Capítulo 1

tada no hito


Miraba atravez del cristal, hacia afuera del aula de clases, un chico pelinegro con una flor en la cabeza, inmerso en sus pensamientos, ajeno a lo que ocurría a su alrededor, cuando una oleada de recuerdos lo azotó.

Escena retrospectiva


- Guiu, Guiu - se podía oír las sirenas de policía y las ambulancias, el mismo chico pelinegro está viendo con estupefacción como metían en una patrulla, a una chica cuya ropa la sangre manchaba, ella lo miro a los ojos.

- Hito-kun, ahora si podremos esta juntos por siempre - grita la chica con una mirada enloquecida, antes de que el oficial la obligase a entrar al vehículo.

De repente este recuerdo cesó y por su mente paso otro recuerdo.

El mismo pelinegro de antes, tenía un par de audífonos y se encontraba en una silla frente a un escritorio, vestía un suéter negro y jeans azul oscuro, hacia su tarea lentamente, cuando este comenzó a sollozar recordando lo acontecido.

La puerta de su habitación se abrió dejando ver a un hombre y una mujer.

- Hijo... ¿Estás bien?, tu madre y yo nos enteramos de lo que paso con Netsuno - dijo su padre con preocupación en su voz - Ere... eres muy joven, no tienes la suficiente experiencia, no es tu culpa , no te culpes -

- Hable con mi jefe y me ofrecieron un puesto en Tokio, un nuevo ambiente será bueno para ti - volvió a hablar con su padre, para posteriormente salir de la habitación.

Entonces hablo su madre - H ito-chan... No me gusta verte así, ten - y le extendió un billete de mil yenes - ve a comer helado con tu hermana, Hitomi esta muy aburrida y hace tiempo no salen... -

presente


Tadano suspiro para después pensar - ya a pasado casi de un año desde eso, aun no nos mudamos, mamá y Hitomi no se quieren ir, pero papá ya me dijo que nos iríamos mañana, es muy súbito, creo que no tengo tiempo de despedirme -

- ¡Señor Tadano, preste atención en clase!, ¡¿Cómo se factoriza la ecuación x 5x 6?! - pregunto un señor de la que vestía el uniforme reglamentario para los profesores, sacando al protagonista de sus cavilaciones.

Entonces Hitohito Tadano dijo - lo lamento mucho profesor Aisawua, no se la respuesta - antes de que el maestro respondiera.

Entonces preste atención Tadano - dijo el profesor girándose y caminando a la pizarra antes de comenzar a dictar la clase de nuevo - hoy es el examen de matemáticas, y esto saldrá en el examen, est... - tadano no lo escucho por que se sumió de nuevo en sus pensamientos.

-"Tokio, es una ciudad muy grande, tendré que hacer nuevos amigos" - pensó Hitohito, para seguidamente dar un suspiro mental y continuó - creo que después de lo que paso con Netsuno, no me arriesgare a tener una novia, creo que mi meta ahora será ser un chico normal y pasar desapercibido

Después de esto Tadano decidió prestar atención, ya que era su último día de clases.

- ¡¿What?! 75, guau esto es genial - decía Tadano quien ya había recibido su calificación final, la verdad era que el no había estudiado y paso más que todo por suerte.

- Señor Tadano, espero verlo en la fiesta, ¿ya alquila el traje?, sabe una buena manera de superar una mala relación es comenzar una nueva, kasi-chan parece estar ínter - entonces Tadano lo interrumpió antes de terminar su frase.

- Aisawua-sensei, agradezco la preocupación pero no podrá ir - dijo Tadano disponiéndose para salir de la oficina de su maestro.

- Tadano-kun, se que aún estás afectado por lo que paso con Netsuno, pero como tu director, me preocupo por ti, no prestas atención siempre estas melancólico y sombrío, fue algo terrible, sin embargo, debes avanzar - dijo su profesor director mirando fijamente.

Esa noche


Tadano se encontró en el automóvil de su padre, sentado en el asiento trasero, junto a la ventana, vio como pasaban los otros vehículos y el monte Fuji en la lejanía.

Lo cierto era que su situación había mejorado bastante -"esta es mi oportunidad, es mi oportunidad de tener una nueva vida, debo dejar lo que he hecho atrás y hacia mirar adelante, mi papá va hecho todo esto por mi no puedo desaprovecharlo, esta Decidido todo eso que me atormento durante años, debo superarlo, pero como tal ve.." estos eran los pensamientos de Tadano mientras su mirada se perdía en el horizonte.

Las horas siguieron transcurriendo, Tadano y Hitomi se hallaban en los dominios de Morfeo ya hace varias horas, pero el tiempo para despertar había llegado ya.

- ¡ iiClaaaft! -se oyó la bocina del vehículo, esto instantáneamente despertó a los dos jóvenes Tadano, quienes en un principio yacian alterados y asustado, pero después de unos momentos, ambos le enviaron una mirada asesina a su padre quien los veía Con una sonrisa en la Cara .

