Capítulo XI: Tiempo en contra (Parte I)
Nadie pudo emitir palabra alguna, exceptuando las "Sailor Scouts", ya que ellas desconocían quién era aquel enigmático personaje que los había rescatado de aquellos colaboradores del enemigo. Rosco, Jon y Garfield, al igual que Odie, sabían quién era: Se trataba de un hombre entrado en años, habiendo pasado lo mejor de su vida, quedando en el tiempo, entrado en años, de estatura media-alta, delgado, piel pálida, cabello crespo, abultado y canoso alrededor de la cabeza con calva en la parte de arriba, parecido a Larry de "Los Tres Chiflados". De cara larga, nariz enorme y redonda, sobre la cual se posaban unos anteojos pequeños, además de sus ojos enrojecidos cono apariencia de loco.
- ¿Quién es el Dr. Frankenstein? ¿Es amigo suyo?.- Preguntó Serena con cierto temor, llevándose una mirada de reprimenda de Rei, aunque está también temblaba del miedo.
- Es el Doctor Alubia.- Lo reconocieron Jon, Garfield y Rosco.- Descuida, Serena, él es bueno, aunque tenga pinta de loco, él es un hombre de buen corazón.
- Así es, chicos y chicas.- Habló Alubia con un tono que parecía rozar lo "teatral", como si se estuviera dirigiendo a un público invisible que lo llamaba y aplaudía, mientras que mostraba una gran sonrisa.- Mi nombre completo es Dr. Garbanzo Alubia. Trabajo como científico loco y desarrollo películas de una hora.- Contó sobre su profesión.
- ¡Genial!.- Los ojos de Mina se volvieron como Estrellitas Doradas brillantes, al escuchar eso.- ¿Tiene alguna de terror interesante?.
- Oh, jojojo, claro que sí, pequeña.- Respondió Alubia pero pronto adoptó una postura seria.- Sin embargo, éste no es el momento para hablar de cine y demás. No, no, Señor.- Meneó la cabeza y caminó de un lado al otro de su Laboratorio Secreto.-
- Pero ¿cómo nos localizó, Doctor?.- Le lanzó Rosco una pregunta, cosa que el hombre se detuvo en su andar, pisó fuerte y de ahí se acercó hacia ellos.
- Buena pregunta, chico: Fue gracias a este pequeño rastreador que detecta cualquier dispositivo electrónico por mínimo que sea.- Mostró aquel pequeño artefacto en su poder, el cual emitía una serie de pitidos y de ahí éstos rebotaban sobre la laptop de Rosco y la que Ami portaba consigo, apareciendo unas señales que daban a entender su posición.-
- Tengo que felicitarlo, Doctor. Eso sí que ha sido una muy buena estrategia.- Dijo la Sailor de cabello azul.- Arriesgo su vida para que venir a salvarnos.
- Es verdad.- Añadió Lita, cruzada de brazos y asintiendo con la cabeza.
- No, no, Señoritas, yo no soy un Héroe.- Movió sus brazos, rechazando el crédito.- Aún así, no podía dejarlos a ustedes, en especial al Señor Bonachon y sus mascotas caer en las manos de esa gente. Esos desgraciados hicieron todo un desastre por toda la ciudad.- Les contó, acompañándolo hacia donde estaban una serie de pantallas que mostraban las ruinas de la urbe, por lo que extendió una de sus manos hacia ellas, en donde se quedaron espantados.- Parece Roma después del "Saqueo de los Vándalos" que dirigió el Rey Genserico I, solo que aquí no mataron al Emperador Petronio Máximo, sino de que tomaron prisioneros a todos políticos que pudieron, en especial en el complejo gubernamental y otros puntos de vital importancia.
- Es horrible.- Garfield se tapó los ojos.- "Solo espero que mi mamá y mi familia estén bien".- Pensó para sus adentros, buscando aquella pizzería abandonada pero no tenían mucho tiempo.
- Eh, disculpe.- Intervino Serena y Alubia se dio la vuelta para ver qué necesitaba.- ¿Quisiera saber qué ha sido de los que nos dieron la bienvenida en el Hotel?. No recuerdo nada más, después de que nos gasearon...Cuando...¡ya lo recuerdo!.
- Yo también.- Se sumó Rei.- ¡Esos desgraciados!.
- Estoy contigo, nos mintieron, quisieron entregarnos al "Negaverso" y nosotros que dudamos de ustedes, chicas.- Se mostró Garfield, muy arrepentido.- Lo siento mucho.
