My Blood

Toda la tercera generación quedó pasmada en su lugar, sobre todo Scorpius Malfoy. " ¿Cómo pude ser tan confiado? -pensó. Su madre se lo había advertido.

Inició del Flashback

Scorpius, hay una sola cosa que no puedes olvidar—Dijo la castaña mientras arreglaba la ya perfecta corbata de su hijo—. Albus Dumbledore puede ser un Gryffindor, pero vio demasiada sangre correr frente a sus ojos y fue traicionado por el amor de su vida, por lo que tuvo que tomar decisiones difíciles. Así que dime hijo, ¿De qué sería capaz la persona que encarceló a la persona que más amaba, para que muriera en soledad; dio la espalda a su hermano y permitió que su hermana menor muriera por su culpa?

Madre, pero todos sabemos que las únicas decisiones difíciles que Dumbledore tomó, fueron las que mejor encajaron con su propio plan; que Grindelwald era un mago oscuro, asesino de masas, con intenciones de llevarnos a una guerra contra los muggles; además, no se conoce la verdadera causa de muerte de Ariana Dumbledore y conocemos a Aberforth, es un gruñón, él fue quién se alejó de su hermano—Hermione sonrió, apoyando sus manos sobre los hombros de su hijo.

¿Ves el poder de las palabras? —Los ojos del rubio se abrieron con asombro, tras comprender lo que realmente quería decir su madre —Creí que, tras dirigir y orquestar una guerra, ya lo sabrías.

Pero entonces… ¿Cuál es la verdad, madre?

No existe tal cosa como la verdad absoluta hijo, inclusive para dos personas que viven una misma experiencia, es distinto. Lo único que nos queda es hacer lo que dicte nuestro corazón—Dijo apoyando su palma sobre el pecho del rubio, con la mirada perdida—y rogar que las consecuencias de nuestras decisiones nos permitan continuar.

No entiendo, dijiste que no estabas arrepentida de lo que hiciste—Su madre lo miró con determinación.

Y no lo hago. Pero tienes que entender que para Harry fui una traidora, mientras que, para tu padre y nuestra familia, fui quien los salvó. ¿Acaso sabes lo que Harry Potter me pidió, el día que vino a esta casa a reclamarme por adoptar a Severus? —Scorpius negó con la cabeza—Me dijo que debía detenerte, evitar que continúes haciendo lo que hiciste.

¿Por qué no lo hiciste entonces, madre?

Si tienes que preguntar, no has entendido nada Scorpius—Dijo con una mueca de dolor y se alejó de su hijo, al mismo tiempo que su padre entraba al cuarto.

Tu madre no lo hizo porque, además de amarte, sabía lo que era correcto —Dijo Draco Malfoy, mientras se apoyaba en la puerta de la habitación y cruzaba los brazos sobre su pecho—. Te criamos bien Scorpius, jamás pelearías por una causa que no fuera justa.

Y todavía si no, nunca levantaríamos nuestras varitas contra ti o tus hermanos, ni contra cualquier miembro de esta familia.

Ya no estoy tan seguro de que haya sido lo correcto

Y eso es lo que te diferencia de Grindelwald, Voldemort y hasta de Albus Dumbledore. Tú, hijo mío—Gris se conectó con gris—, aunque sabes que el mundo mágico está mejor de lo que nunca ha estado y cuentas con el poder con el que otros magos sólo pudieron soñar, lloras las pérdidas de los inocentes, no las justificas.

Y arriesgarás tu propia existencia, junto a la de todos los que amas, por intentar enmendar ese error que no fue plenamente tuyo, porque sí hubiéramos hecho las cosas diferentes, tal vez jamás se hubieran visto involucrados en otra guerra—Dijo con pena su madre y su padre rápidamente la envolvió en un abrazo.

Cada uno hace lo que cree correcto, es lo que tienes que recordar cuando vayas allá.

Cómo dijo Canuto—Secundó su madre—"El mundo no se divide en gente buena y mala; todos tenemos luz y oscuridad dentro de nosotros, lo que importa es la parte a la que obedecemos, eso es lo que realmente somos". No eres malo y nunca lo fuiste Scorpius, ellos no lograron verlo porque estaban acostumbrados a siempre culpar a otros de sus desgracias.

Y eso es lo que querrán demostrar. Manipularán las cosas para que tú seas el siguiente mago oscuro a derrotar

Pero yo también los manipularé. Dudo que Sirius o los Lupin se unan a nosotros sí saben toda la verdad.

Técnicamente no lo harás—Dijo Hermione con una sonrisa que hacía honor a su nuevo apellido—, porque tú no le ocultarás nada, ni modificarás los hechos. Dirás lo que verdaderamente sucedió y créeme, será suficiente. El peor error de la Orden fue presentarse como una entidad transparente, seres de luz que velaban por los intereses de todos, lo que nunca fueron y no existe peor cosa que la decepción. Eso quiero que entiendas Scorpius, el poder de las palabras, si eres inteligente harás que sus propias palabras sean su condena, pero no te confíes, porque si existe un maestro en ello, es Albus Dumbledore, e intentará usar cualquier cosa que digas o hagas para poner a todos en tu contra.

¿Pero si la verdad no alcanza para salvar a todos?

Aunque eres el que más se parece a tu madre, no eres solamente un Granger hijo, también eres un Malfoy y nosotros siempre obtenemos lo que queremos. Tú no te venderás como un ser de luz, de hecho, jamás te verán como uno dado tu apellido y porque eres un Slytherin, así que, si eso ocurre, solamente sé lo que esperan que seas.

Pero prométeme una cosa hijo—dijo su madre mientras acariciaba su mejilla con ternura—. Jamás permitas que te avergüence quién eres o que lo usen en tu contra. Jamás dejes que usen a tu familia en tu contra, porque si logran hacer eso…ya nada tendrá sentido

Fin del Flashback

—Maldición—escuchó a sus hermanos decir, al mismo tiempo que vieron como varios hechizos, desde la mesa de los leones, venían a su dirección.

Protego—Gritó, para conmoción de todos, su padre adolescente

—Con razón el futuro es una mierda—gritó Ronald Weasley—, si él hijo de esa escoria consiguió el poder—Diffindo—Gritó alertando a todos.

