Capítulo 16: Un nuevo enemigo. Un nuevo problema

27/7/2021


Era algo sorprendente de que, a estas horas de las noches, gran parte de la ciudad aún seguía tan activa como siempre. Normal si se trataba de una gran y bulliciosa metrópoli más o menos más grande que Karakura y del mismo modelo de Tokio. De hecho, casi todas las tiendas estaban abiertas y disponibles a estas horas e incluso aún estaban llenas de gente y clientes que vinieron a comprar sus productos en ellas. Entre ellos se encontraban Orihime acompañada por Mordred, quienes estaban inspeccionando una estantería llena de productos de baño.

"A ver, a ver." Tarareó Orihime mientras seguía mirando los productos sin decidirse que llevarse. Incluso para ella le era complicado decidir que se iba a comprar al ver tantos productos que nunca había visto ya que no se vendía en Karakura.

De cualquier manera, sus marcas se veían estupenda y a buen precio, sin embargo, hubiera sido fácil poder elegir y la mayoría se vieran iguales y tuvieran mucho que ofrecer. Normalmente eso no habría sido ningún problema cuando iba de compras en Karakura en compañía de Tatsuki quien la ayudaba de en vez en cuando. Lástima que no se podía decir de su nueva compañera.

"Oi, ¿ya has terminado de elegir?" Preguntó Mordred con impaciencia. Ella estaba un poco alejada a su lado con los brazos cruzados y un ceño fruncido en la cara que recordaba un poco a Ichigo. También llevaba una bolsa de compra en su mano.

"Mō, solo espera un momento." Reprendió Orihime suavemente con un tono parecido al de una madre dirigido hacia su hija.

La rubia suelta un suspiro de exasperación mientras seguía esperando.

"Recuérdame al menos porque estamos haciendo esto."

"Es porque hoy es nuestro último día aquí y tenemos que buscar otro establecimiento para quedarnos." Corrigió Orihime mientras seguía inspeccionando los productos.

"Eso ya lo sé, me refería a porque tenemos que estar aquí." Espetó Mordred.

"Pues porque necesitamos llevar cosas que necesitaremos para hacer cuando lleguemos a un nuevo hotel." Respondió Orihime sin problemas. Fue cuando milagrosamente por fin pudo decidirse.

De hecho, era cierto de que esta era la última vez que nuestros protagonistas estuvieran en el hotel Golden Koi y mañana tuvieran que buscarse otro establecimiento donde quedarse, y Urahara se estaba encargando de ello ahora. El motivo tras esto fue para no levantar sospechas entre los residentes y recepcionistas que habían hipnotizado, además de que necesitaban llegar a un punto cercano donde actualmente viven sus aliados que se encuentra en el distrito de Miyama, al otro lado del río Mion. Por ello se decidió acercarse a ellos lo más cercano posible para no arriesgarse a aventurarse en medio de la gran ciudad y que los atraparan un Master enemigo.

Por supuesto, la Saber roja no le preocupaba eso ya que aún se seguía jactando de que aquello no sería un problema, pero no dijo nada al respecto. Con todo decidido, se aprovechó el último día para hacer las compras y llevar todo lo necesario para el nuevo establecimiento desde aperitivos hasta otras cosas. Ahora estaban yendo hacia una pequeña tienda de productos (solo Orihime acompañada por Saber) para comprar unas últimas cosas.

"Creo que me llevaré estos." Dijo Orihime con una sonrisa mientras sujetaba en sus manos 2 botes de champú de cada color; azul y crema. Mordred se sentía aliviada de que la otra chica pudo decidirse al fin.

"Neh, Saber-san, ¿tú quieres comprar algo también?"

Saber ladeó un poco la cabeza pensándolo detenidamente.

"No."

"¿Estas seguras?" Preguntó Orihime sin estar convencida.

Ella volteó de inmediato la cabeza hacia ella mirándola molesta. "Ya te he dicho que yo no necesito nada de eso. No me compares como esas damas que quieren cualquier cosa, ¿está claro?"

No hacía falta decir que Orihime había recibido el mensaje de la rubia y lo tuvo bien en cuenta.

"H-hai."

Un momento después, ambas chicas pusieron sus compras en el mostrador y la encargada de la tienda los analizo antes de entregarlos.

"Gracias por su compra." Dijo la encargada.

"De nada." Respondió Orihime antes de que ella y su compañera recogieran las bolsas cargadas de las cosas que habían comprado y luego salieron de la tienda. La primera tarareó felizmente mientras paseaba con su compañera por la acera al ver su trabajo finalizado.

"Mira qué cantidad de cosas hemos comprado. Estoy segura de que Kurosaki-kun e Ishida-kun estarán felices por esto."

La rubia no parecía compartir el mismo entusiasmo que la peli naranja, y simplemente continuó caminando sin decir nada. Esto no paso por desapercibido por la última.

"¿Ocurre algo, Saber-san?" Preguntó Orihime sonando algo preocupada.

"Nada, me alegro de que estés orgullosa de eso." Respondió Saber con un toque de sarcasmo en su voz.

Orihime miró algo extrañada en el comportamiento de la rubia y parecía que estaba de mal humor. Normalmente ella no era tan malhumorada como Ichigo, pero parecía que hoy lo estaba por alguna razón, y ella sabía por qué.

"Perdona si te he arrastrado a ir a comprar conmigo."

"No es nada. Tampoco tenía otra cosa que hacer, además de que fue Ichigo quien me pidió que fuera en su lugar." Respondió Mordred simplemente sin ningún tipo de molestia en su voz.

Aun así, Orihime no parecía tan convencida por ello. Tal como dijo antes, ella no era de las que se dedicaba la mayor parte de su tiempo en hacer todo tipo de compras como lo haría cualquier persona normal, y ella no era del todo normal teniendo en cuenta de que era una guerrera bastante ruda, más ruda que Tatsuki y Rukia por lo que parecía y no parecía demasiado sociable. Estaba claro que estaba molesta de ir de compras.

"¿Estás segura? Allí también había ropa que podrías haber usado. No creo que deberías llevar siempre la misma ropa de siempre."

"Estoy muy bien con lo que llevó, y no creo que esos atuendos estén de mí gusto." Respondió Saber no estando muy contenta si tuviera que usar esos vestidos de 'dama'. "Además, yo solo voy vestido así para pasar desapercibido de entre los demás y llamar bastante la atención con mi armadura."

"Oh, ya veo." Asintió Orihime al recordar la gruesa armadura que portaba ella cuando apareció por primera vez y cuando lo utilizo en la batalla de ayer.

Solo podía decir que tenía un aspecto bastante inusual, más o menos parecido a la de un samurai, por no decir que era gruesa, bastante gruesa para una chica que tenía más o menos su misma estatura.

"¿Cómo te sientes al llevar esa armadura?" Preguntó Orihime con curiosidad.

Saber ladeó la cabeza hacia ella para mirarla. "¿Qué?"

"Quiero decir, es que me he estado preguntando sobre cómo puedes moverte con esa gran armadura con lo pesada que es sin mencionar esa espada que también se ve bastante pesada."

El caballero rubio volvió su atención hacia adelante mientras pensaba en lo que dijo la otra chica.

"Para mí esto no es nada." Respondió ella para gran sorpresa de Orihime. "¿Recuerdas lo que te conté ayer sobre mi historia? Desde que era pequeña, me entrenaron cargando cosas pesadas como una armadura y portando una espada también pesada. Debo admitir que desde un principio era muy duro y muy difícil de superar, pero terminé acostumbrándome y por eso me volví muy fuerte. La armadura que llevaba puesta en vida siempre la tengo a mi lado ya que era la única cosa que me hacía un guerrero, y aunque odiara admitirlo, era un buen regalo de mi madre."

La seriedad y la impasibilidad de sus palabras hicieron que Orihime la mirará con más solemnidad. Todavía recordaba su historia y no paraba de impresionarlo por su drama.

Ella había sido criada en soledad por una madre soltera en algún lugar apartado de la civilización, y la educó haciéndola creer que es un chico, como si quisiera que fuera lesbiana y también la instruyó en el arte de la lucha para que se convirtiera en una fuerte guerrera ruda tal como es ahora, todo con tal para que se uniera a los caballeros de su padre quien aparentemente odiaba a las mujeres, y por eso este último nunca vio a Mordred como su hija. Fue por aquel motivo que Mordred se había rebelado contra su padre y ambos murieron al final.

Ella no dejaba de pensar lo trágico que fue la vida de la rubia.

"¿Por qué me miras?" Preguntó Saber de repente al darse cuenta de que la otra chica la estaba mirando.

Esta última se sobresaltó al ser descubierta. "¡Ah, perdón, perdón! ¡No quería espiarte, perdona!"

La rubia la miró por un momento antes de decidir que no merecía la pena, y lo dejo pasar cuando volvió su mirada hacia adelante para el gran alivio de Orihime. Una vez que todo estuviera en calma, Orihime reflexionó también sobre la relación que tenía el Caballero de la Rebelión con el ex Shinigami Sustituto siendo que no muy buena puesto que Saber no parecía respetarlo por ser un Master incompetente y Ichigo por la actitud descarada de ella.

Ella sabía que el caballero no era tan amigable como Rukia o Tatsuki, pero tampoco quería que esos 2 se llevarán de esa forma tan negativa ya que después de todo son compañeros en esta guerra y deberían respetarse como tal. Ella quería que aprendieran a entenderse bien y llevarse de la misma forma por muy difícil que pareciera. No estaba muy segura, pero lo más probable es que seguramente tanto Ichigo y Saber pensarían lo mismo del uno por el otro, pero no podrían expresarlos debido a los defectos del otro.

Quizás si ella ayudará un poco a que tanto Master como Servant se entiendan unos a otros, a lo mejor llegarán a respetarse y no discutir más. Con eso, decidió probarlo.

"Ano, Saber-san-

No tuvo tiempo para terminar la frase cuando vio a la rubia detenerse abruptamente y extendió un brazo hacia la derecha para cortar el paso a la pelinaranja.

"¿Qué pasa?" Preguntó Orihime preocupada.

Ella ignoró su pregunta mientras seguía mirando al frente con una expresión severa. Justo delante de ellas no había nada más que la acera extendiéndose por donde la vista alcanzaba y estaba menos poblada de gente. Sin embargo, eso no era lo que le preocupaba a Saber.

"¿Saber-san?" Preguntó Orihime preocupada por el comportamiento de la rubia.

"¡Muéstrate ahora mismo!" Gritó Saber en voz alta mirando la nada. "Si no sales, iré yo a por ti."

