidamente tira de ella hacia abajo haciendo que su cabeza quedará totalmente envuelta en ella
-eres tierna y cero amenazante pequeña ravaa-
Riéndose de su travesura la rodea y Se encamina a su nave mientras que ravaa lo miraba incrédula por lo que acababa de pasar, definitivamente Octavius autumm no era un sith común, a su lado su nueva compañera hizo algunos novillos riéndose antes de seguir a Octavius, ravaa comenzó a pensaqñr que era muy mala idea haber hecho una alianza, entonces una vocecita en su cabeza empezó a recordarle las veces que había perdido por falta de aliados, suspirando resignada decidió seguirlos hasta la nave de Octavius que como bien había dicho el tal fluver no se veía que pudiera despegar sin perder una pieza, la observo con cuidado mientras sus nuevos compañeros hablaban, pero por la cabina de mando pudo ver a su cuarto acompañante que identifico inmediatamente, era el nativo, su piel roja resaltaba sobre sus ropajes negros, tenía un rostro rudo y serio, por un momento se sintió observado y giro su cabeza hacia ravaa que lo miro directo y sin desviar la mirada, sus ojos amarillos senfijaronnennlos de ella , pero el solo hizo una seca cabezada a modo de saludo y siguió preparando la nave, ravaa se encamino a la entrada de la nave, ya estaban listos para partir
Por favor señoritas tomen sus lugares-
Lo dijo Octavius en un tono divertido, mientras se sentaba en el lado del piloto, a su lado el sith callado las ignoro olimpicamente, Octavius giro su cabeza y se rio
-vamos no seas tímido, a vamos a viajar juntos deberías al menos decirles tu nombre-
El aludido las observo de reojo mientras tomaba los controles
-ragnus, un gusto-
Su voz profunda y tenebrosa delataba un carácter cerrado y poco amigable
-ravaa-
La hermana de la noche alzó la mano un poco presentándose mientras se sentaba y se ajustaba el cinturón
-vidde bacor-
La otra chica se sentó igual y se acomodo en el asiento, finalmente ravaa tuvo la confianza y se bajó la capucha que le cubría la cabeza, su cabello largo, blanco y lacio cayó a ambos lados de su cabeza, Octavius la miro sonriendo de que al fin mostrará algo de confianza
-bien nos vamos a Hoth, el lugar está repleto de bases de avanzada rebelde, habrá suficiente diversión para todos-
Comenzó a pulsar botones y accionar pequeñas palancas, al hacer esto la nave comenzó a cobrar vida, todos se sujetaron a sus asientos cuando la nave se levantó, la nave crujió un poco al ascender a la atmósfera pero no perdió ninguna pieza, finalmente salieron al espacio, y korriban comenzó a alejarse lentamente
-bien si nadie ha muerto hasta ahora pienso que nuestra misión podría ser un éxito-
Todo voltearon a ver sorprendidos a ragnus, el no volteo y se concentro en lo que tenía al frente
-señoras y señores tenemos algo de humor!-
Octavius sonrio y comenzó a fijar coordenadas en su computadora de navegación, un silencio invadió la nave mientras hacia esto, pero fue roto por ravaa quien trato de contener una risa por el destello de humor de ragnus pero sin poder contenerse, por segunda vez todos voltearon a ver a su acompañante
-creo que puede ser el inicio de algo bueno-
Octavius les guiño el ojo y preparo el salto
-entraremos en el hiper espacio en
3
2
1-
Al decir esto las estrellas parecieron jalarse y la nave finalmente saltó.
Al salir del hiper espacio la cabina de la nave se quedó silenciosa, durante todo el trayecto habían entablado pequeñas conversaciones, ravaa y vidde tenían una conversación más establecida mientras que Octavius y ragnus respondían poco, estaban concentrados en el tablero de control que tenían delante de ellos, pero al salir del hiper espacio los cuatro fijaron su vista en el helado planeta blanco, parecía poco probable que alguien montará una base allí, el clima y la fauna del lugar no eran precisamente las cosas más agradables de la vida, ragnus activo unos comandos
-entrando en modo sigilo-
La nave descendio aún más hacia el planeta y ravaa sujeto fuerte sus sables de luz, no era la primera vez que atacaba y mataba pero cada vez que iba a hacerlo sentía la adrenalina recorriendo sus venas, volteo a ver a los demás disimuladamente y los encontró concentrados en lo que tenían al frente, también estaban ansiosos, todos querían demostrar lo que valían frente a los Lords.
