Han pasado 7 días desde la intervención del ninja verde en la Academia Shujin y la noticia le había dado la vuelta al mundo en tan solo un par de segundos, para el mundo fue impresionante y muy indignante saber cómo un ex campeón Olímpico cometió actos tan atroces contra sus propios estudiantes, pasando del abuso físico hasta el abuso sexual.

Lo peor de todo fue que la misma academia Shujin ahora se encontraba bajo investigación, pues era muy extraño que los docentes o el director pasaran por alto a los estudiantes heridos y no se investigará más a fondo la situación.

Ahora mismo podemos encontrarnos con la nueva ubicación del segundo hombre más famoso de todo el mundo, en este momento Suguru Kamoshida se estaba reflexionando en su propia suit privada.

Una habitación única que tenía todas las comodidades del mundo, había un catre con manchas de dudosa procedencia, un inodoro asqueroso que parecía estar atascado debido al papel higiénico, además de tener unos lindos barrotes delimitado el área por la que podía movilizarse y por su puesto... el olor de la culpabilidad y la miseria esparciéndose por toda su ¨Suit¨.

- Oye Escoria –Habló una voz femenina desde el exterior de la celda, la cual miraba como el hombre se cubría el rostro mientras se repetía que esto era una maldita pesadilla y no podía estarle pasando eso a el- Vinieron por ti –Declaró aquella voz femenina en un tono bastante tranquilo, esto llamó la atención del hombre que lentamente alzó la mirada.

Ahí estaba la detective Alexandra Trese con sus manos metidas en los bolsillos de su gabardina, tenía una expresión muy sería en el rostro, mientras que a su lado había dos policías muy sonrientes, pues esta era la parte que más disfrutaban de su trabajo.

- Kamoshida-san, te están esperando para establecer tu sentencia –Declaró uno de los oficiales mientras le mostraba las llaves con cierta burla.

- ¿DE QUÉ ESTÁN HABLANDO? YO NO PIENSO MOVERME DE AQUÍ ¿DÓNDE ESTÁ MI ABOGADO? NO IRÉ A NINGÚN LADO SIN MI ABOGADO –Gritaba el hombre que termino arrinconándose como un animal asustado, mientras la detective haciendo un movimiento con su cabeza permitía el acceso a los oficiales para que entraran y lo llevaran a la fuerza- ¡QUÍTENME SUS SUCIAS MANOS DE ENCIMA! ¡YO SOY EL REY DEL CASTILLO! ¡NO PUEDEN HACERME ESTO! ¡UNA VEZ QUE SALGA DE AQUÍ LOS HARE PAGAR A TODOS! –Gritaba el hombre completamente fuera de sí.

- En ese caso su majestad, le espera una audiencia por crímenes contra su reino, su pueblo dictara la sentencia, rece a todos los dioses que conozca para evitar que le corten la cabeza –Declaró la detective mirándose como los oficiales entraban a la suit privada y se acercaban para tomarlo de los brazos, mientras el hombre se retorcía y pataleaba mientras se lo llevaban a rastras.

- ¡FUI INCULPADO! ¡SOY INOCENTE! ¡YO SOY INOCENTE! –Gritaba el hombre mientras que Trese soltaba un suspiro de paz al saber que por fin dejaría sus celdas.

En ese momento todo se detuvo y apareció un símbolo de una flecha curveada, lentamente la cámara se aleja un poco dejándose ver una mano que sostenía un teléfono celular, esta pertenecía a Izuku Midoriya, el cual le estaba enseñando a su nuevo amigo Ryuji Sakamoto, aquello que había ocurrido dentro de la celda en el precinto de policías.

En este momento ambos se encontraban en un restaurante de comida rápida, estos dos habían quedado a la hora de la salida, pues el peliverde quería mostrarle aquel momento al rubio, después de tanto sufrimiento era algo que el chico con apariencia de brabucón necesitaba ver.

- ¿Cómo lo conseguiste? –Preguntó el chico con una enorme sonrisa de oreja a oreja, ese bastardo por fin recibiría su castigo.

- Tengo mis métodos, lo único complicado fue que Trese me permitiera estar presente, ahora le debo un favor –Se quejó el chico de las pecas.

- Izuku, amigo mío, esto es que has hecho por mí, es el mejor que regalo que pudieron haberme dado, a partir de hoy, si necesitas algo, cuentas conmigo completamente –Mencionó el joven rubio bastante feliz con el desenlace.

- Agradezco tus palabras Ryuji-kun, pero preferiría no involucrarte demasiado, ya es bastante peligroso que tu sepas la verdad sobre mí –Comentó el Midoriya mirando al muchacho de cabellera rubia sonreír muy agradecido, Izuku era muy buena persona sin duda alguna.

- Entiendo, sin embargo no retiraré la oferta, si me necesitas estaré ahí para brindarte apoyo, todo héroe de una buena historia necesita un escudero –Comentó el rubio bastante decidido mientras esperaba estrechar su mano.