Al principio Orihime no entendía lo que estaba pasando, pero de repente escuchó unas extrañas risas fantasmal y luego una extraña serie de partículas brillantes aparecieron de la nada a varios metros frente a las chicas y empezó a materializarse en una forma humanoide. Orihime se quedó mirando en shock al ser recién aparecido frente a ellas.

De sin duda tenía forma humana, pero tenía un aspecto bastante espeluznante como un zombi o algo. Parecía ser un hombre de a mediados de 30 años con los ojos enormes y saltones y las mejillas grasientas y brillantes. Su piel parecía estar demacrado como un cadáver a pesar de su constitución alta y musculosa. Sus prendas parecían extrañas e intimidantes, que consistía en una lujosa túnica de diseño antiguo; patrones sanguíneos escarlatas adornaban la tela de tono negro.

Nada más aparecer, Orihime casi se refugió detrás de Mordred, mientras esta última miraba desafiante esperando al que el recién llegado hiciera su primer movimiento. En cambio, el extraño hombre fijo solo su atención en la rubia con sus ojos de sapo y luego dio una sonrisa llena de lujuria.

"He venido a por ti, mi santa virgen."


Las puertas automáticas de otro supermercado se abrieron de lado a lado para permitir que Ichigo saliera con su propia compra; 2 bolsas en cada mano.

Había contribuido junto con Orihime en la compra de materiales que necesitaban para ir a otro hotel, y solo él solo compró su propia comida. Se detuvo a unos metros de la tienda por donde había salido y luego miró su reloj para ver la hora.

'20:30'

Según Urahara, deberían estar de regreso en el hotel antes de las 9:00 p.m. o 10:00 p.m. para no entrar en contacto con un Maestro enemigo, aunque las batallas no se librarían hasta más tarde, pero aun así tenían que ser cautelosos.

"Oye, ¿ya has terminado?" Kon preguntó saliendo de un escondite donde había estado escondido cuando Ichigo entró a la tienda. Él se paró bajo sus pies.

"Sí, creo que tengo todo lo que necesito". El ex Sustituto respondió mirando una de las bolsas.

"Bien, entonces volvamos al hotel." Dijo el león de peluche parlante con entusiasmo por querer regresar. Todo el tiempo esperando a que Ichigo regresara lo había estresado un poco por temor a involucrarse en otra pelea entre Servants.

"No tan rápido. Todavía no he contactado con Inoue." Respondió Ichigo recordando que su amiga todavía estaba comprando.

"Oh, es cierto. Espera ... ¿¡Está sola!?" Gritó Kon preocupado porque la chica burbujeante estaba sola e indefensa en la otra tienda con la posibilidad de que un ladrón, secuestrador o un Master enemigo la atacara. "¿Cómo pudiste dejarla sola?"

"Oh, cállate, no seas ridículo." Reprendió Ichigo un poco molesto por la actitud exagerada del Alma Modificada. "Envíe a Saber para acompañarla, no te preocupes por nada."

Kon miró un poco desconcertado al chico de cabello naranja como si le hubiera crecido una segunda cabeza. Este último notó su mirada.

"¿Qué pasa?"

"¿Crees que es seguro dejarla sola con ella?"

Ichigo miró al animal de peluche sin comprender. "¿De qué estás hablando?"

"¿¡De que estoy hablando!?" Repitió Kon en voz alta. "¿No te das cuenta de que lo más probable es que esa chica marimacho se aproveche de ella mientras tu no estés para hacer lo que quiera con ella? No te imaginas lo que estarán haciendo ellas en estos momentos." Dijo esta última frase mientras imaginaba a las 2 chicas juntas paseando, y de repente la rubia marimacho decide llevarse a la dulce Orihime a un parque de atracciones, pasar el tiempo allí para divertirse, subir a una noria y finalmente besarse.

La sola idea de ver esa escena es… es… ¡es…!

"Bueno, la verdad no se si es agradable ver a dos chicas besándose unas a otras, pero tendré que verlo por si acaso." Dijo Kon borrando el miedo de ver a las 2 chicas besándose, y ahora sentía curiosidad por saber cómo sería presenciar dicha escena.

Mientras Kon seguía pensando en eso, Ichigo solo puso los ojos en blanco por la ridícula imaginación exagerada del león de peluche. 'En serio, ¿de dónde sacará eso?' Aunque en el fondo se sentía un poco preocupado por el mero pensamiento de que esa chica tan descarada y testaruda, incluso más que Tatsuki y Rukia se aprovechara de Inoue debido a lo marimacho que es, pero superó su inquietud al saber que probablemente ella no sea ese tipo de persona. Puede que nunca se lleve bien con ella, pero tampoco podía permitirse tener malos prejuicios a pesar de su infame leyenda.

"Neh, Ichigo." Llamó de nuevo Kon dejando sus pensamientos a un lado y fijándose ahora en el peli naranja. Dicho adolescente le prestó atención.

"¿No vas a ir por si acaso?"

Ichigo solo ladeó un poco la cabeza sin decir nada, pero su mente estaba reflexionando sobre ello. Aunque no lo admitiera, el ex Sustituto estaba un poco preocupado por dejar a tanto Inoue como a Saber solas. No por qué que de repente apareciera un secuestrador o un violador. Ichigo se compadecería por el pobre delincuente si estuviera que pasar por encima de la rubia marimacho ya que esta última lo hubiera matado sin dudarlo, y las cosas se complicaría aún más si las 2 acabaran en la cárcel por homicidio a pesar de ser solo por defensa propia.

Otra cosa que le preocupaba era por si en vez de un delincuente, se cruzaran con un Master enemigo y su Servant. Una de las posibilidades podría ser el de Lancer, ese profesor de mierda que amenazó a Waver en la otra noche, el de Archer, bueno no creía que se preocuparía tanto teniendo en cuenta si su Master fuera alguien 'honorable' o 'caballeroso' tal como lo vio en la iglesia. Pero lo que más le preocupaba es que fuera el Master de Berserker cuya identidad no conocía, aunque podría ser alguien lo suficientemente demente para invocar a un monstruo así y de repente vaya a atacarlas.

Realmente no quería que eso sucediera, aunque no creía que vaya a suceder en un sitio como este. Según le informaron sobre las reglas fundamentales de esta guerra que restringía la revelación y la existencia de todo lo relacionado con lo 'sobrenatural' incluido la guerra al público, era muy poco probable que un enemigo apareciera y atacara delante de muchos testigos si no querían ser expulsados del ritual o peor, ser cazado hasta tener su cabeza colgado. Con eso, no tenía ninguna preocupación por Inoue y Saber.

"No te preocupes. No creo que esas dos se metan en un lío lejos."


Al margen de los pensamientos optimistas de Ichigo, un poco lejos de él, la situación de Orihime y Mordred parecía estar tomando un giro inesperado.

El ambiente allí aún seguía en silencio y las chicas aún miraban al recién llegado a pocos metros frente a ellas. Orihime solo miraba cautelosa al extraño hombre que tenía un aspecto intimidante vestido con un traje bastante extravagante como si estuviera en halloween. Aparte de eso, su piel canosa al igual que su pelo a juego junto a sus ojos de sapo, todo eso indicaba que esta persona no era humana, además del extraño aura llena de malicia que ella sentía en él. Con todo eso, sólo podía especular sobre la identidad del hombre.

"¿Es ese un Servant?"

"Sí, yo diría de qué se trata de Caster." Respondió Saber identificando inmediatamente la clase de su enemigo.

"¿Caster?" Preguntó Orihime perpleja. Si mal no recordaba, Caster era el Servant que no había aparecido en la otra noche con los otros Servants. También recordó que según las palabras de Urahara, este Servant se especializa en las artes de la hechicería y la magia como un hechicero, y a saber de lo que sería capaz este.

"Oh Jeanne, siempre he anhelado a que llegara este día. Por fin volvemos a estar juntos." Exclamó Caster dramáticamente con un tono lleno de alegría.

Las palabras de Caster solo sirvieron para confundir más a las chicas. ¿De qué estaba hablando?

"¿Conoces a esta persona, Saber-san?" Preguntó Orihime a la rubia para saber si había algún tipo de conexión con este Servant con la de ella.

"Claro que no." Respondió Saber negando cualquier relación con ese saco decrépito. "jamás había visto a este tipo en toda mi vida. Dudo mucho de que sea de Camelot."

Al escuchar esas palabras tan directas, la expresión pálida del Servant de la hechicería se transformó en pura incredulidad y horror.

"¡Oh non! ¿Dices qué has olvidado esta cara?" Preguntó de manera melodramatica mientras se señalaba así mismo.

"Pero ¿qué dices? ¿Yo olvidarme de ti? ¡Te digo que jamás había visto a un tipo tan lamentable como tú!" Exclamó Saber empezando a hartarse del intercambio de palabras con este molestoso anciano.

Caster ya no parecía aguantar más este cruel rechazo que puso sus manos sobre la cabeza para agitarla como si le estuviera doliendo.

"¡Soy yo! ¡Gilles de Rais! Mi única plegaria fue tu resurrección, ¡y he estado toda mi vida esperando a que llegase dicho milagro!"

"¡Oh cállate! Me das ganas de vomitar." Bramó Mordred con fuerza antes de hacer materializar instantáneamente su armadura reemplazando su vestimenta anterior, e hizo aparecer Clarent en su mano derecha lista para la batalla. "No me hagas perder toda la noche escupiendo tonterías sin sentido ahora. O te pones en guardia, o atacaré yo." Dijo el Caballero de la Rebelión con un tono amenazante que no garantizaba ninguna oportunidad.

Por supuesto, no hacía falta ser un antiguo mariscal francés para comprender que ella iba realmente en serio con su amenaza y no dudaría en atacarlo cuanto quisiera.

"¡No, Saber-san!" Avisó Orihime colocando sus manos sobre la hombrera derecha. "No deberías atacar ahora. Aún hay gente cerca."

Aunque no quería admitirlo, tenía razón en que no podía provocar un enfrentamiento directo sin poder elegir un campo de batalla adecuado como en el puerto y lejos de toda presencia de transeúntes, y este no era el lugar indicado. Casi le daba rabia esto.

"Por favor, espera un momento." Gritó Orihime a Caster. "Vosotros dos no deberíais pelear aquí. Yo avisare a Kurosaki-kun y tú debes decirle a tu Master que-

"¡Silencio! ¡No he venido aquí para perder el tiempo en una pelea!" Interrumpió Caster con ira en su voz mientras miraba a la chica peli naranja. "Yo solo vine aquí para reunirme con mi querida doncella y ayudarla a vencer a esa impostora, pero por desgracia parece haber perdido sus recuerdos y se ha vuelto loca."