- Sí, lo mismo digo yo también.- Se sumó Floyd.- No queríamos dudar de ustedes. Fue un error.
- Tranquilos.- Les llevó Serena la calma.- Entiendo, mis amigas también: No es su culpa, ustedes estaban pasando por un mal momento. Tenían dudas, temían por su hogar y qué sería de su Futuro pero, ahora, las cosas han dado un giro de 360*. Ya no podemos perder más tiempo. ¿Quién sabe cuándo volverá el "Negaverso" con un nuevo bombardeo?.
- Es verdad: Después de su último ataque contra Tokyo, no han vuelto a atacar con esa arma. ¿Qué estarán tramando?.- Inquirió Mina con seriedad.
- Algo me dice que esta es la calma previa a la tempestad.- Advirtió Artemis.-
- Artemis está en lo cierto pero ¿cómo acabaremos con la "Super Arma"?. Es obvio que la granja la deben de tener bien defendida, al igual que la estación de televisión.- Sostuvo la Sailor Venus ante las palabras dadas por su amigo felino blanco.
- Disculpen que los interrumpa pero ya han llegado.- Les informó Alubia y le siguieron el paso hacia lo que parecía ser un estacionamiento subterráneo de su Cuartel General, en donde llegaba el transporte modificado de Rosco y del cual descendieron varios perros amarillos parecidos a Odie.
- ¿Son los que yo creo?.- Preguntó Nermal, frotándose los ojos, incrédulo por lo que estaba viendo.
- Así es: Son mis Perros Robots que construí, algunos de ellos pero no se preocupen.- Contó el científico.- Son los mismos que había creado en aquella ocasión, solo que esta vez mejoré su inteligencia, lo cual fue de gran ayuda para traerlos hasta aquí y dejarles a los miembros del "Negaverso" una sorpresa, jejeje.- Al mirar a Jon, Garfield y Odie, recordando aquel "incidente", lanzó una risilla.
En la carretera, habían dejado amarrados al gerente, Mauricio y los Pececillos, llevando a que las "Malignas" de los Destacamentos de Neflyte tuvieran que informarle al respecto de lo ocurrido.
- ¡Jajajajaja, usted sí que es muy bueno haciendo esta clase de bromas, Doctor Alubia!.- Río Serena al respecto.
- Estoy con la cabeza de chorlito. Y quizás puedas aprender más de él para que mejores tus calificaciones en la escuela y no seas tan dormida.- Bromeó Rei, guiñando un ojo y llevando a que la rubia comenzara a discutir con ella.
- ¿Siempre son así?.- Quiso saber el científico a Ami, Mina y Lita, quienes se encogieron de hombros, cerraron los ojos y menearon la cabeza en señal de que era "clásico" de que las dos amigas tuvieran esas discusiones cuando se trataba de la vida de Serena y la escuela.
Justo en aquel momento, uno de los Perros Robot fue hasta Alubia para informarle algo al respecto.
- Oh, ¿ya?.- Preguntó el can mecánico asintió con la cabeza, por lo que el científico de cabello blanco se acomodó y fue hasta la puerta.- Han llegado unos amigos, descuiden. Son de confiar.-
Dicho y hecho, un camión que tenían, al igual que la patrulla con la que habían cerrado el camino, ubicados en un hangar del laboratorio, notaron a un hombre con capucha y tres acompañantes que llevaban impermeables contra la lluvia.
- ¿No tuvieron problemas?.- Se dirigió el científico.
- Forcejearon un poco, pero nada más que se pueda controlar.- Informó una voz reconocida, tratándose de un hombre joven y alto.
- Un momento...¡yo conozco esa voz!.- Dijo Serena ante aquella familiaridad.
Aquella persona se quitó el impermeable, siendo aquella persona que tanto conocía la chica rubia: De cabello negro, delgado y bien formado. Además de que vestía una camisa de mangas largas verde, pantalones café con zapatos negros.
- Me da un enorme gusto en volverte a ver, Serena.- Se dirigió el muchacho a la rubia, con educación, respeto y también por su relación que tenían, llevando a que la otra se le formaran unos corazoncitos en los ojos.
- ¡DARIEN!.- Exclamó ella, saltando a sus brazos y abrazándolo con fuerza.- ¡Te extrañé mucho! ¡Creí que también habían alcanzado tu casa cuando el "Negaverso" atacó con esa arma!.- Decía, llorando de la emoción, mientras que él no la soltaba por nada del Mundo.