Después de bajar las cajas s buscar en ellas encontraron los futones, eran ya para ese momento cerca de las 11:30, tanto Hitomi como Tadano, se dirigieron a su habitación, la cual compartirían ambos hermanos, entonces tiraron los futones junto a unas cajas. . . . . de cartón llenas de pertenencias e intercambiando las respectivas despedidas se dispusieron a dormir.

- buenas noches, descansa Hitomi - dijo Tadano cubriéndose con la manta del futón, y recostándose en su costado derecho.

- descansa hermanito - dijo la joven chica mientras hacía lo mismo que Tadano.

A la mañana siguiente


- ¡anillo anillo! - los dos hermanos se despertaron al oír el tono característico de la alarma de teléfono de Tadano, este último ya harto del sonido tan solo apago la alarma.

- cambia esa alarma - dijo la pequeña, exasperada por la aburrida alarma de su hermano.

Después de esto Tadano se preparo, aseo y realizó su maletín para ir a clases, su madre ya les estaba preparando el desayuno en la cocina, así que cuando Hirohito pasaba para salir al colegio, se topo con la mesa ya servida y no le quedó. . . . . de otra que se sienta a comer el delicioso desayuno preparado por su mamá.

- arigato, mamá, itadakimazu - dijo el joven hombre de ella familia mientras tomaba asiento en la mesa en la que ya se encontraba su padre y se dirigía a él - buenos días papá, aun no me creo que halla sido aceptado en la prestigiosa preparatoria Itan, incluso con lo mal que lo pase en la entrevista por zoom -

- jajaja, debiste verte señor: mi habilidad es leer las situaciones sociales, lo más increíble es que te dejaron entrar pasados dos meses desde el comienzo de las clases -dijo su padre mientras comía el tocino, seguidamente dijo- okey, qué tengan un buen día, ya debo irme adiós -

- Adiós papá - dijo Tadano intentando comer deprisa para poder ir a la preparatoria, al salir de su casa y en caminar se a su nueva preparatoria, no pudo evitar pensar en su pasado, pero intento alejar pensamientos esos y encaminarse a su nueva oportunidad, nueva oportunidad de hacer las cosas bien, - "aunque no es que las hubiera hecho extremadamente mal"- se decía a si mismo, pensó en que en su anterior hogar había resaltado demasiado, eso le había traído muchos problemas, pero esta vez sería distinta , el no quería resaltar el estaba decidido a ser un chico normal...

Siguió Tadano con su monologo interno, sin saber que un poco más adelante una chica con cabellera color morado casi negro la cual le llegaba hasta la parte baja de la espalda, facciones delicadas y simétricas, boca pequeña y ojos grandes, se dirige a su mismo Destino, esta chica que muchos pensarían qué es despampánate, era observada por igual por hombres como por mujeres a su paso.

Hitohito segura caminando hacia su nueva preparatoria, había llegado ya a sus grandes puertas envergadas, entrando en ellas y dirigiéndose a los casilleros designados par a los zapatos, la parte que servía de entrada a la preparatoria, a paso tranquilo el se dirijo allí, al entrar se cambió quito los zapatos y se los estaba cambiando mis tras pensaba - "entonces esa será mi misión, ser un chico normal, no sobre salir ni ser resaltan te y obtener buenas not..." -

- click - su pensamiento se vio interrumpido por aquella delgada chica de la cual no se había percatado la presencia Tadano por estar tan ensimismado en sus pensamientos, tal ella parecía esta ya terminaba de cambiarse los zapatos.

-" debo ser respetuoso, Hitohito no te la quedes viendo, se respetuoso y preséntate de lo contrario pensara que eres irrespetuoso o raro"- valió intensamente Tadano mientras aún estaba en cuclillas y la chica ya se hallaba en pie con su portafolio en manos lista para alejarse, entonces Tadano se decidió decir - hola soy Tadano Hitohito, nuestros casilleros están en el mismo bloque, eso significa que nos encontramos en la misma clase ¿no? - después de esto pasó un par de segundos en silencio.

Hasta que la joven chica comenzó a temblar, más como vibrar y de su boca salían pequeños murmullos al tiempo que le enviaba una mirada helada, esta situación solo limitó un momento, pero fue suficiente para qué Tadano se incomodaste, justo antes de que la chica. . Saliera hacia el interior de la preparatoria, corriendo pero moviendo muy rápido las piernas, dándole una apariencia caricaturesca.