Luego desplomó su cuerpo de rodillas con las manos tendidas en el suelo como una extraña señal de derrota y se pudo escuchar varios gemidos de él como si estuviera llorando como si fuera una pobre alma torturada. Orihime y Mordred no pudieron evitar mirar a este pobre loco con expresiones mixtas. La primera con extrañeza y pena mientras que la última con total antipatía.

Fue entonces que la mente de Mordred se activó al recordar lo último que dijo.

"Espera, ¿Qué fue lo último que dijiste? ¿Qué quisiste decir con lo de vencer a esa impostora?"

Caster alzó la cabeza del suelo para mirar con lágrimas brotando de los ojos a la rubia. "Pues veras… observe tu batalla en la otra noche luchando contra alguien que se parecía mucho a ti, pero yo sé que aquella no eras tú."

Pensando un poco, solo se le ocurrió una idea a lo que él se refería.

"¿Hablas de mi padre?"

"No sé a lo que te refieres con tu padre, pero para mí solo hay una sola Jeanne y esa eres tú. No sé qué Dios puede ser tan cruel para hacerle esto a mi querida musa y crear una impostora como esa. Estuviste genial luchando contra esa Jeanne falsa, pero no lograste vencerla." Caster luego se levanta hasta ponerse de nuevo en pie.

"Por eso mismo, quiero ayudarte. Quiero aliarme contigo para vencer a esa maldita impostora y-

"¡Y una mierda!" Bramó Mordred de repente, sacudiendo a Orihime y a Caster por su repentino grito. "Escucha, si hay alguien aquí capaz de desafiar a mi padre y vencerlo, ese soy yo, y no necesito la ayuda de un anciano decrépito como tú."

El ambiente entró en un completo silencio como Caster seguía mirando a la chica que se supone que era 'su' Jeanne con total incredulidad.

"Pero, Jeanne-

Sin avisar, el Caballero de la Rebelión dio un gran salto en el aire y levantó su gran espada antes de descender y abalanzarse sobre esa cosa molesta para finalmente bisecarlo y no tener que escuchar sus quejidos de bebé.

"¡Aaaaaah!"

*BOOM*

Mordred estrelló su espada justo en la misma posición donde antes estuvo parado el ex mariscal francés rompiendo parte del pavimento debido a la increíble fuerza sobrehumana del caballero levantando una gran cantidad de escombros y fragmentos. Por suerte ninguno de esos fragmentos cayó sobre Orihime, pero se mantuvo en alerta.

Cuando se asentó el polvo, Saber se sorprendió al ver que su objetivo ya no estaba donde había abalanzado su espada y tampoco veía rastros de su cuerpo.

"Que fuerza más diabólica llevas." Tanto Saber cómo Orihime alzaron sus miradas hacia arriba y vieron a Caster totalmente entero encima de un poste de luz. Él daba una extraña sonrisa orgullosa en su rostro. "Tal como se esperaba de ti, eres una guerrera formidable que aniquilaría a cualquier ejército."

Sin embargo, la rubia no estuvo para los elogios de su enemigo y solo lo miraba con rabia y molestia por haber evitado el ataque de su espada con facilidad.

"¡Baja de allí ahora mismo, cobarde!" Bramó el caballero al brujo. "Enfréntame y muere como un guerrero."

Caster solo la miró ahora con total indiferencia antes de hablar.

"Me temo que aún no estoy listo para morir."

Saber gruñó sorprendida. ¿Iba a abandonar el campo de batalla, así como así por las buenas? ¿Qué clase de guerrero haría eso?

"Ya lo entiendo. Como solo eres alguien a quien le gusta juguetear con magia y esas cosas, te da miedo enfrentarte a mi directamente." Reprendió Saber con burla, sin embargo, Caster no se dejó llevar por ello mientras seguía observándola con una expresión apática.

"Si se dan drásticas medidas, deberé prepararme." Dijo en voz baja antes de enfocar más su mirada en ella. "Te lo juro, Jeanne. Te liberaré tu alma de la maldición de Dios y con tu fuerza destruiremos a esa impostora."

Y con eso, el cuerpo de Caster se desvaneció de la misma forma en que había aparecido, dejando a las 2 chicas solas.

"Tch, cobarde." Gruñó Saber con disgusto. "Esto no va a quedar así."

Con eso dicho, ella hizo desvanecer instantáneamente su armadura y su espada volviendo a su vestimenta formal.

Entretanto Orihime solo pudo suspirar aliviada al ver que el Servant enemigo se haya retirado por el momento y no vaya a producirse otra batalla como el de la otra noche. A pesar de estar a acostumbrada a presenciar peleas de nivel sobrenatural, eso no significaba que fuera aficionada a ello. Todavía recordaba cómo terminó y lo último que quería ver fue a Ichigo medio muerto otra vez.

"Mierda, y pensar que al final tomaría la cabeza de ese bastardo." Gruñó Saber cuándo se les fue de las manos su oportunidad de hacer su primer asesinato a uno de sus oponentes en esta guerra. Ella estaba caminando de manera malhumorada hacia Orihime.

"Pues yo creo que tuvimos suerte de que esto no haya terminado en una pelea, ya que no quisiera saber lo que hubiera pasado si alguien hubiera quedado involucrado." Dijo Orihime de manera optimista.

"Sí, sí, lo que tu digas." Respondió la rubia sarcásticamente mientras pasaba de lado de la otra chica. "Ahora vámonos de aquí, que ya he perdido bastante tiempo."

Orihime ladeó la cabeza hacia atrás para ver al caballero rubio alejarse con las manos sobre la nuca, y apenas se sorprendió por su falta de preocupación por los transeúntes, pero no creía que ella fuera tan mala en realidad. Era su forma de ser después de todo.

Dejando a un lado esos pensamientos, Orihime se apresuró a seguir a Mordred por detrás dejando este lugar para reunirse con Ichigo y los demás y explicarle lo ocurrido.

Una vez que las 2 chicas se hubieran marchado, ninguno se había percatado de que estaban siendo observados por 2 sombras misteriosas ocultas.

"Seguir al Master de la segunda Saber nos ha dejado caer un fruto inesperado." Comentó una de las figuras, que, aunque no lo mostraba debido a la máscara blanca con forma de calavera que ocultaba su rostro, estaba sonriendo. "Hemos encontrado a Caster también."

"Por supuesto, le seguiremos." Dijo su compañero. Así, los remanentes del Assassin, Hassan-i-Sabbah de los Cien Rostros, se pusieron en marcha para rastrear al Servant de la brujería.


Golden Koi

"Esos 4 están tardando demasiado." Dijo Uryū con algo de preocupación mientras observaba por la ventana la vista nocturna panorámica de Fuyuki desde la habitación del Golden Koi. Habían pasado pocas horas desde que ellos hubieran salido para hacer un último recado, y no había tenido noticias de ellos desde entonces. Casi empezó a temer por lo que les hubiera pasado.

"Me pregunto si les abrán pasado algo." Dijo Urahara detrás del Quincy con un aire serio.

Eso era lo que Ishida temía realmente. Incluso después de la conclusión de la primera batalla hace poco, aún le preocupa la posibilidad de que uno de los Servants hubiera ido a la carga. Las únicas amenazas potenciales fueron sin duda Archer y Berserker, pero también estaba aquel extraño hombre de negro que estaba oculto en uno de los cargamentos de carga apuntando con un rifle francotirador hacia Kurosaki, y no había ninguna duda de que pudiera haberlo disparado si Urahara no hubiera intervenido a tiempo.

Aquel hombre que suponía ser un Master, parecía ser algún tipo de mercenario bien entrenado por lo que pudo ver al portar aquellas armas y estaba especializado en combates a largas distancias. Resulta muy extraño que un mago portará unas armas tan convencionales y se preguntó si realmente era un mago, y si no, ¿por qué llevaba esos Sellos de Comandos? Bueno, tal vez los obtuvo de alguna manera similar a Kurosaki.

De cualquier forma, este tipo era realmente peligroso si volviera a apuntar su arma hacia Kurosaki o a ese chico Waver desde un lugar escondido, y se preguntó si para proteger a esos 2 Masters indefensos de un ataque a traición, no tendrían más remedio que matarlo. El Quincy entendía perfectamente que esto era una guerra, y como tal no había remordimientos, dudas y escrúpulos de que un soldado matará a su oponente al azar e incluso usando cualquier método rastrero. Tal como le había dicho Urahara a él, incluso si no era realmente necesario liquidar a los Masters, no significaba que estaba prohibido hacerlo puesto que incluso un Master sin Servant podría resultar una amenaza. Como tal, no habría nadie que se salvará de una bala en los sesos ya que es como un juego de la supervivencia.

Cuando Ishida quería dar su opinión a Urahara sobre el destino del hombre, sorprendentemente el tendero dio una respuesta rápida y sencilla como "No es necesario matarlo." Aquello dejó completamente desconcertado a Ishida al escuchar el modo tan preciso y sin problemas del tono que utilizo Urahara para dar su respuesta definitiva como si no tuviera en cuenta que este hombre estuvo a punto de asesinar a ya sea Kurosaki o a Waver con un rifle, y el tendedero decidió perdonarlo. Justo cuando Ishida iba a preguntar sobre sus acciones, no obtuvo respuestas cuando el tendedero le instó a que presenciará la batalla y así lo hizo. El curso de la batalla había pasado bastante entretenido que había olvidado su pregunta anterior al presenciar las habilidades de cada Servant que veía y el peligro que representaba.

Aun así, no olvidaba que ese humano o mago también representaba un grave peligro. Incluso ahora, el Quincy todavía se preguntaba porque el Shinigami rubio decidió perdonarlo si hasta él sabía también que era una amenaza para su ex aprendiz, pero seguramente habrá una razón tras esto. De hecho, aún había tantas cosas que el joven Quincy desconocía sobre el excéntrico excapitán y de seguro que debía haber una buena razón.

De repente, su línea de pensamientos fue interrumpida cuando escuchó el ruido de la puerta al abrirse, y el Quincy volteó la cabeza hacia un lado para ver para su sorpresa a Ichigo acompañado por Orihime y Saber.

"Kurosaki. Inoue-san." Dijo el Quincy acercándose con alivio al ver a sus amigos a salvo.

"Hola, Ishida-kun." Saludó Inoue con una sonrisa.

"¿Por qué habéis tardado tanto? ¿Sabéis la hora que es?" Regañó Ishida a los 2 fijándose a Kurosaki. Este último frunció el ceño molesto por la acusación.

"Cállate, fueron Inoue y Saber quiénes decidieron ir de compras, no yo."