La nave entro en la atmósfera y comenzó a vibrar por el mal clima, Octavius sujeto fuerte el mando de la nave y trato de mantenerla lo más firme que podía, ante sus ojos se descubrió un paisaje blanco y desolado, la nieve tenía destellos azulados por el mal clima y había remolinos por todas partes, habían entrado justo en una tormenta lo cual era perfecto para no ser detectados
-octavius allí ¿Lo ves?-
Ragnus hablo de pronto señalando una formación rocosa que estaba visible, era enorme y parecía ser la entrada de una caverna enorme
-en ese lugar nos podemos refugiar y planear el ataque, el campamento rebelde no debe estar lejos de aquí-
Octavius asintió y descendió aún mas, el viento agitaba violentamente la nave, ravaa se sujeto de nuevo de su asiento y pensó rápidamente en qué hechizo la mantendría con vida si es que se llegaban a estrellar pero no hubo necesidad de ello, lento pero seguro Octavius logro aterrizar la nave en la entrada de la caverna, inmediatamente el ruido del viento y la vibración se apagó, todos respiraron y soltaron el aliento que no sabían que estaban conteniendo
-bien hay que abrigarnos y bajar, tenemos mucho que planear antes del ataque-
Vidde bacor hablo y se levantó primero de su asiento encaminándose a la entrada de la nave, todos tomaron de sus bolsas de viaje un abrigo, pero Octavius saco varios aros metálicos y se los paso
-son reguladores de temperatura, colóquenselos en el cuello y no pasarán frío, se los prometo-
Todos tomaron uno y con un poco de recelo se lo ajustaron al cuello, inmediatamente empezaron a sentir un calor que les invadía el cuerpo por completo
-bien estamos aquí-
Octavius saco una holopad y proyecto un mapa de la zona, había una enorme formación montañosa que según la información tenía varias cavernas y túneles que los rebeldes usaban para ocultarse y de base de operaciones
-tienen dos entradas más las puertas de los hangares, hay que entrar rápido y matar a todos, lo importante es tomarlos por sorpresa al ser 4 solamente dependemos de eso, ravaa que tan desarrollada está tu magia?-
La hermana de la noche se movió incómoda y bajo la vista al suelo
Soy mejor con el sable que con la magia-
Fue lo único que Contesto, la vieron unos minutos y Octavius y vidde bajaron de nuevo la vista al mapa pero ravaa podía sentir la mirada de ragnus viéndola fijamente, alzó un poco la vista y se encontró con la mirada ámbar del sith, este la sostuvo un minuto más y regreso con sus compañeros al mapa
"Debe pensar que soy una perdedora, si, seguro lo soy, quien es hermana de la noche y no sabe controlar su propia magia?"
Se regaño mentalmente mientras se acercaba de nuevo al mapa, Octavius analizaba el lugar girando el maquetado 3d que tenía frente a el
Yo y ragnus podemos ir por las puertas de los hangares y la salida trasera, tu ravaa y vidde por la delantera, tenemos que destruir todas las naves que se puedan y asesinar a todos si es posible, con suerte todo saldrá bien y mañana nos ascenderán-
Octavius sonrio contento y saco unas cervezas
-pero antes brindemos por nuestra nueva asociación y que asesinemos muchos rebeldes hoy!-
Les paso una de las latas a cada uno y todos la abrieron al mismo tiempo, vieron a Octavius suspirar de gusto al oler la cerveza
-haaaa cerveza pirata, no hay una igual pero bueno empecemos con esto así que ¡Salud –
Octavius se llevó la lata a los labios y con grandes tragos se la bebió completa, los demás lo observaron con una cara de sorpresa y diversión, Lentamente todos se tomaron la suya y después de guardar las latas vacías se empezaron a alistar para la mision, ravaa saco sus dos sables y los comprobó que funcionarán bien, una vas hecho los guardo y volteo a ver a los demás, se sorprendí de ver que ragnus no llevaba un sable con el, sino una vibroespada larga y mortífera que blandia con destreza, se giro para no incomodarlo y se fue a la entrada de la cueva con Octavius que estaba parado con unos binoculares térmicos hacia las dunas de nieve
