Bélgica ha llegado más o menos temprano de trabajar, preparado algo que saaaaabe que le gusta a Escocia y está esperando a que vuelva del día de Golf leyendo uno de sus libros de vikingos, nerviosita.

Ahí viene él dejando el coche donde siempre.

Bélgica deja el libro, aun sintiéndose más nerviosita. Se peina un poco, cuidándose de parecer... natural, no se ha pintado de más ni nada. Ugh. Deja de pensar.

Escocia abre la puerta con sus llaves y saluda. Bélgica le sonríe desde la sala, haciéndole un gesto con la mano.

—Hey! —sonríe acercándosele.

Bélgica sonríe un poco al verle sonreír, pensando repentinamente que lo que sea que pase... tiene remedio.

—¿Cómo estás?

—Bien... un poco cansada. Hice los ravioles que te gustan, ¿tienes hambre?

—Oh! Yes!

Bélgica sonríe un poco más y le abre los brazos para que le dé un besito y ahí se acerca más.

Bélgica sonríe sintiéndose mejor y Escocia acaba sentado junto a ella en el sofá.

Ella le pone una mano en la pierna y se le recarga un poco encima, mirándole a los ojos y haciéndole un cariñito con la otra. Él le sonríe.

—¿Como te fue hoy? —sonríe más, sintiéndose de verdad un poco más normal por primera vez en todo el día.

—Bien, bien... —suspira—. Cymru está un poco desquiciado y Eire ha traído a Sey. Voy por una cerveza y la pasta. ¿Te traigo una?

—Ah, sí. Compré unas para hoy, están en el refrigerador.

—Voy —se levanta. Bélgica asiente, sonriendo un poco, igualmente un poco nerviosa, pero menos que un rato atrás y ahí vuelve él con todo en una bandeja, volviendo a sentarse.

—¿Qué dice Cymru entonces?

—Hemos llamado a Nanny, France no nos ha dejado hablar con ella y se ha puesto histérico.

—Pues... supongo que esa es la reacción normal de alguien que ha dejado a su esposa.

—Sí, sí, no digo que no.

—Es... en realidad es bueno que esté así, porque Lux...

—Aja?

—Bueno, sí está un poco agobiado, y... no quiere ser el tipo que Cymru use para olvidarse de Galia.

—Oh... ¿E-Eso piensa que hace?

—Pues sí... un clavo saca a otro clavo. Y él tiene novia, al final... no suena tan descabellado el...

—Ya, ya... En realidad, tiene lógica que lo piense.

—Lo que creo es que, si Cymru cree que va a conseguir algo ahora, creo que lo único que está haciendo es echarlo a perder.

—Todos le hemos dicho que se lo tome con calma.

—Bueno, igualmente creo que Lux va a decirle que no vaya el viernes y que se vaya a su casa.

—Uf... eso va a destrozarle.

—¿Tu... crees? —Bélgica se muerde el labio

—Estaba hoy hablando que tal vez Galia no quería ir por sus cosas.

—Eww... pero ¿por qué no querría?, quizás vaya con alguien.

—Bueno, estaba en el drama. Le he dicho que os diera a Sey y a ti sus cosas.

—Si no va, dile que vamos con él y le ayudamos a quitarlas.

—Ya, ya, eso le ha dicho Sey.

—Aun así, es que... creo que si le va a echar. Quizás deberías advertirle o... ¿quieres que se venga a quedar aquí?

—Ugh, no! Really? ¿Aquí?

—Pues si crees que va a destrizarle ir a casa y Lux le echa...

—Noooo, Belgiuuuum —lloriquea, pensando además que con todo el tema de la boda y conociendo a su hermano, va a ser un infierno para él.

—Quooi?

—¿En serio le quieres aquí? Ugh—aprieta los ojos porque también sabe que lo debe estar pasando mal y quizás…— Se lo dices tú.