"Perdona, Master, pero fuiste tú quien me ordeno a que la acompañara a hacer sus compras. No quería ir en primer lugar." Replicó Saber molesta por la implicación que le dio Ichigo.

Ichigo frunció un poco más el labio, y antes de que el adolescente soltara cualquier cosa desagradable, inmediatamente Kisuke intervino rápidamente.

"Mā, mā, lo importante es que habéis salido de una sola pieza y no os habéis topado con un Servant, ¿verdad?"

"Yo no diría eso." Habló de repente Ichigo poniendo una expresión seria en su cara. La seriedad de su voz y lo que dijo captaron más la atención del Quincy con gafas y el tendero rubio. Luego fijaron su atención en Orihime quien también parecía estar más o menos apática. Ver a la dulce y sonriente chica burbujeante de esa forma era un poco raro, a no ser que algo malo haya ocurrido.

"¿Paso algo allí?" Preguntó Urahara tras un instante de silencio.

No necesito esperar más tiempo para averiguarlo cuando Orihime les rebelo a los chicos lo que ocurrió después de terminar sus compras con Mordred y su encuentro con el Servant que aún no habían visto.

"Ya veo, así que vieron a Caster, el Servant de la hechicería, ¿no es así?" Empezó Urahara sentado en una silla frente a una mesa redonda y los adolescentes también.

"Hai." Asintió Orihime en respuesta.

El ambiente de la habitación se volvió bastante silenciosa como todos reflexionaron sobre lo ocurrido y Ichigo y Uryū miraron con gran seriedad a la chica.

"¿Es cierto que su Master no estaba con él?" Preguntó Uryū con curiosidad.

"No, dijo que andaba solo. Yo creo que Caster es europeo ya que tenía un acento inglés, alemán o tal vez francés. No me acuerdo." Dijo ella como trataba torpemente averiguar su idioma.

"Bueno, ¿y ha dicho su nombre?"

"Si, dijo que se llamaba… etto… ¿Cómo se llamaba?" De nuevo la chica estuvo en conflicto con su mente al tratar inútilmente recordar el nombre del Servant enemigo que era de vital importante para que el resto lo supieran. Saber ladeó los ojos con aburrimiento al ver el intento inútil de la otra chica de tratar de recordar algo sencillo, y decidió intervenir para no perder más el tiempo.

"Su nombre es Gilles de Rais, un noble y militar francés que participó en un evento conocido como la Guerra de los 100 años, y que más tarde se convirtió en un loco psicópata que se dedicaba a secuestrar y violar mujeres y niños hasta que fue ejecutado por sus fechorías." Respondió Mordred como sacó la información de la identidad de Caster a través del enlace del Trono de los Héroes.

Todos estaban en silencio mientras absorbían la recién información repentinamente compartida por Saber.

"Gilles de Rais, ¿eh?" Dijo Kisuke mientras memorizaba el nombre.

"Voy a buscarlo aquí." Dijo Uryū mientras sacaba su móvil del bolsillo y trató de buscar información de dicho hombre en Google.

"Espera un momento, Ishida-san." Interrumpió Urahara de repente haciendo que Uryū se detuviera y luego mirara al tendedero.

"¿Qué pasa?"

El ex capitán no dijo nada por un momento antes de fijarse en Ichigo. "Será mejor que probemos que Kurosaki-san intenté leer la información sobre Caster."

Los adolescentes miraron al comerciante sin entender sus palabras, especialmente Ichigo. "¿De qué estás hablando?"

Urahara se ajustó un poco el sombrero antes de contestar. "Como os dije en la otra noche, los Masters también tienen la habilidad de descubrir las identidades y las habilidades de los Servants enemigos debido al enlace con el Trono de los Héroes." Explicó el comerciante. "Tal como lo hizo Saber-san hace unos momentos, ella pudo saber buena parte de la historia de dicho Servant, y tu podrás hacer lo mismo."

Sin embargo, a pesar de este conocimiento, el propio Ichigo tenía serias dudas de hacer lo mismo que hizo su Servant. "Espera un minuto, ¿de verdad esperas que yo pueda saber más de ese tipo de manera telepática?" Preguntó con incertidumbre sobre tener habilidades de percepción.

"Pues claro. Tus Sellos de Comando también son como una llave para acceder a los archivos de información del Trono de los Héroes y poder leer la información de cada héroe registrado en ella." Habló Urahara con seguridad. "Lo único que tienes que hacer es registrar el nombre de dicho Espíritu Heroico en tu mente y usa tu intuición para acceder a ella e identificarlo instantáneamente."

Ichigo solo podía fruncir el ceño ante lo complicado que sonaba eso y todavía se mostraba un poco escéptico de que pudiera lograr algo que nunca había hecho en su vida. La verdad no sabía cómo lo haría Waver siendo un mago de tercera clase, pero seguramente lo haría penosamente cuando no pudo identificar a Berserker cuando este último apareció por primera vez. No sabía si era realmente vital que un Master aprendiera a identificar al Servant enemigo de manera instantánea con solo conocer su nombre mediante un enlace con ese Trono de los Héroes, pero teniendo en cuenta que todos parecían ser buenos profesionales, sobre todo Tokiomi.

"Venga, inténtalo al menos." Animó el comerciante con una sonrisa de convicción.

Aun así, esto no le ayudaba un poco con su problema de hacerlo. No sabía cómo acceder a esos archivos incluso teniendo sus propios sellos. Esto se veía bastante similar a cuanto intentó moldear su reiryoku en el Reishūkaku varias veces en la casa de Kūkaku Shiba, y casi todos resultaron en un humillante fracaso. Solo fue gracias cuyo primo (que en aquel momento no sabía hasta más tarde) le había dado un pequeño consejo sobre como moldear su Reiryoku de manera correcta, y tras otros intentos infructuosos lo había logrado con mucho éxito.

No sabría decir si el método de acceder a ese enlace con el Trono de los Héroes era similar a como lo hizo con el Reishūkaku, pero tal vez valdría la pena intentarlo. Quien sabe, a lo mejor ganaría algo de respecto del caballero marimacho.

Con eso decidido, Ichigo decidió hacer su único intento. Cerrando los ojos, vació su mente de todo pensamiento mientras solo registraba el nombre de Caster; Gilles de Rais y lo repetía una y otra vez.

Gilles de Rais.

Gilles de Rais.

Gilles de Rais.

Gilles de Rais.

Se repitió el nombre incontable veces en su mente a la vez que recordaba algo sobre lo poco que sabía de parte de Saber, hasta que llegó a algo. Notando un extraño cosquilleo en la mente, el octavo Master vio algo fluir hacia su interior y su cerebro se llenó de información no escuchada verbalmente ni por escrito... sino que lo hizo de una manera de la que no podía entender. Después de un pequeño lapso de tiempo, Ichigo abrió los ojos con toda la información reunida en su cerebro.

"¿Y bien? ¿Qué vistes?" Urahara preguntó deseando saber si su ex aprendiz logró acceder al Trono de los Héroes. Las demás miradas también estaban puestas en el Master elegido para saber si lo logró. Este último no tardó en soltarlo.

"Su nombre es Gilles de Montmorency-Laval, barón de Rais y nacido alrededor de 1405 en Champtocé-sur-Loire. Se unió al ejército francés desde muy joven en las décadas finales de la Guerra de los 100 años contra Inglaterra y se había convertido en un reconocido mariscal de campo, y también era un hombre devoto a Jeanne d'Arc, pero cuando ella murió, se volvió loco y abandonó el ejército para unirse a una secta satánica y dedicarse al secuestro de mujeres y abusar sexualmente a niños. Por ello lo capturaron y lo ahorcaron en el 26 de octubre de 1440."

Después de que terminara de hablar, todos (excepto Saber) miraron al pelinaranja como si le hubiera crecido una segunda cabeza, impresionados por el repentino conocimiento que tuvo él sobre ese hombre así de manera instantánea. No hacía falta decir que Ichigo se estaba poniendo un poco incomodo al ver tantas miradas posadas en él.

Después de un momento, Uryū decidió verificar si todo lo que había dicho Kurosaki era cierto buscando la información del hombre en wikipedia. Después de unos momentos, comenzó a dar su respuesta.

"Sí, parece que todo lo que dijo Kurosaki sobre este hombre es cierto." Confirmó Ishida para sorpresa de algunos. Urahara sonrió con anticipación a esto.

"¿Ves? Ahora puedes hacer algo que los Masters pueden hacer." Elogió Urahara por su ex aprendiz. Inoue no pudo evitar sonreír eufórica por la nueva habilidad de Kurosaki que le traería ventaja. En cuanto a Saber, simplemente no cambió de expresión como si no fuera gran cosa.

Ichigo no tuvo mucho que decir sobre esta extraña habilidad de conectarse con el Trono de los Héroes para saber las identidades y las habilidades de los Servants enemigos y usarlas a su favor, salvo que podría ser una buena ventaja en las peleas siguiente. Eso, si hubiera un Servant lo suficientemente idiota para revelar su nombre al adversario tal como lo hizo Rider antes. De momento sabía las identidades de los otros Servants excepto de Archer y Berserker, y por tanto tenía que tener cuidado y estar atento. Solo se conformaría con saber quiénes son la segunda Saber (aunque todavía le cuesta creer), Lancer, Rider y-

"¡Espera un momento!" Exclamó Ichigo repentinamente sorprendido y desconcertado al darse cuenta de la identidad de Caster. Gilles de Rais, un asesino en serie, torturador, violador de mujeres y pederasta. ¡Un sicópata!

"¿Qué ocurre?" Preguntó Inoue preocupado al ver la expresión tensa de Kurosaki.

Ichigo no respondió por un momento antes de volverse hacia Urahara. "¿No se suponía que los Espíritus Heroicos eran gente que salvaban las vidas de los demás?" Preguntó con incredulidad mientras recordaba lo que el tendero le explicó sobre los Espíritus Heroicos. "¿Qué tiene de heroico ese loco?"

Los demás absorbieron lo que acababa de decir Ichigo sobre Caster y algunos asintieron con compresión a lo que quiso decir. Se suponía que los Espíritus Heroicos era alguien en el pasado que hizo grandes hazañas memorables como salvar a su gente o país de cualquier amenaza y por eso fueron recordados tras la muerte como grandes héroes e inspiración para la siguiente generación futura. Desde luego hacer actos tan despreciables y mezquinos como la violación no era algo para ser memorable. Bueno sí, pero no como un héroe, sino como un villano. Un gran villano.