No hay huellas de calor por aquí, deberíamos irnos ya
Lo dijo con un tono de voz tan serio que ravaa volteó a verlo sorprendida, sonaba como todo un militar
-hey vamonos camino libre-
Todos atendieron a su llamado y echándose capas blancas por encima se pusieron en marcha, los dos equipos cruzaron juntos el paraje helado sirviéndose de la tormenta para ocultarse, cada tanto de tiempo se ocultaban entre las dunas de nieve para evitar cualquier escaneo térmico, finalmente llegaron al frente de la base, octavos les hizo una seña a las chicas y el y ragnus se movieron en diagonal desapareciendo entre la nieve para ir a la parte trasera de la base, ravaa volteó a ver a vidde, ella asintió afirmando que estaba lista para Avanzar, ambas tomaron sus sables y avanzaron lentamente, lograron visualizar la entrada a escasos metros de ellas, vidde saco unos pequeños binoculares y observo con atención
-hay dos guardias visibles en la entrada, es pequeña y angosta, será fácil si logramos bloquear esa salida, pero puede haber más guardias internos que no vemos, debía ser precisas-
Ravaa Se removió en la nieve analizando todo
-hay que rodearlos, tu llevas a uno y yo a otro al mismo tiempo, los matamos y tomamos la entrada-
Vidde asintió y se empezaron a mover, ravaa se dirigió al lado izquierdo mientras que vidde al lado derecho, ravaa tuvo que echarse pecho tierra para que no la pudieran ver y la nieve ocultara su huella térmica, a pesar del regulador el frío del suelo la entumecia por momentos, pero finalmente llegar a su objetivo, lentamente se fue levantando y pudo ver a vidde haciendo lo mismo en el otro extremo, los guardias parecían muy absortos conversando entre ellos, vigilo los movimientos de ella hasta que vidde le dio la señal, rápidamente y al mismo tiempo ambas se levantaron y tomaron a los guardias por el cuello, ravaa jalo el suyo hacia atrás y sacando su daga la hundió en el cuello del guardia, el hombre solo dio un sonido estrangulado antes de morir, la sangre corrió y mancho a ravaa de su ropa, ella sacudió la daga mientras veía como vidde le hacía señales para que fueran juntas a la entrada, ella se acercó con cuidado manteniéndose pegada a la pared, se asomaron levemente y vieron hacia adentro, se veía un pasillo bien iluminado y blanco, sin más guardias a la vista ravaa le hizo una señal a vidde para avanzar, de un movimiento rápido ambas se deslizaron al interior siguiendo el pasillo hasta llegar a lo que parecía ser una bifurcación con dos caminos
- hasta aquí llegamos compañera, te veo en el otro lado-
Vidde le sonrió y se fue por uno de los pasillos, ravaa suspiro y se fue por el otro, adentro estaba mucho más caliente pero no apagó el regulador, tal vez lo fuera a necesitar en una huida rápida, finalmente vio una salida y se acercó con cuidado para sondear el terreno antes de entrar,Al asomarse un poco pudo divisar a personas pasar por pequeño espacio por el que tenía visibilidad, así que se pego a la pared y sujeto fuerte su sable, estaba a punto de entrar y empezar la matanza cuando una alarma estruendosa se hizo por por todo el lugar
-¡Intrusos! ¡Asesinos!-
Un hombre se escuchaba gritar entre la multitud y se hizo el caos, todo mundo comenzo a correr para escapar, ravaa suspiró con fuerza y encendió su sable
-adios al elemento sorpresa-
Ella se adelanta corriendo por el túnel y ve a las primeras personas que van hacia ella huyendo, estás se quedan paralizadas al ver el brillante tono rojo de uno de los sables de la chica acercarse a ellos con velocidad, rápidamente ella corrió hacia ellos levantando el sable, algunos valientes sacaron sus blasters para disparar tratando de detenerla pero con n Rapid a y ágiles movimientos ella desvío los disparos dando algunos saltos cortos debido al espacio tan reducido que tenía, logro acercarse a los primeros y sin piedad los corto de tajo matando los al instante, muchos corrieron de regreso por dónde habían