Capituló 4

Los hermanos Legan habían llegado el jueves por la tarde, Elisa había ido a cabalgar con Anthony desde que llegó, él la había invitado por petición de la tía abuela Elroy, así que el resto de la tarde los chicos la pasaron juntos.

Mientras Stear, Archie y Neal habían tomado un auto sin permiso y se habían ido de paseo a los almacenes; querían escapar un rato de la mansión debido al ajetreo de sirvientes que estaban decorando y arreglando todo. Archie había pedido ir de compras porque no le había gustado el traje que le escogieron para la recepción. Así que mientras Neal y Stear se quedaban en una fuente de sodas él entró a comprar una camisa y justo en ese momento volvió a encontrarse con la señorita Britter, al verla él la saludo muy animado.

-Buenas tardes señorita Britter ¿Cómo esta?

Annie se asustó un poco pues era la primera vez que iba sola a hacer compras, solo estaba acompañada por Becky la doncella y nunca pensó en encontrarse con el muchacho que le había gustado tanto en la misma semana que lo conoció.

-Buenas tardes señor Cornwell.

Archie le sonrió - ¿y si mejor te llamo Annie y tú me llamas Archie? Creo que somos muy jóvenes para estarnos diciendo señor y señorita.

-qué cosas dices- Annie se sonrojó.

A Archie le gustaba verla sonrojada y le gustaba como lo miraba, sin duda era toda una princesa.

- ¿y que estas comprando Annie?

-un regalo para Elisa Legan, ya que me invitaron muy formalmente a su cumpleaños y presentación.

- ¿Qué le vas a regalar? Había olvidado que también yo tenía que comprarle un presente.

-le daré un perfume, escogí uno con aroma a maderas, melocotón y pachuli.

-ese es ideal para Elisa, y ya que le darás un perfume yo le compraré unos guantes ¿me ayudarías a escogerlos?

-por supuesto

Pasaron un rato agradable, aunque Annie hablaba poco porque se cohibía, pero sin duda su compañía era agradable. Después de terminar las compras se despidieron, con la promesa de que Archie bailaría un vals con Annie el día de la fiesta.

Archie alcanzó a su hermano y su primo en la fuente de sodas, cuando llegó les dijo que regresarán porque casi era hora de cenar y seguro los retarían.

Elisa y Anthony la habían pasado muy bien montando a caballo casi toda la tarde, tomaron un refrigerio juntos y pasaron el resto del día en la terraza mientras se les llamaba para cenar. La pelirroja cada que podía le toma del brazo y él, aunque no la rechazaba, no se sentía del todo cómodo con sus acercamientos, ya que Elisa se le insinuaba mucho y le coqueteaba con descaro.

La tía abuela pensaba que como aún estaban jóvenes no era necesario ponerles un chaperón, pero Elisa estaba aprendiendo a volverse atrevida, en el mes y medio que estuvieron sin verse, curiosamente la joven se había desarrollado mucho, claro que el corset le ayudaba, pero ya tenía unos pechos más desarrollados y las caderas se le habían pronunciado, en pocos meses ya sería toda una señorita y seguramente no quedaría ningún rastro de niña en ella. Sus hormonas la traicionaban y debido a que escuchó algunas conversaciones de señoritas mayores con las que su madre la obligaba a convivir, tenía grandes deseos de que le dieran su primer beso.

Dorothy entró a avisarles que podían pasar al comedor, y los muchachos fueron. Eran los primeros en llegar, los otros tres aún no llegaban, la tía abuela entró y se sentó.

-buenas noches niños

-buenas noches tía abuela- contestaron a la vez

-aprovechando que los otros no han llegado al comedor, quiero hablarles sobre su relación.

- ¿Cuál relación tía? Nosotros somos primos y amigos

Elisa se sintió incómoda, al parecer nadie le había dicho a Anthony que en un futuro ellos se iban casar. Trato de ser fuerte para que no se le notara y permaneció callada.

-No me mal entiendas Anthony, tu y Elisa deberán pasar tiempo juntos para conocerse y si es debido y conforme vea que madura su relación, probablemente se casen. Las familias ya lo hemos hablado y estamos todos de acuerdo. Es por el bien de ustedes y el de los Andrey.

-pero tía yo aún soy muy joven para pensar en quererme casar.

-eso no importa, tienes que pensar desde ya en que tú serás el presidente del clan Andrey en unos años y que la mejor opción para que sea tu esposa es Elisa, por supuesto por ahora nada es formal, pero tendrás que acompañarla en todo momento, aquí, durante la fiesta y si la tenemos de visita en cualquiera de las propiedades Andrey, además debo decirte que Elisa y Neal estudiarán con ustedes. Y no quiero escuchar negativas, ni quejas. ¿Queda claro Anthony?

-Cómo usted diga tía.

Elisa estaba al borde de las lágrimas, pues nada de eso había pensado que pasaría, después de que su madre le hablara de su compromiso con Anthony, ella pensaba ilusamente que el muchacho gustaba de ella como ella de él.

