Disclaimer: Los personajes pertenecen a Stephenie Meyer, pero la historia es completamente mía. Está PROHIBIDA su copia, ya sea parcial o total. Di NO al plagio. CONTIENE ESCENAS SEXUALES 18.

Historia editada por Karla Ragnard, Licenciada en Literatura y Filosofía

Capítulo 7:

La ideal

Tony se quedó dormido llorando, con Queen de fondo. Había estado luchando con la culpa, aquella aberrante que sentía cuando hacía algo que le afectaba a su madre.

La había dañado.

A ratos se sentía tan mal que estaba a punto de levantarse y suplicarle a su mamá que lo perdonara, pero luego no se atrevía, porque cuando lo hiciera iba a llorar y eso la preocuparía más. ¡Y rayos! Ella siempre tenía la habilidad de decirle lo correcto para que él botara todo sin control, y esta vez, realmente no quería decirle nada porque sentía que iba a decepcionarla y…

Cuando despertó su cabeza dolía debido al llanto. Se sentía deshidratado. Miró a su mesa de noche y vio la fotografía que más atesoraba, aquella en la que salía su madre y él cuando apenas había nacido.

Sacudió la cabeza y se levantó, dispuesto a darse una buena ducha. Lo necesitaba.

Bella, por su lado, apenas había podido dormir. Lo ocurrido con su hijo le daba vueltas y vueltas, por lo que llamó de inmediato a su mejor amiga, Alice Brandon, una espectacular periodista que llevaba buen tiempo con su esposo, un perdedor de aquellos. ¿Que si podía imaginar a su hermosa amiga con un patético que apenas podía salir del sofá? Claro que no. No se veían hacía mucho y aunque sabía que se debían una conversación adecuada y protocolar, aquella en la que se respetaban los tiempos para contarse la una a la otra lo que no habían podido durante ese tiempo sin verse, Bella no pudo evitar contarle la dolorosa situación que había vivido con su hijo.

"—Debes comprender, ¡es un adolescente! —exclamó, quitándole importancia.

—Ya, pero ¿cómo lo superaste tú?

Alice suspiró.

Ella había sido madre a los quince años y su hijo pasaba de los veintisiete. Había sido todo un reto para ella, aunque también para Bella, pues juntas cambiaron sus pañales y ahora era un brillante ingeniero.

—Créeme que es difícil. Yo cerré la fábrica en cuanto lo tuve, por lo que viví su proceso con toda intensidad, ya sabes, yo también era muy joven y aún tenía la cabeza muy loca. Los adolescentes, a veces, tienden a tener comportamientos llevados al extremo, creen que no pueden confiar en nosotros porque estamos en su contra y… ¡Eso tú lo sabes! Eres psicóloga.

—Pues soy psicóloga, lo suficientemente buena para no saber qué hacer conmigo —respondió Bella.

—Solo tienes que darle tiempo al tiempo, ¿bueno? Sé que te comenzará a dar el síndrome del nido vacío ahora que él está tan grande y pronto se marchará, pero es la ley de la vida.

Bella sonrió.

—Yo también cerré la fábrica hacía mucho, no estoy dispuesta a vivir un proceso así, es difícil y… —Suspiró—. Ya crie lo suficiente… ¡Y vaya que es difícil!

—Pues lígate —dijo Alice.

Bella rio.

—¡Sabes que odio los procesos médicos!

—Pues es mejor que el DIU.

—Ya, lo tomaré en cuenta.

—Tranquila. Sé que pronto tu pequeño te hablará, estoy segura de que confía en ti, solo… es un adolescente. Ya sabes. ¡El mío me ocultó que estaba de novio con una chica! Casi lo mato.

Bella rio y se dio una vuelta en su cama gigante y esponjosa.

—¿Nos veremos pronto? Di que sí.

—¿Con un Cosmo en nuestras gargantas?

—Dalo por hecho."

Luego de aquella conversación, Bella pudo respirar un poco más tranquila.

Se levantó muy temprano en la mañana y le preparó el desayuno, esperando que con eso él se sintiera más a gusto. Aun así, él tardó bastante en bajar de las escaleras.

—Te he preparado el desayuno —dijo Bella.

—No tengo hambre, mamá. Me iré antes a la escuela.

Ella se quedó boquiabierta.

—Oh. Bueno—. Sonrió de forma amarga—. Cuídate mucho, ¿sí?

Tony asintió.

—Espera —exclamó, viéndolo tomar su mochila para marchar—. Sabes que puedes confiar en mí, ¿de acuerdo?

—De acuerdo, mamá.

Él se marchó, sin saber cómo decirle que lo sentía y que había conocido a un chico especial sin recordar las malditas palabras de su padre… Si es que podía llamarle así. De alguna forma, saber que seguía haciéndole daño a su madre le provocaba mucho dolor. Necesitaba ser sincero con ella, pero ¿cómo?