venido y ella sonrió, empezaban a tener miedo, y con miedo sería más fácil acabarlos, cada nuevo enemigo que se le enfrentaba era uno más que terminaba bajo la hoja de su sable, finalmente pido entrar al lugar y estudiarlo rápidamente, era un lugar de techo bajo y muchos estaban ocupados con los enemigos que los estaban cercando, pudo ver la vibroespada de ragnus en una esquina junto con el sable de Octavius y ravaa con un grito de euforia savanza cortando todo lo que se encuentra, a su lado videe finalmente aparece aunque llena de sangre, ella le hace una seña para que se haga un poco a la izquierda, lo cual la chica entiende y se recorre, losnrebeldes lentamente van disminuyendo y sus cuerpos van quedando regados por el frío suelo, , j
Al ver esto a la chica le da un arranque de energía poderoso y riendo se lanza sadicamente sobre los pocos sobrevivientes que tenia cerca haciendo una carnicería, finalmente los gritos dejan de escucharse y ravaa parada frente a un montón de cuerpos mira a todos lados orgullosa, después de una rápida mirada octavius los ve con una mirada de euforia
-lo hemos ….logrado…. equipo!-
Todos sonríen relajándose de la tensión de la batalla y ravaa recoge una cabeza alzandola
-por la academia sith de korriban!-
CAP2
EL ASCENSO DE LOS ACOLITOS
Era entrada la noche cuandoa vieja cafetera de Octavius finalmente aterrizó en el oscuro hangar de la academia, apenas había unas cuantas naves que habían vuelto y todo estaba en total silencio
-octavius…..gracias por liderarnos-
Ravaa un poco timida lo ve en su asiento y traga saliva
Al hablar, ella sin embargo de inmediato se le olvida al ver el hangar silencioso
-no creen…no creen que está un poco solitario?-
Ragnus y Octavius asienten algo preocupados y alerta
-ire a ver qué sucede, esperen aquí-
Ragnus levantandose de su asiento los mira mientras ajustaba su vibroespada
-yo….yo voy contigo-
Ravaa se levanta con el mientras se acomoda su capa
-esta bien, pero mantente detrás de mi-
Esas palabras sin sentimiento hicieron que ravaa se encogiera un poco, sintió que había hecho enojar al sith, lo dejo avanzar primero antes de ir detrás de él a una distancia segura, sin embargo al bajar de la nave este la voltea a ver con ojos fríos
-dime niña, ¿Me tienes miedo?-
Ella niega ferviente tratando de lucir valiente
-entonces ¿Por qué te mantienes a distancia?-
Esta pregunta la tomo un poco desprevenida
-yo…..pensé que no querías que estuviera cerca de ti, así que estoy quedándome a distancia sin molestarte –
Ella desvío un poco la mirada esperando una dura respuesta sin embargo una risa profunda y llena de humor se dejó escuchar del joven purasangre
-¿Molestarme?-
El se rie aún más deteniéndose
-que curiosa eres ravaa, eres una de las criaturas más poderosas de la galaxia y piensas que me podrías molestar? –
El la ve con ojos al fin con un brillo divertido, ravaa iba a responder pero al instante algo la choco haciéndola perder el equilibrio, rápidamente se recuperó y vio a un joven que sin importarle nada caminaba rápidamente por delante de ella
-OYE IMBECIL FIJATE POR DÓNDE VAS!-
Al escuchar esto el joven se da media vuelta y los mira con ojos fríos
-¿me hablas a mi….?-
El la vio de pies a cabeza con una mirada algo desagradable y altanera
-¿Bruja?-
Ravaa molesta camina hacia el con grandes zancadas
-asi es idiota, Casi me tiras allá atrás-
Los puños de la chica se cierran y una débil neblina verde se deja ver alrededor de ellos, el otro joven la ve frunciendo el ceño y llevando su mano a su cadera donde cuelga su sable
-¡Hey! ¿Recién regresamos de nuestras misiones y ya peleando?-
Un mandaloriano de armadura completa se acerca hablándoles en un tono divertido y evidentemente joven como ellos
-agon….agoncito….agontonio-
Canturrea el mando mientras echa el brazo por encima de los hombros del joven de nombre agon
-fluver…no te metas en lo que no te importa –
Le dice amenazante mientras se quita su brazo de encima