Los tres chicos llegaron a cenar, pero nadie noto que se habían escapado a los almacenes. Cuando los otros tres entraron el ambiente estaba muy solemne y nadie quiso hacer ningún comentario.

Paso volando el siguiente día, llego el sábado y como era de esperarse la casa era un ajetreo. Sara llego con un peinador para preparar a Elisa, tenia que verse espectacular, la niña no pudo ver en todo el día a Anthony y tampoco se atrevió a confesarle a su mamá lo que se había dicho en la cena del jueves; pues temía que después de escuchar que el compromiso no era completamente un hecho, se vería ofendido el apellido de los Leagan y cancelaran el trato al que ya habían llegado o creía que habían llegado.

La mansión estaba lista, las flores habían llegado, los alimentos estaban dispuestos en la cocina y faltaba una hora para que llegaran los invitados. A Elisa le habían hecho un peinado alto, con los bucles cayéndole en el rostro, se veía muy hermosa, su madre le había dado permiso para que la maquillaran ligeramente y estaba usando un perfume muy fino que le habían traído, esa misma mañana le habían horadado las orejas y traía unos pendientes muy coquetos en color rojo , aun le punzaban pero no quería que se notara el dolor que sufría con tal de verse hermosa, por primera vez usaría un escote y dado que ya tenía senos le había pedido a Becky que le ajustara más el corset para verse mayor y resaltar su figura, estaba tan ajustado que no podía respirar bien pero ignoro ese pequeño detalle, llegada la hora le pusieron el vestido de un color rojo carmesí con vuelos color mandarina, se veía preciosa pronto seria la adolescente mas importante de la sociedad según lo que su madre le decía.

Anthony había sido llamado al despacho, la tía abuela le había dicho que a las siete menos diez, tenia que estar golpeando a la recamara de Elisa para ir por ella y tenía que permanecer a su lado toda la velada, además de bailar con ella toda la noche o cada que la señorita lo quisiera. Hizo lo que se le había indicado, a la hora indicada, frente a la puerta le pregunto.

-Buenas noches Elisa ¿Estas listas para salir a recibir a tus invitados?

-pasa querido Anthony estoy lista. - Anthony entro y la vio sorprendido, definitivamente lucia mayor.

-¿y bien que te parece mi vestido?- la jovencita se dio una vuelta para que la viera bien.

-esta muy lindo y te hace ver muy bonita.

Elisa se sintió complacida y se acerco a él mucho, casi podía sentir su respiración sobre sus labios, Anthony se hizo para atrás y le sonrió, le tomo la mano y abrió la puerta para salir de la recamara, la niña se contrario al notar que Anthony no la besaría esa noche y con el ritmo al que iba y su falta de interés, seguramente no la besaría nunca.

El tomo de la mano en alto y juntos descendieron la escalera, al pie estaba Sara y el señor Legan, quien anuncio y pidió levantar las copas en honor a su hermosa hija y futura heredera. Todos brindaron por ella y la fiesta comenzó.

La rubia y la pelirroja abrieron la pista con un vals, sutilmente Elisa le coloco su mano en la cintura a Anthony y bailaron como si ella fuera su prometida oficial, aunque no se había dado el anuncio con ese baile y al transcurrir la noche ver que el joven no se le separo, los murmullos comenzaron a sonar y Sara quedo satisfecha al escuchar de la boca de sus amigas que su pequeña se había llevado un partidazo.

El señor Leagan estaba hablando con algunos socios sobre lo bien que le iba a ir en sus negocios debido al arreglo tan ventajoso que tendría al casar a su hija con un Andrey, hasta fue aconsejado para que no pospusiera esa boda mas de dos años, de todos modos, se sabia que en Europa aun casaban a las niñas a los 13 años.

Toda la familia Andrey estaba contenta o casi toda, Anthony ya no aguantaba los zapatos, pero Elisa no quería dejar de bailar. Hasta que Neal se acerco a bailar con su hermana para poder contarle los chismes y comentarios que había escuchado sobre ella y su novio Anthony.

Aprovechando esta interrupción Anthony se acercaba a Stear que estaba sentado en una mesa muy solo.

- ¿Dónde está Archie?

-Esta bailando con la señorita Britter?

- Pero lleva bailando con ella muchas piezas ¿no?

-Tal parece que no eres al único que ya le consiguieron novia, aunque estoy pensando que a Archie no le es tan indiferente, pues el la saco a bailar tres veces y las otras ella se le acerca sigilosamente y no veo que se ponga remilgoso al aceptar.

- Supongo que le gusto, es bonita y Archie siempre es mas maduro que nosotros, con respecto a Elisa, ella no es mi novia ni lo será.

-Esta por verse Anthony, me acabo de enterar de que la próxima semana nos mudamos a la mansión de las rosas, para comenzar nuestros estudios a lado de nuestros queridos y petulantes primos.

- ¿Qué dices?

-como lo escuchas, así que tu romance con Elisa ya esta anunciado, pobre de la señorita Britter el suyo quedara truncado.

Después de esa charla, Anthony que ya no estaba disfrutando de la fiesta solo pensaba a qué hora acabaría para retirarse a dormir.