Sin más que pensar, Hitohito camino hacia su salón de clases, mientras divagaba en sus pensamientos - "ok, mi meta es ser una persona normal y llevar una vida escolar tranquila, si hay algún problema solo deberá escapar de el, si eso haré" - pensó cuando se estaba sentando en su salón de clases, cuando se acomodo en su asiento, sintió un gran sentimiento de incomodidad, como si miles de maldiciones fuesen dirigidas a él, alzar su vista sus compañeros le enviaba miradas de muerte, a su derecha . vio la razón por la cual era dirigida todo este odio a él, puesta sentada en el asiento a su lado se encontraba ni más ni menos que la hermosa chica que se había topado en los casilleros, ella se veía muy bonita a sus ojos, estaba erguida, su cabello como caída cascada tras si cabeza, la blanca tez de su piel reflejaba tanta luz que parecía incluso irradiar algo de brillo, parecía que planeaba segur mirando si belleza, pero la chica se gira levemente y lo vio a los ojos, entonces torpemente Hitohito se sonrojo, al ser atrapado mirándola, sus labios se movieron gastes qué su cerebro y literalmente sin pensar le dijo en voz alta - lo siento mucho, perdona si te incomode, no fue mi intención, es que eres muy bonita - cuando dijo Esto sintió como si los la mirada de un furioso Shinigamibse clavara en su espalda, cuando también un poco la mirada, podría haber jurado que los ojos de sus compañeros eran de in color rojo, como todos miraban a Hitohito y el joven Tadano los miraban con un poco de miedo, nadie noto el leve sonrojo qué adorno la cara de la chica, su suave rostro de color blanco fue manchado con dos pequeñas coloraciones de un rosado muy suave en sus mejillas.

Ya harto de sus miradas Hitohito sé ergio en el asiento y se apoyó con las manos sobre su pupitre haciendo un pequeño estruendo, exclamo con firmeza en su voz - ¡Que tanto miran, ocúpense de sus asuntos! - al sentir la exclamación del chico los demás alumnos rápidamente giraron sus cabezas, no tanto por miedo sino por la sorpresa de que repentinamente cambiase su pose y les hubiera gritado.

En esto y mientras nadie veía, un pequeño y casi imperceptible rubor apareció en el rostro de Komi-san.

Más tarde en medio de la clase mientras anotaban algunas cosas en su libreta, a la chica sentada al lado de Tadano se le callo su borrador, lo que fue visto por Hitohito y esté tratando de ser amable lo intento recoger, cuando rápidamente tubo que alejar sus manos del borrador, ya que un afilado compas paso a gran velocidad cerca de su mano clavándose en el piso con fuerza, al mirar un poco hacia atrás vio a un chico con una vestimenta parecida a la de un ninja, con el brazo aún estirado . , indicando que él había sido el atacante, si perder ni un momento más, el tomo el compás y con una habilidad practicada, lo lanzó hacia atrás donde estaba el chico, clavándolo en la mesa de su escritorio, haciendo que un escalofrío recorriera la espalda. . . . del ninja, ya sin más inconvenientes, alcanzo el borrador en el suelo, tomándolo niño y percatándose que en el empaque o lo que quedaba del empaque del borrador estaba escrito algo "S. Komi" - "entonces se llama Komi ¿eh? Komi- san" - pensó el chico, acto seguido puso suavemente el borrador en el escritorio de la ahora conocida Komi-san, este miro el borrador y después lo miro a él.

Los pensamientos de la chica eran tormentosos, dentro de su cabeza había una batalla campal entre quererle y el no poder hacerlo – "debería agradecerle, fui descuidada e hice que se callera el borrador, además el tomo la molestia de devolvérmelo, en lugar de solo señalarlo, pero como le agradezco, cuando me dio los buenos días antes, solo pude temblar intentando devolver el saludo. Ok, nada pierdo intentando " – entonces con una nueva resolución, ella se decidió e intento darle un agradecimiento, pero todo lo que salió Fue un pequeño y casi insonoro gruñido, más parecido a una vibración, además de que ella comenzó a temblar un poco a causa de titánico esfuerzo que para ella suponía.

Este comportamiento sorprendió al chico y le hizo querer simplemente ignorarla, pero rápidamente desecho ese pensamiento cuando apareció, en lugar de eso se dio cuenta de que la chica parecía ¿nerviosa? Por alguna razón, esto le recordó a su hermana cuando, hace unos años cuando ambos habían entrado a la preparatoria de Osaka, ella se había puesto nerviosa cuando su madre los acompañaba a sus salones, primero dejando a Hitomi, ella aunque era y es una niña enérgica se puso nerviosa cuando una compañera se le acercó y le pregunto si quería jugar con ella el entonces intento ser amable, ella solo se quedó estática por la situación que estaba viviendo, ambos tenían alrededor de 4-5 años, aquella era la primera vez que Hitomi debía ir a una nueva clase y hacer nuevos amigos, por lo menos que ella tuviera memoria, esto fue algo que la desconcertó, no fue hasta que Hitohito fue le dio un fuerte abrazo y la reconforto diciendo que todo estaba bien y aunque la niña se sonrojo levemente por la vergüenza, ella pudo hablar con la niña y aceptar su oferta de ir a jugar.

