Resultados decimoquinta rifa: Jen, Dakota, Sam, Jo, Sadie, Katie

A. Fiesta en la playa (Katie x Sadie)

—¡Sadie! Qué bueno que pudiste venir, ¿dónde está Katie?

—Gracias por tomarme como una simple extensión de ella —bufó Sadie mientras empujaba con su hombro a Harold para poder entrar a su casa.

—Yo no quería decir eso. Es sólo que ustedes normalmente siempre llegaban a todos lados, y con esta es la segunda vez…

—Sí va a venir, ¿de acuerdo? Solo que un poco más tarde… ¿Quieres que te ayude a llevar cosas a la playa o no?

Sadie estaba a punto de tener una crisis. Katie llevaba meses tratándola raro. Todo había empezado después de que había tenido tres citas seguidas con un mismo chico, Sadie estaba muy emocionada porque sentía que eso iba a cuajar en una relación real por una vez y quería compartir su emoción con su mejor amiga. Pero Katie en lugar de estar feliz por ella había hecho un drama con consecuencias tan funestas que habían dejado de hablar durante un mes entero; Sadie estaba tan alterada que había arruinado completamente sus oportunidades con el chico; y cuando Katie finalmente regresó, después de conseguirse un novio nuevo y fragante, las cosas no habían vuelto a ser como antes.

Así que Sadie estaba haciendo lo que había hecho en la isla cuando Katie había sido eliminada: recurrir a Harold.

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Sadie ya se sentía mucho mejor cuando sacó la última silla a la playa. Estaba cubierta de sudor y tenía arena pegada por todo el cuerpo, pero estaba bien, sabía que Harold le iba a prestar su regadera. Entonces llegó Katie, luciendo tan radiante como siempre, y algo en su corazón se apretujó.

—Sadie… —ella se acercó.

—¡Katie! ¡Qué bueno que viniste! —sonrió todo lo que pudo— Ponte cómoda, yo voy a darme un baño e inmediatamente estoy de regreso contigo.

Cuando acabó de bañarse Sadie no regresó con ella. El resto de los invitados habían empezado a llegar y su mejor amiga, o al menos esperaba que lo siguiera siendo, se encontraba hablando con Leshawna y Beth.

—Tú no vives aquí —le recordó Harold mientras se acomodaba al lado de ella y le pasaba una cerveza.

—Ya lo sé.

—¿Entonces porque actúas como si sí?

—Perdón por ser una buena mejor amiga y llegar temprano para ayudarlos con la fiesta —contestó ella sarcásticamente a lo que el negó con la cabeza.

—Gracias por la ayuda. Pero seamos honestos, tú nunca haces esas cosas.

Sadie bufó en lo bajo.

—Aparte, sólo te acuerdas de que somos mejores amigos cuando tienes problemas con Katie, que es obvio que los tienes, así que…

Sadie enredó ambos brazos alrededor de uno de los de Harold y dejó caer todo su peso sobre él, que tuvo que hacer un pequeño esfuerzo para no irse de lado.

—Me encantaría saber que esta pasando. Pero…

—¿Es complicado? —le preguntó él.

—Es complicado —asintió ella.

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Con el paso de la fiesta las cosas se fueron relajando. Sadie dejó ir a Harold y empezó a hablar, e incluso bailar, con otras personas. No con Katie. No porque la estuviera evitando, para nada. Había sido solo casualidad que le dieran ganas de ir al baño justo en el momento en el que Katie se intentó unir a su conversación con Justin y Cody. Y cuando estaba bailando y todos empezaron a formar un círculo, se sentó porque ya estaba cansada, no porque le hubiera tocado al lado de Katie. Y si no aceptó participar en el concurso de bebida al que la invitó Tyler es porque era una mujer responsable, no porque Katie también fuera a participar.

Eran casi las tres de la mañana y la mitad de los invitados, e incluso uno de los anfitriones, ya habían desaparecido, pero Sadie no podía encontrar la fuerza para moverse de su lugar sobre la arena. Después de dolorosos cinco minutos de un muy borracho Tyler intentando probar que podía cantar ópera, finalmente le pasó el micrófono del karaoke a Katie, que parecía igual o incluso más borracha.

Katie le hizo una señal con la cabeza a Beth que le puso play a la pista de música y Sadie sintió como se le secaba la garganta nada más escuchar las primeras notas.

—Esta canción es para alguien que… yo —balbuceó Katie, haciendo que perdiera las primeras líneas de la canción—. Oh… mierda… ehmm… I wanna ruin our friendship…We should be lovers instead… I don't know how to say this… 'Cause you're really my dearest friend…

Katie logró alcanzar a la canción para la segunda estrofa, y Sadie temió que su corazón estallara dentro de su pecho.

Sadie, darling, you're my best friend… —un par de exclamaciones ahogadas se escucharon entre las personas de la playa, y Sadie se levantó de golpe de su lugar— I've been doing bad things that you don't know about… Stealing your stuff now and then… Nothing you'd miss, but it means the world to me…

Ahora los ojos de Katie estaban directamente fijos en ella, y el mundo alrededor de ellas parecía haber desaparecido.

I wanna ruin our friendship…We should be lovers instead… I don't know how to say this… 'Cause you're really my dearest friend…

Mientras Katie volvía a cantar el coro, Sadie caminaba lentamente hacia ella.

Sadie, take my hand, 'cause we are more than friends —Katie estiró una mano y Sadie se la apretó—. I will follow you until the end. Jenny, take my hand, I cannot pretend why I never like your new boyfriends…

Katie apretó con más fuerza la mano de Sadie que avanzó un paso más hacia ella, ahora estaban frente contra frente. La música siguió sonando y Katie dejó escapar un par de líneas, el micrófono resbaló de sus manos y se enterró en la arena.

I wanna ruin our friendship… —canto Katie en apenas un murmullo—We should be lovers instead… I don't…

La música siguió sonando de fondo mientras Katie y Sadie se besaban. ¿Quién diría que eso era todo lo que necesitaban para que las cosas volvieran a estar bien… no, mejor, entre ellas?


Es la primera vez que hago dos del mismo universo seguidos. Pero, en mi defensa, para mí Katie y Sadie son canon, así que obviamente tenía que pasar en el universo canon. También aproveché a meter la amistad de Harold y Sadie porque creo que es un concepto muy interesante que nos mostraron en el programa pero que nunca le dieron tiempo en pantalla real. En fin, esa canción es literalmente ellas.

Los quiere: yo.