Hola a todas!

Aquí otro capítulo, este no contiene escenas de Candy y Terry y me parece que de ahora en adelante les avisaré si hay C/T para que no se enojen por los contenidos, está fuerte este capítulo y ya saben Elisa es mi protagonista así que este capítulo es más de ella, además se había tomado el colegio parecía que las monjas la dejaban hacer lo que quería pero ahí va su revés por confiada.

No odien a Anthony está dolido y tomo malas decisiones, aveces cuando estamos heridos no pensamos claro, nos equivocamos y tenemos que lidiar con las consecuencias, así es la vida.

Quería mostrar cual es el nivel de odio de Elisa, sigo pensando en que me gusta esta dualidad, en primera me pruebo a mi misma. Me gusta escribir cosas fuertes no solo cosas románticas se me hace muy fácil dejarme llevar por el romanticismo pero aveces las cosas no se dan así, para escribir este capítulo estuve leyendo sobre los castigos de las monjas en conventos e internados desde la época victoriana hasta comienzos del siglo XX, Inglaterra seguía sumido en ser cien por ciento puritanos y ocultar su lado perverso mucho más en la clase alta, siento que por eso Elroy y Sarah odiaban a Candy y para mi que por eso Sarah echo a perder a sus hijos.

Estaba leyendo sus comentarios por eso aclaré sobre lo de escribir si viene Candy y Terry o de plano no para que lo salten, de todos modos todos conocemos la historia porque no la altere, eso se los dije desde el principio lo único agregado es todo lo de Elisa, por ahí hay comentarios donde dicen que copio y pego cada capítulo del anime, en primera suponiendo que fuera así me tome el trabajo de transcribir porque yo no tengo el guion ni del manga ni del anime y en segunda me parece que solo hay tres capítulos donde vemos todo lo que hace Candy porque es importante para la historia, pero de ella no escribo tanto porque todos la conocemos de sobra, cuando a Candy la expulsen del colegio ya no veremos a ella, veremos a Elisa porque insisto en decirlo estamos viendo la historia desde su visión, tampoco veremos a Terry quizá algunas cosillas, quizá no, dependerá todo si se me antoja hacer otro de él o de la misma Susana, no se debo pensarlo.

Lo que si aclaro es que al menos yo no quiero ser de las que le tengan miedo a lo que escribo, escribo desde lo que me imagino y no quiero imaginar todo en rosa, ya hay muchos fics de ese estilo que podemos disfrutar, por eso ahora les aclararé cuando haya escenas que les agraden más o que les desagraden, se que quizá este no sea el lugar para ese contenido pero por eso pongo la advertencia y por eso lo puse con características de drama y no melodrama.

También por ahí leí un comentario sobre las edades, quizá cuando comencé a escribir este fic me dejé influir mucho por Vladímir Nabókov porque acaba de leer uno de sus libros, si cuando comencé pensé en bajarles la edad para mis fines de tenerlos más en el colegio pero quizá causa más confusión, por ahora ya tienen 14 años y tal vez más adelante la reedite y le corrija eso pero me es más importante continuar actualizándola que ponerle atención a por menores, piensen en que están entre los 14 ellas y 15 en adelante ellos para que no les brinque tanto.

