- ¡Bingo! - Exclama Pretty, dando por finalizada su búsqueda.
[Archivo encontrado]
[¿Desea eliminarlo permanentemente?]
[Si/No]
- ¿Estas segura que debes hacer esto? – Pregunta una voz dentro del ordenador. – ¿No es tu función entregar todos los registros que se encuentran en este lugar?
- En ocasiones hay que ser flexible con las reglas... - Dice Pretty, mientras verifica algunos detalles. – No creo que sea lo más leal de mi parte permitir que circule por allí información de Lia o su entrenadora.
Entonces, una figura muy delgada sale del ordenador, tomando una apariencia parecida a la del tendido eléctrico. Era un Xurkitree, un pokemon denominado como ultraente.
- Ya comprobé que los archivos fueran borrados de todas las bases de datos, incluso de sus servidores de respaldo. – Afirma el pokemon eléctrico. – Ahora no hay manera de recuperar esa información.
- Sera lo mejor - Dice la agente, tomando sus cosas y preparándose para irse. - Ellas hicieron mucho para prevenir el apocalipsis... esta es mi humilde forma de devolverles el favor.
Luego que Samanta entregara la pokeball de Lia a su novio, la pareja se tomó algunos días para quedarse en la casa de Steven. Aunque más que para recuperar energía, lo hacían para realizar otro tipo de actividades.
Es en una de esas tardes, en donde ambos están caminando por el pueblo, en donde se encuentran con su vecina Sarah.
- Hola Steven, cuanto tiempo. – Pregunta joven madre, acomodándose el cabello. – No sabía que tenías una Gardevoir de compañera.
Lia evita la mirada instintivamente, pareciendo más un acto de timidez que de indiferencia.
- Hola Sarah. Ella es mi novia. – Responde el joven, mientras toma a su pareja de la mano. – Su nombre es Lia. Vino recientemente desde muy lejos, así que estaba mostrándole los alrededores.
Él era consciente de lo incomodo que podría ser esta situación para Lia. Pero, al tomarla de la mano, quería demostrarle que ya no había nada porque avergonzarse.
- Oh... que sorpresa. – Dice Sarah, notando el lenguaje corporal que tienen ambos. – Debo admitir que no es la respuesta que esperaba. Pero no me hagas caso, creo que está bien mientras ustedes dos sean felices.
Ella se acerca hasta Gardevoir y la mira directamente.
- Eres una chica muy linda, Lia. – Dice Sarah. - Espero que disfrutes de tu visita.
- Por cierto ¿Cómo le va a Tommy con su nuevo amigo? – Pregunta Steven.
- Pues, muy bien. Todavía están en un campamento con otros entrenadores de su edad. Me envía fotos a diario de lo bien que lo pasa con sus nuevos amigos. Todavía no sé cómo podría agradecerte por el detalle que tuviste con mi hijo al regalarle a Spoink.
- Me alegra saber eso. Esos dos se llevan muy bien desde que se conocieron.
- Bueno, ya tengo que irme. No quiero interrumpir su cita, chicos.
Sin más que agregar Sarah continua su camino, dejado algo pensativa a Lia.
Cuando ya se han alejado lo suficiente, Lia se detiene para darle un abrazo a su novio. No le dice nada, aunque él puede imaginar de lo que puede tratarse. En el fondo, ella no ha olvidado por completo lo que alguna vez hizo y siente vergüenza por ello.
Pero sabe que es algo que con el tiempo tendrá que aprender a superar.
Ella suelta a Steven y lo mira con una sonrisa, diciéndole, a su manera, que ya se encontraba mejor.
- Estuve hablando con mi hermana durante estos días. Creo que es el momento adecuado para ir a visitar a mi familia y tratar de arreglar las cosas.
- Eso es fantástico. Realmente espero que todo vaya bien.
- Será una visita breve. Luego de eso podremos volver a disfrutar de nuestras merecidas vacaciones.
Lia se sorprende por las palabras de su novio.
Él sabe que no aprovecharon como deberían los días que pasaron en Archi7, así que piensa que es la mejor oportunidad para hacerlo. Además, Lia le estuvo contando sobre los amigos que hizo en el lugar y la importancia que tuvieron ellos en su vida.
- Admito que me gustaría escuchar la historia que quería contarte ese Gengar. Ya sabes, sobre la primera pareja que se parecía a nosotros.
- Igual yo. Sería muy bonito escuchar juntos esa historia.
