Angel Fall
Prefectura Kanagawa, hora 1:23 pm, Posada Wadatsumi
En este momento Index juega en la playa en un traje rosa de una pieza con una faldita; Touma está bajo la sombrilla pensando en cómo escapar para eliminar al psicópata que se acerca a ellos; según los registros, él no es extraño a la muerte, y tampoco a provocarla; pero eso no significa que el actual pueda asesinar a alguien como según lo hizo. Por ahora el Dragón está cambiando su tez blanca por una más rojiza, dicen que el bronceado de playa es un atractivo.
— Index, no saques la medusa del agua, les va a hacer daño. — La niña asintió regresando la criatura gelatinosa rosada al agua, mirándola fijamente y con curiosidad. Se supone que había aguamalas y no medusas, pero parece que hay gente que no sabe la diferencia, a pesar que las diferencias entre ambas son obvias… Sí; ambas serán una gelatina viviente acuática, pero son muy diferentes entre ellas, en tamaño, forma y textura. — Oye, Index… Iré al baño. —
— ¡No tardes! — Contestó la niña animada chapoteando en la orilla.
— ¡Frenda! ¿Ya encontraste algo sobre ese "Kami"? — Shizuri preguntó leyendo una revista en el sofá blanco de uno de los cuartos que usan como base para ITEM en el distrito 5.
— Ashí es Mugino. Básicamente, es un chico de 15 años que asiste a una preparatoria, todo lo que encontré es que está relacionado con el incidente del Biohacker y que su nivel era "0". — Frenda informó en su tono casi infantil.
— A recuerdo eso, las hermanas Gokusai hicieron un gran desastre ese día. — Kinuhata, vestida en un suéter claro que cubre la mitad de sus muslos con calcetines en tonos rosas, comentó estirándose.
— Dijiste que "era". — Shizuri pasó de largo la punzada que el nombre de esas hermanas mercenarias rubias le provocó.
— Shi, la primera vez que revisé era nivel 0, no tenía habilidad alguna pero hay un anexo sobre algo llamado "Imagine Breaker", — Contestó la niña en su sailor azul marino de falda blanca con rapidez. — pero entre ayer y hoy eso cambió. Básicamente, fue promovido a nivel 2 y su habilidad es "Dragon Bringer", pero ese anexo sigue ahí. — Frenda giró la laptop mostrándole a Shizuri la información.
— ¿Draco qué? — Kinuhata preguntó a la rubia, su respuesta fue encogerse de hombros.
— "El Portador del Dragón" — Gracias Takitsubo.
Shizuri leyó detenidamente la poca información del registro, la cantidad de información faltante es terrible, casi dejando al registro como "falso", en especial porque la información de la habilidad dice que es una "Habilidad Múltiple", algo que en sí mismo es imposible… De nuevo, Todo lo que dice esto es que alguien de los altos mandos de la ciudad hace todo lo posible por tener al chico en la oscuridad; Y ese no es el acuerdo al que llegaron.
Siguiendo el sonido de las sirenas, el Dragón busca su objetivo del día, un hombre viejo con grandes entradas, ojos saltones vestido con traje azulado, seguramente robado; el sujeto se supone que va solo, pero dos presencias que parecen estar circulando por la ciudad, como una persecución o… Cacería… Aprovechando su exagerada velocidad sónica, al pelo erizado le debería tomar un par minutos cuando mucho, en ir al centro de Ouiso y regresar a la posada, en la costa oeste de Chigasaki… Pero esas dos presencias extrañas pueden complicar las cosas; y tampoco parece que haya algún ángel en las cercanías… Ni siquiera algo santo, más allá de un templo.
Finalmente, entre los callejones del pueblo, casi rodeado de policías, Jinsaku se esconde con un puñal muy cerca de su pecho. — ¿A qué le temes? — La voz del Dragón asustó al asesino quien giró rápido con un chillido, mientras saca una ampolleta que vacía sobre el puñal. — No te puedo dejar continuar, así que entrégate o enfréntame. —
El sujeto hizo lo obvio, y asaltó al pelinegro solo para ser estrellado contra la pared y caer inconsciente, el pelinegro usó su bastón del dragón demonio por instinto, él realmente no llamó al bastón… Pero llamar al bastón hace obvia su presencia, haciendo que esas dos presencias se detuvieran a menos de un kilómetro a su derecha.
Una bellísima mujer de figura asesina con orejas y dos colas de gato negro, piel clara que contrasta excelentemente con su kimono negro de borde rojo y un Obi dorado rodeado por un Juzu dorado y negro más ancho que ella, sujeto al Obi. Su largo cabello lo lleva recogido con un broche circular elegante, dando la idea de un moño de orejas grandes, sus ojos ámbar brillantes y felinos, se enfocan en su perseguidora, mientras sus orejas anchas y puntiagudas se recogen hacia atrás y hacia afuera, sintiendo el peligro repentino del ambiente, buscando cualquier ruido que pueda estar detrás de ella…
La joven mujer gato está asustada, no cabe duda de eso; pero no por la niña frente a ella, por la presencia que apareció de la nada, como una honda depresión y miedo que afectó a ambas féminas. La perseguidora es una niña, o por lo menos tiene esa apariencia; su cabello amarillo intenso está recogido en coletas con forma de rulos, ojos azules como el océano, y complexión delgada pero bien desarrollada para sus 15 años y relativa baja estatura. La chica usa un vestido rosa palo de encajes blancos, cuello con hombros blanco y medias negras; con lo que parecen plumas de avestruz, o de Phoenix occidental, saliendo de su espalda baja.