Por ahí también vi un comentario sobre el origen de Georges y sobre el nombre del señor Leagan, yo compre FS hasta que salió en preventa en España, mi libro llego aquí en mayo del 2020 porque hubo un retraso por la pandemia, mi fic lo comencé a escribir en el 2018 y lo publiqué hasta septiembre, nunca leí nada de las traducciones no oficiales porque no quería caer en dimes y diretes, espere hasta que llegó mi libro porque la idea de este fic me surgió por ver maléfica y ver la era de los antivillanos, no soy escritora literaria profesional, este es de mis primeros fics con más forma y mejor hecho digámoslo así, yo me dedico a la creación de contenido pero en otras plataformas, por eso se crear una especie de detrás de cámaras como siempre me ha dicho mi quería Armónica de Terry, se ve reflejado a lo que me dedico en esta creación pero de otra forma. Me quise arriesgar y probar como reto que puedo hacer otros tipos de narrativa, no tengo la formación y creo que hasta en las políticas de la página aclara que no puedes publicar si eres escritor profesional. Claro que tiene errores mi fic, claro que tiene temas duros y claro que será criticado por cómo hago a los personajes, por eso aclaré desde el principio que no era de Candy y Terry nada más y por eso es que quise a Elisa de personaje principal, ella es oscura y a mi modo de ver todos ahí tienen un pasado muy raro, la única que es dulce, pulcra e inocente es Candy, es tan perfecta que por eso la hicieron huérfana por que es un defecto que ademas la exime de culpas y que bello es que aunque no sabe quien es su familia ella creció inocente y llena de amor, cosa que no pasa con Elisa, en varios textos que he leído cuando tienen matrimonios arreglados no son felices y casi nunca hablan de como son los hijos pero yo me imagino y pienso que son como describo a Neal y a Elisa, Terry es otra víctima de ese tipo de arreglos, nació por amor de dos personas enamoradas pero aun así el duque cedió a la presión social y arrancó a un Niño de su verdadera madre para llevarlo a una vida de abandono, tristeza y soledad. Creo que se los dije cuando escribí que él planeaba tirarse por la borda del Mauritania, quizá sólo yo entendí eso pero para mi todas las frases donde dice que Candy lo salvo se refiere a que el ya no encontraba sentido a su vida.

Se me olvida decirles lo de Anthony, el está actuando por herido, agradecimiento y lástima, algo de lo mucho que hace Terry por Susana, pero tengo un propósito con eso, así que por eso le di una moribunda de prometida, no me odien por eso pero Anthony será feliz, a pesar de cargar con sus errores.

Les quiero agradecer los comentarios a todas, las que escribieron.

Australia77: And if you hit Australia, I want to take Elisa to the abyss because from there she can resurface stronger or stay there defeated

Mia8111 y Mcvarela: me encanta leer cuando dicen que les gusta, espero disfruten la lectura y en el capítulo que sigue veranas de Terry y Candy.

Ianthe: que bueno que te gustaron.

Guest que me escribiste me dio risa como dices "Elisa que se joda"

Abril-04: Gracias por las correcciones las tendré en cuenta, para cuando acabe la historia y le de una planchada para corregir errores, lo de la edad a mi me salto hace como 10 capítulos pero pensé en que quiero avanzar y cuando esté finalizada la corrijo. Que bueno que te esté gustando la narrativa me he estado esforzando mucho porque si es un estilo completamente diferente. Y créeme nunca le haré daño a Candy, ni a Terry ellos ya sufrieron pero Elisa que muestre porque se volvió tan mala. Pero espero que te siga gustando. P.D. Justo leí tu último comentario en el capítulo ocho mientras escribía los saludos, estoy mezclando el anime con el manga, tomo a mi conveniencia partes de los dos y los mezclo, no pongo a Klin porque me estorbaría.

ArmonicadeTerry: muchos meses de no saber de ti, me da gusto que me sigas leyendo, pensé que estabas siendo lectora silenciosa, si para mi Terry es un atrevido y por ahí enseñare mas como se las gasta. Yo también me imagino a Annie y Archie así, porque Annie lo ama tanto que es sumisa, todo lo que el diga, haga u opine ella va a secundarlo porque es la forma en la que lo conquista y eso no quiere decir que no piense y sienta por su cuenta pero para ella él es un tesoro que quiere cuidar porque le constó mucho trabajo conseguirlo y además le aterra perder, se me hace aburrido ser así con alguien pero a muchas mujeres les funciona y creo que por eso nunca les paso nada realmente interesante, aunque en mi historia eso si quiero que cambie. Y Elisa si seguirá enamorada de Jonathan, bien se dice que en el pecado se lleva la penitencia" ya verán qué pasa con ella.