Regresando al presente, Tadano no podía solo abrasarla en frente de todos, ni siquiera se conoció, eso sería algo más contraproducente que otra cosa, por lo que decidió hablarle un poco – Tranquila, no hay razón por la que tener nervios, no pasa nada. . . . , no me tienes que agradecer, solo… - en ese momento la mente del chico con una flor en la cabeza hizo clic. La razón por la que no había devuelto su saludo, ella tampoco había hablado con nadie, sin embargo, varias personas habían hecho infructuosos intentos de esto, ahora ella no le fue capaz de agradecer, lentamente los engranajes en La cabeza del chico giraban, organizando el panorama para que el pudiera divisar la respuesta, la cual aparición en forma de una idea – "acaso será muda" – esta fue la respuesta más razonable en su cabeza, si bien aunque no podía ser muda, podía hacer leves sonidos, talvez tuviese algún problema del habla, pues bien, después de un buen tiempo haciendo en "ese" grupo, aprendió un a como leer a las personas, esa podría ser la respuesta, así que lo intento.

Komi-san, que se había calmado y estuvo viendo al chico durante todo el tiempo que este se había perdido en sus cavilaciones, lo miro expectante mientras este arrancaba un trozo de papel de su libreta y se lo ofrecía diciendo – Si tienes problemas hablando, puedes escribir lo que quieres decir – al oír esto ella abrió un poco los ojos, siempre que quiso comunicarse con alguien y no lograba, ellos solo se incomodaban o se sentían intimidados por su presencia, nunca antes nadie que no fuese su familia, se había preocupada de ella o de su aparente imposibilidad para comunicarse, ella no es que los culpara, ella tampoco hacia muchos intentos de esto, por el contrario, con los años había cesado de hacer acercamientos a la gente, optando por intentar no molestar a nadie y haciendo un esporádico intento por responder a alguien que se dirigiera a ella, la situación presente era muy impactante para ella hasta el punto que por uno o dos momentos se quedó allí simplemente congelada por la sorpresa, rápidamente, sin embargo, salió de su estupor y tomo el papel que le ofrecían, rápidamente comenzó a garabatear símbolos en el con su respuesta al amable chico que se tomó la molestia de no solo recoger y devolverle su borrador sino también de preocuparse por ella.

La maestra que estaba impartiendo su clase normalmente, noto por el rabillo del ojo, los movientes que hacían los chicos, fijando sé que el nuevo estudiante decía algo, posteriormente arrancando un trozo de papel de su libreta y ofreciéndosela a la chica, la cual con un poco de nerviosismo la tomo y comenzó a garabatear en ella, la maestra vio las intenciones de la chica de devolver el papel a su dueño original, pero, pese a su incredulidad y alegría al ver a la chica interactuando con otro estudiante, cosa que nunca había visto, aunque muchos estudiantes lo habían intentado, claramente atraídos por su belleza y popularidad, sin embargo, ella no permitiría que su clase fuera interrumpida, sin importar el motivo, así que a su pesar tuvo que hacerlo, justo cuando la chica le extendía el papel…

Komi-san había estrujado su cerebro en busca de las palabras indicadas, si hacia bien sus movimientos podría incluso hacer su primer amigo, la idea la ponía nerviosa, pero al final encontró que era lo que le parecía indicado escribir, entonces junto su coraje y le extendió la mano con el papel para que el la tomara, pero justo cuando el chico lo iba a tomar vio un proyectil a alta velocidad ser lanzado hacia ellos, siguiendo su trayectoria, este la golpearía en la mano, por la velocidad era obvio que Dolería, pero justo cuando llegaría el golpe, el chico del asiento a su izquierda, extendiendo la mano y tomo el proyectil, atrapándolo en el aire a centímetros del dorso de su mano, al abrir un poco su mano, ella hubiera jurado ver humo saliendo . de la palma del chico y justo en medio de esta se encontró una tiza, ambos al mismo tiempo vieron hacia su maestra, la cual caminaba hacia ellos.

Estaba muy sorprendida, ella planeaba que la tiza pasara un poco por encima de la mano de la chica para darle un susto y llamar su atención, pero un error al lanzarla hizo que apuntara justo al dorso de su mano, eso dejaría marca, pero cuando se resignó, el chico movió su mano pensó que iba a mover la mano de la chica oa actuar como un escudo de carne, pero la sorprendió cuando simplemente la tomo del aire, pero se recompuso rápido, moviéndose hacia ellos y tomando la tiza de su mano, para acto seguido reprender a los chicos – Sera mejor que presten atención a clase a partir de ahora, pronto habrán exámenes y deben estar preparados – Con esto la maestra se movió y se paró en su podio, continuado con la clase, dándoles una mirada a ambos siguieron hablando, ambos sintieron un leve escozor en sus columnas cuando la maestra los miro y decidieron no tentar a la suerte, prestando atención al resto de la clase.