—Me estás diciendo que lo va a destrozar y ¿qué hacemos? ¿Mandarle a casa?

—No... —suspira derrotado porque mira que el maldito mal tempo de todo esto, pero su hermanitoooo.

—¿Entonces?

—Se lo dices tú. Y yo voy a decir que me he opuesto a ello TODO EL TIEMPO.

—Vale, vale... —Bélgica sonríe—. Hoy... Lux me preguntó un montón de cosas

—¿Como cuáles?

—De la boda... creo que deberíamos hablar de ello y afinar detalles —Bélgica traga saliva

—O-Oh... eso —traga saliva también.

—Ya sé que no es el tema que más ilusión te hace, solo... es que, sí necesitamos hablar, darling.

—L-Lo sé... Lo sé.

—Pero necesito... es que necesito que podamos hablar del tema con soltura. No tener que estar de puntillas, porque estoy... haciéndome ideas tontas.

—¿De qué?

—De todo, de ti y de mí y... es que... no quiero una boda del todo des balanceada, quiero encontrar el balance.

—Estuve... estuve pensando. Y hablé con Cymru y... estuve pensando más. A lo mejor sí puede ser una ceremonia celta. Creo que me... creo que exageré un poco.

—Yo creo que yo no necesito que sea una cosa tan seria, si lo que quiero es... gritarle al mundo que eres el tipo que más me gusta y que soy feliz a tu lado.

Escocia se sonroja con eso.

—Y sí, quiero una ceremonia, pero me importa más hacer algo al nivel que nos convenza y nos haga felices a ambos, que... a fuerzas hacer una cosa súper seria.

—Puede... ser como tú quieras.

—Lo que quiero... es que desmenucemos la boda, lo que va a pasar y... lo que no queremos que pase. Si decir algo o hacer algo te pone incómodo, no lo hacemos...

—De hecho... — se humedece los labios—. Quería hablar con Galia, quería preguntarle como era el ritual celta y que implicaba exactamente precisamente para eso.

—Podríamos... hacer una mezcla de cosas que nos gusten, o cosas que si queramos hacer y cosas que no. Ya sé que no te... gusta del todo la idea — Bélgica sonríe un poquito y le hace un cariño en la mejilla.

—N-No, sí... vale.

—Podemos Ir de cosas menos agobiantes a cosas más agobiantes... —Bélgica sonríe

Escocia asiente.

—¿Te agobia que sea en un templo?

Niega.

—¿O en la naturaleza?

—Lo que prefieras.

—Me refiero a si te agobia alguno de esos.

—No, me es indiferente.

—Vale... ¿qué hay de la música?

—Pues me da igual, pero si quieres bailar, no pidas cosas muy raras.

—¿Que querrías bailar? Tú eres el de la música. ¿Podría pedirte ayuda en eso?

—Ah, no, digo... si quieres. Eire tiene la colección de discos más grande del mundo.

—Entonces... vendido —le sonríe —. ¿Qué hay del texto de la boda?

—¿Texto?

—Pues todo lo que uno dice, lo clásico... yo Belgium te acepto a ti... Alba

—E-Ehmm... ¿Q-Qué pasa con... eso? —vuelve a sonrojase

—No sé... ¿te gustaría decirlo?

—¿A... mi?

—Pues hay que decirlo ambos.

—Vale y... ¿qué quieres decir?

—Pues a mí no me molesta ese texto, pero quizás la frase de "todos los días de mi vida" te parezca a ti un poco... agobiante. En serio... podemos quitar y poner y modificar lo que sea a nuestro antojo. De hecho, no sé si quiera realmente... —se sonroja—. Que nos case un padre.

—¿Y quién querrías... qué has pensado?

—No sé... pensaba en opciones. O que quizás podríamos casarnos uno con el otro sin un padre propiamente.

—¿C-Cómo sería... cómo sería eso? —parpadea un poco sin entender.