La historia de Candy Candy no me pertenece es de la escritora Kyōko Misuki, yo solo se la tomo prestada sin fines de lucro para divertirnos un poco con los personajes.

El siguiente contenido puede tener escenas que dañen la sensibilidad de las personas, si no les gusta este tipo de historias absténganse de leerla

CAPÍTULO 61

Archie estaba disfrutando mucho la sesión de besos, Annie al principio también hasta que sintió un malestar en el abdomen, no estaba segura como se sentía y detuvo al casi rubio.

-Archie, no creas que no estoy disfrutando esto igual que tu, pero hoy no me siento bien.- dijo Annie.

-¿te hago sentir incómoda? Discúlpame si hace un rato me sobre pase contigo no fui nada caballeroso.- Archie no se detuvo a esperar la respuesta porque la volvió a besar, Annie respondió el beso pero de nuevo lo termino en cuanto pudo.

-No te preocupes, no me ofendí. Solo no me siento bien esta noche, me duele un poco el estómago.- dijo Annie apenada.

-¿Quieres que te lleve a la enfermería?.- El elegante americano ya había dejado de lado la sesión de besos al ver a su novia un poco pálida.

-No creo que sea tan grave, preferiría irme a recostar. Debe haber sido el susto que me lleve por lo de Candy, los nervios aveces me ponen así de mal.- dijo la rubia.

-De acuerdo te acompaño a tu habitación, no quiero que te vaya a pasar algo en las escaleras.- dijo Archie.

-¿No nos regañarán?- pregunto la ojiazul preocupada

-Si encontramos a alguien aclaramos que no te sientes bien, quizá hasta te lleven un té.- dijo el americano y siguieron caminando.

Anthony y Cathy estaban sentados en una banca del jardín descansando ya era casi la media noche, todos en la mansión dormían.

-Lamentó que no haya sido tan divertida la velada para ti, como lo fue para mi.- dijo Cathy

-Dentro de todo lo qué pasó, me divertí mucho contigo. Creo que fuimos los que más bailamos y creo que despertaste la envidia de muchas señoritas porque solo baile una vez con mi prima y como 20 piezas contigo.- dijo Anthony entre risas.

-Tony gracias por hacer mis días especiales, siento que le estoy arrebatando momentos maravillosos a la vida y eso me hace sentir mejor que cualquier remedio.- dijo la rubia viéndolo intensamente.

-Cathy no hables así, nadie a dicho que no vas a poder tener una vida plena.- dijo Tony viéndola con preocupación.

-Soy realista Anthony, nadie sabe cuánto voy a vivir, lo único que saben es que no han encontrado ninguna medicina que me cure, solo lamento no poder disfrutar lo que una mujer plena puede disfrutar.- dijo Cathy sonriendo tristemente.

Anthony sintió una oleada de afectó hacia su amiga y la vio tan hermosa como era, sin pensarlo se acercó a ella y la beso lentamente.

Ella al principio se sorprendió, pero después respondió el beso con mucha pasión, cuando ambos se detuvieron para poder respirar, Anthony la abrazo contra su pecho con mucho cariño.

-Tony hazme una mujer completa, por favor. Quiero ser tu mujer y te juro que no tienes que tener ningún compromiso conmigo, solo hazme sentir querida.- ella lo miro y de nuevo lo volvió a besar.

-Pero esto puede complicar las cosas y no sabemos si sea bueno para tu salud.- dijo Anthony después de terminar de besarla.

-No me importa, yo te amo y solo quiero ser feliz un poco más de tiempo, te juro que no te comprometeré en nada. Solo quiero sentir lo que alguna vez hiciste sentir a Elisa.- dijo la rubia.

-¿Cómo sabes eso?.- pregunto él sorprendido.