- Esperen un momento.- Les detuvo Luna.- ¿Cómo es que tú lo conoces a él?.- Señaló al científico.
Darien se mostró tranquilo, mientras que se ponía de pie, saliendo del camión, para responder ante aquella interrogante que tenía la gata de pelaje negro, por lo que caminó hasta donde se encontraba el citado personaje.
- La verdad, Luna, es que conocí al Dr. Alubia por medio de unos libros de su autoría que habían estado empolvados en la Biblioteca de la Universidad. Se trataban de Medicina extremadamente experimental mediante el uso de Ingeniería Industrial, que era más o menos de lo que estaba buscando para mi tesis de grado. Por lo cual, contactándome con él, nos hicimos amigos.- Contó el peli negro su historia, viéndose imágenes de éste encontrando los citados libros, leyéndolos y con ello mantenía el encuentro hacia el hombre de Ciencias.
- Y uniéndolo a lo ocurrido con este desastre.- Prosiguió Alubia.- Le pedía ayuda al momento que me enteré, gracias a Rosco, de la aparición de unos seres extraños conocidas como las "Sailor Scouts".
- Y no se olviden de nosotros.- Dijo uno de los encapuchados y al quitarse aquellos abrigos, se revelaron como tres perros rechonchos, amarillos e iguales.
- ¡Oh no, ustedes no, por favor!.- Rogó Roy, preso de los recuerdos de aquella vez.
- Awwww, son tan lindos. ¿Tan problemáticos fueron?.- Preguntó Mina hacia ellos.
- Aún tengo dolores de cabeza al recordar la ensalada rusa mental que nos hicieron con sus nombres. ¡No les pregunten!.- Pidió el gallo bromista, tomándose un vaso de agua que le ofreció uno de los Perros Robot.
- Sí, pero esperen un momento.- Les detuvo Bo.- A pesar de que logramos esquivar otra bala, las cosas siguen igual a como estaban antes: Aún estamos bajo amenaza.- Recordó el hermano de Lalolin.- Esa "Super Arma" sigue activa.
Mientras tanto, en otro de los camiones que encontraron los Destacamentos de Neflyte, uno de los Espectros se llevó una gran "sorpresa" cuando se topó con los Pececillos amordazados junto a una barril de "Salta Tártara", por lo que tuvo que desatarlos y llamar a su General para informarle de lo ocurrido.
- ¡Jajajaja, toma ya!.- Festejó Garfield con Roy aquella burla hacia el enemigo.
- No cantemos victoria todavía, chicos.- Se les acercó Serena.- Aún tenemos una misión que cumplir. El "Negaverso" es capaz de cualquier cosa. No son tontos, recuerden.
- Tiene razón la Señorita Tsukino. Ahora, permítanme ver esa Memoria USB que tienen consigo.- Pidió el Dr. Alubia.- Necesitamos saber qué se traen consigo esos seres.
- Aquí tiene, Doctor.- Le hizo Rosco entrega de aquel dispositivo.- La hemos protegido bien. Esto ya se parece a la Primera Guerra Mundial, con la excepción de que aquí no hay "Palomas Mensajeras".
- Muchas gracias, pequeño.- Le agradeció Alubia.- Ahora, con respecto al "Virus Spyware", ¿alguien se hizo cargo de erradicarlo?.
- Sí, fui yo, Señor.- Respondió Ami con voz tímida, dejando sorprendido al hombre de Ciencias.
- Créale, es una genio. Nos salvó la vida y estamos en deuda con ella.- Le dijo Garfield, reconociendo aquel valor en la Sailor Mercury.
- Señorita.- Se acercó Alubia con paso firme y respetuoso.- En ese caso, voy a necesitarla a mi lado y también a ti, Rosco. Necesitaré de sus Conocimientos en Informática para poder descifrar esto. Mientras tanto, pueden ir a descansar en la parte trasera de las instalaciones.- Se dirigió a los demás.
- Un momento: ¿Cómo podemos confiar en usted? ¿No será otra trampa del "Negaverso"? ¿Trabaja para ellos?.- Inquirió Garfield con suspicacia, por lo que los demás comenzaron a discutir hasta que fue Darien el que puso punto final a las dudas.
- Miren, conozco al Dr. Alubia y si les hubiera querido entregarlos al enemigo, entonces yo ya habría ido en su auxilio. ¿Acaso van a dudar de él?.- Sostuvo el joven peli negro con firmeza en su voz.