—No sé, quizás te sería peor. Solo decirnos cosas, tú y yo... cosas lindas. Quizás eso te pusiera más nervioso.

—Puede ser como quieras.

—No, Alba, no puede ser como quiera, porque si la hago como quiero sin considerarte solo te agobio y la odias más.

—No, no, de verdad.

Bélgica suspira y Escocia le mira un poco desconsolado.

—No te enfades por lo que te voy a decir, ¿vale? Quizás yo no... estoy interpretando esto bien... y es feo que me sienta así cuando tú intención es otra, p-pero —levanta una mano y le acaricia la cara con esa mirada, mientras habla—. Siempre me has hecho sentir fuerte, independiente y valiente y... siempre estás ahí conmigo acompañándome y opinando, p-pero por una vez, en este tema en concreto... cuando me dices eso m-me siento... sola.

—¿Por? —parpadea unas cuantas veces.

—Porque... es como, toma tu todas las decisiones y yo no me voy a quejar ni a opinar, ni a protestar si algo va mal ni a alegrar si algo va bien, porque la boda no me gusta y me da igual y... y me gusta hablar contigo de las cosas y que opines y me ayudes y me rectifiques cuando la cago. N-No sé si quiero hacer una boda yo... sola s-sin... tu opinión.

—Pero es que... es que lo que yo quiero es que salga como tú quieres. No es como que no me importe si sale bien o mal, claro que quiero que salga bien, pero quiero que salga... como tú quieres.

—Es que quizás soy muy idiota, Alba, pero a lo mejor incluso necesito tu ayuda para saber hasta cómo es que la quiero... —se le esconde un poquito en el pecho—. Quiero casarme contigo, pero quiero que salga bien, no quiero torturarte con ella y que me quieras menos por hacerla, quiero que sea un día bonito para ambos, que sea especial.

Escocia aprieta los ojos.

—Quizás debería estar buscando ayuda para esto en otro lado... pero yo suelo hablar contigo las cosas, así que si no puedo hablar esto contigo porque no te gusta es... es que lo único que voy a conseguir con esta boda es terminar más lejos de ti de lo que empecé... y...

—Es que... es que sigues esperando que me haga la misma ilusión que a ti, ese es el problema.

—Es que no tienes el mismo interés o la misma ilusión por mi trabajo que yo y aun así podemos hablarlo... —Bélgica aprieta los ojos.

—Pero si no he dicho que no lo hablemos. Solo es que no voy a decidir cosas igual que no las decido en tu trabajo.

—Pero si das tu opinión o me dices que decidirías tú.

—¡Es distinto!

—Puedo hacerlo yo sola... y solo contarte sin esperar opinión.

—Es que lo que quieres es que tome responsabilidad sobre esto.

—¿Y si sale mal y toda la responsabilidad es mía?

—No va a salir mal.

—Considerando que podrías no llegar...

—No voy a hacer yo que salga mal, no quiero que salga mal. Solo es que los parámetros para que salga bien los pones tú. O voy a empezar a decidir aleatoriamente solo para que no seas tú quien se agobie.

—Es que todo esto suena un poco a que es mi boda y tu solo vas a ir a hacer una parte porque necesito casarme con alguien, no suena a que sea nuestra boda. Por eso me siento sola.

—Sabes, es que esto es como si fuéramos a comprar un coche y yo te empezara pedir que TÚ eligieras que coche crees que es mejor cuando sabes que yo tengo unos gustos muy concretos y unas preferencias específicas y conocimientos mucho mayores en el tema que tú.

—Pero al menos si esto fuera como un coche estaríamos todos de acuerdo en que... el coche sería de ambos y yo también lo usaría y al menos podría opinar sobre él y siento que tú estás tratando esto como si fuéramos a comprar... una gaita.

—Pues es que la boda es de ambos y al menos puedo opinar sobre... la lista de invitados, Belgium, pero simplemente, el motor de la boda, me da igual.