-El día que fueron a tomar el té a casa de tus amigas, ella me dijo que tarde o temprano se comprometerían de nuevo porque tu la desfloraste y tienes una deuda moral con ella, por eso te lo pido, yo en absoluto seré como Elisa.- suplico Cathy.- Ademas yo solo quiero cumplir mi ultimo sueño que es sentirme amada como mujer por ti.

-Tranquila Cathy, mañana hablaremos de esto será mejor irnos a descansar. Te acompaño a tu habitación.- dijo el rubio y tomo a Cathy por los hombros para llevarla mientras ella caminaba con la cabeza agachada llorando en silencio.

Cuando llegaron a la recámara, la menuda rubia comenzó a sollozar más fuerte, Anthony no pudo más y antes de que entrara a la recámara la volteó para volverla a besar, después de eso el abrió la puerta y entró junto con ella a la recámara, comenzó a acariciarla y a quitarle la ropa, estaba consiente de que lo que estaba haciendo no era correcto pero las súplicas de Cathy, algunas copas que había tomado demás del ponche y el rechazo de Candy, lo hicieron liberar su instinto y se dio cuenta que las necesidades de hombre que Elisa había despertado en él le estaban exigiendo hacer algo de lo que quizá se arrepentiría al día siguiente.

Se quitó la ropa rápidamente y ayudó a la rubia a desvestirse para así ver el cuerpo desnudo de una delgada Cathy, su piel casi fantasmagórica y sus formas tan delicadas, eran completamente diferente a la exuberante Elisa que tenía un cuerpo que volvía loco a cualquiera, volvió a besar a Cathy con delicadeza y la recostó en la cama, la acaricio sutilmente y le separo las piernas con agilidad. Cathy temblaba de los nervios y la felicidad, cuando sintió el dolor de la intromisión de Anthony en su cuerpo creyó que perdería el conocimiento de la emoción, pero en ese momento Anthony la beso con dulzura y ella lo abrazó para sentirlo más cerca y más suyo. El rubio se dio cuenta lo diferente que era entregarse con amor a entregarse por pura lujuria y pensó que Cathy era un ángel, sabía que después de esto el tendría que cumplir con honor la deshonra que estaba cometiendo y proponerle matrimonio, porque a diferencia de lo qué pasó con Elisa, en esta ocasión él si estaba tomando ventaja de Cathy.

Annie se levantó cerca de las cuatro de la mañana sudando y más adolorida que nunca, fue al baño de su habitación y se llevó una gran sorpresa al encontrar manchado todo su camisón y la sábana, nunca pensó que el ciclo menstrual de las mujeres podía ser tan doloroso y feo, Candy y Patty no se veía que les molestara nada cuando sangraban, pero ella sentía un dolor tan agudo que no podía dormir, ahora entendía porque muchas mujeres se quedaban confinadas una semana entera en casa y por eso no se les permitía actividad física extenuante. Como pudo se cambió el camisón y se puso la bata, necesitaba ir a la enfermería porque el dolor la estaba haciendo tener mareos y náuseas.

-Hermana Margaret, me puede ayudar.- hablo una tímida Annie y golpeó la puerta muy despacio para no despertar a nadie.

La monja se tardo un poco pero por fin salió.

-¿Te sientes bien Annie?.- pregunto la hermana viéndola tan pálida.

-No, me duele mucho el vientre y acabo de tener la menarquia, pero siento tanto dolor que no creo poder regresar a mi alcoba.- dijo Annie apunto de desmayarse.

-Vamos Annie te llevare a la enfermería y avisaremos a la rectora, no te desmayes aún.- llegaron a la enfermería como pudieron y cuando la recostó en la camilla Annie se desmayó.

La hermana Margaret fue a llamar a la Madre superiora sin tardanza y ambas llegaron a la enfermería rápido.