- Espero no tener que recurrir a ti, lo que menos quiero es que lastimen a un amigo, aun así gracias –Mencionó el peliverde estrechando su mano con el rubio.

- Bueno Izuku, ya no perdamos más tiempo, escuché muy buenas críticas sobre este local, hora de comer y descuida si quieres otra yo invito –Mencionó Sakamoto tomando su hamburguesa, para después darle una gran mordida, logrando sentir el grasoso sabor de la carne combinándose con la espesa textura del queso cheddar y ese toque de salsa BBQ.

- Despacio Ryuji-kun, la hamburguesa no se ira a ningún lado –Comentó el peliverde con una sonrisa algo nerviosa, sin embargo antes de poder ingerir sus alimentos.

- Por cierto... ¿Ya te reconciliaste con la pequeña brabucona? –Preguntó Ryuji mirando al peliverde, el cual soltó un suspiro.

- Las cosas esta... algo tensas, ya le pedí disculpas por la manera tan ruda en la que le hablé, fui muy brusco esa vez y sé que había mejores formas de explicarle la situación, pero... el fracaso de ese día me hizo revivir cosas de mi pasado, cosas que no deseo volver a vivir –Mencionó el peliverde bajando la mirada.

- ¿Tan grave está él asunto? –Preguntó el rubio bastante sorprendido, la expresión de Izuku expresaba melancolía pura.

- Perdí a gran parte de mis amigos, era un enfrentamiento que nos superaba por completo, todos y cada uno de ellos me protegieron y murieron frente a mis ojos y lo que más me preocupa de todo, es que no tengo idea de si mi madre está o no con vida –Explicó el peliverde en un tono bastante deprimido.

Esto sembró un silencio bastante pesado e incómodo, sin embargo el peliverde sintió una mano sobre su cabeza mientras le desordenaban el cabello de forma amistosa.

- Piensa en que lo está, es lo mejor que puedes hacer, tu madre esta vivía y en espera de que un día puedan reunirse, si tú piensas cosas malas solo te vas a fastidiar de por vida, así que, solo repítelo en tu cabezota hasta que sientas que se convierte en una verdad única, tu madre está viva y volverán a reunirse –Mencionó Ryuji con una sonrisa amigable.

- Gracias –Respondió el peliverde.

- Bueno, ya mucha palabrería, seguro que la enana te perdonara, ahora lo que tienes que hacer es concentrarte en esa belleza de triple carne frente a ti –Comentó el chico dejando en shock a Izuku.

- ¿Triple? –Cuestionó sorprendido el muchacho, él no era de los que comían mucho, sin embargo sus pensamientos fueron interrumpidos por una voz bastante familiar.

- ¡IIIIII-ZUUUUKU-KUUUUN! –Llamó una voz alegre y cantarina haciendo que el peliverde y el rubio alzaran la vista, fue entonces que se encontraron a Marin Kitagawa deslizándose con mucho estilo hasta llegar a donde estaban ambos chicos.

- Kitagawa-san –Mencionó el peliverde al verla aparecer de sorpresa.

- ¿La conoces? –Preguntó el rubio, mientras que el Midoriya asentía, como olvidar a una de las chicas que le recordaba a alguien de su anterior mundo.

- Izuku-kun, tienes que venir conmigo a la convención de mañana, por favor di que sí, anda por favor –Pidió la chica con emoción, sorprendiendo bastante al pecoso ¿Acaso esto era una especie de cita?

- ¿Convención? –Preguntó el peliverde confundido, pues no esperaba ese tipo de invitación, aunque ahora que lo recordaba, el día que se efectuó el festival fin de año, Kitagawa le hizo una petición similar.

- ¿No recuerdas? Me estuve preparando mucho para este día, gracias a ti podré vestirme como es debido, encontré a alguien me está ayudando con la creación de mi cosplay, es un chico muy amable, algo tímido pero muy eficiente, es buena persona quizás podrían llevarse bien –Explicaba muy emocionada Kitagawa mientras colocaba las manos sobre la mesa y se acercaba demasiado a su rostro del peliverde, cosa que avergonzó al Midoriya, este nivel de fanatismo no lo veía desde antes de la gran guerra contra AFO.

- Bueno, quizás pueda acompañarte, pero, yo no tengo –En ese momento Marin llevó las manos a su bolso escolar y después sacó algo que terminó extendiendo entre sus manos para entregarle algo al Midoriya.

- ¡TAARAAAAA! –Exclamó emocionada la rubia.

- ¿Qué? ¿Qué es esto? –Preguntó Izuku algo confundido mirando a Kitagawa.

- Un agradecimiento por haberme ayudado, sin las ideas que me proporcionaste con tus bocetos no habría podido estar lista para el día de mañana –Respondió la chica con una sonrisa, cosa que sonrojó al peliverde, últimamente recibía bastantes regalos por parte de las chicas- Entonces... ¿Qué dices? ¿Me acompañas? ¿Verdad que Si? ¿Siiiiiiiiiiiiii? –Preguntó la chica con emoción.

