—Diálogos

—"Pensamientos"

—Acciones—

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Mansión Xavier.

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7:45 p.m. era la hora que marcaba el reloj, Rogue no podía dejar de verlo, el sonido de las manecillas al moverse la mantenía cautivada, al inicio había estado tratando de leer, estaba sentada en uno de los sofás de la sala, pero simplemente no podía concentrarse, se sentía incomoda ante el silencio que había en la habitación. Desde que Magneto había asumido el mando y Storm se había ido del equipo todos se habían encerrado en su propio mundo, era como si todos tuvieran miedo de convivir de nuevo en equipo.

Rogue pensó en los acontecimientos de los últimos días, extrañaba al profesor, parecía que sin él a cargo todo se derrumbaría, el equipo estaba tenso, les costaba poder confiar en quien fue su enemigo. Ella misma había tratado de mantener la paz, pero su encuentro con Magnus solo la había confundido, al inicio creyó que le daría alguna paz, algún consuelo, pero no era el caso.

Se levanto dejando su libro sobre el sofá, camino hasta llegar a la cocina donde pudo ver a Gambito que estaba frente al refrigerador rebuscando en este. Remy estaba a cargo de preparar la cena esta noche, era algo habitual en el equipo dejar la comida a manos del cajun quien no solía quejarse de tener aquella tarea, le gustaba "consentir a sus chicas" como solía referirse a Jean, Jubilee, Storm y a ella.

Aunque lo veía de espaldas noto que estaba utilizando un conjunto completo de la escuela, la sudadera tenía escrito Instituto Charles Xavier, como si fuera el uniforme de cualquier universidad, le parecía tierno verlo uniformado como un estudiante. Pero algo parecía estar fuera de lugar, podía ver lo tenso que se encontraba, moviéndose de manera brusca casi molesto, era normal escucharlo tararear alguna canción en francés mientras cocinaba, pero hoy solo había silencio.

—Remy… —Rogue le llamo viendo como el cuerpo del francés se tensaba, pero no volteo a verla manteniéndose de espaldas a ella.

—¿Quieres algo en especial para cenar? —le pregunto de manera distraída, hurgando en la nevera sacando lo que pensó serviría para preparar la cena.

—¿Te encuentras bien? ¿Quieres …?

—Creo que puedo hacer algo con las patatas —la interrumpió sin voltear a verla, llevando los ingredientes al lavabo para limpiarlos. Solo quería tener alguna tarea que lo distrajera, que le ayudara a ignorar la existencia de la sureña. —Supongo que puedo hacer…

—Puedes ponerme atención — si había algo que ella odiara era que la ignoraran, se acercó a donde estaba jalando su brazo para que volteara a verla. Remy frunció el ceño ante el arrebato, manteniéndose de pie frente a ella.

Bon, tienes mi atención ¿Qué quieres? —su voz se tornó ronca ante la molestia alzando la mirada para verla fijamente.

—Yo…—no contesto sintiéndose intimidada por su mirada, soltando su brazo mientras daba un paso lejos de él —Yo quería saber que te pasa, ¿Por qué estas molesto?

Rogue tropezaba con las palabras, incapaz de formular una oración coherente, obteniendo por parte de Remy una risa burlona, encogiéndose de hombros queriendo restarle importancia al asunto.

—Nada, estoy estupendo. —le contesto de manera simple sonriendo de medio lado.

—Si algo te molesta sabes que cuentas conmigo para hablarlo.

—¿Es eso verdad? —le pregunto con burla —Pensé que solo te importaba Magneto, digo como pasas tanto tiempo a su lado.

—Quería saber si estaba bien, esto es igual de nuevo para él como para nosotros, pensé que le vendría bien alguien con quien charlar.

—Claro y necesitaba ayuda para desempacar anoche.

Rogue no contesto, mirándolo sorprendida ante aquel comentario. No esperaba que alguien la viera salir del despacho y mucho menos que haya sido él.

—¿Qué pasa? ¿No querías hablar? — Ante la incomodidad del momento su sistema de defensa se activó, mostrándose más cínico al hablarle. — ¿Me vas a decir que piensas cambiarme por Magneto?

—No es lo que piensas —negó ante la acusación, frunciendo el ceño. —Lo que sucede entre Erick y yo es diferente, no lo entiendes…

—Tienes razón no lo entiendo, no entiendo porque cambiarias amor por algo tan simple como el toque de alguien—le recrimino de mala gana escupiendo sus palabras.

—¿Simple? —repitió sintiéndose ofendida, negó llevando su mano a su pecho como si quisiera demostrar el dolor que sentía —Para ti puede sonar simple, pero es algo que nunca he tenido, que nunca tendré.