—Es que, si es así, vale... si es así no tengo problema. Pero insisto que tu actitud parece más como que fuéramos a comprar una gaita, que a mí ni me gusta, de hecho, la odio un poco... y nunca la voy a tocar y me da lo mismo que en el papel sea "nuestra" gaita, yo... es que si pudiera no la tendría ni en casa. Es más, si pudiera la ahogaría en el río.

—¿Desde cuándo tienes esos sentimientos por mis gaitas?

—¿¡Estás siguiendo mi ejemplo o no?! —Bélgica se ríe, porque era un ejemplo... aunque bueno...

—¡No! ¿Ahora resulta que no te gustan mis gaitas?

—Ugh! Verdades a puños aquí —Bélgica se ríe un poco.

—Eso veo —él también se ríe.

—Ya, fuera de broma... veo que entendiste bien este asunto del... odio.

—Pues es que... insisto, puedes explicarme y te escucho, pero...

—Pero quiero que sea tu coche... no tu gaita —le mira a los ojos y sonríe un poquito.

—¡Aun estoy ofendido por las gaitas!

—¡No las odio! — Bélgica se ríe y se le acerca para darle un beso, él la besa de vuelta—. Voy a... tratar de calmarme y a organizar esto lo mejor que pueda.

Escocia le sonríe

—Y si me agobio vas a tener que soportarme y recordarme cuanto me quieres y que no vas a dejarme de querer solo por querer una boda.

—¿Dejarte de querer?

—Yo te dije que estaba pensando tonterías...

—Pero...

—Si me quieres aún, ¿verdad?

—Pues con esto de las gaitaaas...

Bélgica se muere de risa contra su pecho y Escocia se ríe también.

—Me siento mejor... por un momento pensé que la boda era lo peor que había hecho nunca —le mira.

—Que dramática... aunque...

Ella levanta las cejas.

—¡Es broma! ¡Es broma!

—Uuuugh ¿Sabes? Solo por eso ahora vas a tener que leer los votos.

—¿Eh? ¿Qué votos?

—Los que vas a escribirme.

—Pero... ¿qué? ¿Tengo que escribir algo?

—Escribirme.

—Bueno diré que... voto por No al Brexit. Es un voto.

—Allemagne va a aplaudirte.

—Ya, bueno... y cinco minutos más tarde volverá a olvidar quien de nosotros es cual.

—También. ¿Me podrías... escribir algo bonito?

—"Something beautiful" bueno, son palabras largas, pero... creo que me las apañaré, sí. Si no me miras si hago faltas de ortografía... ¿No es eso?

—No, Es escribir una cosa bonita para mi —Bélgica hace morritos.

—A lo mejor podría componerte algo en la gaita. Ah, no, que no te gusta.

—Eso también quiero.

—Sí, claro, para que me hagas Bullying.

—Bullying? ¿Yo?

—Pues quién si no.

—Eres un dramaaaaa

—Mira quien habla

—Así que... me quieres... y vas a hacerme una canción —Bélgica se ríe otra vez

—¿Una... canción?

—Eso dijiste, cómo votos.

—Noooo

—¿No quieres hacerme algo? —le mira a los ojos.

—Yes, but... No sé si quiero... leerte o cantarte frente a todos.

—Ahh... eso. Bueno hazlo como si no tuvieras que leerlo frente a todos.

—But...

—Bueno, podemos decidirlo.

—Es que todos dirán que es cursi.

—Alba, es que como no hagamos algo así, todos dirán que eres frío.

—¿Frío?

—Pues es una boda y todos sabe cómo son ustedes.

—¿Cómo somos?

—Sensibles y los mejores con las palabras.

—¡No somos sensibles!

—Sí que lo eres.

—Mira, entiendo que puedas haber sacado esa idea de mis hermanos, pero yo...

—Eres el hombre con el que quiero casarme.

—¿Y-Y eso qué... qué tiene que ver? —se sonroja otra vez.