"Lo cierto es que tienes razón." Dijo Urahara asintiendo de acuerdo. "Dudo mucho que ese Gilles merezca ser reconocido como un Espíritu Heroico debido a su infame reputación, pero según Saber-san y tú, él era antes un guerrero que combatió contra los enemigos de su país."

"Si." Dijo Ishida antes de proseguir con la historia. "Por lo visto en aquel momento, Francia estaba en guerra con Inglaterra debido a una disputa sobre quién debería ser el Rey de Francia. El Rey de Inglaterra de aquel tiempo quiso ser rey de aquel país, pero los franceses se negaron a ser gobernados por un rey de un país extranjero, y así comenzó la guerra lo cual duró 100 años.

Casi 100 años después, las tropas inglesas habían conquistado más de la mitad del norte de Francia y todo el país entró en caos hasta que una joven campesina de unos 18 años de edad llamada Jeanne d'Ark quién dicen que fue enviada por Dios para encabezar al ejército francés para liberar Francia de los invasores ingleses, había logrado liberar varias ciudades antes de ser abandonada y traicionada a los ingleses quien la habían capturado y hecho prisionera hasta que la ejecutaron quemándola en una pila."

Uryū guardó un poco de silencio mientras dejo que la información se asentará en sus 2 amigos.

"Es horrible. ¿Por qué los franceses abandonaron a esa Jeanne-san?" Preguntó Orihime entristecida sobre el horrible destino de la Santa francesa.

"La verdad es que no estoy muy seguro, pero creo a que se debía a la gran popularidad que tenía ella que amenazaría la reputación de los grandes jefes franceses de la época. Jeanne era muy venerada en Francia como una salvadora y una santa, y entre los que estaban más devotos a ella eran Guilles de Rais quien era un fanático de ella, y tras la muerte de Jeanne, Guilles cayó en la locura y por eso se convirtió en aquel loco psicópata."

El silencio reinó una vez más en la habitación como todos absorbían el último plano de información. Fue entonces que Orihime se acordó de algo importante.

"¡Ahora me acuerdo!" Exclamó ella repentinamente, llamando la atención de los demás.

"¿Qué pasa?" Preguntó Ichigo sorprendido por su reacción.

"Justo cuando Caster había aparecido, él había llamado a Saber-san Jeanne."

Todos quedaron sorprendidos por la revelación de la chica peli naranja.

"¿Estas seguras de eso?" Preguntó Urahara un poco desconcertado.

"Si, él había llamado a Saber-san 'Jeanne' como si él pensará que ella era la Santa francesa." Respondió Orihime como dirigía su mirada hacia la rubia, esta última frunció el ceño al ver cómo la estaba comparando con la Santa francesa.

Todos guardaron silencio mientras reflexionaban sobre esta nueva revelación y luego fijaron su atención en Mordred. Se preguntaban por qué alguien tan cercano a la Santa de Orleans pudiera haber confundido a la rubia con Jeanne, si la penúltima no parecía ser tan creyente además de ser tan bravucona y testaruda además de su infame leyenda. Era bastante raro escuchar eso y tratar de comparar una santa devota con el infame Caballero de la Rebelión.

Decir que el caballero rojo se estaba incomodando por las tontas miradas expectantes que la estaban dando se hizo evidente cuando ella empezó a hartarse.

"Ya está bien, ¡dejad de mirarme de esa forma!" Protestó Saber con enojo e hizo que los mirones dejarán de mirarla. "¿A mí que me importa si ese bastardo me haya confundido con alguien que él conocía? Juro que la próxima vez que me lo encuentre lo mataré."

Nadie quiso comentar algo al respecto al ver fuego de determinación en sus ojos. Se ve que su encuentro con Caster no fue nada agradable o quizás sea porque quería rectificar su derrota anterior con los otros Servants. Sea cual sea, estaba bastante decidida.

"Bueno, de cualquier manera, si de verdad confundió a Saber-san con esa tal Jeanne, lo más probable es que vuelva a por ella, ¿no es cierto?" Preguntó Urahara.

"Eso fue lo que dijo él cuando se marchó." Dijo Orihime al recordar las últimas palabras del Servant de la brujería antes de desvanecerse. "Dijo que esta vez volvería cuando estuviera bien preparado."

Todos (excepto Mordred) se tomaron en serio la advertencia y sabían exactamente lo que eso significaba.

"Bueno, ¿y qué hacemos?" Preguntó Ichigo tras un pequeño breve silencio viendo que la situación no era nada favorable si es cierto que viene a atacarlos un Servant.

"¿No es obvio?" Preguntó Saber de repente, quien no parecía estar preocupada. "Le esperaré y juro que esta vez le machacare."

"Supongo que hasta ahí estamos de acuerdo en que Saber-san tenga ventaja contra Caster debido a que ella tiene resistencia anti-magia y sus ataques son apenas efectivos en su cuerpo." Argumentó Urahara al ver el hecho de que el caballero rojo podía tener la ventaja. "Pero aun así no deja el hecho de que nos enfrentamos a un enemigo cuyas habilidades aún no hemos visto y eso me preocupa ya que por lo que leí en el libro, no es un enemigo al que debamos subestimar."

Ignorando el resoplido sarcástico de la rubia, el tendedero continuó. "Sea donde sea el terreno por donde vayas a luchar, estoy seguro de que hará cualquier cosa para ganar ventaja."

"¿Y qué hacemos?" Preguntó Ishida viendo lo difícil que es esto.

Urahara se tomó un momento para empezar. "Bueno, todavía no sé gran cosa, pero podríamos dejar que Saber-san atacará a Caster de frente."

"Eso mismo pienso yo." Respondió la rubia.

"Pero aun así me preocupa un poco sus habilidades además de que aún no hemos presenciado su Noble Phantasm."

"¿Y si le pedimos ayuda a ellos?" Preguntó Orihime de repente. "¿Y si le pedimos a Waver-kun y Rider-san que nos ayude?"

"¿Te refieres a esos dos?" Preguntó Ichigo en referencia a sus aliados temporales.

"Si, podemos pedirles ayuda nuevamente."

"Me parece una buena idea." Urahara estuvo de acuerdo con la idea.

"Pero ¿qué dices? Ni hablar." Protestó Saber totalmente en contra. Todos vieron cómo Saber ponía una expresión agria y malhumorada. "No necesitamos a esos patanes para que me ayuden a vencer a ese bastardo. Puedo yo solo."

"Sí, supongamos que puedes vencer a Caster pero ten en cuenta de que aún no sabemos demasiado sobre él, además de donde se oculta él y su Master." Argumentó Kisuke de manera razonable.

"Es verdad, puede que ellos sepan algo al respecto." Dijo Ishida estando de acuerdo. Él miró a Kurosaki. "¿Tú qué opinas, Kurosaki?"

Ichigo se lo pensó por un momento sobre sus opciones. Si bien, todavía no había visto a Caster en acción e incluso la información que encontró en el Trono y de Saber no servían de mucho ya que no le vieron luchar. Según que lo que le contó el tendedero, Caster es considerado como una de las clases de Servants más débiles, o eso dijo, por lo que en teoría Saber era capaz de vencerlo, pero una vez más, todavía no sabía que tipos de trucos podía utilizar él.

El otro problema sería su Master quien aún no conocía y que tipo de trucos puede realizar. Sin embargo, lo que más le preocupaba fue el hecho de que podría estar aliado con otra pareja de Master-Servant como ellos, y una de sus posibilidades aliados podría ser aquel Archer dorado o ese Berserker negro que casi lo mata. Realmente no quisiera lidiar con eso de nuevo, por lo que tomó su decisión.

"Creo que tienes razón. Vamos con ellos." Respondió con resolución.

"¿¡Haaaa!?" Gritó Saber con incredulidad en una sorpresa desagradable. No podía creer lo que había escuchado. "¿Hablas en serio? ¿Vamos a juntarnos de nuevo con esos patanes?"

"No tenemos más opción." Respondió Ichigo.

"¡Me niego hacerlo!" Gritó Saber dejando en claro su opinión de aliarse nuevamente. "¿Es que acaso no recuerdas lo que sucedió cuando lo hicimos? ¿No recuerdas lo que ese Rey de los Conquistadores dijo la verdadera razón de nuestra alianza?"

"Si, yo también lo recuerdo y tampoco puedo evitar estar cabreado por ello." Espetó Ichigo en respuesta. "Pero solo vamos a luchar con ellos temporalmente y después podrás hacer lo que quieras, ¿de acuerdo?"

Sin embargo, Saber apretó los dientes con resignación ante la idea de subordinarse con un rey extranjero. "¿Me estás exigiendo que me rebaje a ese maldito bárbaro?"

Ichigo soltó un pequeño suspiro.

"No vamos a subordinarnos a él." Regañó como si le estuviera regañando a una niña malcriada. "Mira, entiendo bien cómo te sientes respecto a eso, pero creo que fue necesario hacerlo." Habló Ichigo con firmeza.

Saber solo resopló en respuesta. "Hmph! Pensé que te había dicho que no necesitamos a nadie para ayudarnos ya que soy el Servant que se necesita para ganar esta guerra."

Ichigo puso los ojos en blanco. "Ya, y menudo comienzo cuando fuiste pateada por un bate de béisbol gigante."

Esto hizo que la rubia gruñera rabiosa al saber a lo que se refería. "¿Qué has dicho?" Preguntó ella enojada cuando agarró una parte de la camisa de Ichigo y lo arrastró hacia su cara. Orihime y Uryū casi se levantaron en caso de que hubiera una agresión, pero una mano levantada del tendedero les impidió hacer algo.

Entretanto, Mordred aún fulminaba su mirada hacia su Master. "Pensé que te había dejado bien claro de que a partir de hoy harías lo que yo te diga. Puede que seas mi Master, pero yo sigo siendo superior a ti, estoy por encima de ti, además de que he comprobado de que eres inútil a la hora de tomar tus propias decisiones y dejas que otros lo hagan por ti como cuando tu amigo te dijo que te unieras con esos imbéciles sin pensarlo, ¿recuerdas?"

Ichigo no quiso discutir esa última parte. Si bien era cierto que había aceptado la alianza con Rider tomando el consejo del Quincy pensando que les sería beneficioso para sacar ventaja, y esto había funcionado bien por un momento hasta que había descubierto la verdad de su 'alianza' cuando el Rey corpulento había revelado que se habían convertido en sus subordinados para su ejército.