En ese instante todas las serpientes desenfundaron sus varitas en defensa del futuro hijo de su príncipe; Draco, que ya estaba cerca de su hijo, lo empujo detrás de él, al mismo tiempo que Lucius lanzaba una maldición para bloquear y aturdir a Ron, lo que causó que todos los leones se pusieran en alerta y Ginny corriera a ayudar a su hermano.

Teddy, Victoire, Alex y Pandora, inmovilizaron a las águilas, además de desarmar a Luna, Neville, Viktor y Hermione, quienes protestaron a viva voz. Los encapuchados que se encontraban detrás los profesores, presionaron aún más sus varitas contra las gargantas de los mayores.

Los Tonks, junto Xenophilius, las Delacour, Sirius y Remus, desarmaron como pudieron a los leones, desviando sus hechizos y enviando hechizos inofensivos.

Algunos Hufflepuff intentaron ayudar a los leones, pero se vieron detenidos por los Slytherin, quienes fueron los únicos que no fueron incapacitados o detenidos por la tercera generación.

— ¡Detenlos! —Gritó Harry Potter a Scorpius, mientras lanzaba un expelliarmus a un encapuchado.

Eso despertó al rubio, quien rápidamente desvió hechizos sin varita, pero cuando iba a avanzar, su paso se vio bloqueado por Bill, quién salió volando gracias a un hechizo de un encapuchado. Cuando el rubio miró por sobre su hombro, su tío materno le sonreía.

—Eres familia, siempre te protegeré. Ahora hazlo pagar—Scorpius le devolvió la sonrisa, antes de que una nube azul oscura lo envolviera y volara hasta estar frente a Dumbledore.

Muchos detuvieron sus duelos al notar la variante del hechizo "vuelo no humano" que, en ese tiempo, únicamente era utilizado por Voldemort y Snape.

—¿Esto es lo que querías provocar? —Gruñó, levantando su mano y colocándola en el pecho del anciano mago— ¡Alto o lo mato ahora mismo! —La conmoción se detuvo por un segundo y toda la segunda generación se vio desarmada, junto a los tres Weasley del futuro.

—No es a eso a lo que me refería—Negó con la cabeza Harry—. Puede que seas un Malfoy, pero no eres un asesino. Ya déjalo y al drama—La ironía de esas palabras, era demasiada para la tercera generación.

—Usted no sabe nada acerca de mí o mi familia, Señor Potter—Espetó—. Pero está en lo cierto, no pienso matarlo…Accio varita de Sauco—Y un jadeo colectivo se hizo presente cuando la varita de Albus Dumbledore salió despedida de su túnica y aterrizó en la mano del encapuchado, quien soltó un suspiro satisfactorio cuando la magia de la varita recorrió su cuerpo—. Ya me sentía tan extraño sin ella

— Pero ¿cómo?

—Le advertí, Director, que investigué más sobre las reliquias. Está varita es tan mía como suya, pero siempre respetará al mago con mayor poder y dado que está muriendo, es más que claro quien tiene su lealtad.

—Tuviste que viajar con la tuya

—No necesariamente, dado que fue brindada por la muerte y ella no se ve condicionada por el tiempo. La varita no viajó conmigo, pero mi madre desconfiaba que también me reconocería como su dueño en este tiempo.

—Ella no debería…—pero con un movimiento de muñeca de Scorpius, se vio silenciado.

—Andy, las esposas—la peliblanca se adelantó y con un movimiento de varita las mismas esposas que portaba Louis, aparecieron alrededor de las muñecas del Director.

—Cómo puedes permitir esto, Hermione—Tras las palabras de Harry, todos miraron a la castaña, al reconocer que la encapuchada que se adelantó y esposó al gran Albus Dumbledore, era su hija, pero para los de la tercera generación, fue como tener un déjà vu.

—No sé si puedes verlo, Harry, pero estoy desarmada e inmovilizada igual que tú—Espetó la castaña, retorciéndose en su lugar detrás de Harry—Además ¿Qué esperabas que hiciera?

—¿Así que no te importa que tu hija resultó ser la zorra de esa escoria?

Ambos encapuchados se estremecieron con un "iugh" susurrado que nadie notó o escuchó, dado que la atención del comedor estaba en cómo Alex se había acercado a Ron con su varita en alto.

—Alex—llamó Teddy—. Déjalo—dijo acercándose a él para detenerlo—, no puedes hechizarlo.

—Tienes razón, osito—Se burló algo más tranquilo, bajando su varita; por lo que Teddy, avergonzado por el apodo, lo soltó—. Es mejor a la forma muggle—Dijo lanzándole un golpe en la nariz al pelirrojo, rompiéndosela. Un "uhh" colectivo se escuchó en el comedor, tras el sonido del hueso partiéndose.

—Creo que eso se lo enseño Granger—Bromeó entre carcajadas Blaise, haciendo reír a las serpientes, al mismo tiempo que Draco levantaba su mano para cubrir su nariz, por reflejo, y Hermione se sonrojaba.

—Maldito bastardo—maldijo Ron, escupiendo la sangre que se acumuló en su boca, e iba a lanzarse sobre Alex, sino fuera por los hechizos que lo mantenían inmovilizado.

—Ahora—llamó la atención Scor desde la tarima y con un movimiento de varita liberó a su madre—. Esto puede hacerse de dos maneras: —Su voz llena de advertencia, rozando la mortalidad, mientras jugaba con su varita entre los dedos—Toman asiento y seguimos como lo planeamos, sin sus varitas por supuesto hasta que demuestren que no harán nada estúpido, o son olvidados y devueltos a sus salas comunes o viviendas, según corresponda.

—No pienses que dejaremos que nos sigan manipulando y mintiendo a tu antojo—Las palabras de Percy hicieron que Scorpius soltará una carcajada.

—Señor Weasley, el Director Dumbledore tiene razón, soy un Malfoy—La familia de rubios quedo pasmada, dado que realmente no se esperaban que un miembro de su familia fuera el cabecilla del grupo. Habían pensado que se trataba un intento desesperado de Dumbledore para desviar la atención—, de la misma forma que nada de lo que se dijo en las presentaciones fue mentira.