- Es verdad, a pesar de que haya querido secuestrar a Odie y convertirlo en un robot, las cosas han cambiado y mucho. No podemos andar desconfiando todo el tiempo y más por lo que nos pasó en el Hotel.- Apuntó Jon, bajando la cabeza, sintiendo una cierta pena por lo que había ocurrido allí, mirando a las chicas.- Ustedes ya lo deben de saber, ¿no?.
- Jon.- Intervino Liz pero él negó con la cabeza.
- No podemos dejarlo como un secreto, Amor. Sería como apuñalarlas por la espalda.- Sostuvo el joven caricaturista, por lo que su novia se mordió los labios y suspiró hondo.
- Tienes razón.- Sentenció ella.
- Oigan, ¿y por qué me miran a mí?. Si fue Rosco el que empezó todo esto.- Apuntó Garfield al "causante".
- Nadie acusará a nadie: Todos somos culpables de haber puesto en tela de juicio lo que las chicas han estado haciendo por nosotros. ¿Acaso no crees que no nos habrán escuchado?. Vamos, no hay que ser cínicos.- Intervino Herman, cruzado de brazos.
- ¿Entonces?.- Preguntó Garfield.
- Estoy con él.- Se sumó Binky.- Fuimos muy egoístas al desconfiar de ellas y más cuando no sabíamos si esa Reina Beryl era de verdad. Lo que vimos, en el "Rancho de la Familia Jake", no fue ningún acto del cine ni efectos CGI, Garfield: Fuimos testigos del poder de un enemigo que desconocíamos, hasta ahora y que puede estar preparándose para otro asalto.- Comentó el Payaso de la Televisión.
El gato miró a Nermal, el cual lo observaba con dudas en su rostro, al igual que Odie y Floyd, por lo que tuvo que tomar una decisión final al respecto.
- No puedo negarlo: Sí, es cierto, todos compartimos parte de la culpa por desconfiar de ellas. Bueno, creíamos que se trataba de algún engaño pero, lo vivido en el "Rancho" y el Hotel, ahora me doy cuenta de que estamos en un peligro mortal con lo que podría pasar en cualquier momento.- Miró a las chicas, Luna y Artemis.- Quisiera disculparme si fui un desconsiderado.
- Lo mismo yo.- Se sumó Jon, acompañado por Liz, Herman, Binky, Orson y sus amigos.
- Cualquiera hubiera dudado de nosotras.- Comenzó Serena en hablarles.- Nosotros los escuchamos hablar, cuando nos encontrábamos en el Hotel. Al principio creíamos que ustedes iban a abandonar la lucha contra el "Negaverso" pero, después de lo que hemos vivido, ahora nos toca continuar juntos.
- Aún así, no paro de sentirme mal por lo que dije.- Repuso Garfield, apenado.
- Está bien.- Se le acercó Nermal.- Mira, sé que me odias y todo el tiempo me envías por correo para Abu Dabhi pero te entiendo: Nadie es perfecto. Lo que se vivió en el Hotel es cosa del Pasado, ya no podemos seguir rebuscando en esos motivos viejos, tenemos que seguir y acabar con lo que se nos han asignado.
- Es verdad, además, si este hombre nos hubiera hecho daño, ya estaríamos rodeados de fuerzas enemigas. Yo confío en él y en las chicas.- Dijo Mort a los presentes.
- Lo mismo digo.- Se sumaron los otros.
- De acuerdo: Ahora pongamos manos a la obra para descifrar esa Memoria. Cada segundo cuenta y no podemos perder más tiempo.- Pidió Alubia y con ello se puso a trabajar junto a Ami y Rosco en su Laboratorio Personal.
Mientras tanto, los Generales tuvieron que rendir una declaración ante la Reina Beryl frente al reciente fracaso y la posterior burla que sus enemigos les habían jugado cuando se encontraron al gerente, Mauricio y los Pececillos amordazados en uno de los camiones. Neflyte era el que más serio estaba con respecto a lo ocurrido, hallándose en la ciudad, mientras que Zoycite y Kunzite permanecían en la granja.
- "¡¿QUÉ?!".- Exclamó la Monarca pelirroja de la ira al enterarse de aquello.- "¡¿Cómo que no lograron capturarlas?! ¡Las tenían en sus manos! ¡Club de ineptos! ¡¿Y se dicen llamar "Generales del Negaverso"?!.-
- Lo lamento, Mi Reina.- Se disculpó Zoycite, haciendo una reverencia junto a su pareja.- Admito que no estábamos preparados para esa situación.