-La señorita Britter es muy débil hasta para ser mujer, seguramente sufre de lo que se llama "asfixia en la matriz" le daremos aceite de ricino y un té de anís.- tendremos que incluir granada en su dieta. No es nada sorprendente que una muchachita en esta edad se ponga así de mal. Cuando despierte dígale que puede estar confinada en su recámara los días que sean necesarios. Y yo escribiré a su familia para que la lleven a un médico en cuanto sea posible.

Annie pasó la noche en la enfermería, porque no tuvo la fuerza suficiente para volver a su recámara y a pesar de todo ese alboroto nadie se despertó.

El domingo llego pronto para los que se habían desvelado.

Anthony se había levantado temprano de la cama de Cathy y antes del desayuno pidió hablar con la tía abuela.

-Bueno días Tía abuela, pedí hablar con usted para decirle que quiero pedir formalmente la mano de Catharina Van der Horst.- dijo Anthony firme

-¿y eso tan de repente? No sabía que te gustaba, pensé que no querías tener compromisos tan joven.- dijo la tía abuela muy desconcertada

-Me enamore de ella y debido a su enfermedad no tenemos mucho tiempo para darnos el lujo de esperar, y creo que no se opondrá entendiendo el estado de la mujer que amo.- dijo el rubio decidido.

-Entiendo, ¿pero querrás casarte de inmediato? Debo notificar a tu padre y pedir la mano formalmente a su familia y estando tan cerca las fiestas eso no se podrá hacer hasta la mitad del mes de enero.- dijo la tía tratando de darle excusas ya que ni ella misma entendía el arrebato de su sobrino.

-Entiendo pero deseo que la fiesta de nuestro compromiso se realice en diciembre a más tardar.- dijo Anthony muy serio.

-Esta bien Anthony, me parece que no será muy bien visto que vivan juntos aquí hasta que no sea anunciado el compromiso.- dijo la tía aunque sea sin entender el repentino enamoramiento del rubio.

-No se preocupe por eso tía, esta misma tarde regresamos a Bibury con la familia de mi novia y estando haya entenderá que tendremos los suficientes chaperones, la veré en el almuerzo para despedirnos.-

Anthony salió de la biblioteca donde se había visto con su tía abuela, subió rápido y entró sin ser visto a la recámara de Cathy. La muchacha estaba parada viendo a la ventana envuelta en su bata, se había sentido un poco mal al ver que Anthony no estaba y se sintió un poco usada, al ver la marca en la sábana de su virginidad perdida, sintió ganas de llorar pero se aguantó el nudo en su garganta porque ella había aceptado esto sin ninguna responsabilidad para él.

En ese momento Anthony entró y se acercó a ella para acariciarle el rostro, la luz del amanecer y su bata blanca la hacían parecer aun mas un ángel.

-Cathy mi amor, ¿te quieres casar conmigo?.- dijo el rubio y se puso de rodillas frente a ella, mientras le ofrecía la argolla de compromiso que había sido de su mamá.

-Si Anthony si quiero.- el se levantó y le colocó el anillo en el dedo anular, después se levantó y se acercó a besarla. Todo fue muy rápido, por suerte había echado el seguro a la puerta en cuanto entró, la segunda entrega no se hizo esperar y solo hasta las diez de la mañana estuvieron listos.

Mientras Anthony estaba en su alcoba terminando de arreglarse para bajar a almorzar y partir a Bibury pensaba. "Todo esto lo hago para hacer feliz a Cathy, yo ya perdí mis sueños, perdí a Candy y si ya no puedo ser feliz y tengo en mi poder la felicidad de alguien más, lo haré con gusto. Además Cathy ha sido incondicional conmigo y le estoy muy agradecido."