Al finalizar su última clase y mientras todos se iban a sus casas, Hitohito guardaba sus cosas, este primer día no había sido tan relajado como le gustaría, pero el intentaría no llamar tanto la atención el resto del tiempo que le quedase en esa preparatoria, tomo su bolsa y se dispuso a irse del aula, saliendo de esta por la puerta con intenciones de dirigirse a las taquillas para recuperar sus zapatos.

Sin darse cuenta de que cierta chica con pelo negro un tanto tímida, se encontró intentando llamar su atención, intento alcanzarlo pero, su bolsa se había enredado en su mesa, así que ella se resignó mientras lo veía salir por la puerta, vio su oportunidad. . . . desvaneciéndose ante sus ojos, pero esta vez no lo permitiría, con una nueva convicción de no seguir en el mismo círculo de vicioso de intentar, fracasar y resignarse, desenredo su bolsa con un par de movimientos y comenzó a caminar rápidamente hacia donde sabía que estaban. . . . las taquillas, no sin antes acomodar bien su silla y mesa.

Al llegar allí vio con desilusión como Hitohito ya había terminado con sus zapatos y se dirigió a la entrada de la preparatoria, en un esfuerzo veloz, ella se cambió el calzado con una gracia y precisión practicadas, entonces se dirigió hacia él, esta vez sin. . . . obstáculos lo alcanzo.

El joven con una flor en la cabeza estaba cavilando, completamente ajeno a la mini-odisea que Komi-san estaba atravesando –"eso pudo salir mejor, me hubiera gustado poder ayudar a esa chica, bueno será otro día, ¿Qué más debería hacer?" ?" ?" ? hoy?, creo que organizare la habitación que comparto con Hitomi, últimamente se ha comportado un poco raro, debería hablar con…"- corto sus pensamientos cuando sintió como una mano suave y cálida se posaba levemente en su hombro, llamando su hacia atrás atención, allí estando Komi-san, cuando el giro la vista pudo verla, la chica estaba con la otra mano también levantada, pero esta estaba ofreciendo a tomar algo, un pequeño trozo de papel que Tadano tomo, abriéndolo para poder ver su contenido, en el estaban escritas las palabras "Gracias por lo del borrador y perdón por no responder en ese momento" además bajo este mensaje, escrito como si fuese una nota aparte del original "perdón por las molestias con la maestra, soy Shouko Komi" al terminar de leer la miro, ella lo miraba expectante por su respuesta a lo que el chico solo respondió con – Amm, es un placer, soy Hitohito Tadano y descuida no es molestia – a esta breve interacción le siguió un par de segundos de incomodo silencio, él no sabía que decir así que solo se le ocurrió sacar una libreta y una pluma de su bolsa, él se las expandió a la chica que las tomo y se puso a escribir un momento, pero se le dificultaba, ya que no tenía una superficie. para apoyarse. , viendo esto Tadano pareció dar un vistazo alrededor pero no vio nada, ni siquiera una banca, entonces recordó un pequeño parque a tan solo un par de cuadras de allí.

Antes de que el pudiera mencionar lo del parque, la chica ya había terminado de escribir en la libreta lo que quería decirle, así que el tomo la libreta y leyó lo que ella había escrito allí, dijo "podemos hablar un rato, por favor, conozco un parque cercano", el tren de pensamiento de la chica fue que el por alguna razón parecía querer ayudar con su problema y ella no dejaría pasar la oportunidad de por fin poder comunicarse con alguien fuera de su familia e incluso de poder hacer su primer amigo.


Tadano no tuvo inconveniente con su oferta, tenía una gran curiosidad de la chica así que sería buena idea "hablar" con ella para ver qué es lo que estaba pasando – Ok, pero apeas nos conocemos, no deberías tener tanta confianza con las personas, hay personas que hacen cosas raras… n-no quiero decir que yo sea alguien quien no deberías confiar, no es como si planear hacer nada raro o algo así… es decir, sé que me escucho como alguien muy raro pero… - la chica solo se quedó allí un poco confundida de cómo reaccionar ante tal escena, en su opinión era incluso un poco lindo, le recordaba cuando su hermano a veces se ponía nervioso por algo, pero su hermano no hablaba mucho, solo se ponía a mover los brazos de un lado al otro, temblando ligeramente y ruborizándose un poco, pero el chico eventualmente termino su lingüístico enredo - … pero solo digo, no todos los viejos son así, solo alguno… perdón por eso, vamos al parque ¿sí? – el termino con su monologo y rápidamente tomo su bolsa y se dirigió al parque, acto seguido la chica que él había dejado atrás lo seguido, caminando a su lado.