- Claro que aceptamos –Respondió el rubio con una sonrisa, adelantándose a su amigo pecoso.

- Ry-Ryuji-kun –Mencionó muy nervioso el peliverde al ver las libertades en las que se metía.

- Izuku piénsatelo bien amigo, es un lugar lleno de chicas bonitas usando trajes muy geniales y llamativos –Mencionaba el chico que a pesar de no ser un fan del estilo Otaku, era fan de ver chicas lindas- ¿Puedo acompañarlos? –Preguntó el rubio con una sonrisa.

- Claro, por su puesto, entre más vayamos mejor –Respondió Marin con emoción, era la primera vez que la pasaría con amigos que compartieran su gusto por el cosplay en general.

- Ryuji-kun tengo cosas que hacer, no puedo dejar la ciudad descuidada –Se quejó el peliverde en voz baja.

- Tu tranquilo, la convención es durante el día, tu sueles actuar más por la noche, además necesitas salir a divertirte un poco más, no pienso dejar que te conviertas un rechazado de la sociedad –Mencionaba el rubio, fue entonces que ambos voltearon a ver a la chica y esa carita llena de emoción, esto fue la muerte y derrota de Izuku Midoriya, ahora no podría negarse.

- Ha-hai, iré –Respondió el peliverde haciendo que la chica se emocionara más y sus ojos brillaran como estrellas.

- Que emoción –Exclamó la chica dando un salto de alegría.

- Ejem... -Un carraspeó de garganta se hizo presente, en ese momento todos pudieron ver a una chica rubia de coletas, la cual llevaba el uniforme de la academia Shujin y se miraba un poco disgustada ante lo que estaba presenciando.

- ¿Takamaki? –Mencionó Sakamoto algo confundido, mientras la chica estaba de brazos cruzados y tenía una expresión bastante seria.

- Te eh estado buscando por varios días, incluso fui a tu casa y me dijeron que ya no vivías ahí. Ahora que te encuentro por pura casualidad... pareces estarla pasando muy bien –Comentó con la mirada entrecerrada, cosa que le provocó un escalofrío al ex alumno de Shujin.

- ¨¿Pero qué rayos?¨ -Pensó el rubio bastante confundido, mientras que Izuku ahora era el espectador de la situación de Ryuji.

- ¨Esas palabras me parecen bastante familiares¨ -Pensó Deku con una gota de sudor bajando por su nuca.

- Espera ¿Takamaki? ¿Ann Takamaki? –Preguntó Marin con emoción llamando la atención de la rubia con ojos claros, de un momento a otro Kitagawa se encontraba frente a ella, cosa que la puso algo nerviosa, esta chica era algo rara.

- Si... Si ¿Por qué preguntas? –Preguntó Ann confundida y alzando las manos un poco para intentar mantener algo de distancia.

- Tú eres una modelo muy famosa, tengo varias revistas donde apareces tú en la portada, incluso aquí tengo la más nueva –Dijo la chica sacando la revista- Por cierto, si soy sincera eres más bonita y amable que Mika, una vez la conocí y pese a ser nueva en esto tiene un pésimo humor y cree que todas las chicas deberían estar por debajo de ella –Mencionaba Kitagawa algo disgustada y haciendo una curiosa boca de pescado mostrando inconformidad.

- Yo, este... ¿Gracias? –Respondió algo confundida la rubia de coletas.

- ¿Eh? Bueno, Pa... ¿Para que me buscabas? –Preguntó el rubio muy confundido y desconcertado por el actuar de la rubia de coletas, cuando esta escuchó la voz del muchacho regresó en sí, ahora recordaba por que se había acercado a la mesa donde estaba el chico.

- Oh sí, ya me acordé, toma –Mencionó Takamaki mostrando un teléfono celular, mientras desviaba el rostro con los ojos cerrados- el día que arrestaron a Kamoshida, el ninja verde te sacó muy rápido de la escuela, no tuve tiempo de devolverte esto, pero, supongo que no te importa ya que estas muy entretenido con tu amiga ¿No es así? –Preguntó la rubia con una actitud bastante confusa para el pobre Sakamoto.

- Oh no, no te preocupes, a tu novio no lo conozco, yo vine con Izuku-kun –Respondió Marin notando la actitud de Ann, sin embargo estas palabras provocaron que la chica de coletas se pusiera completamente colorada.

- ¿No-no-novio? –Preguntó Ann con las mejillas ardiendo en un intenso rojo- Yo no soy su novia –Se quejó la chica de coletas- Sakamoto es más un conocido –Comentó algo disgustada la de coletas.

En ese momento Izuku pudo ver como alguien más se acercaba a paso lento, esa cabellera oscura y ese rostro ligeramente maquillado para ocultar aquellos moretones en su rostro. Al igual que Ann esta llevaba el uniforme de la academia Shujin.

- Ann-chan ¿Ya terminaste? Ya hice nuestros pedidos –Comentó la joven de cabellos oscuros.