Ninguna de las dos féminas reconocen esa energía opresora pero… de algún modo, no agresiva; La chica rubia cree, al menos lo intenta, reconocer esa presencia… Pero no puede precisar dónde… Con el psicópata inconsciente, el Dragón puede atender a esas presencias que no se han movido desde que llamó su Debuleh; en apenas segundos, el pelinegro llegó a una zona bastante espesa del parque Komayama, atravesando matorrales altos y escaleras de piedra y madera que suben rodeando el monte, encontrando a las féminas no precisamente cerca del templo dentro del parque.
— Ah… Tu eres… — Touma se detuvo dando saltos para no terminar cayendo de cara por su propia velocidad, reconociendo a la chica rubia… ¿Pero de dónde?
— ¡Tú! — Gritó la niña apuntando al recién llegado, olvidando que estaba persiguiendo a una gata, la cual está paralizada por ver la amenaza tan cerca. — ¡De entre todas las posibilidades! ¡¿Por qué tenía que encontrarme contigo?! — La niña comenzó a jadear tras gritar desde el fondo de su pecho y estómago. — Ya sabía que conocía esa presencia tuya… — Finalizó casi quedándose, cruzándose de brazos y girando la cabeza "ofendida".
— ¿Disculpa? — Touma parpadeó un par de veces.
— ¡Mi nombre es Ravel Phoenix! Soy la hermana menor de Raiser… — La demonio encaró al pelinegro cambiando de postura, dejando su palma izquierda descansar en su cintura, esperando una respuesta.
— Es verdad… estabas con el grupo grande en el patio trasero de la escuela… Emm… ¿Disculpa? — Touma se rascó el cuello algo incómodo por la situación; él tampoco creyó encontrarse con alguien relacionado a Raiser… Dejando el ambiente en silencio incómodo, incluso la joven mujer gato se relajó; pero no se movió. — Debes odiarme por derrotar a tu hermano… —
— ¡Sí~! Te odiaba… Te odiaba como no tienes idea… — Ravel respiró hondo posando su otra palma sobre su cintura, exhalando hacia abajo. — Pero entonces comencé a temer a mi hermano… Prácticamente se volvió loco, ¿Sabes…? — Más silencio incómodo.
— Perdón… Supongo. —
— Nada. — Arrebató la Phoenix. — Todos en la familia vieron como algo bueno que él finalmente perdiera por subestimar a sus rivales… Pero él se quedó obsesionado por "cómo tú, un Esper, puede superar a un demonio de clase Alta como él". Verlo obsesionarse así me hizo odiarte… no salió de la mansión y apenas hablaba… Hasta la noche en que se escapó a Ciudad Academia para su "investigación de Espers", No se que vió; no habla de eso… Pero al menos ahora está activo, generando estrategias y entrenando con su nobleza como debería… —
— Eso es algo bueno ¿No? — Touma suspiró, a él no le interesa nada de esto realmente, sólo quiere llegar con Index antes de que se dé cuenta que no fue al baño.
— Claro que es bueno, pero con su espíritu renovado, también despertó su perversión… Y yo no quiero realmente ser parte de sus amantes… ¡Soy su hermana por Satán! — Exclamó Ravel alzando sus brazos al final.
— ¿Y por eso estás aquí, y no con tu equipo? —
— Básicamente… No me gusta estar al frente de las cosas. Prefiero estar tras bambalinas… un trabajo más de inteligencia… Pero sí persiguiendo a una demonio renegada como ella, me saca del palacio y de la posibilidad de terminar en la cama con mi hermano… La voy a tomar… — Concluyó Ravel encarando ahora a la mujer.
— Hablando de eso. ¿Quién es? — Preguntó Touma realmente interesado; se supone que por aquí, en algún lado de Kanagawa, está esa joven injustamente señalada… Bien podría ser la mujer de colas negras y ojos de gato, frente a ambos.
— Kuroka, una demonio Nekoshou renegada Clase "SS" — Contestó simplemente la chica, creando dos alas de fuego a su espalda, y caminando hacia la mujer que por fin se ha movido, entrando en postura de combate… o de huida.
— De hecho… Ravel-chan. ¿Y si la dejamos en paz? —
— ¡Ehh! ¡Estás estúpido o qué! ¡¿Tienes un problema en el cerebro?! — Ravel contestó con amargura, encarando al pelo erizado, lista para atacarlo como primer objetivo.
— Es verdad que tengo daño cerebral… El punto es, tengo evidencia de su inocencia; claro que no la traigo conmigo… — Kuroka ladeó un poco la cabeza hacia Touma, no perdiendo su guardia alta, pero al menos sus orejas no están agachadas con el miedo de antes; Ravel solo perdió su postura agresiva, pero las alas siguen listas para atacar a quien sea. — Se que no confían en mí ninguna de ustedes, pero necesito que lo hagan, — Touma giró su cabeza para ver a ambas féminas. — al menos esta vez. La evidencia está en mi maleta en la posada donde me estoy quedando, solo; síganme y esperan afuera, yo les entregaré la bitácora… que eso es lo que es realmente. —