El sol ya se había ocultado y lo único en el cielo era la luna y el brillo de las estrellas.
- Pero... ¿No te va a incomodar saber que allí estará Melissa? No quisiera que la pases mal solo por darme este gusto.
- No es ningún problema. – Contesta Steven, con mucha seguridad en sus palabras. - Estuve evitándola por mucho tiempo... Hablaré con ella y buscare dejar las cosas en buenos términos.
Lia dirige una mirada de desconfianza hacia Steven.
- Más te vale que hagas solo eso. No quisiera regresar sola de las islas...
Al ver que su novia intenta parecer enojada, Steven la toma de la cintura y comienza a hacerle leves cosquillas.
- Ya, basta... – Dice Lia, entre inevitables carcajadas. – Suficiente...
Él se detiene, viendo de mejor humor a Lia.
- Es solo una broma. Yo sé muy bien lo que sientes por mi...
Dándose un tierno beso, ellos regresan a su departamento.
El tiempo pasa y ambos cumplen con los planes que habían realizado. A Steven no le fue difícil solucionar las cosas con su padre. Tanto él como su hermana recibieron a Lia de muy buena manera, creyendo que este tipo de relaciones solo eran cosas de antiguos cuentos de hadas.
Cuando partieron a las islas de Archi7, ambos disfrutaron de sus vacaciones sin ningún tipo de contratiempo. Lia manejo de mejor manera el viaje en ferry, ya que había tenido que acostumbrarse a ello en sus viajes con su entrenadora.
Llego a visitar por su cuenta a Hanna, poniéndola al tanto de lo que habían vivido en la anterior línea temporal.
- Ha sido un gusto volver a hablar contigo, Hanna. – Dice Lia, saliendo del Café Pokemon. – Volveré pronto, lo prometo.
- Oye Hanna... ¿Está todo bien? – Dice Floragato, notando muy extraña a su compañera. - ¿Te dijo algo raro esa Gardevoir con la que estuviste hablando casi toda la mañana?
Hatterene coloca su única mano en su pecho, mientras mira con una expresión de alivio tanto a Floragato como a sus demás compañeras del Café Pokemon.
- Todo está muy bien ahora...
Por la noche, la pareja estaba escuchando atentamente la historia que Gengar tenía que contarles. Antes de ello, este había escuchado gustoso, junto a Misdreavus, como se habían desarrollado las cosas en la anterior línea temporal y como una amenaza tan grande como Rey Unown era algo completamente desconocido para él.
- Deberán tener especial cuidado con su descendencia. – Dice Gengar, con un tono bastante maduro en sus palabras. - Habrá quienes intenten sacar provecho de sus poderes, así que será su tarea enseñarles a utilizarlos responsablemente.
Lia y Steven pensaron en un momento en esa etapa que aún les falta por vivir, y en como tendrán que dar lo mejor de sí para el bienestar de sus hijos.
- Mírate, Gengar. – Dice Misdreavus, en tono de broma. - Quien diría que viviría lo suficiente para escucharte dar consejos de paternidad a alguien.
La fantasma mira a la pareja y continua.
- Pero no les faltara ayuda, eso se los aseguro. Siempre puedes contar con nosotros por si necesitas a unos niñeros con la capacidad de cuidar a niñas psíquicas.
Su conversación continua por algunos minutos más, en donde hablaban de los planes que tenían a futuro. Los fantasmas se despiden, creen que es tiempo que la pareja de tortolos continúe con lo suyo.
En la playa, el sonido de las olas es lo único que puede percibirse.
La pareja camina por ella hasta encontrar un lugar donde pueden sentarse y apreciar la bella noche estrellada que ilumina el cielo.
- Y bien... ¿Qué te pareció? – Pregunta Lia, mirando atentamente a su novio. – Esa es la vida que nos espera si continuamos juntos. Creo que no he hecho más que volver las cosas difíciles...
Steven silencia a Lia colocando delicadamente su dedo en su boca.
- Espero que esta sea la última vez que digas algo como eso. – Dice Steven, con mucha ternura a su prometida. – Sé cuánto quisiste formar una familia y prometo que llegara el momento adecuado para hacerlo.
Lia se recuesta en el hombro de su Steven, mientras toma de su mano.
- No te has dado cuenta aun... - Dice Lia, recordando todas y cada una de las vivencias que ha pasado desde que Steven entro en su vida. - Pero tú ya me disté algo a lo que puedo llamar una familia...