- Shiho, lo siento me, me distraje un poco –Se disculpó Ann al ver a su amiga acercarse.

- No pasa nada –Respondió la chica en un tono bastante amable- Hola Sakamoto-san –Saludó Shiho, la cual parecía verse un más recompuesta.

Izuku al verla sintió paz, Ryuji tuvo razón, salvarla de morir fue una buena acción, pero salvarla del tipo malo, le hacía sentirse bien consigo mismo.

- Hola Suzui-san, es bueno verte mejor –Comentó el rubio, mientras que a la de coletas se le marcaba una vena hinchada en la sien.

- Sakamoto-baka, deja de coquetear con mi mejor amiga –Se quejó Ann mientras le sacaba una gota de sudor a Izuku y Ryuji, Marin por su parte intentaba aguantar la risa, al parecer este par no se daba cuenta de lo que estaba pasando.

- Tranquila Ann-chan, Sakamoto-san solo está siendo amable y si, gracias, estoy mejor gracias a las sesiones de terapia, ha sido algo difícil pero, con el apoyo de Ann-chan y de mis padres, esto ha sido más llevadero, pero sobre todo, esto fue gracias a el –Dijo Suzui con las mejillas coloradas al recordar aquel acercamiento con el misterioso héroe- Si no me hubiera salvado en ese momento, es seguro que ese monstruo hubiera seguido haciendo de las suyas –Comentó la pelinegra bajando la mirada.

- No pienses en esas cosas Shiho-chan -Pidió Ann queriendo animar a su amiga.

- Tranquia Suzui-san, tu vida será mejor ahora, dicen que una vez que el ninja verde te salva, siempre mantiene un ojo encima de ti –Mencionó Ryuji haciendo que el peliverde comenzará a toser un poco, pues lo tomo por sorpresa mientras estaba bebiendo un poco de agua.

- Gracias Sakamoto-san, por cierto Ann-chan ¿Ya le regresaste su teléfono? Durante toda la semana no paraste de decir que querías verlo y agradecerle como era debido –Comentó la chica de cabellos oscuros haciendo que vapor saliera por los oídos de la rubia y este le moviera las coletas.

- NO... NO ES CIERTO, ELLA... SOÑÓ QUE YO DIJE ESAS COSAS, NO LE CREAN –Mencionaba Ann, mientras que Shiho reía divertida, mientras con una mano se cubria su boca intentando reprimir su sonrisa.

- ¨Si, Si, es una sonrisa muy bonita, pero usted ya tiene a Shouko-chan jovencito, ahora regresa tu atención a tu hamburguesa o voy a intensificar esta migraña¨ -Se quejó Nana haciendo que el peliverde tuviera una gota de sudor bajando por su nuca.

- To-tómalo, ya debemos de ir por nuestras ordenes –Mencionaba la joven muy colorada ante la situación en la que Shiho le había metido. Ahora Ann volvía a extender su mano con el teléfono celular del muchacho.

- Gracias –Respondió Ryuji al haber recuperado su celular.

- Ya... ya nos... nos veremos después –Dijo Ann mientras colocaba sus manos en los hombros de Shiho para hacerla caminar mientras se alejaban.

- Bueno quizás yo también debería irme, debo preparar todo para mañana, nos vemos –Dijo Marin robándole una papa frita al peliverde para después salir corriendo.

- Viejo, creo que le gustas –Comentó Ryuji mirando partir a Marin.

- Creo que lo mismo va para ti –Mencionó Izuku notando como Ann se sentaba muy alejada de la mesa de ellos, mientras que hacia caras graciosa y parecía reclamarle algo a la joven pelinegra que sonreía y trataba de calmarla.

Un silencio se sembró entre ambos y después se vieron uno al otro...

- ¿Dijiste algo? –Preguntaron al mismo tiempo, sin llegar a una respuesta.

Al final ambos terminaron de comer y cada uno regresó a su hogar, fue entonces que el peliverde llegó a su hogar donde al abrir la puerta se llevó una sorpresa.

- ¡VAMOS SHOUKO TU PUEDES! ¡YA CASI LO TERMINAS! –Exclamaba Nagatoro alentando a la temblorosa chica que sostenía un control de Xbox entre las manos.

Los ojos de la pobre y pálida pelinegra tenían una extraña forma, algunas lágrimas de terror amenazaban con salir en cualquier momento.

- ¡VAMOS TU PUEDES! ¡SHOUKO! ¡SHOUKO! ¡SHOUKO! ¡SHOUKO! –Animaban Gamo y Yoshi, cosa que dejó confundido al peliverde, este se regresó a la puerta y si, era el departamento Mizuriya... digo, el departamento compartido por Mizuhara y Midoriya.

- ¿Qué sucede aquí? –Preguntó Izuku confundido, cuando se escuchó el romperse de un cristal.

- Eeeeekkk –Komi terminó con la piel completamente erizada y su cabello en puntas, el control de la consola caía de sus manos a la alfombra y después la pobre se fue de lado, mientras que en la pantalla aparecía la palabra GameOver y salia algo de sangre escurriendo por las letras.