Remy no contesto, estuvo callado mientras la miraba fijamente, no podía entender como terminarían separados por Magneto, por alguien que hace tan solo unos meses los había tratado de matar.

— ¿Y conseguiste lo que querías? ¿Quieres que te felicite por eso?

—Basta Remy, tú no eres así….

—Ahora dirás que me conoces.

—Lo hago. Ambos nos conocemos.

— ¿Sabes qué? No me importa —le menciono de mala gana, dándose media vuelta para retomar su tarea, abriendo el grifo del agua para empezar a tallar aquellas patatas de manera firme. —Avísame cuando sea la boda, mandaré un hermoso regalo

—No salgo con él. —contesto de manera hosca al ver como volvía a ignorarla.

—Si claro, ¿Qué necesitas? ¿Quizás una semana más de citas secretas para aceptarlo? —contesto con sarcasmo, tomando una de las patatas para limpiarla, la tallaba con fuerza apretándola con su mano, pero ante la fuerza de su agarre esta termino explotando en su mano, maldiciendo por ello. Remy cerro el grifo tirando los restos del alimento en la basura, limpiándose con un trapo.

—Le diré a Jubilee que pida pizzas, no me siento apto para cocinar. —esta vez hablo para sí mismo, negando repetidamente mientras trataba de esquivarla pasando a su lado.

—Remy debes escucharme—Rogue estiro su mano para volverlo a tomar del brazo, pero esta vez tomando una postura más dócil. Ambos se quedaron callados quedando uno a lado del otro.

—Si lo único que quieres es sentir el toque de alguien, eres una idiota —le menciono volteando a verla, esta vez con su mascara rota mostrando su molestia. Estaba experimentando un mar de emociones que iban desde la rabia, el dolor, pero incluso entonces sentía amor, un amor no correspondido.

—¿Por qué?... ¿Porque está mal desear algo que se me ha negado tanto? —le pedía una explicación, no lo hacía por maldad, no lo hacía por querer ser una persona rencorosa, solo quería sentirse como alguien normal — No quiero que nadie sufra. Solo quiero sentir lo que se siente abrazar a alguien, saber que no morirá por mi culpa.

—¡Yo también he sufrido! —le grito con desesperación, sujetando a Rogue por los brazos sacudiéndola un poco—Llevo el mismo tiempo anhelando tu toque, deseando que me dejes abrazarte, besarte, amarte…

Ante tal arrebato Rogue se quedo sorprendida, sin saber como procesar lo que le decía. —"Cualquier hombre que valga aceptaría con gusto tu toque mientras baila" — esa frase no dejaba de torturarla, odiaba lo que le hacía sentir. Se preguntaba porque debía ser todo tan complicado, porque siempre tenía que elegir, siempre debía tomar una decisión.

—¿Por qué lo haces? —le contesto con la voz apagada. —Podrías encontrar a alguien más que pueda darte lo que mereces.

—Pero no quiero a otra, quiero a Rogue, te quiero a ti —le menciono con desesperación, frunciendo aún más el ceño. — No me importa esperar, solo quiero tenerte a ti.

—Sabes que no puedo tocarte sin absorber tus recuerdos, tal vez incluso tu vida. ¡No puedo arriesgarme a eso, no lo entiendes! —le grito mientras lo empujaba, no uso su superfuerza, no quería mandarlo al hospital, pero quería imponer su deseo de alejarlo, aunque fuera por la fuerza, golpeo su pecho con sus manos, pero Remy no se alejó al contrario sujeto sus manos tomándola por las muñecas.

—Pero ¿Qué pasa si Gambito quiere arriesgarse? —le pregunto con la voz ronca, sujeto sus manos manteniéndolas contra su pecho para que sintiera su corazón latir. —Nunca tuve a nadie con quien abrirme antes de conocerte, pero ahora estoy dispuesto…

—¿Qué…que estás diciendo, Remy?

—Je t'aime, Rogue. Gambito dice que te ama —le confeso con sinceridad, mostrándose vulnerable, sin sonrisa sarcástica, sin juego de palabras, solo la verdad.

—Remy por favor, basta. —le suplico con un leve sollozo ante sus palabras. —¿Es que no lo entiendes? No me importa que me ames. ¡No importa lo que sienta yo por ti!

—Pero…

—¡No! Aunque quisiera amar, yo no puedo darle mi corazón a nadie por mucho que lo desee. Entiende Remy por favor, es por tu bien.