-¡Y no me llames agoncito o agontonio! ¡Ustedes los mandos no tienen respeto por nada! ¡Me arrepiento de haber hecho la misión con ustedes!-
Fluver se rie mientras ve a ravaa que se sonroja de inmediato, podía sentir la intensidad de la mirada a través del visor
-vaya….¿Eres un ángel?-
Le pregunta un poco embobado a la chica que retrocede unos pasos
-un dolor de cabeza querrás decir-
Agon la ve fulminante
-bruja en algún momento acabaremos esta discusión, no pretendo quedarme aquí a dialogar con una cabeza de cubeta-
Muy digno se da media vuelta y se aleja de ellos, fluver aprovechando el descuido de ravaa le toma la mano
-discúlpalo, su origen choca con ser un sith, ¿quien diría que un naboo tendría unos modales tan malos?-
Ella jala su mano avergonzada
-si….he…. gracias…..-
La chica tartamudea sin saber que decir
-quítale tus manos de lata de encima-
La voz profunda de Ragnus sonó atrás de ella
-la estás incomodando, vamos ravaa, Octavius nos espera en el salón –
El purasangre la jala suavemente del hombro y la lleva con el, fluver sin dejar de sonreír los ve irse
-¡Los vere dentro entonces!-
Ella sin saber que decir camina al lado de Ragnus, ella suspira relajándose un poco, sin decir nada mas ellos llegan juntos al salón, ravaa se dio cuenta de que solo la mitad de los aprendices habían regresado de sus misiones, con cuidado paseo la mirada por el lugar notando los tronos vacios
-no los busques ravaa, no creo que aparezcan hasta dentro de unas horas-
Vidde habla a su lado sobresaltándola
-no los buscaba a ellos…buscaba a un estúpido que me chocó…..agon….así se llama-
Vidde se rie un poco
-ahh ¿El?-
Ella señala a una pareja en un rincón oscuro, el joven tenía muy sujeta a una mandaloriana que besaba con bastante pasión mientras le recorría el cuerpo por completo
-ya se ha besado con casi todas las mujeres aquí….espera …¡no me digas que te gusta!-
Ravaa hace una cara de asco
-¡jamas! A mi no me interesa alguien como el, ni nadie, soy devota a la oscuridad y a mis hermanas-
Ragnus pasa a su lado en dirección a Octavius
-es bueno saber eso-
Dice con algo de diversión mientras se sienta con su amigo y este le pasa una cerveza, ravaa junto con vidde se van a la misma mesa y se sientan tranquilas, la chica saca su holopad y comienza a escribir un reporte de su mision con la esperanza de enviarla pronto a la gran madre para enorgullecerla, lentamente el tiempo fue pasando, los acólitos iban y venían pero solo pocos regresaron, al finalizar su reporte ravaa muy satisfecha lo guarda y levanta la vista, el lugar habia revivido un poco, ella entre la multitud logro reconocer a fluver que celebraba junto a sus hermanos sin quitarse el casco, agon había desaparecido y sus compañeros seguían sentados en la mesa jugando cartas, al apagar la holopad vio interesada el juego de Ragnus y Octavius pero casi de inmediato todos guardaron silencio y las luces se atenuaron de nuevo, los cuatro maestros acababan de llegar.
Los cuatro finalmente dejaban ver sus rostros, lord apocalipsis era ya un hombre adulto , ravaa le calculo unos cuarenta y poco años, era difícil saberlo, más por qué tenía el cabello blanco y largo sujeto en una coleta alta, a su lado estaba el maestro vorak, se veía curtido en batalla, era muy corpulento y una cicatriz le decoraba y con el cabello corto casi al ras de su cabeza, entonces ravaa se fijo en vikon, era el más joven de los cuatro o eso aparentaba, a diferencia de los demás era un poco más delgado aunque atletico, su cabello un poco largo y de color negro le daba un aspecto despreocupado y incluso algo arrogante, ante todo ravaa deseaba ser escogida como aprendiz del líder supremo, eso le daría gusto a la gran madre, pero solo necesitaba esperar y rezar por ser elegida, por último estaba agru, el era extraño, tenía el cabello de color paja y era muy palido lo cual le daba un aspecto de estar algo enfermo, ravaa se sintió incómoda al verlo, no le provocaba esa grandeza que los demás tenían.