- Shouko ¿Estás bien? –Preguntó Izuku- Oigan ¿Por qué pusieron a jugar a Shouko algo tan...? –Cuando Izuku volteó a ver a Nagatoro y sus amigas, estas también estaban pálidas, con los ojos en blanco y sus almas se escapaban por sus bocas.

- Lo mismo les dije yo, pero Shouko se miraba decidida a enfrentarse a Nemesis –Mencionó Mizuhara asomándose desde la cocina- ¿Cómo te fue? Creí que volverías más noche cuando salieras del trabajo –Dijo la castaña mirando al peliverde.

- Si, este decidí tomarme el día, además, me salió un compromiso el día de mañana, tengo que preparar algunas cosas –Dijo el muchacho con una sonrisa, llamando la atención de Chizuru.

- ¿Un compromiso? ¿Tu? –Preguntó bastante sorprendida a castaña.

- Si, este... Ryuji me convenció –Respondió el peliverde rascándose la nuca con una sonrisa nerviosa.

- Oh vaya, así que una salida de chicos, me parece bien, me alegra que por fin tengas amigos con los cuales pasar un buen rato –Comentó Mizuhara con una sonrisa, mientras regresaba su atención a la comida que estaba en la estufa y la revolvía lentamente.

- Si... este... sobre eso, no es... en sí una salida de chicos –Mencionó el muchacho rascándose la nuca y con la mirada baja, mientras la castaña guardaba silencio- Kitagawa me invitó a una convención y Ryuji se me adelantó diciendo que ambos iríamos –Explicó el muchacho, el cual levantó la mirada y se llevó el susto de su vida, no sabía cómo pasó, pero, Shouko y Hayase se habían recuperado casi como si fuera magia y ahora se encontraban al lado de Mizuhara.

- Vaya, parece que alguien va a divertirse mañana, esto sí que se pone interesante –Comentó Gamo sonriendo mientras colocaba una mano debajo de su barbilla.

- ¡HERE COMES A NEW CHALLENGER! –Dijo Yoshi como si se tratara de un nuevo enemigo en un videojuego.

Nagatoro miraba a Izuku y solo suspiró con cansancio, esta miró a Komi y Chizuru.

- Shouko es tarde y debo regresarte a casa, no quiero preocupar a tu mamá, la tarde de chicas termina oficialmente –Comentó la pelinegra de baja estatura, mientras que Shouko asentía.

- Te encargo la comida, solo evita que se vaya a quemar, iré por algunas cosas a mini mercado de la esquina para completar la cena –Dijo Mizuhara saliendo de la cocina, mientras que el peliverde se miraba bastante confundido, ahora las chicas acomodaban la consola en su lugar y salieron de la casa dejandole a solas.

- Vaya, vaya, parece que la novela se puso más interesante –Comentó Gamo mirándoles.

- ¡PLOT TWIST! –Exclamó la chica de coletas.

- Entonces Hayacchi ¿cuál es el plan? –Preguntó la pelinaranja cruzando sus brazos por debajo de sus pechos, mientras que Nagatoro sonreía.

Tras esas palabras un nuevo día había llegado, domingo, el único día en el que incluso el ninja verde podía tomarse un par de horas antes de lanzarse a la acción y cuidar de su ciudad.

- Buenos días Chizuru-chan –Saludó el peliverde, sin embargo no hubo respuesta, esto llamó su atención, al girar su mirada en dirección a la cama pudo percatarse que su Roomie no se encontraba, la cama estaba perfectamente arreglada- ¿Salió desde temprano? –Preguntó el peliverde confundido.

Ahora el muchacho salía de su sillón cama y se levantaba realizando algunos estiramientos, podía escucharse como sus huesos y articulaciones tronaban mientras él hacia movimientos.

- Bueno debo prepararme –Comentó el peliverde caminando en dirección a la cocina, pero al llegar al pequeño comedor se encontró con el desayuno hecho y una nota.

¨Me salió una cita el día de hoy, come tu desayuno antes de irte¨

- Que raro, no suele trabajar los fines de semana a menos de que enserio sea necesario –Mencionaba el peliverde- Bueno mejor no hacerla enojar –Comentó para sí mismo el muchacho, el cual se sentó a desayunar.

Con el pasar de los minutos, el peliverde desayunó, hizo un poco de limpieza y después se dio una ducha, al final, esté miraba el regalo que le había dado Marin, el color era tan nostálgico.

- El color verde brillante me recuerda al traje de Deku –Comentó el peliverde sonriendo, entonces este escuchó su teléfono y al tomarlo vio un mensaje.

El traje estaba compuesto por una gabardina sin mangas, pero con capucha, lo cual le permitía ocultar su identidad, llevaba una mascara de tela que cubría su nariz y boca que le ocultaban también las pecas, siendo lo único visible sus ojos. Llevaba unos pantalones negros y unas botas tácticas negras con casquillo. Como accesorio usaba unos guantes negros de cuero y sin la parte de los dedos.