++Mi apellido y familia, no cambian los pecados que su familia cometió o los del Director, de hecho fue una medida desesperada de su parte, el revelar mi ascendencia, para que no dijera que hubo un tiempo en el que él estuvo obsesionado con las Reliquias de la muerte y las buscaba con intenciones de convertirse en el maestro de la muerte, con ayuda de Grindelwald, quién era su amante, o de que las anteriores palabras de mi madrina, no fueron calumnias, sino que Albus Dumbledore realmente cazó y exterminó a una familia dado quienes eran o bueno eso creyó—Finalizó mirando al anciano con una sonrisa de superioridad, que fue replicada por dos encapuchados—. Supongo que esperaba que me avergonzará de mi familia o de quien era o al menos que lo considerara una desventaja para mis planes, pero se equivocó. La familia no es una debilidad, es poder. No existe mayor orgullo para mí que mi familia y al parecer se olvidó quien es mi madre, ella me advirtió de esto, pero supongo que lo subestime. No volverá a suceder—Sentenció y miró de nuevo al frente—. Aunque ya saben quién es mi padre, aún no es tiempo de que me presente, lo mismo ocurre con Andy, así que decidan ¿Se quedan o se van?

Tras unos leves alborotos y murmullos, todos notaron como, tras ser despetrificados, los de ese tiempo volvían a sus asientos.

—Fue lo inteligente… aunque una cosa más—miró a Ron—. La vuelve a insultar—Dijo señalando con la cabeza a su hermana— y no me importará sus hijos o su importancia en el futuro o en esta guerra, me rogará que lo maté—Sentenció— ¿Fui claro? —Ron no respondió, así que Scorpius miró a una encapuchada, quién asintió enérgicamente, antes de volver a ver a Alice— ¿Puedes continuar?

—Yo…emmm...Creo que—comenzó a tartamudear nerviosa, por lo que dos encapuchados que tenían a Sprout y McGonagall inmovilizadas, hablaron al unísono.

—Nosotros lo haremos—Los hermanos Malfoy los miraron

—Sin ofender clones, pero esto es serio

—Nos subestimas, Steph. Puede que nos guste divertirnos y hacer buenas bromas—Comenzó uno

—Pero también somos hijos de nuestro padre—Continuó el otro

—Le demostraremos porque él nos ofreció para que los ayudemos a expandirnos y dirigir—Finalizaron juntos, enfundando sus varitas y caminando hasta estar frente a su líder, en un movimiento coordinado. Al mismo tiempo que otros dos encapuchados tomaban su lugar tras las profesoras.

—Drogón, juramento de merodeador, sabemos lo que hacemos. Déjanos hacer esto.

—Además, nuestros padres estarán más que felices al saber que terminaron juntos—Terminó su hermano con un encogimiento de hombros.

—Bien—Dijo derrotado el rubio—, pero dejen su mente abierta, quiero poder comunicarme en caso de que se vayan por las ramas.

—Comprendido capitán—dijeron burlones, haciendo un firme saludo militar, que provocó que los hermanos Malfoy rodaran los ojos, antes de dirigirse a sus asientos.

—Bueno pasado, no estaba en nuestros planes ser los siguientes, pero dado que nuestra princesa aquí ya tuvo mucho con lo que lidiar, la ayudaremos

—Primero terminaremos de explicar algunas cosas y después nos presentaremos.

—Merlín, hacen eso que hacen los gemelos Weasley… es aterrador—Los mencionados soltaron una carcajada y el resto del comedor reprimió un escalofrío al pensar en un nuevo par de gemelos bromistas en el futuro.

—Será porque somos gemelos—Soltaron irónicos.

—Bueno, para que ya no desconfíen que los estamos manipulando o así, haremos preguntas a su amado Director y él responderá sí o no. ¿Andy puedes sacarles las esposas? No quiero que piensen que lo estamos controlando

—No creo que…

—Confía en nosotros—dijeron al unísono, por lo que peliblanca soltó un suspiró y retiró las esposas con un chasquido.

—Gracias, Señorita Granger—dijo Dumbledore, mientras se frotaba las muñecas y miraba a los encapuchados por sobre sus lentes. Sin embargo, de un momento a otro, tenía una mano presionando cada hombro con fuerza y dos varitas en su garganta.

—Cómo dije Director, no pienso subestimarlo dos veces—Susurró Scorpius, mientras tenía una conversación silenciosa con su hermano, frente a él.

—No hace falta la violencia, Señor Malfoy

—Eso lo decidiremos nosotros—Secundo Steph

—Bien, terminemos con esto. Lo haremos como un leve juicio, el comedor será el jurado—Comenzó un gemelo corriéndose a un lado y con un movimiento de varita, Dumbledore y sus escoltas se encontraron en medio de la tarima, donde todo el comedor podía verlo —y nosotros seremos la fiscalía. Director Dumbledore ¿Es verdad que fue maldecido al colocarse un anillo que resultaba ser un Horrocrux, lo que lo dejó con menos de un año de vida, y que posteriormente, solicitó... más bien, obligó, al profesor Snape a que fuera él quien lo asesinara en el momento que usted considerara oportuno? —Todo el comedor estaba al borde de sus asientos, con los ojos bien abiertos.

—Sí, pero…

— ¿Sí o no, Director? Esto será igual a los juicios que sufrieron mi padre y su familia después de la guerra.

—No, hermano, somos tan bondadosos que no lo tenemos encadenado con grilletes que le infligen dolor ni extremadamente drogado con veritaserum, hasta el punto de que ni siquiera pueda saber dónde está.

—Tienes razón hermano, así que continuemos. ¡Ah casi lo olvido! Un horrocrux, para quien no lo sepa, es un objeto oscuro, donde un mago guarda una parte de su alma, lo que lo hace inmortal. Voldemort tiene siete y es por eso que pudo volver después de su caída a manos de los Potter—Miró a Dumbledore—. Usted siempre lo supo ¿Es por eso que mantuvo a Snape cerca, por más que todos creían que Voldemort estaba muerto y contrató a Slughorn, ya que necesitaba su recuerdo de cuando hablo sobre ellos con Tom Riddle?

—Si—Espetó, sin intenciones de agregar una explicación, ya que estaba claro que no se lo permitirían.

—Albus—Dijo con incredulidad el profesor de pociones.

—Lo siento Horace, pero no tenía conocimiento acerca de cuántos había hecho. Necesitaba saber con precisión lo que sabía y cuando comenzó a hacerlos. Ahora que lo sé, podremos detenerlo más rápido.