Los cuatro maestros se sentaron en sus tronos y los vieron a todos reunirse frente a ellos, vikon se levantó y los vio a todos
-asi que estos son los acólitos que lograron pasar las pruebas…-
El lord sith los ve a todos evaluandolos
-tenemos todo el reporte de las misiones de cada uno y nos hemos dado a la tarea de dividir a los acólitos de acuerdo a sus habilidades, y una vez seleccionados irán a instalarse a dónde su nuevo maestro les ordene y cumplirán sus órdenes, sean las que sean-
En esos momentos agon llega escabullendose entre la multitud algo despeinado y jadeante, rápidamente se colocó al lado de octavius
-¿Qué me perdí?-
Le pregunta con una enorme sonrisa en la cara mientras trata de arreglar su ropa
-¿donde estabas?-
Octavius lo mira divertido
-bueno…una mandaloriana quería un poco de amor después de su misión, no podía dejarla desamparada-
Ravaa al escuchar esto voltea a verlo de reojo, agon al notarlo la ve con burla
-no te emociones brujita a ti no te tocaría ni por todos los créditos de La galaxia-
Ella gira los ojos ignorándolo, en cambio dirige su mirada a los Lords esperando su asignacion, estos se sientan y sacan sus holopads
-¡SILENCIO!-
Vikon calla algunos murmullos entre la multitud
-¡daremos ahora sus asignaciones!-
El voltea a ver a apocalipsis que entendiendo empieza a leer con voz pausada
-Primer grupo
A cargo del almirante lord apocalipsis
Aprendiz fluver
Aprendiz Adame
Aprendiz ragnus
Aprendiz Dom
Aprendiz krehel dum
Ustedes serán conocidos como the dread Masters-
Los mencionados comienzan a celebrar un poco, fluver ve a Ragnus y le estrecha la mano, el purasangre con una sonrisa le palmea el hombro, ravaa le sonríe un poco, tenía la esperanza de que ellos se quedarán junto a Octavius y a vidde como equipo, lord agru se levantó y dio lectura a su grupo
-Segundo grupo
A cargo del general lord agru
Aprendiz bao
Aprendiz Kiri
Aprendiz karnack
Aprendiz Sirius black
Aprendiz azka
Ustedes serán conocidos como los caballeros de revan-
Los mencionados celebraron al igual que los primeros, ravaa pudo notar una mirada algo triste a Octavius, el había estado muy unido a una chica que ahora pertenecía al segundo grupo, expectantes todos guardaron silencio a la lectura del tercer grupo al ver qué lord vorak se levantaba
-Tercer grupo cargo de el gran ejecutor lord vorak
Aprendiz dook
Aprendiz carnac
Aprendiz agon
Aprendiz sterak
Aprendiz jalo
Aprendiz yutar
¡Su nombre aún está por definirse pero tengan por seguro que pertenecen a uno de los más gloriosos grupos de esta academia!-
Lord vorak les sonríe fríamente, ravaa empezó a sentir que la cabeza le daba vueltas y un enorme temor, y….¿Si ella no había calificado?, faltaba solo el grupo del gran lider y ella no se sentía merecedora de ese honor, cerro los ojos con fuerza rezando a sus hermanas que su nombre estuviera entre los aprendices del líder
-Cuarto grupo a cargo del líder supremo lord Vikon
Aprendiz ravaa
Aprendiz Alva
Aprendiz brother
Aprendiz mirae
Aprendiz destruk
Aprendiz octavius
Aprendiz vidde bacor
Ustedes mis aprendices serán conocidos como los caballeros oscuros de la orden de Bane-
Capitulo 3
Alianzas
El corazón de ravaa se detuvo por un momento mientras procesaba esa información, ¿Era parte de los aprendices del supremo líder? Ella se quedó en blanco sin saber cómo reaccionar, a su lado Octavius le palmeó la espalda
-¡Ahora somos hermanos de clan ravaa!-
Ella sonrie feliz de al menos quedarse con Octavius y vidde, ella la busca con la mirada y la ve unos metros más alejada viéndola y sonriéndome, ella levanta los pulgares en señal de aprobación, lord vikon trata de ubicar a los suyos en el grupo
-¡Aprendices! ¡Siganme!-
El supremo líder se baja de su reino y camina hacia un pasillo que lleva a la zona sur del templo, los nuevos aprendices lo siguen callados separándose de los demás a quienes después de abandonar el salón ravaa alcanza a escuchar como los demás maestros les dan instrucciones, después de caminar un poco se detienen en un pasillo con varias puertas
-estas serán sus habitaciones, acomodense y descansen, mañana comenzará el trabajo-
Vikon los ve a todos seriamente
-quiero que tengan presente que ahora trabajan juntos, y cualquier anormalidad la reportaran inmediatamente conmigo, no tolerare la desobediencia y cualquier intento de rebeldía será duramente castigado…¿Quedó claro?-
-¡Si maestro!-
Todos gritan al unísono y el maestro vikon se aleja regresando por el pasillo, lentamente todos van eligiendo habitación, ravaa sin perder tiempo entra a la suya asombrandose del lugar, era una habitación bastante amplia, con un enorme ventanal, el techo en lugar de ser recto era abovedado, le recordaba a su hogar, ella cruzo una zona que parecía ambientada para meditación y se dirigió a su cama para dejar su bolsa de viaje, admirando las mantas que la cubrían acaricio la tela suavemente pero un sonido llamo su atención, parecía el sonido de metal chocando entre si y gritos amistosos, ella se asomo por el ventanal dándose cuenta de que su habitación daba a los campos de entrenamiento, en el lugar estaban algunos aprendices, entre ellos ragnus, fluver y agon, ellos mantenían un combate amistosos cuerpo a cuerpo sin armas, el sonido del metal era la armadura de fluver que chocaba cada vez que lo derribaban, tanto agon como Ragnus tenían el torso desnudo y se reían mientras luchaban entre si, ella sujeto las cortinas para cerrar pero se quedó perdida en los marcados cuerpos de sus compañeros, los veía como hipnotizada hasta que agon volteo viéndola fijamente, espantada por haber sido descubierta ravaa cerro rápidamente las cortinas y se dejó caer en la cama sintiendo los ojos pesados de cansancio, lentamente comienza a quedarse dormida sin ningún tipo de sueños.