¨Ya voy de camino a la convención¨

- Está muy emocionada –Mencionó el peliverde con tranquilidad mientras que miraba el traje- Podría ser un reemplazo en caso de que el otro se me dañe –Dijo Izuku, para escuchar una notificación nueva- Sera mejor que me apresure, aunque... -Dijo el peliverde...

Minutos después...

Sin perder tiempo, una especie de destello verde apareció por los cielos moviéndose a gran velocidad, ahora podemos ver como Izuku se desplazaba a base de saltos y algunos impulsos gracias a sus látigos negros.

- Debo decir que la tela es bastante cómoda, pero dudo que sea tan resistente como la otra, eso podría traerme algunos problemas –Pensaba Izuku mientras se desplazaba por los aires- Quizás pueda solucionarlo después –Mencionó el peliverde flotando en el aire, cuando vio un globo flotando a su altura y escuchó un llanto, el peliverde rápido tomó el globo y bajó la mirada encontrando a una niña en lo que parecía ser tallándose los ojos mientras lloraba- No creo que nada malo pase –Mencionó el muchacho comenzando a descender hasta llegar a lo que parecía ser un tejado bastante arreglado para un evento importante- ¿Esto es tuyo? –Preguntó el peliverde con una sonrisa, su voz llamó la atención de la pequeña que abrió los ojos y su tristeza se vio cambiada por una sonrisa de felicidad.

- ¡MI GLOBO! –Dijo la niña con emoción, mientras Izuku sonreía y le devolvía el globo- Gracias señor –Mencionó la pequeña, para después Izuku asintiera, eran este tipo de cosas por las que le gustaba ser héroe, proteger las sonrisas de otros.

- Debes tener más cuidado pequeña, no juegues donde sea peligroso, así que no pases la línea de seguridad ¿Esta bien? –Preguntó el peliverde con una sonrisa amable mientras señalaba dicha línea en el suelo de esa elegante azotea.

- ¡Hai! Gracias por devolverme mi globo –Respondió muy feliz, mientras agarraba bien su globo para evitar que se volviera a escapar.

- No hay de que, se buena niña –Mencionó el peliverde.

- ¡OYE! ¿QUIÉN ERES TÚ? ¡ALEJATE DE MI HIJA! –Gritó una voz masculina.

- Me tardé más de lo esperado –Dijo el peliverde para cubrirse con rayos y después dar un salto dejando en shock al hombre.

- Ese... ese era el –Mencionaba señalando la silueta de Izuku alejándose con rapidez.

- Adiós señor, adiós –Se despedía la pequeña agitando su mano desocupada.

- Eso estuvo cerca –Dijo el peliverde con una sonrisa nerviosa, para después darse una doble palmada en las mejillas- Bien Izuku, no más distracciones heroicas –Se dijo a sí mismo el peliverde.

Sin embargo, como si el destino se negara a darle esa oportunidad, el peliverde tuvo que hacer algunas cosas extras, detuvo un auto de estrellarse, evitó el robo a una mujer de edad avanzada

¿Bajó un gato de un árbol?

Al final Izuku llegó al lugar donde se haría la convención, este se miraba exhausto, era la primera vez que hacía tantas cosas en un solo día, definitivamente el creador lo odiaba, pero al final este pudo relajarse un poco, cuando de repente sintió algo contra su espalda.

- Alto ahí ¿Por qué copias mí estilo? –Preguntó una voz femenina algo grave, el peliverde confundido se dio la vuelta y... ahí estaba ella- Hola –Saludó muy sonriente Marin, la cual estaba usando el mismo atuendo que Izuku, era sorprendente ver lo comprometida que estaba la joven pues sus curvas habían desaparecido al llevar las ropas del ninja verde.

- ¿Kitagawa-san? –Preguntó el peliverde, mirándola asentir, mientras que detrás de ella estaba un joven bastante alto de cabellos oscuros y cortos.

- Me alegra que pudieras venir, por cierto, los presento, Izuku-kun, él es Wakana Gojo-kun, fue quien me ayudó a sacar las medidas exactas para mis cosplay –Mencionó muy emocionada la chica enmascarada- Gojo-kun, él es Midoriya Izuku-kun, es un gran fan del ninja verde y conoce muchos detalles de él, fue gracias a su análisis y observación que pude presentarte los bocetos para las telas –Explicó Marin presentando a esos dos.

- Es un placer Wakana-san –Respondió el peliverde con una sonrisa nervios.

- Lo... lo mismo digo, Midoriya-san –Mencionó el muchacho mientras estrechaban la mano, sin embargo desviaban la mirada y solo podían pensar algo.

Incomodo...

- Por cierto, pude notar que tus especificaciones sobre las telas... eran algo extrañas –Mencionó el joven de cabellera negra.

- ¿Extrañas? –Preguntó Izuku confundido.