—Cómo si usted fuera a recordar— Se burló uno de los gemelos

—Mejor continuemos ¿Fue por ello que obligó a Harry Potter a que se ganara la confianza del profesor y le robase el recuerdo? —Continúo el otro gemelo.

—Si—Un jadeo colectivo se escuchó y Harry cerró los ojos con fuerza, por unos momentos.

—El profesor le dio recuerdos alterados. No existía otra forma de obtenerlos y él siempre tuvo una obsesión con coleccionar personas…—Se movió incomodó en su lugar—famosas—Intentó justificar "El elegido"

—Al parecer, nunca hay otra forma con Albus—para sorpresa de todos fue Horace quien hablo, lleno de dolor— y no "colecciono" personas famosas, como usted dice, Señor Potter. Cuando descubro potencial en un alumno, intento facilitar conexiones, porque todos sabemos que eso es lo que realmente hace funcionar al mundo mágico. Pero para ello, debo relacionarme con ciertas personas que no resultan del todo de mi agrado, para que las verdaderas promesas sean descubiertas. Si sólo me importará la fama ¿por qué invitaría a su madre a ser parte de mi club, en una época donde la ideología sangre pura estaba en su auge, y rechazaría al Señor Nott tras su padre ser reconocido públicamente como un mortifago?

—Yo…yo…creí que…

—No se preocupe, Señor Potter. Se de primera mano lo que las palabras de Albus pueden causar—Pasó su mirada de su alumno a su empleador—. Yo no quería volver aquí, Albus. La culpa por haber sido manipulado por Tom, hasta hoy me persigue.

—Ayudarnos a detenerlo, es tu mejor forma de enmendar ese error, amigo mío

—Siempre se trata de enmendar culpas con usted ¿no es así profesor? —El anciano miró a uno de los encapuchados algo desconcertado— ¿Fue realmente por los horrocruxes que busco el recuerdo o fue para confirmar sus sospechas sobre la piedra que poseía el anillo Gaunt? A pesar de los años, la culpa por la muerte de su hermana lo carcome por dentro, por lo que nunca desistió verdaderamente en la búsqueda de la piedra de la resurrección. Necesitaba saber quién lanzó el hechizo que la mató, si usted o Grindelwald. Fue por eso que se puso el anillo, para hablar con ella…con Ariana ¿no?

El silencio en el comedor, era únicamente interrumpido por los rápidos latidos de Albus Dumbledore y el respirar de los presentes. Pocos sabían que el director tenía familia y mucho menos que estaba relacionado con Grindelwald o que se había enfrentado a él, antes de 1945. Para la mayoría, el segundo, solamente fue un mago oscuro que fue derrotado por el legendario Albus Dumbledore. Era más, la mayoría creyó que las palabras dichas por el hijo de Malfoy, únicamente fueron por malicia.

—No…—Logró decir

— ¿No? ¿Está seguro?

—No es como lo quieren hacer ver. Iba a destruir el anillo, pero la piedra es una reliquia perdida que nos daría una ventaja que Tom desconocía.

— ¿Y Ariana no tenía nada que ver?

—Solamente quería verla y disculparme—dijo derrotado, tras unos momentos, al notar que los chicos no dejarían el tema y habían captado la atención de todo el comedor.

—Sacar el mayor provecho de una situación, muy Slytherin de su parte ¿no lo cree? —El anciano fulminó con la mirada a los encapuchados—. Pero entonces dígame, si usted sabía que iba a morir y que a uno de sus alumnos se le había encomendado la misión de matarlo ¿Por qué obligar al profesor Snape a matarlo y que todos lo tilden de traidor, en vez de hablar con los demás miembros de la Orden o con su alumno y ofrecerle ayuda?

—Severus estaría a salvo en los juicios, cuando mostrará los recuerdos de nuestra conversación, y no podía acercarme al joven, después de todo hay otro espía en la Orden. No sabía en quien podía confiar.

—Ya volveremos a hablar del espía, pero responda algo primero ¿Qué hubiera sucedido si Snape moría en el fuego cruzado, a manos de alguien de la Orden que buscaba vengarlo? —El silencio fue la respuesta—. Vaya, algo realmente considerado de su parte… y dado que mencionó a un espía, déjeme aclararlo para el resto —Se volteó hacia el comedor—. Albus Dumbledore no supo de este otro espía, hasta que nosotros llegamos, de hecho, en su línea de tiempo lo sospechaba, pero no logra confirmarlo hasta momentos antes de su muerte, por lo que no llega a hacer nada al respecto. El hecho de que sepamos ciertos secretos de él, fue lo que le hizo darse cuenta de que existía otro espía además de Severus Snape.

—Así que con lo del espía fuera ¿por qué no intenta de nuevo con el motivo por el cual no se acercó a su alumno, al que le habían ordenado matarlo? —Cuestionó el otro gemelo

—Cada uno toma sus decisiones. Las suyas fueron malas, como fueron las mías a su edad y las Severus…hasta las del joven Regulus, que era parte de su familia, por lo que sabía que nuevamente los pecados del padre serian pagados por el hijo.

—¡Maldito bastardo! —Siseó Lucius Malfoy y dado el silencio del comedor, todos pudieron escucharlo— Lo condenas por su familia, como lo hiciste con Regulus y quisiste hacerlo con mi nieto, pero profesas que los sangre pura tienen que aceptar a los nacidos de muggles porque nadie elige quienes son sus padres ¿Por eso también dejaste a Black pudrirse todos esos años en Azkaban? ¿Por qué después de todo, era un Black? —La indignación e ira se reflejaron en el rostro de la mayoría, con excepción de los leones—Después esos prejuicios serán aplicados a los Slytherin—Soltó una risa sin gracia—. Ahora más que nunca entiendo los motivos para la tercera guerra y me alegró que todas tus creencias estén muertas, Dumbledore.

—Claro, porque tu familia está intoxicando el Ministerio en el futuro—Soltó con veneno Ron

—No, Señor Weasley y déjeme explicarle en caso de que no lo haya entendido. Primero le recuerdo que el Ministerio ya no existe en el futuro y segundo… la razón por la cual ellos están aquí—Señaló a los encapuchados—, es para evitar la tercera guerra mágica y si lo hacen, tal vez mi familia jamás esté en el poder. Mi nieto los trajo aquí con motivos altruistas, extraño en un Malfoy debo agregar, porque si esto funciona, puede que cuando vuelvan…todo el futuro que conocen, hasta ellos mismos, ya no existan.