En el colegio Elisa no llego a la misa de medio día, había pasado toda la noche disfrutando de tener a sus pies nuevamente a Jonathan y en la mañana cuando intento irse, el rubio ladino la había tomado por asalto y habían terminado reclinada en su escritorio teniendo sexo a medio vestir. Mientras el joven le hacía el amor sin verle la cara ella pensaba y decidía "aunque esto me encante, solo tengo dos posibilidades o hacer que Caroline lo dejé en las próximas tres semanas o seducir a Terry hasta tenerlo como a mi querido Jonathan en este momento y así poder ser la Duquesa de Granchester, pero en lo que lo conquisto no dejare de disfrutar de esto" su mente no pudo hacer más cavilaciones pues sintió como el clímax llegaba a ella y enseguida el deposito su semilla en el interior.

A la misa faltaron sólo dos alumnas Elisa y Annie y tres alumnos, Neal, Jonathan y Terry. Archie había llegado corriendo porque se tardo mucho arreglándose.

La hermana Grey al ver el descaro de Archie al entrar un segundo después de cerrar la puerta mando a la hermana Klais a buscar a todos los ausentes.

Encontrar a dos de los varones dormidos no fue difícil, ambos tendrían un castigo asignado por el párroco al terminar la misa, a Terry no lo encontró en su alcoba pero cuando se dirigía al dormitorio de señoritas lo vio cabalgando a su yegua y decidió no molestarlo. Al entrar al edificio se dirigió a ver a Annie que estaba aún en la enfermería y al terminar la misa la trasladarían a su recámara, llamó al cuarto de Elisa y no contestó, así que con su llave abrió la puerta.

Elisa se acababa de bañar y estaba a medio vestir en su recámara.

-Hermana Klais, me ha asustado.- dijo Elisa buscando su bata que había quedado lejos de su mano, así que sólo trató de fingir que arreglaba su corset.

-¿Por qué no fue a misa señorita Leagan? Ya son más de las 12, tuvo tiempo de sobra para arreglarse.- la hermana se acercó a Elisa hasta tenerla de frente.

La pelirroja no sabía que contestar, pero no le dio tiempo de buscar un pretexto si quiera, porque la hermana la sujeto del hombro y comenzó a examinarle el cuello y el escote.

-¿Por qué tiene esas marcas ahí? Y no vaya a decir que se cayó porque se perfectamente que esas son las marcas que dejan los actos pecaminosos, la lujurias se ve en su rostro ¿Quién fue?.- Pregunto la monja haciendo presión en la clavícula de la pelirroja.

-Mi invitado, como era mi prometido, anoche en la fogata estábamos tratando de reconciliarnos.- dijo Elisa muy asustada.

-¿Qué más paso con él?.-siguió el interrogatorio.

-Solo besos, y el beso mi cuello como puede ver.- Elisa ya estaba a punto de llorar.

-Más abajo del cuello, esto se lo dire a la hermana Grey para que le de un castigo, sin duda el merecido para las lujuriosas como usted señorita y estará confinada en el cuarto de meditación una semana.- así que visitase de inmediato que la llevaré ahí desde este momento.- termino la monja.

La misa terminó aburrida como no era de esperarse, Candy y Patty habían sido notificadas por la hermana Margaret de que Annie estaba un poco indispuesta, pero podía tener visitas.

La hermana Margaret y el resto de las monjas estaban en la sala de oración, que servía de salón de maestras.

-Es lamentable que una señorita como la señorita Britter sufra de algo tan grave.- dijo otra hermana.

-La hermana Grey escribirá a sus padres para que un médico le dé tratamiento, según la rectora es triste que se haya vuelto señorita a los 14 años, eso no asegura nada bueno para ser buena madre, si es que algún día llega a conseguirlo.- dijo la hermana Margaret y todas se persignaron.

Minutos después entró la hermana Klais.

-Esa niña merece una paliza.- dijo molesta.

-¿Cual niña?.- pregunto una monja.

-La señorita Andrey.- dijo la hermana Klais.

-¿Qué hizo ahora Candy? la vi tranquila en misa.- dijo la hermana Margaret.

-Ella no, la otra señorita Andrey, la pelirroja que literalmente se parece a María Magdalena.- dijo la hermana Klais.