- Si, este... veras, cómo lo digo, los materiales parecen ser algo duros, pesados y resistentes, pareciera como si los hubieras escogido para hacer una tela resistente a ataques punza cortantes –Comentaba el muchacho haciendo sudar a Izuku.

- Oh... de... ¿de verdad? –Pensó el peliverde.

- Si y bueno, dado que podrían ser demasiado pesados para alguien como Kitagawa-san, tuve que buscar otras alternativas, me tomó bastante tiempo encontrar materiales similares, no son tan resistentes como los otros, pero... Al menos visualmente, la tela se asemeja bastante al atuendo del original, cosa complicada ya que, bueno, las fotos del ninja verde son complicadas de conseguir –Explicaba el joven Wakana.

- Ya... Ya veo, qui... quizás eso sea a alguien que le interese en la comunidad de fans en la que estoy inscrito –Dijo el peliverde, mientras se daba una bofetada mental- ¨Excelente Izuku mas pésimas mentiras, ¿primero limpias casas a domicilio y ahora estás en una página de fans?¨ -Se cuestionó el peliverde de forma mental.

- Oye... ¿No iba a venir tu amigo? –Preguntó Marin, notando que Ryuji no estaba por ningún lado.

- Bueno, eso dijo Ryuji-kun –Respondió el Midoriya, el cual le buscaba con la mirada, pero... había demasiadas cabelleras rubias.

- Seguro que lo encontramos más tarde ahora vas a ver otros cosplay –Dijo la chica, cuando el peliverde asintió, pero con solo dar un par de pasos, este chocó contra algo bastante blando.

- Lo siento – Se disculpó el peliverde.

- No te preocupes, Amigo –Dijo una voz femenina algo familiar desde el interior de lo que parecía ser una armadura.

- ¡UN SIEGWARD DE CATARINA! –Gritó Marin con emoción al reconocer a uno de los personajes.

- Parece que me conoces, amiga –Dijo ¨Siegward¨ entonces este se quitó el casco y el peliverde pudo corroborarlo, cabellos anaranjados y un lazo de color verde atado en su cabeza.

- ¡YOTSUBA! –Exclamó el peliverde al ver a la chica sonreír.

- Hola senpai, no sabía que también te gusta ser parte de la comunidad –Mencionó sonriente la chica.

- Bueno, es que... me convencieron –Mencionó el peliverde.

- Tu traje de Siegward es adorable ¿Cómo lo conseguiste? –Preguntó Marin encantada.

- Lo pedí por internet, hace poco mi hermana Miku estaba jugando Darksouls y quede enamorada de su personalidad –Decía la chica de cabellos naranjas.

- Es que es tan lindo y noble, dan ganas de abrazarlo –Comentaba Marin, cuando Yotsuba se puso el casco.

- Puedes hacerlo –Dijo la chica intentando hacer su mejor imitación de voz masculina.

Marin no se pudo contener y de un salto se aferró a Siegward de Catarina, mientras que salían corazoncitos, al parecer este era el mundo de Kitagawa, cosa que sorprendió bastante a Izuku.

- Vaya, no sabía que el ninja verde estaría aquí –Dijo Gojo provocando que el peliverde se llevara el susto de su vida, en ese momento pudo ver en dirección donde miraba el pelinegro y encontró un cartel donde estaba el... era el ninja verde falso.

- ¨Midoriya-shounen esta es tu oportunidad¨ -Mencionó All Might.

- ¨Izuku, tienes que ponerle un alto a este sujeto¨ -Declaró Nana con una voz muy seria.

- ¨Yo digo que lo lleves a un callejón oscuro y te hagas cargo de él, nadie lo va a extrañar¨ -Dijo All For One, pues incluso a él le daba pena ver a ese payaso.

En ese momento se vio como un hombre subía a un escenario, parecía ser el encargado de lugar.

- Hola a todos y gracias por haber venido, tenemos varias sorpresas para ustedes y que mejor forma de arrancar este evento que con B-komachi haciendo acto de presencia, con una canción tributo al héroe de la ciudad –Dijo el hombre cuando las luces se apagaron y la gente se volvió prácticamente cola acercándose lo más que pudieron hacia el escenario.

(N/A: Smile - Butterfly [DolphinLyrics - Sub. Español] )

El tranquilo sonido de un Shamsien se hizo presente, las máquinas de vapor hicieron lo propio, mientras que varias luces de colores aparecieron, fue entonces que esas cinco chicas estaban ahí presentes volviendo locos a todos los fans.

Ay, iyaiyai

Ay, iyaiyai

Ay, iyaiyai

Where's my samurái

Sus voces a unísono resonaron con fuerza, mientras que en varias pantallas se miraban videos del ninja verde, estos habían sido editados para concordar con la canción que las hermosas idol cantaban en ese momento.

I've been searching for a man

All across Japan

Just to find, to find my samurai

Someone who is strong

But still a little shy

Yes I need, I need my samurai

- ¡Ai! –Gritaban gran parte de los varones que alzaban algunas varas de luz.