Cuando sacó la bicicleta, miró hacia atrás, esperando a que su vecino Ness apareciera pronto, tal como habían acordado anoche.

.

Edward estaba leyendo el periódico cuando apareció Ness, utilizando su gabardina de diversos colores.

—¿Y eso? —preguntó, dejándolo sobre la mesa—. Son las ochocientas horas, se te hace tarde.

—Estaba arreglándome —respondió con una sonrisa pícara.

Al teniente no le costó mucho comprender porqué.

—Ness Cullen, ¿de verdad…?

—Es un amigo —lo interrumpió de inmediato.

—Ya, un amigo… ¿Crees que soy estúpido? Tengo mis tácticas y te conozco como a la palma de mi mano.

—Claro que sí, teniente—. Ness le hizo un saludo militar y ambos rieron—. Creo que será un buen amigo.

Su padre enarcó una ceja.

—¿Estás seguro?

Ness acabó ruborizándose.

—Vale, me ha gustado en cuanto lo vi, pero creo que él aún tiene un conflicto con… Bueno, ya sabes.

Edward suspiró y le entregó los brazos, por lo que Ness de inmediato lo abrazó.

—No todos los padres comprendemos de la misma manera y no todos los seres humanos somos capaces de vivir con el miedo a ser discriminados. ¿Crees que su familia lo sepa?

Ness pensó en ello. Apenas sabía quién era la familia de Tony. Quizá sus padres no eran como el suyo.

—No lo creo —musitó—. Solo seguir conociéndolo.

Edward sonrió y le acarició los cabellos.

—¿Me dirás quién es?

—No todavía, pero prometo que así será.

—Perfecto. Ahora ve, se te hará tarde y ese chico no te esperará todo el día. Solo cuida tu corazón, no estaré siempre para protegerlo. Ve, cachorro, te quiero.

—Y yo a ti, papá. A propósito, ¿ya encontraste la manera de evadir las labores del ejército?

El teniente puso los ojos en blanco, causando la risa de su hijo.

Al poco tiempo de que Ness salió de casa, la familia de Edward llegó con sus carcajadas y alegría recurrente. Para el teniente no era fácil lidiar con su familia, en especial porque siempre recurrían al mismo tema. Cuando notó que además de sus padres, venía su tía Carmen y sí, su hermano de treinta, supo que la cosa se venía seria. De todas formas, el verlos luego de tanto tiempo solo hizo que saliera rápidamente de casa con Puntito ladrando, abriéndoles los brazos para recibirlos.

—Mi querido Edward —chilló Carmen.

Carmen era una mujer curvilínea dedicada a la cocina. Parte de su vida era beber todos los cocteles que encontrara mientras apretaba sus mejillas sin cesar. Ya pasaba de los sesenta y su deseo por los chicos menores era una situación que se hacía frecuente.

Sin embargo, el que Jasper fuera el invitado principal de esta sorpresiva visita solo le hizo sonreír. Hacía mucho que no veía a su exitoso hermano.

—Qué viejo estás —fue lo primero que se dijeron, para luego reír.

Jasper era un hombre soltero de treinta que se dedicaba a los negocios. Tenía una importante cadena de restaurantes, de hecho, eran de los más apetecidos y reconocidos del país. Era un hombre sin gustos por el amor y había rechazado demasiadas oportunidades para crear una familia.

—A ti ya te están saliendo las canas —le dijo al teniente.

—¡¿Dónde?! —bramó él, tocándose el cabello.

Todos se largaron a reír y dejaron los panqués y alguno que otro panecillo sobre la mesa, dispuestos a disfrutar de un desayuno con el recién llegado.

—¿Y Ness? —preguntaron Carlisle y Esme.

—Fue a la escuela —les recordó Edward.

A todos les costaba acostumbrarse a la idea de que el ya gran Ness estaba en la preparatoria.

Mientras disfrutaban de la comida y el café, Esme comenzó a acariciarle el cabello a su hijo, demasiado emocionada de saber que su retoño mayor había vuelto a la ciudad. Carlisle le sonreía mientras se miraban, pues a pesar de no tener su sangre, lo adoraba como suyo.

—¿Y finalmente vas a dedicarte a continuar como teniente o vas a dedicarte a algo más? —preguntó su padre.

Edward estaba cabreado con las fuerzas armadas. Había visto demasiado como para seguir siendo parte de ello. Ahora que se había decidido por volver a tener una vida algo más normal, lo que menos añoraba era dedicarse a labores administrativas, en donde obviamente iba a sentirse ahogado.

—Estoy buscando algo que me alimente el alma, ya sabes lo difícil que es, tengo cuarenta y tres.

—¡Aún eres muy joven! —exclamó Jasper.

—Pero sigo siendo un teniente, estoy agotado de ese tipo de trabajos.

—Ya verás cómo consigues algo, eres un hombre estupendo en todo sentido, ya verás —añadió su madre.

—¿Y ya has salido con alguna chica? —preguntó su tía Carmen.