—No pueden engañarnos. Por algo nos han estado manipulando ¡Nada bueno puede salir de su familia, nada! Él—dijo señalando a Scor—, es tan malvado como tú y la escoria que tienen como familia—Para desconcierto de todos, fue Sirius quien lanzó un hechizo punzante a Ron.

—Recuerda que también estás hablando de mi familia, Ron. Aprende de una vez, porque estoy seguro que esos pensamientos fueron los que hicieron que tu familia se destruyera, llevándonos a esa guerra. —Se levantó y miró al comedor—. El mundo no se divide en gente buena y mortífagos; todos tenemos luz y oscuridad dentro de nosotros, lo que importa es la parte a la que obedecemos, eso es lo que realmente somos—Eso dibujó una sonrisa de orgullo en la tercera generación.

—Es exactamente lo que nos enseñaste, Canuto—Dijo Scor—y lo que mi madre me recordó antes de hacer este viaje. Mi familia sabía que todos me verían como el siguiente mago oscuro a derrotar, por mi apellido y mi casa, en vez de ver que fui yo quién lo arriesgo todo, planeado este viaje, en un intento de salvar las vidas inocentes que se perdieron o que a otros no les importó sacrificar en nombre del bien mayor.

Un silencio espeso cayó sobre el gran comedor, todos estaban perdidos en sus pensamientos, de forma que varios de la tercera generación aprovecharon para inspeccionar en las mentes de los presentes, encontrando indignación, tanto por sus acciones o por cómo habían creído en Dumbledore sin miramientos, como también pensamientos de todo lo opuesto, dado que su indignación era al ver como varios creían en las palabras de Scorpius.

No obstante, un pensamiento llamó la atención de la más pequeña de los Malfoy ¿Realmente ella está tan equivocada al creer en ellos? Retumbaba en la mente de Bill Weasley, mientras miraba a Hermione a lo lejos, por lo que la castaña se guardó la duda para investigarla más tarde.

—Creo que es todo, el resto pueden explicarlo los demás—el gemelo buscó a su líder con la mirada.

—Sólo me gustaría aclarar una cosa, Albus Dumbledore alardea y se justifica diciendo que tomó las medidas que nadie estuvo dispuesto a tomar para garantizar la victoria en esta guerra, pero él no es esa persona. Ese "espía", a quien él acusa de destruir el mundo mágico, es quien, a costa de su propia felicidad, está intentando arreglar lo que otros destruyeron. Así que, si realmente quieres un cambio, o simplemente quieres que alguien por primera vez te diga la cruda verdad sobre las cosas, ten la mente abierta y espera, el Doud Händler llegará a ti—Luna no pudo evitar sonreír ante el nombre, ya que era otra cosa que Hermione compartía con su madre biológica sin saberlo.

Sin embargo, todos los mayores se tensaron. Lucius buscó la mirada de su esposa, quién estaba pasmada, y luego la de Venus, quién cerró sus puños con tanta fuerza, que sus uñas marcaron media lunas en sus palmas. Regulus, al notarlo, tomó su mano con preocupación.

—¿Qué ocurre? —Le susurró, causando los Malfoy la miraran, pero todos voltearon su atención hacía Dumbledore, cuando este hablo:

—¿Qué acabas de decir? —Scorpius ladeó la cabeza, al notar lo pálido que se encontraba en anciano mago.

—Que si quieren saber…

—No—Lo cortó el director—¿Cómo acabas de llamar al espía? —El rubio recorrió el comedor con la mirada y notó como las comadrejas buscaban respuestas con su madre, quién estaba preocupantemente blanca, mientras negaba con la cabeza y se sujetaba el pecho.

Doud Händler—Hermione frunció el ceño y buscó a Draco con la mirada, quién se mostraba tan desconcertado como ella.

—Lo hizo de nuevo—Todos miraron a Sirius, quién tenía los ojos cerrados. Remus a su lado respiraba con dificultad, mientras Andrómeda era abrazada por su esposo.

—¿Alguien puede explicar? ¿Por qué todos le temen a un nombre? Es sólo eso, un nombre…—Intervino Hermione, pero quienes la conocían podían notar la preocupación bajo su mascara.

—Durante la primera guerra, Señorita Granger—Comenzó Snape—se susurraba sobre un mago sanguinario del cual todos huían, porque nadie que lo veía lograba salir con vida; el Señor Tenebroso sólo lo enviaba a las escaramuzas más importantes, por eso también lo apodan el "ángel de la muerte". Decían que caminaba sobre fuego—Todos los jóvenes fruncieron el ceño—. Se cree que era extranjero, porque de la misma forma que un día apareció, desapareció…

—Otros creen que Ya-sabes-quién lo asesinó cuando intentó quitarle el poder—Aportó Molly Weasley algo más tranquila, pero aún pálida, desde los brazos de su esposo—. Aunque otros creemos que son sólo rumores exagerados. Después de todo, no dejaba a nadie con vida.

—¿Entonces cómo saben su historia? —Quiso saber la castaña

—La historia fue difundida por los mismos mortifagos. Sobre todos por aquellos que se encontraban indignados ante la idea de no sólo tener que obedecer a su señor, sino también a este misterioso mago, que simple vista se podía notar que era menor que la mayoría—Explicó Severus—. El Señor Tenebroso no sólo lo había entrenado personalmente, sino que lo respetaba, era su mano derecha. Su admiración superaba la que tiene actualmente por Bellatrix

—De hecho, mi hermana la odiaba—Agregó Narcissa, con la mirada puesta en la encapuchada a su lado—. Odiaba no ser la preferida del Señor Oscuro y tener que obedecer a otro que no fuera él…No tenía idea de que había vuelto a ocupar el puesto…ni cuando ella desapareció, llamó a Bella así…ella simplemente es su lugarteniente, nada más…—Todos pudieron notar que Narcissa no se justificaba frente al comedor, sino con la encapuchada, que era consolada por su acompañante, quién dibujaba círculos tranquilizadores en el dorso de su mano.

—Cissa… ¿lo conocías? Hablas de él como si fuera una mujer—Sirius miró a su prima con el ceño fruncido.