Durante el corto trayecto de 2 minutos no hubo ningún intercambio de palabras, por parte de Hitohito esto se debió a que seguía apenado por haber puesto tan nervioso y comenzó a balbucear cosas sin sentido, por otro lado, Komi-san solo estaba acostumbrada al silencio. . . . y aunque estaba ansiosa por esta experiencia, se mantuvo al margen, recorrida la corta distancia, ambos llegaron al parque donde tomaron asiento en una banca, la cual le estaba haciendo sombra un árbol de sakura, una vez allí fue Tadano el que comenzó la conversación. . . . – Preguntare algo pero no te molestes – Shouko estaba confundida, porque se molestaría, era solo una pregunta, pensaba ella.

- Bien, ¿eres muda o tienes problemas de habla? – un corto pero muy tenso silencio fue lo que Tadano sintió a continuación, cuando ella lo miro a los ojos, pero esto fue descartado cuando ella solo negó con la cabeza, después del gesto, simplemente tomo la libreta y comenzó a escribir a gran velocidad. . . , dando la ilusión de que su mano solo se deslizaba sobre el papel, cuando termino, nuevamente se la ofreció al chico quien lo tomo.

En su libreta estaba escrito "No, en verdad yo puedo hablar y pronunciar sonidos, pero cuando intento hablar con alguien o estoy frente a otra persona, me pongo muy nervioso y comienzo a temblar y murmurar tratando de pronunciar la más mínima palabra, perdón por lo de esta mañana Tadano-kun (¿Está bien que te llame así?) no fue mi intención, intento, siempre lo hago, pero siempre es lo mismo, todos solo se alejan bien, incomodos, atemorizados o extrañados, todos menos tú, puede preguntar el ¿porque?", esto le dejo un poco más clara la escena al pelinegro, la chica era solo alguien con una dificultad.

- Si, esta bien, puedes llamarme así, yo me quedare con "Komi-san", pero regresando a lo anterior, enserio ¿nunca has hablado con alguien?, ¿cómo te comunicabas con tus amigos entonces? – la chica solo escucho para después tomar de nuevo el cuaderno y comenzar a garabatear figuras en él, mientras el chico solo veía esto con leve fascinación, cuando termino de escribir, él lo leyó.

"Si, puedes llamarse así y no, nunca he tenido un amigo antes, aunque mi sueño es lograr hacer 100 amigos, por favor no te rías" cuando el leyó esto o pudo evitar que una pequeña y suave sonrisa adornara sus rasgos, le pareció linda su meta.

Antes de que ella se pudiera hacer una idea equivocada él le respondió – Ese es un sueño muy lindo, creo que ahora solo te faltan 99 amigos, claro si quieres ser mi amiga – Tadano le respondió a la chica, esta se sobre salto un poco , una persona a la que ella podía llamar amiga, esta era una sensación nueva, no tenía experiencia, pero era un sentimiento un poco cálido, era reconfortante, alguien en quien podía confiar, pero una diferencia de su familia, alguien que no solo se preocupado por ella sino que se había tomado varias molestias por ella, sin ninguna obligación sanguínea, solo porque ella le había agrado, aunque incluso en la cabeza de ella eso sonaba superficial, pero la hacía feliz el hecho de que alguien que solo la conoció a ella, la validase como persona, como individuo, fue una sensación nueva y desconocida, por un momento se salió de sus cabales, después de prácticamente una vida sola, con el apoyo único de su familia, alguien ajeno a este deposito implícitamente un voto. de confianza en ella, aunque en el pasado un niño o niña de pelo morado intento ser su amiga o amigo, nadie se había tomado tantas molestias por ella, no solo con el borrador, con el papel, sus palabras de ánimo y dedicarle su tiempo. . . . .

Komi-san no pudo evitar abrasarlo, en un elegante y suave movimiento lo rodeo con sus brazos, a la altura de su pecho y acercándose un poco a él, al mismo tiempo él se sorprenderá y levantará los brazos, pero simplemente los reposo sobre la cabeza y espalda alta de la chica, la cual se había percatado de lago al presionarse contra él, el chico tenía una musculatura medianamente marcada, si bien no era como los fisicoculturistas o deportistas de la tv, definitivamente tenia algunos ligares tonificados, ella solo por curiosidad apretó un poco sus abdominales, pero se sonrojo al sentirlos firmes, si bien no era como una tabla de madera, era firme y rígida e comparación a como era su propio abdomen, rápidamente se soltó del abrazo y regreso a su posición, estando bastante enrojecida, esto preocupa un poco al chico.

- ¿Que pasa Komi-san?, hoy está haciendo un poco de calor, quieres ir por unas malteadas – Shouko estaba muy complacida de que el chico no hubiera percatado de su acción levemente pervertida, poniendo la culpa en manos del clima, ella vio entonces la oportunidad de pulir sus "habilidades sociales" además de poder conocer mejor a su nuevo amigo, - ""amigo" me gusta cómo suena eso" - la pelinegra avanzando rápidamente, la idea de refrescarse le atraía bastante.

Viendo su aceptación a la idea el chico dio un vistazo alrededor del parque, viendo a un par de calles una cafetería, el solo la señalo, mientras miraba a su compañera, ella solamente se acercó para indicarle que estaba satisfecha con la elección del sitio, Tadano. solo guarda su libreta y bolígrafo para después caminar hacia allí, siguiendo a Komi-san que lo esperaba un poco más adelante.