—Pues qué hay unas expectativas.

—Pero si no digo que no te vaya a hacer algo solo que...

—No necesariamente tienes que leerlo... pero tienes que tener algo que leer —le sonríe.

—Si no tengo que leerlo, ¿entonces para qué?

—Porque si tienes que leérmelo a mí.

—B-But...

—Por favor.

—Insisto que leerte a ti...

—Pues... quizás solo tengas que leerme a mí.

—¿Cómo?

—No sé, ¡lo importante es que me escribas algo bonito!

—Vale, vale.

—Y entonces la boda vale la pena de nuevo. Voy a traer un vestido blanco. Que lo sepas —Bélgica sonríe.

—Anda, claro, como no me cuesta bastante convencer a todos que sí te acuestas conmigo...

—Bien, después de la boda les diré que me has robado al fin mi... segunda virginidad.

—¿Segunda?

—Bueno, todos saben que antes de ti...

—Ya, ya, si no era eso.

—¿Entonces?

—No sabía que se podía tener una segunda.

—Pues antes de ti pasó tanto tiempo que creo que hasta Virgen me hice otra vez.

—¡Anda ya!

—Sí, creo que hasta me volvió a crecer el himen y todo —Bélgica se ríe.

—Entonces sería una tercera.

—¿Tercera?

—Si eso te paso antes de conocerme fue la segunda y ahora sería la tercera.

—Nah, bueno eso es lo que todos creen, que yo soy una señorita.

—Ah, entonces... ¿la segunda no ocurrió y esta es la segunda?

—De cara a la galería, sí.

—Entiendo.

—Aunque tú y yo sepamos las... nasty filthy things que me haces hace años...

—¿Y cuantas más de esas puedo hacer antes?

—Hum... depende de cómo te portes.

—Anda ya, pero si me estoy portando perfecto.

—De aquí a la boda aún faltan algunos meses... pensaba en una boda a finales de octubre.

—Oh... Octubre... vale. ¿Nos dará tiempo?

Bélgica sonríe con ese "nos" sintiendo calientito en el corazón.

—No sé... Si es en mi casa aún podría ser en noviembre, o ya de plano hacemos una boda invernal pero no quiero que se parezca a la de Austria y Suisse.

—¿Fuimos a esa? —pregunta frunciendo un poco el ceño porque no se acuerda.

—Yo hice la figura de chocolate,

—Sí, pero a la boda no fuimos.

—No, no nos invitaron.

—Pues que se jodan.

—Bien, creo que el primer paso es ver cuando hay iglesia en las opciones que tenemos — Bélgica sonríe.

—¿Cuáles te gustan? Pero... espera, ¿eso significa que realmente descartamos lo de la boda celta?

—Pues, sinceramente pensé que no querías para nada así que... hum...

—Es que... sé que esto va a sonar fatal y no quiero que sea así si no quieres, pero...

—¿Ajá?

—Estaba pensando en mi madre, ella... entenderá mejor la importancia de esto sí...

—¿Y... quieres que la entienda o no?

—En realidad me da igual.

—A mí me gustó la idea de la boda celta cuando me hablaron de ella —Bélgica hace los ojos en blanco.

—Lo que digo es que no quiero que sea así por mi madre, aunque puede que te ayudara con ella. Tal vez así creería finalmente la... seriedad de ello y que no sirve de nada pelear como pelea. Aunque su pelea no sirva de nada ya ahora.

Bélgica sonríe.

—Lo que me gustaba a mí de la boda celta es que me parecía menos rígida... más amoldable a algo que nos gustara. Si tiene el extra de que a tu madre le haga entrar un poco en razón...

—¿S-Seguro?

—Si, solo que no se si en invierno vamos a congelarnos.

—Nah, los kilts son para invierno.

Bélgica le hace un cariñito en la mejilla.

—Si hay... si la ceremonia esa del atado de manos te parece muy agobiante, podemos cambiarla o no hacerla.