—Sí, dime que has encontrado una buena mujer —dijo Esme, abrazándolo y apoyando su cabeza en su hombro.

Edward siempre fue acosado por eso. Siempre soltero, teniendo una que otra aventura sin importancia. Su hijo había sido una mala relación de joven y desde entonces lo que menos quería era perder el tiempo.

—No, ya saben que no —respondió.

Carlisle carraspeó y se acercó con seriedad.

—Hijo —murmuró—, si tienes algo que decirnos…

—Que no soy gay, papá —interrumpió Edward.

Jasper rio por lo bajo.

—¿Por qué no le preguntan a Jasper? ¡Nadie sabe dónde remoja la miseria que tiene entre las piernas! —se intentó defender el teniente.

—¡Oye! —espetó su hermano.

—Vamos, cariño, ¿no hay alguna mujer especial por ahí?

Antes de que pudieran decir más, escucharon el grito ahogado de una mujer y luego la vieron correr por el jardín, con el can de Edward persiguiéndola mientras sostenía la manguera entre sus dientes. Ese perro estaba obsesionado con ella.

Buenos días, les traigo un nuevo capítulo de esta historia, primero quiero agradecer el que me hayan dado tantos comentarios de apoyo, el entusiasmo por seguir leyendo y su cariño tan especial, pero también me he dado cuenta de los comentarios tan desagradables aludiendo a las críticas constructivas, en donde obviamente me insultan, no me interesan, sigan haciendo daño que es para lo único que sirven. ¿Qué creen que pasará ahora con los Cullen? ¡Conocerán a la vecina de su hijo, Isabella! ¡Cuéntenme qué les ha parecido! Ya saben cómo me gusta leerlas

Agradezco los comentarios deVerónica, Teresita Mooz, Lectora Intensa, natalie a salazar, Lys92, Bitah, Vasto, Arlette Cullen Swan, Fer Yáñez, NoeLiia, asimile el, Karensiux, Melany, Mangy dey, twilightter, yackie, Brenda Cullenn, ELLIana 11, Lu20, Tata XOXO, johanna maribel14, Pancardo, EM, 1208, patymdn, valem00, Erikay2003, kaja'5'7, alejandra1987, DannyVasquezP, ari kimi, Cris Feliz, Eli mMsen, Laliscg, Angelus285, luisita, dunia .Villatoro, Vero Morales, gloriam guevaraz, Ana, solecitonublado, Valeeecu, tocayaloquis, Twilightsecretlove, Mentafrescaa, sool21, roberouge, Solange C, Fallen Dark Angel 07, maribel hernandez cullen, Jocelyn, ariyasy , C . Car, Liliana Macías, 1208, Lore562, NarMaVeg, dayana ramirez, DanitLuna, Jade HSos, Marianacs, krisr0405, Alejandra Va, Mss Brightside, Yesenia Tovar, Rero96, Karina Ramirez, Perla Olivera, diana0426a, miop, Elizabeth Marie Cullen, Angel twilighter, Teresita Mooz, saraipineda44, E - Chan Cullen, Yoliki, cindycb03, Desiblack, Valentina Paez, Sofi Bi, kathlen ayala, Pao - SasuUchiha, jackie rys, Franciscab25, Jimena, rosy canul 10, Ady Denice, ELIZABETH, Gan, Freedom2604, stella1427, esme575, Mary de Cullen, Makarena L , Elizabethpm, morenita88, LaPekee Cullen, ale 17 .m3, SeguidoradeChile, Noriitha, MariaL8, maidely34, Valevalverde57, Pam Malfoy Black , Belli swan dwyer, calia19, Mapi13, BreezeCullenSwan, MarianaF, merodeadores 1996, Iva Angulo, 17camilanicole, EloRicardes, Santa, Ana Karina, AnabellaCS, calvialexa, Liz Vidal, RivaDalva, Cinthyavillalobo, almacullenmasen, Mayraargo25, Mime Herondale, LadyRedScarlet, Liliana Macías, Naara Selene, cavendano13, Miércoles 14, Ana Karina, verdejade469, TheYos16, NoeLiia, calia19, roberouge, JMMA , Darknesssorceress18, claribelcabrera 585, Verónica, BreezeCullenSwan, LM, Joa Castillo, Makarena L, Holly Swan, Adriu, Cullen - 21 - gladys, beakis , Angel twilighter, Cinthyavillalobo, valentine delafuente, luisita, Eni - Cullen - Masen, Mapi13, SeguidoradeChile, Mary de cullen, Emma Cullen, quequeta2007, ninacara, whit cullen, Annabcn, Giss, nikyta, merodeadores 1996, Black Angel Lilith, Celina fic, Lyd y Guest, cada Gracias que ustedes me dejan es invaluable para mí, no tienen idea del impacto que tienen sus palabras, su entusiasmo y su cariño

Ya ven que ante más entusiasmo, más rápido habrá capítulo, así que el capítulo 8 está a la espera para subirlo

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