El resto de la tarde paso sin sucesos notables, durante aproximadamente 1 hora ambos "hablaron" entre sí, con pausas cuando tomaban de sus bebidas respectivas, a mitad de la conversación, a Hitohito se le ocurrió una idea para hacer más divertida la tarde, le propuso a Komi-san jugar 2 verdades una mentira, esto facilito las siguientes interacciones hasta que se terminaron sus bebidas, Tadano pago por ambos, incluso bajo la constante mirada de Komi-san, que le transmitía el mensaje de que ella podía pagar el suyo propio, pero el solo pago, después se disculpó, cuando ambos salían del café y se disponían a separar sus caminos, no sin antes despedirse, el chico solo se despidió amablemente.

- Esta tarde fue divertida Komi-san, nos vemos mañana en la preparatoria – antes de que él se diera la vuelta, ella levantó una mano y la sacudió un poco en señal de despedida, ambos se dieron la vuelta al mismo tiempo y solo caminaron. . . . pensando en que talvez el futuro que les aguardaba no será como lo habían previsto, no sería sino hasta más tarde que ambos se darían cuenta que prácticamente habían tenido una cita.


- No puede ser, el primer día y ya invité a alguien a salir, yo solo quería una vida escolar tranquila y feliz, soy un desastre, Ok no pasa nada, talvez a ella no le moleste mi estupidez… espero que no se haga una idea equivocada de mi – el chico estaba en un charco de miseria figurativa, acostado sobre su cama, reflexionando su insensatez, se hallaba en una litera de madera que compartía con su hermana, quien estaba a un lado de la cama sentada en una silla en el escritorio que compartían, leyendo una novela norteamericana, si no le fallaba la memoria se llamaba Flores en el ático o algo así, él no sabía nada de la trama pero a su hermana parecía interesarle.

- No seas tan tonto Chrishito-kun, nada paso, te preocupas demasiado hermano, bien, según lo que llevas murmurando media hora, solo la llevaste por una malteada para hablar de un problema que ella tenía, no hay nada de malo con eso además de que te han pasado cosas peores con las mujeres, ¿no recuerdas? – después de oír esto el chico solo dio un gran quejido ya que su hermana le había hecho recordar justo lo que había estado impidiendo ni siquiera pensar durante hace rato, no solo durante un rato sino que desde hace varios días que el chico intentaba no pensar en los demonios que perseguían y atormentaban su alma, desterrando a lo profundo de su mente los pensamientos de todo lo ocurrido cada vez que le pasaban por la cabeza, hasta ahora había tenido suerte y no había pensado en eso, pero ante la insinuación de su hermana. . no pudo evitar que la avalancha de recuerdos y pensamientos intrusivos se metieran en su mente, el día había sido lo suficientemente ocupado como para que esto no pasara pero, de nuevo ante lo dicho por su hermana su mente se volvió un caos.

- Por favor Hitomi, no estoy de humor para hablar, deja de hablar de ella, por favor ¿sí? – dijo el chico en un sonido casi ahogado por la almohada, su hermana siempre lo vio como alguien valiente, como cuando la protegió de esos chico que la molestaban o cuando la defendió en ese asalto, pero lo que había estado pasando fue demasiado incluso para él, lo devastado, aun así, se mantuvo bastante firme, para evitar preocuparla, si no fuera por los rumores ella no se hubiera enterado, él dijo que intentaba protegerla de eso, aunque fuera chocante, es decir ella la veía incluso como la hermana. . . . que nunca tuvo, él siempre era valiente, pero después de eso se había vuelto bastante blandengue, pero mentiría si digiera que ver actuar a su hermano como un osito de goma no le divertía.

Al verlo así ella cero su libro y abrió la laptop, buscando algo, se le había ocurrido ver una película con él para reconfortarlo un poco, ahora que parecía que ella lo había empujado a otra espiral descendente y levemente autodestructiva – Ven Hermano, veamos algo , ¿ que tal High school musical?, yo hare las palomitas, toma – dijo esto mientras lo volteaba para que quedara boca arriba en la cama, para luego entregarle la laptop, el chico solo tomo la computadora, esa que compartía con su hermana, al fijarse bien vio que tenía una nueva pegatina que antes no estaba allí, en la tapa justo encima del logo había una niña de anime, era un poco pequeña pero se veía amenazante con una posición de lucha, pelo hasta la espalda, ondulado y de color negro en toda la cubierta tenían distintos personajes y un símbolo de la fundación SCP, él no le diría nada por la nueva decoración, al fin y al cabo era la computadora de ella también, pero, saliendo de las divagaciones, con diseño de hacer mucho más durante el día comenzó a ver el inicio de la película mientras ella hacia las palomitas.