—Ehm... d-déjame hablar... con Galia sobre todo eso.

Bélgica sonríe y asiente.

—Está bien... se vale cambie de opinión, si algo te agobia o te preocupa... es que necesito que vengas y lo Hablemos. Quiero que te sientas bien hablándome de ello.

—Vale, vale

—Y quiero poderte yo hablar de esto también con... naturalidad. Sea lo que sea.

—No sé porque sientes que no puedes.

—Porque todo me salió mal al principio de esto.

—¿En qué sentido?

—El fin de semana todo iba... bien, pero al instante que estuvimos solos todo empezó a ir genuinamente mal. Pero mal, MAL —Bélgica le mira a los ojos.

Escocia aprieta los ojos porque no debió contarle y ella suspira.

—¿Ves? Por esto es que... siento que no puedo hablar contigo ya de estas cosas, ni de esto, ni de lo de Rome...

—No debí contarte eso. Nadie debió contarte eso, joder.

—Lo que no debió es pasar —Bélgica suspira de nuevo.

—Igualmente. Joder—protesta.

—¿Por qué te molesta que lo sepa?

—Porque no necesitabas saberlo. No aporta absolutamente nada bueno que lo sepas.

—A mi si me aporta.

—¿En serio? ¿El qué?

—Conocerte.

—Esto no me define. Ni siquiera influye en nada en mi forma de ser o personalidad. No necesitabas conocerlo igual que yo no conozco cada pequeño aspecto de ti.

—Pues... siento mucho que pienses eso —Bélgica le mira a los ojos.

—What?

—Que no necesitaba conocerlo. Y sí que creo que es un hecho que ha influido en ti, como tantas otras cosas.

—No ha influido en mí.

—Mmm... No me odies por hacer que me lo contaras.

—Es un poco tarde para eso.

Bélgica le mira un poco triste con esa respuesta.

—Es decir, esto no ha influido en ti, pero... Va a influir en nosotros.

—Va influir tu decisión. Tú querías saberlo, pues ahora sé consecuente.

—No sabía lo que ibas a decirme, pero estabas actuando raro y ansioso y... no me puedes culpar por querer saberlo, ¡tú también querrías!

—Te advertí que no era necesario que lo supieras.

—Como la boda... —Bélgica suspira

—What?

—Me advertiste que no era necesario hacerla... y la necia de Belgium quería... igual que saber esto. Últimamente siento que todo lo que hago parece una decisión crucial.

—Pues siento que no salgan como tú quieres las cosas que te dije que no creía que fueran a salir bien.

Ella le mira un poco desconsolada.

—Alba... No seas duro conmigo.

Aprieta los ojos, regañado, porque este tema le tensa muchísimo.

—Entiendo que... entiendo que te agobie todo esto, pero... no vamos a hacer las cosas mejores solo maldiciendo que lo sepa. Quería saberlo y lo sé ahora.

—Y como ahora ya te has salido con la tuya pues ya estamos.

—¿Y qué crees? ¿Qué me siento feliz y me siento por ahí a hacer "MUAJAJAJAJA ya me he salido con la mía!"?. Es un secreto complicado, yo tampoco sé reaccionar ni s

—¡Otro motivo por el que no saberlo! Desde luego que no quiero que me trates distinto. Es que ahora vas a empezar justificarlo todo con esto como si fuera un hombre roto.

—No, ¡es que no pretendo justificar nada con eso!

—Entonces no aporta nada.

—Puedo explicar tu actitud con Roma. Puedo mirar a Roma con diferentes ojos —Bélgica le fulmina un poco.

—¿Y? Yo no necesitaba nada de eso.

—¡Yo necesitaba entender por qué la aversión!

—Of course not.

—El que está cambiando cosas con esto eres tú... el que está definiendo ahora las conversaciones conmigo por esto... eres tú—protesta un poco.