—Tú también la conocías, Sirius—Él no pudo ver la mirada condescendiente que Venus le regalo, pero su tonó fue suficiente.

Tanto Narcissa como Lucius cerraron los ojos al confirmar sus sospechas. Durante la primera guerra, ninguno de los dos había logrado confirmarlo, pero siempre habían albergado fuertes sospechas al respecto. Esto se intensificaba cada vez que la chica, a quien consideraban como a una hermana pequeña, desaparecía durante las vacaciones, solo para regresar cada vez más dañada que cuando se fue.

Por su parte, Sirius, había sobrevivido a un encuentro con el misterioso mago. Éste, en vez de matarlo, lo había dejado inconsciente. Cuando Sirius despertó, estaba rodeado de cadáveres, por lo que juro que encontraría al mago y vengaría a sus compañeros de batalla, pero una nota que le fue entregada, días después de haber comenzado su cacería, lo detuvo.

"Exijo el pago por la deuda de vida. Dejarás de buscar y juraras por tu magia que nunca te enfrentaras al Doud Händler. Hazlo y tú deuda será saldada, sino me veré obligado a reclamarla. R.A.B"

En vez de escribir de vuelta o reclamarle a su hermano por no haberle dado señales de vida por dos años, Sirius simplemente lo hizo, maldiciendo el cómo Regulus se creía lo suficientemente astuto como para reclamarle una deuda de vida, que en ese momento Sirius no tenía la más pálida idea.

Nunca más se cuestionó algo con respecto a su hermano, no hasta que vio la fecha de su muerte en el tapiz de Grimmauld Place.

—No puede ser…—Soltó cuando todas las piezas se unieron en su lugar. Miró a la castaña a su lado y por primera vez la vio, como si una niebla que siempre la cubría, fuera removida.

Sus rasgos, su cabello indomable, que ahora Sirius estaba seguro que si definía sus rizos, Hermione se parecería a Bella de joven; la ambición por el conocimiento; su manera de proteger a los que ama a costa de su propia felicidad y la astucia al hacerlo…

—¿Sirius? —Hermione lo llamó, pero él no paraba de analizarla de arriba a abajo.

" Cuando me salvo…la forma en la que me cuidó, creía que era por Lily…pero fue igual a ella cuando éramos pequeños, cuando estábamos en la escuela, antes de que tomará esa horrenda marca y se acusará de que por su culpa Regulus debería tomarla" Sirius extendió su mano y colocó un rizo tras la oreja de Hermione " ¿Pero si no mentía, si fue verdad? ¿y si ella es la melliza? Puedo verla con la tez pálida, ojos grises y cabello negro…aunque si tuviera el rubio de su madre…sería…"

Sirius buscó con la mirada a Venus y luego nuevamente miró a Hermione.

Venus miró a su sobrino y luego a los Malfoy, quienes suspiraron con nostalgia antes de mirar a su hijo, quien le devolvió una sonrisa triste, pero firme.

—No puede ser—Al notar que Sirius había comenzado a llamar demasiado la atención y sobre todo la de Dumbledore, Scorpius asintió hacia los encapuchados y con un movimiento de la varita de Sauco, Dumbledore fue trasladado a su anterior en su lugar.

—Andy…—llamó y su melliza colocó nuevamente las esposas al director.

—Clones…—Los encapuchados de la tarima miraron a su líder y luego a Sirius, que seguía mirando a Hermione con incredulidad.

Entendiendo la orden, uno gritó, llamando la atención de todos:

—Bien…ahora si nos presentaremos

—Así sacamos esta horrible sensación de funeral—Uno simuló un escalofrío y ambas capas cayeron al suelo, cuando dos Alicantos dorados salieron volando.

Todos quedaron maravillados y por unos momentos olvidaron todo lo que había pasado hacía unos minutos, mientras admiraban la belleza de esas dos aves, idénticas, que sobrevolaban el comedor. La verdad era que únicamente Rolf Scamander y los Lovegood, fueron capaces de saber de qué especie se trataba.

—Alicantos…—Dijo casi sin aliento Scamander, cuando las aves se posaron sobre la tarima y dos chicos idénticos ocuparon su lugar.

Ambos tenían el cabello rubio oscuro, ojos verdes claro, piel pálida y un cuerpo esbelto, que era resaltado por sus túnicas a medida, que se ajustaban en los lugares correctos. Eran de un azul noche, pero únicamente los profesores pudieron ver la pareja de liebres, similares a patronus, bailando entre ellas en la espalda de estas. En el frente tenían serpientes ascendiendo en un color bronce bastante llamativo. Su porte era aristocrático y la sonrisa que adornaba sus rostros delineados, rozaba la suficiencia, pero sin ese toque despectivo, demostrando que eran conscientes de su belleza, pero no alardeaban de ella. Después de todo tenían que poseerla, si su forma animaga era un ave de la mitología sudamericana, que sus alas reflejaban al oro mismo.

Ambos portaban anillos con sello en sus anulares derechos, pero el escudo de armas, como el de la mayoría, estaba oculto bajo un hechizo.

—Creo que los matamos, Lyss

—No están acostumbrados a tanta belleza, Lor

—Bueno pasado—dijeron al unísono, cada uno dirigiéndose a un extremo de la tarima—nosotros somos los legendarios e inigualables, gemelos Nott—Terminaron haciendo una reverencia exagerada, como si de una presentación teatral se tratara, al mismo tiempo que todos voltearon a mirar al castaño en la mesa de las serpientes.

—Y antes que todas pregunten o intente saltar sobre nuestro padre—Comenzó Lyss

—Tienen que saber que él ha estado enamorado de nuestra madre desde tu tercer año, así que vayan desistiendo, señoritas.

— Pero ¿cómo? —Dijo Theo con la voz temerosa—el contrato

—Tranquilo papá—Lorcan fue tras su padre y se parándose a su espalda, colocando sus manos sobre los hombros del castaño—, parece que vas a desmayarte—se acercó a su oído—. No nos hagas perder cien galeones ¿Quieres? —Los ojos del castaño se abrieron y golpeó a su hijo en la nuca—Bien, bien—dijo sobándose el golpe—, creo ya está mejor, hermano. —y con una sonrisa volvió a la tarima.