Al tiempo, la más joven de la casa había vuelto, con dos cestos de palomitas, estas eran mixtas, ella había hecho una porción de palomitas saladas y otras caramelizadas, después las junto y las dividió de nuevo, aunque la chica de solo 15 años. . . . , ya tenía una opinión formada acerca de las cosas como la igualdad de género, el machismo y el feminismo, aunque no era abiertamente feminista, le incomodaban las cosas como los roles de género y de más concepciones culturales que había en su sociedad, como es bien conocido Japón es un país muy tradicional, esto le hacía más susceptible a este tipo de cosas, aunque había ido tomando fuerza en los últimos años estos pensamientos progresistas llegados de occidente, siendo todo esto así, a ella le gustaba cocinar, últimamente estaba practicando y ya veía mejora, su pensamiento es que había algunas cosas que generalmente muchas mujeres eran mejores que los hombre, tampoco es que se puedan salir completamente de los roles de género, o este era su pensamiento, las mujeres no podían embarazar y los hombre no Podía dar a luz, pero eso ya era meteré en demasiados líos morales, decidió dejar que esos pensamientos simplemente se escaparan mientras que ella solo se acostaba y veía la película en compañía de su hermano.

Habiendo pasado toda la película el chico de pelo negro fue a moverse para levantarse, pero sintió el peso de su hermana que no le dejaba moverse cómodamente, planeaba llamarla y decirle que le dejase levantarse, pero su plan fue arruinado y rápidamente desechado al ver la serenidad de su hermana, esta yacía dormida, en algún momento de la última hora se había quejado dormida recostada sobre su hermano, la visión le calentó el corazón al chico, así que con mayor cuidado que el que se tendría si se intentara arrancar un pétalo de un diente de león con un par de pinzas, se levantó, recogió el computador y se sentó en el escritorio con este, no sin antes casi despertarla por un pequeño y brusco movimiento que hizo al por fin dejar la cama, una vez frente al computador vio algo que no había revisado antes, tenían un nuevo correo, aunque compartían un mismo equipo, ellos dos tenían cada uno una cuenta individual, protegida por contraseña, el no perdió tiempo en la cuenta de su hermana y rápidamente entró en la suya propia . , justo al entrar se encontró con la notificación del correo electrónico, quien mando la carta no tenía nombre y en la foto de usuario solo se vio un símbolo, de un drago, esto no le dio mucha confianza, pero solo podía averiguarlo, el correo era un oficio, parecía bastante serio y formal, en la parte superior, centrado se hallaba de nuevo aquel símbolo de un dragón, bajo este se encontraba el Titulo o Nombre, él no podría decirlo a ciencia cierta pero decía Zhi-Long, bajo esto se encontraban un par de símbolos que no reconocía, lo descarto como de otro idioma, pero lo que si entendió fue el párrafo bajo estos, comenzaba con un saludo formal e inéditamente se dirigió al tema principal del documento: "Cordiales saludos señor Tadano, lamentamos el contactarlo por este medio pero es un de vital importancia, bien, com…".

Aunque le intrigaba en gran medida que decía el correo, su lectura fue interrumpida por el sonido de la puerta abriéndose y su madre entrando a la casa, así que como era costumbre el solo se levantó cerro su laptop y fue caminando a saludarla, no sería sino hasta unos meses más tarde que el terminaría de leer aquel correo.

Hitohito después de saludar a su madre se dirijo de vuelta a la habitación para despertar a su hermana, su madre había traído la cena, un poco de comida china, mientras caminaba hacia la habitación no pudo evitar recordar lo pasado en ese día, como su pequeña meta auto-impuesta de no resaltar mucho y estar tranquilo había sido aplastada, pero aún tenía la esperanza de que solo fuese eso, nada más ayudar a una chica a hacer amigos, ella era amable y linda, esto no sería tan difícil, además de que ella ya era prácticamente la más popular de toda la preparatoria, esperaba que fuera fácil y que no llamase mucho la atención sobre él. "Je, pobre iluso" eso es lo que el mismo pensaría más tarde cuando recordaba su propósito para la preparatoria, lo que justo ahora el no conoció es el número de distintas personalidades que habitan la preparatoria a la que asiste, ya que como es ampliamente supe el ingreso de esta se basa en una entrevista en la cual se mide el potencial de cada quien y se intenta incluir a aquellos con las más diversas aptitudes y actitudes, tampoco se imaginó la gran cantidad de desafíos que enfrentaría ni las aventuras que tendrían, muchos años más tarde este mismo chico ya siendo un adulto, el vería hacia atrás a ese momento donde conoció a aquella callada chica como el momento en que su vida comenzó a cambiar, de modo que ni siquiera el mismo lo creía aun, pero que no cambiaría por nada en el mundo, además de ser el inicio de una serie de acontecimientos que le harían replantearse casi todo de sí mismo y guiarlo hacia un futuro más brillante de lo que podría haber dicho