"Tal vez tengas razón en eso." Empezó firmemente. "Puede que para ti yo solo sea un Master incompetente, un idiota que hace cosas imprudentes, pero así es como soy y no significa que sea completamente inútil. Escucha, haré todo lo posible para ayudarte si es lo que quieres para ganar, además de que te recuerdo de que no eres la única en intentar conseguir ese Santo Grial solo para ti. No voy a pedirte que me respetes o que no me faltes al respecto. Puede que tu seas superior a mí y no voy a discutirlo, pero aun así yo sigo siendo tu Master, y mientras siga poseyendo mis sellos en mi mano tú también harás lo que yo te diga si no quieres que utilice un hechizo para obligarte. ¿Te quedó claro o no?"

Así la habitación quedó en un constante silencio por las poderosas palabras de convicción del chico peli naranja llenas de autoridad, pero algunos notaron que se pasó de la línea cuando mencionó que utilizaría uno de sus sellos para dar una orden. ¿En serio? ¿De verdad va a lanzar su primer hechizo a pesar de que se le aconsejará no utilizarlos a no ser que sea una emergencia?

Y más aún…

¿Cómo se tomaría esto la rubia?

Todo el mundo contuvo el aliento mientras seguían observando a la pareja Master-Servant para ver la reacción de esta última.

Tal como era de esperar, Saber solo mostró a su Master una peligrosa cara asesina llena de rabia por lo que dijo. En cambio, Ichigo mantuvo la compostura con una cara tan dura como la piedra sin inmutarse por el ambiente homicida. Todos notaron el peligro que emanaba en la pareja y se prepararon para intervenir hasta que escucharon un 'Tch' procedente de la rubia.

"Muy bien."

Todos se encogieron confusos mientras observaban como la expresión de la rubia disminuyó considerablemente pero aún conservaba su habitual ceño fruncido.

"Si eso es lo que realmente piensas, entonces no te detendré." Respondió ella decidiendo hacer lo que quería hacer su Master. "Solo espero que no te equivoques esta vez, porque de lo contrario estaremos bien jodidos."

Sin decir nada más, Saber se bajó de su asiento y se dirigió hacia la salida de la habitación.

"¿A dónde vas?" Preguntó Ichigo viendo cómo su Servant se alejaba hacia la salida. Ella no se detuvo mientras hablaba.

"Voy a dar un pequeño paseo. No iré demasiado lejos." Fue todo lo que ella respondió mientras salía al exterior.

Una vez que ella se hubiera ido, la habitación con sus ocupantes restantes se quedó en silencio por un momento antes de que Uryū lo rompiera.

"Ano, ¿no crees que te has pasado con ella?" Preguntó suavemente. Ichigo volteó para mirarlo sin entender lo que decía.

"Entiendo que tenías que mantener a Saber bajo control, pero no creo que fuera necesario amenazarla utilizando un hechizo de Comando y-

"Yo creo que Kurosaki-san hizo bien." Habló de repente Urahara.

"¿Eh?"

"Veréis, la relación entre un Master y su Servant son a veces complicados y delicados ya que sus respectivos puntos de vista no coinciden entre sí y también tienen su propia opinión al respecto. Tal como dijo Saber-san, ella es la más fuerte y si ve que su Master sea inexperto y que tenga poca fuerza de voluntad, el Servant se convertirá en el dominante y sería como el cabecilla del grupo, pero, aun así, el Master siempre es el quien tiene la última palabra y si ve que su Servant se muestra rebelde, utilizará uno de sus sellos para poner orden."

Los adolescentes absorbieron la información del tendedero y la que se lo tomó más en serio fue el Master elegido al escuchar que su posición parecía ser más complicado de lo que había pensado. En realidad, no esperaba llevarse bien con la agresiva rubia, al menos con el tiempo. Sin embargo, tenía que mantenerse firme y decidido para no ser rebajado ante ella.

"No os preocupéis, ya veréis que, con el tiempo, Kurosaki-san y Saber-san aprenderán a llevarse bien y ser una buena pareja Master-Servant." Dijo Urahara con una sonrisa positiva en el rostro. Aun así, tanto los adolescentes y el Alma Modificada dudaron eso.

"Bueno, dejando eso a un lado, será mejor que planifiquemos nuestro plan para la próxima batalla."

Ishida asiente estando de acuerdo. "Si, estoy de acuerdo. ¿Qué podemos hacer?"

"Bueno, de momento podríamos hacer tal cómo Inoue-san mencionó, unir fuerzas de nuevo con el Master de Rider que sería mejor."

"Siempre que no nos deje encima del puente y nos haga un viaje por el aire como una montaña rusa." Dijo Ichigo recordando desagradablemente como el Servant gigante había dejado a Ichigo, Kon y Waver en lo alto del Puente Fuyuki estando expuestos al frío, fuertes vientos y el vértigo. Sin olvidar también el viaje por el aire que casi le causó náuseas.

"Si, estoy de acuerdo." Dijo Kon estando de acuerdo recordando también aquello.

"Bueno, no creo que esta vez vaya a ser eso." Dijo Urahara. "De cualquier forma, iremos a visitarlos mañana después de transferirnos a nuestro nuevo hotel. Además, todavía no los he conocido aún, me pregunto cómo nos llevaremos."

Ichigo solo puso los ojos en blanco. 'Tal vez te caiga bien ese gigante.' Pensó con sarcasmo.

"Muy bien, esperemos que todos estemos preparados para despertarnos temprano para ir.


Al día siguiente - Miyama

"Así que esa es la casa de Waver, ¿eh?" Dijo Ichigo al tener a la vista la no del Master que temporalmente en su aliado.

"Más bien es la residencia de sus abuelos por lo que nos contó él." Corrigió Ishida mientras caminaba.

"Qué bonito." Exclamó Inoue fascinada por el aspecto y el ambiente de la casa.

Hasta Ichigo tuvo que estar de acuerdo en eso.

Ya llegando el amanecer, el equipo del octavo Master hicieron los preparativos antes de salir finalmente del hotel Golden Koi para trasladarse a otro. Pidieron un taxi para navegar por la ciudad y cruzaron el río Mion a través de aquel enorme puente rojo, ese puente al que Ichigo y Kon no quisieron decir mucho puesto a que ahí sufrieron el mayor vértigo de sus vidas cuando Rider los habían llevado allí. Una vez cruzado el puente y haber llegado al distrito de Miyama, nuestros protagonistas aprovecharon para observar a su alrededor y contemplar el lugar hasta que llegaron a su nuevo destino; un nuevo hotel con el nombre de 'Kanata ken.'

Una vez llegados allí, lo que hicieron fue alquilar unas habitaciones de la misma manera que la anterior y se equiparon en cada una. Más tarde, decidieron visitar la casa donde residía el Master británico que según parecía no andaba muy lejos y allí podían planificar su siguiente estrategia para la próxima batalla. Gracias a las indicaciones de unos lugareños, no fue difícil encontrar la residencia estando ubicado a las afueras de la ciudad sobre una colina que dominaba el paisaje rural. Para los ojos de nuestros protagonistas, parecía un lugar tranquilo lejos de los escandalosos sonidos de la ciudad, un sitio ideal para el turismo.

Ichigo solo dio gracias de que su vista no le recordara al aspecto hortera de la casa de Kukaku. Le hubiera dado una gran vergüenza haber entrado allí de nuevo.

"Bueno, será mejor que entremos. Quiero conocer a nuestros aliados." Dijo Urahara tan alegremente como siempre mientras se adelantaba. Ichigo no pudo evitar fruncir el ceño por su estado de ánimo.

Una vez cruzado el jardín de la casa, Ishida fue el primero en acercarse cautelosamente a la puerta y luego tocó con un ¡Tock! ¡Tock!

"¿Hola? ¿Hay alguien? ¡Somos nosotros, Waver!" Habló Uryū tan alto para que lo escucharán. Por un momento no hubo respuesta por parte de los residentes de adentro, pero entonces la puerta se abre revelando a un gigante de 2 metros justo de la misma altura de Zaraki Kenpachi. Tenía una musculatura impresionante, piel rojiza, el pelo y la barba pelirroja e iba vestido de guerrero antiguo.

De inmediato supieron de quién se trataba.

"¡Hooh! ¡Pero si sois vosotros, mis aliados!" Exclamó Rider con entusiasmo al volver a ver a sus 'aliados'.

Saber sólo dio una mirada agria hacia el Rey de los Conquistadores.

"Uh, hola, Rider, hemos venido hacia aquí para visitar a tu Master y hacer futuros planes." Dijo Uryū algo nervioso al gigante. "¿Está aquí?"

"Oh por supuesto, esperad un momento." Rider volteó la cabeza hacia atrás, al interior de la casa. "¡Oi, chaval, están aquí el Master de Saber que quiere verte!"

"¿Qué?" Sonó una voz desconcertada en el interior de la casa, y unos momentos después se asomó detrás de Rider el joven Master británico. Nada más asomar su cabeza, se quedó congelado al ver a sus visitas.

"Ohayō, Waver." Saludó Uryū primero con un gesto.

"Ohayō, Waver-kun." Orihime fue la siguiente además con una sonrisa.

El joven británico solo parpadeó de par en par mientras analizaba las caras de cada uno y enseguida las reconoció.

"¿Qué pasa, chaval? ¿No vas a saludar a nuestros aliados?" Preguntó Rider mirando a su joven Master que aún no había abierto la boca y simplemente se quedó mirando como un retrasado. Fue en ese momento en que el británico comenzó a hablar.

"¿Q-qué estáis haciendo aquí?" Preguntó aún desconcertado a todos ellos.

"Perdona si te pillamos en un mal momento, pero es preferible que entremos allí adentro." Dijo Uryū en tono de disculpa. "¿Podemos entrar?"

Waver no sabía que decir al respecto. Fue bastante repentino e inesperado que sus aliados aparecieran aquí sin avisar y pidiéndole que entrara a dentro para hablar. Y si no fuera eso, también hubo una nueva cara con ellos en forma de un hombre de unos 30 y tantos años, el pelo rubio vestido con un extraño traje verde y un extraño sombrero de cubo. Su cerebro le costaba demasiado formular una respuesta.

Afortunadamente, Rider estuvo allí para ayudarlo.

"Vamos, chaval, ¿a qué esperas?" Instó el Servant gigante a su joven Master.

"Uh, bueno, yo…"

Todavía no estaba demasiado seguro de dejarlos entrar adentro y se preguntaba que cuánto tiempo estarán hasta que regresen sus abuelos de su recado. No era costumbre suya en invitar a gente que apenas conocía incluso si son aliados suyos en una guerra que se estaba dando lugar. Pero conociendo como es Rider, no creía que él tuviera algo que objetar al respecto. Con un suspiro de derrota, comprendió que no tenía más remedio.


"Guau, qué lugar tan encantador." Exclamó Orihime maravillada por el ambiente interno de la casa. Los invitados estaban ahora en el comedor.