Por la mañana ella despertó temprano y se dirigió al comedor, se había alistado lo mejor que podía, no sabía que tendría que hacer ese día así que trato de ponerse algo cómodo y ligero, al salir de su habitación y caminar hacia su destino pudo ver a alguien recargado en la pared, decidida a pasar de largo aceleró el paso pero una mano la detuvo del brazo
-hey brujita…te gustó lo que viste ayer?-
La voz burlona de agon sonó en su oído, ella inmediatamente se sacudió su agarre y retrocedió poniendo distancia
-si crees que te estaba viéndote a ti eres más creído de lo que pensé-
Ella le responde de manera mordaz sonriendo fríamente, agon pierde un poco la sonrisa pero se acerca a ella lentamente
-vaya….tratas de hacerte la buena, admítelo y dime lo que estabas viendo-
El se lanza rápidamente sobre ella y la acorrala contra la pared presionando todo su cuerpo sobre ella, ravaa se debate por debajo de el pero no logra soltarse, el chico la tenía bien aprisionada, con delicadeza le respira en el cuello
-ya te dije…..no te hagas ilusiones, las de tu raza me dan asco-
El después de decirle esto la suelta y se aleja por el pasillo riendo, la hermana lo observa irse enrojeciendo de rabia y continúa su camino hacia el comedor donde sus amigos ya estaban desayunando, aun enfadada se sienta al lado de Octavius y comienza a comer rapidamente
-hey…despacio, te vas a ahogar –
Octavius notando su comportamiento le detiene un poco la mano
-¿dormiste mal?-
Ella se detiene y lo ve un poco más tranquila
-no, de hecho bastante bien, no te preocupes Octavius, solo es una estúpida rivalidad que me gane con agon-
El comienza a reírse
-podrías retarlo a un duelo, tengo entendido que es lo que podemos hacer para evitar matarnos tan rápido-
Ella voltea a ver a la mesa donde agon alardea con sus compañeros
-quizás lo haga, es un estúpido-
Mientras continúan con su desayuno los maestros comenzaron a llegar uno por uno, todos guardaron silencio ya que se sentía un aura muy tensa entre ellos.
-se siente como si en cualquier momento fueran a matarse entre si-
Vidde se acerca a ravaa algo preocupada
-ayer lord vikon me llamo para una prueba de poder, pero al llegar a la arena de entrenamiento lo escuché discutir con lord apocalipsis, se detuvieron cuando llegue, pero sin duda estaban discutiendo fuerte-
Octavius interesado les pone atención
-es posible que dentro de poco un grupo se quede sin maestro, los siths tenemos la regla de dos por algo, pero nosotros deberíamos tener algún pacto, antes que nada somos un equipo, nuestro maestro tiene más de un aprendiz pero nosotros deberíamos de protegernos entre nosotros-
Las chicas asienten ante las palabras de octavius y ravaa le extiende una mano
-yo ravaa, hermana de la noche prometo no atacarte sin un motivo claro que se conozca-
Octavius toma inmediatamente su mano mientras ve a vidde
-igual lo prometo-
Dice la chica con una sonrisa algo nerviosa que le dio mala espina al joven pero sin decir nada solo asiente y suelta a ravaa para seguir comiendo.