—No diremos quién es nuestra madre hasta el final…. Para evitar problemas, pero respondiendo a mi padre y para los que no sepan, hay un contrato entre la familia Nott y Greengrass, el cual fue roto gracias a los Malfoy, quienes no solamente consiguieron que Lord Greengrass reconozca a George como su heredero, dejando en paz a tía Tori, sino que también rompiera el contrato y ustedes—Señalo a su padre y a Daphne— pudieron casarse con quienes verdaderamente amaban.

De un momento a otro, Draco tenía a dos pares de brazos aplastándolo en un abrazo.

—Gracias, gracias Dragón—repetía Daphne mientras casi le cortaba el aire por su agarre al cuello.

—Gracias, Hermano—Dijo Theo palmeándole la espalda y al separarse miró a los padres de su amigo—. Gracias Señor y Señora Malfoy, no saben lo que significa para nosotros—el platinado únicamente asintió, pero Narcissa se levantó y abrazó a Theo.

—Siempre fuiste como un hijo más para mí, Theo—se separó y lo miró a los ojos—. Tu madre estaría muy orgullosa de ti —Tras otro breve abrazo, para evitar que las lágrimas se derramaran, cada uno volvió a su lugar.

—Bueno mi nombre es Lyssander y llevó el nombre de mi abuelo materno, por eso no lo diré todavía

—Y yo soy el más bello y mayor por unos minutos…Lorcan Theodore, pero es por mi padre, no por el bastardo de mi abuelo—aclaró rápidamente al ver el rostro de su padre—. Tranquilo papá, obtuvo lo que merecía de tu propia mano—El nombrado asintió

—Tenemos 24 años. Cuando fuimos a Hogwarts fui una orgullosa serpiente, como mi padre

—Y yo fui una ingeniosa águila, como mi madre—Ambas mesas aplaudieron con entusiasmo.

—Fuimos golpeadores, por lo que los partidos de Ravenclaw vs Slytherin llegaron a llevarse más atención que el clásico de este tiempo de leones vs serpientes, gracias a nosotros.

—También fuimos bromistas al extremo, por eso nada de prefecto o premio anual. Eso se lo dejamos a nuestra hermanita

—Y tu novia—lo picó su hermano, ganándose un golpe— ¿Qué? Ella no lo dijo, pero tú no deberías mentir… ¿No Alice? —Miró a la mencionada— ¿Acaso te avergüenza de que sepan que estás con mi hermano?

—Lyssander, eso no es asunto tuyo

—Está bien, Lor—lo calmó y miró a su cuñado—. No, sabes bien que amo a tu hermano como a mi propia vida, solamente no quería causarle un ataque al corazón a mi padre, antes de que pueda advertirle de sus payasadas—Puso los ojos en blanco.

En la mesa de las serpientes, Astoria miró a su hijo, quien tenía una mirada llena de sospecha, que era inconsistente con la sonrisa que la acompañaba.

— ¿No te molesta? —él la miró

— ¿Eh? —Astoria señaló la tarima, donde Alice intentaba detener a Neville que intentaba hechizar a Lorcan por haber tocado a su niña—No—soltó divertido—, se aman. Lorcan la trata como la princesa que es, de hecho, la ayudó a superar muchas cosas, por lo que me extrañó y preocupó cuando Alice lo negó.

— ¿Creí que te gustaba? —El pelirrojo negó divertido

—No, es como mi hermana pequeña. Además, lo nuestro no es posible por muchas cosas que pronto se aclararán. ¿Supongo que lo preguntas por lo protector que soy con ella? —La castaña asintió—No la tuvo fácil, al igual que su hermano, se enamoró de la persona incorrecta. Los usaron para dañar a la familia y en el proceso les destrozaron el corazón. Como dije, Lorcan tuvo que ayudarle a superar muchas cosas, pero antes de él, fui yo quien estuvo para ella y hubiera matado al bastardo, sino fuera por mi padrino. Sin embargo, verla tan frágil, rota y si agregamos el perder a Dom, hicieron que me volviera sobreprotector con ella, va con todas las mujeres de la familia si soy sincero—su madre asintió y ambos volvieron la atención a la tarima, donde Lorcan lucía el cabello algo quemado.

—Bueno, espero que cuando mi madre sepa que soy su hijo me vengue…

—Sabes que no lo hará—Se burló su hermano

—¿Padre? —Intentó Lorcan con ojos de cachorrito, pero Theo levantó las manos en señal de rendición.

—Si te defiendo seré un hipócrita, porque haré lo mismo cuando sepa quién se atrevió a tocar y embarazar a mi niña—Finalizó con un tono frívolo, escaneando la mesa de encapuchados y aunque no pudo verlo, cierto rubio trago grueso, ganándose sonrisas burlonas de sus hermanamos.

—Eso madre tampoco lo permitirá, así que tranquilo rubito—Se burló Lyssander—. Bien, por mi parte soy un alma libre muy feliz. Somos animagos cómo pudieron notar y es la misma forma de nuestro patronus.

—Somos Alicantos, aves mitológicas sudamericanas muy extrañas, aunque no estamos muy seguros de porque podemos volar, dado que ellas no vuelan ya que se alimentan de minerales como oro o plata. Supongo que el comer comida normal nos deja volar—Explicó Lorcan, dándose toquecitos en la barbilla con el índice, para después encogerse de hombros.

—En fin, mis padrinos son Draco Malfoy y Hermione Granger—Notaron como Ron iba protestar, por lo que se adelantó—. Antes de que hagan un escándalo, aunque mi padre se lleva bien con mi madrina en este tiempo—Miró a su padre y le guiño un ojo—, mi madrina la eligió mi madre, así que esperen.

—Los míos son Blaise Zabini y Pansy Parkinson—ambos agradecieron a su amigo, junto a Draco— ¿Alguna pregunta, antes de decir quién es nuestra madre? Aunque no fue para nada difícil de adivinar—Nadie dijo nada, por lo que ambos se miraron y sonrieron al igual que los gemelos cuando estaban planeando alguna broma

—Listo hermano

—Como nunca Xeno

—Nuestra madre es la única e inigualable

—Luna Lovegood—Gritaron al unísono y una serpiente, junto a un águila de fuegos artificiales bailaron la una con la otra, hasta unirse, sobre sus cabezas.