"¿Tus abuelos viven aquí?" Preguntó Uryū mirando a Waver.

"En realidad no son mis abuelos." Contestó Waver. "Veréis, mientras me preparaba para entrar en la guerra necesitaba establecerme en un lugar sin gastar mi dinero en un hotel y descubrí que una pareja de ancianos clandestina que emigraron de Australia vivía aquí, luego me dirigí a ellos para hipnotizarlos y hacerles creer que soy su nieto, y aquí estoy."

Los invitados absorbieron la información y se quedaron desconcertados por la revelación.

"Espera, ¿qué hiciste que...?" Uryū fue el primero en reaccionar perplejo por lo que hizo el chico. Ichigo y Orihime también tenían las mismas expresiones.

Waver no pudo evitar sentirse incómodo por las expresiones en blanco de sus 'invitados' y decidió corregirse. "No tenía otra opción. Solo lo hago temporalmente hasta que se termine todo esto, y luego les haré volver a la normalidad. Ellos no saben nada de la guerra ya que no son magos y solo piensan que estoy de visita nada más."

El grupo todavía no sabía qué pensar al respecto sobre las intenciones del chico, pero Uryū fue el primero en ponerse comprensivo ya que su situación era exactamente la misma que la suya cuando ingresaron al Golden Koi sin dinero.

"Bueno, siempre que no los involucres en esto, supongo que estará bien." Argumentó Kisuke siendo el siguiente en comprender su situación. El chico asintió antes de preguntar al darse cuenta de la presencia del único adulto del grupo.

"¿Y usted quién es?"

"Oh, cierto, lo había olvidado." Dijo Uryū al recordar que había olvidado que Waver aún no había conocido al tendedero. "Este es el mago que nos habló de la Guerra del Santo Grial y quién nos acompañó, Urahara Kisuke."

"Podéis llamarme Urahara si quieres." Dijo Kisuke mientras se quitaba el sombrero en una reverencia antes de volver a ponérselo. "Así que tú eres un Master, ¿verdad? Ishida-san me contó varias cosas sobre ti y cómo te convertiste en Master. Si te digo la verdad, en mi opinión fue bastante imprudente de tu parte entrar en un conflicto sin conocer casi nada de ello y mucho más si aún eres un completo novato que todavía tiene que aprender."

Waver no pudo evitar fruncir el ceño, pero antes de replicar algo, Rider lo interrumpió.

"Yo también estoy de acuerdo con eso." Habló Rider repentinamente para la gran sorpresa del británico. "El chaval todavía tiene que aprender sobre las cosas grandes de la vida y todo lo que tiene que ofrecer para llegar ser un hombre."

"Pero-

"Bueno, no importa." Habló Kisuke de nuevo. "Estoy seguro de que si sobrevive a esta guerra y experimente lo que un chico de su edad aún no ha visto, tal vez cambie de parecer al presenciar cómo es el mundo y haga examen de conciencia."

"Si, creo que eso es lo que el chaval necesita para saber que el mundo no es del color que él piensa." Comentó Rider estando de acuerdo con el tendedero.

"Oh, ahora que recuerdo." Dijo Kisuke cambiando de tema al recordar más sobre el Servant barbudo. "Me han dicho que tú identidad es nada más y nada menos que el mismísimo Alejandro Magno, ¿verdad?"

"Llámame Iskandar. Por cierto, veo que has oído hablar de mí, ¿no?" Comentó el Rey de los Conquistadores con una sonrisa.

"Pues claro, no hay nadie en el mundo incluso si no es griego o persa que no hayan oído hablar de una de las figuras legendarias más grandes del mundo. De hecho, tenemos suerte de que alguien como usted esté de nuestra parte."

"Pues claro, ¿qué clase de rey sería si no supiera cuidar de unos de mis sirvientes? ¡Jajajaja!"

Tanto Ichigo como Saber no pudieron evitar fruncir el ceño con disgusto por lo que dijo. ¿Sus sirvientes? ¡Y una mierda!

Entretanto Uryū, Orihime, Kon y Waver sólo pudieron mirar esta escena poca surrealista con incomodidad al ver como el tendero intercambiaba palabras con el rey de Macedonia como si fueran viejos amigos. Waver sacudió la cabeza su incredulidad. ¿Qué estaba haciendo su Servant ahora mismo?

Hasta hace un momento estaba criticando su motivación para unirse a la guerra como antes, solo que esta vez le estaba dando la razón al extraño hombre vestido de verde que opinaba lo mismo, ¡y ahora los 2 estaban charlando como si nada, ignorando que él estaba aquí!

Fue entonces que su mente hizo un click al recordar algo muy importante que ocurrió en la otra noche.

"¡Ahora que recuerdo!" Giró vigorosamente la cabeza hacia Ichigo como el principal punto de atención por lo que le ocurrió en el fragor de la batalla. "Recuerdo que Berserker te había golpeado fuertemente y pensé que te habían matado."

El comedor se quedó en silencio como todos recopilaron lo que había dicho el británico y recordaron lo que sucedió.

"Es verdad. Ese loco logró acabar con tu vida, pero parece que los poderes de esa chica logro salvarte reconstruyéndote el cuerpo a su estado original, ¿no es así?" Dijo Rider recordando los eventos de la noche anterior mientras miraba al chico peli naranja y luego a la chica que lo salvó.

"Uh, sí, ya os dije que Inoue-san es una chica muy especial. Ella salvó muchas vidas antes." Dijo Ishida con una sonrisa alabando a Orihime. Dicha chica cogió un pequeño rubor con una sonrisa.

Tanto Waver y Rider solo siguieron mirando a la pareja con expresiones mixtas. Waver solo podía mirar con desconcierto sin entender la verdadera naturaleza de los poderes de la chica. Si bien existe magia capaz de ayudar a las personas y animales que se encuentran casi al borde de la muerte, pero eso de poder resucitar a una persona que ya había muerto era otra cosa.

No creía que se trataba de una nigromante, pero algo más que le llamó la atención con respectos aquellas haditas que podía invocar, algo le decía de que no se trataba de una maga ordinaria.

Rider no compartía la misma opinión que su desconcertado Master, y en cambio solo miraba con curiosidad y admiración como si fuera la reencarnación de la mismísima Atenea. Un momento después, el Rey de los Conquistadores cambió de tema y se volvió hacia Ichigo.

"Chico, ¿puedo preguntarte a que vino con eso?" Preguntó Rider con una expresión indescifrable.

"¿Eh?"

"Escucha, admiro bien tu coraje al intentar salvar a tu Servant del peligro, pero eso no significa que debas arriesgarte imprudentemente atacar al enemigo sin ni un arma. Además, no era necesario que te precipitaras, ya que estaba a punto de realizar mi movimiento de no ser porque te hayas interpuesto en el camino."

Ichigo mantuvo una cara neutral al recordar su propia imprudencia. En realidad, no lamentaba haberlo hecho, ya que estaría dispuesto hacerlo las veces que haría falta si es para evitar que alguien resultara herido o muerto delante de sus ojos. Lo único que lamentaba era dejar preocupados a los demás por esto, y ya no le importaba defenderse así mismo por sus acciones.

"Entiendo lo que quieres decir, ya discutimos esto con Kurosaki cuando despertó." Dijo Ishida de repente como si hubiera salido a la defensa de su compañero. O eso creía Ichigo. "En realidad él es de los que se arriesgan para intentar proteger a otros. Aunque claro, yo tampoco apruebo sus métodos." Terminó el Quincy ajustándose las lentes. Ichigo no pudo evitar fruncir el ceño por lo que dijo.

"De cualquier forma, esta vez mantendremos un ojo encima para vigilarlo mejor."

"Creo que así estará bien, pero mejor prestarle un arma para que pueda defenderse por si acaso." Sugirió Rider.

"Creo que tengo la solución para eso." Dijo de repente Urahara.

Ichigo solo puso los ojos en blanco al pensar de que se trataba de dicha arma. 'Solo espero que no se trate de tu zanpakutō…'

Viendo que ya habían hablado lo suficiente, Uryū decidió cambiar tema para hablarles sobre lo ocurrido en la última noche.

"Ano, perdonad si interrumpo vuestro momento." Empezó Ishida llamando la atención de los 2. "No solo hemos venido aquí para hablar o tomar algo. Hay algo muy importante que necesitáis saber."

Esto captó más la atención del Master de Rider y de este último quienes parecían bastante curiosos por saber de qué se trataba.

Sentándose alrededor de la mesa, Orihime fue la única que les explicó a los 2 su encuentro con Caster y lo que sabía de él. No hacía falta decir que la información dada por la chica fue bastante reveladora e impactante por decir lo menos.

"Ya veo…" Dijo Rider con un tono extrañamente bajo que detonaba seriedad en contraste con su tono alegre y jovial. "Así que esa es la verdadera identidad de Caster, ¿eh?"

Waver solo parecía sorprendido. "¿Gilles de Rais? ¿El asesino en serie de la Francia medieval?"

Puede que no haya escuchado demasiado de historias, pero gracias al enlace con el Trono de los Héroes, pudo identificar la identidad del Servant mencionado y pudo procesar la misma información que Ichigo, y no le gustó demasiado. La sola idea de que un asesino sicópata andará por ahí como Servant le estremecía como si fuera una especie de Jack el destripador, pero sobrenatural, ¡y encima como un Caster!

Sinceramente, ya no quería cruzarse con él.

"¿De verdad te cruzaste con alguien así?" Preguntó el joven británico con incredulidad a Orihime. La sola idea de que una joven chica como ella se cruzará con alguien así en un rincón oscuro en mitad de la noche y viviera para contarlo era como si el mismísimo Jack el Destripador se cruzará con una de sus víctimas y de repente lo dejará escapar.

Cosa que nunca hizo.

"Si, pero como he dicho antes, él solo quería hablar con Saber-san." Respondió la chica gestando con la cabeza hacia la rubia.

"Mmm, así que qué ese Caster confundió a Saber con la Santa francesa, ¿eh?" Comentó Rider de manera expectante mientras miraba a la rubia.

Waver miró a la rubia de la misma manera preguntándose si era cierto que ella fue confundida por la mismísima Jeanne d'Arc. Le costaba demasiado creerlo. ¿Cómo era posible que el infame Caballero de la Rebelión fuera confundida por alguien tan gentil y honorable como la Santa francesa?

"Oye, ¿qué crees que estás mirando?" Los pensamientos del joven británico fueron interrumpidos cuando escuchó la voz gruñona de la rubia, esta última mirándolo oscuramente. No hacía falta decir que el pobre Waver se sentía intimidado por su mirada además de darse cuenta de su tonto descuido.