-La señorita Leagan ¿Qué hizo ella?.- dijo

-Tiene marcas de pecado en el cuello, la hermana Grey le ha dado el castigo de la pala, 20 azotes al natural, frente a sus compañeras por si quieren seguir sus pasos, es difícil cuando llegan a una edad donde no son tan grandes pero no son tan pequeñas y esa señorita se ve peligrosa a pesar de solo tener 14 años.- dijo conforme la monja

-Pobre criatura 20, son muchos. Después de lo de Daisy y Terry los castigos son más severos.- dijo otra monja viendo seria a sus compañeras.

El incidente de que Annie había pasado la noche en la enfermería se vio opacado por la noticia de que Elisa sería castigada en público, un público exclusivamente femenino.

-¿Qué habrá hecho para que la castiguen tan severamente?.- se pregunto Patty en el cuarto de Annie.

-A la mejor la vieron saliendo de la residencia de los muchachos.- dijo Annie que estaba en cama.

-Terry dice que todo lo que se dice de Ella es cierto, me da mucha pena que la hayan castigado y que le vayan a aplicar una sanción tan extrema.- dijo Candy apenada.

-Tú sanción por hablarle mal a la rectora fue muy dura también, es de esperarse que las reglas sean así de estrictas ya saben la fama que tienen de por si las monjas y en este colegio más.- dijo Patty

-No vayas a exponerte hoy Candy, seguramente todo estará muy vigilado, si te atrapan en compañía de un muchacho te irá muy mal.- dijo Annie asustada.

-Lo había pensado desde que nos dieron el aviso de acudir al auditorio pequeño, no te preocupes estaremos aquí hasta que sea hora de bajar para ayudarte.- dijo Candy.

-Le dije a Stear cuando lo encontré en la biblioteca que no podríamos verlos porque Annie se enfermo del estómago y me tome el atrevimiento de decirle que si podía avisara a Terruce, pero Stear me dijo que no había visto a Terry desde ayer.- termino Patty un tanto preocupada.

-Debe haberse tomado el día, convivir con tantas personas lo ha de tener fatigado.- dijo Candy sin darle mucha importancia.

-Stear dice que vio cómo llevaron a Elisa al cuarto de castigo, iba en un mar de lágrimas y parece que la encerraron en el mismo donde te tenían a ti ¿Candy que pasará si Elisa descubre que la ventana se sale? Le dirá a todos que te escapabas.- dijo Patty muy asustada, Annie ahogó un gritito.

-No creo que de con la ventana, tendría que descubrirla hoy y no creo que pueda encontrarla, tendría que ser muy inquieta como yo para notarla.- dijo Candy no muy convencida.

La hora del castigo llegó, Candy y Patty ayudaron a Annie a cambiarse y a bajar sin prisa hasta el aula de asambleas.

-se me hace muy extraño que hagan que Annie baje si no se siente bien.- dijo Candy protestando. Mientras se sentaban en la tercera fila.

-Debe ser un castigo que ejemplifique una conducta. A Daisy la azotaron frente a nosotras por metérsele al cuarto a Terry, como el resultó inocente porque ni estaba ahí no fue castigado. Esa fue la primera vez que golpearon a una mujer que yo sepa, algunos varones les ha tocado este mismo castigo, me parece que Terry ha sido uno de los que lo ha sufrido pero su padre se puso tan furioso que casi despiden a la hermana Gray y es por eso que lo dejan hacer lo que quiera.- termino Patty en un susurro.

Las demás señoritas también estaban susurrando hechos como el que comentaba Patty.

Las religiosas entraron y todas las alumnas guardaron silencio. Elisa que iba llorando en silencio iba escoltada por la hermana Margaret.

La hermana Klase puso un banquillo parecido a una escalera pequeña, donde obligaron a Elisa a hincarse y doblar el torso, parecía como si fuera a rezar frente a todos pero sabían que no era así, ya que las manos la hicieron mantenerlas a los lados de la escalerilla.