—Cuando tratas de no lastimar a nadie haces las cosas peor, chére. —le confeso de manera tranquila, entendía el miedo que le daba dejarlo entrar, él tampoco estaba acostumbrado a ser sincero con nadie, pero odiaba más la idea de estar solo —Déjame decidir si quiero esto.

—Remy…No es tan fácil.

—¿Quién dijo que sería fácil? —asintió con pesar soltando sus manos, pero manteniendo su mirada sobre de ella —Bien, solo contéstame algo y no te volveré a molestar.

—¿Qué cosa?

— Dime ¿Serás feliz si te dejo ir? ¿Te sentirás completa? —le pregunto con la voz apagada mirándola, era lo único que necesitaba saber para dejarla ir, si ella le aseguraba que sería feliz entonces él se apartaría, aceptaría su derrota y la dejaría irse con Magneto.

Rogue se tomó un momento para evaluar detenidamente aquel pensamiento, su mente sopesaba cada una de las posibilidades, ¿Una relación sin amor valía la pena? Magneto era algo seguro, algo que tendría siempre que quisiera, algo físico por la eternidad, era lo que más deseaba, sentirse como una mujer normal siendo abrazada y besada por su amante, pero aquel pensamiento solo dejaba un sabor amargo, ganaría lo físico, pero seguiría vacía por dentro. Por Erik sentía respeto, admiración e incluso atracción, pero no había calor, no había amor.

Volteo para ver a Remy, sus ojos no habían abandonado los suyos, mostrándose vulnerable ante ella, desesperado por su atención. Soltó una risa amarga por ello, le daba risa verse tan miserables. Ambos deseaban el amor del otro, pero ¿Cuánto tiempo duraría su amor? Sin poder tocarlo, sin poder crear un futuro juntos, él era un hombre con necesidades que jamás podría cumplir y era solo cuestión de tiempo para que la dejara, para que la odiara por atarlo a esta vida sin contacto. Pero incluso al saber aquello no quería que se fuera, no quería perderlo, prefería tener unos meses de felicidad a una vida llena de amargura.

—Rogue… —le llamo en un susurro, estaba desesperado por saber su respuesta, su garganta comenzaba a secarse.

—Yo… no puedo… —contesto en un susurro, provocando en el francés un suspiro agachando la mirada, pero Rogue se apresuró a llamar su atención tomando su mano — Te quiero Remy, pero no puedo —le respondió con la voz temblorosa, de sus ojos pequeñas lagrimas se formaban, tenía miedo de dañarlo, como podía arriesgar a alguien que amaba a sufrir con ella—Tengo miedo de hacerte daño — le confeso con dificultad.

El cajun se acercó llamándola por su nombre en un susurro haciéndola voltear a verlo, le regalo una suave sonrisa prometiéndole que todo estaría bien, Rogue ante este gesto se lanzó a sus brazos abrazándolo mientras buscaba un poco de consuelo.

— Si te hago daño…sé que… se con seguridad que querría morir.

Remy la sostuvo entre sus brazos abrazándola con fuerza, quería que se sintiera segura estando a su lado, él quería protegerla de todos incluso de él mismo.

—Entonces, iremos lento, lo haremos todo a tu ritmo —la separo un poco para poder verla a los ojos, deseaba tanto acariciar su mejilla, pero se conformó con mantenerla entre sus brazos, con cuidado se inclinó para besar su frente usando su cabello como una protección a su piel —Quizá con esto nos baste por ahora, quizá tengamos que aprender que hay algo más en el amor que lo meramente físico —le declaró con suavidad y cariño. Sabía que no era algo sencillo de cumplir, pero estaba dispuesto a encontrar la manera de poder amarla plenamente — Solo te pido que confíes en mí.

— ¿Cómo puedes querer esto?

—Te quiero a ti. —le contesto con seguridad mostrando una sonrisa — No me importa esperar días, meses incluso años, mientras tenga tu amor seré feliz, déjame ser feliz a tu lado.

—Eres un idiota —le confeso con un nuevo sollozo abrazándolo más fuerte, Remy la abrazo besando su cabeza, mientras le prometía su amor y cuidados. —Te amo Remy, solo a ti.

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Hola.

Bueno como muchos habrán visto en la serie de X-men 97 abarcara la relación de Rogue y Magneto, no lo negare, me molesto ver eso y por ello tuve que escribir esta historia, necesitaba mi paz mental.

Como es seguro que me enoje muy seguido con la nueva serie, seguro estaré trayendo más historias referente a este universo animado, así que espero les gusten estas historias.

También me gustaría saber su opinión sobre esta nueva pareja. ¿Les agrada el cambio?