"¿De verdad me parezco tanto a esa santa?" Preguntó ella con ira en su voz. "Como me sigas mirando así, te arrancaré los ojos."

Saber!" Regañó Ichigo. "¿Qué estás diciendo?"

La rubia se volvió hacia su Master. "¿Qué? ¿Tú también me ves como una jodida santa?"

"Nadie te ve como una santa. Deja de decir tonterías." Reprendió su Master haciendo que la rubia gruñera con rabia por el tono que utilizó.

Antes de que todo se saliera de control y hubiera otra pelea que peligrará la relación entre Master y Servant, Kisuke decidió intervenir.

"Mā, mā, mejor dejamos las discusiones para otro momento." Dijo nerviosamente, haciendo que los 2 se callaran y dejaran de discutir. Una vez conseguido eso, el tendedero miró a los demás con seriedad.

"Hay algo que también me gustaría hablarlo ya que podría estar relacionado con Caster." Habló Urahara captando la atención de los demás y prestando su atención. "Tengo entendido que desde hace 2 meses hubo una serie de asesinatos homicidas en esta ciudad, ¿no es así?"

"Uh, sí. Mis abuelos me advirtieron de que había un asesino en serie suelto por la ciudad que se dedica a asaltar a las casas y asesinar a los residentes dentro. Hasta el día de hoy todavía no han cogido al culpable y su identidad sigue siendo un misterio." Contó Waver con lo que sabía del asunto.

"Es verdad, yo también escuché algo como eso." Dijo Ishida con seriedad. "Dicen que se trata de un maníaco psicópata que practica el Satanismo ya que se ha encontrado en las casas por donde había pasado el dibujo del símbolo de Satanás dibujado con la sangre de sus víctimas."

Todo el comedor se quedó en silencio como todos absorbiera la información y algunos no podían evitar sentirse incómodos ante la idea de que un loco psicópata ande por ahí suelto cometiendo atrocidades sin ser detenido.

Justo igual que…

"Espera, ¿quieres decir que ese asesino es ese Caster?" Preguntó Ichigo de repente que, aunque no estaba del todo seguro, podría estar relacionado.

"Lo dudo mucho. Ya te dije que los asesinatos ocurrieron antes de que empezara el ritual y Caster todavía no había sido invocado." Corrigió Urahara.

Ichigo y los demás casi asintieron decepcionados. Si era cierto que, si esto no tiene nada que ver con Caster, entonces eso significaría que podría haber 2 asesinos diferentes sueltos.

"Espera un momento." Habló de repente Rider, llamando la atención de los demás. Él se volvió hacia el Quincy. "¿Dijiste que ese asesino dibujaba con la sangre de sus víctimas una serie de círculos simbólicos, ¿no?"

"Si, se trata de un pentagrama invertido que es símbolo del satanismo, la brujería y la magia negra." Comenzó a explicar Uryū. "Según he oído, existen algunos grupos o sectas religiosas en el mundo que, en vez de rendir culto a un dios, adoran a las fuerzas del mal, ósea al diablo."

Todo el mundo mantuvo la calma mientras seguían escuchando al Quincy. "Esta gente practican todo tipo de cosas tradicionalmente paganas como brujería y otras cosas, y se cree que los miembros más fanáticos hacen todo tipos de fechorías como torturar o sacrificar personas normalmente vírgenes para complacer al diablo y he oído que incluso trazan con la sangre de sus víctimas círculos con el símbolo del pentagrama invertido tal como lo hace ese asesino en serie. Oh, y según parece, Caster también fue en vida miembro de dicha secta."

"Mmm, entiendo." Tarareó Rider mientras se rascaba la barba y reflexionaba sobre lo que acababa de escuchar del Quincy. Waver sólo miraba a su Servant sin comprender lo que estaba pensando.

"¿Insinúas que es probable que el Master de Caster sea ese asesino en serie del que hablan?" Preguntó Kisuke curioso por saber si sus conclusiones eran ciertas.

"Es posible." Fue todo lo que pudo responder el Rey de los Conquistadores. Todos se quedaron estupefactos por la noticia.

"Espera un momento. ¿Hablas en serio?" Preguntó Waver incrédulo sin poder creer lo que acababa de escuchar. "¿De verdad dices que uno de los Masters es un peligroso criminal?"

"Viéndolo así, podría ser." Dijo Kisuke en respuesta.

"Vaya, esto sí que es algo…" Comentó Kon en voz baja.

"También hay algo que me llama la atención." Dijo el tendero una vez más. "Por lo que estudié en aquel libro, existen 2 maneras para que un mago pueda invocar un Espíritu Heroico como Servant de manera convencional en contraste con el caso de Kurosaki-san. El primero es que el mago aparte de tener los sellos deba dibujar un círculo de invocación con la sangre de ya sea de animal o humano y poner un talismán u objeto que alguna vez perteneció a dicho guerrero en el centro. Una vez hecho los requisitos, el mago realiza el canto de invocación para que aparezca el Espíritu Heroico en el círculo de invocación." Kisuke dirigió su mirada en Waver. "Fue así como invocaste a Rider, ¿no?"

"Uh, sí. Hice exactamente lo que dijiste, dibujar el círculo de invocación con la sangre de unos pollos que robé y luego puse el catalizador de Rider que se trataba de un trozo de tela de una capa que pertenecía al rey Iskandar." Dijo Waver recordando las enseñanzas para invocar a su Servant y el evento de este.

"Bien, estos son los requisitos que se necesitan para que un mago invoque a un Espíritu Heroico del Trono de los Héroes." Explicó Urahara. "Si bien, normalmente se necesitaría un catalizador para poder invocar al Espíritu Heroico deseado, pero hay veces que no se necesita un talismán para ello. En caso de que un mago no tuviera un catalizador para invocar un Espíritu Heroico que tanto desea, todavía puede hacerlo, pero no sería el mismo del que quiere, ya que estaría basado en su propia personalidad."

"¿Qué quieres decir?" Preguntó Ishida sin entender el concepto.

"Digo que el mago que, pese a no tener ningún catalizador, todavía puede invocar un Espíritu Heroico usándose a sí mismo como catalizador y el Servant que aparecería actuaría como un alter ego de su convocador y tenga algo en común con su Master como su personalidad, por ejemplo."

"Es cierto, yo también vi esa información en el libro antes de llegar aquí." Dijo Waver recordando lo que había aprendido.

"Mmm, ciertamente." Asintió Rider pensativamente. "Supongo que tendría sentido que ese asesino en serie invocará a Caster basándose en su personalidad."

"Podría ser." Estuvo de acuerdo Urahara.

"¡Pero espera!" Exclamó Ichigo de repente. "Si lo que decís es cierto, ¿por qué esos tipos están participando en la guerra? ¿Por qué esos tipos de la iglesia permitieron que hagan eso?"

El comedor se quedó en silencio como cada uno reflexionaban sobre sus propios pensamientos sobre lo que estaba pasando y todos coincidieron con el chico peli naranja sobre qué esa pareja tan macabra no debería participar en esto. No podían imaginar qué tipo de fechorías podrían provocar.

"Estoy de acuerdo con lo que dices, Kurosaki-san." Dijo Urahara seriamente. "No estoy seguro cómo pudo ocurrir esto, o como se les permitieron participar, pero tal vez no sean conscientes de esto."

"¿Qué quieres decir? ¿Dices que el legislador de la iglesia no sabe nada de Caster?" Preguntó Uryū curioso.

"Es posible. Todavía no estoy del todo seguro, pero es probable que también aprovechen su ignorancia para hacer lo que quieran."

Esto dejó estupefacto a los escuchantes al oír eso. '¿Con lo que quieran' se refiere a cometer asesinatos y otras atrocidades sin sentido? Menudo problema.

"Ahora estamos apañados." Comentó Kon.

"¡Pero eso no puede ser!" Exclamó Waver de repente. "No pueden hacer eso. Eso sería una violación de las reglas de la Guerra del Grial. No creo que la Asociación y la Santa Iglesia se queden de brazos cruzados por esto."

"Estoy de acuerdo con eso." Dijo Urahara. "Desde luego esto es un muy mal asunto."

"¿Y qué podemos hacer?" Preguntó Orihime preocupada por la situación.

"¿No está claro?" Dijo Saber de repente quien parecía ser la única que no estaba preocupada. "Vamos a dar con ese bastardo y le daremos su merecido." Dijo ella como chocaba su puño con la palma abierta.

"Eso sería una buena idea, pero dejemos que los de la iglesia se encarguen antes." Sugirió Kisuke.

"¿Qué? ¿Y por qué debería dejar que un puñado de esa gente se encarguen de ese bastardo? Yo puedo hacerlo mucho mejor." Se jactó Saber con arrogancia.

"No se trata de eso. Digo que es mejor que las autoridades de la guerra se enteren antes para luego decidir qué hacer." Respondió el tendedero con normalidad, aunque no muchos tenían bastante claro a lo que se refería.

En eso, se aclaró con la garganta.

"De cualquier modo, es mejor que vaya a avisarles." Dijo repentinamente ganando la atención estupefacta de los demás.

"¿Qué vas a qué-

"Tal como seguramente estáis sospechando, aquí pasa algo muy extraño y no parece ir muy bien sobre cómo debería ir el ritual." Respondió Urahara muy seriamente. "No sé en cómo afectará esto de ahora en adelante, pero creo que será mejor que dé con algunas respuestas."

Al ver las caras confusas y preocupadas de los adolescentes, el Shinigami rubio decidió tranquilizarlos con una sonrisa. "No os preocupéis. Solo voy a ir a aquella iglesia para hablar con Kotomine Risei nada más."

"¿Y qué haremos nosotros mientras tanto?" Preguntó Ishida recuperando la compostura.

"Vosotros cuatro os quedaréis en la casa de Waver-san y no salgáis hasta que yo regrese, ¿entendido?"

"¿No quieres que te acompañemos?" Preguntó Ichigo con preocupación en su voz.

"No, será mejor que vaya yo solo, gracias." Y con eso se dirigió hacia la salida y abrió la puerta para salir. "Ja ne."

Una vez que se cerró la puerta dejando a los 3 adolescentes y la Servant rubia en la casa prestada de Waver, estos solo podían permanecer en silencio reflexionando sobre el comportamiento del tendedero y preguntándose qué era lo que le preocupaba tanto sobre este asunto.

Un momento después, Kon decidió preguntar.

"¿Creéis que es buena idea dejarlo solo?"

"Ni idea, pero estoy seguro de que él sabrá lo que hace." Respondió Ichigo mientras miraba seriamente a la puerta por donde salió Urahara.