-Se suscitó un acto impúdico y para que todas recuerden lo importante que es la moral y no dejarse llevar por la lujuria, he decidido que presencien el castigo que será aplicado a la señorita Elisa Leagan y así pueda regresar al camino indicado que debe llevar una dama. Su condena será recibir 20 azotes en las posaderas al natural.- termino la hermana Grey que se dirigió a sacar de una caja de metal una tabla ancha y pesada como una paleta grande.

Las hermanas Margaret y Klais levantaron a Elisa y la hicieron bajarse su ropa interior y le levantaron la falda del uniforme. La joven pelirroja se deshizo en llanto, desde el momento en que la hermana la llamó a la dirección le reviso el cuello y ella culpó a su ex prometido le impuso el castigo irrefutable, Elisa entró en una crisis nerviosa y cuando amenazo a la rectora con decirle a sus padres, le leyeron una carta escrita por su misma madre donde decía que su hija había estado teniendo conductas lujuriosas y que fuera castigada severamente porque ya no encontraba la forma de corregirla. La carta tenía la misma fecha en que ella regresó al colegio, después de haberla obligado a realizarse el aborto clandestino.

Las amigas de Elisa junto con Caroline y su amiga estaban en primera fila, Luisa se veía sinceramente angustiada, pero Lydia y las demás estaba muy divertidas por la humillación de la pelirroja.

El momento no se hizo esperar, la hermana Grey se remangó la manga de su hábito, tomó la pala de castigo y con toda su fuerza estalló el primer golpe en las nalgas de la señorita Leagan, Elisa gritó y lloro más fuerte, se trató de mover pero las otras monjas la sujetaron, el segundo golpe llevó la misma mecánica y Elisa siguió forcejeando y gritando, así fue el tercero, el cuarto, el quinto, para el sexto azote el trasero de Eliza estaba tan rojo que Annie ya no quería mirar, la jovencita daba mucha pena se estaba ahogando con su mismo llanto y tenía la cara tan roja como su trasero, en el décimo azote Elisa se desmayó y aun así la monja no tuvo piedad, hizo que la despertaran con sales aromáticas, que le dieran agua y la volvieron a posicionar para terminar con el resto del castigo.

Cuando termino el castigo Elisa casi no se movía del shock en que estaba, no se pudo parar así que las monjas tuvieron que ayudarla a levantarse y vestirse, sus nalgas estaban tan lastimadas que seguramente antes de llevarla al cuarto de meditación tendría que pasar a la enfermería a que le hicieran curaciones. Candy no podía dejar de verla con mucha pena, Elisa vio que la veía y esto la encendió de furia, no podía ser que la hubieran humillado de la peor manera frente a la maldita huérfana. Volvió a sumirse en un llanto y se llenó de odio hacia Candy sin ningún motivo lógico, su coraje era en si que Candy no hubiera sido humillada de la forma en que la humillaron a ella, siendo que Candy al ser huérfana se merecía ese castigo y muchos peores.

La cena se llevó en silencio y muy solemne nadie hablaba, si las monjas buscaban amedrentar a las señoritas con ese tipo de castigos lo conseguían, pues el miedo en ellas era casi palpable.

Elisa fue llevada al cuarto de meditación, la curaron ahí y estaba recostada boca abajo con las nalgas al aire, estaba lánguida y aun llorando, le dolían los muslos y el trasero, cono sabía si podría caminar, pero seguramente tendría que pasar en cama varios días, no dejaba de pensar en la mirada de Candy, no soportaba que la rubia le tuviera lastima y la odio más, tampoco soportaba pensar en la sonrisa burlona del rostro de Caroline cuando ella hasta estaba preñada y todo mundo fingía no saberlo.

-Malditas, me vengaré.- Elisa se quedó dormida pensando en que les haría a las dos rubias que le estaban arruinando la vida.