—Pues porque tú estás dándole demasiada importancia.

—Porque tú estás actuando raro y lamentando que lo sepa.

—¿Como voy a no lamentarlo?

—Pues así, sin lamentarlo, tampoco es una tragedia.

—Ugh —protesta.

—Pero tampoco me vale ignorarla, como lo otro y hacer como que no pasó, porque... no funciona así.

—Pues debería.

—¿Quieres que actúe como si no supiera?

—Yes.

—Vale... —Bélgica le mira unos segundos. Escocia suspira—. Está bien, es tu... secreto, tu información, y... ya está. Ya bastante mal lo hice —levanta las manos en señal de rendición. Aún no he ido a hablar con él... Sé que no te interesa saberlo.

—¿Planeas ir? —la mira levantando las cejas.

—¿T-Te molesta?

—No.

—Quiero... que él me explique qué demonios pensaba.

—¿Para qué?

—Porque no sé si quiero vivir resentida con él para siempre o no.

—R-Really?

—No me gusta que pose como un... hombre súper bueno y mono y que tú me salgas con esto.

—Nunca había pensando en ir a pedirle explicaciones —confiesa.

—El que además es tan... "comprensivo y hábil para eso"

—Ugh, joder, no. No quiero saberlo—aprieta los ojos.

—L-Lo siento. Es que... no me lo explico —Bélgica aprieta los ojos también.

—Yo tampoco, pero aun así...

—Si... no quieres no te contaré lo que me dice, pero claro que necesito ir ahí y... necesito oírle.

—¿Pero por qué?

—Porque... le quiero, le admiraba y respetaba hasta ahora, pero esto no es un errorcillo accidental para alguien como él, ¿¡qué demonios estaba pensando?!

—Es que a saber que mierda va a inventarse.

—¿Crees que se invente una excusa rara? ¿Qué excusa puedes tener cuando eres EL experto y... ocurre esto?

—Yo qué sé, alguna tendrá.

—Pues quiero oírla y... ponderarla.

—Ya, pero ¿para qué? ¿Cómo sabrás que no te miente? Mentía constantemente a todo el mundo.

—Pues... no sé si lo sabré o no. Quizás le creo y me está mintiendo, quizás me está diciendo la verdad y no le creo una mierda de lo que me dicen...

—Ugh. No, no quiero sus explicaciones de mierda, no quiero que se justifique o se defienda en modo alguno.

—Ya... es que no tiene defensa lo que hizo, tristemente. Es... indefendible su caso. Solo es que... buff, no se. E-Entiendo que para ti siempre ha sido este... monstruo, pero... yo le tenía en un mejor concepto.

—Ya, bueno.

—Lo que hace que me dé más rabia aún.

Suspira

—Lo siento... quizás no debería reaccionar así, pero... es que no, esto no está bien.

—Quiero ir contigo.

Bélgica le mira, y por un momento, aunque parezca un poco... anticlimático, sonríe levemente con eso

—Vale.

Escocia asiente solo una vez, seriamente.

—Pensé... ir esta semana. Quizás mañana o pasado.

—Vale.

—Le voy a llamar, y le diré... que iremos los dos, ¿te parece bien?

Asiente.

—I love you

Se sonroja. Bélgica se encoge de hombros.

—I do.

—M-Me... too.

Bélgica sonríe un poquito más y se sonroja también.

—Juntos contra el mundo.

—No te preocupes, llevo muchos años siendo yo solo contra el mundo, no es tan malo.

Bélgica sonríe.

—Conmigo no ha podido nunca, seguro contigo será más benevolente.

—¿Me estás diciendo que va a intentar hacerte algo? Que se atreva. Que se atreva a hablarte mal... o a querer... hacer algo.

—Me refiero al mundo.

—Ah... cielos... Pues que se le ocurra al mundo también.

Él sonríe un poco.

—¿P-Puedo cambiar el tema? —Bélgica se le echa un poquito encima.