Resultado decimonovena rifa: Sky, Scary Girl, Cameron, Jay, Brick, Sierra
A. La risa más dulce (Cameron x Brick)
La primera vez Brick pensó que le estaba dando un ataque de asma. Hasta donde estaba en su conocimiento él no tenía asma; por lo tanto no hacía ningún sentido que estuviera teniendo un ataque… eso sin mencionar que eso no se parecía para nada a un ataque de asma, pero aun así esa era la única explicación que se le ocurría al porqué, de la nada, había perdido la capacidad de respirar.
Para la tercera ocasión en que el suceso se repitió Brick tuvo que aceptar que era probable que hubiera una correlación entre Cameron riéndose y susn problemas de respiración. Quizás era porque cuando lo hacía las mariposas lo rodeaban y formaban una especie de corona a su alrededor. Y de repente la respuesta estaba muy clara… Brick era alérgico a las mariposas.
En realidad Brick era alérgica a un tipo de fruto secos extraños que nunca antes había probado, pero que eran parte de la prueba cutánea que le hicieron después de que le externo a su madre sus preocupaciones. Pero no hubo ningún rastro de alergia por las mariposas.
Cameron y él no eran precisamente los mejores amigos. No es como que a Brick no le agradara. En realidad le gustaba mucho pasar tiempo con él, cada vez que por una u otra razón terminaban coincidiendo en una actividad Brick siempre se descubría deseando que no pasara el tiempo para que pudieran estar juntos todo el tiempo posible. Desgraciadamente, o afortunadamente para su salud respiratoria, esas ocasiones casi nunca pasaban, porque eran muy distintos; Cameron era el tipo de chico cuya vida estaba orientada totalmente hacia las ciencias, mientras que Brick era un deportista, y uno no muy listo.
Cuando la maestra de Biología asignó a Cameron para que fuera el tutor de Brick, este definitivamente no esperaba que fuera Cameron el más emocionado al respecto… Y tampoco esperaba estar tan decepcionado cuando descubrió que la emoción de Cameron probablemente habría sido la misma sin importar quién fuera su tutorado. Cameron amaba hablar de plantas, y animales, e insectos… sobre todo de insectos. Era extraño, pero cautivante de algún modo. El sistema respiratorio de Brick no sobreviviría a lo mucho que su tutor sonreía.
La mamá de Brick siempre le había dicho que no existían las preguntas tontas, que tonto era el que no preguntaba; pero aún así durante las primeras cinco sesiones evitó por todos los medios hacer cualquier pregunta. Al inicio le preocupó un poco que eso hiciera que las sesiones de tutoría se cancelaran, considerando que todo el sentido de estas era que externara sus dudas, pero en realidad Cameron parecía más que contento con tener un tutorado tan "adelantado", y no dudó en darle información fuera de la currícula. Así que Brick pensó que había tomado la decisión correcta.
Hasta que el sexto día la pregunta más tonta que a alguien se le podría ocurrir se escapó de sus labios.
Cameron no se molestó cuando se dio cuenta que Brick había mentido respecto a entender sus temas. En realidad fue encantadoramente empático y no tuvo ningún problema con volver a explicar desde el inicio. Brick ni siquiera se sintió inseguro por todo lo que Cameron se había reído al escuchar su pregunta… probablemente porque su risa le generaba daño cerebral.
Cuando Cameron le pidió que lo llevara al lugar donde se sentía más cercano con la energía de la naturaleza con la que estaba conectado Brick no podía creer que eso estuviera pasando.
Durante años Brick se sintió atraído al río, y durante años huyó de esa atracción. Cuando finalmente se permitió sumergirse en el río pasó justamente lo que siempre había temido: se dejó llevar. Pero al final estuvo bien, porque el río era su amigo, y lo regresó a la horilla cuando se lo pidió.
Y ahora, cuando Cameron entro tembloroso en él, era como un espejo de agua. Tan calmo que casi podía olvidar que era un río. Al menos mientras le explicaba a Brick sobre todos los diminutos organismos que vivían ahí; pero al parecer el río no era tan su amigo después de todo, porque mientras más avanzaba la tarde este se ponía un poco más… ¿juguetón? Salpicaba a Cameron, a él lo hizo caer, hizo que los peses desviaran su camino para que le hicieran cosquillas a Cameron entre las piernas… y Cameron rio en cada ocasión. Pero lo peor de todo, lo que hizo que Brick estuviera seguro de que iba a morir ese día, fue cuando el rio manipuló las corrientes para hacer que su tutor callera literalmente en sus brazos.
Al final de la tarde ambos chicos se quedaron sentados en la ribera, esperando a secarse un poco para poder vestirse e irse. El sol le daba en la cara a Cameron y Brick no podía creer lo hermoso que se veía… ¿Acababa de pensar que Cameron era hermoso?
—Brick —dijo Cameron haciendo que él saltara en su lugar, de repente hiperconsciente de si mismo—, ¿te agradaría que nos viéramos así más seguido? Tú sabes… no por la escuela.
En esta intenté hacer algo diferente y evitar los diálogos, a mí que me fascinan los diálogos, y cerrar con uno para que tuviera un poco de más… ¿fuerza? Espero que les haya gustado.
Los quiere: yo.