—Así que, no eres sólo una maldita traidora, Luna. Te casaste con uno de los peores de ellos—Gritó Ronald

—No eres nadie para hablar comadreja, al menos nuestro padre es un destacado medimago y empresario, que ama a su esposa incondicionalmente. Que es más de lo que se puede decir de un auror de segunda, corrupto y abusivo—Dijo parándose Pandora

Ahora todos pudieron ver que uno de los anillos señoriales de Pandora brillaba, dejando ver el escudo de armas de su familia paterna, el cual era encabezado por un águila, rodeado por dos antorchas encendidas y con cabezas de pequeños leones en el centro, rodeando una franja de pequeños pájaros. Mismo escudo que apareció en los anillos de sus hermanos y en el lado izquierdo de sus túnicas.

—No hables de mi padre, Nott—Gritó una encapuchada.

—No vengas ahora a defenderlo, Weasley. Lo odias tanto como nosotros—Eso hizo que Ron mirara hacia su supuesta hija.

—Te diré lo mismo que le dije a Louis, no es tu historia o ¿acaso eres peor que él?

— ¡Agh! Bien, lo siento, pero no ofendas comparándome con ese—Miró hacia su padre— y tú—lo señaló—¿Vendrás a besar a la chica de quien estas perdidamente enamorado o esperas una invitación?

— ¡Pandora! —Gritaron divertidos y escandalizados sus hermanos, amigos, padrinos y padres.

— ¿Qué? —Dijo inocentemente—A mi madre también le parece lindo mi padre en este momento, solamente que un tonto la estaba confundiendo y ella pensó que dado quien era, jamás mi padre la notaría—dijo con un encogimiento de hombros

—Correcto querido público—Dijo Lyssander

—Ahí ven quien es la que más se parece a nuestra madre, cuando de franqueza se trata—Agregó Lorcan, haciendo reír a todos y sonrojar a la pareja.

—Creo que podría ser bueno un descanso—Interrumpió Dumbledore

—Si—Secundo Scorpius levantándose—, antes que estos nos maten. Continuaremos con una presentación después de la cena—terminó en modo de despido, antes de salir del comedor seguido de sus hermanos, sin esperar siquiera un permiso, lo que claramente molesto a Dumbledore.

La gente había comenzado a desalojar el lugar, cuando la voz de Pandora se escuchó por sobre los pasos y murmullos.

—¡Vamos mamá!

—Pandora, espera un momento. No creo…—pero Luna fue interrumpida.

—Como vuelvas a decir que mi padre no está interesado en ti, te hechizaré—Volteó a ver a su sorprendida madre—. En este momento soy mayor que tú, tengo derecho—continuó con un encogimiento de hombros.

—Madre—Dijeron como uno los gemelos, mientras avanzaban y envolvían en un abrazo aplastante a la rubia

—¡Papá! —Exclamó Pandora, antes de saltar y rodear el cuello de su padre con los brazos—¡Ay, no sabes lo difícil que fue no buscarte! —La mayoría de las personas, al ver la escena, sonrieron antes de continuar su camino.

Por su parte Luna y Theodore compartieron una mirada llena de emoción por sobre los hombros de sus hijos, quienes eran claramente felices. Después de todo el sufrimiento lo habían logrado, tenían una familia llena de amor.

—Creo es hora de que hablen ustedes dos—Dijo Lyssander, mientras alternaba la mirada entre sus padres.

—Pero antes—Continuó Lorcan, compartiendo una mirada cómplice con su hermana.

Al mismo tiempo, ambos empujaron a sus padres, de forma que, si Theo no hubiera sostenido a Luna de la cintura, ambos hubieran terminado en el suelo.

—Ya bésense—ambos adolescentes se sonrojaron—. Vamos, más traumados de lo que ya estamos no podrán dejarnos—Bromeó Pandora—. Siempre nos aseguramos de llamar antes de entrar a casa justamente por eso, así que no se detengan por nosotros, será mucho más casto de lo que pudimos llegar a ver antes.

Ambos adolescentes se sonrojaron aún más, pero cuando Theo miró a Luna con tanta devoción y esperanza, sus hijos sonrieron al reconocer a su padre en el castaño, porque sí, sus futuros padres se amaban de tal forma que no tenían ojos para otra persona que no fuera su pareja. Lo que ahora estaba en evidencia, ya que se habían sumergido en la mirada del otro, en un mundo donde sólo ellos existían.

Después de todo la rubia había sido la bondad que escaseaba en la vida del Slytherin y él fue tanto la lealtad como la espada, que complementaba el valor de Luna.

—¿Puedo? —Preguntó Theo en un susurro, con la vista fija en esos rosados labios que soñaba besar desde hacía años.

Luna simplemente asintió antes de que se unieran en un beso lento, lleno de ternura, cómo el de dos personas que esperaron demasiado tiempo por probar su dulce favorito y ahora se tomaban el tiempo para degustarlo.

Los ojos de los tres hermanos se cristalizaron, mientras se abrazaban y miraban a sus padres, quienes tras separarse aún se mantuvieron unidos por sus frentes, pero con los ojos cerrados, como si tuvieran miedo de que el otro desapareciera al abrirlos.

—Está bien—Dijo Pandora—. Es real, serán felices

Su voz llena de emoción, al igual que la mirada que le devolvieron sus padres, quienes pronto envolvieron a sus tres hijos en un abrazo familiar, lleno de risas que reflejaban la felicidad que sentían al saber que después de todo había valido la pena tanto sufrimiento y lucha.

El comedor estaba prácticamente vació, pero nadie notó que Harry Potter se había quedado en la mesa de los leones con la mirada fija en la escena familiar, ni tampoco como una lágrima rebelde rodó por su mejilla al ver cómo Theodore Nott besaba a Luna en un momento lleno de magia, siendo alabado por sus hijos, que él podía ver que tenían sonrisas de genuina felicidad en sus rostros.

Esa podría haber sido mi familia, solamente espero ser tan feliz como ellos, a mi manera —pensó, antes de levantarse para irse, con las risas de la familia Nott-Lovegood haciendo eco en sus oídos.

Lo peor…era que su anhelo jamás se haría realidad.


A/N: Algunas aclaraciones:

En los libros únicamente Snape y Voldemort podían volar sin escoba. Esa nube negra o de luz que vemos en la película, son efectos visuales agregados de la misma, así que respete eso del libro aquí, pero para que puedan imaginarse, Scor vuela como los mortifagos en las películas.