- No puede ser es Ai Hoshino –Decía Marin completamente emocionada, incluso ella había sacado su propio par de varitas luminosas para brindarle apoyo durante la canción a la chica.

Ay, ay, ay

I'm your little butterfly

Green, black and blue

Make the colours in the sky

Ay, ay, ay, I'm your little butterfly

Green, black and blue

Make the colours in the sky

Izuku estaba completamente sorprendido, jamás espero que la fama del ninja verde llegara hasta este punto. En ese momento el peliverde pudo ver de reojo una cabellera rojiza en puntas y una sonrisa con colmillos muy marcados, sintió un codazo que lo sacó de su estupefacción, al parecer solo había sido su imaginación.

- Kirishima –Susurró el peliverde, al parecer su amigo se había aparecido para felicitarlo, no pudo evitar imaginarse a Bakugo gritándole que una estúpida canción no lo hacía superior a el, mientras que Mienta y Kaminari lo acosarían para saber cómo había impresionado a una chica linda y hablando de chicas, seguramente Mina y Toru estarían bromeando con él y logrando avergonzarle.

I've been searching in the woods

And high upon the hills

Just to find, to find my samurai

Someone who won't regret

To keep me in his net

Yes I need, I need my samurai

La canción duró lo propio y al terminar, la gente estalló en emoción lanzando gritos sobre lo mucho que amaban a las chicas de B-komachi.

- ¡Gracias a todos por venir! ¡Y Ninja Verde si estas por ahí...! Quiero que sepas, que todos estamos muy agradecidos contigo, yo soy súper fan del ninja verde también, así que con toda libertad te diré que TE AMO –Gritó la que parecía ser la líder de las idol llenando de emoción a gran parte de las personas, mientras que otros lloraban al saber que su querida idol había declarado su amor por el misterioso héroe de la ciudad.

El rostro de Izuku se puso completamente colorado, fue entonces que su sentido de peligro se activó, entonces un par de manos le sujetaron por los hombros y cuando este giró la cabeza pudo verlas... eran Chizuru y Nagatoro, el peliverde trago en seco.

- Hola... ninja verde –Saludaron ambas chicas, mientras que Izuku notaba que no eran las únicas, detrás de ellas estaban Miku, Tejina y Shouko.

- Sabes, estaba considerando dejarte la virilidad intacta, pero parece que castrar al perro lujurioso desde la raíz es una mejor opción –Mencionó Nagatoro haciendo que el peliverde temiera por su vida.

Minutos después...

- No puedo creer que vendrían y no me dijeron nada –Mencionaba Marin notando a sus amigas usando atuendos muy llamativos.

- Si bueno... yo no soy fan de esto, pero... Izuku dijo que vendría contigo y pensamos que quizás te sentirías más cómoda si venías en un gran grupo –Mencionó Chizuru, la cual estaba sonrojada y cubriéndose el cuerpo ya que su atuendo parecía ser una piel sobre otra piel, mientras representaba a una version propia de Zero Suit Samus, con peluca rubia incluida.

- Shouko quería venir y experimentar lo de hacer cosplay –Comentó Nagatoro, la cual parecía que estaba muy bien caracterizada, Izuku pensaba que era una especie de demonio con esos cuernos en la cabeza y esos collares con pinchos en su cuello y muñecas, aunque muchos dirían que le faltaba algo de... ¨personalidad¨ mientras Komi mostraba una hoja.

[ Hayase es Bowsette ]

Shouko actualmente estaba usando un atuendo bastante fiel a la princesa Zelda, llevaba un adorno dorado en el cabello, un vestido que parecía haber sido sacado del videojuego, llevaba unos guantes de seda que llegaban hasta sus codos y usaba unas botas cáfes por debajo del vestido.

[ Esta es mi primera vez usando algo como esto ]

- Yo vine acompañando a mi hermana, pero no quise verme muy vistosa –Comentó Miku que abrazaba un pequeño pollo naranja de felpa, mientras llevaba una bandana roja en el cabello, una camisa roja y unos shorts azules junto a un par de tenis deportivos.

- Yo le recomendé vestirse de May de pokémon, ¿verdad que se ve linda? -Preguntó la Siegward de catarina abrazando a su hermana que se iraba algo apenada.

- ¿Qué hay de ti senpai? –Preguntó Marin, observando a la peliblanca del grupo.

- Mi hermana me escondió todas mis cosas mágicas, me dijo que debía socializar más y me dio esta ropa –Comentó la chica de la magia con una voz algo apagada, mientras que la peliblanca, era una calca de 2B, parecía como si el personaje hubiera sido basado en ella.

En ese momento la plática se vio interrumpida por una música que se escuchaba de fondo, al parecer habría un evento nuevo, fue entonces que una cortina de humo verde se hizo presente y entonces...

- ¡EL NINJA VERDE ESTA AQUÍ MIS QUERIDOS ADMIRADORES! –Exclamó el ninja verde falso, el cual parecía ser un invitado especial al evento.

Esta historia continuara...