- Mi Reina, tenemos buenas noticias.- Añadió Kunzite, intentando poner paños fríos a la situación.- La parte de la "Super Arma" ya está en su máximo poder.- Mientras que él le comunicaba aquello, un Espectro del "Negaverso" se acercó hasta Neflyte para darle su parte.-
- Desde la ciudad también podemos atacar.- Añadió el pelirrojo, cosa que calmó a la Monarca.
- "En ese caso, disparen a un sitio al azar para que vean que hablamos en serio y así entregan a las "Sailor Scouts". No me importa cuál sea o qué país darán en el blanco, háganlo ya mismo".- Les ordenó y tras poner fin a la comunicación, se pusieron en marcha.
- ¿Qué opinan de este sitio?.- Preguntó Neflyte, señalando las coordenadas que tenía, las cuales daban con el Norte, las zonas montañosas.
- Me parece perfecto: Ya es tiempo que los habitantes de esta maldita ciudad sepan de nuestro poder y de las consecuencias por seguir manteniendo una resistencia.- Dijo Zoycite, complacida y de ahí fueron preparando los dos cañones.
Pronto, mientras que el grupo descansaba, en todas las televisoras aparecieron los Generales del "Negaverso", tomando por sorpresa a todos los presentes, quienes se pusieron de pie, inmediatamente, para oír aquel mensaje.
- ¡No puede ser!.- Exclamó Serena, horrorizada, mientras que Darien estaba a su lado.
- "Atención a todos los terrícolas: Esta es una advertencia final: Queremos que nos entreguen a las "Sailor Scouts" o sufrirán las consecuencias de nuestro ataque masivo. Para que vean que hablamos en serio, les mostraremos el poder de nuestra "Super Arma", igual que con la primera vez. Observen las maravillas de nuestra Ingeniería".- Dijeron los tres presentes, iniciándose el conteo y uniéndose las dos partes de aquella máquina.
- ¡¿Qué es lo que van a hacer?!.- Preguntó Wade, abrazándose a Lita, temblando del miedo.
- Van a hacerlo: Dispararán su Arma.- Sostuvo la castaña.
- "5, 4, 3, 2, 1...0".- Al terminar la cuenta regresiva, las dos armas dispararon un rayo de energía cada uno, elevándose por los Cielos y fusionándose hasta caer, igual que una bomba, contra el Norte, justo en las cercanías del refugio de las montañas.
- ¡Prepárense para el impacto!.- Pidió el Dr. Alubia, mientras que todos buscaron refugio ante aquella detonación.
Un resplandor, en lo alto, sobre el corazón de las montañas y luego vino la explosión que fue parecida al de una Bomba Atómica, arrasando con árboles y fauna por doquier, dejando un páramo de devastación y destrucción por doquier. Afortunadamente, el refugio consiguió resistir al embate del enemigo pero no sin sufrir una serie de temblores por doquier.
- ¿Todos están bien?.- Preguntó Artemis.
- Dios...Por un segundo lo llegué a ver.- Habló Jon, mientras que sostenía a Liz.- Fue...como si el Sol explotara...- Contó, impresionado.
- Nunca creí que vería mi vida pasar frente a mis ojos.- Dijo Roy.- Oye, Wade, emmmm...- Se dirigió hacia su amigo, quien estaba abrazado a Lita, todavía, fuertemente.
- Oye.- Le habló la castaña con calma.- Ya puedes soltarme.
- Oh, lo siento.- Se disculpó, mientras que iban a ver, a través de la Super Computadora que tenía Alubia, horrorizados al ver los daños causados contra la fauna silvestre.
- Esto es horrible y volverán a atacar. Esta vez van en serio.- Sostuvo Garfield y al decir su oración, la imagen de Neflyte volvió a aparecer.
- "Ahora ya saben las consecuencias de sus actos: Entreguen a las "Sailor Guardians" o volveremos a atacar cada 1 hora un punto a la vez. Están advertidos".- Finalizó el pelirrojo con frialdad absoluta.
["De la sartén al fuego". Con esto defino al capítulo de hoy. El tiempo está en su contra y no tienen tiempo qué perder. ¿Qué es lo que harán? ¿Podrán evitar nuevos bombardeos?. Eso lo veremos en el capítulo que viene.
Mando saludos y agradecimientos para todos ustedes, amigos y que tengan un buen día Martes de mi parte.].
